l - Repositorio Gestion Documental v.03

AER — 524 ARR
Crea para la familia la patria doméstica, con
todas las simpatías que se unen á ella en lo
presente, y todas las risueñas perspectivas
que le abre para el porvenir.
Por no extender exageradamente este artículo,
reservamos el ampliar las noticias recogidas,
en los artículos Casas de campo y
Construcciones rurales, donde describiremos
algunos modelos, incluyendo los grabados
convenientes.
Por último, aconsejamos consulten las dos
obras siguientes: Essai on the construction of
eoltages, de Smith; Traite de constructions rurales,
de Louis Bouchard Huzard.
M. López Martínez.
ARRABILLADO.—Califícase de esta suerte
el trigo que presenta de color obscuro ó
con rabillo la extremidad, á consecuencia de
haberse' adherido á ella el polvillo del tizón
que tienen otros granos. El trigo arrabillado
produce una harina morena y un pan algo
gris. De ahí que disminuya el precio de los
trigos que se presentan en el mercado con ese
aspecto. En el artículo que consagramos á hablar
del trigo, trataremos de esa y otras enfermedades.
ARRACACHA (AgriculturaJ.—Arracliaca,
y también Sacliarrocacha y Aracacia,
es un género de plantas de la familia de las
umbelíferas, tribu de las ammíneas, que comprende
muchas plantas de raíz tuberosa, hojas
penicortadas, con pecíolo envolvente;
flores polígamas, dispuestas en umbelas terminales
y de hojas opuestas, con involucro
cerrado por un pequeño número de foliólas
cuando existe, é involucela de tres hojitas;
las umbelas tienen flores hermafroditas en los
bordes, y masculinas ó neutras en el centro.
Viven esas plantas en la América meridional,
y forman únicamente dos especies, una
de las cuales es comestible, la Arracacha esculenta;
A. xanthóriza, Bauer.; Conium arracacha,
Hock. Ese nombre de arracacha es el
empleado en Colombia, de donde es originaria
la planta; se ha llamado también apio por parecerse
algo á esta hortaliza, si bien en realidad
presenta más semejanza con la chirivía.
Las raíces de la arracacha, tuberosas, como
hemos dicho, son vivaces y carnosas, y están
divididas en varias ramas espesas que en suelos
adecuados llegan á adquirir el grosor de
un cuerno de vaca. Del cuello de la planta
brotan algunos tallos que sostienen hojas grandes,
con el limbo dividido en numerosos segmentos;
pecíolo acanalado y muy abierto en
la base. Rara vez se recolecta la semilla, porque
la planta se propaga por medio de las raíces.
Las variedades se distinguen principalmente
por el color de las raíces, que pueden
ser blancas, amarillas ó purpurinas.
Esta planta comestible se cultiva en Venezuela,
Colombia, en casi todas las faldas y en
los valles de los Andes, donde la temperatura
oscila entre 15 y 25° centígrados. En los sitios
demasiado cálidos brotan los tallos con demasiado
vigor, las raíces se quedan raquíticas y
su sabor es menos agradable, cuando no desaparece
por completo. Como regla general,
puede establecerse que la arracacha prospera
en las mismas condiciones que la patata. Reclama
un suelo húmedo, rico y profundo, para
que la raíz pueda adquirir un gran desarrollo.
Se propaga con los cuellos de la raíz en
cualquier estación, siempre que sea lluviosa,
cortando circularmente, antes que se manifieste
el tallo, el eje ó masa carnosa principal inmediata
al cuello, cuidando de que la parte
segregada contenga los pecíolos, en cuyas axilas
, por punto general, hay un ojo ó botón;
se cortan esos pecíolos en trozos de 16 centímetros
próximamente, y después se dividen
los trozos de la raíz en pedazos, cada uno de
los cuales ha de tener por lo menos una yema.
Los mejores de esos fragmentos son los destinados
á ser plantados inmediatamente, ó después
de haber transcurrido algún tiempo,
colocándolos en agujeros separados entre sí
por espacios de 60 centímetros, á una profundidad
de 6 nada más para que no se pudran
, y cubriéndolas con un puñadito de tierra.
La planta sólo exige dos binas ó escardas
durante el tiempo que emplea en la vegetación.
A los tres ó cuatro meses de plantada la
hortaliza, sus raíces se hallan ya en condiciones
de ser destinadas á los usos culinarios, si
bien durante algún tiempo continúan creciendo,
hasta adquirir proporciones monstruosas
sin perder su buen gusto. Siendo la temperatura
media de 22 á 25° centígrados, en seis ó
siete meses acaba la planta el período de su
desenvolvimiento, reconociéndose que ha terminado
éste por el tamaño y el color amarillento
de las hojas más externas. Si no se la
arranca inmediatamente, la planta arroja tallos
que florecen á los ocho ó nueve meses de
plantada aquélla, y muchas raíces se pudren.
Como no se da tregua á que se produzca esa
transformación, los tablares de esa hortaliza
presentan generalmente el mismo aspecto que
los de apio ó zanahorias. Se arranca en la misma
forma que ésta, y entonces la parte que
se hallaba al nivel del suelo presenta una masa
carnosa irregular, redondeada, de un decímetro
de diámetro por lo común, amarillenta
ó blanquizca, cubierta por una epidermis muy
delgada, y coronada por los pecíolos que constituyen
la cepa.
Los pecíolos más exteriores presentan ya
unas hinchazones carnosas en su base y se
separan fácilmente de los demás. La cepa, á
los lados y en la parte inferior, suele llevar
varios ejes secundarios fusiformes, análogos
en estructura, pero desiguales y divergentes,
de 15 á 25 centímetros de longitud por 5
de diámetro próximamente, y que ofrecen
poca parte cabelluda, sobre todo en los terrenos
buenos. El conjunto del eje y de las
ramificaciones presenta una masa de forma
singular, cuyo peso total por término medio
suele ser de 2 kilogramos, siendo de 41,250 el
de una hectárea cuando la masa tuberosa está