24.02.2013 Views

Para conocer las sectas

Para conocer las sectas

Para conocer las sectas

SHOW MORE
SHOW LESS

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

Los filósofos y teólogos escolásticos de la mejor<br />

Edad Media tenían pasión por la claridad.<br />

La definición era el pórtico de cualquier cuestión<br />

disputada, pues arrojaba luz para que cada<br />

cual de los contendientes supiese a qué atenerse.<br />

Por el contrario, un término in-definido (no definido)<br />

era rechazado porque llevaba al equívoco o a<br />

posibles interpretaciones erróneas.<br />

La historia de la filosofía está llena de malentendidos,<br />

precisamente porque un mismo término ha<br />

tenido diferentes lecturas. Buena parte de <strong>las</strong> disputas<br />

teológicas de todos los tiempos radica en el uso<br />

de ópticas incapaces de «definir» con precisión el<br />

vocabulario empleado por cada una de <strong>las</strong> «escue<strong>las</strong>»<br />

o de los autores. Así, términos como «Iglesia»,<br />

«eucaristía», «justificación», «sacramento», etc.,<br />

están en la raíz de encontradas interpretaciones,<br />

porque no existe una definición común, susceptible<br />

de ser asumida por todos.<br />

Estamos apuntando a uno de los problemas<br />

mayores de la hermenéutica y, seguramente, de la<br />

cultura misma. Y estamos apuntando, a la vez, a un<br />

problema básico en nuestro estudio que afrontamos<br />

desde el primer capítulo. Nos referimos, como es<br />

obvio, al tema de la definición de la palabra «secta».<br />

La cuestión del término «secta» es susceptible<br />

de tantas lecturas que se hace tremendamente ar­<br />

1<br />

La difícil cuestión<br />

de la terminología<br />

duo llegar a una definición que sea asumida por<br />

todos de manera unánime. Algún autor ha visto,<br />

incluso, la imposibilidad de definir la «secta», al<br />

menos desde el punto de vista jurídico. Jacques<br />

Robert se pregunta:<br />

«¿Existe una definición jurídica de la secta?... Muchos<br />

puntos de vista se han presentado, pero yo concluiría diciendo<br />

que no existe una noción jurídica precisa. Algunos han<br />

utilizado como primer criterio el pequeño número de adeptos,<br />

pero esto es una hipocresía en una época en la que no solamente<br />

<strong>las</strong> <strong>sectas</strong> son muy numerosas, sino donde se encomia<br />

la protección de <strong>las</strong> minorías. Ser minoría no es nada degradante;<br />

además existen Iglesias- la Iglesia bautista, por ejemplo-<br />

donde se prefieren congregaciones de pequeños grupos<br />

y no de multitudes. Por el contrario, los Testigos de Jchová<br />

tienen una importancia de efectivos superiores a menudo al<br />

de ciertas Iglesias protestantes evangélicas independientes,<br />

que representan por tanto a la ortodoxia calvinista... Algunos<br />

han propuesto entonces un segundo criterio: la excentricidad<br />

de <strong>las</strong> doctrinas; pero ¿dónde comienza dicha excentricidad?<br />

Si debe ser definida en relación con la razón, ninguna<br />

religión -incluso la monoteísta- escapa de pasar por ser una<br />

secta. Porque toda fe religiosa es irracional y mística. Se ha<br />

avanzado un tercer criterio: la novedad. Pero nosotros hemos<br />

visto que existe una continuidad entre <strong>las</strong> antiguas creencias<br />

y los Nuevos Movimientos. Además, resulta demasiado fácil<br />

considerar lo nuevo como algo herético, disidente o reformado...<br />

Algunos han sugerido un cuarto criterio: su origen ex-<br />

PARA CONOCER LAS SECTAS 9

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!