Trobairitz 10 - 2024 ENE

Mercedes Chimirri
Kuqui Bessone
Anahí Mariluan
Freya Asgard
Andrea V. Luna
Patricia Rey
Alejandra Jonte
Francy de los Ríos
EFG
Antonio Las Heras
AÑO 1. Nº10.
ENERO de 2024
@trobairitmagazine

Contenido
Año 1. Nº10. Enero de 2024
Un texto es un producto cuya suerte
interpretativa debe formar parte de
su propio mecanismo
generativo.
Umberto Eco
Entonces, cada lector es parte
imprescindible en la construcción
de la novela que lee.
Andrea V. Luna
Prof. Andrea V. Luna
@andreavluna
www.andreavlunaescritora.com.ar
Alejandra Jonte
Francy de los Ríos
Mercedes Chimirri
"Midsummer Eve”
Edward Robert Hughes, 1908.
Trobairitzmagazine@gmail.com
IG @trobairitzmagazine
https://sites.google.com/view/
trobairitzmagazine
Maipú 359, EP, Of. 5, CABA
Andrea V. Luna
Dirección Nacional del Derecho de Autor,
Registro de Publicaciones Periódicas,
Legajo Nº: RL-2023-144195051-APN-
DNDA#MJ
Todas las imágenes de esta publicación están tomadas de la Web o las proporcionan los autores, excepto que se indique lo contrario, y pueden estar sujetas a derechos de
autor. Créditos a quien corresponda. Todos los derechos de las imágenes pertenecen a sus respectivos autores.
Todos los textos han sido cedidos por sus respectivos autores para ser publicados en este magazine de manera desinteresada. Cada uno es responsable de sus dichos y de su
obra. Todos los derechos de los textos pertenecen a sus respectivos autores.
Revista digital sin fines de lucro y de distribución gratuita.
Prohibida la reproducción del contenido sin realizar la correspondiente mención bibliográfica.
2

Editorial
Andrea V. Luna
@andreavluna
¿SIN MIEDO AL ÉXITO?
“Mire usted, Sr. 2024”
Algunas cosas no cambian y otras, lo hacen
por demás: es ley de la vida. No hay más que detenernos
un momento, mirar alrededor, dedicarnos
a observar con calma, respirar profundo y con
la mayor serenidad que podamos, eso sí. La humanidad
es evolución constante, incluso cuando
parezca que damos pasos pequeñitos o que nuestra
percepción nos infiera que vamos para atrás. El
horizonte está ahí no para que lleguemos a él, sino
para que disfrutemos el camino. Y es que caminar
es luchar, perseverar, ayudar y dejarse ayudar; elegir,
volver a elegir y seguir eligiendo lo que cada
uno cree que es conveniente para sí mismo y para
otros. Tal, porque no existen las verdades absolutas,
por más que les pese a muchos. Caminar juntos,
eleva todo al infinito.
Cuando nos dimos cuenta de las dificultades
para mostrar nuestro arte, Ale, Francy, Mercedes y
yo notamos que era un asunto tan frecuente como
triste. Ahí se nos ocurrió una publicación que, con
cierta frecuencia, sirviera de dossier de prensa, de
currículum incluso, en la que pudiéramos liberar
algunos relatos para que otros tuvieran la posibilidad
de leernos y darnos a conocer. Pronto nos dimos
cuenta de que podíamos invitar a más gente,
a modo de recordar en sentido homenaje a aquellos
que nos ayudaron a nosotras cuando recién
arrancábamos, y nos pareció una idea bellísima.
En seguida nos encontramos haciendo entrevistas,
sumando columnistas de calidad que también necesitan
hacerse visibles, llegando
a otros países, sumando momentos,
lectores y buenas vibras.
En poco tiempo, los lectores se
dispararon, el asombro por lo
que provocábamos nos llegó
hasta el fondo del alma y anidó
en nuestros corazones asombrados.
Hoy, que superamos las
230 000 visitas a nuestros, hasta
ayer, 9 ejemplares, nos estamos
volviendo locas de felicidad y de
amor recibido. Este ejemplar número
10 es el primero del 2024
y nos llena de profundísima esperanza.
Recibimos, saltando de alegría,
a escritores, investigadores,
artistas, músicos y creativos de
Argentina, Chile, España, India,
México y Venezuela. Entonces,
celebramos primero, y
respiramos después… uno,
dos, tres… treinta y nueve, cuarenta… doscientos
noventa y cinco, doscientos noventa y
seis, doscien… y así, hasta que nos calmamos
y seguimos adelante con el único propósito de
ser un puente entre la oscuridad de la indiferencia
y la avidez de los lectores que se animan
a descubrir que no todos “los mejores”
están en los libros que salen fortunas.
3

Entonces, del terror a la
calma, de la esperanza pequeña
a la responsabilidad
enorme, Trobairitz Magazine
crece lento, con calma y
aprendiendo juntas, de la
mano de cuatro mujeres que
quieren apapachar y consentir
a quienes llegan a estas páginas
para publicar en ellas o
para sumarse como descubridores
de todo un mundo que
no desea quedarse en la sombra
de la indiferencia.
“Así que, Sr. 2024: sepa
que, después de esto, no nos
asusta… tanto”. Pero tampoco
nos agrandamos, aunque
sí nos permitimos soñar.
Después de todo, alguna vez,
más tarde o más temprano, el
trabajo colaborativo, intentar
sacar lo mejor de cada uno,
hacer de cada paso un motivo de alegría, deberían
dar frutos sabrosos y duraderos.
Somos quienes somos con nuestros errores
y virtudes, así, en conjunto; y así, en conjunto
deberíamos ser vistos sin prejuicios ni
dedos señaladores. Siendo esto, reconociéndonos
humanos es como podemos sacar, entre
todos, este proyecto adelante. Tenemos un
2024 por descubrir y mucho trabajo por hacer
de este, nuestro pequeño mundo, un lugar
mejor.
¡¡¡Levante la mano
quien se anime a ser parte!!!
Si te gusta lo que hacemos, seguinos en
Instagram: @trobairitsmagazine
Si querés ser parte con tus relatos o con
tus poemas (siempre de manera gratuita), envianos
tu mensaje a:
trobairitzmagazine@gmail.com
¡Hasta la próxima!
4

Mercedes Chimirri
EXALTA A SOR LUCÍA
QUE EN LAS TARDES ENGALANA LA AUSTERA CELDA
CON MANOS DE ÁNGEL
Cuando Sor Lucía su faz acerca,
con inocencia pura en la mañana,
a aquellas flores que en hora temprana,
el rocío nocturno ha vuelto tersas,
parecen dar su más fragante aroma
al hada bella que el jardín contempla.
Tanta hermosura su espíritu templa
y vuelve a Dios, que en toda cosa mora.
Sus manos blancas, de frágil paloma
han de cortar los tallos espinosos,
que en bellos ramos luego selecciona,
para adornar con ellos, primorosos,
como en un templo de la antigua Roma,
la fría celda con pasos graciosos.
Homenaje a
Sor Juana Inés
de la Cruz
5

Alfonsina Storni
UN DÍA
Andas por esos mundos como yo; no me digas
Que no existes, existes, nos hemos de encontrar;
No nos conoceremos, disfrazados y torpes,
Por los anchos caminos echaremos a andar.
No nos conoceremos, distantes uno de otro
Sentirás mis suspiros y te oiré suspirar.
¿Dónde estará la boca, la boca que suspira?
Diremos, el camino volviendo a desandar.
Quizá nos encontremos frente a frente algún día,
Quizá nuestros disfraces nos logremos quitar.
Y ahora me pregunto... Cuando ocurra, si ocurre,
¿Sabré yo de suspiros, sabrás tú suspirar?
6

Kuqui Bessone
LA DAMA DE LILA
Gabriel y Marcelo habían llegado a Escocia
atraídos por los mitos y las leyendas que
involucran a los castillos de la comarca. Entrada
ya la noche, Gabriel, impelido por el deseo
de conocer, salió a caminar y a saborear
la belleza del paisaje. Era joven, enérgico, vigoroso,
romántico y enamoradizo.
Durante su andar se detuvo frente a
uno de los palacios de la zona: sus ojos observaban
maravillados la imponente fortaleza.
Abarcando con sus pupilas todo aquel lugar
lleno de misterio, descubrió una ventana iluminada;
se acercó, y gracias a su elevada estatura
alcanzó a divisar la figura de una mujer
en su alcoba frente al toilette. Ella cepillaba
aquella ondulante y negra cabellera que se
desprendía desde su amorosa cabeza hasta
caer cual cascada sobre sus hombros. En un
momento la dama miró hacia la ventana, Gabriel
pensó que había sido descubierto, pero
no; ella se levantó dirigiéndose hacia el lecho.
Vestía un salto de cama de delicada y suave
gasa lila, la misma, permitía traslucir la gracilidad
de su figura. Con suaves movimientos, se
cobijó en la cama y apagó la luz del velador.
Nuestro protagonista regresó sobre sus pasos
sin poder arrancar de sus pupilas aquel rostro
de un óvalo perfecto y rasgados ojos negros.
Al día siguiente en la hostería relató lo ocurrido
a su amigo quien riendo exclamó:
─¡Amigo! Anoche bebiste demasiado…
¡Aeguro tuviste una alucinación! Los
castillos de por aquí están
deshabitados y muchos de
ellos, en ruinas.
Al término de ese día,
Gabriel, ávido por ver nuevamente
a la joven que le había
quitado el sueño, regresó a la
fortaleza en cuestión. Allí estaba
la muchacha. Esta vez
ella se dirigió a la ventana, y
alzando su mano lo saludó
deslizándose luego hasta la
cama, tal como lo hiciera la
noche anterior. Gabriel
quedó paralizado, ¡lo había
visto!
Volvió sobre sus pasos
hasta el hostal. Un viento
helado que no era viento golpeaba
sobre su rostro, las nubes
habían aumentado su tamaño
en tal forma que cubrían
la luna sumiendo el valle
en la oscuridad más profunda. Cientos de
manos invisibles parecían sujetarlo por los brazos
y las piernas sin permitirle avanzar.
Esta vez prefirió no contarle nada a
Marcelo, y al día siguiente, cuando el sol se escondía
en el fondo del cielo, regresó a su cita.
Aquella bella muchachita estaba parada en el
portal del castillo. Hermosa y embriagadora,
caminó hacia él envuelta en su manto de crespón,
dejando detrás de sí una estela de un diáfano
color morado. Tomándolo delicadamente
de la mano lo invitó a pasar. Gabriel,
nervioso peinó su dorado cabello hacia atrás.
En el lugar flotaba un dulce perfume, el mismo
embriagó de tal manera sus sentidos que apenas
podía hacerse cargo de sus actos. Juntos
7

recorrieron parte del castillo, un farolillo de luz
tenue les servía de guía por aquel oscuro laberinto.
Si bien en el lugar flameaba un halo de
magia, éste se hallaba semiderruido. Los cortinados
desgastados, las paredes carcomidas
por el tiempo y sus techos descortezados. Inexplicable,
si Gabriel tenía en cuenta lo impecable
y pulcra que se veía desde afuera la habitación
de la misteriosa mujer.
Ella dijo llamarse Lucía. Vivía sola en
aquel lugar ya que toda su familia había emigrado
a Irlanda. Mientras hablaba, lo seducía
con la mirada y Gabriel se derretía bajo el fulgor
de aquellos ojos. Al despedirse, lo estrechó
entre sus cálidos brazos besándolo con pasión,
esto turbó por un momento al joven, quien
luego de serenarse, partió rumbo al albergue.
Pasaron así muchas noches, enamorados
y felices. Caminaban, enlazados uno al
otro, por el bosque que rodeaba aquel castillo.
Las plantas trepadoras se encaramaban en los
añosos troncos de los árboles, en tanto que mil
figuras fantasmagóricas se proyectaban en los
muros de aquella antigua ciudadela. Los jóvenes
aspiraban aquella cautivadora brisa de verano
que traía consigo encantadores rumores.
Gabriel, podía sentir el amor.
No pudiendo esconder más a su amigo
la razón de sus escapadas nocturnas, le confesó
lo que estaba ocurriendo.
Marcelo intentó asesorase en la posada
acerca de la misteriosa mujer. Nadie la conocía,
y aseguraban que, desde hacía muchísimos
años atrás, aquel castillo se hallaba deshabitado.
Entonces, volvió a mofarse de su
amigo asegurando que el pobre deliraba.
Desde ese momento, no se hicieron más comentarios
al respecto y Gabriel continuó con
su enloquecedor romance.
Una de aquellas noches, en que la luna
blanca y brillante señoreaba en el cielo azul,
Lucía lo invitó a conocer la torre más alta de
la fortaleza. Mencionó que desde su terraza, el
astro que ilumina la oscuridad del firmamento,
se veía aún más cercano y que hasta podrían
observar las estrellas jugueteando a su alrededor.
Gabriel se dejó arrastrar, y una vez allí,
ella lo miró profundamente y, seduciéndolo
con su aliento abrasador, volvió a enlazarlo y
besarlo como tantas veces, con aquellos labios
tibios y tentadores. Fue en ese preciso momento,
cuando un remolino de bruma violácea
los envolvió y, flotando en el aire, comenzaron
a desvanecerse.
A partir de aquel suceso, surgió una
nueva leyenda en Escocia. La misma aseguraba
que una vez al año, una mujer vestida de
lila aparecía en aquel castillo, dispuesta a llevarse
con ella algún joven enamorado.
8

Anahí Mariluan
UNA FLOR QUE ESPARCE
EL PERFUME DE LA CULTURA
MAPUCHE POR EL MUNDO
Por Mercedes Chimirri
Una tarde de domingo,
lluviosa, de
esas que invitan a
quedarse en casa y a
ese sentimiento de intimidad
y de introspección,
en una tarde
como esa, descubrí a
Anahí Mariluan. Asistí
con fascinación al espectáculo
que me
ofrecía un hermoso video:
“No estamos solas”,
en el que la cantante
dibuja un pájaro
en la membrana
de su
cultrum que,
de repente,
se lanza a volar
en el medio
de un
paisaje nevado
sobrecogedor.
Toda
la escena
está envuelta
en la delicadeza
y calidez
de su voz
armoniosa y bien timbrada. Me impresionó
profundamente y quise saber más, es así que
mi búsqueda dio por resultado esta entrevista
en la que Anahí nos introduce en un mundo
lleno de magia, de unión con la naturaleza, al
rescate de la cultura mapuche que tiene tanto
para enseñarnos.
—Anahí, ¿Cómo fueron tus comienzos
como cantante?
—A decir verdad, yo soy cantora, por lo
que desde mi infancia canto en las reuniones
familiares y comunitarias. Luego, esa destreza
se volvió oficio y así es que vivo.
9

— ¿Cuándo surgió la idea de dedicarte a
este tipo de música? ¿Cuál fue tu motivación?
—Como la niñez marca una brújula importante
en cada uno de nosotros, no fue una
idea propia. Tal vez sea el designio de una familia
musiquera de la que soy parte. Cuando
nació mi hijo Ayün, el camino se apuntaló para
cantar solo en mapuzungun (lengua del pueblo
mapuche) y desde entonces creo cantos de
cuna.
—Además de interpretar esas hermosas
canciones, llenas de símbolos y de significado,
tengo entendido que
también sos la compositora
¿Es así? Y,
en todo caso, ¿cómo
es componer para
vos?
—Siempre he
creado mis cantos.
No sé hacer canto de
otro modo. Pienso
que tiene que ver
con la cualidad creativa
con que muchas
personas nacemos.
Por fortuna, mi padre
me motivó a
cantar y los caminos
en el arte me han llevado
a seguir haciéndolo.
—La mujer
ocupa un lugar central
en tus canciones.
¿Querrías contarnos
por qué?
—Creo que la
naturaleza es prioritaria
en mis letras. No me canso de vivir en este
estado contemplativo, que es el territorio mapuche
para muchos de nosotros y nosotras.
Soy una agradecida del aprendizaje que brindan
los distintos tipos de feminismos para seguir
caminando en el canto.
—¿Cuál es la importancia del paisaje convertido
en escenario de casi todos tus videos?
—Pienso que la defensa de los territorios
es prioritaria para toda la humanidad. Pero al
vivir desconectados de la vida, no entendemos
qué es lo que defiende el pueblo mapuche. Por
eso, los audiovisuales también son una herramienta
política que ayudan a entender la magnitud
de lo que hay que cuidar.
—Tuviste la oportunidad de cantar en países
como Alemania, España, Holanda, Cuba,
Perú, Chile y Estados Unidos. Nos interesa saber
cómo fue tu experiencia de llevar la música
y el idioma mapuche a esos lugares tan alejados
de la Argentina.
—He llegado a viajar mucho gracias a invitaciones
amorosas. Por eso, los públicos anfitriones
han sido
respetuosos y conocedores
de nuestra
realidad.
—Filmaste un
interesante documental
titulado:
Manke, amiga del
cóndor. ¿En qué te
basaste para contar
esa historia? y ¿Y
qué vivencias te
dejó?
—Mankewenüy,
Amiga del cóndor es
la ópera prima de la
documentalista María
Manzanares. Ese
relato me lleva por
protagonista. Sucedió
a partir de una
lectura que me hizo
mi compañero,
Adrián Moyano, una
mañana. Ese relato
que ocurría en 1790
en el Lago Nahuel
Huapi, fue el punto de partida de uno de mis
discos que está en redes de Spotify y Youtube.
Pronto liberaremos ese documental tan lindo
que ha obtenido menciones como Mejor Documental
(Bannabafest, Panamá), Mejor Montaje
en Tierra del Fuego (Cine en Grande),
Mejor Sonido en Tierra del Fuego (Cine en
Grande), Best Music art cultural Impact (LAN-
NAF Latina and Native American Film Festival.
USA), Mención Dirección Femenina (Fes-
10

tival Internacional de Cine Social del Rio Negro)
y Best Women Film (INKAFEST MOUN-
TAIN FILM FESTIVAL, Perú).
—Supongo que ya tendrás algunos proyectos
a futuro ¿Querrías compartir alguno de
ellos?
—Este 2024 se estrena el 5to álbum de
música enteramente dedicado al agua. Muchos
de esos videos se pueden ver en mi canal
de Youtube: https://www.youtube.com/channel/UCFfnJZTLsIO-SpETiuk0fsg
y también
tengo la alegría de que la Editorial Las Guachas
de San Martin de los Andes, haya hecho
lugar a un libro de poemas propios que se llamará
Flor amiga de diez guanacos, que es el
significado del nombre que llevo.
Y aquí, con el aroma de esa flor que mira
hacia el futuro, llega a su fin la entrevista y yo
me voy, pensando en que he conocido a una
mujer increíble, llena de talento y sencillez,
comprometida con sus orígenes, con la naturaleza
y con la fuerza creadora de las mujeres.
Muchísimas gracias, Anahí: me siento feliz
de que nuestros caminos se hayan cruzado y
te deseo todo el éxito y que tu mensaje llegue
cada vez a más personas.
Anahi Rayen Mariluan
Soy cantora, soy música mapuche.
Escribo y compongo cantos en mapuzungun
(idioma del pueblo mapuche).
Realizo mis composiciones con la convicción
de contribuir al futuro del pueblo
al que pertenezco. En esta otra forma de
decir que complementa al habla, canto a
las mujeres, a las abuelas y al territorio
mapuche, que seguimos habitando.
Edité cuatro álbumes: Kisulelaiñ - No estamos
solas (2015), Amulepe taiñ purrun
- Que siga nuestro baile (2016),
Mankewenüy - Amiga del cóndor
(2018) y Futrakecheyem zomo - Ancestras (2021), a través del sello argentino Club del Disco.
En este momento se estrenan en redes el quinto álbum íntegramente dedicado al agua.
Soy una agradecida de la música. Recorro constantemente ciudades de la Patagonia y Argentina.
Tuve oportunidad de brindar conciertos en Alemania (Jena, Berlín, Bonn, Heidenheim y
Köln), España (Barcelona y Valencia) y Holanda. También participé de festivales en Cuba, Perú
(Lima y Cusco), Chile (Temuco, Valdivia, Coyhaique, Manquemapu) y Estados Unidos (New
York).
En el ámbito audiovisual, aporté música original para las microficciones Mapuzungun – el
habla de la tierra (Canal Encuentro), los documentales Pupila de mujer (DOCTV), Mankewenüy,
Wampo y y el largometraje de ficción Cuentos de la tierra (INCAA) y también dirigí el
etnodocumental Cantos de la memoria - Cantos con sentido. Trabajo sobre archivos sonoros,
históricos y literarios, siempre en relación a los cantos.
11

Mabel Bernal: vida sana
EL AYUNO Y LA SALUD
A lo largo del tiempo varias civilizaciones
implementaron el ayuno para mantener el
cuerpo sano, pero en la actualidad hay resistencias,
prejuicios y temores con respecto a
esta práctica.
Antes de incursionar en este método debemos
saber para qué, cuándo, cómo y dónde
se realizará, pero primero debemos saber qué
es y en qué consiste.
“El ayuno es el acto de abstenerse de manera
voluntaria a ingerir alimentos y consiste
en un método de purificación”.
Antes de iniciar un ayuno hay que definir
la razón por la cual lo haremos. El para qué,
resolverá el cuándo, cómo y dónde. Hay quienes
deciden realizar ayuno por razones físicas
o espirituales.
Si es para desintoxicar el cuerpo es conveniente
primero preparar la mente, por lo tanto,
se puede comenzar cuando se esté convencido:
no es necesario un momento en particular.
El cómo, es muy interesante: dos días antes
se comerá alimentos fáciles de digerir y que
depuren, como ser ensaladas y frutas, al siguiente,
sopas que contengan fibras como ser
sopa con avena. Es importante tomar mucho
líquido para ayudar a la eliminación de residuos.
Al tercer día se decidirá hacer el ayuno
donde se prefiera, pudiendo seguir con las actividades
habituales.
Si el ayuno es por convicción espiritual, es
conveniente programarlo tal vez para un fin de
semana y retirarse a un lugar tranquilo. De ese
modo, cuerpo, mente, emociones y espíritu estarán
en armonía.
Tendremos en cuenta en ambos casos:
Decidir el ayuno con determinación.
Mantener una actitud de serenidad.
Moderación en el comer antes del
ayuno.
Moderación en la vida al finalizar el
ayuno.
Las estadísticas indican que los trastornos
en el aparato digestivo son menos frecuentes
en las personas que utilizan el ayuno como sistema
de purificación.
Para curar determinadas enfermedades se
realizan ayunos prolongados bajo la supervisión
de un especialista con experiencia.
Para lograr un resultado positivo a largo
plazo, es indispensable investigar para saber lo
que el organismo necesita para mantenerse en
buena condición. Podemos ayudar a prolongar
la vida en un total equilibrio sabiendo que
somos seres integrales.
Como dicen los minimalistas: “menos es
más”. Menos comida, más salud.
¿Te animás? Será una gran experiencia.
12
Profesora de Yoga

Freya Asgard
ÁNGEL GUARDIÁN
Allí estaba, siguiendo tus pasos como cada
día. El Padre me había llamado, mi hermano
me dijo que ya no podría seguirte, que ya no
sería tu ángel guardián, lo estaba haciendo esperar
para verte por última vez: si tenía otra
misión, no haría más que obedecer, como
siempre. O casi siempre.
La presencia del Padre llegó a mí. Me
asustó: era cierto que había desobedecido su
llamado inmediato, pero no podía irme sin
verte por última vez y despedirme de ti, aunque
tú no me vieras.
―Hijo, requerí de tu presencia ―me dijo
con paciencia una vez que hube llegado a su
lado.
―Lo sé, Padre, solo quería despedirme de
ella ―respondí con tristeza, un sentimiento
desconocido para mí hasta ese momento.
―No tienes que hacerlo.
―Pero ya no seré su ángel guardián.
―No, serás su esposo. Ella también te
ama, en sus sueños puede verte y está enamorada.
―¿Qué quieres decir?
―No impediré este amor. Esta tarde irás
a la tierra como humano y serán el uno para
el otro... Ya tengo todo arreglado. Ve a despedirte
de tus hermanos, a ellos no los volverás
a ver más que en sueños, pero recuerda: jamás
dejarás de ser uno de los nuestros.
―Padre…
―Ve, hijo, Rafael te llevará a tu nuevo hogar.
Sé feliz.
Mi nuevo hogar en la tierra era una pequeña
casa en las afueras del centro de la ciudad.
Era un lugar muy agradable: tenía un jardín
y un patio trasero con árboles frutales, un
columpio y un castillo de juegos. Ideal para
formar una familia.
Tras revisar mis nuevas cosas, me fui en
busca de mi amada, ¿cómo la encontraría?
Como ángel era fácil, solo “aparecía” frente a
ella, como humano sería diferente, no sabía
nada del mundo real.
―Tranquilo, hermano,
Padre no te dejará
solo: solo ve y búscala. Ya
verás que la encontrarás.
Nos vemos en tus sueños,
no creas que te librarás tan
fácil de nosotros.
―Te quiero, hermano.
Nos dimos un abrazo
hasta que se desapareció.
No puedo negar que
me sentí algo nostálgico,
pero me apresuré a ir a
buscar a Amanda. La encontré
en la cafetería a la
que solía ir cuando se sentía
sola.
13

―Hola, Amanda ―la saludé nervioso.
―¿Hola? ―me saludó sorprendida.
―¿Puedo acompañarte?
―Sí. ¿Nos conocemos?
―¿Me conoces?
Ella bajó la cabeza, debía ser muy extraño,
solo me había visto en sueños y en ese momento
estaba frente a ella.
―Esta mañana soñé que te despedías de
mí, te veías tan triste, pensé que ya jamás volvería
a verte, y ahora estás aquí, como un humano.
Perdón, debes pensar que estoy loca.
―Si te confirmo que no es así, ¿me creerías?
―Sinceramente, creería lo que sea en este
momento.
―Hasta hace unas horas, yo era tu ángel
guardián.
―¿Ya? ―dijo escéptica.
―Padre me llamó, sabía que mi misión
contigo había terminado, por eso me fui a despedir
de ti.
―Te sacó de mi vida, te vas a otra misión.
―No me voy a otra misión.
―¿Entonces?
―Me envió porque se enteró de lo que yo
sentía por ti.
Me miró con los ojos muy abiertos.
―Me enamoré de ti. Después de estar día
a día contigo, a tu lado, me enamoré de ti. Por
eso me mandó a la tierra.
Me sonrió de un modo maravilloso y tomó
mi mano. El contacto de su piel me estremeció,
nunca había sentido nada parecido. Y
supe que no me equivoqué.
***
Cerré los ojos de mi amada y le di un
suave beso en los labios y uno en la frente, ya
había cumplido su misión en la tierra, habíamos
vivido cincuenta años de feliz matrimonio.
Sin hijos, por supuesto, eso no estaba permitido.
Por lo mismo, no sabía lo que sucedería
de ahí en adelante, mi Padre me había permitido
dejar el Cielo para estar con ella pero,
¿tendría que vagar por el mundo sin sentido?
Tras su entierro, Padre me llamó a su presencia
y me llevó a una habitación llena de
alas.
―Aquí están las alas de todos los ángeles
que, por una razón u otra han dejado sus deberes
y han tenido que irse a la tierra como
humanos.
―Las mías están allí.
―Así es. Cuando te permití ser el esposo
de ella, te dije que jamás dejarías de ser uno
de los nuestros.
―¿Eso qué quiere decir?
―Quiere decir que aquí están tus alas,
puedes tomarlas y volver con nosotros.
―Pero ya no soy digno.
―Lo eres tanto
como cualquiera de
tus hermanos: el amor
es el más puro sentimiento
y no debes
cuestionarte por ello.
Ahora debes decidir si
quieres volver con nosotros
o no.
―Claro que sí.
―acepté con alegría y
mis alas regresaron a
mí.
14

Freya Asgard
Su nombre real es Yasna Sánchez, chilena,
escribe desde que tuvo uso de razón, aunque comenzó
a publicar solo desde el 2013, por su excesiva
timidez.
Escribir es una necesidad y la mejor forma de
controlar su ciclotimia, por lo que jamás ha dejado
de escribir e intentar dejar alguna enseñanza
en sus historias.
Con más de cuarenta novelas en su haber, espera
seguir escribiendo por mucho tiempo más.
15

Andrea V. Luna
EL PESCADOR
Hacía ya muchas horas que se encontraba
sentado sobre una piedra a la orilla del río tratando
de pescar. Mientras observaba los destellos
del agua que transcurría a sus pies, el
hombre recordaba ciertos momentos de su
vida pasada: su primer cachorro, la primera
muela picada, las milanesas de su madre, la
pelea con el Gringo, la mujer que amó y aquello…
Lentamente, recogió la línea y vio venir,
aun desde lejos, los anzuelos vacíos… otra vez.
Sin dudas ese día no
era «su día». Fastidioso,
se dispuso a encarnar
por última vez,
ya casi con rabia…
iracundo, en realidad.
La ceguera del alma le
nubló los ojos, perdió
el equilibrio y se sostuvo
del aire y la caña
de pescar, con tal
fuerza que se incrustó
uno de los enormes
anzuelos en la mano.
Sangrando, comenzó
a gritar las mayores groserías que su experiencia
le había enseñado, maldiciendo su suerte
una y otra vez. Se alivió al recordarse pescador
experimentado y se propuso retirarse el metal
de la piel con su acostumbrada frialdad. En
eso estaba, cuando vio algo en el río que , de
inmediato, le llamó la atención: un reflejo, una
sombra, una silueta flotando.
Se paralizó ante el espectáculo inesperado:
la corriente arrastraba de a poco, juguetona
y macabra, un cuerpo sin vida hacia el
exterior del recodo…
«Siéntate a la orilla del río y espera: el cadáver
de tu enemigo no tardará en pasar», recordó.
—Será que aquí…? —balbuceó nervioso.
Un temblor expresó su sobresalto cuando
creyó verse en ese ser sin vida que se acercaba
empujado por las aguas turbias del riacho. Lógicamente,
desechó la idea en algo menos que
un segundo por considerarla simplemente estúpida…
pero la curiosidad ganó su espíritu
por lo que, sin reflexionarlo más (así, como había
sido su vida), se acercó sin acordarse del
dolor lacerante de su palma herida. Abrió los
ojos más allá de la capacidad de sus párpados
cuando vio en los pantalones del muerto el
desgarro causado por su propio perro hacía
dos días… su camisa descolorida por el
tiempo… entonces, con recelo y extraño temor
se agachó a contemplar o contemplarse
en el otro. Vio en el agua, junto a la mano izquierda
del muerto, un hilo de sangre que se
diluía y desaparecía en el oleaje. La cabeza en-
16

Estas últimas acciones
lo llevaron a
un recorrido de esa
parte de su vida que
había querido ocultarse…
se perdonó…
perdonó a otros…
pese a que nunca
creyó poder lograrlo…
Repentinamente,
se sintió en
paz.
Cuando consiguió
girar el cuerpo
con el gancho, siguió
sin poder ver el rostro
de quien yacía sin
vida ante él.
Con pavor, con
sorpresa, con resignación,
reconoció en
la mano del otro, su
mano perforada aún
con un anzuelo «pata
larga» que había preparado
la noche anterior.
redada en los pastizales y el junco no le permitían
reconocer ningún rostro. Un anillo despidió
un destello incandescente, tal vez respondiendo
a algún embrujado rayo del sol colándose
entre las nubes incipientes: ese que le había
legado su padre.
Esa mañana había acertado en tomar entre
su equipo un viejo bichero que ahora atinó
a recoger, tembloroso, para intentar dar vuelta
el cadáver y verle, por fin, la cara.
En la quietud de
la tarde, como el
humo de un fuego
que se extingue, comenzó
a desvanecerse en el aire cálido del
ocaso aterciopelado… Mientras tanto, en el
cadáver quedaban, agolpadas y concatenadas,
sus propias miserias.
Mención de honor. XXI Concurso Literario
Viña Joven. Centro Cultural y de
Animación Misionera San Antonio
María Claret, Cuba. 2023.
17

Dibyajyoti Mukhopadhyay:
India desconocida
DAKSHIN RAI Y BON BIBI:
DIOSES PROTECTORES DEL BOSQUE DE MANGLARES
MÁS GRANDE DEL MUNDO
El bosque de manglares más grande del
mundo, Sundarbans, con una enorme belleza
compartida entre India y Bangladesh, también
es conocido como la tierra de los cazadores de
miel. Los Sundarbans albergan un ecosistema
único y diverso, que incluye una gran cantidad
de especies raras y en peligro de extinción. El
área sigue siendo uno de los ecosistemas
menos explorados y comprendidos del
mundo.
El bosque de Sundarbans, la tierra de los
tigres devoradores de hombres, hogar de los
tigres reales de Bengala, tiene varios grupos de
islas, algunas de las cuales están habitadas y
otras son densamente boscosas. Además de la
pobreza extrema, los ataques de tigres,
cocodrilos, serpientes venenosas y abejas son
un fenómeno habitual.
Las abejas silvestres autóctonas llegan a
Sundarbans en el décimo mes del calendario
bengalí magh, (enero-febrero), pasan allí su
ciclo de vida melífero y lo abandonan en el
tercer mes del calendario bengalí ashar (juniojulio).
Principalmente
la recolección de
miel comienza en el
último mes del
calendario bengalí
chaitrya (marzoabril)
y durante esta
temporada, los
cazadores de miel
de toda la India
suelen venir a
Sundarbans para
cazar miel junto con
Mouwalis / Moule (cazador local de miel) de
manera tradicional. Los ca-zadores de miel, o
"Moualis", de los Sundarbans son personas
18

que reco-lectan miel de las colmenas silvestres
que se encuentran en los manglares. Arriesgan
sus vidas para recolectar miel, ya que
Sundarbans también alberga animales salvajes
peligrosos, incluido el tigre de Bengala. La
miel recolectada por los Moualis se considera
un manjar y es muy valorada. La práctica
tradicional de la recolección de miel de los
Moualis es una parte vital de la economía y la
cultura locales en la región de Sundarbans.
Las mujeres de la comunidad siguen
algunas reglas y rituales tradicionales cuando
los Mouwalis (miembros masculinos,
cazadores de miel) de la comunidad van a
cazar miel a Sundarbans. Ellas no encienden
fuego durante el mediodía en el horno, porque
creen que encenderlo esta vez podría dañar
tanto el bosque como las colmenas. Durante
este período, las mujeres no viajan lejos de sus
casas ni usan aceite ni sopa en su cuerpo. No
limpian con una esponja el agua de la Tauliya
5 y 10 miembros. Los cazadores de miel viajan
a través de ríos fangosos de agua salada,
arroyos y canales estrechos que atraviesan los
bosques de Sundarbans.
Este humedal boscoso está lleno de
secretos y misterios, como la historia de
Dakshin Rai, Bon Bibi. Los Mouwalis realizan
una oración tradicional a su deidad principal,
Dakshin Rai, antes de entrar al bosque. El
miedo es una forma de respeto hacia Dakshin
Rai, quien gobierna a las bestias y demonios y
ha sido considerado el señor de Sundarbans.
Se cree que vive en el bosque de Sundarbans
en forma de tigre de Bengala. Según los
Mouwalis (recolectores de miel locales de
Sundarbans), Dakshin Rai da miel del bosque
a cambio de una vida humana y sólo teme a
"Ma Bon Biwi" (la dama del bosque), la diosa
madre.
Se cree que Bon Bibi vive en los bosques
de Sundarbans y protege a los pueblos del
(tela de algodón) que utilizan durante el baño.
Tampoco queman frío en sus hornos, cocinan
la comida temprano en la mañana y durante
la noche.
La recolección de miel es un trabajo en
equipo y cada equipo está formado por entre
temible Dakshin Rai, con quien está
eternamente en guerra. Es fascinante que Bon
Bibi figure en los rituales religiosos tanto de
musulmanes como de hindúes. Aparece en
Durga Maa como ropa para sus seguidores
19

hindúes y como una monja (pirani) para sus
seguidores musulmanes.
Una vez, había dos hermanos Mouwalis,
Dhona y Mona, en un pueblo de Sundarbans.
Dhona planeaba ir a cazar miel con una flota
de siete barcos para recolectar miel en algunas
zonas de bosques densos, pero su hermano
Mona se opuso. Dhona se llevó a un
pastorcillo y a Dukhe con él. Antes de partir, la
madre de Dukhe le dijo que recordara a Ban
Bibi en caso de algún problema grave.
Cuando la flota llegó al Kendokhali char, que
era parte del reino de Dakshin Rai, Dhona se
olvidó de darle una ofrenda a Dakshin Rai.
Como resultado, no pudo recolectar miel ni
cera durante tres días. En la tercera noche,
Dakshin Rai apareció en los sueños de Dhona
y les pidió un sacrificio humano. Después de
algunas discusiones con Dakshin Rai, la
codiciosa Dhona acordó sacrificar a Dukhe a
cambio de miel y cera. Entonces, después de
recolectar suficiente cera y miel, dejó a Dukhe
allí y regresó a su aldea. Cuando Dukhe estaba
a punto de ser asesinado por Dakshin Rai
disfrazado de tigre, comenzó a cantar
oraciones invocando a Bon Bibi. Al escuchar
su canto, Bon Bibi llegó junto con su hermano
Shah Jangali. Shah Jangali derrotó a Dakshin
Rai. Después de su derrota, Dakshin Rai se
refugió en Bara Khan Ghazi. Siguieron a
Dakshin Rai hasta allí. Finalmente, Bara Khan
Ghazi pudo convencer a Bon Bibi de que no
dañara a Dakshin Rai. A cambio, Ghazi le dio
a Dukhe siete carros llenos de
objetos preciosos, mientras
que Rai le dio una cantidad
suficiente de cera y miel. Bon
Bibi ordenó a su mascota, el
cocodrilo Seko, que lo llevara
a su aldea. Después de su
regreso al pueblo, Dukhe
popularizó el culto a Bon Bibi
en el barrio.
Es costumbre reverenciar
a Dakshin Rai antes
de entrar al bosque, para que
no envíe ningún tigre hacia ti.
Después de realizar los rituales y antes de
entrar al bosque, Mouwalis y otros cazadores
de miel usan la máscara con la cara de
Dakshin Rai en la parte posterior de la cabeza
para evitar ataques de tigres porque los tigres
siempre atacan por detrás.
Se cree que la tradición de los cazadores
de miel en el bosque de Sundarbans de llevar
máscaras humanas detrás de la cabeza es una
forma de protección contra los animales
salvajes, en particular los tigres. La creencia es
que los tigres se asustarán con las máscaras
humanas y evitarán atacar a los cazadores. Al
usar las máscaras, los cazadores intentan
imitar el comportamiento humano y engañar
a los tigres haciéndoles creer que son
personas, no presas.
Vale la pena señalar que la tradición de
usar máscaras en Sundarbans no se observa
universalmente y es posible que algunos
cazadores de miel no utilicen esta técnica en
absoluto. Además, la práctica ha sido objeto
de debate: algunos cuestionan su eficacia y
otros cuestionan su impacto sobre los tigres y
otros animales salvajes
de la zona. Sin embargo,
la tradición de usar
máscaras por parte de
los cazadores de miel en
Sundarbans es un
aspecto único y
fascinante de la cultura y
la historia locales.
20

Patricia Rey
EL MUCHACHO
DE LA GUITARRA
En una época nefasta en la que desayunamos
con varios muertos en la tele a diario, la
guitarra solía ser el único consuelo para
Nahuel, su refugio para escaparse de su realidad.
Le había nacer en una familia disfuncional,
con una madre a la que su pasado delictivo
le impedía tener un buen trabajo, ya que
muchos no quieren a alguien con prontuario,
un padre que los había abandonado y para
peor desgracia era ciego. El muchacho de diecisiete
años iba a la escuela a la mañana y al
salir buscaba su guitarra y partía hacia la calle
Florida, donde tocaba su instrumento y entonaba
tristes canciones de amor a cambio de
unos pesos. Pasaba los días soñando que su
vida era una miniserie romántica yanqui,
como las que le gustaba escuchar, o una novela
turca, de esas que miraba su mamá, en la
que la chica linda se queda con el joven desdichado,
esas cosas hermosas que solo pasan
en la tele, cuando su madre no estaba mirando
chismes en América, o en los libros que lee en
braile. Ese día había más gente que de costumbre,
había 2x1 en entradas en los cines de
Lavalle. De repente la mirada de un transeúnte
se clavó en Nahuel haciendo sentir su presencia.
Estaba nervioso, desencajado, miraba a el
chico con desprecio, como si lo conociera y lo
odiara. Yo atendía en un bar justo enfrente de
donde Nahuel cantaba cada jornada y sabía
que era un pobre ciego que no molestaba a
nadie, y lo que vi ese día me causó terror.
El desquiciado atacó a Nahuel con
un palo sin mediar palabra, estando totalmente
indefenso porque no podía
ver a su atacante. Entré corriendo al bar
para pedir ayuda y llamar a la policía,
varios clientes habitué y el dueño del local
salieron en defensa del joven y pudieron
detener al loco que decía que
Nahuel lo miraba. Volví a la vereda y
pude ver a ese jovencito que admiraba
agonizando. Caía la tarde, él no debería
estar ahí, si siempre se iba antes de que
saliera la primera estrella: supongo que
se quedó porque al haber más gente había
creído que podría llevarle más dinero
a su madre para comer o pagar las cuentas,
o tal vez el destino está escrito y ese era su
lugar y su hora señalada. Cuando me acerqué
pude verlo vivo y decirle que había alegrado
todas mis tardes con su música el último año.
Era una buena persona y pasó a ser un muerto
más en la estadística diaria de inseguridad.
Pienso en él y me pregunto: ¿Hasta cuándo
tendremos que vivir con miedo? ¿Qué futuro
nos espera?
21

Chaeros Arts
https://www.instagram.com/chaeros_arts/
Contacto por cursos y trabajos: chaerosarts@gmail.com
22

Alejandra Jonte
EL MAR Y YO
El mar fue mi fantasía durante muchos
años. Lo soñaba de mil formas diferentes,
mientras ensayaba lo que habría de sentir al
enfrentarlo por primera vez. Comencé a imaginarlo
desde la inmensidad silenciosa y monótona
de la pampa, sobre esas extensiones
de sembradíos en donde la sensación de infinito
la corta algún árbol o, con suerte, alguna
casa.
Lo imaginé un gran
espejo y como un cielo
invertido del que, supuse,
robaría su azul.
Su música me había
llegado antes desde un
caracol del que, me habían
jurado, guardaba
entre sus pliegues el ritmo
del ir y venir de las olas.
Y cuando al fin pude
desafiarlo con mi mirada,
fue extraño: no era lo que
esperaba.
Sus aguas no eran
azules ni su arena blanca.
Me supo a un arenero de
jardín, en donde los adultos
también estaban invitados
a jugar. No disfruté
crear castillos con sus fosas,
ni me vi en ellos
como princesa a quien
debían rescatar. Me molestó
el viento sobre mi
cara, el alboroto de mi
pelo y el gusto a sal de mi boca.
Y le di la espalda y lo odié por mucho
tiempo, por no haber sido aquello que habitaba
mis fantasías, que al decir verdad, ya no
sabía cuáles eran.
Y el mar me castigó, imponiendo distancia
y tiempo.
Y cuando por fin pudimos reencontrarnos
y decirnos todo aquello que callamos, comprendí
que en aquel primer encuentro no estaba
preparaba para admitir su inmensidad y
mi evidente insignificancia. Ni para comprender
aquello que sutilmente quería enseñarme:
que la vida es un ir y venir como lo hacen sus
olas, esas que pueden acariciarte o revolcarte
con su furia, y que muchos
momento de la vida
tienen la misma fragilidad
de los castillos que junto
a su orilla podés levantar,
y la oportunidad de disfrutarlos
durará hasta que
llegue una gran ola y los
desintegre llevándose tu
esfuerzo de horas, o pase
a tu lado algunos de esos
seres que van por la vida
dando patadas destruyendo
algo más que ilusiones.
Y que ni el color
ni las formas te definen. Y
que siempre tendremos
los recuerdos de los momentos
que podemos
atesorar.
Ya son muchos los
años en que nuestro encuentro
es impostergable.
Aquí o más allá, con todos
los tonos con que la
vida me premió encontrarlo:
azul, turquesa,
verde y de ese color amarronado
de las costas cercanas, en donde pude
caminar sus orillas con arenas blancas, casi negras
o de piedras de las que no te dejan avanzar
aunque lo quieras.
Y hoy, como cada año, estamos él y yo,
frente a frente, renovando una vez más este
vínculo indisoluble entre su inmensidad y mi
insignificancia.
23

Humorarte
Por EFG
24

Francy de los Ríos
EL HUÉSPED
Lo primero que notó a su llegada fue lo
acordonado de la calle. Junto a los pantalones
casi en la rodilla, del cuerpo maltrecho en el
pavimento. Apartó su mirada hacia la puerta
del hotel, por la cual entró momentos después.
A Rodolfo Prieto, todos los subalternos le
abrían camino a su paso. Era de esperarse, por
ser él un reconocido hombre de la
ley. Llegó al pasillo de la habitación
del hotel. Visualizó a lo lejos lo agazapada
de una mujer junto a una oficial.
Era una mujer joven a quien se
le notaba la curiosidad por los hechos.
Entrando a la habitación se
reunió con el oficial a cargo. Con su
voz aguda preguntó:
⸺¿Qué tenemos? ─Mientras
tanto dirigía sus pasos al balcón─.
⸺Un suicidio, mi comandante.
⸺¿Suicidio? ¡Uff! ¡Mmmm! ¿Seguro?
─añadió con sarcasmo, mientras
se acariciaba la barbilla con la
mano izquierda, dando una ojeada a
su alrededor─.
⸺¿Cuál es la minuta? ¿Qué llevan
hasta ahora? ─Dirigió la mirada
al oficial David Machado. Éste le informó─.
⸺El huésped se llamaba Faúto
Malavé. Es del interior del país y se
encontraba de visita por asuntos de
negocios. En la recepción nos informaron
que llegó a su habitación pasada
la medianoche. La mucama
nos dijo que había estado jugando
en uno de los casinos de la ciudad.
⸺¡Está bien! ─repuso; entre
tanto, giraba la cabeza hacia la
puerta de entrada en busca de la mu-
25

jer, ya deduciendo que era la mucama. En el
mismo tiempo el oficial David continuaba─.
⸺Nuestros hombres se dirigieron al casino.
⸺ ¿Qué consiguieron allá?
⸺Comandante, por lo que se averiguó, el
occiso ganó una fortuna.
⸺ ¡Así es la cosa! ¡Mn! Ahora dime tú, David,
¿qué sujeto que gane una fortuna, se suicida?
Digo yo, no sé, cosas de uno… cosa de
cada quien. ¿No? Yo me gano una fortuna y
cambio de casa, de carro… puede ser que
hasta de suegra. Si cuando era pobre no me
maté no me voy a matar de rico… y poco que
menos con los pantalones a mitad de rodilla.
¡Extraño! Muy extraño. ─frunció el ceño mientras
seguía preguntando a David, quien no encontraba
cómo manipular la risa que ya estaba
asomada entre sus labios─. ¿Qué más le dijo
la mucama?
⸺Ella alega que tocó la puerta. Que lo
hizo dos veces y nadie respondió, por lo que
decidió usar las llaves para llevar a cabo su trabajo
y justo en ese momento que abría la
puerta, el hombre se lanzaba al vacío. Declara
y afirma que, asustada, gritó y salió corriendo
a buscar a su esposo que trabaja en la recepción.
Prieto miró con sabiduría de veterano al
oficial David, para luego decirle:
⸺¡Pobre Faúto! ─Entre tanto, se absorbía
los dientes provocando una clase se silbido
ahogado, negando con la cabeza─. Lleven a
la mucama y a su esposo a la comandancia…
aquí probablemente, sin temor a equivocarme
el huésped tuvo una muy buena noche y una
mala fortuna pasional. Eligió un mal hotel para
hospedarse la noche que se hizo rico.
Dando la orden se retiró del lugar.
26

Sebastián Saavedra:
cocina y algo más
SENSACIÓN DE INFIERNO
En muchos lugares las
temperaturas en verano suelen
ser muy extremas. Precisamente,
la ciudad donde
vivo siempre es noticia por
registrar las temperaturas
más altas en verano de todo
el país. Llegando muchas
veces a temperaturas que
rondan los 45º C, pero sus
sensaciones térmicas son
mucho más altas.
Este tipo de clima cuyo
periodo del día más caluroso,
que es del mediodía a
la siesta, no solo hace que
uno quede encerrado en sus
hogares o trabajos con aire
acondicionado, sino que
también te lleva a buscar alternativas
respecto a la alimentación
mucho más frescas
y livianas.
Las noches son también
muy calurosas con temperaturas
que suelen rondar los
35º C, por lo que este plato
es ideal para una noche así,
de calor, ya que tiene todo
lo que un platillo debe tener:
lindos colores, sabores, aromas,
temperaturas y texturas.
Una tarta abierta de
acelga, queso pategrás, queso mozzarella,
champignones y huevo, acompañado de una
ensalada de hojas verdes frescas, tomates cherrys,
espárragos, aceitunas, castañas de cajú,
huevo y queso pategrás.
27

TARTA DE VERDURAS
CON ENSALADA MEDITERRÁNEA
INGREDIENTES
Para la tarta
1 hoja de masa de pascualina
300 grs de acelga
½ cebolla
100 grs de queso pategrás
100 grs de queso mozzarella
3 huevos
100 grs de champignones
Para la ensalada:
Hojas verdes a gusto (rúcula, lechuga, repollo)
150 grs de tomates cherrys
8 espárragos
4 huevos
100 grs de queso pategrás
8 aceitunas
100 grs de castañas de cajú
PROCEDIMIENTO
Para la tarta, colocar la masa sobre una
tartera, hornear por 5 minutos a horno fuerte
para marcar la masa. Colocar el relleno de la
tarta que se hace rehogando la cebolla, ya picada
finita, junto con las hojas de acelga cortadas
grosamente.
Cuando se tiernicen
las hojas, agregar los
champignones cortados
en láminas y condimentar
a gusto.
Mezclar esta preparación
con los huevos y
los quesos. Volcar sobre
la masa precocida
y hornear por 30 minutos hasta que el relleno
esté firme y los bordes de la masa, dorados.
Para la ensalada, lavar y secar las hojas y
disponerlas en un recipiente donde servir.
Agregar los tomates cherrys, las aceitunas, las
castañas de cajú, los
huevos hervidos cortados
al medio y las
hebras de queso pategrás.
¡Que lo disfruten!
CHEF
28

Antonio Las Heras
TASTIL,
UNA CIUDAD PREINCAICA
A cien kilómetros de la
ciudad de Salta (capital de la
provincia homónima, República
Argentina) se encuentra
Tastil, ciudad preincaica que
comenzó a erigirse hace mil
años en lo alto de una zona
montañosa que, en la actualidad,
se muestra inhóspita por
lo desértica. Se trata de 17
hectáreas, a 3.200 metros de
altura sobre el nivel del mar.
Estuvo habitada hasta, aproximadamente,
el año 1.400,
cuando fue abandonada;
aunque las razones concretas
de por qué sucedió eso aún
son desconocidas. Hay varias
hipótesis, como después veremos.
Tastil, puede traducirse
como “piedra que suena” y
hace referencia a cierto tipo
de rocas –de las cuales hay
unas cuantas aún hoy entre
las ruinas– que al ser golpeadas
suenan de una manera
que remeda el sonido de campanas.
Las 17 hectáreas edificadas
–la mayor superficie en
todo el noroeste argentino,
superando inclusive al Pucará
de Tilcara de la Quebrada de
Humahuaca– están constituidas
principalmente por espacios habitacionales
donde no hay ángulos rectos sino prolongadas
curvas a manera de peculiares elipses y
29

semisubterráneas. Los guías explican que edificaciones
de ese tipo son muy adecuadas para
protegerse de los vientos casi permanentes. Es
una zona donde durante el día la temperatura
puede superar los 35 grados centígrados y, por
la noche, descender a varios grados centígrados
bajo cero, sobre todo en invierno.
Habida cuenta que para los pueblos originarios
andinos la muerte no es un fin sino un
simple tránsito hacia otra forma de continuar
la existencia, muchas de las casas tienen tumbas
(cistas) en su interior o alrededor, de manera
que el muerto estuviera rodeado por
aquello que le fue familiar durante la vida terrena.
Las paredes –que todavía hoy se mantienen
en su mayoría en pie– están construidas
con piedras sin argamasa. En nuestras investigaciones
hemos advertido que alguna que otra
pared sigue el sistema incaico de construcción:
una piedra de gran tamaño en torno a la cual
se van disponiendo otras más pequeñas. Pero
eso sólo en unos pocos casos; tal vez por haber
sido erigidas en tiempos más recientes,
cuando la zona ya formaba parte del Imperio
Incaico (Tahuantisuyu).
Los constructores de Tastil pertenecían a
una etnia de atacameños. Hicieron en esta ciudad
calles sobre elevadas y sinuosas que convergen
en algo así como una plaza central; sitio
elegido para la práctica de ceremonias esotéricas.
Allí se encuentra la wanka; piedra sagrada
que, a nuestro juicio, bien podría cumplir
–a modo de menhir– la integración del
Cosmos con la Madre Tierra.
Hay sitios en los que hacían
reuniones comunales y otros en que se
realizaba la molienda del maíz y de la
quinoa que producían. También hay
corrales para las llamas.
Cuando el investigador camina por
este lugar tiene la sensación de encontrarse
en tierras habitadas hasta hace
muy poco. A simple vista, entre los pedruscos
que conforman calles y senderos,
se esparcen innumerables trozos de
cerámica –algunos de notorio colorido–
restos de vasijas, tinajas y cacerolas
que usaron otrora los habitantes.
Tastil estuvo habitada desde el año mil
hasta, aproximadamente, el 1.450. En el momento
de mayor esplendor vivieron allí unas
3.000 personas. Empero a la llegada de los españoles
el sitio fue encontrado deshabitado en
lo absoluto. ¿Qué provocó el abandono de
Tastil? Como señalamos antes, hay varias hipótesis,
pero ninguna explicación definitiva.
Hay quienes piensan que fue voluntariamente
abandonada debido a un repentino
cambio de clima, que hizo escasear el agua.
Otros tienen la idea de que los sacerdotes encontraron
alguna peculiar señal en el firmamento
–algún fenómeno astronómico inusual–
que interpretaron como anuncio de que era el
momento de marcharse a otro lugar. Otros
sostienen que a la llegada de los conquistadores
incas, tomaron a la población y la fueron
trasladando a diferentes sitios acordes a los
planes del imperio.
30

Tastil fue declarado Monumento Histórico
Nacional por Decreto Nro. 114 en diciembre
de 1997 con la denominación de Parque Arqueológico
Santa Rosa de Tastil. El primero en
investigar el lugar fue el sueco Eric Boman en
1903. Un equipo de la Universidad Nacional
de La Plata, dirigido por el profesor Mario Cicliano,
reconstruyó (en 1967) algunas zonas.
Habida cuenta de su excelente estado de conservación,
la UNESCO lo declaró Patrimonio
de la Humanidad.
Tastil se encuentra fuera de los circuitos
turísticos, por lo que sólo es visitada por quienes
tienen especial interés en arqueología precolombina.
En sus proximidades –medio kilómetro
aproximadamente– está el pueblo de
Santa Rosa de Tastil (situado a la vera de la
Ruta Nacional 51 y fundado hacia 1860),
donde hay dos museos: el Museo Regional de
Tastil “Moisés Serpa” (que cuenta con un
cuerpo de momificación natural con 700 años
de antigüedad y el cráneo artificialmente deformado)
y el Museo del Sitio de Tastil. Ambos
museos cuentan con piezas de gran interés
tanto esotérico como arqueológico y simbólico.
La población estable es de solo siete habitantes.
No hay electricidad, salvo alguna familia
que cuenta con paneles solares o pequeños
generadores propios.
En toda esta zona se estima que hay unos
9.000 petroglifos (dibujos y trazados hechos
trabajando la roca misma) buena parte de
cuya simbología sigue siendo desconocida
hasta el presente. Esos petroglifos remiten a situaciones,
historias, anhelos, creencias e intereses
de quienes habitaron la región desde
hace diez siglos…
El Prof. Dr. Antonio Las Heras es
director del Instituto de Estudios e
Investigaciones Junguianas de la
Sociedad Científica Argentina.
E-mail: alasheras@hotmail.com
Whats App 11 4949 2850
www.antoniolasheras.com
31

Ganadores Reto Literario
DICIEMBRE
EL MÁS VOTADO
La joven observa desde arriba. Sobresalto, sudor frío:
Una mano de mujer emerge como llamando. La respiración
se agita. Ella reconoce esos anillos. Son los que usa
desde años atrás, se los regaló su madre un día antes de
morir.
EL ELEGIDO POR LAS TROBAIRITZ
De repente, un haz de luz rasgó la noche. Los compañeros
despertaron sobresaltados. “¡No temáis!”, se escuchó desde el
cielo. Así que él se arrebujó con la manta de pastor, dio media
vuelta y murmuró: “Ya me lo contarán mañana”.
32

Reto Literario
NUEVO MES,
NUEVA FOTOGRAFÍA
Como habrán visto, todos los meses reservamos
la contratapa para fotos que nos
desafían y que, por sí solas, tienen una narrativa
particular, así que optamos por que sean
más interesantes todavía y ahora son el motor
de nuestro reto literario.
Como cada mes, el ojo artístico y la mano
de Auty Moleta nos despiertan nuestra creatividad
hacia narrativas que nos movilicen la
imaginación, la mente y el alma hasta hacernos
estremecer.
¿Tienen ganas de ser parte de nuestro pequeño
gran mundo literario?
¿Cómo?
Acá les dejamos un instructivo.
Sepan también que siempre pueden preguntarnos
lo que necesiten en caso de surgir
dudas o de querer comentarnos algo. ¡Nos
encanta leerlos!
trobairitzmagazine@gmail.com
1. Realizar un microrrelato de hasta
50 palabras en base a la imagen de
la contratapa del ejemplar del mes
en curso.
2. Escribirlo en los comentarios de la
publicación del reto mensual en
nuestro Instagram: @trobairitzmagazine.
3. Al final, anotar título y autor entre
paréntesis.
4. Solo se admitirán trabajos en lengua
castellana.
5. Los menores de edad podrán participar
con la autorización de sus
padres expresa por mensaje privado,
de lo contrario, de resultar
ganador, será desestimado.
6. Habrá 2 ganadores por mes: el
más votado y el elegido por el
equipo editorial.
7. Cierre del certamen: el 30 de cada
mes.
8. Premios:
a. Publicación destacada en histories.
b. Publicación destacada en la revista.
c. Diploma acreditativo.
33

34
¿Qué escribirías con ella?