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Revista Artística y Literaria Año VIII. No.1 enero-abril 2007 - Atenas

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importantes del idioma español en el siglo x x. Desde que más<br />

o menos entendí lo que significaba la palabra poesía, traté<br />

de imitar sus versos (sobre todo los de Fina) con deplorables<br />

resultados. Mis primeros cuadernos están plagados de citas<br />

suyas y por todas partes hay homenajes a quienes, para mí,<br />

eran maestros, paradigmas. Gracias a Cintio y Fina aquel<br />

viaje fueron muchos viajes. Ellos me enseñaron una España<br />

por la que ya era imposible andar (la que ellos compartieron<br />

con Juan Ramón Jiménez, con María Zambrano y con muchos<br />

intelectuales que deambularon por el Caribe durante la<br />

Guerra Civil). No olvido la frase con la que Fina combatió<br />

el miedo que le produjo el descenso de la aeronave sobre<br />

R<br />

eza canción: Yo sé bien que estoy afuera...Yo no, yo estoy<br />

ADENTRO. Tampoco tengo trono pero sí reino. Reino sobre<br />

el puente. Soy el puente. Soy el puente que ambiciona unir<br />

las orillas...<br />

No se busca, se encuentra. Así, he encontrado en cada viaje<br />

fuera de la isla la vida que no he elegido vivir. Cada viaje es<br />

un baile sobre el abismo, un romance con la imposibilidad. Y<br />

siento una especie de piedad. Piedad conmigo misma. Piedad<br />

de la vida que elegí y piedad de la que no he elegido. Cada<br />

encuentro con quienes están AFUERA es un hueso que dejo<br />

en la boca del perro y que el perro roe sin miramientos. Por<br />

eso, pienso cada día en la comida que no como, la esquina<br />

que no recorro y el idioma que no hablo, con la misma<br />

naturalidad con la que pienso en todo lo que sí está en mí de<br />

lunes a domingo. Vivo ADENTRO, en un extraño país, en el<br />

puente. Y provinciana como soy, Matanzas, la ciudad en la que<br />

parezco vivir, la ciudad destruida, me persigue con rabia. Veo<br />

en los aeropuertos a mis vecinos que nunca han batido alas<br />

fuera de la aldea. Siempre esa muchedumbre va conmigo, van<br />

los poetas y va la chusma diligente. Nunca viajo sola aunque<br />

parezca. Siempre estoy lejos y cerca. En la bodega, en la cola<br />

del mercado estoy en los viñedos que me mostraron el día<br />

que fui a conocer las cataratas del Niágara. Cuando compro<br />

papas vulgares -donde se mezclan las podridas con las sanas-<br />

en verdad estoy en la cola de las uvas, esperando las gracias<br />

de la vid. Y eso sucede también en dirección contraria. Subo<br />

los Picos de Europa soñando el Turquino (el pico y el helado,<br />

evitando que ambos se derritan en mi memoria). Y en lo alto<br />

de los Picos de Europa, envuelta en muchos abrigos lloro y sé<br />

que sigo ADENTRO, que soy el puente. Me construyo ante<br />

los ojos de todos los viajeros y ante los ojos de los inmóviles.<br />

Ante mis propios ojos me construyo. Soy el camino sobre las<br />

aguas. La estela entre un cielo y otro. El sendero entre el cielo<br />

sobre mi cabeza y el cielo sobre la tuya. El sendero entre el<br />

2<br />

Madrid: “¡Ya se ven los chopos! –dijo con la vista fija en una<br />

colina–, ¡ya se ven los chopos de Juan Ramón!”.<br />

Hace ya cinco años que no veo a Cintio y a Fina. Acabo de<br />

recibir el último número de la revista La Isla Infinita, que él<br />

edita en La Habana, y en ella incluyó cinco textos míos. Me<br />

han dicho que en la presentación de la publicación habló<br />

de nuestra amistad y que exageró un poco al referirse a la<br />

calidad de mis poemitas. Yo también los extraño, Cintio, y<br />

culpo por ello al agua. A lo mejor no te gusta que resuelva<br />

esto con un verso de Virgilio, sé que preferirías hablar de<br />

Lezama; pero es que ♣es<br />

eso, la maldita circunstancia del agua<br />

por todas partes…<br />

Adentro la u r a ru í z mo n t e s<br />

Carta a Lupe –desde ADENTRO- atravesando el mar y la nieve...<br />

Para Lupe Vento, en Montreal, en Matanzas.<br />

cielo de mi boca y la tuya...Y por ese camino vendrás para<br />

dejar de ser la exiliada del mar. Para que el mar de Matanzas<br />

te devuelva la inocencia. Soy el puente, tabla a tabla me he<br />

construido, sola. Yendo y viniendo, partiendo y regresando.<br />

Mirando a los de AFUERA dolerse, amar o renegar. Ahora me<br />

sigo construyendo mientras te escucho decirme quedamente<br />

que en Quebec amaste la nieve porque tenía un parecido con<br />

el mar. Y entorno los ojos para que no sepas que esa es la<br />

metáfora más dolorosa que he escuchado, para que no veas<br />

que aún en mi cansancio sigo colocando tablas, tendiéndome<br />

a todo lo largo. Estoy ADENTRO y asisto a mi propio Islario.<br />

He tolerado todas las ausencias, resistido las partidas.<br />

Mis tablas se han resistido a toda tentación porque no he<br />

creído que lo fueran. Eran palabras, solo palabras... Eso sí,<br />

ADENTRO, he trazado mis propias calles y callejones. El<br />

rincón donde estaba la planta de violeta se llama Calle de<br />

la Parra. La esquina donde descansan los libros se nombra<br />

Callejón de Hesse. Aunque este callejón cambie de nombres:<br />

los lunes es el Callejón de Hesse. Los martes, Calle de Tristán.<br />

Los miércoles, la Esquina de la campana de cristal. Y así<br />

los demás días de la semana. De esta manera puedo andar<br />

calles enteras hasta el agotamiento. A la zona de los discos le<br />

llamo Café de Les Choristes. Ando de la Calle del Insomnio, al<br />

Callejón de Hesse. De la Calle de la Vela a la Calle de Tristán.<br />

Las cartas, las palabras siguen llegando a la misma dirección.<br />

Sigo estando ADENTRO y todos lo saben, tú lo sabes...Soy<br />

el puente y me tiendo a lo largo para que pases, transcurras.<br />

Para que regreses y vuelva contigo todo lo que un día fue (se<br />

fue) y está por regresar, vivo o muerto, desde la magnificencia<br />

o el laberinto. Tablas sueltas, tablas marineras, tripulantes,<br />

valijas: tablas cuerpos, que se unirán a las mías, para ser,<br />

volver a ser cualquier otra cosa...<br />

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