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Revista Veterinaria Zacatecas 2004 - UAZ

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Lic Alfredo Femat Bañuelos<br />

Rector de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong><br />

M C Francisco Javier Domínguez Garay<br />

Secretario General<br />

M en C Arturo Rivera Trejo<br />

Secretario Académico<br />

C P Emilio Morales Vera<br />

Secretario Administrativo<br />

M en C Jesús Octavio Enríquez Rivera<br />

Director de la Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia<br />

M V Z Juan Manuel Ramos Bugarin<br />

Responsable del Programa de Licenciatura<br />

Ph D José Manuel Silva Ramos<br />

Responsable del Programa de Doctorado<br />

Dr en C Francisco Javier Escobar Medina<br />

Responsable del Programa de Maestría y Editor de la <strong>Revista</strong> <strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong><br />

Dr en C Rómulo Bañuelos Valenzuela<br />

Coordinador de Investigación<br />

M en C J Jesús Gabriel Ortiz López<br />

Secretario Administrativo<br />

M en C Francisco Flores Sandoval<br />

Director de la <strong>Revista</strong> <strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong>


Aréchiga Flores, Carlos Fernando PhD<br />

Bañuelos Valenzuela, Rómulo Dr en C<br />

De la Colina Flores, Federico M en C<br />

Comité Editorial<br />

Echavarria Chairez, Francisco Guadalupe Ph D<br />

Gallegos Sánchez, Jaime Dr<br />

Grajales Lombana, Henry Dr en C<br />

Góngora Orjuela, Agustín Dr en C<br />

Meza Herrera, César PhD<br />

Ocampo Barragán, Ana María M en C<br />

Pescador Salas, Nazario Ph D<br />

Rodríguez Frausto, Heriberto M en C<br />

Rodríguez Tenorio, Daniel M en C<br />

Silva Ramos, José Manuel Ph D<br />

Urrutia Morales, Jorge Dr en C<br />

Viramontes Martínez, Francisco<br />

Unidad Académica de Medicina<br />

<strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia, Universidad<br />

Autónoma de <strong>Zacatecas</strong> (UAMVZ-<br />

<strong>UAZ</strong>)<br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

INIFAP - <strong>Zacatecas</strong><br />

Colegio de Postgraduados<br />

Facultad de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y<br />

Zootecnia, Universidad Nacional de<br />

Colombia<br />

Facultad de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y<br />

Zootecnia, Universidad de los Llanos,<br />

Colombia<br />

Unidad Regional Universitaria de Zonas<br />

Áridas, Universidad Autónoma de<br />

Chapingo<br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

Facultad de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y<br />

Zootecnia, Universidad Autónoma del<br />

Estado de México<br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong><br />

Campo Experimental San Luis. INIFAP<br />

UAMVZ-<strong>UAZ</strong>


Nuestra Portada<br />

Catedral, Mercado González Ortega y Cerro de la Bufa, <strong>Zacatecas</strong>, Zac.<br />

Fotografía: Salvador Romo Gallardo, tel 8 99 24 29, e-mail jerg14@hotmail.com<br />

<strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> es una publicación anual de la Unidad Académica de Medicina<br />

<strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong>. ISSN: 1870-5774. Sólo<br />

se autoriza la reproducción de artículos en los casos que se cite la fuente.<br />

Correspondencia dirigirla a: <strong>Revista</strong> <strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong>. <strong>Revista</strong> de la Unidad<br />

Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de<br />

<strong>Zacatecas</strong>. Carretera Panamericana, tramo <strong>Zacatecas</strong>-Fresnillo Km 31.5. Apartados Postales<br />

9 y 11, Calera de Víctor Rosales, Zac. CP 98 500. Teléfono 01 (478) 9 85 12 55. Fax: 01<br />

(478) 9 85 02 02. E-mail: vetuaz@cantera.reduaz.mx. URL www.uaz.edu.mx/uamvz<br />

Precio por cada ejemplar $25.00<br />

Distribución: Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad<br />

Autónoma de <strong>Zacatecas</strong>.


Artículos de revisión<br />

Review articles<br />

CONTENIDO<br />

Tamaño de la camada en la cerda<br />

Litter size in sows<br />

Francisco Javier Escobar Medina……………………………………………..<br />

Artículos científicos<br />

Original research articles<br />

Relación entre suplementación alimenticia, condición corporal y respuesta al<br />

efecto macho en cabras criollas en anestro<br />

Relationship between feeding supplementation, body condition, and male<br />

effect respond in anestrus Creole goats<br />

Héctor Gámez-Vázquez, Jorge Urrutia-Morales, Martha Olivia Díaz-Gómez,<br />

César Augusto Rosales-Nieto, Bertha Margarita Ramírez-Andrade………….<br />

Estacionalidad reproductiva en cabras Saanen X Nubia<br />

Reproductive seasonality in Saanen X Nubia goats<br />

Raquel Roque-Alfaro, Romana Melba Rincón-Delgado, Sergio Méndez-de<br />

Lara, Carlos Fernando Aréchiga-Flores, Francisco Javier Escobar-Medina….<br />

Tamaño de la camada en cerdas fertilizadas con inseminación artificial y<br />

monta natural<br />

Litter size of naturally breed and artificially inseminated sows<br />

Luis Alberto Ruvalcaba-Ramírez, Fernando de la Puente-Ocampo, Carlos<br />

Fernando Aréchiga-Flores, Francisco Javier Escobar-Medina………………..<br />

Ganancia de peso en ovinos tratados con zeranol<br />

Weight gain in sheep treated with zeranol<br />

María de los Angeles Gómez-Armendáriz, Juan Ignacio Dávila-Félix,<br />

Francisco Javier Escobar-Medina……………………………………………..<br />

Ganancia de peso de becerros y novillos tratados con Synovex M y Zeramec<br />

Weight gain in yearling calves and steers treated with Synovex M and<br />

Zeramec<br />

Audemio Ismael Palomino-Moreno, Ricaurte Valentín Solís-Cano, Juan<br />

Ignacio Dávila-Félix, Francisco Javier Escobar-Medina……………………...<br />

137-146<br />

147-152<br />

153-158<br />

159-166<br />

167-172<br />

173-178


TAMAÑO DE LA CAMADA EN LA CERDA<br />

Francisco Javier Escobar Medina<br />

Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong><br />

E-mail: fescobar@cantera.reduaz.mx<br />

RESUMEN<br />

En el presente estudio se discuten los factores que influyen sobre el tamaño de la camada en las<br />

cerdas. El tamaño de la camada se relaciona con la incidencia y la sincronización de la ovulación y con la<br />

capacidad uterina. Las cerdas con mayor reclutamiento folicular y menor incidencia de atresia presentan<br />

mayor tasa de ovulación. En la cerda, la ovulación no se presenta de manera instantánea, algunos ovocitos se<br />

ovulan y se fertilizan antes que otros; por lo tanto, se presentan variaciones en el desarrollo embrionario. Los<br />

embriones procedentes de las ovulaciones tardías generalmente no sobreviven. En el reconocimiento de la<br />

gestación, el medio uterino no es favorable para los embriones menos desarrollados. La supervivencia<br />

embrionaria se podría incrementar con la sincronización de la ovulación. En algunos trabajos, la<br />

administración de gonadotropinas antes de la inseminación, ha incrementado el tamaño de la camada,<br />

probablemente a través de la sincronización de la ovulación. La capacidad uterina se relaciona con el tamaño<br />

de los productos y sus placentas. Las razas de cerdos más prolíficas desarrollan productos de menor tamaño.<br />

INTRODUCCIÓN<br />

El tamaño de la camada en la cerda<br />

depende de la incidencia de ovulaciones 1 y la<br />

supervivencia embrionaria 2 y fetal. 3 Algunos de<br />

los productos que se momifican durante la<br />

gestación 4 y otros mueren al nacimiento. 5<br />

La incidencia de ovulaciones puede<br />

variar de acuerdo a la raza del animal y el número<br />

de partos de la cerda. Las razas de cerdas más<br />

prolíficas presentan mayor cantidad de<br />

ovulaciones que las hembras con menor tamaño<br />

de la camada. 1 La incidencia de ovulaciones es<br />

menor en el primer parto, se incrementa<br />

paulatinamente hasta llegar a su máximo nivel<br />

entre el tercer y quinto parto, y posteriormente<br />

permanece constante o se reduce ligeramente. 6<br />

La supervivencia embrionaria depende<br />

del desarrollo de cada producto en el momento en<br />

que se realiza el reconocimiento materno de la<br />

gestación, generalmente sobreviven y se<br />

implantan los más desarrollados. 7 La variación en<br />

el desarrollo se debe a la variación que se presenta<br />

naturalmente en el momento de la ovulación. 8<br />

Algunos estudios se han realizado para sincronizar<br />

la ovulación y con esto tratar de incrementar el<br />

tamaño de la camada. 9<br />

Palabras clave: Tamaño de la camada, lechones, cerdas<br />

<strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 137-146<br />

La supervivencia fetal se relaciona con el<br />

tamaño de los productos; las razas de cerdas más<br />

prolíficas desarrollan productos de menor tamaño,<br />

lo que permite aumentar la capacidad uterina para<br />

mantenerlos viables hasta el parto. 3 El<br />

conocimiento de la fisiología durante la gestación<br />

de la cerda permite buscar opciones para intentar<br />

aumentar el tamaño de la camada y, como<br />

consecuencia, incrementar la productividad en<br />

esta especie. En el presente trabajo se discuten los<br />

factores que influyen en el tamaño de la camada<br />

en la cerda; además, se analizan algunos<br />

tratamientos, como la sincronización de la<br />

ovulación, que se han llevado a cabo con el fin de<br />

aumentar la prolificidad.<br />

CRECIMIENTO FOLICULAR<br />

La incidencia de ovulaciones se relaciona<br />

con la eficiencia del crecimiento folicular, en otras<br />

palabras, con el incremento en el reclutamiento<br />

folicular y la capacidad para mantener su<br />

crecimiento (sin sufrir el proceso de atresia) y, por<br />

consiguiente, terminar en la ovulación.<br />

El folículo ovárico se encarga de<br />

proporcionarle al ovocito (célula germinal<br />

femenina) las condiciones adecuadas para su<br />

desarrollo hasta que adquiera la capacidad de


unirse al espermatozoide. 10 Una hembra nace con<br />

una cantidad determinada de ovocitos en estado de<br />

reposo, en la etapa de diploteno de la profase<br />

meiotica. 11 Por ejemplo, en los ovarios de la cerda<br />

de 10 días de edad se han encontrado 500 000<br />

ovocitos, los cuales se involucran en el proceso de<br />

maduración conforme transcurra la vida<br />

reproductiva de la hembra. 12 No todos inician su<br />

desarrollo al mismo tiempo, algunos lo hacen<br />

mientras que el resto, que constituyen la mayoría,<br />

permanecen en estado de reposo. Característica<br />

que permite a los mamíferos mantener su<br />

capacidad reproductiva durante varios años. 13<br />

Los ovocitos en el estado de reposo se<br />

encuentran rodeados únicamente por una capa de<br />

células de la granulosa aplanadas, lo que<br />

constituye el folículo primordial. El folículo<br />

primordial abandona la etapa de reposo e inicia su<br />

desarrollo por medio de un mecanismo<br />

independiente a la acción de las gonadotropinas,<br />

donde las células aplanadas se transforman en<br />

cúbicas y comienzan a dividirse por mitosis.<br />

Además, se inicia la diferenciación de la teca<br />

interna, el folículo en esta etapa se conoce como<br />

primario. Conforme se lleva a cabo la división de<br />

las células de la granulosa se incrementa la<br />

cantidad de capas celulares que rodean al ovocito<br />

lo que constituye el folículo secundario. 14,15<br />

Con el incremento de capas de células de<br />

la granulosa alrededor del ovocito se empieza a<br />

infiltrar líquido entre ellas, hasta la constitución<br />

de un antro común; el folículo ahora se conoce<br />

como antral. 16 La hormona folículo estimulante<br />

influye en la formación del antro folicular y en el<br />

desarrollo del folículo antral. 17 El crecimiento de<br />

los folículos antrales se debe a la proliferación de<br />

las células de la granulosa y al incremento del<br />

tamaño del antro. 14,15 En la cerda, el período<br />

comprendido entre el folículo primario al antral<br />

transcurre durante 84 días, y el crecimiento<br />

subsiguiente hasta llevarlo a preovulatorio (10<br />

mm de diámetro) se realiza en 19 días. 18 Por lo<br />

tanto, la velocidad de crecimiento en los folículos<br />

entre 3 y 10 mm de diámetro se ha estimado en<br />

1.14 mm/día. 19<br />

En la cerda, el reclutamiento folicular, la<br />

estimulación de folículos antrales para que<br />

continúen con su crecimiento y posteriormente se<br />

seleccionen hasta llegar a la ovulación, 13 se<br />

presenta entre los días 14 y 16 del ciclo estral o<br />

algunos días después del destete; 20-23 el día 16 del<br />

ciclo, en los ovarios de la cerda se han encontrado<br />

de 40 a 50 folículos de 2 a 6 mm de diámetro, 15 de<br />

los cuales, alrededor del 30 al 40% se seleccionan<br />

F J Escobar-Medina<br />

138<br />

para que continúen con su crecimiento hasta la<br />

maduración final y la ovulación. 15,19 Los folículos<br />

restantes se pierden por medio de un proceso de<br />

atresia. Todos los folículos no seleccionados<br />

presentan atresia, y como la selección es un<br />

proceso continuo, incluso momentos antes de la<br />

ovulación, la atresia se puede presentar durante<br />

toda la fase folicular. 15,23,24 Por lo tanto, la<br />

cantidad de folículos que llegan a ovular depende<br />

del número de folículos reclutados y de su<br />

habilidad para continuar con su crecimiento sin<br />

presentar atresia. Las razas de cerdas con mayor<br />

incidencia de ovulaciones presentan mayor<br />

reclutamiento folicular y menor atresia; 25-28 a nivel<br />

individual, la concentración sanguínea de<br />

hormona folículo estimulante es más elevada en<br />

las hembras con más ovulaciones. 29,30 Las razas de<br />

cerdas más prolíficas presentan mayor incidencia<br />

de ovulaciones que las hembras con menor<br />

tamaño de la camada. 1<br />

Con base en lo anterior, el incremento del<br />

reclutamiento folicular se podría realizar por<br />

medio de la aplicación de la hormona folículo<br />

estimulante u otra de acción similar como la<br />

gonadotropina coriónica equina (eCG), y con esto<br />

aumentar la incidencia de ovulaciones. En efecto,<br />

la aplicación de estas dos hormonas en los días 15<br />

y 16 del ciclo estral ha incrementado las<br />

ovulaciones tanto en ciclo natural 31 como<br />

sincronizado. 31,32 El control en la secreción de<br />

hormona folículo estimulante también ha<br />

repercutido sobre la población folicular. Por<br />

ejemplo, la aplicación de líquido folicular porcino<br />

redujo la cantidad de folículos pequeños,<br />

medianos y grandes, lo cual probablemente se<br />

debió a la inhibina presente en este líquido. 33 En<br />

otro estudio, la población de folículos medianos y<br />

grandes se restauró parcialmente en cerdas<br />

tratadas inicialmente con líquido folicular y<br />

posteriormente con hormona folículo<br />

estimulante. 34,35 La inmunización activa contra<br />

inhibina incrementó el 35% 36 o 39% 37 de<br />

ovulaciones en cerdas jóvenes. La aplicación de<br />

andrógenos también ha elevado la incidencia de<br />

ovulaciones en la cerda. En un estudio, la<br />

administración de testosterona en los días 17 y 18<br />

del ciclo estral aumentó la cantidad de folículos<br />

que ovularon en cerdas jóvenes. 38 Lo mismo<br />

ocurrió en las cerdas tratadas con<br />

dihidrotestosterona del día 13 al estro (toda la fase<br />

folicular), del 13 al 16 (reclutamiento folicular) y<br />

del 17 al estro (período posterior al reclutamiento)<br />

en cerdas jóvenes. 39 Receptores para andrógenos


se han encontrado durante el crecimiento folicular<br />

de la cerda. 40<br />

SUPERVIVENCIA EMBRIONARIA<br />

La mortalidad embrionaria es muy<br />

elevada en la cerda, el 17% se presenta durante los<br />

primeros 18 días de la gestación 41 y se incrementa<br />

a 33% 6,42 o más 43 en el día 25.<br />

La mortalidad embrionaria en la cerda se<br />

relaciona con la variación en la sincronización del<br />

desarrollo y el grado de elongación de los<br />

embriones.<br />

La ausencia del desarrollo embrionario<br />

uniforme se debe a la manera como se realiza la<br />

ovulación en la cerda; 8 la ovulación no se lleva a<br />

cabo en forma instantánea, existe un intervalo de<br />

tiempo entre la expulsión del primer óvulo y el<br />

último; este intervalo puede ser de 1 a 4 horas, 44 o<br />

hasta 6 horas 45 de duración. Por lo tanto, la<br />

fertilización se presenta de manera heterogénea,<br />

los ovocitos expulsados al principio del período<br />

ovulatorio se fertilizaran primero y después los<br />

emitidos al final; el intervalo entre la ovulación y<br />

la fertilización parece ser constante; 46 como<br />

consecuencia, en un tiempo determinado<br />

embriones de diferente grado de desarrollo<br />

comparten el espacio uterino. 42,45 En el día 12 de<br />

la gestación se han encontrado embriones<br />

esféricos, ovoides, tubulares y<br />

filamentosos. 7,46,47,48<br />

En la cerda, los embriones en el cuerno<br />

uterino de la madre producen estrógenos para<br />

realizar el reconocimiento materno de la<br />

gestación. 49-53 Los estrógenos impiden que la<br />

prostaglandina F2α abandone el útero, como<br />

consecuencia esta hormona no se puede trasladar<br />

al ovario para destruir los cuerpos lúteos; 54,55 por<br />

lo tanto, continúa la producción de progesterona<br />

de origen ovárico y se mantiene la gestación. La<br />

síntesis de estradiol se incrementa conforme<br />

aumenta el desarrollo embrionario, hecho por el<br />

cual los embriones procedentes de ovulaciones<br />

tempranas inician antes la síntesis de estradiol que<br />

los descendientes de ovulaciones tardías. 48,56-58 El<br />

estradiol y la continua secreción de progesterona<br />

ovárica 59 incrementan la concentración<br />

intraluminal de fosfatasa ácida, calcio y proteínas<br />

totales, entre otros productos, 60-65 lo que forma un<br />

ambiente uterino desfavorable para los embriones<br />

más jóvenes, los cuales detienen su desarrollo y<br />

generalmente mueren. 7,58,66-68 Los embriones con<br />

menor desarrollo sobreviven adecuadamente<br />

Tamaño de la camada en la cerda<br />

139<br />

después de su transferencia a otras hembras donde<br />

se encuentren ausentes los más desarrollados. 67-69<br />

Es probable que la presencia de<br />

embriones con mayor grado de elongación<br />

(transición de forma esférica a filamentosa)<br />

repercuta negativamente sobre sus compañeros<br />

menos desarrollados debido a la competencia del<br />

espacio uterino. En las razas de cerdos más<br />

prolíficas, como la Meishan, 70 es menor el<br />

crecimiento de los productos al inicio de la<br />

gestación, 2,65,71,72 lo que conlleva a que mayor<br />

cantidad de embriones puedan compartir el<br />

espacio uterino disponible. 73<br />

Una opción para reducir la mortalidad<br />

embrionaria en la cerda podría ser la<br />

sincronización de la ovulación; mayor<br />

sincronización 44 o la eliminación de los folículos<br />

que ovalarían en forma tardía 45 conllevan a la<br />

reducción de la diversidad en el desarrollo<br />

embrionario. La sincronización de la ovulación se<br />

ha realizado por medio de la aplicación de eCG y<br />

gonadotropina coriónica humana (hCG) en cerdas<br />

en anestro.<br />

La eCG se ha utilizado desde hace<br />

tiempo para la superovulación en los animales<br />

domésticos; 10 es una gonadotropina que se secreta<br />

de las copas endometriales durante la gestación de<br />

la yegua, 74 y tiene la misma estructura primaria<br />

que la hormona luteinizante equina. 75 En porcinos<br />

puede actuar como hormonas folículo estimulante<br />

y luteinizante, particularmente como hormona<br />

folículo estimulante. 75 En las cerdas, se ha<br />

utilizado para inducir el celo en hembras en<br />

anestro prepuberal 76-78 y posparto, 76,79,80 en<br />

aplicación sola 81,82 o combinada con hCG. 83-85 La<br />

hCG se purifica de la orina de la mujer<br />

embarazada en el primer trimestre de la<br />

gestación. 86 La aplicación subcutánea de las dos<br />

gonadotropinas parece ser más eficiente para<br />

inducir el celo y la ovulación que la<br />

intramuscular; 87 también se han utilizado con<br />

tratamiento previo de progestágenos.<br />

La aplicación de gonadotropinas<br />

exógenas en cerdas jóvenes, aunque induce el<br />

estro prepuberal 76 e incrementa la incidencia de<br />

ovulaciones, se ha observado que reduce la<br />

fertilización y la supervivencia embrionaria, 89,90<br />

como consecuencia no se incrementa la cantidad<br />

de lechones nacidos vivos en el primer parto. 77,91<br />

En las cerdas adultas, los resultados han<br />

sido contradictorios, seguramente dependen del<br />

grado de sincronización de la ovulación después<br />

del tratamiento. Por un lado, algunos autores no<br />

han encontrado incremento en la incidencia de


pariciones ni en el tamaño de la camada, 79,84,85 y<br />

por otro Lancaster et al. 83 informaron un aumento<br />

significativo en la cantidad de lechones nacidos<br />

vivos, en camadas descendientes de madres<br />

tratadas con gonadotropinas, y Estienne y<br />

Hartsock 92 obtuvieron 12.7 y 11.7 (P>0.1)<br />

lechones nacidos vivos de cerdas tratadas con<br />

gonadotropinas y solución salina,<br />

respectivamente. Para aclarar esta interrogante, se<br />

realizó un estudio donde un grupo de cerdas<br />

recibieron la aplicación de gonadotropinas en el<br />

momento del destete y en el celo se inseminaron<br />

cada 24 horas mientras permanecieran en estro. 9<br />

Los resultados se compararon con cerdas<br />

fertilizadas con inseminación artificial y monta<br />

natural. Las hembras con tratamiento de<br />

gonadotropinas tendieron a incrementar la media<br />

de lechones nacidos vivos, pese a que no<br />

presentaron mayor cantidad del total de lechones<br />

al nacimiento, en comparación con las cerdas de<br />

los otros grupos. Esto se debió a que las hembras<br />

inseminadas con tratamiento previo de<br />

gonadotropinas tuvieron menor porcentaje de<br />

lechones nacidos muertos. Lo cual probablemente<br />

se debió a que las gonadotropinas sincronizaron la<br />

ovulación y, como consecuencia, la uniformidad<br />

en el desarrollo embrionario. Shimatsu et al. 93<br />

encontraron 84% de sincronización en el<br />

desarrollo embrionario, 121 a 145 horas después<br />

de la aplicación de gonadotropinas; una célula era<br />

la constitución de los embriones en este momento.<br />

La sincronización del desarrollo embrionario se<br />

incrementó al 90% en el estudio de estos autores<br />

con la aplicación de 100 UI de hCG, 70 horas<br />

después del tratamiento con gonadotropinas.<br />

SUPERVIVENCIA FETAL<br />

La supervivencia fetal se reduce del día<br />

25 al 50 de la gestación; esta reducción se ha<br />

encontrado del 7% en algunos estudios 6,94 y del<br />

13.9% en otros. 43<br />

Los embriones llegan al útero 48 horas<br />

después de la fertilización, en busca del lugar más<br />

apropiado para su implantación. Al llegar al útero,<br />

permanecen hasta el día 6 en la parte del cuerno<br />

uterino que se une al oviducto; posteriormente,<br />

con un movimiento muy lento se dirigen hacia el<br />

cuerpo del útero donde llegan el día 9 posterior a<br />

la ovulación; en seguida pueden migrar hacia el<br />

cuerno uterino vecino o permanecer en el inicial. 95<br />

La migración trasuterina se llega a realizar hasta el<br />

12, 68,96 día en que deben encontrar el lugar para su<br />

implantación. 97 En la cerda, el día 13, los<br />

F J Escobar-Medina<br />

140<br />

embriones empiezan su adhesión a la superficie<br />

uterina, la cual finalizan día 18 al 24; 98 en casos<br />

de poca población, no se lleva a cabo de manera<br />

homogénea; Montoya-Gómez et al. 99 encontraron<br />

el 44.9% de los productos se implantaron en el<br />

tercio del cuerno uterino cercano al oviducto, el<br />

35.9% en el tercio intermedio y el 19.2% en el<br />

cercano al cuerpo del útero (P


mayor crecimiento que los del tercio uterino<br />

cercano al útero; estos últimos son de menor peso<br />

al final de la gestación. Los productos que se<br />

implantan en la parte media del cuerno uterino<br />

presentan crecimiento intermedio. 94 La mortalidad<br />

de lechones al nacimiento se relaciona<br />

negativamente con su tamaño, 5 los menos pesados<br />

presentan mayor riesgo de morir durante el parto,<br />

lo cual sugiere nuevamente que el crecimiento de<br />

los productos durante la gestación se relaciona la<br />

cantidad de lechones vivos al nacimiento. En la<br />

cerda, la incidencia de mortalidad al nacimiento es<br />

alrededor del 5 al 10%. 5<br />

CONCLUSIÓN<br />

De la información revisada se desprende<br />

que la cantidad de lechones vivos al nacimiento<br />

obedece a la incidencia y la sincronización de la<br />

ovulación y de la capacidad uterina. La cantidad<br />

de óvulos expulsados de los ovarios en el<br />

momento de la ovulación depende del<br />

reclutamiento folicular y la capacidad de los<br />

folículos para mantener su crecimiento sin<br />

presentar atresia. La sincronización en la<br />

ovulación conlleva a un desarrollo embrionario<br />

homogéneo y, como consecuencia, a mayor<br />

cantidad de implantaciones. La capacidad uterina,<br />

la cantidad de productos que el útero puede<br />

mantener viables hasta el parto, se relaciona con el<br />

tamaño de los productos y sus placentas. Las razas<br />

de cerdos más prolifcas desarrollan productos de<br />

menor tamaño.<br />

LITERATURA CITADA<br />

1. Christenson RK. Ovulation rate and<br />

embryonic survival in Chinese Meishan<br />

and White crossbred pigs. J Anim Sci<br />

1993; 71: 3060-3066.<br />

2. Ford SP, Youngs CR. Early embryonic<br />

development in prolific Meishan pigs. J<br />

Reprod Fertil Suppl 1993; 48: 271-278.<br />

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Ford SP. Development of Meishan or<br />

Yorkshire littermate conceptuses in either<br />

a Meishan or Yorkshire uterine<br />

environment to day 90 of gestation to<br />

term. Biol Reprod 1998; 58: 905-910.<br />

1972; 35: 383-388. 107. Wilson ME, Biensen NJ, Ford SP. Novel<br />

102. Monk EL, Erb RE. Effect of unilateral<br />

ovareictomy and hysterectomy on<br />

reproductive parameters in the gilt during<br />

early pregnancy. J Anim Sci 1974; 39:<br />

insight into the control of litter size in the<br />

pig, using placental efficiency as a<br />

selection tool. J Anim Sci 1999; 1654-<br />

1658.<br />

366-372. 108. Ford SP. Embryonic and fetal<br />

103. Webel SK, Dziuk PJ. Effects of stage of<br />

gestation and uterine space on prenatal<br />

survival in the pig. J Anim Sci 1974; 38:<br />

development in different genotypes in<br />

pigs. J Reprod Fertil Suppl 1997; 52:<br />

165-176.<br />

960-967. 109. Kaminski M, Ford SP, Conley AJ.<br />

104. Hunter MG, Faillace LS, Picton HM.<br />

Imtrautrine and peripheral steroid<br />

concentrations and conceptus<br />

development in Meishan and Large<br />

White hybrid gilts. Reprod Fertil Dev<br />

1994; 6: 783-789.<br />

105. Biensen NJ, Wilson ME, Ford SP.<br />

Differential mechanisms regulating<br />

Meishan (M) and Yorkshire (Y) fetal<br />

growth. J Anim Sci Suppl 1 1996; 74:<br />

215.<br />

ABSTRACT<br />

Differences in the expression of<br />

cytochromes P450 17α-hydroxylase and<br />

aromatase in Meishan and Yorkshire<br />

conceptuses at days 10.5-14.0 of<br />

gestation. J Reprod Fertil 1997; 103:<br />

213-219.<br />

110. Vallet JL, Christenson RK, Trout WE,<br />

Klemcke HG. Conceptus, progesterone,<br />

and breed effects on uterine protein<br />

secretion in swine. J Anim Sci 1998; 76:<br />

2657-2670.<br />

Escobar-Medina FJ. Litter size in sows. This review focuses on the factors affecting litter size in sows.<br />

Litter size depends of the incidence and synchronization of the ovulation and the uterine capacity. Ovulation<br />

incidence is determined by the number of follicles are recruited and by the ability of recruited follicles to<br />

continue to grow and avoid atresia. In pigs, ovulation and fertilization are not instantaneous; some ova are<br />

released and fertilized before others, so there are some variations in embryonic development. Embryos<br />

resulting from ova that ovulated last are the ones most likely to be lost. In the period of pregnancy<br />

establishment, the uterine environment is not favorable to less development embryos. Embryonic survival<br />

could be improved by ovulation synchronization. In some reports, gonadotropin administration before<br />

artificial insemination has improved litter size, perhaps through ovulation synchronization. Uterine capacity is<br />

related with the conceptus and placentas size. Prolific breed pigs develop smaller conceptus and placentas.<br />

<strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 137-146.<br />

Key words: Litter size, piglets, sows.<br />

146


RELACIÓN ENTRE SUPLEMENTACIÓN ALIMENTICIA, CONDICIÓN CORPORAL Y<br />

RESPUESTA AL EFECTO MACHO EN CABRAS CRIOLLAS EN ANESTRO<br />

Héctor Gámez-Vázquez,* Jorge Urrutia-Morales,* Martha Olivia Díaz-Gómez,** César Augusto Rosales-<br />

Nieto,* Bertha Margarita Ramírez-Andrade.**<br />

*C E San Luis, INIFAP. **Universidad Autónoma de San Luis Potosí<br />

E-mail: urrutia.jorge@inifap.gob.mx<br />

RESUMEN<br />

El presente trabajo se realizó en San Luis Potosí, México (22º 14’ N) con el fin de evaluar la<br />

influencia de la suplementación alimenticia en cabras criollas con diferente condición corporal (CC) sobre la<br />

respuesta al efecto macho al final de la estación de anestro. Se utilizaron 24 cabras que se agruparon de<br />

acuerdo a su CC (alta, media y baja) 8 hembras en cada grupo, las cuales se alimentaron con una dieta de<br />

mantenimiento. A cuatro cabras de cada grupo, además, se les ofreció un suplemento alimenticio que contenía<br />

12% de proteína cruda y 2.8 Mcal de energía digestible; la cantidad proporcionada se calculó con base en<br />

materia seca y constituyó el 2% de su peso vivo. El periodo de suplementación inició 30 días antes del<br />

empadre y culminó al final de éste; la duración del empadre fue de 35 días. La concentración de progesterona<br />

mostró que todas las hembras permanecieron en anestro antes del inicio del empadre. Todas las cabras<br />

presentaron su primer estro entre los días 8 y 18 después de la introducción de los machos. Las hembras de<br />

mayor CC tendieron a manifestar estro antes que las de baja CC (P>0.05), mientras que las que recibieron<br />

suplemento alimenticio tendieron a mostrar estro antes que las alimentadas con la dieta de mantenimiento<br />

(P>0.05). La tasa de fertilidad no varió de acuerdo con la CC de las cabras ni con el nivel de suplementación<br />

(P>0.05). La prolificidad fue mayor (P


ubicado en Soledad de Graciano Sánchez, SLP<br />

(22° 14' 03" N, 100° 53' 11" O, y a 1835 msnm).<br />

Se utilizaron 24 cabras criollas de la región<br />

semiárida de San Luis Potosí, las cuales se<br />

agruparon de acuerdo a su CC: alta (A: ≥ 3),<br />

media (M: 2.5) y baja (B: ≤ 2); 8 hembras en cada<br />

grupo, las cuales se alimentaron con una dieta de<br />

mantenimiento. A partir del 15 de abril, a cuatro<br />

cabras/grupo, además, se les ofreció un<br />

suplemento alimenticio que contenía 12% de<br />

proteína cruda y 2.8 Mcal de energía digestible; la<br />

cantidad proporcionada se calculó con base en<br />

materia seca y constituyó el 2% de su peso vivo.<br />

El periodo de suplementación inició 30 días antes<br />

del empadre y culminó al final de éste; la duración<br />

del empadre fue de 35 días.<br />

Para conservar la condición corporal<br />

estable de los animales, la dieta de mantenimiento<br />

se calculó con base en el peso corporal, ajustado<br />

cada 14 días. Las cabras se pesaron cada 14 días<br />

previo ayuno de alimento de 15 horas y se verificó<br />

su condición corporal según el método sugerido<br />

por Honhold et al. 11<br />

Las cabras se aislaron totalmente de los<br />

machos a partir de diciembre. El 11 de mayo,<br />

previa verificación del anestro por medio de la<br />

determinación sanguínea de progesterona por<br />

medio de radioinmunoanálisis, se introdujeron al<br />

rebaño tres sementales sexualmente activos, los<br />

cuales permanecieron en empadre libre durante 35<br />

días. La determinación de progesterona se realizó<br />

Peso corporal, Kg<br />

45<br />

40<br />

35<br />

30<br />

25<br />

H Gámez-Vázquez et al.<br />

dos veces por semana, durante 3 semanas<br />

consecutivas, antes de la introducción del<br />

semental. La concentración de progesterona<br />

menor a 1 ng/ml se consideró como indicativa de<br />

anestro.<br />

Las cabras se observaron diariamente<br />

para determinar la presencia de celo y cópulas.<br />

Además, se evaluó la fertilidad (cabras<br />

paridas/empadradas) y la prolificidad (crías<br />

nacidas/hembra parida). Los resultados de las<br />

variables no paramétricas se analizaron por medio<br />

de Chi cuadrada de proporciones para tres<br />

muestras independientes. 12 Los valores<br />

paramétricos se interpretaron por medio de<br />

análisis de varianza con un arreglo factorial de 2 x<br />

3 (2 niveles de alimentación: con y sin<br />

complemento alimenticio; y 3 niveles de<br />

condición corporal). 13<br />

RESULTADOS<br />

Las cabras mantuvieron la condición y el<br />

peso corporal hasta antes de comenzar la<br />

suplementación. A partir de ésta, el peso comenzó<br />

a incrementarse gradualmente en las cabras<br />

suplementadas, particularmente en las cabras con<br />

menor condición corporal, mientras que en las<br />

cabras que no fueron suplementadas el peso<br />

permaneció estable (Figura 1). En ningún<br />

tratamiento se detectaron diferencias significativas<br />

(P>0.05) entre fechas de muestreo.<br />

15-Abr 29-Abr 13-May 27-May 10-Jun<br />

Fecha<br />

Figura 1. Peso de cabras en tres condiciones corporales (CC)), con o sin<br />

suplemento alimenticio (S) antes y durante el empadre. ACS=Alta CC con<br />

suplemento, MCS=Media CC con S, BCS=Baja CC con S, ASS= alta CC sin S,<br />

MSS= Media CC sin S, BSS=Baja CC sin S.<br />

148<br />

ACS<br />

MCS<br />

BCS<br />

ASS<br />

MSS<br />

BSS


La concentración de progesterona fue<br />

menor a 1 ng/ml en todas las cabras, en el período<br />

previo al ingreso de los sementales, lo cual<br />

confirma que se encontraban en anestro. Después<br />

de la entrada de los sementales, todas las cabras<br />

presentaron celo en el transcurso de 18 días. Las<br />

hembras de condición corporal alta tendieron a<br />

Condición corporal y efecto macho<br />

manifestar celo antes que las de condición baja<br />

(Cuadro 1), pero las diferencias no fueron<br />

estadísticamente significativas (P>0.05). Las<br />

cabras suplementadas tendieron a mostrar celo<br />

antes que las no suplementadas (P>0.05),<br />

información que se puede observar con detalle en<br />

la Figura 2.<br />

Cuadro 1. Intervalo (Media ± DE) de la introducción del macho a la manifestación del celo de cabras<br />

criollas con relación a la condición corporal y la utilización de suplemento alimenticio<br />

Alta<br />

Media<br />

Baja<br />

General<br />

Condición corporal<br />

Número de cabras<br />

4<br />

3<br />

2<br />

1<br />

0<br />

Suplemento alimenticio<br />

Con Sin<br />

12.0 ± 4.1<br />

14.0 ± 3.3<br />

13.5 ± 3.1<br />

13.17±3.30<br />

10.7 ± 3.6<br />

15.2 ± 1.0<br />

15.0 ± 0.8<br />

13.67±3.93<br />

7 8 9 10 11 12 13 14 15 16 17 18<br />

Días después de la entrada del macho<br />

Figura 2. Presentación del celo en las cabras con y sin suplemento alimenticio<br />

después de la entrada del macho<br />

149<br />

General<br />

11.38±3.62<br />

14.63±2.33<br />

14.25±2.25<br />

13.42±3.02<br />

Con<br />

Sin


La suplementación ni la CC influyeron<br />

sobre la tasa de fertilidad (P>0.05), aunque las<br />

cabras con mejor CC tendieron a mostrar mejor<br />

fertilidad. La prolificidad fue mayor (P


Con base en lo anterior, se concluye que<br />

la mejor condición corporal y la suplementación<br />

mejoraron la respuesta de las cabras al efecto<br />

macho al final de la estación de anestro, lo que se<br />

tradujo en una respuesta más rápida al estímulo<br />

del macho y en mayor porcentaje de partos<br />

gemelares.<br />

LITERATURA CITADA<br />

1. Shelton M. The influence of the presence<br />

of a male goat on the initiation of estrus<br />

cycling and ovulation in Angora does. J<br />

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2. Chemineau P. Effect on estrus and<br />

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male at three times of the year. J Reprod<br />

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and behavioral response of seasonally<br />

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introduction of bucks. Anim Reprod Sci<br />

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4. Chemineau P, Levy F, Thimonier J.<br />

Effects of annosmia on LH secretion,<br />

ovulation rate and oestrus behavior<br />

induced by males in the anovular Creole<br />

goat. Anim Reprod Sci 1986; 10:125-<br />

142.<br />

5. Chemineau P, Normant E, Ravault JP,<br />

Thimonier J. Induction and persistence of<br />

pituitary and ovarian activity in the outof-season<br />

lactating dairy goats after a<br />

treatment combining a skeleton<br />

photoperiod, melatonin and the male<br />

effect. J Reprod Fert 1986; 78:497-504.<br />

6. Chemineau P, Baril G, Vallet JC,<br />

Delgadillo JA. Control de la<br />

reproducción en la especie caprina:<br />

Interés zootécnico y métodos<br />

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8. Mellado M, Vera A, Loera H.<br />

Reproductive performance of crossbred<br />

goat in good or poor body condition<br />

Condición corporal y efecto macho<br />

151<br />

exposed to bucks before breeding. Small<br />

Rumin Res 1994; 14: 45-48.<br />

9. Restall BJ, Restall H, Norton BW. Effect<br />

of nutrition on sensitivity of female goats<br />

to the male effect. In: Proc Aust Soc<br />

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10. Urrutia MJ, Gámez VHG, Ramírez<br />

ABM. Influencia del pastoreo restringido<br />

en el efecto macho en cabras en baja<br />

condición corporal durante la estación de<br />

anestro. Téc Pecu Méx 2003; 41: 251-<br />

260.<br />

11. Honhold N, Petit H, Halliwell RW. A<br />

condition scoring scheme for the Small<br />

East African Goats in Zimbabwe. Trop<br />

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12. Castilla SL, Cravioto J. Estadística<br />

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ciencias de la salud. 1ª ed. México,<br />

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13. Snedecor GW, Cochran EG. Stadistical<br />

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Press, Ames 1967: 612.<br />

14. Valencia MJ, Zarco QL, Ducoing WA,<br />

Murcia MC, Navarro GH, Martínez AJ,<br />

Anta JE, Rivera RJ. Caracterización de la<br />

estación de anestro en cabras criollas y<br />

Granadinas mantenidas en un plano<br />

nutricional constante en el Altiplano<br />

Mexicano. En: Reunión Nacional de<br />

Investigación Pecuaria en México.<br />

México, DF 1988: 124.<br />

15. Monroy A, Espinoza JL, Cepeda R,<br />

Carrillo M. Estacionalidad de la actividad<br />

sexual de cabras cruzadas en el<br />

municipio de La Paz, Baja California<br />

Sur. En: VII Reunión Nacional sobre<br />

Caprinocultura, Monterrey, N L 1991:<br />

99-101.<br />

16. Esquivel MH, Torres AF, Montes PR,<br />

Centurión CF, Cámara SR, Regalado PT.<br />

Estacionalidad reproductiva de las cabras<br />

bajo condiciones del trópico subhúmedo.<br />

En: Reunión Nacional de Investigación<br />

Pecuaria, Chihuahua, 1992: 246.<br />

17. Escobar FJ, Zarco QL, Valencia MJ.<br />

Efecto del fotoperiodo sobre la<br />

estacionalidad reproductiva de la cabra<br />

criolla en México. En: XXII Reunión<br />

Anual. Academia de Investigación en<br />

Biología de la Reproducción AC,<br />

Acapulco, Gro, 28 al 31 de mayo de<br />

1997: 247-257.


18. Flores J A, Duarte G, Malpaux B,<br />

Delgadillo J A. Variaciones estacionales<br />

de la actividad reproductiva de las cabras<br />

criollas de la Región Lagunera. En: XI<br />

Reunión Nacional Sobre Caprinocultura,<br />

Chapingo, Méx 1996: 48-52.<br />

19. Chemineau P, Gauthier D, Poirier JC,<br />

Saumande J. Plasma levels of LH, FSH,<br />

prolactin, oestradiol 17β and<br />

progesterone during natural and induced<br />

oestrus in the dairy goat. Theriogenology<br />

1982; 17: 313-323.<br />

H Gámez-Vázquez et al.<br />

20. Díaz GMO, Urrutia MJ, Ochoa CMA,<br />

Correa CC. Efecto macho en el inicio de<br />

la actividad reproductiva de cabritas<br />

prepúberes Boer x Nubia. En: XV<br />

Reunión Nacional sobre Caprinocultura.<br />

Mérida, Yucatán 2000: 82-85.<br />

ABSTRACT<br />

21. Sachdeva KK, Sengar OPS, Singh SN,<br />

Lindahl IL. Studies on goats. I. Effect of<br />

plane of nutrition on the reproductive<br />

performance of does. J Agric Sci Camb<br />

1973; 80: 375-379.<br />

22. Mani AU, McKelvey WAC, Watson ED.<br />

The effects of low level of feeding on<br />

response to sinchronization of estrus,<br />

ovulation rate and embryo loss in goats.<br />

Theriogenology 1992; 38: 1013-1022.<br />

23. Edey T N. Body weight and ovulation<br />

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24. Haresign, W. The influence of nutrition<br />

on reproduction in the ewe. 1. Effects on<br />

ovulation rate, follicle development and<br />

luteinizing hormone release. Anim Prod<br />

1981; 32:197-202.<br />

Gámez VH, Urrutia MJ, Díaz GMO, Rosales NCA, Ramírez ABM. Relationship between feeding<br />

supplementation, body condition, and male effect respond in anestrous Creole goats. The present trial<br />

was carried out at San Luis Potosí, Mexico (22º 14’ N), with the objective to evaluate the influence of the<br />

feeding supplement in goats maintained at different body condition score (BCS) on the male effect at the end<br />

of the anestrous season. It were used 24 goats that were grouped according their BCS levels (high, medium<br />

and low), 8 females in each group, and were fed with a maintenance diet. Four goats of each group, besides,<br />

were feeding with supplement product containing 12 % CP and 2.8 Mcal DE. The supplement period began<br />

30 days before breeding until the end of the breeding. Progesterone concentration confirmed that all 24 goats<br />

were in anestrous before breeding. All goats presented their first estrous among the days 8 and 18 after the<br />

introduction of males. The females of high BCS tended to show their first estrous before those of low BCS<br />

(P>0.05), whilst the goats that were received a feeding supplement tended to show their first estrous before<br />

those fed with the maintenance diet (P>0.05). The fertility rate didn't change according to the BCS neither at<br />

the feeding level. The prolificacy was higher (P < 0.05) in high BCS goats. These results suggest that the<br />

increment in the body condition score of the goat, as well as the feeding supplement improves the response to<br />

the male effect and prolificacy at the end of the anestrous season. <strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 147-152.<br />

Key words: Body condition, male effect, goats.<br />

152


ESTACIONALIDAD REPRODUCTIVA DE CABRAS SAANEN X NUBIA<br />

Raquel Roque-Alfaro, Romana Melba Rincón-Delgado, Sergio Méndez-de Lara, Carlos Fernando Aréchiga-<br />

Flores, Francisco Javier Escobar-Medina<br />

Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong>.<br />

E-mail: fescobar@cantera.reduaz.mx<br />

RESUMEN<br />

Se estudió la actividad ovárica de cabras Saanen X Nubia, sin gestación, adultas (cuando menos con<br />

un parto), a 22° 58’ N y 102° 30’ O, y a 2 153 msnm. Las cabras se mantuvieron en estabulación, bajo<br />

fotoperiodo natural, separadas de machos y se les determinó la concentración de progesterona en el suero<br />

sanguíneo dos veces por semana, por medio de radioinmunoanálisis. Las cabras presentaron ciclos ováricos<br />

durante los días con menor cantidad de horas luz y anestro con el aumento del fotoperiodo. Las hembras<br />

manifestaron ciclos ováricos durante 140.4 días y permanecieron en anestro durante 224.6 días. El intervalo<br />

del solsticio de verano al inicio de la temporada reproductiva fue de 106.0 días, y del solsticio de invierno al<br />

final de la temporada reproductiva de 63.0 días. Se concluye que las cabras Saanen X Nubia, presentan<br />

estacionalidad reproductiva cuando se mantienen separadas de machos sexualmente activos.<br />

Palabras clave: Estacionalidad reproductiva, cabras, Saanen X Nubia<br />

INTRODUCCIÓN<br />

Los caprinos se reproducen en forma<br />

estacional, alternan períodos de actividad<br />

reproductiva con períodos anovulatorios. 1 Estos<br />

animales, como las demás especies con<br />

reproducción estacional, utilizan el fotoperiodo<br />

para programar su actividad reproductiva; la<br />

temporada del año en que se reduce la cantidad de<br />

horas luz del día, lo que ocurre en el otoño e<br />

invierno, coincide con la presencia de ciclos<br />

estrales, y el incremento del fotoperiodo con el<br />

anestro. 1<br />

El efecto del fotoperiodo sobre el<br />

comportamiento reproductivo depende de la<br />

latitud, es mayor en las regiones alejadas que en<br />

las cercanas al ecuador. 2 Al sur del trópico de<br />

Cáncer, a latitud menor a 23° 27’ N, en estudios<br />

con material de rastro procedentes de cabras<br />

criollas no gestantes, pertenecientes a rebaños<br />

donde los machos conviven estrechamente con las<br />

hembras, el mayor porcentaje de cabras con<br />

cuerpos lúteos activos en los ovarios se presentó<br />

de julio a diciembre, con un marcado descenso de<br />

febrero a abril; en diferente proporción pero en<br />

todos los meses se encontraron evidencias de<br />

ovulación. 3 A esta latitud, en estudios donde las<br />

cabras de este grupo genético se estabularon, se<br />

alimentaron adecuadamente, se mantuvieron<br />

<strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 153-158<br />

separadas de machos y su actividad ovárica se<br />

determinó por medio de la concentración<br />

sanguínea de progesterona, las hembras<br />

presentaron ciclos estrales durante los días con<br />

menor cantidad de horas luz y anestro con el<br />

incremento del fotoperiodo, como<br />

característicamente corresponde a la<br />

estacionalidad reproductiva de esta especie. 4 Es<br />

probable que lo mismo ocurra con otros grupos<br />

genéticos, ya que también se ha encontrado que<br />

pueden concebir durante gran parte del año. Por<br />

ejemplo, en un estudio realizado en rebaños de<br />

Alpina, Nubia, Granadina y sus cruzas, a 19° 40’<br />

N, donde los machos permanecieron en empadre<br />

libre durante todo el tiempo con las hembras, las<br />

concepciones se presentaron durante todo el año,<br />

excepto de febrero a abril. 5 En el presente estudio<br />

se determinó la actividad ovárica a través del año<br />

de cabras Saanen X Nubia, bajo condiciones de<br />

estabulación y separadas de machos, por medio de<br />

la concentración sérica de progesterona.<br />

MATERIAL Y MÉTODOS<br />

Se utilizaron 5 cabras Saanen X Nubia,<br />

adultas (cuando menos de un parto), sin gestación,<br />

no lactando y clínicamente sanas, pertenecientes<br />

al rebaño caprino de la Unidad Académica de<br />

Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la


Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong>, la cual se<br />

localiza a 22° 58’ latitud norte y 102° 30’ longitud<br />

oeste, y a 2 153 msnm. El rebaño se mantiene bajo<br />

fotoperiodo natural y pastorea en praderas de<br />

alfalfa durante el día y con encierro en corrales<br />

durante la noche, donde la alimentación se<br />

completa con silo de maíz, sal con minerales y<br />

subproductos de la industria cervecera, en<br />

consumo a voluntad. Los animales se mantienen<br />

en empadre libre durante todo el tiempo de<br />

manera que las cópulas se realizan en todos los<br />

celos de las hembras. Los partos en este rebaño se<br />

presentan en el transcurso del año.<br />

Las 5 cabras que se utilizaron para el<br />

presente estudio, se separaron del rebaño y se<br />

mantuvieron en estabulación, bajo fotoperiodo<br />

natural, separadas de machos y se alimentaron con<br />

una ración que cubrió sus requerimientos<br />

nutricionales. El fotoperiodo del lugar donde se<br />

realizó el trabajo varía de 10.6 a 13.4 horas luz.<br />

A las hembras se les tomaron muestras<br />

sanguíneas dos veces por semana (lunes y viernes)<br />

por punción en la yugular, en tubos sin<br />

anticoagulante, para determinar la concentración<br />

de progesterona por medio de radioinmunoanálisis<br />

en fase sólida, de febrero a noviembre. Las<br />

muestras se centrifugaron para separar el suero<br />

sanguíneo y se conservaron en congelación a -<br />

20°C hasta determinar la concentración hormonal.<br />

Se estableció como temporada<br />

reproductiva, el período en el cual las cabras<br />

Número de cabra<br />

6<br />

5<br />

4<br />

3<br />

2<br />

1<br />

0<br />

02-Feb<br />

20-Feb<br />

08-Mar<br />

26-Mar<br />

12-Abr<br />

R Roque-Alfaro et al.<br />

30-Abr<br />

17-May<br />

04-Jun<br />

21-Jun<br />

presentaron concentración de progesterona <<br />

1ng/ml, en forma cíclica; y temporada de anestro<br />

cuando la concentración de la hormona<br />

permaneció constantemente a nivel bajo.<br />

A las cabras, además, se les determinó la<br />

condición corporal cada 8 días por el método de<br />

Honhold et al. 6<br />

La frecuencia de cabras ciclando se<br />

agrupó de acuerdo al fotoperiodo, mayor y menor<br />

de 12 horas luz, y se sometieron a análisis de<br />

varianza. Las medias de la condición corporal de<br />

cada semana también se interpretaron por medio<br />

de análisis de varianza. 7<br />

RESULTADOS<br />

El número de cabras ciclando fue<br />

significativamente mayor (P < 0.05) durante los<br />

días con menos de 12 horas luz, que con el<br />

incremento del fotoperiodo (> 12 horas luz).<br />

Al inicio del trabajo, los primeros días de<br />

febrero, en todas las hembras se encontró<br />

evidencias de cuerpo lúteo activo, la<br />

concentración de progesterona fue superior a 1<br />

ng/ml. Durante el mes de febrero, las cabras<br />

dejaron de presentar ciclos ováricos, el día 20,<br />

cuatro hembras permanecían ciclando; el número<br />

se redujo a tres el día 23, a dos el 27 (cuando los<br />

días registraban 11.5 horas luz) y a cero el 1 de<br />

marzo (con días de 11.6 horas luz). Esta<br />

información se presenta en la Figura 1.<br />

09-Jul<br />

Fecha<br />

Figura 1. Cabras Saanen X Nubia ciclando, bajo fotoperiodo natural de 22° 58' N y<br />

102° 30' O<br />

154<br />

Cabras ciclando<br />

Horas luz<br />

26-Jul<br />

13-Ago<br />

30-Ago<br />

17-Sep<br />

04-Oct<br />

22-Oct<br />

08-Nov<br />

26-Nov<br />

16<br />

14<br />

12<br />

10<br />

8<br />

6<br />

4<br />

2<br />

0<br />

Horas luz


Estacionalidad reproductiva en cabras<br />

ng/ml Cabra 1 Horas luz ng/ml Cabra 2 Horas luz<br />

Figura 2. Concentración de progesterona en las cabras Saanen x Nubia con relación a las horas<br />

luz del día<br />

155


Del día 1 de marzo al 27 de septiembre la<br />

concentración de progesterona en el suero<br />

sanguíneo permaneció muy baja, lo cual significa<br />

que ninguna de las cabras ovuló durante esta<br />

temporada; todas permanecieron en anestro.<br />

En octubre, las cabras reanudaron su<br />

actividad ovárica, una lo hizo el día 1 (con días de<br />

11.8 horas luz), dos más el 4 y las otras dos<br />

restantes el 8, cuando los días registraban 11.7<br />

horas luz. La actividad cíclica de las hembras se<br />

mantuvo durante el resto del tiempo que se hizo el<br />

estudio.<br />

En la Figura 2 se presenta la<br />

concentración de progesterona en cada una de las<br />

cabras estudiadas. En todas las hembras, la<br />

concentración de la hormona se presentó en forma<br />

cíclica (de la misma manera como ocurre en el<br />

ciclo estral) durante la temporada del año con<br />

pocas horas luz del día. La progesterona no se<br />

identificó en las muestras que se tomaron en la<br />

época con incremento del fotoperiodo.<br />

El intervalo del solsticio de verano al<br />

inicio de la temporada reproductiva fue de 106.0<br />

días; y 63.0 días del solsticio de invierno al final<br />

de la temporada reproductiva. La duración del<br />

período de anestro fue de 224.6 días y de 140.4<br />

días la duración de la temporada reproductiva.<br />

La condición corporal de estos animales<br />

no varió con el transcurso del año. La media<br />

general (± DE) de la condición corporal fue de 3.1<br />

± 1.2.<br />

DISCUSIÓN<br />

Las cabras del presente estudio alternaron<br />

las temporadas reproductivas y de anestro, como<br />

ocurre en los pequeños rumiantes con<br />

reproducción estacional. 4 La temporada<br />

reproductiva se presentó durante los días de menor<br />

cantidad de horas luz y anestro con el incremento<br />

del fotoperiodo; lo cual indica que mantienen su<br />

actividad reproductiva estacional cuando<br />

permanecen separarlas de machos sexualmente<br />

activos.<br />

Todas las partes del comportamiento<br />

reproductivo que presentan las ovejas y las cabras<br />

con reproducción estacional, que se mantienen sin<br />

gestación y separadas de machos, coinciden los<br />

resultados del presente estudio. Por ejemplo, la<br />

duración del anestro en cabras criollas, en un<br />

trabajo realizado a la misma latitud, se encontró<br />

de 238.8 días, 4 lo cual concuerda con el tiempo<br />

que permanecieron en anestro las hembras del<br />

presente estudio (224.6 días).<br />

R Roque-Alfaro et al.<br />

156<br />

Otra evidencia del comportamiento<br />

reproductivo estacional de las cabras de este<br />

trabajo lo constituye el intervalo del solsticio de<br />

verano al inicio de la temporada reproductiva. La<br />

duración de este intervalo en cabras cashmere<br />

intactas y ovariectomizadas portando un implante<br />

de estradiol, a 28° 48’ S y 153° 12’ E, fue de 124<br />

días, 8,9 lo cual coincide con este intervalo del<br />

presente estudio (106.0 días). Según los estudios<br />

realizados por Robinson et al. 10 y Worthy et al. 11<br />

entre otros autores, el fotoperiodo del solsticio de<br />

verano programa el inicio de la temporada<br />

reproductiva en las ovejas con reproducción<br />

estacional; hecho por el cual, las ovejas presentan<br />

este intervalo de la misma duración. En las cabras,<br />

es probable que ocurra de la misma manera.<br />

La duración del intervalo entre el<br />

solsticio de invierno y el fin de la temporada<br />

reproductiva también es constante en los animales<br />

con reproducción estacional; 12 intervalo que en los<br />

animales de este trabajo fue de 63.0 días, y que<br />

coincide con los resultados de otros estudios<br />

realizados tanto en cabras 4 como en ovejas. 13<br />

El comportamiento reproductivo<br />

estacional de los animales del presente estudio se<br />

presentó pese a que se alimentaron<br />

adecuadamente; en promedio presentaron 3.1 de<br />

condición corporal, en una escala del 1 al 4. 6 Lo<br />

cual confirma que la estacionalidad reproductiva<br />

es independiente a la nutrición. Resultados que<br />

también se han publicado en otros estudios.<br />

Valencia et al. 14 encontraron una clara<br />

disminución de ciclos estrales en los primeros<br />

meses del año, en cabras criollas y Granadina con<br />

buena nutrición, y Escobar et al. 4 informaron que<br />

cabras criollas, alimentadas adecuadamente en<br />

forma constante, presentaron actividad ovárica<br />

característica de los animales con reproducción<br />

estacional.<br />

Las cabras que se utilizaron para el<br />

presente estudio pertenecen a un rebaño con<br />

registro de partos en todos los meses del año. La<br />

capacidad de las cabras de concebir durante la<br />

mayor parte del tiempo se debe a la influencia de<br />

machos sexualmente activos; su presencia puede<br />

estimular la actividad ovárica en cabras en<br />

anestro. 15 El efecto macho, como se le<br />

tradicionalmente se le conoce a este tratamiento,<br />

puede variar de acuerdo a la latitud en que se<br />

encuentren las cabras; la respuesta es menor en<br />

animales mantenidos a grandes latitudes que en la<br />

zona tropical y subtropical. 16 En la región donde<br />

se realizó el presente estudio, se ha publicado que<br />

un macho sexualmente activo puede estimular la


ovulación durante todo el año. Cabras criollas con<br />

ciclos de fotoperiodo de 6 meses de duración y<br />

con la presencia de un macho sexualmente activo<br />

manifestaron ciclos ováricos sucesivos durante un<br />

año; 17 las ovulaciones en las cabras de este estudio<br />

se identificaron por medio de la determinación<br />

plasmática de progesterona.<br />

El efecto macho se realiza por medio de<br />

feromonas, las cuales se producen en las glándulas<br />

sebáceas durante la temporada reproductiva 18 y la<br />

hembra las percibe a través del olfato. En el<br />

rebaño al que pertenecían las cabras del presente<br />

estudio, los machos y las hembras conviven<br />

constantemente, lo que permite que las hembras<br />

perciban las feromonas de los machos en<br />

cualquier época del año. Las hembras ovulan con<br />

el efecto macho debido a que la presencia de éste<br />

estimula el concierto hormonal que conduce a la<br />

ovulación. 19,20<br />

La concentración de progesterona durante<br />

el ciclo ovárico que se encontró en las cabras del<br />

presente estudio coincide con los datos de la<br />

literatura. Según los estudios de Chemineau et<br />

al., 21 el promedio de la concentración de esta<br />

hormona durante el ciclo estral de la cabra es<br />

menor a 10 ng/ml, como ocurrió en la mayoría de<br />

las determinaciones del presente trabajo.<br />

Con base en lo anterior, se concluye que<br />

las cabras Saanen X Nubia, presentan<br />

estacionalidad reproductiva cuando se alimentan<br />

adecuadamente y se mantienen separadas de<br />

machos sexualmente activos.<br />

LITERATURA CITADA<br />

1. Shelton M. Reproduction and breeding of<br />

goats. J Dairy Sci 1978; 61: 994-1010.<br />

2. Chemineau P. Seasonality and<br />

photoperiodic influence in the female<br />

goat reproduction. Proc V Int Conf<br />

Goats; 1992 March 2-8; New Delhi,<br />

India, 1992; 117: 355-360.<br />

3. Valencia J, González JL, Díaz J.<br />

Actividad reproductiva de la cabra criolla<br />

en México en el examen postmortem del<br />

aparato genital. Vet Méx 1986; 17: 177-<br />

180.<br />

4. Escobar FJ, Zarco L, Murcia C, Valencia<br />

J. Efecto del fotoperiodo sobre la<br />

secreción tónica de la hormona<br />

luteinizante en cabras criollas en México.<br />

Reunión Anual de la Academia de<br />

Investigación en Biología de la<br />

Estacionalidad reproductiva en cabras<br />

157<br />

Reproducción AC. Acapulco, Gro, 1998:<br />

220-238.<br />

5. Arbiza AS, De Lucas TJ.<br />

Comportamiento de un rebaño de cabras<br />

en empadre libre. Memorias de la VII<br />

Reunión Nacional sobre Caprinocultura;<br />

1991 octubre 23-25: Monterrey (NL)<br />

México. México (DF): Asociación<br />

Mexicana de Producción Caprina, AC,<br />

1991: 58-61.<br />

6. Honhold N, Petit H, Halliwell RW.<br />

Condition scoring scheme for small East<br />

African goats in Zimbabwe. Top Anim<br />

Hlth Prod 1989; 21: 121-127.<br />

7. Gill J. Designs and Analysis of<br />

Experiments in the Animal and Medical<br />

Sciences, Vol 2. Ames. Iowa: Iowa State<br />

University Press, 1978.<br />

8. Henniawati, Resal BJ, Scaramuzi RJ.<br />

Effect of season on LH secretion in<br />

ovariectomized Australian Cashmere<br />

does. J Reprod Fertil 1995; 103: 349-356.<br />

9. Restal BJ. The male effect in goats. In:<br />

Proc V Int Conf Goats; 1992 March 2-8;<br />

New Delhi, India, 1992; 117:<br />

10. Robinson JE, Wayne NL, Karsch FJ.<br />

Refractoriness to inhibitory day lengths<br />

initiates the breeding season of the<br />

Suffolk ewe. Biol Reprod 1985; 32:<br />

1024-1030.<br />

11. Worthy K, Haresing W, Dodson S,<br />

McLeord BJ, Foxcroft GR, Haynes NB.<br />

Evidence that the onset of the breeding<br />

season in the ewe may be independent of<br />

decreasing plasma prolactin<br />

concentrations. J Reprod Fertil 1985; 75:<br />

237-236.<br />

12. Woodfill CJI, Wayne NL, Moenter SM,<br />

Karsch FJ. Fhotoperiodic<br />

synchronization of a circannual<br />

reproductive rhythms in sheep:<br />

identification of season-specific time<br />

cues. Biol Repord 1994; 50: 965-976.<br />

13. Karsh FJ, Bittman EL, Foster DL,<br />

Goodman RL, Legan SJ, Robinson JE.<br />

Neuroendocrine basis of seasonal<br />

reproduction. Recent Prog Horm Res<br />

1984; 40: 185-232.<br />

14. Valencia J, Zarco L, Ducoing A, Murcia<br />

C, Navarro H. Breeding season of criollo<br />

and granadina goats Ander constant<br />

nutricional levels in the Mexican<br />

highlands. Livestock Reproduction in


Latin America. International Anatomic<br />

Energy Agency, Viena 1990: 321-333.<br />

15. Flores JA, Véliz FG, Pérez-Villanueva<br />

JA, Martinez de la Escalera E,<br />

Chemineau P, Poindron P, Malpaux B,<br />

Delgadillo JA. Male reproductive<br />

condition is the limiting factor of<br />

efficiency in the male effect during<br />

seasonal anoestrus in female goats. Biol<br />

Reprod 2000; 62: 1409-1414.<br />

16. Chemineau P. Possibilities for using<br />

bucks to stimulate ovarian and oestrus<br />

cycles in anaovulatory goats. A-review.<br />

Livest Prod Sci 1987; 17: 135-147.<br />

17. Rincón RM. Efecto de la presencia de un<br />

macho cabrío sexualmente activo sobre<br />

la ciclicidad estral de cabras criollas<br />

expuestas a un fotoperiodo artificial.<br />

Tesis de Doctorado. Unidad Académica<br />

de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de<br />

la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong>,<br />

<strong>2004</strong>.<br />

18. Walkden-Brown SW, Restall BJ, Norton<br />

BW, Scaramuzzi RJ, Martin GB. Effect<br />

of nutrition on seasonal patterns of LH,<br />

R Roque-Alfaro et al.<br />

ABSTRACT<br />

FSH and testosterone concentration,<br />

testicular mass, sebaceous gland volume<br />

and odour in Australian Cashmere goats.<br />

J Reprod Fertil. 1994; 102: 351-60.<br />

19. Hamada T, Nakajima M, Takeuchi Y,<br />

Mori Y. Pheromone-induced stimulation<br />

of hypothalamic gonadotropin-releasing<br />

hormone pulse generator in<br />

ovariectomized, estrogen-primed goats.<br />

Neuroendocrinol 1996; 64: 313-319.<br />

20. Chemineau P, Norman TE, Ravault JP,<br />

Thimonier J. Induction and persistence of<br />

pituitary and ovarian activity in the outof-season<br />

lactating dairy goat after<br />

treatment combining a skeleton<br />

photoperiod, melatonin and the male<br />

effect. J Reprod Fertil 1986; 78: 497-504.<br />

21. Chemineau P, Gauthier D, Poirer JC,<br />

Saumade J. Plasma levels of LH, FSH,<br />

prolactin, oestradiol 17 β and<br />

progesterone during natural and induced<br />

oestrus cycle in the dairy goat.<br />

Theriogenology 1982 ; 17 : 313-323.<br />

Roque-Alfaro R, Rincón-Delgado RM, Méndez-de Lara S, Aréchiga-Flores CF, Escobar-Medina FJ.<br />

Reproductive seasonality in Saanen X Nubia goats. Serum progesterone concentrations was measured<br />

twice a week in no pregnant mature Saanen X Nubia goats kept natural photoperiod and without sexually<br />

active males, to examine whether perception of daylength change underlines seasonal reproductive activity.<br />

The goats showed ovarian cycles during short days and anoestrus in long days (P < 0.05). The duration of<br />

reproductive season was 140.4 days and 224.6 days of anoestrus. Summer solstice to beginning of<br />

reproductive season interval was 106.0 days, and 63.0 days from winter solstice to reproductive season end. It<br />

was concluded that Saanen X Nubia goats kept without sexually active males showed reproductive<br />

seasonality. <strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 153-<br />

Key words: Seasonality, goats, Saanen X Nubia.<br />

158


TAMAÑO DE LA CAMADA EN CERDAS FERTILIZADAS CON INSEMINACIÓN ARTIFICIAL Y<br />

MONTA NATURAL<br />

Luis Alberto Ruvalcaba-Ramírez, Fernando de la Puente-Ocampo, Carlos Fernando Aréchiga-Flores,<br />

Francisco Javier Escobar-Medina<br />

Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong><br />

E-mail: fescobar@cantera.reduaz.mx<br />

RESUMEN<br />

Se estudió el tamaño de la camada en cerdas fertilizadas mediante inseminación artificial,<br />

inseminación artificial con tratamiento previo de gonadotropinas y con monta natural, en granjas<br />

pertenecientes a pequeños productores. Se inseminaron 104 cerdas de las cuales 37 recibieron el tratamiento<br />

previo de gonadotropinas; además, también se estudiaron 48 hembras que recibieron monta natural. Las<br />

cerdas fueron de diferente número de partos. La detección del celo en las cerdas que se inseminaron y la<br />

dirección de la monta natural las realizó el dueño de los animales. Las inseminaciones las realizó el mismo<br />

técnico cada 24 horas mientras la hembra se encontrara en celo, con base en la información del inicio y<br />

conclusión del celo que le proporcionó el dueño de los animales. El total de lechones al nacimiento, nacidos<br />

vivos y destetados no variaron significativamente (P>0.05) entre las cerdas inseminadas, inseminadas con<br />

tratamiento previo de gonadotropinas y monta natural; fueron significativamente mayores (P


inseminación artificial, inseminación artificial con<br />

tratamiento previo de gonadotropinas y monta<br />

natural en granjas pertenecientes a pequeños<br />

productores.<br />

MATERIAL Y MÉTODOS<br />

El trabajo se realizó en granjas porcinas<br />

semitecnificadas, pertenecientes a pequeños<br />

productores de los municipios de Calera y<br />

Fresnillo del estado de <strong>Zacatecas</strong>, en las cuales se<br />

explotan cerdas encastadas de Yorkshire. Las<br />

hembras eran de diferente edad, número de partos<br />

y peso; en general con buena condición corporal.<br />

Las cerdas conforme presenten celo se<br />

incorporaron al estudio y se agruparon de acuerdo<br />

a la estrategia que se utilizó para su fertilización y<br />

al número de partos. En el grupo 1 se utilizó la<br />

L A Ruvalcaba-Ramírez et al.<br />

inseminación artificial en el grupo 2 la<br />

inseminación con tratamiento previo de<br />

gonadotropinas (PG 600, Intervet, Millsboro, DE)<br />

y en el grupo 3 la monta natural. La aplicación de<br />

gonadotropinas se realizó el día del destete. La<br />

cantidad de animales que se estudiaron en cada<br />

grupo se presenta en el Cuadro 1.<br />

Se utilizaron machos de buena fertilidad<br />

para la monta natural y la colección del semen<br />

para la inseminación artificial. Las cópulas y los<br />

servicios de inseminación se realizaron una vez al<br />

día mientras las hembras permanecieron en celo.<br />

La permanencia del celo se estableció de acuerdo<br />

al comportamiento del animal, se consideró que la<br />

hembra se encuentra en celo mientras permanezca<br />

inmóvil al presionarle el dorso o al montarse sobre<br />

de ella.<br />

Cuadre 1. Número de camadas que se estudiaron de cerdas primíparas y multíparas, de los grupos 1<br />

(inseminación artificial), 2 (inseminación artificial con tratamiento previo de gonadotropinas) y 3 (monta<br />

natural).<br />

Cerdas<br />

Primíparas<br />

Multíparas<br />

General<br />

Grupo 1<br />

El semen se recolectó por medio del<br />

método conocido como mano enguantada y se<br />

evaluó inmediatamente después de su recolección.<br />

La concentración de cada dosis fue de 3 000<br />

millones de espermatozoides viables disueltos en<br />

80 a 95 ml de diluyente, y se almacenó a 17° C. El<br />

semen se almacenó durante 2 días como máximo,<br />

en todos los casos se procuró utilizarlo porco<br />

tiempo después de su preparación.<br />

La detección del celo en las cerdas se<br />

realizó dos veces al día, cada 12 horas, una vez<br />

por la mañana y otra por la tarde. Esta tarea la<br />

llevó a cabo el dueño de la explotación. Los<br />

26<br />

41<br />

67<br />

Grupo 2<br />

11<br />

26<br />

37<br />

160<br />

Grupo 3<br />

9<br />

39<br />

48<br />

General<br />

46<br />

106<br />

152<br />

animales se alimentaron con una dieta que cubrió<br />

sus requerimientos nutricionales.<br />

Una semana antes del parto, las cerdas se<br />

alojaron en las salas de pariciones de cada una de<br />

las explotaciones y al parto se registró la cantidad<br />

de lechones nacidos vivos y muertos, así como la<br />

presencia de fetos momificados. Además, se<br />

registro la cantidad de lechones destetados; el<br />

destete se realizó a los 30 días de edad de los<br />

lechones.<br />

Los resultados de acuerdo a las diferentes<br />

categorías se sometieron a análisis de varianza y<br />

comparación de medias por el método de Tukey. 4


RESULTADOS<br />

El promedio del total de lechones al<br />

nacimiento no varió significativamente (P>0.05)<br />

Tamaño de la camada en cerdas<br />

entre los diferentes grupos. En el grupo 1, las<br />

cerdas multíparas presentaron significativamente<br />

(P0.05)<br />

entre los grupos estudiados. Sin embargo, en las<br />

primerizas, las cerdas inseminadas y las<br />

inseminadas con tratamiento previo de<br />

gonadotropinas presentaron significativamente<br />

Grupo 3<br />

9.44 ± 4.2<br />

10.49 ± 2.6<br />

10.29 ± 3.0<br />

General<br />

9.26 ± 2.7 a<br />

10.49 ± 3.2 b<br />

(P


L A Ruvalcaba-Ramírez et al.<br />

Cuadro 4. Porcentaje de lechones nacidos muertos de cerdas primíparas y multíparas, de los grupos 1<br />

(inseminación artificial), 2 (inseminación artificial con tratamiento previo de gonadotropinas) y 3 (monta<br />

natural).<br />

Cerdas<br />

Primíparas<br />

Multíparas<br />

General<br />

Grupo 1<br />

10.8<br />

7.9<br />

8.9<br />

En general, el promedio de lechones<br />

destetados no varió significativamente (P>0.05)<br />

entre los diferentes grupos. Sin embargo, en las<br />

cerdas primerizas de los grupos 1 y 2 presentaron<br />

significativamente mayor promedio de lechones<br />

destetados que las del grupo 3. El promedio de<br />

lechones destetados fue significativamente mayor<br />

Grupo 2<br />

2.8<br />

3.4<br />

3.2<br />

Grupo 3<br />

40.9<br />

6.7<br />

12.6<br />

General<br />

14.9<br />

6.4<br />

8.7<br />

(P


cerdas adultas. Sin embargo, el promedio de<br />

lechones nacidos vivos en las cerdas primerizas<br />

fue menor en monta natural que con inseminación<br />

artificial.<br />

Los promedios del total de lechones al<br />

nacimiento fueron de 10.1, 10.0 y 10.29 en las<br />

cerdas inseminadas, inseminadas con tratamiento<br />

previo de gonadotropinas y con monta natural,<br />

respectivamente. Lo cual indica que el total de<br />

lechones al nacimiento no se alteró con el uso de<br />

la inseminación artificial y presenta la misma<br />

Tamaño de la camada en cerdas<br />

eficiencia que la monta natural. Para lograr estos<br />

resultados se requiere que se deposite la suficiente<br />

cantidad de espermatozoides con capacidad<br />

fertilizante durante la inseminación artificial, que<br />

se realice en el momento apropiado, de<br />

preferencia 12 horas antes de la ovulación, y con<br />

semen manejado adecuadamente. 1,5,6,7,8,9 En el<br />

presente estudio, la inseminación artificial se<br />

realizó en el cuello uterino, en el mismo lugar<br />

donde el macho deposita los espermatozoides<br />

durante la cópula, y se llevó a cabo cada 24 horas<br />

mientras la cerda permanecía en celo.<br />

Cuadro 6. Medias (± DE) de lechones destetados de cerdas primíparas y multíparas, de los grupos 1<br />

(inseminación artificial), 2 (inseminación artificial con tratamiento previo de gonadotropinas) y 3 (monta<br />

natural).<br />

Cerdas<br />

Primíparas<br />

Multíparas<br />

General<br />

Grupo 1<br />

6.89 ± 2.0 a<br />

8.48 ± 2.6 b<br />

7.80 ± 2.5<br />

Grupo 2<br />

7.78 ± 1.4<br />

8.40 ± 3.4<br />

8.24 ± 3.0<br />

Grupo 3<br />

4.00 ± 2.5 a*<br />

8.47 ± 1.7 b<br />

6.79 ± 2.9<br />

Medias con diferente literal son distintas entre sí (P < 0.05)<br />

* Difiere significativamente (P < 0.05) a los valores correspondientes de los grupos 1 y 2.<br />

El total de lechones al nacimiento fue<br />

mayor en las cerdas multíparas que en las<br />

primerizas lo que coincide con los resultados de la<br />

literatura. 10 Los cuernos uterinos son más largos<br />

en las cerdas de varios partos por lo cual se<br />

incrementa la cantidad de embriones que se<br />

implantan y de fetos que se mantienen hasta el<br />

parto. 11<br />

El promedio de lechones nacidos vivos al<br />

nacimiento fue significativamente menor en las<br />

cerdas primerizas fertilizadas con monta natural<br />

en comparación con las primerizas con<br />

inseminación artificial e inseminación artificial<br />

con tratamiento previo de gonadotropinas, lo cual<br />

se debió a que presentaron mayor porcentaje de<br />

163<br />

General<br />

6.08 ± 2.7 a<br />

8.28 ± 3.2 b<br />

lechones nacidos muertos; es probable que a estas<br />

hembras no se les haya proporcionado los<br />

cuidados adecuados en el momento del parto.<br />

El promedio de lechones nacidos vivos<br />

tendió a incrementarse en las cerdas inseminadas<br />

con tratamiento previo de gonadotropinas en<br />

comparación con los grupos 1 y 3. Resultados que<br />

coinciden con los publicados por Lancaster et<br />

al., 12 autores que con el mismo tratamiento<br />

encontraron un aumento significativo en la<br />

cantidad de lechones vivos al nacimiento, y<br />

Estienne y Hartsock 13 quienes obtuvieron 12.7 y<br />

11.7 (P>0.1) lechones nacidos vivos de cerdas<br />

tratadas con PG600 y solución salina,<br />

respectivamente. En el presente trabajo, las


hembras que incrementaron el promedio de<br />

lechones vivos al nacimiento (Grupo 2) también<br />

presentaron menor porcentaje de lechones nacidos<br />

muertos.<br />

La tendencia al incremento de la media<br />

de lechones vivos al nacimiento y a la reducción<br />

del porcentaje de lechones nacidos muertos de las<br />

cerdas inseminadas con tratamiento previo de<br />

gonadotropinas probablemente se debió a que las<br />

gonadotropinas sincronizaron la ovulación y con<br />

esto la uniformidad del desarrollo embrionario. El<br />

proceso de ovulación en la cerda se presenta<br />

durante un período de 3.8 horas, 14 como<br />

consecuencia algunos ovocitos se fertilizan antes<br />

que otros y su desarrollo no es homogéneo. Los<br />

L A Ruvalcaba-Ramírez et al.<br />

embriones formados a partir de ovocitos emitidos<br />

al principio del período ovulatorio empiezan la<br />

secreción de estrógenos antes que los de<br />

ovulaciones tardías; lo cual establece un medio<br />

uterino con elevado contenido de estrógenos que<br />

probablemente no sea favorable para los<br />

embriones más jóvenes que eventualmente no<br />

sobreviven. 15 Por lo tanto, el tamaño de la camada<br />

se podría incrementar con tratamientos que<br />

conduzcan a la sincronización de la ovulación y,<br />

como consecuencia, al desarrollo embrionario. La<br />

aplicación de PG600 sincroniza la ovulación en el<br />

84% de los casos y se incrementa al 90% con la<br />

inyección de 100 UI de hCG, 70 horas después de<br />

la primera aplicación. 16<br />

Cuadro 7. Porcentaje de lechones que se destetaron en cerdas primíparas y multíparas, de los grupos 1<br />

(inseminación artificial), 2 (inseminación artificial con tratamiento previo de gonadotropinas) y 3 (monta<br />

natural).<br />

Cerdas<br />

Primíparas<br />

Multíparas<br />

General<br />

Grupo 1<br />

70.4<br />

79.7<br />

75.9<br />

La incidencia de fetos momificados se ha<br />

encontrado que se relaciona con el tamaño de la<br />

camada. Wu et al. 17 encontraron un incremento<br />

lineal del 1 al 12% de la semana 7 a la 15 de la<br />

gestación, en camadas de 10 o más lechones, lo<br />

cual concuerda con los resultados del presente<br />

estudio; la media general del total de lechones fue<br />

de 10.12 y se encontraron 2.6% de fetos<br />

momificados.<br />

Un resultado adicional del presente<br />

estudio corresponde al promedio de lechones<br />

destetados. La media de este valor fue<br />

significativamente mayor en las cerdas multíparas<br />

en comparación con las primerizas, lo cual se<br />

debió a que las últimas presentaron menor<br />

Grupo 2<br />

84.3<br />

82.7<br />

83.1<br />

164<br />

Grupo 3<br />

73.5<br />

79.9<br />

78.4<br />

General<br />

74.5<br />

80.9<br />

78.8<br />

promedio de lechones nacidos vivos y menor<br />

porcentaje de lechones destetados; esto coincide<br />

con los resultados de la literatura. La cantidad de<br />

lechones destetados depende de la producción de<br />

leche de la cerda, y uno de los factores que<br />

influyen en la producción durante la lactancia es el<br />

estímulo de los lechones durante el<br />

amamantamiento; a mayor cantidad de lechones<br />

mayor estímulo sobre las glándulas mamarias. 18 El<br />

tamaño de la camada se incrementa conforme la<br />

cerda presenta sus partos, es menor en las<br />

primerizas que en las multíparas. 10 Las cerdas<br />

inseminadas con tratamiento previo de<br />

gonadotropinas tendieron a presentar mayor<br />

promedio y porcentaje de lechones al destete,


hecho que coincide con los resultados obtenidos<br />

por Kirkwood et al. 19 Lo cual se puede deber al<br />

efecto de las gonadotropinas sobre la<br />

superovulación. La mayor incidencia de<br />

ovulaciones conduce a la mayor presencia de<br />

cuerpos lúteos en los ovarios, en donde al final de<br />

la gestación de la cerda se produce relaxina;<br />

hormona que se relaciona con el crecimiento de<br />

las glándulas mamarias y, por consiguiente con la<br />

producción de leche durante la lactancia. 18<br />

LITERATURA CITADA<br />

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Shurson GC, Hawton JD, Carbo BG.<br />

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determined by ultrasonography, on<br />

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Schwarz M, Willman T, Petzoldt R.<br />

Tamaño de la camada en cerdas<br />

165<br />

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reproductive performance of primiparous<br />

sows. Swine Health Prod 1998; 6: 51-55.


L A Ruvalcaba-Ramírez et al.<br />

ABSTRACT<br />

Ruvalcaba-Ramírez LA, de la Puente-Ocampo F, Aréchiga-Flores CF, Escobar-Medina FJ. Litter<br />

size of naturally breed and artificially inseminated sows. Litter size from naturally bred (n=48),<br />

inseminated (n=64) and gonadotropin-treated and inseminated (n=37) sows form commercial swine units<br />

was evaluated. Sows party was not allotted. Natural breeding and heat detection for insemination<br />

depended upon owner and/or manager’s decision. Therefore, insemination was performed by the same<br />

techicina in a daily schedule for each farm (every 24 hours) based on heat information provided by the<br />

farm personnel. Total number of pigs born did not show differences within inseminated, gonadotropintreated<br />

prior to insemination and naturally breeding. However, there was a tendency for higher number of<br />

piglets in multiparous than primiparous sows. Moreover, there were no significant differences in the<br />

number of piglets born alive and the number of piglets weaned, but there were differences between<br />

multiparous and primiparous sows using artificial insemination and natural breeding (P


GANANCIA DE PESO EN OVINOS TRATADOS CON ZERANOL<br />

María de los Angeles Gómez-Armendáriz, Juan Ignacio Dávila-Félix, Francisco Javier Escobar-Medina<br />

Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong><br />

E-mail: fescobar@cantera.reduaz.mx<br />

RESUMEN<br />

Se evaluó el efecto del zeranol sobre la ganancia de peso y la eficiencia alimenticia de 40 ovinos<br />

Khatadine X Dorper (20 machos y 20 hembras), los cuales no recibieron o fueron tratados con 1 ml de<br />

Zeramec por cada 50 Kg de peso, tres días después del destete (10 machos y 10 hembras/grupo). Los animales<br />

tuvieron libre acceso a sales, agua, minerales y una ración alimenticia que cubrió sus requerimientos<br />

nutricionales; además, se pesaron y se les determinó el consumo de alimento cada 28 días. Después de 90 días<br />

que duró el experimento, la ganancia diaria de peso fue de 9.25 y 11.60 Kg en los machos tratados con<br />

zeranol y en el grupo testigo, respectivamente; y de 6.67 y 9.20 Kg en las hembras. Las diferencias no fueron<br />

estadísticamente significativas (P > 0.05). El consumo de alimento fue significativamente mayor (P < 0.05) en<br />

los animales del grupo testigo que en el tratado con zeranol, tanto en los machos como en las hembras; y la<br />

conversión alimenticia no varió significativamente (P < 0.05) entre los animales estudiados, pero los machos<br />

tratados con zeranol tendieron a consumir menor cantidad de alimento para incrementar un Kg de peso; en las<br />

hembras la situación fue diferente, la conversión alimenticia tendió a disminuir en los animales del grupo<br />

testigo.<br />

INTRODUCCIÓN<br />

En los ovinos es importante conocer las<br />

características de su crecimiento para explotarlos<br />

eficientemente y disponer de mayor cantidad de<br />

proteína de origen animal. Según los resultados de<br />

estudios previos, los machos presentan mayor<br />

velocidad de crecimiento que las hembras, 1 lo cual<br />

se debe al efecto anabólico de las hormonas que<br />

produce el testículo. 2,3<br />

La menor velocidad de crecimiento en las<br />

hembras se puede alterar con tratamientos previos<br />

al nacimiento. La aplicación de andrógenos a sus<br />

madres durante el desarrollo fetal, las ovejas<br />

después del nacimiento presentan un crecimiento<br />

similar a los machos. 4<br />

En rumiantes, el crecimiento también se<br />

ha incrementado con la utilización de productos<br />

anabólicos, como las hormonas esteroides. Sin<br />

embargo, en algunos casos se han encontrado<br />

resultados contradictorios. Por ejemplo, el uso de<br />

zeranol en ovinos, producto con actividad<br />

estrogénica, en unos trabajos ha incrementado la<br />

ganancia de peso, 5,6,7,8,9 mientras que en otros<br />

no. 10,11 Sería interesante realizar estudios<br />

adicionales para clarificar esta interrogante. El<br />

presente trabajo se llevó a cabo con el propósito<br />

Palabras clave: Ganancia de peso, zeranol, ovinos<br />

<strong>Veterinaria</strong> <strong>Zacatecas</strong> <strong>2004</strong>; 2: 167-172<br />

de evaluar la ganancia de peso y la eficiencia<br />

alimenticia en ovinos tratados con Zeranol.<br />

MATERIAL Y MÉTODOS<br />

El trabajo se realizó a 103° latitud norte y<br />

24° longitud oeste, y a 2250 msnm. 12 Se utilizaron<br />

40 ovinos Khatadine x Dorper, clínicamente<br />

sanos: 20 machos y 20 hembras; los cuales se<br />

agruparon por sexo y tratamiento, 10 en el grupo<br />

tratado y 10 en el testigo de cada sexo. A los<br />

animales tratados se les aplicó 1 ml de Zeramec<br />

(Laboratorios Vribac México, S A de C V) por<br />

cada 50 kilogramos de peso del animal. Cada ml<br />

de Zeramec contiene 10 mg de zeranol y 10 mg de<br />

ivermectina. Los ovinos del grupo testigo se<br />

desparasitaron con 10 mg de ivermectina<br />

(Dectiver, LAPISA), no recibieron la aplicación<br />

de zeranol. El tratamiento se aplicó 3 días después<br />

del destete, a los 3 meses de edad de los animales,<br />

y el experimento se realizó durante 90 días.<br />

Los animales se pesaron y se les<br />

determinó el consumo de alimento cada 28 días;<br />

se alimentarán a voluntad con una ración que<br />

proporcionaba 12% de PC, 9.5% de PD, 2.3<br />

Mcal/Kg de EM, 1.1 Mcal/Kg de ENG, 65.5% de<br />

TND, 0.13% de Ca y 0.14% de P.


Los resultados se interpretaron por medio<br />

de análisis de varianza y comparación de medias<br />

por el método de Tukey. 13<br />

RESULTADOS<br />

En el Cuadro 1 se muestran los<br />

promedios de la ganancia de peso de los animales<br />

estudiados. Los machos tendieron a presentar<br />

mayor ganancia de peso que las hembras tanto en<br />

los animales tratados con zeranol como en los<br />

pertenecientes al grupo testigo. Aunque no se<br />

encontró efecto significativo (P > 0.05), la<br />

diferencia entre la ganancia del peso entre machos<br />

y hembras fue ligeramente mayor en los animales<br />

tratados con zeranol (2.58 Kg) que en los del<br />

grupo testigo (2.40 Kg). Los machos y las<br />

hembras del grupo testigo tendieron a presentar<br />

M A Gómez-Armendáriz et al.<br />

mayor incremento de peso que los animales de su<br />

mismo sexo del grupo tratado (P > 0.05). El<br />

promedio general de la ganancia de peso fue de<br />

10.56 Kg en los machos y de 8.00 Kg en las<br />

hembras.<br />

Los machos y las hembras del grupo<br />

testigo presentaron significativamente (P0.05) entre los machos y las<br />

hembras de un mismo tratamiento. En los<br />

animales tratados con zeranol, las hembras<br />

tendieron a consumir mayor cantidad de alimento<br />

que los machos, y en los animales del grupo<br />

testigo la situación fue diferente, los machos<br />

tendieron a consumir más alimento que las<br />

hembras (Cuadro 2).<br />

Cuadro 1. Promedios (± EEM) de ganancia de peso (Kg) en ovinos machos y hembras, tratados con<br />

Zeramec<br />

Tratamiento<br />

Zeramec<br />

Testigo<br />

General<br />

Machos<br />

9.25 ± 1.2<br />

11.60 ± 1.4<br />

10.56 ± 0.9<br />

Hembras<br />

6.67 ± 1.2<br />

9.20 ± 1.4<br />

8.00 ± 0.9<br />

Cuadro 2. Promedios (± EEM) de consumo de alimento (Kg) en ovinos machos y hembras, tratados con<br />

Zeramec<br />

Tratamiento<br />

Zeramec<br />

Testigo<br />

General<br />

Machos<br />

8.55 ± 0.61 a<br />

14.73 ± 0.82 b<br />

11.64 ± 1.36<br />

Medias con diferente literal en cada columna son distintas entre sí (P < 0.05).<br />

168<br />

Hembras<br />

10.73 ± 0.43 a<br />

13.83 ± 0.66 b<br />

12.28 ± 0.82


No se encontraron diferencias<br />

estadísticamente significativas en la conversión<br />

alimenticia (cantidad de alimento necesaria para<br />

incrementar un Kg de peso) entre los animales de<br />

un mismo tratamiento, ni entre los animales del<br />

mismo sexo. Las hembras en los diferentes<br />

tratamientos tendieron a consumir mayor cantidad<br />

Ganancia de peso en ovinos<br />

de alimento para incrementar un Kg de peso que<br />

los machos. La diferencia dentro de cada<br />

tratamiento fue mayor en los animales con la<br />

aplicación de zeranol (5.71 Kg) que en los del<br />

grupo testigo (2.09 Kg). La media general del<br />

valor de esta variable fue de 10.99 Kg en los<br />

machos y de 14.51 Kg en las hembras (Cuadro 3).<br />

Cuadro 3. Promedios (± EEM) de conversión alimenticia (Kg) en ovinos machos y hembras, tratados con<br />

Zeramec<br />

Tratamiento<br />

Zeramec<br />

Testigo<br />

General<br />

DISCUSIÓN<br />

En el presente estudio, el zeranol no<br />

incremento en peso de los ovinos en comparación<br />

con el grupo testigo (sin tratamiento), lo cual<br />

coincide con los resultados de otros trabajos 10,11 y<br />

con estudios realizados en bovinos, 14 pero no<br />

concuerda con los publicados por otros<br />

autores. 5,6,7,8,9 Field et al. 11 no encontraron<br />

incremento significativo en el peso, ni en la<br />

ganancia diaria de peso de corderos tratados con<br />

implantes de 12 mg de zeranol. La aplicación del<br />

implante se realizó dos semanas después del<br />

destete cuando los animales pesaban 35 Kg en<br />

promedio. La respuesta al tratamiento varió de<br />

acuerdo a la dosis. En los animales tratados con<br />

un implante, el peso fue ligeramente mayor al<br />

final del experimento, pero sin alcanzar diferencia<br />

estadísticamente significativa (P>0.05) en<br />

comparación con el grupo testigo (sin<br />

tratamiento); mientras que en los corderos tratados<br />

con un implante similar (12 mg de zeranol) y<br />

reimplantados 28 días después, el tratamiento<br />

redujo ligeramente el peso al final del<br />

experimento y la ganancia diaria de peso. En el<br />

presente estudio, la aplicación de 10 mg de<br />

Machos<br />

10.34 ± 0.88<br />

11.41 ± 1.26<br />

10.99 ± 0.74<br />

169<br />

Hembras<br />

16.05 ± 1.76<br />

13.50 ± 0.13<br />

14.51 ± 0.91<br />

zeranol por cada 50 Kg de peso del animal tendió<br />

a reducir el incremento de peso, tanto en los<br />

machos como en las hembras, en comparación con<br />

el grupo sin tratamiento, de la misma manera<br />

como ocurrió en el trabajo de Field et al. 11 con la<br />

aplicación de dos implantes; es probable que la<br />

dosis de zeranol utilizada en el presente estudio<br />

mantenga una concentración de zeranol similar a<br />

la proporcionada por la aplicación de dos<br />

implantes. Olivares y Hallford 10 también aplicaron<br />

un implante de 12 mg de zeranol a corderos<br />

castrados, el implante se aplicó 28 días después<br />

del destete. Los animales al final del experimento<br />

que duró 42 días, presentaron ligeramente mayor<br />

peso, pero sin diferencia estadísticamente<br />

significativa (P = 0.11) que los pertenecientes al<br />

grupo testigo. En bovinos se ha encontrado una<br />

situación similar, la aplicación de zeranol tendió a<br />

reducir el incrementó el peso en comparación con<br />

los animales no tratados, tanto en becerros como<br />

en novillos. 14 Por otro lado, Hutcheson et al. 6<br />

encontraron mayor de ganancia diaria de peso<br />

(26%) en los corderos cruzados tratados con un<br />

implante de 12 mg de zeranol al inicio del<br />

experimento y reimplantados 56 días después; los<br />

animales al principio del estudio pesaban 25.1 Kg


en promedio y el experimento duró 84 días. Otros<br />

autores también han encontrado incremento de<br />

peso con la aplicación de zeranol; 7,8,9 resultados<br />

que no concuerdan con los encontrados en el<br />

presente estudio. El zeranol tampoco incrementó<br />

el peso de las ovejas, en comparación con los<br />

animales del grupo testigo, lo que no coincide con<br />

los resultados de otros trabajos. Por ejemplo,<br />

Wilson et al. 9 informaron que los implantes de<br />

zeranol incrementaron la ganancia diaria de peso<br />

en comparación con los animales no tratados.<br />

En este trabajo, los machos tendieron a<br />

presentar mayor ganancia de peso que las<br />

hembras, tanto en el grupo tratado con zeranol<br />

como en el testigo; lo cual concuerda con los<br />

resultados de la literatura. En ovinos 1 y cerdos, 15,16<br />

entre otras especies, la velocidad de crecimiento<br />

es mayor en los machos que en las hembras, lo<br />

cual se debe al efecto anabólico de los andrógenos<br />

endógenos. 17<br />

Los animales del grupo testigo del<br />

presente estudio, tendieron a presentar mayor<br />

ganancia de peso que los del grupo tratado, tanto<br />

en los machos como en las hembras. Lo cual<br />

probablemente también se debió a las hormonas<br />

endógenas. El presente estudio se realizó de<br />

agosto a noviembre, temporada del año donde los<br />

ovinos presentan la pubertad; 18 es posible que los<br />

animales del grupo testigo presentaron la pubertad<br />

y sus hormonas endógenas influyeron en el<br />

incremento del peso, lo que no ocurrió con los del<br />

grupo tratado. El zeranol en machos enteros tanto<br />

en bovinos 19,20 como en ovinos 11,21,22,23 retraza el<br />

desarrollo testicular y el comportamiento de<br />

macho. En un estudio, la aplicación de un<br />

implante de zeranol de 12 mg, redujo el 50% del<br />

peso testicular, en los corderos de 114 días de<br />

edad; 11 en otro estudio, 21 la aplicación de un<br />

implante similar al nacimiento y otro al destete,<br />

redujo el 25 % de peso testicular, en comparación<br />

con los corderos no tratados; la evaluación se<br />

realizó de 139 a 155 días de edad de los animales.<br />

En este último trabajo, la circunferencia escrotal<br />

fue mayor en los corderos sin tratamiento que en<br />

los implantados con zeranol, a partir del destete.<br />

La reducción en el desarrollo testicular que<br />

presentan los animales tratados con zeranol<br />

conduce a menor secreción de testosterona tanto<br />

en los bovinos 24,25 como en los ovinos 21 y se debe<br />

a la reducción en la secreción de hormona<br />

luteinizante, 22,23,24 provocada por la<br />

retroalimentación negativa de los estrógenos sobre<br />

el hipotálamo e hipófisis antes de la<br />

pubertad. 18,26,27<br />

M A Gómez-Armendáriz et al.<br />

170<br />

En el presente estudio, tanto los machos<br />

como las hembras tratados con zeranol redujeron<br />

significativamente (P < 0.05) el consumo de<br />

alimento, en comparación con los animales de su<br />

correspondiente grupo testigo. Sin embargo, esta<br />

relación no se mantuvo en la conversión<br />

alimenticia, ya que no difirió significativamente<br />

(P>0.05) entre los animales tratados y los<br />

pertenecientes al grupo testigo. Los machos<br />

tratados con zeranol tendieron a presentar mayor<br />

eficiencia alimenticia, consumieron en promedio<br />

menor cantidad de alimento (10.34 Kg) para<br />

incrementar 1 Kg de peso, en comparación con los<br />

machos del grupo testigo (11.41 Kg). En las<br />

hembras, el resultado fue diferente, las<br />

pertenecientes al grupo testigo consumieron<br />

menor cantidad de alimento (13.5 Kg) que las<br />

corderas tratadas con zeranol (16.05 Kg), para<br />

incrementar 1 Kg de peso. Los resultados de<br />

conversión alimenticia en la literatura son<br />

contradictorios. Algunos autores han encontrado<br />

mayor eficiencia alimenticia en los animales<br />

tratados con zeranol, en comparación con el grupo<br />

testigo, 6,7,21 mientras que en otros trabajos la<br />

mejor conversión alimenticia se ha encontrado en<br />

los corderos sin tratamiento. 11<br />

Los resultados del presente estudio<br />

sugieren que el zeranol no incrementa la ganancia<br />

de peso en ovinos (ni en los machos ni en las<br />

hembras), reduce significativamente el consumo<br />

de alimento en los dos sexos, pero no presenta una<br />

tendencia constante en la conversión alimenticia:<br />

para incrementar un Kg de peso, los machos<br />

consumen ligeramente menor cantidad de<br />

alimento y en las hembras la situación es<br />

diferente, presentan mayor consumo, en<br />

comparación con el grupo testigo (sin<br />

tratamiento). Además, confirman que la ganancia<br />

de peso es mayor en los machos que en las<br />

hembras.<br />

LITERATURA CITADA<br />

1. Viramontes F. Dimorfismo sexual en el<br />

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Rambouillet. Tesis de Maestría. Facultad<br />

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gonadotropin. Am J Vet Res 1987; 48:<br />

31-36.<br />

25. Gray DG, Unruh JA, Dikeman ME,<br />

Stevenson JS. Implanting young bulls<br />

M A Gómez-Armendáriz et al.<br />

ABSTRACT<br />

from birth to four slaughter ages: III.<br />

Growth performance and endocrine<br />

aspects. J Anim Sci 1986; 63: 747-756.<br />

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Endocrinology 1984; 115: 944-950.<br />

Gómez-Armendáriz MA, Juan Ignacio Dávila Félix JI, Escobar Medina FJ. Weight gain in sheep<br />

treated with zeranol. Forty Khatadine x Dorper lambs (20 male and 20 female) received no treatment or 1 ml<br />

of Zeramec/50 Kg on 3 days after weaning (10 male and 10 female/group). Animals had a libitum access of<br />

water, sat, minerals and diet that covered their nutritional requirements; and were weighted and determined<br />

their feed intake every 28 days. After 90 days, the average weight gain was 9.25 and 11.60 Kg in the males<br />

treated with Zeramec and no treated, respectively; and 6.67 and 9.20 Kg in the females. The differences were<br />

not statistically significant (P>0.05). The feed intake was increased (P


GANANCIA DE PESO DE BECERROS Y NOVILLOS TRATADOS CON SYNOVEX M Y<br />

ZERAMEC<br />

Audemio Ismael Palomino Moreno, Ricaurte Valentín Solís Cano, Juan Ignacio Dávila Félix, Francisco Javier<br />

Escobar Medina<br />

Unidad Académica de Medicina <strong>Veterinaria</strong> y Zootecnia de la Universidad Autónoma de <strong>Zacatecas</strong><br />

E-mail. fescobar@cantera.reduaz.mx<br />

RESUMEN<br />

Se evaluó el efecto del Synovex M y el Zeramec sobre la ganancia de peso de 30 becerros y 30<br />

novillos. Los animales se dividieron en tres grupos de 20 miembros cada uno (10 becerros y 10 novillos) y el<br />

trabajo se inició cuando pesaban 242.3 Kg en promedio. Un grupo recibió la aplicación de un implante de<br />

Synovex M, otro la inyección de 1 ml por cada 50 kilogramos de peso de Zeramec y un tercero no recibió<br />

tratamiento (grupo testigo). Los animales se pesaron y se les determinó el consumo de alimento cada 28 días;<br />

se alimentaron a voluntad con una ración que cubrió sus requerimientos nutricionales. La ganancia de peso en<br />

91 días que duró el experimento fue de 110.7, 86.2, 82.5, 59.1, 99.9 y 72.7 Kg en los becerros y novillos<br />

implantados con Synovex M, becerros y novillos con la aplicación de Zeramec y en los becerros y novillos<br />

del grupo testigo, respectivamente; el efecto fue significativamente mayor (P


animales se dividieron en tres grupos de 20<br />

miembros cada uno: 10 becerros y 10 novillos. A<br />

un grupo se le aplicó un implante de Synovex M<br />

(Ford Dodge), el cual contiene 200 mg de<br />

progesterona y 20 mg de benzoato de estradiol; el<br />

benzoato de estradiol contiene 71.4% de<br />

estradiol. 3 A otro grupo de animales se le aplicó 1<br />

ml de Zeramec (Laboratorios Vribac México, S A<br />

de C V) por cada 50 kilogramos de peso. Cada ml<br />

de Zeramec contiene 10 mg de zeranol y 10 mg de<br />

ivermectina, y los del tercero no recibieron<br />

tratamiento, constituyeron el grupo testigo. Los<br />

animales de los grupos Synovex M y testigo,<br />

además, se desparasitaron con ivermectina<br />

(Dectiver, LAPISA). El trabajo se inició cuando<br />

los animales pesaban 242.3 Kg en promedio, y se<br />

realizó durante 91 días.<br />

Los animales se pesaron y se les<br />

determinó el consumo de alimento cada 28 días;<br />

se alimentarán a voluntad con una ración que<br />

proporcionaba 12.5% de PC, 9.4% de P D, 13%<br />

de FC, 2.2 Mcal/Kg de E M, 1.06 Mcal/Kg de<br />

Ganancia (Kg)<br />

50<br />

45<br />

40<br />

35<br />

30<br />

25<br />

20<br />

15<br />

10<br />

5<br />

0<br />

03-Jul<br />

10-Jul<br />

17-Jul<br />

24-Jul<br />

A I Palomino-Moreno et al.<br />

31-Jul<br />

Fecha<br />

07-Ago<br />

ENG, 63.5 % de TND, 0.14% de Ca, 0.12% de P<br />

y 66.9% de Materia seca.<br />

Los resultados se agruparon de acuerdo a<br />

sus diferentes categorías y se interpretaron por<br />

medio de análisis de varianza y comparación de<br />

medias por el método de Tukey. 3<br />

RESULTADOS<br />

En los becerros y en los novillos, la<br />

ganancia de peso fue significativamente mayor<br />

(P


valor de esta variable tendió a ser mayor en los<br />

animales tratados con Zeramec y menor en los<br />

Ganancia de peso de becerros y novillos<br />

implantados con Synovex M, los del grupo testigo<br />

presentaron valores intermedios.<br />

Cuadro 1. Promedios (± DE) de ganancia de peso (Kg) en becerros y novillos tratados con Synovex M y<br />

Zeramec<br />

Tratamiento<br />

Synovex M<br />

Zeramec<br />

Testigo<br />

General<br />

Becerros<br />

110.7 ± 6.9 a *<br />

82.5 ± 5.7 b *<br />

99.9 ± 6.6 ab *<br />

97.6 ± 22.9*<br />

Medias con diferente literal en cada columna, son distintas entre sí (P < 0.05)<br />

*Difiere del valor correspondiente de los novillos (P < 0.05)<br />

Novillos<br />

86.2 ± 4.7 a<br />

59.1 ± 5.4 b<br />

72.7 ± 8.6 ab<br />

73.2 ± 22.7<br />

Cuadro 2. Promedios (± DE) de consumo de alimento (Kg) en becerros y novillos tratados con Synovex<br />

M y Zeramec<br />

Tratamiento<br />

Synovex M<br />

Zeramec<br />

Testigo<br />

General<br />

Becerros<br />

87.40 ± 6.03<br />

87.47 ± 3.13<br />

91.46 ± 4.78*<br />

88.78 ± 4.95*<br />

Difiere significativamente del valor correspondiente en novillos (P 0.05), durante los primeros 74<br />

días del experimento. En el presente estudio, la<br />

ganancia diaria de peso fue de 1.22 Kg en los<br />

becerros y de 0.93 Kg en los novillos.


Se encontró una interacción significativa<br />

(P < 0.05) en la ganancia de peso entre los<br />

tratamientos y la presencia o ausencia de<br />

testículos en los animales. La interacción se debió<br />

a que los becerros tratados con Syncromate M<br />

tendieron a presentar mayor ganancia de peso al<br />

principio y al final del experimento; en la parte<br />

media del estudio, los becerros del grupo testigo<br />

manifestaron mayor aumento de peso. Los<br />

animales testículo intactos tratados con Zeramec<br />

redujeron significativamente (P


El consumo de alimento no difirió<br />

significativamente entre los animales tratados con<br />

Synovex M, Zeramec y el grupo testigo en los<br />

becerros y en los novillos. Lo cual no coincide<br />

con los resultados de la literatura. Algunos autores<br />

han encontraron mayor consumo de materia seca<br />

en los novillos tratados con un implante similar al<br />

Synovex M utilizado en el presente estudio 5 y con<br />

implantes de 36 mg de zeranol. 11<br />

En el presente estudio, la conversión<br />

alimenticia, es decir la cantidad de alimento que<br />

un animal consume para incrementar un Kg de<br />

peso, no varió significativamente (P>0.05) entre<br />

los animales tratados con Synovex M, Zeramec y<br />

el grupo testigo, tanto en los becerros como en los<br />

novillos. Sin embargo, el valor de esta variable<br />

tendió a incrementarse en los animales tratados<br />

con Zeramec y reducirse en los implantados con<br />

Synovex M; el grupo testigo presentó valores<br />

intermedios. Lo cual no coincide con los<br />

resultados de algunos autores, pero con otros sí.<br />

Por un lado, Guiroy et al. 5 con la aplicación de un<br />

implante de la misma concentración hormonal que<br />

el Synovex M utilizado en el presente trabajo, y<br />

Mader 11 con la aplicación de zeranol, encontraron<br />

mayor valor de la proporción ganancia/consumo<br />

de alimento en los animales tratados que en los del<br />

grupo testigo (sin tratamiento). Por otro lado,<br />

Guiroy et al. 5 informaron que los animales<br />

implantados con zeranol tendieron consumir<br />

mayor cantidad de alimento para incrementar un<br />

Kg de peso.<br />

Los resultados del presente estudio<br />

sugieren que el Synovex M incrementa la<br />

ganancia de peso de los becerros y novillos y<br />

mejora su conversión alimenticia, lo que no ocurre<br />

con la aplicación de Zeramec. El Zeramec incluso<br />

puede reducir la ganancia de peso. La ganancia de<br />

peso es mayor en los becerros que en los novillos.<br />

LITERATURA CITADA<br />

1. Unruh JA. Effects of endogenous and<br />

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and meat nutritional value. J Anim Sci<br />

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4. Gill J. Design and analysis of<br />

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Anim Sci 1988; 66: 2736-2741.<br />

11. Mader TL. Effect of implant sequence<br />

and dose on feedlot cattle performance. J<br />

Anim Sci. 1994; 72: 277-82.<br />

12. Gray DG, Unruh JA, Dikeman ME,<br />

Stevenson JS. Implanting young bulls<br />

from birth to four slaughter ages: III.<br />

Growth performance and endocrine<br />

aspects. J Anim Sci 1986; 63: 747-756.<br />

13. Unruh JA, Pelton CD, Gray DG,<br />

Dikeman ME, Allen DM, Corah LR.<br />

Effects of zeranol-implantation periods<br />

of palatability of longissimus sticks from<br />

young bulls and steers. J Anim Sci 1987;<br />

65: 165-172.


A I Palomino-Moreno et al.<br />

ABSTRACT<br />

Palomino-Moreno AI, Solís-Cano RV, Dávila-Félix JI, Escobar-Medina JF. Weight gain in yearling<br />

calves and steers treated with Synovex M y Zeramec In a 91 days of trial, 30 yearling calves and 30 steers<br />

(242.3 Kg) were treated as follows: (C) control, no implant; (S) Synovex M and (Z) 1 ml of Zeramec/50 Kg.<br />

Animals had a libitum access of water, sat, minerals and diet that covered their nutritional requirements; and<br />

were weighted and determined their food intake every 28 days. The average weight gain was 110.7, 86.2,<br />

82.5, 59.1, 99.9 and 72.7 kg in the yearling calves and steers treated with S, yearling calves and steer with Z<br />

and yearling calves and steers of C, respectively; the effect was significantly greater (P

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