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zontal; es el plano formado por la cara inferior
de la reja y del dental, así como por el borde
inferior de la vertedera, que actúan sobre el
fondo del surco; el corte de la cuña, que es horizontal
y en el mismo plano, no representa la
parte (cortante de la reja. La otra cuña, que
denomina posterior, está colocada en ángulo
recto con la primera, y es la que en los arados
ordinarios forma la cara izquierda del cuerpo
del instrumento. El corte de la segunda cuña
se encuentra colocado en un plano vertical á
la garganta del arado.
Con respecto al punto en que debe colocarse
el centro de la resistencia que experimenta
el arado, deduce : 1.° Que la línea de resistencia
se encuentra en el eje mismo de la cuña,
si obra dividiendo en dos partes iguales el ángulo
formado por ella.—2.° Que se halla en el
plano de la cara de la cuña paralela á la línea
de movimiento, pasando siempre por el corte.
3.° Que en la acción de la cuña en general, es
indiferente que la potencia se aplique á la base
por percusión ó por presión, ó bien al corte
por una fuerza de tracción; pero que en todo
caso, y para que produzca el mayor efecto posible,
es necesario que se aplique en la dirección
de la línea de resistencia.—4.° La línea de
resistencia de la cuña anterior, será una línea
recta colocada en el fondo del surco, en medio
de su anchura y paralela á su dirección. La de
la cuña posterior, será uña recta colocada sobre
la cara izquierda del cuerpo del arado, á
la mitad de la profundidad del surco y paralela
á su dirección. Si se imagina un plano que
pase por estas dos líneas paralelas entre sí, la
resultante de las dos líneas de resistencia, se
encontrará en este plano á igual distancia de
las dos líneas. El punto en que esta resultante
encuentre á la superficie superior de la reja y
de la vertedera, será el punto en que debe
considerarse acumulada la resistencia que experimenta
el cuerpo del arado en su acción.
Infiérese de aquí que, para que la fuerza
motriz se empleara en el arado de la manera
más útil, sería preciso: 1.° Que obrara tirando
adelante ó empujando por detrás, en la prolongación
de la línea de resistencia que se encuentra
debajo de la superficie del suelo y paralela
á esta superficie.—2.° Que el motor se
encontrara igualmente debajo de la superficie
del suelo, á la misma profundidad que la línea
de resistencia.—Y 3." Que no pudiendo encontrarse
el motor en la prolongación de esta
línea, hallándose á cierta altura, resulta un
tiro oblicuo, semejante al que experimenta una
barca tirada desde la orilla de un río por animales
, lo cual origina una descomposición de
la fuerza motriz, y por consiguiente, una pérdida
considerable de fuerza, inevitable por desgracia
, sea cual fuere la disposición del arado.
De estas observaciones se desprende :
1.° Que cuanto más baja se halle colocada la
parte del cuerpo de los animales por la cual se
hace el tiro, hay menos pérdidas de fuerzas,
puesto que el ángulo que forma con el horizonte
la línea de tiro, tiene menos abertura.—
2.° Que el tiro se ejecuta con más ventaja con
animales de poca alzada.—Y 3.° Que el tiro
de los bueyes por medio del yugo, es superior,
bajo este concepto, al de los caballos.
Resistencias opuestas por la tierra al movimiento
de las diferentes piezas del arado.—
Muchas son las experiencias practicadas con
el objeto de averiguar la dirección, punto de
apoyo é intensidad de las resistencias que, en
contacto con la tierra, experimentan la cuchilla,
la reja, la vertedera y el dental, dificultando
la marcha del arado. Sin entrar en el
examen de los ensayos dinamométricos, ni en
cálculos matemáticos, que á nada conducirían
por otra parte, siendo como son tau variables
los elementos en que se apoyan, y que hacen
variar los resultados obtenidos hasta para una
misma clase de instrumentos, sólo consignaremos
los términos medios, que, como datos
prácticos, son el resultado de numerosos experimentos.
La disminución del espesor de la cuchilla
puede disminuir en una cuarta parte el trabajo
resistente, y el aumento de espesor, aumentar
el trabajo de un 20 á 27 por 100; ó en
otros términos, según que las cuchillas sean
delgadas ó gruesas en los límites de la práctica
de una buena ejecución, la resistencia que
presentan varía de un 34 á un 61 por 100. En
una tierra un poco seca, el corte de un metro
cuadrado exige 617 kilográmetros con cuchillas
delgadas, y hasta 840 con cuchillas de mucho
espesor. En una tierra demasiado seca, el
corte de un metro cuadrado exige 836 kilográmetros
y 1.030, con cuchillas delgada y gruesa
respectivamente.
El trabajo necesario por hectárea de labor
para el corte vertical de la cuchilla, es de
1.936.620 kilográmetros cuando es 1,42 la relación
que existe entre la anchura y la profundidad
de la labor, y de 1.350.000 kilográmetros
cuando es 2 esa relación. Bajo el punto
de vista del corte vertical, por consiguiente,
conviene más tomar una faja de tierra más
ancha, por una profundidad determinada. En
los límites posibles, entre 1,42 y 2, el trabajo
del corte vertical puede variar más de 43 por
100; y como este trabajo se calcula que es igual
á las 16,8 centésimas partes del trabajo total
exigido por la labor, se deduce que la relación
2 (anchura doble de la profundidad) economiza
los 7,3 centímetros de trabajo, comparada
con la que exige la relación 1,42.
La resistencia que experimenta la reja, se
ha calculado de la misma manera que la de la
cuchilla, teniendo en cuenta además la presión
que ejerce la tierra sobre su cara. A igualdad
de inclinación de la cara que trabaja con relación
al plano descrito por el corte, la reja
exige mayor tracción que la cuchilla, ó más
trabajo por metro cuadrado. En el caso más
ordinario, la reja presenta una inclinación de
unos 12°,50', pudiéndose fijar como tracción
necesaria, la que exige una cuchilla ordinaria,
69,3 kilogramos por una anchura de corte
igual á Om ,14, ó por metro, 495 kilográmetros