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Estudio geoambiental del dragado del río Almendares desde el ...

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Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría<br />

CUJAE<br />

ESTUDIO GEOAMBIENTAL<br />

DEL DRAGADO DEL RÍO<br />

ALMENDARES DESDE EL ...<br />

Minerva de la Caridad Enríquez Ferriol<br />

La Habana, 2012


Tesis de Maestría


Página Legal<br />

<strong>Estudio</strong> <strong>geoambiental</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de calle 23 hasta su<br />

desembocadura. – La Habana : Instituto Superior Politécnico José Antonio Echeverría<br />

(CUJAE), 2012. – Tesis (Maestría).<br />

Dewey: 363.7 - Problemas medioambientales.<br />

Registro No.: Maestria829 CUJAE.<br />

(cc) Minerva de la Caridad Enríquez Ferriol, 2012.<br />

Licencia: Creative Commons de tipo Reconocimiento, Sin Obra Derivada.<br />

En acceso perpetuo: http://www.e-libro.com/titulos


ISPJAE<br />

FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL<br />

DEPARTAMENTO DE GEOCIENCIAS<br />

“ESTUDIO GEOAMBIENTAL DEL DRAGADO DEL<br />

RÍO ALMENDARES DESDE EL PUENTE DE CALLE<br />

23 HASTA SU DESEMBOCADURA”<br />

En opción al grado de Master en Geofísica<br />

Aplicada en la Mención de Medio Ambiente Físico<br />

Autora: Ing. Minerva de la Caridad Enríquez Ferriol<br />

Tutor: MSc. Fermín Vega Desdín<br />

Consultante: MSc. Daysi López García<br />

GEOCUBA, ESTUDIOS MARINOS<br />

Ciudad de La Habana, Cuba<br />

LA HABANA<br />

2010


DEDICATORIA<br />

A mi padre


AGRADECIMIENTOS<br />

En los momentos que debo presentar este trabajo es preciso agradecer de manera<br />

muy particular a un grupo de compañeros que además de brindarme solidaridad<br />

<strong>desde</strong> la perspectiva profesional, lo han hecho de forma humana debido a la<br />

amistad y cariño que nos une, es por eso que a continuación hago mención de los<br />

mismos.<br />

A mi hija por ser parte de este y todos mis proyectos, por permitirme crecer en<br />

medio de las dificultades.<br />

A mi madre que me hace la vida más llevadera para enfrentar diversos retos y por<br />

esa gran fuerza que me transmite para vivir.<br />

A las compañeras MSc. Moraima Alvarez Ortiz y Yaqu<strong>el</strong>in Artiles Pérez, quienes<br />

me apoyaron en cada uno de los módulos estudiados, además responsables hoy<br />

de que se lleve a efecto la tesis en cuestión.<br />

A mi gran amiga MSc. Hilda Amador Longoria, trabajadora de Digicupet; quien<br />

conozco y admiro hace muchos años, me ha apoyado siempre y en este proyecto,<br />

su ayuda y consejos han sido muy valiosos.<br />

A la compañera MSc. Deisy López Garcia, trabajadora de la brigada de<br />

Oceanografía de GEOCUBA, que colaboró en gran medida con su asesoría y<br />

conocimientos sobre <strong>el</strong> tema.<br />

Al compañero Ing. Lázaro Fernández Vila, trabajador de la brigada de<br />

Oceanografía de GEOCUBA quien tiene un amplio conocimiento en la materia<br />

tratada y gracias a esto fue mi consultante con mucha dedicación a pesar de sus<br />

problemas de salud.<br />

Al compañero MSc. Fermín Vega Desdín, tutor de este trabajo, quien me aportó<br />

sus conocimientos y apoyo en la confección de éste y realizó la revisión <strong>d<strong>el</strong></strong>


trabajo y de diversos materiales para consulta que me sirvieron en gran medida<br />

para llevar a<strong>d<strong>el</strong></strong>ante <strong>el</strong> presente estudio.<br />

A todo <strong>el</strong> colectivo de trabajadores <strong>d<strong>el</strong></strong> Departamento de Geociencias de la<br />

Facultad de Ingeniería Civil de la CUJAE, por su dedicación en las clases<br />

impartidas y la calidad de las mismas y en especial al Dr. Guillermo Miró Pages,<br />

que me apoyó en todo momento para llevar a<strong>d<strong>el</strong></strong>ante este trabajo y <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto<br />

de vista humano me transmitió su solidaridad y respeto.<br />

A todos <strong>el</strong>los que han sido y son mis compañeros de trabajo además de buenos<br />

amigos, que me alientan en <strong>el</strong> plano personal para seguir a<strong>d<strong>el</strong></strong>ante: mi eterno<br />

agradecimiento por su dedicación y esfuerzo.


RESUMEN<br />

El Objetivo General de esta investigación fue <strong>el</strong> de realizar un estudio<br />

<strong>geoambiental</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de la calle 23 hasta su<br />

desembocadura que sirva para establecer la línea de base ambiental con vistas a<br />

evaluar los impactos o afectaciones negativas y positivas que un <strong>dragado</strong> ejercería<br />

sobre esa parte <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

Como Objetivos específicos se diseñaron los siguientes:<br />

1. Caracterización en <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> estudiado de la batimetría, condiciones<br />

geológicas, climáticas, hidrológicas e hidroquímicas.<br />

2. Estudiar la contaminación de las aguas por residuales de todo tipo.<br />

3. Estudiar la contaminación de los sedimentos a dragar en cuanto a su<br />

contenido de hidrocarburos totales disu<strong>el</strong>tos, metales pesados y materia orgánica.<br />

Se lograron cumplir los objetivos propuestos, concluyendo que los principales<br />

problemas que afectan la calidad de las aguas superficiales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong><br />

están dados por los vertimientos históricos de aguas servidas sin tratar que <strong>el</strong><br />

mismo ha recibido. Según la Norma Cubana 27, 1999, <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> se<br />

comporta como un Albañal Típico por sus altos niv<strong>el</strong>es de contaminación de<br />

origen fecal. Los sedimentos presentan una alta contaminación orgánica.<br />

D<strong>el</strong> análisis de la evaluación de la calidad de las aguas y sedimentos en <strong>el</strong> sector<br />

estudiado, podemos considerar que la calidad de las aguas se evalúa como<br />

Deficiente y la de los sedimentos como Pésima.<br />

Toda la población de la ciudad de La Habana se beneficiará con <strong>el</strong> mejoramiento<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> cauce de la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> pues <strong>el</strong> caudal que se<br />

establecerá se caracterizará por corrientes con v<strong>el</strong>ocidades mayores permitiendo<br />

una mejor renovación de las aguas y en consecuencia, una mejoría en su calidad.<br />

Se recomienda un Código de Conducta Ambiental que debe cumplirse con vistas a<br />

minimizar la contaminación en <strong>el</strong> sector.


INDICE<br />

INTRODUCCIÓN 1<br />

1. CARACTERÍSTICAS FÍSICO-GEOGRÁFICAS DEL ÁREA DE<br />

ESTUDIO 5<br />

1.1 Características geológicas 5<br />

1.2 Características batimétricas 6<br />

1.3 Características hidrológicas 6<br />

1.4 Características hidrometeorológicas 6<br />

1.5 Características sísmicas 7<br />

1.6 Levantamiento Hidromagnético 8<br />

1.7 Características oceanográficas 8<br />

2. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA Y ANÁLISIS DE LA<br />

INFORMACIÓN CONSULTADA 11<br />

2.1 Consideraciones acerca <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto de <strong>dragado</strong> 11<br />

2.1.1 Canal de <strong>dragado</strong> 12<br />

2.1.2 Limpieza de las márgenes 12<br />

2.1.3 Vaciaderos 13<br />

Pag.<br />

2.1.3.1 Vaciadero en aguas profundas 13


2.1.3.2 Vaciadero terrestre en la Cantera <strong>d<strong>el</strong></strong> Husillo 14<br />

2.2 Reseña histórica de los asentamientos de población en <strong>el</strong> área<br />

estudiada 14<br />

2.3 Antecedentes de estudios ejecutados en <strong>el</strong> <strong>río</strong> y zonas<br />

adyacentes 18<br />

2.4 Principales fuentes contaminantes para <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong><br />

puente de la calle 23 a la desembocadura 20<br />

3. MÉTODOS DE ESTUDIO DE LA LÍNEA DE BASE<br />

AMBIENTAL 23<br />

3.1 Medio físico 23<br />

3.1.1 Batimetría 23<br />

3.1.2 Geología 23<br />

3.1.3 Meteorología 23<br />

3.1.4 Hidrología 24<br />

3.1.5 Investigaciones geofísicas 25<br />

3.1.5.1 Sísmica 25<br />

3.1.5.2 Levantamiento hidromagnético 25<br />

3.1.6 Oceanografía 25<br />

3.1.7 Hidroquímica y contaminación 26<br />

3.2 Medio biótico 29<br />

3.3 Medio socioeconómico 29<br />

4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN 31<br />

4.1 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Físico 31


4.1.1 Condiciones batimétricas 31<br />

4.1.2 Condiciones geológicas 33<br />

4.1.3 Régimen hidrometeorológico 35<br />

4.1.4 Condiciones hidrológicas 38<br />

4.1.5 Caracterización geofísica 39<br />

4.1.5.1 Sísmica 39<br />

4.1.5.2 Hidromagnetometría 40<br />

4.1.6 Condiciones oceanográficas 40<br />

4.1.6.1 Hidrodinámica 40<br />

4.1.6.2 Régimen termohalino 43<br />

4.1.6.3 Características hidroópticas 44<br />

4.1.7 Condiciones hidroquímicas 45<br />

4.1.8 Contaminación <strong>d<strong>el</strong></strong> agua y los sedimentos 47<br />

4.1.9 Evaluación de la calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> agua y los sedimentos 55<br />

4.2 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Biótico 57<br />

4.2.1 Biodiversidad de flora y fauna <strong>d<strong>el</strong></strong> Bosque de la Habana 58<br />

4.3 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Socioeconómico 61<br />

4.4 Valoración general <strong>d<strong>el</strong></strong> estado <strong>d<strong>el</strong></strong> entorno 62<br />

4.5 Probables afectaciones <strong>geoambiental</strong>es en la zona producidas<br />

por las acciones <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto de <strong>dragado</strong> 66<br />

4.6 Evaluación socioeconómica <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto 69<br />

4.7 Código de conducta ambiental para la ejecución de los trabajos<br />

en la zona <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> 71<br />

4.7.1 Normas generales 71


CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES 74<br />

REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS<br />

ANEXOS


INTRODUCCION<br />

En la actualidad <strong>el</strong> Parque Metropolitano de la Habana (PMH) constituye uno de los<br />

proyectos urbanísticos que pretende desarrollar <strong>el</strong> gobierno con vistas a propiciar <strong>el</strong><br />

programa de saneamiento ambiental así como la creación de un centro de esparcimiento<br />

y disfrute para los pobladores y visitantes de la capital. Dentro de este proyecto <strong>el</strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> es una de sus principales atracciones ya que <strong>el</strong> mismo <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de<br />

vista histórico es una de las más importantes corrientes fluviales de Cuba.<br />

Entre las tareas priorizadas en este lugar se encuentran: programa agroforestal,<br />

saneamiento ambiental, educación ambiental y participación comunitaria, desarrollo<br />

sociocultural y económico. En r<strong>el</strong>ación con esto, la contaminación <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> es <strong>el</strong> problema<br />

ambiental más serio que presenta la cuenca, siendo la situación sanitaria muy<br />

desfavorable debido a las descargas indiscriminadas de aguas residuales originadas en <strong>el</strong><br />

sector industrial y urbano.<br />

Entre las acciones ambientales para mejorar las condiciones naturales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> está <strong>el</strong><br />

<strong>dragado</strong> <strong>desde</strong> la desembocadura hasta <strong>el</strong> puente de la calle 23 ya que <strong>el</strong> cauce inferior<br />

de dicho <strong>río</strong> se encuentra azolvado y en ciertos tramos casi estrangulado, restándole<br />

capacidad de drenaje durante las grandes avenidas en <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do lluvioso y provocando <strong>el</strong><br />

estancamiento de las aguas contaminadas durante la sequía. Esta acción contribuye a<br />

mejorar las condiciones naturales de esta corriente fluvial de manera que <strong>el</strong> <strong>río</strong> retome su<br />

importante pap<strong>el</strong> dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano, para esto se requiere un estudio<br />

<strong>geoambiental</strong> integral que analice en forma global toda la problemática ambiental <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> en la zona <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano de la Habana y para alcanzar ese<br />

objetivo se acomete la investigación que sustenta esta tesis de grado.


Problema Científico:<br />

Con la aplicación integral de las ciencias <strong>geoambiental</strong>es mejorar la situación<br />

ambiental en <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> la Calle 23 hasta la<br />

desembocadura para que incida de forma positiva en <strong>el</strong> desarrollo de los<br />

programas que se ejecutan en <strong>el</strong> Parque Metropolitano de la Habana.<br />

Hipótesis:<br />

Caracterizando la contaminación crónica de las aguas y los sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> y <strong>el</strong> azolvamiento que existe en <strong>el</strong> área entre <strong>el</strong> puente de la calle<br />

23 y la Chorrera, es posible caracterizar la situación ambiental adversa a la<br />

cual se enfrenta este cuerpo de agua en <strong>el</strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano de<br />

La Habana.<br />

Unidad de observación:<br />

Las ciencias <strong>geoambiental</strong>es.<br />

Variables independientes:<br />

Contaminación crónica de las aguas y los sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> y<br />

azolvamiento existente en <strong>el</strong> área entre <strong>el</strong> puente de la calle 23 y la Chorrera.<br />

Variable dependiente:<br />

Caracterización de la situación ambiental adversa de la zona <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> enmarcada dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano.<br />

Elemento lógico:<br />

Dragado marítimo.<br />

Objetivo General:<br />

Realizar un estudio <strong>geoambiental</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de la<br />

calle 23 hasta su desembocadura que sirva para establecer la línea de base<br />

ambiental con vistas a evaluar los impactos o afectaciones negativas y<br />

positivas que un <strong>dragado</strong> ejercería sobre <strong>el</strong> área de estudio.<br />

Objetivos específicos:<br />

1. Caracterización en <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> estudiado de la batimetría, condiciones<br />

geológicas, climáticas, hidrológicas e hidroquímicas.<br />

2. Estudiar la contaminación de las aguas por residuales de todo tipo.<br />

3. Estudiar la contaminación de los sedimentos a dragar en cuanto a su<br />

contenido de hidrocarburos totales disu<strong>el</strong>tos, metales pesados y materia<br />

orgánica.<br />

2


Tareas de investigación:<br />

1. Búsqueda de información.<br />

Análisis de los trabajos precedentes realizados en <strong>el</strong> área para diferentes<br />

fines.<br />

Análisis de la base de datos disponible para su incorporación al proceso.<br />

Análisis de investigaciones afines realizadas.<br />

2. Procesamiento de las muestras obtenidas y de la información que aportan.<br />

3. Preparación de la base de datos generales.<br />

Organización de los datos por disciplina de investigación.<br />

Evaluación integral <strong>geoambiental</strong>.<br />

Elaboración <strong>d<strong>el</strong></strong> informe de investigación.<br />

3


CAPÍTULO 1. CARACTERÍSTICAS FÍSICO-GEOGRÁFICAS<br />

DEL ÁREA DE ESTUDIO


1. CARACTERÍSTICAS FÍSICO-GEOGRÁFICAS DEL ÁREA<br />

DE ESTUDIO<br />

El área de estudios, <strong>desde</strong> la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> hasta <strong>el</strong> Puente de la<br />

Calle 23, se extiende aproximadamente 1 000 metros <strong>río</strong> adentro. La línea costera en la<br />

desembocadura es rocosa y en toda la ribera <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> se encuentran algunos<br />

asentamientos poblacionales y varias instituciones estatales, se destacan los Astilleros<br />

de Chullima y <strong>el</strong> barrio El Fanguito. (Figura 1).<br />

1.1 Características geológicas<br />

El área de estudio se encuentra enclavada en <strong>el</strong> Cinturón Sobrecorrido Norte Cubano<br />

(CSNC), <strong>el</strong> cual debe la posición que ocupa actualmente sobre todo a la acción de dos<br />

grandes fallas transcurrentes de gran envergadura: Falla Hicacos y Falla Cochinos<br />

(Aballí y col., 2003). Afloran en <strong>el</strong> área formaciones geológicas carbonatadas, sílicocarbonatadas<br />

y arcillosas <strong>d<strong>el</strong></strong> piso Postorogénico con edades <strong>desde</strong> <strong>el</strong> Neógeno al<br />

Cuaternario, presentan buzamientos entre 15º y 35º que va <strong>d<strong>el</strong></strong> noroeste al nortenoroeste<br />

(Figura 2). Según <strong>el</strong> Mapa Geológico 1:100 000 (García y col., 2000)<br />

De acuerdo a la regionalización geomorfológica de Cuba, la zona de estudios está<br />

ubicada en <strong>el</strong> grupo Morro-Matanzas. El tipo de r<strong>el</strong>ieve en general se considera<br />

antropizado (transformado en ciudad); en la mayor parte <strong>d<strong>el</strong></strong> área terrestre se describen<br />

alturas de origen tectónico-estructural de horst y bloques, monoclinales, aterrazadas,<br />

carsificadas; la costa es dentada, abrasiva y abrasivo-cumulativa y la llanura marina<br />

contigua es <strong>d<strong>el</strong></strong> tipo abrasivo-cumulativa (Nuevo Atlas Nacional de Cuba, 1989).


1.2 Características batimétricas<br />

La Ensenada de la Chorrera penetra entre punta La Puntilla y punta Barlovento<br />

situada esta última a dos cables al noreste de la primera. La costa oeste es baja y<br />

bordeada de diente de perro, la costa este es rocosa y acantilada protegida por un<br />

malecón de hormigón. En esta ensenada desemboca <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, las<br />

profundidades de la misma oscilan entre 8.4 y 14.6 m en la entrada, en <strong>el</strong> centro<br />

van de 6.8 a 8.4 m. El <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> es navegable en parte de su curso.<br />

El fondo es fangoso en toda su extensión. En las proximidades de la<br />

desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>Almendares</strong> predomina <strong>el</strong> fango arenoso.<br />

1.3 Características hidrológicas<br />

La red hidrográfica <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> está constituida por numerosos arroyos de<br />

carácter intermitente, los cuales en época no lluviosa permanecen secos por<br />

infiltración de las aguas al manto subterráneo lo que se debe a las condiciones de<br />

carso, característica hidrogeológica predominante.<br />

<strong>Estudio</strong>s realizados en años anteriores (Instituto <strong>d<strong>el</strong></strong> Transporte) mostraron un<br />

poder autodepurador moderado en las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> litoral habanero, pues los<br />

procesos de dilución son intensos y restringen la zona de impacto a un área muy<br />

pequeña. De forma general las condiciones <strong>d<strong>el</strong></strong> litoral permiten ser utilizadas como<br />

receptora de residuales líquidos a través de emisarios submarinos.<br />

Los parámetros hidrológicos son r<strong>el</strong>ativamente homogéneos hasta la isobata de<br />

los 20 m, sin embargo en la desembocadura se observa una estratificación parcial<br />

por los aportes de agua dulce.<br />

1.4 Características hidrometeorológicas<br />

El régimen hidrometeorológico en la zona es bastante estable aunque puede ser<br />

perturbado durante los meses de mayo a octubre por la presencia ocasional de<br />

huracanes, siendo los meses de mayor p<strong>el</strong>igrosidad septiembre y octubre. Los<br />

6


vientos predominantes en este sector de costa son <strong>d<strong>el</strong></strong> noreste al este y su<br />

v<strong>el</strong>ocidad promedio de 13 - 18 km/h. Este régimen de vientos es alterado durante<br />

los meses de verano cuando existe algún organismo tropical que se desplaza<br />

paral<strong>el</strong>o y próximo a la costa, originando vientos <strong>d<strong>el</strong></strong> norte que pueden alcanzar<br />

v<strong>el</strong>ocidades de 70 - 90 km/h. La nubosidad es estable con promedios de 4/8<br />

durante <strong>el</strong> verano. Las precipitaciones son abundantes en la temporada de verano,<br />

principalmente después <strong>d<strong>el</strong></strong> mediodía a causa <strong>d<strong>el</strong></strong> desarrollo de turbonadas a<br />

veces fuertes y severas, la media mensual para esta época <strong>d<strong>el</strong></strong> año es de 80 mm<br />

aunque ha habido meses lluviosos en los que <strong>el</strong> valor medio mensual ha<br />

alcanzado los 290 mm. La estabilidad <strong>d<strong>el</strong></strong> régimen hidrometeorológico puede ser<br />

afectada también durante los meses de noviembre – marzo por la presencia de<br />

frentes f<strong>río</strong>s o bajas extratropicales que provocan fuertes vientos <strong>d<strong>el</strong></strong> noroeste con<br />

marejadas p<strong>el</strong>igrosas. Las lluvias son escasas en esta época <strong>d<strong>el</strong></strong> año y están<br />

asociadas generalmente a estos organismos.<br />

1.5 Características sísmicas<br />

Por su posición tectónico-estructural, se considera que la zona de estudio está<br />

ubicada en <strong>el</strong> área donde ocurre <strong>el</strong> segundo tipo de terremotos llamado de interior<br />

de placa (Nuevo Atlas Nacional de Cuba, 1989), asociados a desplazamientos en<br />

estructuras tectónicas de menor orden generalmente en sus intersecciones y<br />

caracterizado por una baja frecuencia de ocurrencia de eventos con magnitudes<br />

máximas inferiores a los <strong>d<strong>el</strong></strong> primer tipo de mayor frecuencia e intensidad, lo<br />

cuales son originados entre las placas tectónicas Norteamericana y <strong>d<strong>el</strong></strong> Caribe.<br />

Podemos considerar la zona como r<strong>el</strong>ativamente tranquila <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista<br />

tectónico ya que solamente se ha cartografiado una falla no activa en la<br />

actualidad.<br />

7


1.6 Levantamiento Hidromagnético<br />

El levantamiento hidromagnético se ejecutó conjuntamente con las metodologías<br />

anteriores con la finalidad de definir con la mayor precisión posible la ubicación de<br />

todos los objetos sumergidos, metálicos y no metálicos, que pudieran constituir<br />

un serio obstáculo para las labores de limpieza <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> o limitar la rasante o cota<br />

máxima de <strong>dragado</strong>.<br />

El tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> que se investigó es complejo ya que en él se encuentran<br />

localizados dos tún<strong>el</strong>es de transporte automotor que comunican la ciudad en<br />

sentido este – oeste (Tún<strong>el</strong> de 5ta Avenida y <strong>el</strong> de Línea), un puente levadizo<br />

(Puente de Hierro) y un sifón para residuales <strong>d<strong>el</strong></strong> sistema de alcantarillado de la<br />

ciudad, por donde se transportan las aguas albañales <strong>desde</strong> Miramar hacia <strong>el</strong><br />

Vedado. Tanto los tún<strong>el</strong>es como <strong>el</strong> sifón se encuentran sumergidos bajo las aguas<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

Se empleó <strong>el</strong> Hidromagnetómetro protónico 7704, de fabricación inglesa, con un<br />

ciclo de muestreo de 2 s. La variante empleada fue la de magnetómetro a<br />

remolque con una distancia entre 2 – 3 veces la longitud de la embarcación. El<br />

bloque de medición esta acoplado con un registrador gráfico <strong>d<strong>el</strong></strong> tipo Toa<br />

Electronic, lo que permitió obtener un registro más o menos continuo <strong>d<strong>el</strong></strong> campo<br />

magnético total, T.<br />

Para la exclusión de las variaciones temporales <strong>d<strong>el</strong></strong> campo magnético T y de la<br />

actividad de tormentas magnéticas, un registro diurno de estos cambios para todo<br />

<strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do de levantamiento estuvo disponible con los datos de un segundo equipo<br />

ubicado en <strong>el</strong> IGA.<br />

1.7 Características oceanográficas<br />

En este sector de costa <strong>el</strong> mar se mantiene como promedio con fuerza DOS y en<br />

ocasiones fuerza TRES. Si <strong>el</strong> sector es afectado por un huracán, la fuerza puede<br />

llegar a OCHO - NUEVE. En esta costa libre de cayos y con poca plataforma<br />

rompen los trenes de olas que se forman en <strong>el</strong> Golfo de México con poca<br />

8


modificación de su energía. Predomina <strong>el</strong> oleaje <strong>d<strong>el</strong></strong> Primer Cuadrante, pero es<br />

más p<strong>el</strong>igroso <strong>el</strong> proveniente <strong>d<strong>el</strong></strong> Cuarto durante la temporada invernal. La altura<br />

significativa media general para <strong>el</strong> año es de 1.66 m. La altura <strong>d<strong>el</strong></strong> oleaje con un<br />

95 % de probabilidades de no-excedencia es de 3.7 m.<br />

La marea es de tipo mixto semidiurno irregular con una amplitud media en <strong>el</strong> orden<br />

de los 30 cm.<br />

La dirección general de las corrientes marinas es paral<strong>el</strong>a a la costa e influenciada<br />

por la marea, <strong>el</strong> régimen de vientos y la morfología costera. Se puede afirmar que<br />

en la zona existen dos patrones de circulación de las corrientes. El primero<br />

corresponde a una corriente fuertemente influenciada por la marea; en <strong>el</strong> segundo<br />

predomina la corriente de deriva (Reyes y col., 1998 y 1999).<br />

9


CAPÍTULO 2. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA Y ANÁLISIS DE<br />

LA INFORMACIÓN CONSULTADA


2. REVISIÓN BIBLIOGRÁFICA Y ANÁLISIS DE LA<br />

INFORMACIÓN CONSULTADA<br />

2.1 Consideraciones acerca <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto de <strong>dragado</strong><br />

Para la ejecución <strong>d<strong>el</strong></strong> saneamiento <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> se definieron dos zonas generales:<br />

<strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> cauce <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y limpieza de las márgenes. (Nadal, 2004). El <strong>dragado</strong><br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> cauce <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> se propuso como una variante de saneamiento <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente<br />

de calle 23 hasta la Chorrera y sus parámetros se diseñaron para un caudal <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

20% de probabilidades sin <strong>el</strong> aporte de la presa, lo cual garantiza un gasto de 145<br />

m 3 /s y una cota de <strong>el</strong>evación <strong>d<strong>el</strong></strong> niv<strong>el</strong> de las aguas de +1.25 m en la zona <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

puente de la calle 23 y entre +1.00 m y +1.10 m en la zona baja de las riberas <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

barrio El Fanguito.<br />

En las Tablas 1 y 2 que reflejan <strong>el</strong> resultado <strong>d<strong>el</strong></strong> estudio hidrológico realizado por la<br />

Empresa de Recursos Hidráulicos de la Habana, se pueden constatar las cotas <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

niv<strong>el</strong> de agua sin <strong>el</strong> aporte de la presa Ejército Reb<strong>el</strong>de para <strong>el</strong> cauce actual y lo<br />

que ocurriría después de ejecutado <strong>el</strong> <strong>dragado</strong>.<br />

Considerando las condiciones de <strong>dragado</strong> limitado impuestas a su vez por las<br />

condiciones de frontera <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y los objetos que se observan en <strong>el</strong> fondo <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

mismo, se definieron “Secciones con Cotas de Proyecto Limitadas” para <strong>el</strong><br />

<strong>dragado</strong> en las obras siguientes:<br />

Emisario Submarino Tún<strong>el</strong> de 5ta Avenida<br />

Sifón<br />

Tún<strong>el</strong> de Línea


2.1.1 Canal de <strong>dragado</strong><br />

En la margen oeste, donde existen construcciones como mu<strong>el</strong>les, muros verticales<br />

y otras, se consideró llevar los límites <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> hasta una distancia que osciló<br />

entre 10 m y 15 m de la orilla como margen de seguridad al no contar con la<br />

información de estas obras que permitiera determinar su estabilidad ante un<br />

<strong>dragado</strong>.<br />

En la orilla este, donde existe material de r<strong>el</strong>leno en algunos tramos con<br />

vegetación natural o cultural, se consideró que la misma se encuentra<br />

consolidada, no obstante, también se separó <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> a distancias variables<br />

como margen seguridad<br />

2.1.2 Limpieza de las márgenes<br />

Uno de los objetivos fundamentales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> fue <strong>el</strong> saneamiento y limpieza<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> pero debido a las condiciones de frontera y limitaciones que impone la<br />

topografía de las márgenes, la solución de rectificación <strong>d<strong>el</strong></strong> cauce no permitió<br />

<strong>el</strong>iminar <strong>el</strong> sedimento depositado en determinados sectores de estas donde<br />

existen construcciones como antiguos mu<strong>el</strong>les y atraques en general.<br />

De acuerdo al levantamiento de las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> realizado en <strong>el</strong> año 2004<br />

(Nadal, 2004) fueron <strong>d<strong>el</strong></strong>imitadas zonas ubicadas fundamentalmente en la margen<br />

oeste cuya característica fundamental es la presencia de sedimentos (hasta <strong>el</strong><br />

niv<strong>el</strong> 0.00) y de vegetación, principalmente malangueta (Figura 3).<br />

Las condiciones de diseño consideradas para la extracción de este material fueron<br />

las siguientes:<br />

Ausencia de información de las estructuras de estos mu<strong>el</strong>les y atraques.<br />

Solamente extracción manual de la malangueta. y la capa superficial de<br />

sedimentos hasta -1.0 m al Niv<strong>el</strong> Medio <strong>d<strong>el</strong></strong> Mar (NMM) en <strong>el</strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong> depósito.<br />

Extracción con bombas de poca potencia para las áreas mencionadas.<br />

Control técnico adecuado para evitar sobrecargar la cota propuesta.<br />

12


2.1.3 Vaciaderos<br />

En un principio, para <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> se estudiaron dos variantes como vaciaderos<br />

(Nadal, 2004):<br />

Aguas profundas a 5.5 millas náuticas* de la costa.<br />

Terrestre, en la Cantera <strong>d<strong>el</strong></strong> Husillo a 7.5 km<br />

2.1.3.1 Vaciadero en aguas profundas<br />

A partir de los estudios de corrientes marinas realizados en la zona marítima norte<br />

de La Habana, se determinó que la zona de vaciadero debe ubicarse en un límite<br />

de cinco millas náuticas* de la costa, a profundidades mayores de 1 000 m, en <strong>el</strong><br />

área enmarcada en las coordenadas geográficas siguientes:<br />

Latitud (): 23°12’00’’<br />

Longitud (): 82°28’00’’<br />

Profundidad: - 1 420 m<br />

Como criterios para escoger la zona de vaciadero se consideraron en primer lugar<br />

la posibilidad de contaminación de la zona costera y en segundo lugar los fondos<br />

de la plataforma marina para los vertimientos.<br />

Se obtuvo entonces que a las cinco horas de realizarse <strong>el</strong> vertimiento a una<br />

distancia de la costa de cinco millas náuticas, las partículas más finas llegan al<br />

fondo situado a la profundidad de 200 m y a 0.8 millas náuticas*<br />

aproximadamente de la costa, fuera de la plataforma insular.<br />

Para llegar al sitio de vertimiento se debe navegar cinco millas náuticas* con<br />

rumbo 320° <strong>desde</strong> la boca de la Chorrera (Carta Náutica 15004. Escala 1:150<br />

000).<br />

Distancia <strong>d<strong>el</strong></strong> vaciadero:<br />

Estación 01: 5.0 millas náuticas*.<br />

Estación 79: 5.84 millas náuticas*<br />

13


Distancia media: 5.5 millas náuticas* 1<br />

Esta opción de vaciadero se ejecuta con draga de jaiba o de mordaza para la<br />

totalidad <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong>.<br />

2.1.3.2 Vaciadero terrestre en la Cantera <strong>d<strong>el</strong></strong> Husillo<br />

Para ejecutar <strong>el</strong> vaciadero en tierra se consideró necesario para la recepción <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

material <strong>dragado</strong>, su secado, carga y traslado hasta la zona de disposición final, <strong>el</strong><br />

acondicionamiento temporal de un frente de atraque de 30 m y la plataforma<br />

colindante que existe en <strong>el</strong> extremo sur de las instalaciones de Chullima.<br />

La disposición final <strong>d<strong>el</strong></strong> material sería un espacio existente antes de llegar a la<br />

cantera de recuperación de El Husillo, en una zona donde existe una quebrada y<br />

es factible su r<strong>el</strong>leno.<br />

La decisión colegiada fue la de tomar como vaciadero <strong>el</strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong>imitada en aguas<br />

profundas, pues es la más factible <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista técnico-económico y la<br />

menos impactante al medio ambiente.<br />

2.2 Reseña histórica de los asentamientos de población en <strong>el</strong> área<br />

estudiada<br />

La historia de las transformaciones ambientales de la región está r<strong>el</strong>acionada<br />

fundamentalmente con <strong>el</strong> desarrollo urbanístico y poblacional de los municipios de<br />

Playa y Plaza de la Revolución, que son los que tienen incidencia directa con las<br />

acciones <strong>d<strong>el</strong></strong> Proyecto en cuestión. (Nadal, 2004).<br />

Se conoce que durante las primeras décadas <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo XVI en <strong>el</strong> territorio al oeste<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> los grandes bosques servían para <strong>el</strong> abastecimiento de leña de<br />

1 1 milla náutica =1,85225 km<br />

1 cable = 185,22 m<br />

14


la Villa de San Cristóbal y estaba prohibida la merced de tierras. Fue <strong>el</strong> presbítero<br />

Cristóbal Zayas Bazán, Director General de Indias, <strong>el</strong> primero que solicitó por<br />

escrito, <strong>el</strong> 13 de diciembre de 1720, al Cabildo de la Habana la autorización para<br />

un peaje realengo y residencia de indios en un paraje llamado los “Quemados de<br />

Marianabo”. Así se dio formación a un case<strong>río</strong> de indios labradores que jugó un<br />

pap<strong>el</strong> fundamental en <strong>el</strong> crecimiento de esa región.<br />

En 1724 se adquirió la finca de “San José” y allí levantaron una ermita que bajo la<br />

advocación de San Francisco Xavier, fue la oratoria alrededor de la cual se fueron<br />

radicando los labradores y sus familiares para dedicarse a las faenas agrícolas.<br />

En 1730 un grupo más grande emigró hacia <strong>el</strong> oeste y construyeron <strong>el</strong> “Quemado<br />

Nuevo”, núcleo original de Marianao. El auge alcanzado por este contribuyó a que<br />

surgiera como entidad constitucional con categoría de Segunda Clase la Capitanía<br />

Pedánea de San Francisco Xavier, subordinada al Ayuntamiento de la Habana. La<br />

misma abarca las siguientes zonas poblacionales:<br />

Quemado Nuevo (Marianao).<br />

Quemado Viejo (Curazao).<br />

Quemado de la Ceiba (Ceiba), cuyo límite por <strong>el</strong> este era la orilla izquierda<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> con la Capitanía Pedánea de Puentes Grandes.<br />

Concluido <strong>el</strong> periodo colonial, <strong>el</strong> barrio Ceiba abarcaba <strong>el</strong> territorio comprendido<br />

por las fincas rústicas Santa Catalina de Buena Vista, la Miranda, la Molina, la<br />

M<strong>el</strong>éndez, la Criolla, la Josefina, Cacahual, Ojo de Agua, Quiebra Hacha y <strong>el</strong><br />

Husillo. Contaba con algo más de 2000 habitantes que residían en 182 casas de<br />

las cuales 95 eran de ladrillo y tejas, 72 de mampostería y tejas, 11 de<br />

mampostería con azotea y 4 de madera y guano.<br />

Las calles eran terraplenes, sin alcantarillas, deficientes servicio de luz, agua,<br />

transporte y comunicaciones t<strong>el</strong>efónicas. El advenimiento <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo fue favorable al<br />

desarrollo de la región oeste de la Habana, pues renació <strong>el</strong> fomento de repartos<br />

poblacionales, cuyas regulaciones dictadas <strong>desde</strong> 1862 estaban vigentes y habían<br />

surgido en la Habana corrientes expansionistas hacia esa zona, despoblada y<br />

eminentemente boscosa.<br />

15


El desarrollo urbano influía en dos direcciones: mientras por un lado los repartos<br />

de población quitaban terrenos, los beneficios colaterales que aportaban,<br />

favorecían <strong>el</strong> crecimiento poblacional. Entre los años 1907 al 1934 <strong>el</strong> territorio se<br />

había reducido aproximadamente a la mitad, la población creció cuatro veces más.<br />

Diez años después, con la misma dimensión territorial, creció un 69%.<br />

Para hacer una reseña histórica de cómo se constituyó y se desarrollo <strong>el</strong> territorio<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> actual municipio Plaza de la Revolución, debemos remontarnos al año 1515<br />

donde <strong>el</strong> proceso azaroso de fundación de la Villa de la Habana, hasta su<br />

definitivo emplazamiento en <strong>el</strong> litoral de la Bahía (entonces llamada “Carenas”);<br />

parece haber involucrado a una porción <strong>d<strong>el</strong></strong> actual municipio.<br />

Las evidencias históricas indican que antes de instalarse en las cercanías <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

puerto, los primeros pobladores se asentaron en las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> “La<br />

Chorrera” (<strong>Almendares</strong>), presumiblemente en una zona cercana al actual Puentes<br />

Grandes. En las tierras colindantes al <strong>río</strong> se establecieron estancias, sitios de<br />

labor y trapiches, que quedaban bien separados de la naciente ciudad, pues una<br />

ancha franja de los terrenos que se extendían entre <strong>el</strong> <strong>río</strong> y la Bahía fue vedada<br />

para <strong>el</strong> establecimiento de pobladores, <strong>el</strong> desarrollo de cualquier tipo de culturas, o<br />

<strong>el</strong> trazado de caminos. Años después tal disposición seria anulada pero <strong>el</strong> nombre<br />

de “El Vedado” permanecería definitivamente en la toponimia de la zona. Esto<br />

contribuyó a que <strong>el</strong> poco progreso afectara al territorio <strong>d<strong>el</strong></strong> actual municipio Plaza<br />

de la Revolución, en cuanto a asentamientos humanos.<br />

No obstante reconocerse la benignidad de su clima en comparación con los<br />

terrenos bajos colindantes con la bahía, a mediados <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo XIX la zona<br />

permanecía poco poblada, solo existían las viviendas de los pescadores de la<br />

Chorrera y <strong>d<strong>el</strong></strong> case<strong>río</strong> cercano conocido como Bongó y Gavilán, al suroeste de la<br />

loma Snóstegui (Castillo <strong>d<strong>el</strong></strong> Príncipe) había un centenar de viviendas que<br />

formaban <strong>el</strong> poblado de San Antonio Chiquito (Pan con Timba) y otra a medio<br />

camino entre este y la Chorrera, “El Carm<strong>el</strong>o”.<br />

La zona conocida como “Ciénaga”, había sido desecada, beneficiándose por <strong>el</strong><br />

tráfico ferroviario que atravesaba <strong>el</strong> lugar en dirección a Güines y a otras<br />

poblaciones <strong>d<strong>el</strong></strong> interior.<br />

16


Los trastornos experimentados en la economía y <strong>el</strong> estallido de la Guerra de los<br />

Diez Años, aplazaron <strong>el</strong> poblamiento intensivo de este municipio que seguiría<br />

circunscrito a los case<strong>río</strong>s antes mencionados, algunas quintas de recreo, como la<br />

casa veraniega de los gobernadores españoles (Quinta de los Molinos) y escasos<br />

talleres, hornos de cal, canteras y otras fuentes de materiales de construcción.<br />

En la década de los 80 <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo XIX se registra cierta animación constructiva, en<br />

lo que sería <strong>el</strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong> Municipio Plaza de la Revolución. En 1885 -1886 se edifica<br />

<strong>el</strong> Hot<strong>el</strong> Trocha (Calzada y 2), primero en su época en cuanto a confort, pues<br />

estaba dotado de luz <strong>el</strong>éctrica y agua corriente en todas sus instalaciones. Por esa<br />

misma época fue construido en la antigua avenida Medina (hoy calle 23 esquina L)<br />

<strong>el</strong> Hospital “Nuestra Señora de las Mercedes”. Así <strong>el</strong> territorio iría adoptando los<br />

rasgos que habían de caracterizarlo no solo como la zona residencial, sino como<br />

centro de servicios médicos y hot<strong>el</strong>eros.<br />

La vida urbana de la zona se vio beneficiada por un pequeño ferrocarril suburbano<br />

que enlazaba <strong>el</strong> Carm<strong>el</strong>o con la Barriada de la Punta y facilitaba la comunicación<br />

entre los nuevos repartos y la Ciudad.<br />

El crecimiento poblacional de la urbe se ac<strong>el</strong>era en los años <strong>d<strong>el</strong></strong> siglo XIX a<br />

consecuencia de la guerra y las medidas de reconcentración, no obstante, <strong>el</strong><br />

territorio de la actual Plaza de la Revolución permanecería poco poblado y solo<br />

parcialmente urbanizado. Este programa solo comienza a transformarse al concluir<br />

la segunda intervención norteamericana (1909), cuando políticos y miembros de la<br />

alta burguesía construyen sus palacetes en El Vedado, sustituyendo al Cerro en<br />

su condición de barrio distinguido de la aristocracia habanera. Este auge<br />

constructivo que se extendió hasta los años 20 estuvo sustentado por la actividad<br />

de compañías constructoras norteamericanas.<br />

El perfil residencial y de servicios definitivo <strong>d<strong>el</strong></strong> territorio actual <strong>d<strong>el</strong></strong> municipio Plaza<br />

de la Revolución, se hará más acusado aun, por <strong>el</strong> movimiento constructivo que se<br />

verifica en las décadas <strong>d<strong>el</strong></strong> 40 y 50, donde se construyen varias cadenas hot<strong>el</strong>eras<br />

entre los que destacan <strong>el</strong> “Hilton”, “Riviera”, “Capri”, “St. Johns”, “Vedado”,<br />

‘Flamingo” y “Colina” que se sumaron a los ya existentes <strong>desde</strong> años atrás:<br />

“Presidente”, “Paseo“ y “Nacional”.<br />

17


2.3. Antecedentes de estudios ejecutados en <strong>el</strong> <strong>río</strong> y zonas<br />

adyacentes<br />

La zona <strong>d<strong>el</strong></strong> litoral norte habanero ha sido ampliamente estudiada en años<br />

anteriores por varias instituciones.<br />

Los trabajos más recientes correspondieron al estudio oceanográfico para la<br />

ubicación de un Emisario Submarino en <strong>el</strong> Reparto Flores en <strong>el</strong> año 1999, (Reyes,<br />

1998 y 1999) y al estudio de las causas que originan las penetraciones <strong>d<strong>el</strong></strong> mar en<br />

<strong>el</strong> Malecón Habanero, (Morales, 1995). Si bien esta zona no corresponde<br />

exactamente con la de estudios actuales, es geográficamente próxima y con<br />

características hidrológicas e hidrodinámicas similares. El último trabajo fue<br />

ejecutado <strong>desde</strong> julio de 1993 a diciembre de 1994, e incluyó cuatro etapas de<br />

campo en diferentes pe<strong>río</strong>dos climáticos <strong>d<strong>el</strong></strong> año; se investigaron específicamente<br />

los siguientes parámetros:<br />

1. V<strong>el</strong>ocidad y dirección de la corriente en superficie y fondo.<br />

2. Mediciones de temperatura, salinidad y densidad en la columna de agua.<br />

3. Mediciones de oxígeno disu<strong>el</strong>to, pH y nutrientes en los niv<strong>el</strong>es de superficie,<br />

cinco y 10 metros.<br />

4. <strong>Estudio</strong>s de agresividad <strong>d<strong>el</strong></strong> agua al hormigón.<br />

5. Regímenes extremos y habituales <strong>d<strong>el</strong></strong> oleaje.<br />

Este trabajo ofrece como conclusiones lo siguiente:<br />

1. Los vientos predominantes son <strong>d<strong>el</strong></strong> este-noreste.<br />

2. La desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> provoca la formación de fuertes<br />

gradientes horizontales en la distribución de los parámetros físicos <strong>d<strong>el</strong></strong> agua de<br />

mar.<br />

3. Las corrientes litorales tienen una fuerte influencia de las mareas, aunque con <strong>el</strong><br />

desarrollo de fenómenos meteorológicos de diversa índole en <strong>el</strong> Golfo de México,<br />

la corriente de marea se ve bloqueada por una corriente de deriva con v<strong>el</strong>ocidades<br />

muy altas por encima de los 100 cm/seg.<br />

4. Las direcciones <strong>d<strong>el</strong></strong> viento y <strong>el</strong> oleaje más p<strong>el</strong>igrosas son <strong>d<strong>el</strong></strong> norte y <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

noroeste.<br />

18


En los años de 1985 a 1990 en la zona entre Santa Fe y Guanabo se realizaron<br />

estudios marinos integrales por <strong>el</strong> ICH, actualmente GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos<br />

y por <strong>el</strong> Instituto de Investigaciones <strong>d<strong>el</strong></strong> Transporte.<br />

Estos trabajos fueron recopilados por GEOCUBA en 1990 en un Proyecto de<br />

<strong>Estudio</strong>s para <strong>el</strong> colector principal Habana. Los mismos incluían estudios de<br />

corrientes y parámetros físicos <strong>d<strong>el</strong></strong> agua de mar y arribaron a las siguientes<br />

conclusiones, similares a las <strong>d<strong>el</strong></strong> Proyecto <strong>d<strong>el</strong></strong> Malecón Habanero:<br />

1. Alto poder autodepurador <strong>d<strong>el</strong></strong> litoral habanero pues los procesos de dilución son<br />

tan intensos que restringen la zona de impacto a un área muy pequeña. De forma<br />

general las condiciones <strong>d<strong>el</strong></strong> litoral permiten ser utilizadas como receptora de<br />

residuales líquidos a través de emisarios submarinos.<br />

2. La dirección general de las corrientes es paral<strong>el</strong>a a la costa e influenciada por la<br />

marea, <strong>el</strong> régimen de vientos y la morfología costera.<br />

3. Los parámetros hidrológicos son r<strong>el</strong>ativamente homogéneos hasta la isobata de<br />

los 20 m, sin embargo en la desembocadura de los <strong>río</strong>s se observa una<br />

estratificación parcial por los aportes de agua dulce.<br />

Los trabajos de Reyes y col., (1998 y 1999), arrojaron conclusiones similares:<br />

1. Las características hidrológicas de la zona tanto en la etapa de verano como en<br />

la invernal, muestran una ligera estratificación en las zonas más cercanas a la<br />

ensenada de la Chorrera debida a la influencia de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>.<br />

2. Las características hidrológicas se ven influenciadas durante <strong>el</strong> verano por <strong>el</strong><br />

régimen de corrientes predominantes durante <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do de mediciones, con<br />

fuertes corrientes hacia <strong>el</strong> Primer Cuadrante, limitando la influencia <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> a las<br />

zonas más cercanas a su desembocadura. Durante la etapa de invierno <strong>el</strong> gran<br />

dinamismo de la masa de agua provocó que los parámetros hidrológicos tuvieran<br />

un carácter más homogéneo en toda la columna.<br />

3. Los valores medidos de temperatura, salinidad y densidad convencional fueron<br />

superiores a los observados en años anteriores, como consecuencia <strong>d<strong>el</strong></strong> aumento<br />

de la temperatura atmosférica registrado en esos años y la disminución de las<br />

precipitaciones.<br />

19


4. En la etapa de verano las concentraciones de los componentes <strong>d<strong>el</strong></strong> ciclo <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

nitrógeno resultaron superiores a las medidas en años anteriores y se<br />

encontraban en <strong>el</strong> intervalo de calidad dudosa. Durante <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do de seca las<br />

concentraciones de nitrógeno amoniacal y fósforo total son indicativas de<br />

eutrofización.<br />

5. La marea es de tipo mixto semidiurno irregular con una amplitud media en <strong>el</strong><br />

orden de los 30 cm.<br />

6. Se puede afirmar que en la zona existen dos patrones de circulación. El primero<br />

corresponde a una corriente fuertemente influenciada por la marea y <strong>el</strong> segundo<br />

donde predomina la corriente de deriva.<br />

7. Predomina <strong>el</strong> oleaje <strong>d<strong>el</strong></strong> Primer Cuadrante, pero es más p<strong>el</strong>igroso <strong>el</strong> proveniente<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> Cuarto durante la temporada invernal. La altura significativa media general<br />

para <strong>el</strong> año es de 1.66 m. La altura <strong>d<strong>el</strong></strong> oleaje con un 95 % de probabilidades de<br />

no-excedencia es de 3.7 m.<br />

2.4 Principales fuentes contaminantes para <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong><br />

puente de la calle 23 a la desembocadura.<br />

Como fuentes más r<strong>el</strong>evantes en este aspecto debemos señalar las más<br />

importantes producidas en las zonas de los municipios colindantes:<br />

Astilleros Chullima: Residuales industriales que vierten directamente al <strong>río</strong>.<br />

Parque Zoológico de calle 26: Residuales líquidos y sólidos. La naturaleza de la<br />

contaminación es orgánica.<br />

Población de la cuenca baja <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>: En este tramo se incorporan<br />

residuales provenientes de las barriadas colindantes a ambas márgenes, así como<br />

residuales industriales. El aspecto <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> en <strong>el</strong> puente de calle 23 es pésimo,<br />

observándose fenómenos de fermentación y sólidos flotantes.<br />

Otra fuente contaminante de importancia por la condición de los residuos<br />

generados son los hospitales.<br />

20


Porcentaje muy bajo de alcantarillas. Casi todo <strong>el</strong> municipio tiene sistemas de<br />

fosas las cuales en los momentos en que se desbordan contribuyen a la<br />

contaminación <strong>d<strong>el</strong></strong> medio ambiente.<br />

La situación que existe en <strong>el</strong> municipio con <strong>el</strong> manejo y disposición de los<br />

residuos sólidos es bastante crítica, los impactos ambientales que <strong>el</strong>los generan<br />

hasta <strong>el</strong> momento son impredecibles.<br />

Existe también, de manera generalizada, una deficiente higienización de las<br />

calles.<br />

21


CAPÍTULO 3. MÉTODOS DE ESTUDIO DE LA LÍNEA DE<br />

BASE AMBIENTAL


3. MÉTODOS DE ESTUDIO DE LA LÍNEA DE BASE<br />

AMBIENTAL<br />

3.1 Medio físico<br />

3.1.1 Batimetría<br />

A partir de levantamientos batimétricos realizados por GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos en los meses de abril - mayo de 1999 a escala 1: 1000 y en mayo <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

2004, se pudo actualizar <strong>el</strong> r<strong>el</strong>ieve <strong>d<strong>el</strong></strong> fondo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> en la zona mediante<br />

comparación (Rodríguez, 2004).<br />

3.1.2 Geología<br />

Los trabajos de muestreo geológico superficiales estuvieron encaminados a la<br />

comprobación o actualización de la clasificación ingeniero – geológica efectuada<br />

en la primera etapa de las investigaciones (abril – mayo de 1999). En la segunda<br />

etapa se empleó <strong>el</strong> Penetrómetro Wildcat que tiene un cono de 60º y 10 cm 2 de<br />

área, se ejecutaron las diez pruebas previstas, tomando como referencia los<br />

puntos preestablecidos por <strong>el</strong> proyectista, las posibilidades de acceso y las<br />

condiciones <strong>d<strong>el</strong></strong> terreno en dichos puntos; como resultado se pudo constatar la<br />

existencia de un <strong>el</strong>emento ingeniero - geológico (EIG) principal, a los efectos <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

<strong>dragado</strong> en las cotas previstas de 2.5 y 3.0 m respectivamente, según <strong>el</strong> proyecto.<br />

3.1.3 Meteorología<br />

Para la caracterización hidrometeorológica general <strong>d<strong>el</strong></strong> área de trabajo, se utilizó la<br />

información <strong>d<strong>el</strong></strong> Resumen Climático de Cuba, (INSMET, 1991).


3.1.4 Hidrología<br />

Para la determinación de los valores <strong>d<strong>el</strong></strong> escurrimiento medio hiperanual se utilizó<br />

la metodología de cálculo <strong>el</strong>aborada por <strong>el</strong> Ing. José L. Batista en <strong>el</strong> año 1980 y la<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> Esquema Regional Precisado – Tomo Hidrología <strong>d<strong>el</strong></strong> año 1991, los que<br />

consideran la lámina media hiperanual de las precipitaciones en la cuenca (Po en<br />

mm) y la altura media de la cuenca hasta los cierres de cálculo (Hm en m). El<br />

coeficiente de variación (Cv) se determino según la misma metodología y <strong>el</strong><br />

coeficiente de asimetría (Cs) se tomo igual a 2 Cv.<br />

Para la determinación de los valores <strong>d<strong>el</strong></strong> escurrimiento máximo de diferentes<br />

pe<strong>río</strong>dos de retorno (probabilidades) en los cierres de cálculo, primeramente se<br />

calcularon los valores <strong>d<strong>el</strong></strong> aporte máximo <strong>d<strong>el</strong></strong> área complementaria aguas abajo de<br />

la presa hasta los cierres de cálculo y se construyeron sus correspondientes<br />

hidrógrafos; estos se integraron con los hidrógrafos de avenidas transformadas<br />

por la presa a través <strong>d<strong>el</strong></strong> desagüe de fondo, según la Variante I de Operación de la<br />

presa Ejército Reb<strong>el</strong>de, teniendo en cuenta <strong>el</strong> tiempo de retardo entre los picos de<br />

las avenidas de una y otra área, obteniéndose los valores de caudal pico para<br />

diferentes probabilidades en los cierres de cálculo y sus respectivos hidrógrafos.<br />

Para la obtención de los valores <strong>d<strong>el</strong></strong> escurrimiento sólido o sedimentos en<br />

suspensión en <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> hasta los cierres de cálculo propuestos, se utilizó<br />

la metodología de cálculo <strong>el</strong>aborada por <strong>el</strong> Ing. O. Perez Monteagudo, la cual<br />

permite determinar <strong>el</strong> módulo de escurrimiento sólido (Ms) como una función <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

módulo de escurrimiento líquido medio hiperanual (Mo). A su vez, Ms permite <strong>el</strong><br />

cálculo <strong>d<strong>el</strong></strong> gasto de sedimentos en suspensión (Rs).<br />

La turbidez media anual (m) se determina como una función <strong>d<strong>el</strong></strong> módulo de<br />

sedimentos (Ms), <strong>el</strong> área de la cuenca (A) y <strong>el</strong> gasto medio hiperanual (Qo). Por<br />

último, <strong>el</strong> volumen anual de sedimentos en suspensión (Vt) se determina a través<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> gasto de sedimentos en suspensión (Rs).<br />

24


3.1.5 Investigaciones geofísicas<br />

3.1.5.1 Sísmica<br />

Se tomó como referencia la Norma Cubana NC 53-114:84. “Construcciones<br />

Sismorresistentes. Especificaciones y Métodos de Cálculo” donde se divide <strong>el</strong><br />

territorio nacional de acuerdo a los eventos sísmicos.<br />

3.1.5.2 Levantamiento Hidromagnético<br />

El levantamiento hidromagnético se ejecutó conjuntamente con las metodologías<br />

anteriores con la finalidad de definir con la mayor precisión posible la ubicación de<br />

todos los objetos sumergidos, metálicos y no metálicos, que pudieran constituir<br />

un serio obstáculo para las labores de limpieza <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> o limitar la rasante o cota<br />

máxima de <strong>dragado</strong>.<br />

Se empleó <strong>el</strong> Hidromagnetómetro protónico 7704, de fabricación inglesa, con un<br />

ciclo de muestreo de 2 s. La variante empleada fue la de magnetómetro a<br />

remolque con una distancia entre 2 – 3 veces la longitud de la embarcación. El<br />

bloque de medición esta acoplado con un registrador gráfico <strong>d<strong>el</strong></strong> tipo Toa.<br />

Para la exclusión de las variaciones temporales <strong>d<strong>el</strong></strong> campo magnético T y de la<br />

actividad de tormentas magnéticas, un registro diurno de estos cambios para todo<br />

<strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do de levantamiento estuvo disponible con los datos de un segundo equipo<br />

ubicado en <strong>el</strong> IGA.<br />

3.1.6 Oceanografía<br />

Para cumplir los objetivos propuestos, se fondearon en <strong>el</strong> área dos estaciones de<br />

corriente permanentes <strong>desde</strong> <strong>el</strong> 22 de mayo hasta <strong>el</strong> 7 de junio <strong>d<strong>el</strong></strong> 2004. La<br />

información mareográfica se obtuvo <strong>d<strong>el</strong></strong> puesto de Niv<strong>el</strong> Permanente de Siboney y<br />

dos puestos de Niv<strong>el</strong> Temporales ubicados uno en la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> Río<br />

<strong>Almendares</strong> (Mu<strong>el</strong>le de Guardafronteras) <strong>desde</strong> <strong>el</strong> 22 de mayo hasta <strong>el</strong> 7 de junio<br />

25


y <strong>el</strong> otro en <strong>el</strong> Interior <strong>d<strong>el</strong></strong> mismo cerca <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la Calle 23 (Mu<strong>el</strong>le de<br />

Tropas Especiales) <strong>desde</strong> <strong>el</strong> 27 de mayo hasta <strong>el</strong> 7 de junio. Su ubicación se<br />

brinda en la Figura 4.<br />

Para estudio de las corrientes marinas se utilizaron dos correntógrafos SD - 6000<br />

de fabricación noruega, los que se fondearon a un metro <strong>desde</strong> la superficie,<br />

ambos con una frecuencia de muestreo de 60 minutos. Para <strong>el</strong> muestreo de los<br />

niv<strong>el</strong>es horarios <strong>d<strong>el</strong></strong> mar se empleó un mareógrafo SEBA. Las características<br />

técnicas de los equipos utilizados se brindan en los Tablas 3 y 4.<br />

El procesamiento de las series de corriente obtenidas se realizó con <strong>el</strong> sistema<br />

COMAR, que permite validar, procesar y representar gráficamente la información.<br />

El procesamiento estadístico incluyó <strong>el</strong> filtrado de las series originales con ayuda<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> filtro Doodson para separar las componentes periódicas de las no periódicas,<br />

así como <strong>el</strong> cálculo de los parámetros estadísticos estándar para las tres series (la<br />

original, la periódica y la no periódica) y las tablas de distribución frecuencial y<br />

rosas de corriente. Las series de marea obtenidas fueron procesadas con <strong>el</strong><br />

sistema MAREA, obteniéndose como resultado las tablas de alturas horarias <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

niv<strong>el</strong>, los valores extremos de la marea y las constantes armónicas.<br />

3.1.7 Hidroquímica y contaminación<br />

Para realizar la caracterización hidroquímica y de contaminación de la zona, la<br />

sección <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> s<strong>el</strong>eccionada se dividió en cinco tramos representativos,<br />

distribuidos a lo largo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente en calle 23 hasta la desembocadura.<br />

A continuación se r<strong>el</strong>aciona la red de estaciones (Figura 4).<br />

1. Ubicada entre <strong>el</strong> Puente de la calle 23 y la Sociedad Dinamo Capitán San Luís.<br />

2. Ubicada entre la Sociedad Dinamo Capitán San Luís y <strong>el</strong> Aseguramiento Naval<br />

CITMA<br />

3. Ubicada entre Aseguramiento Naval CITMA y <strong>el</strong> puente de Hierro.<br />

4. Ubicada entre <strong>el</strong> puente de Hierro y <strong>el</strong> Tún<strong>el</strong> de Línea.<br />

5. Ubicada al oeste de la Glorieta de 1830 en la ensenada <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

26


Las variables a estudiar fueron las siguientes:<br />

Ensayos realizados:<br />

Valor pH.<br />

Ciclo de nutrientes (P-PO4 , N-NO2 , N-NO3 , N-NH4, SiO3)<br />

Hidrocarburos <strong>d<strong>el</strong></strong> petróleo, Grasas y Aceites<br />

Temperatura, Turbidez <strong>d<strong>el</strong></strong> agua, Salinidad, Oxígeno Disu<strong>el</strong>to (OD), la<br />

Demanda Bioquímica de Oxígeno (DBO5), la Demanda Química de Oxígeno<br />

(DQO).<br />

Como indicadores de contaminación en las aguas se determinaron las<br />

grasas y aceites, hidrocarburos totales <strong>d<strong>el</strong></strong> petróleo y metales pesados (Pb, Cd, Cr,<br />

Zn, Cu, Ni, Fe, Mn, Co, Hg, As) presentes en cada una de las muestras.<br />

En los sedimentos superficiales se determinó <strong>el</strong> Carbón y Nitrógeno<br />

orgánico, los hidrocarburos totales <strong>d<strong>el</strong></strong> petróleo y los metales pesados (Pb, Cd, Cr,<br />

Zn, Cu, Ni, Fe, Mn, Co, Hg, Al, Ba).<br />

Los parámetros estudiados como Indicadores de contaminación<br />

microbiológica de las aguas fueron Coliformes fecales y totales.<br />

Métodos utilizados:<br />

La salinidad, <strong>el</strong> por ciento de saturación de oxígeno; la turbidez y la temperatura<br />

se midieron in situ con <strong>el</strong> Correntógrafo RCM-9, de la firma ANDERAA (Tabla 5).<br />

El oxígeno disu<strong>el</strong>to se evaluó por <strong>el</strong> Método Winkler, (APHA, 1992),<br />

comprobándose in situ. El cálculo de la saturación de oxígeno se realizó a partir<br />

de los datos de temperatura, salinidad y oxígeno disu<strong>el</strong>to.<br />

La DQO se evaluó a través de la reacción <strong>d<strong>el</strong></strong> permanganato potásico descrito, en<br />

APHA (1992), para la determinación de la prueba de oxidabilidad. Para<br />

determinar la DBO5 se calculó con la diferencia entre <strong>el</strong> OD inicial y <strong>el</strong> OD final.<br />

El valor de pH se determinó también, in situ por <strong>el</strong> método potenciométrico (Metro<br />

pH PHM- 82 Radiometer, Dinamarca), con una precisión de +/- 0.05 unidades de<br />

pH.<br />

27


Las metodologías empleadas para la determinación de los nutrientes son las<br />

descritas en <strong>el</strong> Manual UNESCO (1983) y APHA (1992). (Espectrofotometría UV-<br />

VIS). El Nitrógeno Total Inorgánico se calculó por la suma de nitratos, nitritos y<br />

amonio.<br />

Los sólidos en suspensión se determinaron mediante la técnica gravimétrica<br />

indicada para aguas (APHA, 1992). Las grasas y aceites se comprobaron por<br />

espectroscopia infrarroja mediante extracción en f<strong>río</strong> con CCl4.<br />

Los metales pesados en las aguas se determinaron por la técnica Plasma<br />

Inductivamente Acoplado (ICP).<br />

Para <strong>el</strong> procesamiento de hidrocarburos totales se empleó la técnica reportada por<br />

<strong>el</strong> Proyecto CARIPOL (1980), para aguas, sedimentos y organismos marinos<br />

influidos por la contaminación por petróleo. (Programa de la Subcomisión Regional<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> Caribe y Regiones Adyacentes, IOCARIBE/PNUD).<br />

Los análisis microbiológicos se realizaron antes de las 24 horas de colectadas las<br />

muestras, por <strong>el</strong> método de Fermentación por Tubos Múltiples (NMP).<br />

Para la matriz sedimento se llevó a cabo la determinación de Hidrocarburos por<br />

espectroscopia infrarojo mediante ATI Matteson Génesis Series FTIR (= 2930<br />

nm), acoplado a microcomputadora Pentium con programa WINFIRST.<br />

Los niv<strong>el</strong>es de carbón y nitrógeno orgánico se determinaron según las técnicas<br />

descritas en APHA (1992).<br />

Las muestras para metales pesados se determinaron empleando un<br />

espectrómetro de plasma inducido (Al, Cd, Co, Cr, Cu, Fe, Mn, Pb, Zn y Hg por<br />

vapor f<strong>río</strong>), por duplicado.<br />

Todas las muestras fueron preservadas adecuadamente según los métodos<br />

recomendados y los ensayos fueron realizados en los laboratorios <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

Departamento de Contaminación <strong>d<strong>el</strong></strong> CIMAB perteneciente al MITRANS y en la<br />

Empresa Central de Laboratorios José Isaac <strong>d<strong>el</strong></strong> Corral, ambas con un sistema de<br />

calidad según la ISO 17025, para los laboratorios de calibración y ensayos<br />

acreditados.<br />

28


3.2 Medio biótico<br />

El medio biótico se valoró sobre la base de los trabajos de índole biológico<br />

existentes para <strong>el</strong> área de interés: Vilamajó y Lauzán (1998), Vales y col. (1998),<br />

Vilamajó y col., (2002) y Sánchez (1998) fundamentalmente.<br />

3.3 Medio socioeconómico<br />

Se caracterizó sobre la base de la bibliografía encontrada, citada al final. Además,<br />

con <strong>el</strong> objetivo de conocer la opinión sobre <strong>el</strong> Proyecto de Dragado de la<br />

desembocadura <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, se realizó una encuesta pública a 52 sujetos<br />

r<strong>el</strong>acionados directa o indirectamente con las actuaciones en la región. Se trató<br />

con este sondeo de opinión, diseñado sobre la base de un mo<strong>d<strong>el</strong></strong>o<br />

semiestructurado, lograr resultados confiables que permitieran formar una idea<br />

aproximada <strong>d<strong>el</strong></strong> estado de percepción <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto entre la comunidad.<br />

29


CAPÍTULO 4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN


4. RESULTADOS Y DISCUSIÓN<br />

4.1 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Físico<br />

Las características físico- geográficas de la zona se encuentran condicionadas por<br />

la influencia marítima y determinadas fundamentalmente por la estrecha<br />

interacción existente entre <strong>el</strong> r<strong>el</strong>ieve, la vegetación, los complejos litológicos y los<br />

procesos hidrodinámicos y por la incidencia directa de las acciones antrópicas.<br />

4.1.1 Condiciones batimétricas<br />

El r<strong>el</strong>ieve en la zona estudiada presenta forma regular y ondulada, define un talud<br />

poco pronunciado entre los bordes y <strong>el</strong> lecho <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> en su parte más profunda,<br />

aunque hay tramos donde dicho talud desaparece debido a la disminución de las<br />

profundidades. (Rodríguez, 2004). Figura 5<br />

Las profundidades en la desembocadura superan los cuatro metros, disminuyendo<br />

de forma gradual en dirección sur, configurándose un estrecho canal navegable<br />

con profundidades que oscilan entre 2.3 y 2.9 m, con una media de 2.5 m. Dicho<br />

canal posee un ancho variable entre 30 y 50 m hasta <strong>el</strong> puente de Hierro (Figura<br />

6), aquí <strong>el</strong> canal se cierra hacia la margen este por la acumulación de<br />

malanguetas, por lo que para continuar la navegación <strong>río</strong> arriba se debe favorecer<br />

la parte oeste de la base <strong>d<strong>el</strong></strong> puente y la margen oeste <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

A unos 30 m al sur <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de Hierro <strong>el</strong> canal tiene profundidades mayores de<br />

dos metros pero estas disminuyen hacia <strong>el</strong> mu<strong>el</strong>le norte de los Astilleros Chullima<br />

(Figura 7) hasta mínimas de 1.1 m en <strong>el</strong> centro e inferiores a un metro en la costa<br />

este fundamentalmente. A partir <strong>d<strong>el</strong></strong> mu<strong>el</strong>le sur de los Astilleros Chullima, las


profundidades aumentan nuevamente hacia la margen este, superando los dos<br />

metros sobre un canal que se estrecha considerablemente debido a la<br />

acumulación de malangueta y paraná. En este tramo <strong>el</strong> canal tiene un ancho de 15<br />

a 30 m, <strong>d<strong>el</strong></strong>imitada su parte más profunda por las isobatas de dos metros en<br />

ambos lados <strong>d<strong>el</strong></strong> mismo y las malanguetas. Después de esta zona <strong>el</strong> canal se<br />

estrecha, pero las profundidades aumentan hacia la costa oeste superando los<br />

cinco metros, disminuyendo nuevamente por debajo de los dos metros a partir de<br />

la Sociedad Dinamo “Capitán San Luis” hasta <strong>el</strong> puente de la calle 23.<br />

En resumen, se puede decir que <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> en <strong>el</strong> tramo <strong>desde</strong> la<br />

desembocadura hasta 30 m al sur <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de Hierro presenta profundidades<br />

superiores a 1.8 m. A partir de aquí hasta <strong>el</strong> mu<strong>el</strong>le norte de los Astilleros<br />

Chullima, existen cotas inferiores a 1.8 m, a partir <strong>d<strong>el</strong></strong> mu<strong>el</strong>le sur las profundidades<br />

aumentan.<br />

En cuanto al régimen de sedimentación, en <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do 1999-2004 se observaron<br />

tres zonas con comportamiento diferente, la primera en la desembocadura hasta <strong>el</strong><br />

puente de Hierro donde hubo un predominio de la pérdida de sedimentos con un<br />

valor promedio de 7 cm. El comportamiento de esta zona demuestra que<br />

prácticamente no hubo diferencia entre los levantamientos realizados por<br />

GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos en 1999 y en 2004.<br />

La segunda zona es la comprendida entre <strong>el</strong> puente de Hierro y <strong>el</strong> límite sur de los<br />

Astilleros Chullima, en esta zona se produjo un proceso fuerte de sedimentación<br />

en <strong>el</strong> tiempo transcurrido entre los dos levantamientos que creó lugares en los<br />

que la diferencia alcanzó un metro.<br />

Por último, la tercera zona corresponde al tramo entre <strong>el</strong> barrio El Fanguito y <strong>el</strong><br />

puente de calle 23, en <strong>el</strong>la se observó una discreta acumulación de 10 cm en la<br />

zona navegable <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>. También se observaron zonas de grandes<br />

estrechamientos <strong>d<strong>el</strong></strong> cauce <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> en la zona de El Fanguito con grandes isletas<br />

de malangueta y paraná. Según <strong>el</strong> levantamiento realizado en 1999 cercano a<br />

esta zona se observaban las profundidades mayores <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

En realidad, la sedimentación es un proceso complejo que necesita de un estudio<br />

independiente para precisar su valor. En <strong>el</strong> caso <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> podemos decir que en<br />

32


condiciones habituales no debe ocurrir sedimentación significativa, esta se<br />

intensifica durante las crecidas <strong>d<strong>el</strong></strong> mismo cuando ocurren intensas lluvias,<br />

además, para cada pe<strong>río</strong>do de estudio, la sedimentación depende entre otros<br />

factores de la intensidad de las riadas que ocurran y los niv<strong>el</strong>es de protección<br />

(forestación) que tengan las riberas <strong>río</strong> arriba.<br />

4.1.2 Condiciones geológicas<br />

El área de estudio se caracteriza por ser una llanura erosiva de alta pendiente<br />

ubicada en <strong>el</strong> primer niv<strong>el</strong> de terraza abrasiva-acumulativa plana sobre sedimentos<br />

aluviales. El su<strong>el</strong>o es de color pardo claro de textura areno-arcillosa de origen<br />

aluvial.<br />

El <strong>el</strong>emento ingeniero-geológico (EIG) coincide plenamente con <strong>el</strong> encontrado en<br />

<strong>el</strong> primer levantamiento: cieno limo – arenoso orgánico, color gris oscuro, olor<br />

fétido, con fragmentos de conchas, muy saturado, baja compresibilidad,<br />

consistencia fluida al principio a blanda al final, plasticidad ligera (Tabla 6); según<br />

<strong>el</strong> Sistema Unificado de Clasificación de Su<strong>el</strong>os, corresponde con un su<strong>el</strong>o de tipo<br />

CL. En <strong>el</strong> procesamiento estadístico fueron empleadas 31 curvas de hidrómetro.<br />

Teniendo en cuenta que <strong>el</strong> EIG detectado en cada uno de los dos levantamientos<br />

efectuados es <strong>el</strong> mismo, pueden utilizarse plenamente como valores<br />

característicos los determinados <strong>d<strong>el</strong></strong> procesamiento estadístico realizado a todos<br />

los datos obtenidos de conjunto en ambas etapas, donde las características<br />

granulométricas promedio pueden resumirse en la Tabla 7.<br />

El segundo <strong>el</strong>emento encontrado en la zona es la roca caliza biohérmica de la<br />

Formación Jaimanitas Q (Pleistoceno I-II). En la Tabla 8 se dan las principales<br />

propiedades de los <strong>el</strong>ementos mencionados.<br />

A los efectos <strong>d<strong>el</strong></strong> cálculo de costos <strong>el</strong> cieno limo – arenoso caracterizado se puede<br />

calificar como sigue:<br />

Dificultad de extracción: Grupo III.<br />

Dificultad de descarga: 3<br />

En toda <strong>el</strong> área de estudio la profundidad mínima <strong>d<strong>el</strong></strong> techo de la roca es de<br />

33


–2.0 m y la máxima alcanza valores superiores a los –6.0 m respecto al NMM.<br />

Los máximos valores se alcanzaron en la margen oeste y los mínimos en la orilla<br />

este.<br />

Condiciones geológicas en las orillas <strong>d<strong>el</strong></strong> barrio El Fanguito:<br />

El estudio ingeniero – geológico se realizó para un tramo de 200 m sobre la línea<br />

de costa en <strong>el</strong> barrio El Fanguito, con vistas a los trabajos de protección de<br />

taludes. La profundidad de estudio alcanzada en todos los casos fue la máxima<br />

proyectada de 10 m, sin detectarse <strong>el</strong> techo de la roca.<br />

Como resultado de las pruebas realizadas fueron obtenidos los gráficos de<br />

penetraciones para cada punto a través de los cuales se evaluó la resistencia<br />

de los su<strong>el</strong>os a la penetración <strong>d<strong>el</strong></strong> cono y <strong>el</strong> NSPT correspondiente como índice<br />

para la determinación de la consistencia de los mismos. Se utilizó para <strong>el</strong>lo la<br />

norma ASTM <strong>d<strong>el</strong></strong> 2002 – 2003 que corresponde a este método y <strong>el</strong> software de<br />

procesamiento diseñado para <strong>el</strong> equipo empleado.<br />

Los valores de resistencia a la penetración <strong>d<strong>el</strong></strong> cono hasta la profundidad de<br />

estudio alcanzada (10 m) fueron muy similares en todos los puntos evaluados. El<br />

número de golpes necesarios para penetrar 10 cm de su<strong>el</strong>o fue como promedio<br />

general de cinco, con un rango de oscilación entre 0 y 27 en la PDC-1.<br />

Teniendo en cuenta la similitud en <strong>el</strong> comportamiento de los gráficos de PDC<br />

confeccionados, los resultados de las investigaciones ingeniero – geológicas<br />

precedentes ejecutadas por la ENIA con diversos fines, <strong>el</strong> reconocimiento<br />

geológico realizado, entrevistas con los pobladores más antiguos de El Fanguito y<br />

la experiencia de trabajo acumulado en condiciones ingeniero – geológicas<br />

similares, se puede suponer la existencia en todo <strong>el</strong> corte investigado de un mismo<br />

tipo de EIG: Cieno limo – arenoso orgánico, color gris oscuro, olor fétido, con<br />

fragmentos de conchas, muy saturado, baja compresibilidad, consistencia muy<br />

blanda al principio a blanda al final.<br />

Entendemos necesario señalar que en <strong>el</strong> área estudiada, sobre todo en los<br />

espacios entre las penetraciones pudiera aparecer una capa de r<strong>el</strong>leno (material<br />

alóctono) de espesor variable y sobre la cual han sido construidas las<br />

edificaciones <strong>d<strong>el</strong></strong> barrio El Fanguito.<br />

34


Obras construidas sobre <strong>el</strong> fondo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>:<br />

Según <strong>el</strong> estudio realizado por GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos en junio <strong>d<strong>el</strong></strong> 2004<br />

para la localización e identificación de los objetos <strong>d<strong>el</strong></strong> fondo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, se detectaron<br />

los siguientes objetos y obras:<br />

Tún<strong>el</strong> de Malecón<br />

Tún<strong>el</strong> de Línea<br />

Sifón<br />

Emisario submarino<br />

Asociados al desarrollo de la actividad pesquera, en las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> existen<br />

objetos enterrados parcial o totalmente en <strong>el</strong> cieno limo-arenoso, como por<br />

ejemplo restos de embarcaciones fundamentalmente de madera o plástico y<br />

pilotes de antiguos mu<strong>el</strong>les; según los límites <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> estos objetos se<br />

encuentran fuera de los límites de la franja que se draga y en profundidades<br />

menores de 0.50 m, por lo que no constituyen p<strong>el</strong>igro alguno.<br />

4.1.3 Régimen hidrometeorológico<br />

Clima:<br />

Por la influencia marítima, <strong>el</strong> clima en la región se presenta como tropical<br />

marítimo, mostrando un régimen térmico moderado, humedad r<strong>el</strong>ativa alta y<br />

vientos predominantes <strong>d<strong>el</strong></strong> Primer Cuadrante con intensidades moderadas. Con<br />

r<strong>el</strong>ación a las precipitaciones, se aprecian dos pe<strong>río</strong>dos bien diferenciados, uno<br />

lluvioso de mayo a octubre y uno poco lluvioso de noviembre a abril.<br />

En <strong>el</strong> Tabla 9 se brinda <strong>el</strong> comportamiento anual de las principales variables que<br />

caracterizan <strong>el</strong> clima en la región.<br />

Lecha E. y col. (1994) realizaron varias clasificaciones <strong>d<strong>el</strong></strong> clima atendiendo a una<br />

serie de <strong>el</strong>ementos, según aqu<strong>el</strong>las <strong>el</strong> clima en la región de interés presenta poca<br />

individualidad, a lo largo <strong>d<strong>el</strong></strong> año se observan solamente dos estaciones, verano y<br />

transición verano-invierno, clasificándose como fresco, soleado y húmedo. Sobre<br />

la base de las sensaciones de bienestar y calor sofocante, está situado en la zona<br />

II, con sensaciones moderadas de calor sofocante como promedio anual,<br />

35


abarcando los días confortables entre <strong>el</strong> 20% y <strong>el</strong> 40 % <strong>d<strong>el</strong></strong> año, agrupados de<br />

diciembre a marzo. En verano se alcanzan las magnitudes extremas durante los<br />

mediodías y por la noche las sensaciones son débiles a moderadas.<br />

Generalizando se puede afirmar que <strong>el</strong> clima, junto con <strong>el</strong> comportamiento de las<br />

variables meteorológicas que determinan <strong>el</strong> estado <strong>d<strong>el</strong></strong> tiempo que lo caracterizan,<br />

se encuentra regido principalmente por la circulación atmosférica, la cual a su vez<br />

responde a los tipos de procesos sinópticos dominantes en <strong>el</strong> área, por tanto <strong>el</strong><br />

estado <strong>d<strong>el</strong></strong> tiempo se encuentra dominado de modo alterno por <strong>el</strong> centro<br />

anticiclónico oceánico <strong>d<strong>el</strong></strong> Atlántico durante la temporada húmeda y por los<br />

anticiclones migratorios en <strong>el</strong> invierno.<br />

La dorsal de las altas presiones oceánicas es responsable de que durante gran<br />

parte <strong>d<strong>el</strong></strong> pe<strong>río</strong>do de verano predominen en la zona de estudio vientos <strong>d<strong>el</strong></strong> noreste<br />

al este con v<strong>el</strong>ocidades entre 10 y 20 km/h, que pueden alcanzar hasta 30 km/h en<br />

la tarde, siendo flojos y variables durante la noche y la madrugada. El estado <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

tiempo asociado es bueno, con altas temperaturas aunque puede haber actividad<br />

de tormentas <strong>el</strong>éctricas por la tarde, según <strong>el</strong> contenido de humedad en los niv<strong>el</strong>es<br />

bajos de la atmósfera en la zona y su grado de inestabilidad.<br />

En la época de seca o época invernal la dorsal <strong>d<strong>el</strong></strong> Atlántico se retira y da paso a<br />

dorsales anticiclónicas migratorias que proceden <strong>d<strong>el</strong></strong> continente y alcanzan a<br />

veces valores de presión superiores a los 1 030 hPa que provocan la<br />

intensificación <strong>d<strong>el</strong></strong> flujo de vientos <strong>d<strong>el</strong></strong> Primer Cuadrante en la costa norte de La<br />

Habana <strong>desde</strong> <strong>el</strong> final de la mañana o comienzos de la tarde, con v<strong>el</strong>ocidades que<br />

pueden llegar en <strong>el</strong> litoral a valores sostenidos entre 25 y 35 km/h con rachas<br />

entre 50 y 60 km/h.<br />

Por otro lado la combinación de bajas presiones en <strong>el</strong> Caribe y altas presiones en<br />

<strong>el</strong> Atlántico o en <strong>el</strong> este de los EE.UU. trae consigo <strong>el</strong> desarrollo de brisotes <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

noreste al este-noreste en los meses de abril y mayo; la combinación de altas<br />

presiones migratorias y las bajas extratropicales producen flujos de vientos de<br />

región sur (“sures”) sobre la zona de estudio en los meses de febrero a abril que<br />

en ocasiones pueden tener fuerza de huracán.<br />

36


Un gradiente barométrico débil se produce generalmente en verano, durante los<br />

meses de transición hacia la época veraniega o en su culminación trayendo<br />

aparejado situaciones de débiles vientos, pe<strong>río</strong>dos de calma, tiempo variable y<br />

mucho calor, sobre todo cuando hay un intenso calentamiento.<br />

Ciclones tropicales:<br />

Los ciclones tropicales y huracanes constituyen <strong>el</strong> fenómeno meteorológico más<br />

destructor de la atmósfera tropical y por lo tanto, <strong>el</strong> mayor p<strong>el</strong>igro natural a que se<br />

encuentra sometida esta localidad. La temporada ciclónica, al igual que en <strong>el</strong> resto<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> país, corre de junio a noviembre, siendo <strong>el</strong> mes de mayor p<strong>el</strong>igro octubre con<br />

casi la mitad de todos los casos de afectación, seguidos de septiembre y agosto.<br />

La distribución por intensidades muestra que algo más de la mitad de los que han<br />

afectado a las provincias habaneras lo han hecho con moderada o gran intensidad<br />

(Tablas 10 y 11), según la escala de Rodríguez Ramírez (1984). Sólo los<br />

huracanes de 1844, 1846, 1926 y 1944 poseen las categorías 4 y 5 de Saffir-<br />

Simpson (Tabla 12); aunque otros ocho huracanes fueron lo suficientemente<br />

intensos para ser considerados como categoría 3 de dicha escala<br />

La frecuencia con que los huracanes intensos han afectado a Cuba es<br />

r<strong>el</strong>ativamente alta, con veinticuatro casos en 200 años. Diez de <strong>el</strong>los alcanzaron<br />

las categorías 4 y 5 de la escala Saffir-Simpson y pueden considerarse como muy<br />

intensos. La inmensa mayoría ocurrió en octubre y provenían <strong>d<strong>el</strong></strong> Mar Caribe<br />

Diecinueve de <strong>el</strong>los se presentaron entre 1870 y 1952. La frecuencia con que los<br />

huracanes intensos afectaron a Cuba entre 1951 y <strong>el</strong> 2000 es considerablemente<br />

menor que en los 50 años anteriores. Un total de ocho huracanes provocaron<br />

grandes desastres naturales, con la ocurrencia de más de 100 personas fallecidas<br />

en cada caso. Seis de <strong>el</strong>los eran huracanes muy intensos (ver Tabla 12).<br />

Tormentas locales severas:<br />

La información disponible sobre las tormentas locales severas abarca <strong>el</strong> periodo<br />

1909-1986. Se observó que dichas tormentas ocurrieron <strong>desde</strong> una en un año<br />

hasta tres en un mismo año (1978), e incluso hasta dos en un mismo mes (junio<br />

de 1982) con una media anual de 0.46 casos/año. En la marcha anual, se observa<br />

37


que las mayores frecuencias ocurren en <strong>el</strong> mes de junio, 27.8, seguido por julio,<br />

16.7 (Figura 10).<br />

Frentes f<strong>río</strong>s: Los sistemas sinópticos de latitudes medias que al desplazarse<br />

primero al sudeste sobre <strong>el</strong> Golfo de México y luego al este afectan a Cuba, son<br />

los frentes f<strong>río</strong>s (FF); los que se presentan en <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do denominado poco lluvioso<br />

o seco, <strong>el</strong> cual se extiende <strong>desde</strong> <strong>el</strong> mes de noviembre hasta abril, aunque estas<br />

situaciones sinópticas se han presentado en los meses de septiembre (siete FF) y<br />

junio (cuatro FF).<br />

El frente f<strong>río</strong> medio por temporada es <strong>d<strong>el</strong></strong> tipo clásico y de intensidad moderada<br />

(con vientos máximos entre 36 km/h y 55 km/h); está asociado a un centro de<br />

bajas presiones que se desplaza de oeste a este sobre <strong>el</strong> Golfo de México o los<br />

estados <strong>d<strong>el</strong></strong> sur de los EE.UU. El FF clásico produce previamente vientos de<br />

región sur sobre <strong>el</strong> occidente de Cuba, conocidos como “sures”. Cuba ha sido<br />

afectada por FF muy fuertes en los cuales se han registrado vientos medios <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

orden de los 98 km/h y máximos de 115 km/h (Tablas 13, 14 y 15).<br />

En ocasiones los frentes f<strong>río</strong>s están precedidos por hondonadas activas y muy<br />

activas que causan lluvias y tienen tiempo severo asociado (lluvias superiores a<br />

los 100 mm/24 horas, fuertes tormentas <strong>el</strong>éctricas y en ocasiones caída de<br />

granizos), éstas son las denominadas hondonadas prefrontales, que se comportan<br />

en su desplazamiento hacia <strong>el</strong> este de forma similar a los FF.<br />

Al analizar las 50 temporadas invernales que corresponden al periodo 1950-2000<br />

(Figura 11) se tiene que la incidencia de los FF es alta, con un valor medio de<br />

afectación de 21 FF. Predominaron por su tipo los FF clásicos; por su intensidad,<br />

se presentaron débiles en su mayoría, con un viento máximo medio de 35 km/h.<br />

4.1.4 Condiciones hidrológicas<br />

Las características físico-geográficas determinadas para <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> corresponden<br />

a la parte de la cuenca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> ubicada aguas abajo de la presa<br />

Ejército Reb<strong>el</strong>de, ya que esta, según la variante de operación establecida, dispone<br />

de un margen de niv<strong>el</strong> en <strong>el</strong> embalse que garantiza un considerable volumen de<br />

38


etención y solo en caso de grandes avenidas será operada a través <strong>d<strong>el</strong></strong> desagüe<br />

de fondo cuya capacidad máxima de evacuación es de 295 m 3 /s.<br />

La cuenca, en general, tiene poca vegetación. En su parte superior predominan<br />

los pastos y en la parte inferior, las zonas urbanas que producen un considerable<br />

aporte de albañales. Los su<strong>el</strong>os predominantes en la cuenca, según la<br />

clasificación morfológica, son los <strong>d<strong>el</strong></strong> tipo Hatuey, Truffiín y Palmarito, con<br />

v<strong>el</strong>ocidades de infiltración que oscilan entre 0,5 y 0,2 mm/min.<br />

Los parámetros morfométricos de la cuenca hasta los cierres de cálculo se dan en<br />

la Tabla 16. El cálculo <strong>d<strong>el</strong></strong> escurrimiento medio hiperanual se realizó para <strong>el</strong> área<br />

de cuenca aguas debajo de la presa, es decir, sin tener en cuenta <strong>el</strong> área de<br />

aporte de la misma. Los resultados obtenidos se ofrecen en la Tabla 17.<br />

Los valores de gastos máximos <strong>d<strong>el</strong></strong> área complementaria sin <strong>el</strong> aporte de la presa<br />

y con <strong>el</strong> aporte de esta, para que se conozca lo que se produciría en los cierres de<br />

cálculo de abrirse o no <strong>el</strong> desagüe de fondo, se brindan en las Tablas 18 y 19.<br />

El volumen anual de sedimentos en suspensión (Vt) se determina a través <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

gasto de sedimentos en suspensión (Rs). Los resultados obtenidos se ofrecen en<br />

la Tabla 20.<br />

4.1.5 Caracterización geofísica<br />

4.1.5.1 Sísmica<br />

La región de interés se enmarca dentro de la Zona 0 donde la sismicidad se<br />

cataloga como baja, sin efectos dañinos para las construcciones, no siendo<br />

necesario entonces tomar medidas sismorresistentes en estructuras y obras; no<br />

obstante, <strong>desde</strong> un punto de vista estadístico, no puede afirmarse que existe<br />

sismicidad nula.<br />

39


4.1.5.2 Hidromagnetometría<br />

El tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> que se investigó es complejo ya que en él se encuentran<br />

localizados dos tún<strong>el</strong>es de transporte automotor que comunican la ciudad en<br />

sentido este – oeste (Tún<strong>el</strong> de 5ta Avenida y <strong>el</strong> de Línea), un puente levadizo<br />

(Puente de Hierro) y un sifón para residuales <strong>d<strong>el</strong></strong> sistema de alcantarillado de la<br />

ciudad, por donde se transportan las aguas albañales <strong>desde</strong> Miramar hacia <strong>el</strong><br />

Vedado. Tanto los tún<strong>el</strong>es como <strong>el</strong> sifón se encuentran sumergidos bajo las aguas<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

4.1.6 Condiciones oceanográficas<br />

4.1.6.1 Hidrodinámica<br />

Régimen de Marea:<br />

Los datos de los dos Puestos de Niv<strong>el</strong> temporales nos permitieron definir las<br />

características fundamentales de la marea en la zona. Para clasificar la marea se<br />

adoptó un criterio que se basa en la r<strong>el</strong>ación existente entre los armónicos<br />

principales (clasificación dada por Dubanin, 1960), las constantes armónicas de<br />

las once ondas calculadas para este periodo evidenciaron que la amplitud de las<br />

ondas diurnas K1+O1 fue superior a la amplitud de la onda semidiurna principal M2.<br />

Esto se debe presumiblemente a la influencia de la marea diurna <strong>d<strong>el</strong></strong> Golfo de<br />

México sobre la marea de esta localidad geográfica. Debido a esto, en toda <strong>el</strong> área<br />

de estudio, la marea tiene un carácter mixto semidiurno irregular y es de tipo<br />

declinacional.<br />

Las mareas de este tipo responden en primer lugar a la declinación de la Luna, o<br />

sea, a la posición que ocupa la Luna respecto al plano <strong>d<strong>el</strong></strong> Ecuador y, en un<br />

segundo lugar a las fases de la Luna.<br />

Durante la etapa de campo no se reportaron precipitaciones en toda <strong>el</strong> área que<br />

ocupa la cuenca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, fue un pe<strong>río</strong>do caracterizado por una<br />

moderada sequía lo cual permitió que <strong>el</strong> niv<strong>el</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> no se viera afectado por<br />

40


subidas rápidas o crecidas por efecto de la lluvia que producen aumento <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

caudal <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y ocurrencia de inundaciones. Estas condiciones permitieron que la<br />

onda de marea en su recorrido no se viera afectada por ningún fenómeno de esta<br />

índole, y permitió la penetración de la misma hacia <strong>el</strong> interior <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> sin encontrar<br />

ningún obstáculo natural. El comportamiento de la onda de marea nos permite<br />

definir que <strong>el</strong>la penetra <strong>río</strong> adentro con un retardo (Desfasaje) de 38.3 minutos, o<br />

sea, que <strong>el</strong> llenante en la inmediaciones <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la Calle 23 ocurre 38<br />

minutos después, aproximadamente, que <strong>el</strong> de la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>. Como<br />

es lógico, en su recorrido hacia <strong>el</strong> interior la onda se atenúa, alcanzando<br />

diferencias entre ambas amplitudes que oscilan entre -2 y -4 cm en los momentos<br />

de cuadratura, disminuyendo paulatinamente hasta alcanzar en sicigia de -17 a -<br />

19 cm aproximadamente. Se considera que más a<strong>d<strong>el</strong></strong>ante la onda sigue<br />

disminuyendo hasta llegar al lugar en que la misma deja de influenciar en la<br />

hidrología <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> pero está confirmado que en estas condiciones atmosféricas de<br />

pocas precipitaciones, la onda de marea influye más allá <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la calle 23.<br />

El llenante tiene una duración aproximadamente 6.38 horas, mientras que <strong>el</strong><br />

vaciante dura 5.9 horas.<br />

Las mayores amplitudes de las series de observaciones, como es lógico, ocurren<br />

durante las fases de sicigias, alcanzando valores en la desembocadura de 74 cm y<br />

en <strong>el</strong> interior de 62 cm. En cuadratura disminuyen hasta alcanzar 3 y 4 cm en<br />

ambos mareógrafos. Las amplitudes promedio de las observaciones se encuentra<br />

muy cercana la media histórica para esta área (28.5 cm) con valores de 26.8 cm<br />

en la desembocadura y 26.2 cm y <strong>el</strong> interior <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> (Figuras 12 y 13).<br />

Régimen de corrientes:<br />

El estudio de corrientes se fundamentó en las mediciones de este parámetro en<br />

dos localidades ubicadas a lo largo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> en <strong>el</strong> tramo comprendido<br />

entre <strong>el</strong> puente de 23 y la desembocadura, <strong>desde</strong> <strong>el</strong> 22 de mayo hasta <strong>el</strong> 7 de<br />

junio de 2004. La primera estación se ubicó en la misma desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y<br />

la otra frente al mu<strong>el</strong>le <strong>d<strong>el</strong></strong> Punto Náutico <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano, en <strong>el</strong> niv<strong>el</strong><br />

superficial.<br />

41


Las condiciones atmosféricas imperantes permitieron que se obtuvieran valores<br />

aceptables de las v<strong>el</strong>ocidades <strong>d<strong>el</strong></strong> flujo total <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>. Estas condiciones estuvieron<br />

caracterizadas por la ausencia de precipitaciones y en sentido general <strong>el</strong> territorio<br />

se vio afectado por una fuerte sequía lo que permitió caracterizar <strong>el</strong> flujo en<br />

condiciones normales sin la ocurrencia de inundaciones o aumento <strong>d<strong>el</strong></strong> caudal <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

<strong>río</strong>. Cuando ocurre <strong>el</strong> llenante de marea, <strong>el</strong> flujo normal <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> es prácticamente<br />

frenado por la onda de marea en <strong>el</strong> tramo objeto de estudio, en estos momentos<br />

se reportan las v<strong>el</strong>ocidades menores de la corriente <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>. Con <strong>el</strong> vaciante, <strong>el</strong> <strong>río</strong><br />

fluye normalmente alcanzando las mayores v<strong>el</strong>ocidades. La estación fondeada<br />

hacia <strong>el</strong> interior, frente al mu<strong>el</strong>le <strong>d<strong>el</strong></strong> Punto Náutico <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano, en <strong>el</strong><br />

momento de la bajamar registró valores máximos de v<strong>el</strong>ocidad que alcanzaron<br />

entre 15 y 24 cm/s en dirección a la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, los valores medios se<br />

encuentran entre 3 y 4.5 cm/s (Figuras 14 y 15).<br />

Los valores de las v<strong>el</strong>ocidades registradas en la estación que se encuentra en la<br />

desembocadura (Figura 16) disminuyen debido a la configuración de las riberas<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> que en esta zona se ensancha y también a la fuerza que ejerce <strong>el</strong> mar que<br />

se presenta como una barrera hídrica, provocando que en esta área se reporten<br />

valores, los mayores oscilan entre 3 y 4 cm/s y medios entre 1.5 y 1.6 cm/s.<br />

La onda de marea se hace sentir a todo lo largo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> hasta <strong>el</strong> puente de la calle<br />

23, imprimiéndole un carácter estacionario a la corriente que no cambia de<br />

dirección sino que se atenúa cuando ocurre <strong>el</strong> llenante alcanzando valores que<br />

pueden considerarse como paro de corriente, como ocurre en las inmediaciones<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> puente de 23. Al suceder lo contrario (vaciante) <strong>el</strong> <strong>río</strong> continúa con su flujo<br />

normal hacia la desembocadura. Esto quiere decir que los valores máximos<br />

ocurren en los momentos de bajamar y los mínimos en pleamar.<br />

Hay que tener presente que este patrón se verá afectado en época de lluvia en<br />

que ocurren las crecidas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, aumentando su flujo y caudal, llegando a<br />

multiplicar las v<strong>el</strong>ocidades incluso en más de tres veces en dependencia <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

acumulado de precipitaciones caídas en toda la cuenca.<br />

42


Patrón de circulación de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>:<br />

Con toda la información de corrientes y marea recopilada, se confeccionaron los<br />

patrones esquemáticos de circulación de las corrientes marinas asociadas a los<br />

periodos de flujo y reflujo de marea, y <strong>el</strong> de circulación residual, mostrados en las<br />

Figuras 18, 19 y 20.<br />

Las corrientes asociadas al flujo de marea en <strong>el</strong> océano adyacente al área de<br />

estudio presentan una dirección general hacia <strong>el</strong> suroeste, con v<strong>el</strong>ocidades<br />

promedio <strong>d<strong>el</strong></strong> orden de los 8,00 – 12,00 cm/s; entrada de agua por la<br />

desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, con v<strong>el</strong>ocidades promedio de 3,00 – 5,00<br />

cm/s y una disminución sustancial de su intensidad promedio (inferior a 2,00<br />

cm/s) y máximas de 3,00 – 4,00 cm/s. (Figura 18).<br />

Las corrientes asociadas al reflujo de marea en <strong>el</strong> océano adyacente al área de<br />

estudio se orientan hacia <strong>el</strong> noreste, con v<strong>el</strong>ocidades promedio <strong>d<strong>el</strong></strong> orden de los<br />

6,00 – 15,00 cm/s y propician la salida <strong>d<strong>el</strong></strong> agua por la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong>, con v<strong>el</strong>ocidades promedio de 4,00 – 7,00 cm/s e inferiores a 4,00<br />

cm/s a la altura <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la calle 23. (Figura 19).<br />

Las corrientes residuales presentan en <strong>el</strong> océano adyacente al área de estudio<br />

una dirección general hacia <strong>el</strong> noreste, con v<strong>el</strong>ocidades entre 6,00 y 14,00 cm/s;<br />

propician salida de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> a través de su desembocadura con<br />

v<strong>el</strong>ocidades inferiores a los 4,00 cm/s e inferiores aguas arriba. (Figura 20).<br />

4.1.6.2 Régimen termohalino<br />

Los comportamientos de la temperatura y la salinidad de las aguas en la<br />

desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> se encuentran determinados por su<br />

intercambio con <strong>el</strong> mar abierto adyacente y por la época <strong>d<strong>el</strong></strong> año (periodos lluvioso<br />

o poco lluvioso). Analizando diversas fuentes de informaciones precedentes se<br />

puede concluir que los patrones termohalinos muestran en periodo lluvioso una<br />

marcada estratificación, observándose dos capas bien diferenciadas: una<br />

superficial de espesor variable en dependencia de la magnitud <strong>d<strong>el</strong></strong> gasto de la<br />

corriente, caracterizada por su baja salinidad ( 30 ppm) y una de fondo con<br />

43


valores halinos similares a las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> mar abierto adyacente (35-36 ppm). En<br />

cuanto a la temperatura se aprecia que las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> estrato de fondo presentan<br />

valores inferiores a los de superficie durante <strong>el</strong> día y superiores en las noche,<br />

variando de manera general los valores térmicos entre los 20.0-25.0°C en épocas<br />

invernales y los 28.0-32.0°C en <strong>el</strong> verano.<br />

Estas características <strong>d<strong>el</strong></strong> régimen termohalino corroboran como era lógico suponer<br />

<strong>el</strong> carácter estuarino de la circulación de las aguas en la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

4.1.6.3 Características hidroópticas<br />

Durante todo <strong>el</strong> pe<strong>río</strong>do de investigaciones se mantuvo una observación constante<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> entorno natural, que permitió valorarlo cualitativamente en su forma más<br />

general. En las aguas se detectó la existencia de olor a ácido sulfídrico, típico de<br />

ambientes poco oxigenados, <strong>el</strong> color <strong>d<strong>el</strong></strong> agua fue verde-carm<strong>el</strong>itoso, se observó la<br />

presencia de sólidos flotantes de procedencia antrópica y abundante vegetación<br />

(malangueta) en las aguas en las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

En la zona de los astilleros Chullima se apreció una p<strong>el</strong>ícula de grasas, aceites e<br />

hidrocarburos que fue detectada cualitativamente como una p<strong>el</strong>ícula visible en la<br />

superficie <strong>d<strong>el</strong></strong> agua, debida a la actividad marítima y <strong>el</strong> achique de embarcaciones<br />

en este lugar.<br />

La transparencia r<strong>el</strong>ativa de las aguas en la zona estudiada fue muy baja (20 cm),<br />

situación debida a la alta turbidez y la suspensión de sólidos en <strong>el</strong>las. Los registros<br />

de turbidez de las aguas presentaron una tendencia a disminuir a medida que se<br />

avanza hacia la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, variando <strong>desde</strong> 18 NTU en la estación 1<br />

ubicada en <strong>el</strong> tramo puente de 23 - Sociedad Dinamo hasta 0.9 NTU en la<br />

desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>. Los mayores registros se detectaron en las estaciones 1 y<br />

2, superan <strong>el</strong> límite máximo de la NC 93-11- 1986 para fuentes superficiales de<br />

abastecimiento de agua (<strong>río</strong>s, lagunas etc.) que es de 10 NTU.<br />

La fracción de sólidos en suspensión en la zona de interés es muy pequeña y se<br />

encontró en todos los casos por debajo <strong>d<strong>el</strong></strong> límite de detección reportado para <strong>el</strong><br />

44


método analítico empleado (50 mg/l) cumpliendo con los índices de la NC 25:<br />

1999 para cuerpos de agua dulce de interés pesquero (


aguas y por otra parte influyen las altas temperaturas observadas durante <strong>el</strong><br />

muestreo que provocan una disminución en la solubilidad de los gases.<br />

La materia orgánica presente en las aguas es medida a través de la demanda<br />

bioquímica de oxígeno (DBO5) y la demanda química de oxígeno (DQO). Con<br />

respecto a la DBO5, las concentraciones obtenidas exceden varias veces las<br />

normas de calidad y son indicativas una situación crítica debido a la contaminación<br />

de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> por la existencia de residuos industriales y urbanos sin<br />

tratamiento o ineficientemente tratados. En general los valores para la DBO<br />

oscilaron entre 15 mg/l en la estación 5 ubicada al oeste de la glorieta <strong>d<strong>el</strong></strong> 1830 en<br />

la ensenada <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y 20.2 mg/l en <strong>el</strong> punto 4 ubicado entre <strong>el</strong> puente de Hierro y <strong>el</strong><br />

Tún<strong>el</strong> de 5ta Avenida con un promedio general de 17.5 mg/l.<br />

Las concentraciones de la DQO a pesar de no ser cuantificadas por ser menores<br />

que 50 mg/l (límite inferior <strong>d<strong>el</strong></strong> método analítico empleado por <strong>el</strong> laboratorio de<br />

ensayo), indican una contaminación orgánica reciente si tenemos en cuenta los<br />

contenidos detectados para <strong>el</strong> oxígeno disu<strong>el</strong>to y <strong>el</strong> nitrógeno de nitritos.<br />

El pH se comportó ligeramente básico. El mismo osciló entre 7.2 y 7.9 con un valor<br />

promedio de 7.6 unidades, <strong>el</strong> cual se considera aceptable según las Normas 27:<br />

1999 y 25: 1999 para cuerpos de agua dulce de uso pesquero.<br />

Elementos nutrientes:<br />

Con respecto a los nutrientes (Tabla 22), se apreció una abundancia de los<br />

compuestos <strong>d<strong>el</strong></strong> ciclo <strong>d<strong>el</strong></strong> nitrógeno que está r<strong>el</strong>acionada con la alta carga<br />

contaminante producida principalmente por los asentamientos poblacionales en<br />

las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y los residuales industriales deficientemente tratados.<br />

Además <strong>el</strong> resultado está influenciado por las altas temperaturas detectadas en la<br />

época de muestreo que provocan <strong>el</strong> incremento en la actividad heterotrófica que<br />

favorece la liberación de los nutrientes inorgánicos a expensas de la oxidación de<br />

la materia orgánica.<br />

Durante los ensayos de laboratorio se pudo apreciar que la determinación <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

amonio a través <strong>d<strong>el</strong></strong> método colorimétrico de Nessler presentó interferencias<br />

producidas entre otros motivos por la intrusión salina y las altas concentraciones<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> compuesto que son superiores al límite máximo <strong>d<strong>el</strong></strong> ensayo empleado. Lo<br />

46


anterior provocó que no fuera posible cuantificar sus concentraciones puntuales, o<br />

sea, por estaciones de muestreo.<br />

El nitrógeno de nitratos presentó una situación similar. Los contenidos existentes<br />

no pudieron cuantificarse a pesar de presentarse un complejo altamente<br />

coloreado, ya que son inferiores al límite mínimo <strong>d<strong>el</strong></strong> método empleado (


organolépticas <strong>d<strong>el</strong></strong> agua que induce al rechazo de los consumidores y su ingestión<br />

representa un riesgo para la salud; asimismo, y en <strong>el</strong> caso específico <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

ecosistema <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, este puede sufrir afectaciones debidas al impacto<br />

negativo de estos contaminantes sobre sus diferentes componentes.<br />

En <strong>el</strong> caso que investigamos podemos valorar los resultados en cada una de las<br />

estaciones como No Contaminadas, según criterio CARIPOL 1980, exceptuando<br />

la estación 3 ubicada entre Aseguramiento Naval y <strong>el</strong> puente de Hierro, con un<br />

valor de 0.48 mg/l debido a la contaminación antrópica puntual en este lugar y que<br />

clasifica como de una Contaminación Ligera.<br />

En la Tabla 24 se presentan los valores correspondientes a los resultados<br />

expresados <strong>d<strong>el</strong></strong> análisis de las grasas y aceites en las aguas en cada una de las<br />

estaciones. Con respecto a estos parámetros, se rev<strong>el</strong>ó que en la estación 3 <strong>el</strong><br />

valor es superior a 0.5 mg/l, que según la Norma Cubana 22:1999: Lugares de<br />

baño en costas y en masas de aguas interiores no satisfacen los<br />

requerimientos para su uso con fines recreativos en contacto directo, este valor<br />

coincide con los máximos detectados para los hidrocarburos totales; esos valores<br />

<strong>el</strong>evados son debidos a que <strong>el</strong> lugar muestreado es contiguo a los Astilleros<br />

Chullima.<br />

Metales pesados en aguas:<br />

Los valores de contenido de As, Cu, Cd, Hg, Pb, Co, Ni y Zn correspondientes a<br />

las muestras de agua se encontraron por debajo <strong>d<strong>el</strong></strong> límite de detección <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

método analítico empleado lo que indica la ausencia de estos <strong>el</strong>ementos en las<br />

aguas de la zona estudiada en <strong>el</strong> momento <strong>d<strong>el</strong></strong> muestreo.<br />

Las concentraciones de As, Cu, Cd, y Pb también son inferiores a los valores<br />

establecidos por la Norma Cubana 25: 1999 para aguas en <strong>el</strong> sostenimiento de la<br />

vida acuática. Se debe aclarar que esta norma no especifica los valores para <strong>río</strong>s,<br />

no obstante se trabajó sobre la base de sus índices (Tabla 25).<br />

De los metales s<strong>el</strong>eccionados sólo <strong>el</strong> Hierro y <strong>el</strong> Manganeso fueron cuantificados<br />

aunque con concentraciones pequeñas, <strong>el</strong>los están asociados a la litología de los<br />

sedimentos (Tabla 26).<br />

48


Metales pesados en sedimentos:<br />

Para <strong>el</strong> análisis de los metales pesados, los sedimentos se dividieron en secciones<br />

de aproximadamente 5 cm de largo considerando los primeros cinco centímetros<br />

como la fracción superficial (Martínez, 2000). Las muestras se sometieron a la<br />

limpieza, liofilización y digestión con HCL 2N para determinar los metales<br />

biodisponibles. Se midió la fracción menor que 63 μm.<br />

En general se realizó la determinación de 12 metales Al, Ba, Cd, Co, Cr, Cu, Fe,<br />

Mn, Ni, Pb, Zn, de estos <strong>el</strong> Cu, Pb y Zn son los clásicos indicadores de<br />

contaminación antropogénica. (Tabla 27).<br />

El cobre (Cu) es uno de los <strong>el</strong>ementos más importantes para las plantas y<br />

animales. Sin embargo, la exposición de estos a altas concentraciones de Cu<br />

biodisponible puede provocar bioacumulación con posibles efectos tóxicos<br />

(ATSDR 1997 citado por Brinden, K; Labunska, I; Stringer, R; Johnston, P. Santillo<br />

(2000)). Las concentraciones obtenidas para este metal en los sedimentos<br />

superficiales fueron altas, destacándose la estación 4 ubicada entre <strong>el</strong> puente de<br />

Hierro y <strong>el</strong> Tún<strong>el</strong> de 5ta Ave como la más impactada, con niv<strong>el</strong>es de 192.4 μg/g.<br />

En general se obtuvo un valor medio de 158.68 μg/g para toda <strong>el</strong> área estudiada<br />

que supera los reportes para otros <strong>río</strong>s cubanos (González y col., 1989) y excede<br />

tres veces las concentraciones típicas recomendadas por Salomons y Forstner<br />

(1984) y ATSDR (1997) citado por Brinden y col. (2000) para sedimentos de agua<br />

dulce no contaminados (45-50 μg /g).<br />

El Plomo (Pb) se considera un de los metales más móviles en <strong>el</strong> medio ambiente y<br />

en cuanto a la salud humana sus efectos son iguales así se inhale o se ingiera<br />

(ATSDR 1997 citado por Brinden, K; Labunska, I; Stringer, R; Johnston, P. Santillo<br />

(2000)). Por su toxicidad está considerado en la lista de sustancias p<strong>el</strong>igrosas<br />

prioritarias. Las concentraciones detectadas para <strong>el</strong> Pb fueron <strong>desde</strong> 86.1 μg/g en<br />

la estación ubicada en <strong>el</strong> tramo 1 y 125.1 μg/g en la estación 5 con un promedio<br />

general para <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> estudiado de 110.86 μg/g. Estos resultados son muy<br />

<strong>el</strong>evados si tenemos en cuenta que la literatura reporta concentraciones entre 10-<br />

50 μg/g para sedimentos de <strong>río</strong>s no contaminados (Salomons y Forstner 1984 y<br />

Bryan y Langston 1992 citado por Brinden y col., 2000). También supera los<br />

49


eportes para <strong>el</strong> Pb en otros <strong>río</strong>s cubanos como Canímar, Yumurí y San Juan<br />

todos ubicados en la provincia de Matanzas (González y col., 1989).<br />

El Zinc (Zn) es un <strong>el</strong>emento esencial presente en los tejidos de animales y plantas<br />

a concentraciones ambientales normales. Sin embargo una exposición alta de zinc<br />

biodisponible puede provocar una bioacumulación significativa con efectos tóxicos<br />

(ATSDR 1997). Las concentraciones de Zn en <strong>el</strong> área estudiada fueron igualmente<br />

altas, estas exceden cinco veces la concentración típica para este metal en<br />

sedimentos de agua dulce (


Para <strong>el</strong> Fe y <strong>el</strong> Al las concentraciones presentaron un comportamiento contrario al<br />

Mn; se observó una tendencia al incremento hacia las estaciones ubicadas<br />

después <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de Hierro. Las mismas oscilaron entre 2.05 % - 2.96 % con<br />

una media de 2.62% para <strong>el</strong> Fe y 2.46% - 3.81% con un promedio de 3.18 % para<br />

<strong>el</strong> Al.<br />

En <strong>el</strong> caso <strong>d<strong>el</strong></strong> Co y <strong>d<strong>el</strong></strong> Ni se presentó poca variabilidad en los resultados<br />

obtenidos por estaciones. Las concentraciones de Co oscilaron entre 12.1 μg/g y<br />

12.7μg/g con un valor medio de 12.28 μg/g, <strong>el</strong>las se encuentran en <strong>el</strong> intervalo<br />

típicamente encontrado para sedimentos de agua dulce sin contaminar (6-22 μg/g<br />

según Hamilton, 1994 citado por Brinden y col., 2000). Los contenidos de Ni en<br />

los sedimentos oscilaron entre 37.2 μg/g y 41.5 μg/g con un promedio de 38.15<br />

μg/g.<br />

Con respecto al Ba los sedimentos presentaron valores promedio de 118.26 μg/g<br />

con valores extremos entre 89.20 μg/g en la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y 160.90 μg/g<br />

en <strong>el</strong> tramo entre la Sociedad Dínamo y Aseguramiento Naval CITMA.<br />

El Cd, metal altamente tóxico, no fue cuantificado, o sea, las concentraciones que<br />

existen en los sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> área analizada son inferiores al límite mínimo <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

método empleado (1μg/g).<br />

El Hg en bajas concentraciones se plantea que es extremadamente tóxico tanto<br />

para los animales como para las plantas ya que es <strong>el</strong> único metal que se<br />

biomagnifica, o sea, que se acumula progresivamente. Los niv<strong>el</strong>es de<br />

concentración detectados para este metal no pudieron ser cuantificados, lo que no<br />

quiere decir que no exista una contaminación antrópica por <strong>el</strong> mismo, teniendo en<br />

cuenta que los valores recomendados para <strong>el</strong> Hg en sedimentos para agua dulce<br />

no contaminados deben oscilar entre 0.2 – 0.35 g/g según ATSDR 1997 citado<br />

por Brinden, K; Labunska, I; Stringer, R; Johnston, P. Santillo (2000). Los valores<br />

resultantes en las estaciones son inferiores a la concentración mínima <strong>d<strong>el</strong></strong> método<br />

analítico empleado (5 g/g).<br />

En <strong>el</strong> caso <strong>d<strong>el</strong></strong> As se detectó una situación semejante, las concentraciones en los<br />

cinco puntos de muestreo son menores que 5 g/g.<br />

51


D<strong>el</strong> análisis de la Tabla 27 se puede concluir que los sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo<br />

estudiado <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> muestran una contaminación por metales pesados,<br />

fundamentalmente los de origen antrópico debida a la alta carga contaminante que<br />

históricamente este cuerpo de agua ha recibido de los asentamientos<br />

poblacionales y las industrias. En general <strong>el</strong> orden jerárquico de la distribución de<br />

los metales tóxicos por zonas se puede apreciar en la Tabla 28.<br />

Carbón y Nitrógeno orgánico en sedimentos:<br />

Comparando la Norma Cubana 25: 1999: Especificaciones y procedimiento para<br />

la evaluación de los objetos hídricos de uso pesquero, con los resultados<br />

evidenciados en la investigación, se resalta que, exceptuando la estación primera,<br />

donde la calidad fue DUDOSA, <strong>el</strong> resto de las áreas de muestreo estuvieron por<br />

debajo <strong>d<strong>el</strong></strong> rango que establece dicha norma (0.2 %), para <strong>el</strong> parámetro de<br />

nitrógeno orgánico (Tabla 29). Este ligero aumento se debe a la actividad<br />

antropogénica y a los procesos de transformación que ha sufrido la materia<br />

orgánica tras la contaminación fecal, a expensas de la propia flora microbiana de<br />

las heces.<br />

Con r<strong>el</strong>ación a los resultados obtenidos <strong>d<strong>el</strong></strong> índice carbón orgánico, se llega a la<br />

conclusión de que en cuatro de cinco estaciones la calidad es MALA, debido a la<br />

activa descomposición existente y la Tabla 29. La Norma Cubana 25: 1999,<br />

expresa como límite máximo un 5 %.<br />

Hidrocarburos totales en sedimentos:<br />

Para <strong>el</strong> ensayo de los hidrocarburos totales en los sedimentos superficiales en <strong>el</strong><br />

tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la calle 23 hasta la desembocadura, se tomaron cinco<br />

muestras de los mismos con un muestreador de gravedad de tubo simple y<br />

cuchara interior de 2 m de longitud y 60 mm de diámetro interior.<br />

Los resultados de los hidrocarburos totales en sedimentos se muestran en la<br />

Tabla 30. Los mismos varían en un intervalo entre 3230 mg/kg y 7750 mg/kg con<br />

un valor medio de 6016 mg/kg.<br />

Las concentraciones detectadas fueron extremadamente altas e indicativas de una<br />

alta contaminación por hidrocarburos, ya que superan <strong>el</strong> límite de tolerancia <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

Programa CARIPOL (20 mg/kg) de materia seca para sedimentos no<br />

52


contaminados por hidrocarburos. También exceden los reportes para otras áreas<br />

que aunque no son <strong>río</strong>s clasifican como contaminados por los mismos, por<br />

ejemplo las bahías de la Habana con concentraciones medias de 1026 mg/kg<br />

(B<strong>el</strong>trán, 2000) y de Nipe 112 mg/kg (Martín, 2003).<br />

Análisis microbiológicos de las aguas:<br />

Las aguas naturales que se utilizan para fines recreacionales generalmente tienen<br />

una mezcla de microorganismos autóctonos y patógenos, provenientes estos<br />

últimos de los efluentes de las aguas albañales (defecación y/o basura), procesos<br />

industriales y agrícolas Se han desarrollado una serie de normas y regulaciones<br />

referentes a la calidad microbiológica de estos cuerpos de aguas en las que se<br />

brindan valores guías y valores de obligatorio cumplimiento en dependencia <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

tipo de exposición (directa o indirecta), siendo esta tarea responsabilidad de las<br />

autoridades sanitarias de cada país, que en la mayoría de los casos siguen los<br />

lineamientos de la Organización Mundial de la Salud, Comunidad Económica<br />

Europea y Agencia Ambiental de Estados Unidos (WHO, 2000; EEC, 1976; EEC,<br />

1994; USEPA, 1986; UNEP, 1993).<br />

Cuando analizamos la situación existente en <strong>el</strong> área de estudio con respecto al<br />

crecimiento de la población y vemos que <strong>el</strong> aumento <strong>d<strong>el</strong></strong> uso <strong>d<strong>el</strong></strong> agua para<br />

diferentes actividades ha incrementado los niv<strong>el</strong>es de contaminación en <strong>el</strong> <strong>río</strong>, nos<br />

damos cuenta de que la situación a la cual nos enfrentamos hoy está r<strong>el</strong>acionada<br />

con los vertidos de origen doméstico e industrial en los cuerpos de agua. En <strong>el</strong><br />

sitio de investigación, para <strong>el</strong> caso de los residuos de origen doméstico, la carga<br />

contaminante está representada por altos porcentajes de materia orgánica y<br />

microorganismos de origen fecal.<br />

El control de la calidad microbiológica <strong>d<strong>el</strong></strong> agua requirió una serie de análisis<br />

dirigidos a determinar la presencia de microorganismos patógenos. Para dicho<br />

análisis nos regimos por una de los métodos estandarizados internacionalmente,<br />

Fermentación en Tubos Múltiples (NMP), recomendado por Standards Methods<br />

for the Examination of Water and Wastewater, 1992).<br />

Estos microorganismos son denominados indicadores de contaminación ya que<br />

tienen un comportamiento similar a los patógenos (concentración y reacción frente<br />

53


a factores ambientales y barreras artificiales), pero son más rápidos, económicos y<br />

fáciles de identificar. Una vez que se ha evidenciado la presencia de grupos<br />

indicadores, se puede inferir que los patógenos se encuentran presentes en la<br />

misma concentración y que su comportamiento frente a diferentes factores como<br />

pH, temperatura, presencia de nutrientes, tiempo de retención hidráulica o<br />

sistemas de desinfección es similar a la <strong>d<strong>el</strong></strong> indicador.<br />

En la Tabla 31 se presentan los resultados obtenidos de la evaluación<br />

microbiológica de la calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> agua <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> para cada una de las<br />

estaciones que justifican <strong>el</strong> análisis presentado anteriormente.<br />

El aumento de este tipo de microorganismos está r<strong>el</strong>acionado con cambios<br />

dramáticos en <strong>el</strong> ambiente y en la población. La contaminación microbiológica en<br />

esta zona está incrementada por los procesos de urbanización, la ocupación de<br />

regiones no habitadas anteriormente y <strong>el</strong> movimiento creciente de animales y de<br />

productos de origen animal. La materia orgánica es <strong>el</strong> principal <strong>el</strong>emento de la<br />

contaminación fecal, por lo que su presenciaausencia es uno de los mejores<br />

indicadores de la existencia de dicha contaminación. Es posible considerarla como<br />

indicador, pues siempre está presente en este tipo de contaminación, es<br />

fácilmente detectable y cuantificable en un laboratorio por lo que si nos detenemos<br />

a valorar toda la historia de explotación <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> nos percataremos que hasta <strong>el</strong><br />

momento no se ha dejado de verter a sus aguas gran cantidad de afluentes<br />

orgánicos y otros que también se consideran contaminantes de origen fecal, como<br />

por ejemplo, cloruros, nitratos, nitritos y amonio.<br />

<strong>Estudio</strong>s realizados por Domínguez y col. en <strong>el</strong> año 2001, valoran que <strong>el</strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong>, uno de los más importantes cuerpos de agua de la ciudad de La<br />

Habana, presenta grandes problemas de contaminación, sobre todo en la zona<br />

ubicada aguas abajo <strong>d<strong>el</strong></strong> embalse Ejército Reb<strong>el</strong>de. A esto se une la descarga de<br />

los afluentes provenientes de la estación de tratamiento de aguas residuales en<br />

María <strong>d<strong>el</strong></strong> Carmen, a donde derivan los residuos industriales y de zonas<br />

residenciales <strong>d<strong>el</strong></strong> municipio Boyeros. Ingresan además al cauce principal <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

cuatro arroyos: Paila, Marinero, Mordazo y Santoyo; aportando una carga<br />

contaminante adicional. En la Tabla 32 se presentan <strong>el</strong> comportamiento de los<br />

54


indicadores de contaminación de las aguas en los lugares de baño y/o recreación<br />

de la Norma Cubana 22: 1999. Por estos valores nos regimos y realizamos <strong>el</strong><br />

análisis anterior.<br />

4.1.9 Evaluación de la calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> agua y los sedimentos<br />

Evaluación Cualitativa:<br />

En la evaluación cualitativa de la calidad de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> estudiado se utilizaron las siguientes normas cubanas:<br />

NC 25: 1999: Especificaciones y procedimientos para la Evaluación de los<br />

objetos hídricos de uso pesquero.<br />

NC 22: 1999: Lugares de Baño en costas y masas de aguas interiores.<br />

NC 93-11-1986: Fuentes de abastecimiento de aguas. Calidad y Protección<br />

sanitaria. (Vigente a partir de marzo de 1987)<br />

NC 27 (1999): Vertimiento de aguas residuales a las aguas terrestres y al<br />

alcantarillado. Especificaciones. Oficina Nacional de Normalización. La Habana.<br />

Valorando <strong>el</strong> comportamiento de los principales indicadores de calidad estudiados,<br />

se pudo constatar que los principales problemas que afectan la calidad de las<br />

aguas superficiales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> están dados por los vertimientos históricos<br />

de aguas servidas sin tratar, tanto domésticas como industriales, que <strong>el</strong> mismo ha<br />

recibido. Esto ha generado una fuerte contaminación orgánica y microbiológica<br />

con concentraciones muy bajas de oxígeno disu<strong>el</strong>to típicas de aguas hipóxicas,<br />

alta turbidez, altos contenidos para la DBO y DQO y de los compuestos<br />

nitrogenados y fosforados.<br />

Otro aspecto de suma importancia son los niv<strong>el</strong>es significativamente <strong>el</strong>evados de<br />

los organismos coliformes fecales y totales típicos de aguas albañales que se<br />

encuentran por encima de las Normas estudiadas.<br />

Con respecto a los sedimentos se apreció una contaminación orgánica<br />

manifestada en las apreciables concentraciones <strong>d<strong>el</strong></strong> carbón orgánico típico de<br />

sedimentos contaminados y en activa descomposición y en contenidos muy<br />

<strong>el</strong>evados para los hidrocarburos totales en los sedimentos que los catalogan como<br />

55


altamente contaminados. Por otro lado los niv<strong>el</strong>es detectados para los metales<br />

pesados fundamentalmente Cu, Pb, Zn Mn, Ba y Al exceden ampliamente los<br />

reportes de Hamilton (1994) citado por Labunska I y col. (2000) para sedimentos<br />

de <strong>río</strong>s no contaminados y que son producto de una fuerte contaminación<br />

antropogénica, por la recepción sostenida de efluentes domésticos e industriales.<br />

Evaluación Cuantitativa: Para evaluar cuantitativamente la calidad de las aguas<br />

fue empleado <strong>el</strong> Índice de Calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> Agua (ICA) desarrollado por Martínez de<br />

Bascarón (1979), recomendado por Conesa (1995). La expresión utilizada es la<br />

siguiente:<br />

ICA= K Ci Pi / Pi<br />

donde:<br />

Ci: Valor porcentual asignados a los distintos parámetros.<br />

Pi: Peso asignado a cada parámetro.<br />

K: Constante que varía su valor en dependencia de las características <strong>d<strong>el</strong></strong> agua.<br />

(0.5 para aguas contaminadas con fuerte olor).<br />

Para calcular <strong>el</strong> ICA se transformaron los valores de los parámetros químicos o<br />

microbiológicos calculados en valores de índice de calidad individuales, los cuales<br />

varían entre 0-100% y <strong>el</strong> índice ponderal de cada parámetro que varía de 1 a 5<br />

según la importancia r<strong>el</strong>ativa dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> medio.<br />

Las variantes de cálculo <strong>d<strong>el</strong></strong> ICA fueron las siguientes:<br />

I.- Con Pi = 1 para todos los parámetros. O sea, considerando igual importancia<br />

dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> medio acuático, a todos los parámetros estudiados (Tabla 33).<br />

II.- Considerando todos los parámetros (27 en agua, 14 en sedimentos y 41 en<br />

total) los correspondientes índices ponderales definidos (Tabla 34).<br />

III.- Con <strong>el</strong> objetivo de tratar de no duplicar la importancia de parámetros que<br />

afectan por igual un determinado aspecto de la calidad, se agruparon en bloques<br />

únicos de parámetros análogos. En esta variante consideramos para todos los<br />

bloques Pi = 1<br />

IV.- Cálculo de los nuevos bloques definidos en la variante III pero considerando<br />

los índices ponderales (Pi) definidos para cada bloque. La experiencia de estudios<br />

56


ealizados en otras zonas por otros especialistas ha demostrado esta variante<br />

<strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista global como la más óptima (Tabla 35).<br />

La Evaluación de la Calidad de las Aguas, en dependencia de la variante<br />

mencionada en la etapa de muestreo se muestra en la Tabla 36.<br />

Según los resultados analizados con sus dos alternativas se puede llegar a una<br />

clasificación más exacta de las afectaciones que se producen en <strong>el</strong> medio<br />

ambiente. De esta forma según la escala:<br />

0 - 20: Situación pésima.<br />

21 - 40: Situación deficiente.<br />

41 - 60: Situación aceptable o regular.<br />

61 - 80: Situación Buena.<br />

81 - 100: Situación exc<strong>el</strong>ente.<br />

Obtenemos que los Índices de Calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> Agua corresponden con una situación<br />

DEFICIENTE para las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> sector entre <strong>el</strong> puente de 23 y la desembocadura<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> y PÉSIMA en <strong>el</strong> caso de los sedimentos.<br />

Se consideran limitantes antropogénicos de la calidad global de las aguas y los<br />

sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> estudiado, los metales pesados en<br />

sedimentos en especial por las concentraciones de Pb, Cu y Zn, la alta<br />

contaminación de los mismos por hidrocarburos así como los niv<strong>el</strong>es básicos de<br />

materia orgánica en sedimentos en términos de carbón orgánico. También los<br />

contenidos obtenidos para los nutrientes (nitratos, amonio, nitritos, fosfatos y<br />

fósforo total), la DBO y DQO provocados por una contaminación orgánica debida a<br />

los residuales domésticos e industriales sin tratar o deficientemente tratados que<br />

ha conllevado a condiciones de prácticamente anoxia y la deficiente calidad<br />

sanitaria de las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

4.2 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Biótico<br />

La caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> medio biótico está referida fundamentalmente a las áreas<br />

que ocupa <strong>el</strong> Bosque de la Habana, por ser una de las pocas que se han salvado<br />

por completo de la acción antrópica. Las riberas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>desde</strong> la calle 23 hasta la<br />

57


desembocadura presentan un gran desarrollo urbanístico y solo en una pequeña<br />

porción se encuentran sectores de vegetación.<br />

A lo largo de la cuenca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> existen espacios verdes de importancia<br />

enmarcados fundamentalmente en grandes parques que además de servir como<br />

centros científicos y recreativos, tienen valor turístico y brindan protección a los<br />

recursos hídricos de la zona.<br />

Dentro de la cuenca existen dos áreas protegidas de significación local, una de<br />

<strong>el</strong>las es la Reserva Florística Manejada Escalera de Jaruco-Tapaste con<br />

12 900 ha, y la otra <strong>el</strong> Paisaje Natural Protegido Isla Josefina en <strong>el</strong> Parque<br />

<strong>Almendares</strong> con 10 ha. Estas áreas no solo tienen interés ecológico sino también<br />

ambiental y turístico.<br />

La zona en estudio estaba cubierta originalmente por bosques aluviales y<br />

semideciduos. Según Vilamajó y col. (1989), esta área se encuentra bajo un clima<br />

subhúmedo con una estación seca de uno a dos meses de duración, en casi toda<br />

su extensión, mientras que en la zona costera al norte, se presenta un clima<br />

medianamente seco, con tres o cuatro meses de sequía, todo lo cual justifica<br />

climáticamente la posible existencia de bosques.<br />

4.2.1 Biodiversidad de flora y fauna <strong>d<strong>el</strong></strong> Bosque de la Habana<br />

Vegetación:<br />

El Parque Metropolitano de la Habana fue sembrado por <strong>el</strong> hombre, en él<br />

predominan <strong>el</strong> algarrobo (Samanea saman) y la flor de pedo (Agdestis<br />

clematidea), esta última tapiza no sólo los árboles, sino también <strong>el</strong> su<strong>el</strong>o. El laur<strong>el</strong><br />

de la India (Ficus benjamina) crece generalmente sobre <strong>el</strong> algarrobo,<br />

estrangulándolo, por lo que si esta especie sigue extendiéndose, terminará por<br />

destruir <strong>el</strong> bosque de algarrobos.<br />

El estrato arbóreo alcanza una altura de 15-20 m y los algarrobos son viejos,<br />

aparentando tener una edad que oscila entre 60 y 80 años o más. Como los<br />

algarrobos poseen simbiontes nitrificantes y por tanto no tienen limitantes en <strong>el</strong><br />

58


suministro de nitrógeno, es posible que tengan algo menos de edad, aunque se<br />

asemejan bastante a los sembrados en la Carretera Central hace 70 años.<br />

El lugar tiene la apariencia de una s<strong>el</strong>va tropical y por <strong>el</strong>lo tiene valor paisajístico,<br />

aunque en realidad, por <strong>el</strong> tapiz de lianas, recuerda a un bosque semideciduo<br />

mesófilo alterado. Dada la edad de los árboles, la tala tiene que estar<br />

terminantemente prohibida.<br />

El bosque alto dominado por algarrobos, presenta yacimientos de fósiles de<br />

fanerógamas en travertino.<br />

Esta comunidad boscosa, presenta dos estratos arbóreos, uno dominante con<br />

abundancia de Samanea saman, Ficus benjamina, Pithec<strong>el</strong>lobium dulce y otros, y<br />

uno dominado en <strong>el</strong> que encontramos Trichilia glabra. Además un estrato<br />

arbustivo en <strong>el</strong> que abunda Piper auritum y uno herbáceo con predominio de<br />

Panicum maximum y Euphorbia heterophylla.<br />

Una de las características que más se destaca en esta comunidad vegetal es la<br />

presencia de un sinucio de lianas que forman cortinas casi continuas de Agdestis<br />

clematida, lo que le imprime un aspecto especial al lugar.<br />

Flora:<br />

Las especies que se hallan en la zona son mayormente alóctonas (introducidas),<br />

oriundas mayormente de Asia tropical oriental (sudeste asiático) y de la América<br />

tropical continental. El análisis histórico-natural e histórico-antropocéntrico de<br />

estas especies se sale <strong>d<strong>el</strong></strong> marco de este informe y por <strong>el</strong>lo no se hará, puesto que<br />

se trató de una sola expedición y de un inventario florístico pr<strong>el</strong>iminar.<br />

Las especies de angiospermas y pteridófitos que crecen en este lugar, cuyo grado<br />

de contaminación en una escala de 100, se aproxima a 70, pueden ser<br />

recomendados como capaces de resistir ambientes periódicamente inundados por<br />

aguas contaminadas.<br />

Hay 75 especies de angiospermas y pteridófitos en <strong>el</strong> área (señaladas con<br />

asterisco las que deben usarse en la reforestación <strong>d<strong>el</strong></strong> área). (Anexo 1).<br />

Cuando <strong>el</strong> bosque de galería que cubría la cuenca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> fue talado<br />

con diversos fines, se realizó una labor de rehabilitación en una época en que<br />

posiblemente dicho término aún no se conocía. Se sembraron algarrobos y otros<br />

59


árboles que contribuyeron a mantener la cuenca en bastante buenas condiciones.<br />

Se debe seguir este método, añadiendo arbustos autóctonos que tienen la ventaja<br />

sobre los exóticos de no necesitar más que mínimos cuidados. Se debe evitar la<br />

siembra de posturas de árboles que no resisten inundaciones periódicas y <strong>el</strong> uso<br />

de tierras enriquecidas y limpias, prefiriendo la tierra <strong>d<strong>el</strong></strong> lugar para realizar la<br />

siembra, tanto de estacas como de semillas. Deben sembrarse árboles<br />

autóctonos, recordando que <strong>el</strong> bosque de llano de Cuba es un bosque carente de<br />

especies alimenticias pero rico en especies maderables, artesanales, industriales,<br />

medicinales y m<strong>el</strong>íferas y que las especies alóctonas, en muchos casos, no han<br />

dado los resultados que se esperaban.<br />

Fauna:<br />

Se ofrece la r<strong>el</strong>ación de las especies de vertebrados reportadas para <strong>el</strong> Bosque de<br />

la Habana tanto las reportadas por otros autores como las que se observaron<br />

durante la realización <strong>d<strong>el</strong></strong> presente trabajo.<br />

Muchas de las especies resultan abundantes y son de fácil detección lo que le<br />

puede conferir a dicho lugar valores ecoturísticos e importancia como refugio de<br />

fauna dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> ambiente urbanizado de la Ciudad.<br />

Los anfibios y reptiles aparecen en <strong>el</strong> Anexo 2.<br />

Aves:<br />

Especies de aves detectadas en <strong>el</strong> Bosque de La Habana durante un<br />

levantamiento en la Semana <strong>d<strong>el</strong></strong> 20-27 de Febrero <strong>d<strong>el</strong></strong> 2003, entre las 9:00 y las<br />

12: 00 am. (Anexo 3).<br />

Se considera que <strong>el</strong> área no tiene valores ornitológicos importantes. La mayoría de<br />

las especies encontradas son citadinas y generalistas que se pueden encontrar<br />

comúnmente en muchos otros lugares de la ciudad. Solo son de destacar algunas<br />

bijiritas migratorias y una especie de pato poco común (Mergus serrator).<br />

Puede ser que durante la migración otoñal esta zona sea un sitio de paso<br />

importante para las aves migratorias por la posición geográfica que ocupa y por la<br />

capacidad que tiene para brindar refugio y alimentación por corto tiempo a estas<br />

especies.<br />

60


Vegetación Acuática:<br />

La vegetación acuática <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo estudiado está formada por las malanguetas y <strong>el</strong><br />

indeseable paraná que para los efectos de este proyecto son los responsable de<br />

atrapar sedimento hasta formar verdaderos cayos en <strong>el</strong> <strong>río</strong>, estos traen como<br />

consecuencia la disminución <strong>d<strong>el</strong></strong> cauce <strong>d<strong>el</strong></strong> mismo (ver Figura 3). El fondo hacia <strong>el</strong><br />

interior <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> es fundamentalmente fangoso con gran cubrimiento de materia<br />

orgánica en descomposición. Hacia la desembocadura es fundamentalmente<br />

rocoso y en tramos pequeños arenoso –fangoso y desprovisto de vegetaciones,<br />

aunque existe un gran cubrimiento de macroalgas como: Dictyota divaricata, D.<br />

linearis y Lobophora variegata y en ocasiones aparecen: Halimeda opuntia,<br />

Wrang<strong>el</strong>ia argus, Peissonn<strong>el</strong>ia sp. y Ceramium nitens. (Capetillo Piñar N. 2004).<br />

Ictiofauna:<br />

D<strong>el</strong> estudio hidroquímico se pudo constatar que la contaminación de las aguas es<br />

bastante alta, no obstante, se observaron algunas especies de peces,<br />

destacándose en <strong>el</strong> interior <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> tilapias, guajacones, etc., mientras que hacia la<br />

desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>el</strong> mar penetra y las aguas adquieren cualidades de aguas<br />

de mar propiciando que existan otras especies de este medio marino<br />

destacándose, aunque son pocos y pequeños, especies como: Acanthurus<br />

coeruleus, A. bahianus, Scarus taeniopterus (fase inicial y terminal), Sparisoma<br />

viride (ambas fases), Gramma loreto y Thalassoma bifasciatum en ocasiones<br />

aparecen: Sparisoma aurofrenatum, S. chrysopterum, S. rubripinne, Anisotremus<br />

virginicus, Epineph<strong>el</strong>us cruentatus, Chaetodon capistratus, Haemulon carbonarium<br />

y Microspathodon chrysurus.<br />

4.3 Caracterización <strong>d<strong>el</strong></strong> Medio Socioeconómico<br />

El <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> es considerado una de las más importantes corrientes fluviales<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> archipiélago cubano (Núñez & Viña, 1998:23). Este <strong>río</strong>, con 52,3 km de largo y<br />

una cuenca que ocupa 402 km² (66 urbanizados y 11 ocupados por embalses) fue<br />

testigo <strong>d<strong>el</strong></strong> primer y segundo emplazamiento de la Ciudad de la Habana, en cuyas<br />

márgenes se construyó <strong>el</strong> acueducto más antiguo <strong>d<strong>el</strong></strong> país. En su recorrido, <strong>el</strong> <strong>río</strong><br />

61


<strong>Almendares</strong> pasa por ocho municipios de Ciudad Habana (Arroyo Naranjo,<br />

Boyeros, Cerro, Diez de Octubre, Marianao, Playa, Plaza de la Revolución y<br />

Cotorro) y dos de la provincia La Habana (Bejucal y San José de las Lajas).<br />

La zona de interés para este estudio, ubicada en <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong><br />

<strong>desde</strong> la desembocadura hasta <strong>el</strong> puente de la calle 23, está incluida dentro de los<br />

objetivos de proyecto Parque Metropolitano de la Habana (PMH). En la actualidad<br />

PMH constituye uno de los proyectos urbanísticos que pretende desarrollar <strong>el</strong><br />

gobierno con vistas a propiciar <strong>el</strong> programa de saneamiento ambiental y la<br />

creación de un centro de esparcimiento y disfrute para los pobladores y visitantes<br />

de la capital.<br />

Según la incidencia <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto, los municipios que se verán afectados son <strong>el</strong><br />

Municipio Playa y Plaza de la Revolución. En los Anexos 4 y 5 se ofrece una<br />

caracterización demográfica de ambos municipios.<br />

4.4 Valoración general <strong>d<strong>el</strong></strong> estado <strong>d<strong>el</strong></strong> entorno<br />

A partir de los estudios de los factores <strong>d<strong>el</strong></strong> medio, se puede señalar que <strong>el</strong> entorno<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto constituye un área que presenta cierto grado de deterioro debido a la<br />

actividad antrópica que impide <strong>el</strong> buen desarrollo de la vida marina y terrestre.<br />

Para <strong>el</strong> entorno marino, las condiciones <strong>d<strong>el</strong></strong> medio existente <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong><br />

son malas. D<strong>el</strong> comportamiento de los principales indicadores de calidad<br />

estudiados, se pudo constatar que los principales problemas que afectan la<br />

calidad de las aguas superficiales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> están dados por los<br />

vertimientos históricos de aguas servidas sin tratar que <strong>el</strong> mismo ha recibido. Esto<br />

ha generado una fuerte contaminación orgánica y microbiológica con<br />

concentraciones muy bajas de oxígeno disu<strong>el</strong>to típicas de aguas hipóxicas, alta<br />

turbidez, altos contenidos para la DBO5 y DQO y de los compuestos nitrogenados.<br />

Se presenta una contaminación ligera por hidrocarburos y grasas y aceites en la<br />

zona de Chullima producto de las actividades náuticas y de achique de las<br />

embarcaciones. Las aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo estudiado <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> no presentaron<br />

afectación por metales pesados. Sólo fueron cuantificados aunque en muy bajas<br />

62


concentraciones <strong>el</strong> Fe y Mn <strong>el</strong> resto de los metales se encontraban por debajo de<br />

los límites de detección <strong>d<strong>el</strong></strong> método empleado. Según la Norma Cubana 27, 1999:<br />

Vertimiento de aguas residuales a las aguas terrestres y al alcantarillado.<br />

Especificaciones y la Norma Cubana 22: 1999: lugares de baño en costeas y en<br />

masas de aguas interiores. Requisitos higiénicos sanitarios, <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> se<br />

comporta como un Albañal Típico. Los altos niv<strong>el</strong>es de contaminación de origen<br />

fecal hacen necesario un estricto control de la calidad microbiológica <strong>d<strong>el</strong></strong> agua en<br />

la zona de estudio.<br />

Con respecto a los sedimentos se pudo apreciar una alta contaminación orgánica<br />

manifestada en los altos valores <strong>d<strong>el</strong></strong> carbón orgánico típicos de sedimentos<br />

contaminados y en activa descomposición. Por otro lado los niv<strong>el</strong>es detectados<br />

para los metales pesados, fundamentalmente Cu, Pb, Zn, Mn, Ba y Al, exceden<br />

los reportados internacionalmente para sedimentos de <strong>río</strong>s no contaminados y son<br />

producidos por una fuerte contaminación antropogénica debida a la recepción<br />

sostenida de efluentes domésticos e industriales.<br />

Con respecto a las concentraciones detectadas para los hidrocarburos totales <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

petróleo en los sedimentos <strong>d<strong>el</strong></strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> estudiado se pudo constatar que<br />

estas resultaron muy <strong>el</strong>evadas, típicas de una severa contaminación por los<br />

mismos.<br />

D<strong>el</strong> análisis de la evaluación de la calidad de las aguas podemos considerar que<br />

<strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista cualitativo estas se muestran seriamente afectadas y no<br />

cumplen con los índices de las Normas consultadas y <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista<br />

cuantitativo se evalúan de Deficientes con valores <strong>d<strong>el</strong></strong> ICA <strong>d<strong>el</strong></strong> 30.7 %.<br />

Los principales problemas ambientales atañen a los Consejos Populares Ceiba y<br />

Carm<strong>el</strong>o que están bajo las inmediaciones de las acciones <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto. Teniendo<br />

en cuenta la información obtenida a través de la recopilación de datos en distintos<br />

organismos e instituciones oficiales, por la entrevista con miembros de CDR,<br />

líderes comunitarios, formales e informales y por observación directa, se pueden<br />

resumir en:<br />

La basura está expuesta al aire ya que la mayor parte de los contenedores<br />

carecen de tapas y si las tienen estas permanecen abiertas. Debido al alto índice<br />

63


de insolación y humedad a que se ve expuesta la basura hace que esta fermente<br />

con facilidad, aumentando <strong>el</strong> riesgo de gestación de vectores, así como <strong>el</strong> escape<br />

de los exudados producidos en dicha fermentación.<br />

Los contenedores una vez vaciados no son sometidos a ningún proceso de<br />

limpieza, con <strong>el</strong> consiguiente depósito séptico, que unido a las altas temperaturas,<br />

contribuyen al rápido deterioro <strong>d<strong>el</strong></strong> recipiente, y a la consecuente pérdida de<br />

estanqueidad.<br />

Algunas personas vierten estos contenedores para extraer de <strong>el</strong>los la posible<br />

materia prima, latas de aluminio, bot<strong>el</strong>las de vidrio, plástico y otros tipos de<br />

materiales para su posterior uso ó venta. Si bien es cierto que normalmente<br />

vu<strong>el</strong>ven a recogerla toda la práctica frecuente de esta actividad genera situaciones<br />

de insalubridad en los alrededores <strong>d<strong>el</strong></strong> contenedor además <strong>d<strong>el</strong></strong> consiguiente riesgo<br />

de contagio y transmisión de enfermedades al hacer <strong>el</strong> traslado de dichas materias<br />

primas así obtenidas sin ningún tipo de control sobre <strong>el</strong>las.<br />

Las canalizaciones de aguas servidas (negras ó albañales) son insuficientes ó<br />

están en mal estado de conservación. En muchos casos circulan muy cerca de las<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> agua de abasto, pudiendo contaminar las conducciones y por consiguiente su<br />

contenido.<br />

Desde <strong>el</strong> punto de vista de la Salud Pública llama poderosamente la atención la<br />

r<strong>el</strong>ación existente descrita por los informes emitidos por <strong>el</strong> Ministerio de Ciencia<br />

Tecnología y Medio Ambiente (CITMA) a partir de reportes de la Dirección<br />

Municipal de Salud, entre las fuentes biológicas contaminantes potenciales y las<br />

enfermedades infecciosas más comunes en los municipios Plaza y Playa, lo que<br />

unido al mal estado o ausencia de canalizaciones de las aguas residuales y a su<br />

falta de tratamiento, así como a la cercanía de estas, cuando existen, a la red <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

agua potable, hacen sospechar una contaminación que no estaría de más fuese<br />

investigada a fondo por las instituciones u organismos con competencia.<br />

Hay una alta polución aérea por los escapes de la fábrica de gas.<br />

Disminución de la flora y la fauna de la zona en r<strong>el</strong>ación a años pasados,<br />

información obtenida directamente de los pobladores más antiguos en referencia a<br />

sus años de juventud.<br />

64


La presencia de diversas especies de animales su<strong>el</strong>tos, así como criaderos<br />

incontrolados de los mismos, puede contribuir a aumentar <strong>el</strong> riesgo de infecciones<br />

y sus transmisiones.<br />

Casas en deficiente estado de conservación, ó sencillamente en muy mal<br />

estado, cual es <strong>el</strong> caso de las viviendas de madera <strong>d<strong>el</strong></strong> fanguito.<br />

Según datos recogidos de Consultorios Médicos, existen:<br />

1. Malas condiciones familiares.<br />

2. Malas condiciones de las viviendas.<br />

3. Mala higiene ambiental.<br />

4. Hacinamiento.<br />

5. Microvertederos que favorecen la presencia de roedores.<br />

6. Criaderos de puercos, aves, carneros, chivos y otros.<br />

7. Fosas desbordadas.<br />

8. Malas condiciones higiénicas sanitarias generadas por <strong>el</strong> <strong>río</strong> y los habitantes de<br />

la comunidad.<br />

El <strong>río</strong> es, además, un foco generador de mosquitos, cangrejos culebras,<br />

mangostas, algunas personas refieren la presencia de cocodrilos.<br />

Puesto que <strong>el</strong> <strong>río</strong> está contaminado, también están contaminados <strong>el</strong> su<strong>el</strong>o y <strong>el</strong><br />

aire. Los escapes de vapores de petróleo y gasolina de los autos que pasan por la<br />

carretera que atraviesa <strong>el</strong> lugar, contribuyen a hacer desagradable <strong>el</strong> lugar.<br />

Todos los factores evaluados en los diferentes ambientes actúan en sinergia, y<br />

obviamente, están estrechamente interr<strong>el</strong>acionados, de manera tal que la<br />

depauperación de unos incide en la pérdida de calidad de otros y viceversa: la<br />

recuperación de las características naturales de unos, propicia <strong>el</strong> mejoramiento de<br />

las de otros, con la consecuente mejoría de la calidad de las condiciones<br />

<strong>geoambiental</strong>es <strong>d<strong>el</strong></strong> área. Al dragarse <strong>el</strong> tramo de <strong>río</strong> contemplado en <strong>el</strong> proyecto,<br />

y ser evacuados la mayor parte de sus sedimentos en franco estado de deterioro,<br />

no solo se sanea <strong>el</strong> <strong>río</strong>, sino que se devu<strong>el</strong>ve al mismo sus potencialidades o<br />

capacidades naturales fluviales, mejorando su hidrodinámica y en consecuencia,<br />

sus características hidrológicas y la calidad de sus sedimentos. Esto propicia <strong>el</strong><br />

establecimiento de vida en sus fondos, orillas y aguas, y en consecuencia, <strong>el</strong><br />

65


mejoramiento paulatino de la calidad ambiental de su entorno. Esto es posible, de<br />

forma sostenida, si se <strong>el</strong>iminan además, las afectaciones antrópicas r<strong>el</strong>acionadas<br />

con <strong>el</strong> vertimiento de sustancias contaminantes sólidas y liquidas, sin tratar, al<br />

área <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

4.5 Probables afectaciones <strong>geoambiental</strong>es en la zona producidas por<br />

las acciones de <strong>dragado</strong><br />

El <strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de la calle 23 hasta la desembocadura<br />

ocasionaría afectaciones o impactos en la atmósfera propiciando <strong>el</strong> incremento de<br />

los niv<strong>el</strong>es de ruido con respecto a los habituales. Este es causado, en primer<br />

lugar, por <strong>el</strong> trasiego de las embarcaciones ejecutoras <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> y permite la<br />

migración de algunas especies (aves) hacia otros sitios de la ciudad sin afectar<br />

severamente a las comunidades existentes en la región.<br />

Todos los equipos utilizados en ese tipo de obra generan importantes cantidades<br />

de ruido, gases y olores, contaminando la atmósfera y empeorando por<br />

consiguiente la calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> aire, aunque es bueno destacar que al concluir los<br />

trabajos desaparecen con bastante c<strong>el</strong>eridad los efectos ocasionados por esta<br />

acción.<br />

Se pueden observar afectaciones en la flora y la fauna estimándose que la<br />

afectación ecológica temporal que produciría la realización de los trabajos es<br />

mínima en r<strong>el</strong>ación con los beneficios esperados. Se ha planteado que cualquier<br />

<strong>dragado</strong> en la zona estudiada no crea alteraciones en la fauna bentónica ya que<br />

ésta prácticamente no existe debido a la contaminación de sus aguas y<br />

sedimentos, la poca que hay en poco tiempo sería restablecida, por tanto, <strong>el</strong><br />

efecto es irr<strong>el</strong>evante. (Capetillo, 2005).<br />

Para las comunidades terrestres y según nuestro análisis, la zona de afectación<br />

directa <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> es reducida, sólo serían las malanguetas y los cayos de<br />

paraná los afectados; aunque es posible que se perturben las comunidades<br />

acuáticas y terrestres, <strong>el</strong> área de afectación indirecta es prácticamente nula y solo<br />

se afecta a la vegetación secundaria. (Por afectación directa entendemos la<br />

66


ecogida de malangueta y paraná. Las afectaciones indirectas se refieren al polvo,<br />

desechos y otros efectos secundarios producidos por la presencia <strong>d<strong>el</strong></strong> hombre y<br />

sus maquinarias en las zonas aledañas al proyecto).<br />

En las formaciones vegetales más afectadas, o sea, las malanguetas y <strong>el</strong> paraná,<br />

se registran algunas especies de aves acuáticas (todas residentes), ninguna de<br />

<strong>el</strong>las endémica, de valor económico o amenazado de extinción.<br />

Para <strong>el</strong> Bosque de la Habana la afectación sería muy leve, ya que <strong>el</strong> mismo se<br />

encuentra algo alejado <strong>d<strong>el</strong></strong> radio de acción de las operaciones de <strong>dragado</strong>. El<br />

paisaje podría ser impactado de forma negativa debido a las labores de desbroce<br />

de vegetación y <strong>dragado</strong>. La afectación al paisaje submarino será irr<strong>el</strong>evante<br />

debido a la ausencia en las zonas de valores paisajísticos potenciales para la<br />

contemplación de los mismos.<br />

En <strong>el</strong> <strong>río</strong> probablemente se observaría un incremento temporal considerable de la<br />

turbidez, fetidez, la sedimentación en la zona <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y <strong>el</strong> transporte de sedimento<br />

en suspensión hacia áreas aledañas causado por la extracción <strong>d<strong>el</strong></strong> material.<br />

Con <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> de este tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, <strong>el</strong> régimen de corriente (caudal) que se<br />

establecería se caracterizaría por corrientes con v<strong>el</strong>ocidades mayores, lo que<br />

permitiría una mejor renovación de las aguas y por consiguiente una mejoría en la<br />

calidad de las mismas.<br />

Este impacto se considera positivo y de importancia moderada.<br />

Debido al paso periódico de las embarcaciones por <strong>el</strong> <strong>río</strong> a largo plazo puede<br />

manifestarse un impacto producto de la acumulación progresiva de hidrocarburos<br />

y aceites por achique de las sentinas de las embarcaciones. Este impacto será<br />

irr<strong>el</strong>evante si se prevé un sistema de inspección para garantizar las normas y<br />

reglamentos r<strong>el</strong>acionados con los vertidos de las embarcaciones.<br />

Uno de los impactos sobre <strong>el</strong> medio más importante podría ser <strong>el</strong> causado por <strong>el</strong><br />

vertimiento <strong>d<strong>el</strong></strong> material <strong>dragado</strong> en aguas profundas. Pero atendiendo a la<br />

dirección de las corrientes marinas predominantes en <strong>el</strong> punto de vertimiento en<br />

verano fundamentalmente, se puede asegurar que las aguas contaminadas al ser<br />

vertidas mar afuera deben diluirse hacia aguas aún más profundas, sin retomo o<br />

acercamiento a la zona costera. Por lo anterior, <strong>el</strong> invierno es la época menos<br />

67


ecomendable para realizar algún vertimiento en la zona ya que puede existir<br />

cierto riesgo de que <strong>el</strong> material vertido alcance la costa en un determinado punto,<br />

producto a la turbulencia que genera <strong>el</strong> oleaje en los frentes f<strong>río</strong>s. Sin embargo, en<br />

la época de verano, las condiciones hidrometeorológicas más representativas<br />

están muy determinadas por las características marinas <strong>d<strong>el</strong></strong> lugar. Ello significa<br />

<strong>el</strong>evada estabilidad <strong>d<strong>el</strong></strong> régimen térmico y de los vientos alisios, baja frecuencia de<br />

marejadas y olas de tormenta, excepto si la zona se llega a ver afectada por un<br />

ciclón tropical durante <strong>el</strong> periodo de ejecución de los trabajos.<br />

A partir de este análisis <strong>d<strong>el</strong></strong> patrón de circulación de las corrientes en aguas<br />

profundas y teniendo en cuenta la distancia de vertimiento, alejado de la costa a<br />

5.5 millas, es posible determinar que excepto bajo condiciones sinópticas con<br />

bajas probabilidades en época de invierno, por lo general durante todo <strong>el</strong> año se<br />

pueden realizar vertimientos sin riesgo alguno de que los sedimentos vertidos la<br />

costa puedan ser arrastrados hasta la zona costera. Este impacto puede mitigarse<br />

si <strong>el</strong> vertimiento se realiza en condiciones de calma o como máximo mar fuerza<br />

unos o dos, evitando de esta forma la turbulencia en la zona y a su vez la demora<br />

en la precipitación de los sedimentos expuestos.<br />

No obstante, se debe realizar <strong>el</strong> vertimiento cumpliendo con las exigencias de los<br />

convenios internacionales recogidos dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> MARPOL; <strong>el</strong> punto de vertimiento<br />

se encontrará a 1 m por debajo <strong>d<strong>el</strong></strong> niv<strong>el</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> mar, y se descargarán<br />

aproximadamente 100 m 3 cada 4.8 millas náuticas (8.9 km) de longitud de<br />

dispersión, lo que añadido a las profundidades existentes en <strong>el</strong> área, y la traza de<br />

navegación propuesta anteriormente, debe lograr una dilución espaciada de la<br />

carga contaminante a concentraciones razonables o permisibles para <strong>el</strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

Caribe. Además bajo las características <strong>d<strong>el</strong></strong> vertimiento, y la influencia favorable de<br />

las corrientes marinas en <strong>el</strong> área estos llegan al fondo marino en muy bajas<br />

concentraciones. Si no se cumplen rigurosamente los procedimientos para <strong>el</strong><br />

vertimiento, puede ocurrir contaminación <strong>d<strong>el</strong></strong> mar en aguas internacionales por un<br />

volumen r<strong>el</strong>ativamente alto de desechos biodegradables.<br />

Además, <strong>el</strong> área donde se realiza la descarga controlada <strong>d<strong>el</strong></strong> material de <strong>dragado</strong><br />

se caracteriza por ser de baja densidad poblacional con respecto a las regiones<br />

68


más oceánicas pero de alta diversidad de especies. Está fuera de la plataforma<br />

insular, es decir, más allá <strong>d<strong>el</strong></strong> talud insular. No obstante, hay que tener en cuenta<br />

que <strong>el</strong> análisis microbiológico sugiere la existencia de un albañal típico, por lo<br />

tanto es recomendable <strong>el</strong> aislamiento de los microorganismos presentes. Este<br />

resultado es de gran importancia si tenemos en cuenta que puede ocurrir un<br />

impacto negativo en <strong>el</strong> medio ambiente marino y en las zonas costeras cercanas.<br />

4.6 Evaluación socioeconómica <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto<br />

De forma, directa e indirectamente toda la población de Ciudad de la Habana se<br />

beneficiaría con los objetivos para mejorar todo <strong>el</strong> cauce de la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

<strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>; este hecho marca <strong>el</strong> comienzo <strong>d<strong>el</strong></strong> desarrollo de las actividades<br />

náuticas <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque con <strong>el</strong> consiguiente mejoramiento de su red vial de acceso y<br />

la posible proyección de puntos náuticos en esta área lo que generaría fuentes de<br />

empleos para los pobladores <strong>d<strong>el</strong></strong> área <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano. Además, la<br />

puesta en marcha de este tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> permite <strong>el</strong> desarrollo <strong>d<strong>el</strong></strong> asentamiento<br />

naval con las posibilidades de atraques con mayores calados para reparaciones y<br />

fabricación de embarcaciones plásticas en los mu<strong>el</strong>les de la empresa Chullima, las<br />

embarcaciones particulares que tienen su base en <strong>el</strong> <strong>río</strong> podrían incrementarse en<br />

número y tamaño, por tanto, se establecería una norma para <strong>el</strong> mantenimiento y<br />

fachada de cada uno de los atracaderos y mu<strong>el</strong>les en las márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, lo cual<br />

mejoraría <strong>el</strong> paisaje visual y estético <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

Todos estos impactos positivos sobre la actividad turística pueden resumirse en<br />

los siguientes:<br />

Generación de mayor variedad de actividades náuticas en la zona<br />

Mejores condiciones para la navegación<br />

Vinculación por vía marítima <strong>d<strong>el</strong></strong> polo turístico de Ciudad de la Habana con<br />

otros polos de la región.<br />

Asociado a los anteriores ocurre un impacto secundario de gran importancia<br />

económica que es:<br />

69


Obtención de mayores ingresos por concepto de la realización de<br />

actividades náuticas.<br />

Todos estos impactos de naturaleza positiva se manifestarían a medio plazo.<br />

Existirá un incremento progresivo de ingresos en tanto se gane en experiencia y<br />

en niv<strong>el</strong>es de gestión comercial por tanto estos impactos son acumulativos.<br />

Aunque según la metodología de Conesa (1994), varios de los impactos positivos<br />

sobre <strong>el</strong> medio socioeconómico se evalúan como de importancia moderada,<br />

consideramos que la ejecución <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>dragado</strong> en este tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> significa un<br />

impacto positivo de una importancia r<strong>el</strong>evante sobre este factor, teniendo en<br />

cuenta los beneficios que reporta, de forma directa o indirecta, tanto para los<br />

pobladores de la zona como para la actividad turística en general.<br />

Con <strong>el</strong> objetivo de conocer la opinión sobre <strong>el</strong> Proyecto “Dragado Desembocadura<br />

Río <strong>Almendares</strong>” se realizó una encuesta pública (Anexo 6) a 52 sujetos<br />

r<strong>el</strong>acionados directa o indirectamente con las actuaciones en la región. Se trató<br />

con este sondeo de opinión, diseñado sobre la base de un mo<strong>d<strong>el</strong></strong>o<br />

semiestructurado, lograr resultados confiables que permitan formar una idea<br />

aproximada <strong>d<strong>el</strong></strong> estado de percepción <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto entre la comunidad.<br />

Los sectores escogidos para la encuesta (Anexo 7) fueron:<br />

Vecinos de los núcleos poblacionales aledaños al <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>.<br />

Trabajadores centros de trabajos asentados en las riberas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>.<br />

Directivos y trabajadores <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano.<br />

Miembros de los Órganos <strong>d<strong>el</strong></strong> Poder Popular en la zona.<br />

Principales opiniones emitidas por los encuestados:<br />

A la población, sobre todo aqu<strong>el</strong>la que se asienta próxima al <strong>río</strong>, se le debe<br />

explicar las particularidades de las mismas con vistas a mantenerla informadas y<br />

evitar comentarios sin fundamentos.<br />

Debe ser estudiado a fondo <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> en las zonas próximas al Fanguito y<br />

otras con edificaciones, ya que hay experiencias en <strong>dragado</strong>s anteriores que<br />

ocurrieron asentamientos y deslizamientos indeseables en algunos sitios.<br />

El <strong>dragado</strong> debería continuar aguas arribas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, donde los problemas de<br />

sedimentación y estrechamiento de la corriente son graves.<br />

70


La navegabilidad <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> hasta <strong>el</strong> puente de 23 es muy bien acogida por todos.<br />

Hay que tener bien claro donde se va a depositar <strong>el</strong> material que se draga, pues<br />

ese fango está muy contaminado.<br />

Cuando se ejecuta la obra es necesario tomar las medidas necesarias para no<br />

molestar a las personas que viven cerca <strong>d<strong>el</strong></strong> lugar.<br />

4.7 Código de conducta ambiental para la ejecución de los trabajos en<br />

la zona <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong><br />

Teniendo en cuenta que <strong>el</strong> Ministerio de Ciencia, Tecnología y Medio Ambiente<br />

promulgó la Resolución No 168/95, donde se establece que las Evaluaciones de<br />

Impacto Ambiental constituyen un instrumento esencial y una técnica<br />

generalizada para la protección <strong>d<strong>el</strong></strong> medio ambiente y uso racional de los recursos<br />

naturales, que representan un medio para alcanzar <strong>el</strong> desarrollo sostenible; la Ley<br />

establece que <strong>el</strong> titular de toda obra o proyecto debe presentar una solicitud de<br />

Licencia Ambiental al CICA, la cual será otorgada por este y se establecerán todas<br />

las previsiones y medidas necesarias para impedir o mitigar los impactos<br />

negativos al medio.<br />

Teniendo en cuenta la sensibilidad ambiental y <strong>el</strong> incremento de la presencia<br />

humana en la zona se propone <strong>el</strong> presente CODIGO DE CONDUCTA<br />

AMBIENTAL, para la ejecución de los trabajos en la misma.<br />

4.7.1 Normas generales<br />

Cumplir con todas las normas, planes y exigencias establecidas por <strong>el</strong> CICA<br />

con <strong>el</strong> otorgamiento de la Licencia Ambiental para <strong>el</strong> trabajo en la zona.<br />

No arrojar al medio ninguna sustancia contaminante ni desechos sólidos.<br />

Mantener disciplina y responsabilidad en cada una de las actividades a<br />

desarrollar.<br />

Hacer prevalecer en cada una de las actuaciones los principios de<br />

conservación <strong>d<strong>el</strong></strong> medio ambiente.<br />

71


Proporcionar la información adecuada a las entidades encargadas de la toma<br />

de decisiones con la calidad requerida.<br />

Establecer y ejecutar una estricta política de organización al realizar las<br />

distintas actividades en la zona de estudio para evitar accidentes.<br />

No practicar la caza de aves ni perturbar innecesariamente las anidaciones de<br />

las mismas.<br />

No realizar la poda o desbroce de vegetación exceptuando lo establecido en <strong>el</strong><br />

proyecto.<br />

No hacer ruidos innecesarios que alteren o moleste a los pobladores de la<br />

zona<br />

No realizar caza de especies de la fauna tanto marina como terrestre reguladas<br />

(p<strong>el</strong>igro de extinción, pesca comercial, endémicos locales) con fines alimenticios o<br />

de lucro.<br />

No realizar extracciones de especies de la flora y fauna marina.<br />

72


CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES


Conclusiones<br />

CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES<br />

Se lograron cumplir los objetivos propuestos ante <strong>el</strong> desarrollo <strong>d<strong>el</strong></strong> presente trabajo<br />

ya que fue actualizada la información disponible concerniente al tema objeto de<br />

estudio:<br />

1. Se caracterizó <strong>el</strong> tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de la calle 23 hasta<br />

su desembocadura por su geología, batimetría, clima, parámetros hidrológicos e<br />

hidroquímicos.<br />

Aguas:<br />

Tienen una fuerte contaminación orgánica y microbiológica con<br />

concentraciones muy bajas de oxígeno disu<strong>el</strong>to típicas de aguas hipóxicas, alta<br />

turbidez, altos contenidos para la DBO5 y DQO y de los compuestos nitrogenados.<br />

En la zona de Chullima presentan una contaminación ligera por hidrocarburos,<br />

grasas y aceites debido a las actividades náuticas y de achique de las<br />

embarcaciones.<br />

Muestran afectación ligera por metales pesados. Sólo fueron cuantificados Fe y<br />

Mn en muy bajas concentraciones; <strong>el</strong> resto de los metales se encontraban por<br />

debajo de los límites de detección <strong>d<strong>el</strong></strong> método empleado.<br />

Según la Norma Cubana 27, 1999, <strong>el</strong> <strong>río</strong> ¨<strong>Almendares</strong>¨ se comporta como un<br />

Albañal Típico por sus altos niv<strong>el</strong>es de contaminación de origen fecal.<br />

Sedimentos:<br />

Presentan una alta contaminación orgánica con valores <strong>el</strong>evados de carbón<br />

orgánico típicos de sedimentos contaminados y en activa descomposición.


Los niv<strong>el</strong>es detectados para los metales pesados exceptuando la estación 1,<br />

exceden los reportes internacionales para sedimentos de <strong>río</strong>s no contaminados y<br />

son de origen antropogénico por la recepción sostenida de efluentes domésticos e<br />

industriales.<br />

2. D<strong>el</strong> análisis de la evaluación de la calidad de las aguas y sedimentos, podemos<br />

considerar que <strong>desde</strong> <strong>el</strong> punto de vista cualitativo estos se muestran seriamente<br />

afectados y no cumplen con los índices de las Normas consultadas; por tanto,<br />

para <strong>el</strong> sector <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> entre <strong>el</strong> Puente de 23 y la desembocadura, la calidad de las<br />

aguas se evalúa como Deficiente y para los sedimentos como Pésima.<br />

3. Las afectaciones en la flora y la fauna que puede producir un <strong>dragado</strong> en <strong>el</strong><br />

sector son mínimas y temporales, la fauna bentónica prácticamente no existe<br />

debido a la contaminación de sus aguas y sedimentos y la flora está constituida<br />

por malangueta y paraná que debe ser <strong>el</strong>iminada. Para <strong>el</strong> Bosque de la Habana la<br />

afectación será muy poca, de existir alguna, ya que <strong>el</strong> mismo se encuentra<br />

r<strong>el</strong>ativamente alejado <strong>d<strong>el</strong></strong> radio de acción <strong>d<strong>el</strong></strong> proyecto.<br />

4. El mejoramiento <strong>d<strong>el</strong></strong> cauce de la desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> producirá<br />

beneficios para toda la población de Ciudad de la Habana este hecho permitirá un<br />

mejor desarrollo de las actividades náuticas <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque con la consiguiente<br />

mejoría de su red vial de acceso y la posible proyección de puntos náuticos en<br />

esta área que generarán fuentes de empleo para los pobladores <strong>d<strong>el</strong></strong> área.<br />

5. Considerando los enunciados anteriores, se puede aceptar como cierta la<br />

hipótesis formulada para <strong>el</strong> desarrollo de esta tesis de maestría.<br />

Recomendaciones<br />

1. Cualquier proyecto de <strong>dragado</strong> debe ser estricto en su ejecución en cuanto al<br />

vertimiento cumpliendo con las exigencias de los convenios internacionales<br />

recogidos dentro de MARPOL.<br />

2. Antes de la ejecución de trabajos de <strong>dragado</strong> en general, se debe aprobar un<br />

Plan de Contingencia ante alarmas ambientales, un Código de Conducta<br />

Ambiental y un Plan de Monitoreo.<br />

75


3. El área <strong>d<strong>el</strong></strong> Bosque de La Habana, parque sembrado por <strong>el</strong> hombre, presenta<br />

una apariencia de s<strong>el</strong>va tropical y por <strong>el</strong>lo tiene valor paisajístico. Dada la edad de<br />

los árboles, la tala tiene que estar terminantemente prohibida.<br />

4. Los organismos tienen que reciclar sus residuos obligatoriamente, de lo<br />

contrario se deben imponer fuertes multas o cerrar las instalaciones, que sería lo<br />

mejor, puesto que los <strong>río</strong>s contaminados como <strong>el</strong> <strong>Almendares</strong> constituyen una<br />

amenaza latente y constante para la salud de las comunidades humanas que<br />

viven no sólo en sus alrededores sino también en lugares r<strong>el</strong>ativamente alejados.<br />

Una vez que cese la contaminación, las aguas volverán a ser cristalinas y puras y<br />

cesarán de existir los focos de contagio. Las orillas reforestadas impedirán la<br />

erosión y <strong>el</strong> <strong>río</strong> podrá lucir en todo su esplendor una b<strong>el</strong>leza incontaminada que irá<br />

de acuerdo con <strong>el</strong> entorno y las construcciones que le rodean.<br />

76


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Anexo 1. Flora. Lista de especies. (Cortesía de GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos)<br />

*Cordia dentata *Comm<strong>el</strong>ina diffusa<br />

Samanea saman (introducida) *Comm<strong>el</strong>ina erecta<br />

Agdestis clematidea (introducida) Cyperus alternifolius (introducida)<br />

Euphorbia heterophylla Ipomoea sp.<br />

Syngonium podophyllum (introducida) Mimosa p<strong>el</strong>lita<br />

Sterculia apetala (introducida) Panicum maximum (introducida)<br />

*Trichostigma octandrum Sida rhombifolia<br />

Achyranthes aspera (introducida) *Ipomoea alba<br />

Argemone mexicana (introducida) Solanum americanum<br />

*Rivina humilis Lablab purpureus (introducida)<br />

Petiveria alliacea Spathodea campanulata (introducida)<br />

*Alternanthera sp. *Roystonea regia<br />

*Cissus verticillata *Ehretia tinifolia<br />

*Trichilia havanensis Chamaesyce prostrata<br />

*Guazuma ulmifolia Dieffenbachia seguina (introducida)<br />

*Cecropia schreberiana *Amaranthus dubius<br />

Thevetia peruviana (introducida) Cleome spinosa<br />

Piper auritum (introducida) Portulaca oleracea (introducida)<br />

Lycopersicum esculentum (introducida) Lepidium virginicum (introducida)<br />

Cucurbita moschata (introducida) M<strong>el</strong>icoccus beijugatus (introducida)<br />

Parthenium hysterophorum (introducida) *Hibiscus <strong>el</strong>atus


Bidens alba L. var. radiata (introducida) Enterolobium cyclocarpum (introducida)<br />

Hyptis verticillata (introducida) *Cupania macrophylla<br />

Eleusine indica (introducida) *Calophyllum calaba<br />

*M<strong>el</strong>anthera aspera Pteris longifolia<br />

*Nephrolepis cordifolia *Ficus crassinervia<br />

Pisonia aculeata *Cedr<strong>el</strong>a odorata<br />

*Cordia gerascanthus Rhaphidophora aurea (introducida)<br />

Plumbago scandens Ricinus communis (introducida)<br />

Sida acuta Julocroton argenteus (introducida)<br />

Citrus sp. *Swietenia mahagoni<br />

*Trichilia hirta Pithec<strong>el</strong>lobium dulce (introducida)<br />

*Bursera simaruba *Pilea microphylla<br />

Chamaesyce hypericifolia *Nama jamaicense<br />

Erigeron sp. Terminalia catappa (introducida)<br />

*M<strong>el</strong>ampodium sp. D<strong>el</strong>onix regia (introducida)<br />

*Polygonum sp. Ficus benjamina (introducida)<br />

Macroth<strong>el</strong>ypteris torresiana (introducida)


Anexo 2. Anfibios y reptiles. (Cortesía de GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Familia Nombre científico de la especie Nombre común<br />

Bufonidae P<strong>el</strong>taprhyne empusus * Sapo<br />

P<strong>el</strong>taprhyne gundlachi * Sapo<br />

P<strong>el</strong>taprhyne fustiger<br />

Hylidae Ostiopilus septentrionalis Rana platanera<br />

Leptodactylidae Eleutherodactylus auriculatus *<br />

Eleutherodactylus cuneatus *<br />

Eleutherodactylus planirostris *<br />

Ranidae Rana catesbiana<br />

Eleutherodactylus varleyi *<br />

Boidae Epicrates angulifer<br />

Ch<strong>el</strong>onidae Traquemys decussata Ch<strong>el</strong>onidae<br />

Colubridae Alsophis cantherigerus<br />

Antillophis andreaii<br />

Arrhyton vittatum<br />

Tetranorhinus variabilis<br />

Gekkonidae Gonatodes albogularis<br />

Hemidactylus brooki<br />

Sphaerodactylus sp<br />

Sphaerodactylus <strong>el</strong>egans<br />

Iguanidae Anolis alutaceus


Anolis angusticeps<br />

Anolis equestris<br />

Anolis homolechis<br />

Anolis luteogularis<br />

Anolis ophiolepis<br />

Anolis porcatus<br />

Anolis pumilus<br />

Anolis sagrei<br />

Anolis spectrum<br />

Trp Tropidophis maculatus<br />

Tropidophis m<strong>el</strong>anurus<br />

Tropidophis pardalis<br />

Typ Thyphlops lumbricalis


Anexo 3. Aves (Cortesía de GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos)<br />

Nombre Común Nombre Científico<br />

Garza ganadera Bubulcus ibis<br />

Garza de Rizos Egretta thula<br />

Garzón Ardea Alba<br />

Garza azul Egretta caerulea<br />

Aguaitacaimán Butorides virescens<br />

Pato Serrucho Mergus serrator<br />

Pato Inglés Anas platy rhynchos<br />

Aura Tiñosa Cathartes aura<br />

Cernícalo Falco sparverius<br />

Tojosa Columbina passerina<br />

Tórtola de Collar Streptop<strong>el</strong>ia decaocto<br />

Judío Crotophaga ani<br />

Zunzún Chlorostilbun ricordii<br />

Carpintero de paso Sphyrapicus varius<br />

Zorzal Real Turdus plumebeus<br />

Sinsonte Mimus poliglotos<br />

Bijirita común Dendroica palmarum<br />

Can<strong>d<strong>el</strong></strong>ita Setophaga ruticilla<br />

Bijirita Atigrada Dendroica tigrina


Bijirita Coronada Dendroica coronata<br />

Mariposa Galana Dendroica discolor<br />

Señorita de Río Seiurus motacilla<br />

Tomeguín de la Tierra Tiaris olivacea<br />

Totí Dives atroviolacea<br />

Chichinguaco Quiscalus niger<br />

Mayito Ag<strong>el</strong>aius humeralis<br />

Gorrión doméstico Passer domesticus<br />

Garzon, great egret Casmerodius albus<br />

Garza blanca, snowy egret Egretta thula<br />

Garcita bueyera, cattle egret Bubulcus ibis<br />

Guanaba de la florida, black-crowned<br />

night-heron<br />

Nycticorax nycticorax<br />

Auratinosa, turkey vulture Cathartes aura<br />

Cernicalo, american kestr<strong>el</strong> Falco sparverius<br />

Gallareta de pico colorado, common<br />

moorhen<br />

Gallinula chloropus<br />

Paloma rabiche, mourning dove Zenaida macroura<br />

Camao, gray-headed quail dove Geotrygon caniceps<br />

Judio, smooth-billed ani Crotophaga ani<br />

Zunzun, cuban emerald Chlorostilbon ricordii<br />

Pedorrera, cuban tody Todus multicolor


Carpintero de paso, y<strong>el</strong>low-b<strong>el</strong>lied<br />

sapsucker<br />

Sphyrapicus varius<br />

Pitirre abejero, gray kingbird Tyrannus dominicensis<br />

Bobito amarillo, y<strong>el</strong>low b<strong>el</strong>lied flycatcher Empidonax flaviventris<br />

Tordo colorado, veery Catharus fuscescens<br />

Tordo pecoso, wood thrush Hylocichla must<strong>el</strong>ina<br />

Zorzal real, red legged thrush Turdus plumbeus<br />

Zorzal gato, gray catbird Dumet<strong>el</strong>la carolinensis<br />

Sinsonte, northern mockingbird Mimus polyglottos<br />

Vireo de ojo blanco, white-eyed vireo Vireo griseus<br />

Vireo de ojo rojo, red-eyed vireo Vireo olivaceus<br />

Bien te veo, black whiskered vireo Vireo altiloquus<br />

Bijirita de alas azules, blue-winged warbler Vermivora pinus<br />

Bijirita chica, northern parula Parula americana<br />

Bijirita de costados castanos, chestnut-<br />

sided warbler<br />

Dendroica pensylvanica


Anexo 3 (Continuación)<br />

Bijirita magnolia, magnolia warbler Dendroica magnolia<br />

Bijirita azul de garganta negra, black-<br />

throated blue warbler<br />

Dendroica caerulescens<br />

Bijirita, praire warbler Dendroica discolor<br />

Bijirita castana, bay-breasted warbler Dendroica castanea<br />

Bijirita trepadora, black and white warbler Mniotilta varia<br />

Can<strong>d<strong>el</strong></strong>ita, american redstart Setophaga ruticilla<br />

Bijirita gusanera, worm-eating warbler H<strong>el</strong>mitherus vermivorus<br />

Bijirita de swainson, swainson's warbler Limnothlypis swainsonii<br />

Senorita de monte, ovenbird Seiurus aurocapillus<br />

Bijirita de kentucky, kentucky warbler Oporornis formosus<br />

Caretica, common y<strong>el</strong>lowthroat Geothlypis trichas<br />

Monjita, hooded warbler Wilsonia citrina<br />

Bijirita de wilson, wilson's warbler Wilsonia pusilla<br />

Bijirita <strong>d<strong>el</strong></strong> canada, canada warbler Wilsonia canadensis<br />

Degollado, rose-breasted grosbeak Pheuticus ludovicianus<br />

Gorrion de lincoln, lincoln's sparrow M<strong>el</strong>ospiza lincolnii<br />

Mayito, tawny-shouldered blackbird Ag<strong>el</strong>aius humeralis<br />

Gorrion, house sparrow Passer domesticus


Anexo 4. Características demográficas <strong>d<strong>el</strong></strong> Municipio Playa. Número de habitantes<br />

por Consejos Populares. (CICA, 2003).<br />

CONSEJO POPULAR TOTAL DE POBLACIÓN EXTENSIÓN Km².<br />

SANTA FE 21 177 5.80<br />

SIBONEY 16 235 9.10<br />

CUBANACAN 13 762 6.80<br />

AMPLIACION DEL ALMENDARES 24 933 4.00<br />

MIRAMAR 21 796 3.80<br />

SIERRA 29 357 1.70<br />

CEIBA 28 088 3.10<br />

BUENAVISTA 30 722 1.90<br />

TOTAL 186 070 36.20<br />

Anexo 5. Superficie (km 2 ) y densidad poblacional (H/km) <strong>d<strong>el</strong></strong> municipio Plaza de la<br />

Revolución. (CICA, 2003)<br />

Consejo Popular Superficie en km 2 Densidad de Población H/Km.<br />

Carm<strong>el</strong>o 1.36 21 744<br />

Vedado Malecón 1.36 15 766<br />

Rampa 1.15 17 155<br />

Príncipe 1.55 14 963<br />

Plaza 1.57 14 991<br />

Nuevo Vedado 2.14 6 720<br />

Colón -Nuevo vedado 1.41 18 870<br />

Vedado 1.34 19 43


Anexo 6. Mo<strong>d<strong>el</strong></strong>o de encuesta pública<br />

Datos Generales <strong>d<strong>el</strong></strong> encuestado:<br />

1. Edad: 3. Ocupación actual:<br />

De 18 a 30 años_______ Obrero_______<br />

De 31 a 45 años_______ Administrativo_______<br />

De 45 a 60 años_______ Técnico_______<br />

Más de 60 años_______<br />

2. Escolaridad:<br />

Dirigente_______<br />

Ama de Casa_______<br />

Jubilado_______<br />

Trabajador por cuenta propia_______<br />

Primaria_______ 4. Sexo:<br />

Secundaria_______ Masculino_______<br />

Media Superior_______<br />

Superior_______<br />

Femenino_______<br />

5. ¿Conoce Ud. <strong>el</strong> Proyecto “Dragado Desembocadura <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>” con <strong>el</strong><br />

que se desea mejorar las condiciones naturales de la corriente fluvial de manera<br />

que <strong>el</strong> <strong>río</strong> retome su importante pap<strong>el</strong> dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque Metropolitano?<br />

Si________ No________<br />

6. ¿Piensa que <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y la adecuación de sus riberas minimizarán de<br />

manera notable las periódicas inundaciones que sufren algunos asentamientos<br />

poblacionales localizados en zonas bajas próximas al <strong>río</strong>, fundamentalmente <strong>el</strong><br />

barrio “El Fanguito”?.<br />

Si________ No________<br />

7. ¿Cree Ud. que <strong>el</strong> proyecto de <strong>dragado</strong> puede insertarse dentro de todas las<br />

acciones que se toman en <strong>el</strong> territorio para que <strong>el</strong> Parque Metropolitano se<br />

desarrolle de manera sostenible interactuando con <strong>el</strong> medio ambiente?<br />

Si________ No________<br />

8. Exponga cualquier otra recomendación, sugerencia o preocupación que Ud.<br />

tenga sobre este proyecto.


Anexo 7. Resultados alcanzados con la encuesta pública<br />

Distribución según edad, escolaridad, ocupación y sexo de los sujetos<br />

s<strong>el</strong>eccionados:<br />

1. Edad: 3. Ocupación actual:<br />

De 18 a 30 años__12__ Obrero___12<br />

De 31 a 45 años__17 Administrativo__ 8___<br />

De 45 a 60 años_ 14 Técnico_11__<br />

Más de 60 años___9<br />

2. Escolaridad:<br />

Dirigente___ 12__<br />

Ama de Casa___5___<br />

Jubilado___4___<br />

Primaria ___2 _ 4. Sexo:<br />

Secundaria _16 _ Masculino__37__<br />

Media Superior __10 _ Femenino__15__<br />

Superior _ 24 _<br />

Las preguntas formuladas fueron contestadas por 49 de los consultados, siendo<br />

los resultados globales los siguientes:<br />

A: ¿Conoce Ud. <strong>el</strong> Proyecto “Dragado Desembocadura Río <strong>Almendares</strong>” con<br />

<strong>el</strong> que se desea mejorar las condiciones naturales de la corriente fluvial de<br />

manera que <strong>el</strong> <strong>río</strong> retome su importante pap<strong>el</strong> dentro <strong>d<strong>el</strong></strong> Parque<br />

Metropolitano?<br />

Respondieron afirmativamente 18 sujetos para <strong>el</strong> 35% de la muestra, valor que<br />

indica la deficiente propaganda que se le ha ofrecido a esta obra, sobre todo entre<br />

la población que se asienta alrededor <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong>, la cual debe encontrarse bien<br />

informada para cuando se inicien los trabajos de <strong>dragado</strong>.


B: ¿Piensa que <strong>el</strong> <strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y la adecuación de sus riberas minimizarán<br />

de manera notable las periódicas inundaciones que sufren algunos<br />

asentamientos poblacionales localizados en zonas bajas próximas al <strong>río</strong>,<br />

fundamentalmente <strong>el</strong> barrio “El Fanguito”?.<br />

Contestaron afirmativamente 46 encuestados (88%), demostrando la confianza<br />

que <strong>el</strong> pueblo tiene en las obras que realiza <strong>el</strong> estado; aunque se apreciaron<br />

ciertas reservas.<br />

C: ¿Cree Ud. que <strong>el</strong> proyecto de <strong>dragado</strong> puede insertarse dentro de todas las<br />

acciones que se toman en <strong>el</strong> territorio para que <strong>el</strong> Parque Metropolitano se<br />

desarrolle de manera sostenible interactuando con <strong>el</strong> medio ambiente?<br />

Contestaron afirmativamente 50 encuestados para <strong>el</strong> 97%.


Figura 1. Esquema de microlocalización <strong>d<strong>el</strong></strong> área de <strong>dragado</strong> <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong><br />

(Tomado <strong>d<strong>el</strong></strong> Proyecto de Dragado <strong>el</strong> Río <strong>Almendares</strong>, Geocuba, <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos, 2004)


Figura 2. Esquema geológico de la zona de <strong>dragado</strong> en <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>.<br />

(Tomado <strong>d<strong>el</strong></strong> Mapa Geológico 1:100 000 <strong>d<strong>el</strong></strong> IGP, 2001)<br />

Figura 3. Imagen parcial de márgenes <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> (Cortesía de Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s marinos, 2009)


Figura 4: Red de estaciones (Cortesía de L. Fernández, GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos, 2010)


Figura 5. Mapa batimétrico <strong>d<strong>el</strong></strong> área de estudio.


Figura 6. Mapa de espesores de los sedimentos no consolidados.


Figura7 Vista general <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de “hierro


Figura 8. Imagen <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> <strong>desde</strong> <strong>el</strong> puente de hierro hacia <strong>el</strong> sur<br />

(Cortesía de Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos, 2009).


Figura 9. Imagen al sur <strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la calle 23 <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> (Cortesía de<br />

Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos , 2009).


Figura 10. Frecuencia de ocurrencia de las tormentas (Cortesía de Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s Marinos, 2009).<br />

Figura 11. Frecuencia mensual (%) de los frentes <strong>río</strong>s <strong>desde</strong> 1950-1951 hasta<br />

1999-2000 (Cortesía de Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos, 2009).


Figura 12. Decurso de la marea en los Puestos de Niv<strong>el</strong> Provisionales: Mu<strong>el</strong>le de<br />

Guardafronteras, (desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, en azul) y Mu<strong>el</strong>le de Tropa<br />

Especiales, (cerca <strong>d<strong>el</strong></strong> Puente de la Calle 23, en rojo), <strong>desde</strong> 27 de mayo hasta <strong>el</strong><br />

7 de junio <strong>d<strong>el</strong></strong> 2004. (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos)


Figura 13. Decurso de la amplitud de la marea en los Puestos de Niv<strong>el</strong><br />

Provisionales: Mu<strong>el</strong>le de Guardafronteras, (desembocadura <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong>, en<br />

azul) y Mu<strong>el</strong>le de Tropa Especiales, (cerca <strong>d<strong>el</strong></strong> Puente de la Calle 23, en rojo),<br />

<strong>desde</strong> 27 de mayo hasta <strong>el</strong> 7 de junio <strong>d<strong>el</strong></strong> 2004. (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos)


Altura (cm)<br />

160<br />

140<br />

120<br />

100<br />

80<br />

60<br />

40<br />

20<br />

0<br />

R<strong>el</strong>ación entre las v<strong>el</strong>ocidades de la corriente en <strong>el</strong><br />

interior <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> y la Marea<br />

28 29 30 31 1 2 3 4 5 6<br />

Días<br />

V<strong>el</strong>ocidad<br />

Marea ext.<br />

Marea Int.<br />

Figura 14. R<strong>el</strong>ación entre las v<strong>el</strong>ocidades de la corriente (cm/s) en <strong>el</strong> interior <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

<strong>río</strong> y la marea. (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos)


Figura 15. Rosa de corriente sumaria en la estación 2 ubicada en <strong>el</strong> <strong>río</strong>, a la altura<br />

<strong>d<strong>el</strong></strong> puente de la calle 23. (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos)


Figura 16. Rosa de corriente sumaria en la estación 1, al oeste de la glorieta <strong>d<strong>el</strong></strong><br />

Restaurante 1830. (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos)


A) V<strong>el</strong>ocidad media, (cm/s) y dirección B) V<strong>el</strong>ocidad máxima, (cm/s)<br />

Figura 17. Esquema de circulación de las corrientes de flujo de marea. (Cortesía<br />

de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos).


A) V<strong>el</strong>ocidad media, (cm/s) y dirección B) V<strong>el</strong>ocidad máxima, (cm/s)<br />

Figura 18. Esquema de circulación de las corrientes de reflujo de marea. (Cortesía<br />

de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos).


A) V<strong>el</strong>ocidad media, (cm/s) y dirección.<br />

Corriente residual<br />

B) Calmas, (v<strong>el</strong>ocidades inferiores a<br />

4,00 cm/s)<br />

Figura 19. Esquema de circulación de las corrientes residuales y distribución<br />

esquemática <strong>d<strong>el</strong></strong> % de calmas (Cortesía de Geocuba, <strong>Estudio</strong>s Marinos).


Tabla 1. Cotas de los niv<strong>el</strong>es <strong>d<strong>el</strong></strong> agua en <strong>el</strong> cauce actual <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> sin <strong>el</strong><br />

aporte de la presa Ejército Reb<strong>el</strong>de (Cortesía de GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

No DE<br />

SECCIÓN<br />

Q= 500 m 3 /s<br />

1% DE PROB.<br />

Q= 280 m 3 /s<br />

5% DE PROB.<br />

Q= 215 m 3 /s<br />

10% DE PROB.<br />

Q= 145 m 3 /s<br />

20%DE PROB.<br />

105m 3 /s<br />

PROM.<br />

(S-0) +1.10 +0.85 +0.77 +0.70 +0.66<br />

(S-8) +1.45 +1.26 +0.95 +0.83 +0.78<br />

(S-18) +1.59 +1.35 +1.26 +1.13 +1.02<br />

(S-24) +1.75 +1.53 +1.47 +1.37 +1.28<br />

(S-40) +1.84 +1.65 +1.54 +1.40 +1.31<br />

(S-46) +1.88 +1.70 +1.60 +1.45 +1.34<br />

(S-50) +1.91 +1.78 +1.64 +1.50 +1.40<br />

(S-66) +1.95 +1.82 +1.67 +1.54 +1.43<br />

(S-74) +1.98 +1.86 +1.71 +1.60 +1.49<br />

(S-86) +2.08 +1.90 +1.76 +1.65 +1.54<br />

(S-94) +2.16 +1.98 +1.85 +1.70 +1.60<br />

(S-100) +2.20 +2.01 +1.89 +1.76 +1.67<br />

(S-112) +2.24 +2.07 +1.95 +1.81 +1.74<br />

(S-128) +2.35 +2.15 +2.01 +1.85 +1.79<br />

(S-142) +2.38 +2.18 +2.05 +1.92 +1.84<br />

(S-156) +2.47 +2.24 +2.08 +1.98 +1.90


Tabla 2. Cotas de los niv<strong>el</strong>es <strong>d<strong>el</strong></strong> agua en <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> con <strong>dragado</strong> sin <strong>el</strong><br />

aporte de la presa Ejército Reb<strong>el</strong>de (Cortesía de GEOCUBA <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

No DE<br />

SECCIÓN<br />

Q= 500 m 3 /s<br />

1% DE PROB.<br />

Q= 280 m 3 /s<br />

5% DE PROB.<br />

Q= 215 m 3 /s<br />

10% DE PROB.<br />

Q= 145 m 3 /s<br />

20%DE PROB.<br />

105m 3 /s<br />

PROM.<br />

(S-0) +0.95 +0.72 +0.67 +0.62 +0.60<br />

(S-8) +1.37 +1.14 +0.85 +0.70 +0.64<br />

(S-18) +1.51 +1.29 +1.01 +0.83 +0.71<br />

(S-24) +1.68 +1.47 +1.18 +0.88 +0.73<br />

(S-40) +1.77 +1.59 +1.30 +0.97 +0.82<br />

(S-46) +1.80 +1.63 +1.37 +0.98 +0.83<br />

(S-50) +1.83 +1.71 +1.40 +1.00 +0.83<br />

(S-66) +1.89 +1.76 +1.45 +1.10 +0.95<br />

(S-74) +1.92 +1.80 +1.50 +1.12 +0.97<br />

(S-86) +2.00 +1.86 +1.60 +1.17 +1.02<br />

(S-94) +2.08 +1.90 +1.67 +1.20 +1.05<br />

(S-100) +2.12 +1.96 +1.73 +1.21 +1.06<br />

(S-112) +2.17 +2.00 +1.79 +1.25 +1.10<br />

(S-128) +2.27 +2.07 +1.82 +1.30 +1.15<br />

(S-142) +2.30 +2.10 +1.86 +1.35 +1.20<br />

(S-156) +2.39 +2.18 +1.90 +1.45 +1.25<br />

Tabla 3. Características técnicas de los correntómetros SD - 6000. (Cortesía de<br />

Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Características SD-6000<br />

Rango de v<strong>el</strong>ocidad de la corriente 0 - 8 m/seg.<br />

Resolución de la v<strong>el</strong>ocidad de la corriente 0.5cm/seg.<br />

Resolución de la dirección de la corriente. +/- 2º<br />

Rango de temperatura. -2 a 40º C.


Precisión de la temperatura +/- 0.1ºC<br />

Intervalo de mediciones 60 min.<br />

Tabla 4. Características técnicas <strong>d<strong>el</strong></strong> mareógrafo SEBA. (Cortesía de Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Precisión ± 2cm<br />

Error 1 mm./m<br />

1 :20 fluctuación <strong>d<strong>el</strong></strong> agua 5.00 m<br />

1 :10 fluctuación <strong>d<strong>el</strong></strong> agua 2.50 m<br />

1 :5 fluctuación <strong>d<strong>el</strong></strong> agua 1.25 m<br />

Tabla 5. Características técnicas <strong>d<strong>el</strong></strong> correntógrafo RCM-9. (Cortesía de Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Parámetros Resolución Precisión Rango Tiempo<br />

respuesta<br />

de<br />

Temperatura 0.1%<strong>d<strong>el</strong></strong> rango +/- 0.05C Alto(+9.81-<br />

36.66C)<br />

Conductividad 0.1%<strong>d<strong>el</strong></strong> rango 0-2 mS/cm 0-74 mS/cm -<br />

Presión 0.1%<strong>d<strong>el</strong></strong> rango +/-0.25% 0-3000PSL -<br />

V<strong>el</strong>ocidad de la<br />

corriente<br />

Dirección de la<br />

corriente<br />

- 2 cm/s 0-300cm/s -<br />

0.35 +/-5 para 0-15 inclinación<br />

+/-7.5 para 15-35 inclinación<br />

12 segundos<br />

Oxígeno 0.025 mg/l +/-0.8 mg/l 0-20 mg/l 1 minuto<br />

-


Turbidez 0.1% de la<br />

escala<br />

Intervalo 1 minutos<br />

2% de la escala 0-20 NTU -


Tabla 6. Propiedades <strong>d<strong>el</strong></strong> cieno limo – arenoso (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos).<br />

Parámetros Analizados Valor Promedio Unidad de Medida<br />

Humedad natural W = 56.8 Kn/m³<br />

Peso Específico Gs = 16.2 Kn/m³<br />

Límite Líquido LL = 47.5 %<br />

Límite Plástico LP = 38.8 %<br />

Indice de Plasticidad IP = 8.7 %<br />

Contenido de gravas 2.0 %<br />

Contenido de arena 23.0 %<br />

Contenido de limo - arcilla 75.0 %<br />

Cohesión C = 33.0 Kpa<br />

Angulo fricción interna = 90 grados<br />

Indice de fluidez B = 2.0 Adim.<br />

R<strong>el</strong>ación de vacíos e = 0.92 Adim.<br />

Saturación S = 100 %<br />

Tabla 7. Características granulométricas promedio (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos).<br />

Gravas (%) A.Gruesa A.Media A.Fina Limo (%) Arcilla (%)<br />

(%) (%) (%)<br />

0 0 8 14 55 22


Tabla 8. Propiedades de la roca caliza (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Parámetros Analizados Valor<br />

Promedio<br />

Resistencia a la compresión (RC) simple en su<br />

estado natural<br />

Resistencia a la compresión simple en su estado<br />

saturada<br />

Coeficiente de la fortaleza de la roca en su estado<br />

natural<br />

qu prom =<br />

139.46<br />

qu prom =<br />

114.66<br />

Unidad de<br />

Medida<br />

kg/cm²<br />

kg/cm²<br />

FKP = 1.39 kg/cm²<br />

Humedad natural W = 3.0 %<br />

Densidad húmeda promedio f = 2.045 g/cm³<br />

Densidad seca promedio d = 2.007 g/cm³<br />

Peso específico promedio Gs = 2.7 g/cm³<br />

R<strong>el</strong>ación de vacios promedios e = 0.34 -<br />

Saturación promedio S = 24 %<br />

Porosidad promedio n = 25 %<br />

Coeficiente de ablandamiento Kpz = 0.82 Adim.<br />

R<strong>el</strong>ación de vacíos (e) 0.92 Adim.<br />

Saturación (S) 100 %


Tabla 10. Distribución por intensidades. Huracanes en Ciudad de La Habana<br />

(1799-1998) (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Escala Rodríguez Ramírez Distribución Escala Saffir Simpsom Distribución<br />

Gran Intensidad 5<br />

Moderada Intensidad 17<br />

Categoría 5 1<br />

Categoría 4 3<br />

Categoría 3 10<br />

Categoría 2 10<br />

Poca Intensidad 18 Categoría 1 18<br />

Tabla 11. Frecuencias mensuales de la afectación de tormentas tropicales y<br />

huracanes a las provincias de Ciudad de La Habana y La Habana (1899-1998)<br />

(Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Ciclones Tropicales May Jun Jul Ago Sep Oct Nov<br />

Tormentas Tropicales 0.01 0.04 0.00 0.04 0.09 0.09 0.04<br />

Huracanes 0.00 0.01 0.00 0.00 0.06 0.08 0.01<br />

Total 0.01 0.05 0.00 0.04 0.15 0.17 0.05


Tabla 12. Huracanes intensos y desastrosos que han afectado a Cuba (1801-<br />

2000) con la categoría Saffir-Simpson alcanzada (Cortesía de Geocuba <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos).<br />

Nombre Observaciones y Cat 3 RR SS<br />

La Tormenta de La Escarcha<br />

Grandes daños en Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río y La Habana. Mod 3<br />

Salitrosa. 25-26/10/1810<br />

Huracán de Trinidad<br />

14/10/1812<br />

Grandes daños en Trinidad y Casilda. Gran 4<br />

Huracán de Cienfuegos y Trinidad<br />

Grandes daños en Trinidad y Cienfuegos. Gran 3<br />

30-1/09-10/1825<br />

La Tormenta de San Francisco deInmensa<br />

destrucción en La Habana y Matanzas. Hubo más<br />

Asís. 4 – 5/10/1844<br />

de 100 muertos. Gran 4<br />

La Tormenta de San Francisco deExtraordinaria<br />

destrucción en La Habana. Hubo más de 100<br />

Borja. 10 – 11/10/1846<br />

víctimas. Gran 5<br />

El Huracán de San Marcos<br />

7-9/10/1870<br />

Terrible desastre. Las muertes se estiman en más de 800<br />

Mod 3<br />

El Huracán de Gran Caimán - La<br />

Grandes daños en La Habana y Matanzas. Mod 3<br />

Habana. 17-20/10/1876<br />

Huracán de Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río<br />

7 – 9/10/1882<br />

Sin Nombre<br />

21-22/08/1886<br />

El Huracán de Faquineto<br />

3-6/09/1888<br />

Los daños fueron extraordinarios en Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río. Gran 4<br />

Grandes daños en las provincias centrales. Mod 3<br />

Grandes daños en la mitad occidental. Mod 3


Sin Nombre<br />

16-18/10/1906<br />

Sin Nombre<br />

10-11/10/1909<br />

El huracán de los 5 días<br />

14-18/10/1910<br />

El Huracán de 1915<br />

12-15/08/1915<br />

Huracán de Nueva Gerona<br />

25/09/1917<br />

Huracán sin precedente<br />

19/10/1924<br />

Huracán de 1926<br />

20/10/1926<br />

Huracán de Santa Cruz <strong>d<strong>el</strong></strong> Sur<br />

09/11/1932<br />

El Huracán de Sagua y Cárdenas<br />

31-2/08-09/1933<br />

El Huracán de Cienfuegos<br />

28/09/1935<br />

Huracán <strong>d<strong>el</strong></strong> 44<br />

Grandes daños y numerosas víctimas en La Habana. Mod<br />

3<br />

Grandes daños y muchas víctimas en Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río y La<br />

Habana. Mod 3<br />

Los daños fueron extraordinarios en Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río y La<br />

Habana. Innumerables muertes. Gran 4<br />

Grandes daños en Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río. Gran 3<br />

Inmensa destrucción de Nueva Gerona y la porción este de<br />

Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río. Gran 4<br />

Extraordinaria destrucción en <strong>el</strong> occidente de Pinar <strong>d<strong>el</strong></strong> Río<br />

Gran 5<br />

. Inmensa destrucción en La Habana y la Isla de la<br />

JuventuLas muertes se estimaron en cerca de 600. Gran 4<br />

Uno de los más grandes desastres naturales de la historia<br />

de Cuba. Provocó una marea de tormenta ~6.8 m en Santa<br />

Cruz <strong>d<strong>el</strong></strong> Sur. Hubo unas 3500 muertes, la inmensa mayoría<br />

ocasionadas por la marea de tormenta. Gran 4<br />

Inmensa destrucción <strong>desde</strong> Sagua La Grande a Cárdenas<br />

Grandes daños <strong>desde</strong> Villa Clara hasta La Habana. Gran 3<br />

Grandes daños en Cienfuegos. Gran 3<br />

Inmensa destrucción en La Habana y la Isla de la Juventud


18/10/1944 La marea de tormenta fue estimada en ~ 5,5 m en la costa<br />

El Huracán de Matanzas<br />

20-21/09/1948<br />

Fox<br />

24/10/1952<br />

Flora<br />

4-8/10/1963<br />

sur de la provincia de La Habana. Hubo unas 300 muertes<br />

Gran 4<br />

Grandes daños en Matanzas. Mod 3<br />

Máxima intensidad cerca de Cayo Guano de Este. Grandes<br />

daños en la antigua provincia de Las Villas. Gran 4<br />

Grandes desastres naturales de la historia de Cuba. Se<br />

estiman en cerca de 2000 las muertes ocurridas<br />

Extraordinaria destrucción debido a las torrenciales lluvias y<br />

las grandes inundaciones. Mod 2


Tabla 13. Caracterización de frentes f<strong>río</strong>s <strong>desde</strong> 1916-1917 hasta 1999-2000.<br />

Tomado de Cronología de los frentes f<strong>río</strong>s (Rodríguez y col., 1984) y Climatología<br />

de los frentes f<strong>río</strong>s (González, 1999).<br />

Total de FF <strong>desde</strong> 1916 hasta mayo <strong>d<strong>el</strong></strong> 2000 1663<br />

Promedio de los FF por temporada 19.8<br />

Temporada con menor número de FF 1996 - 1997<br />

Cantidad de FF en la temporada con menor número de FF 11<br />

Temporada con mayor número de FF 1976 - 1977<br />

Cantidad de FF en la temporada con mayor número de FF 35<br />

Meses con mayor número de FF enero y febrero<br />

Cantidad de FF en los meses con mayor número de FF 9<br />

Mes en que siempre han afectado los FF (único) febrero<br />

Mayor número de días consecutivos sin afectar FF, una vez<br />

61<br />

comenzada la temporada<br />

Cantidad de temporadas con 30 FF o más 1<br />

Cantidad de temporadas con cantidad de FF entre 25 y 30 10<br />

Temperatura mínima registrada durante <strong>el</strong> paso de un FF (fecha, 10/02/96 - Bainoa, La<br />

lugar y registro)<br />

Habana - 0,6°C<br />

Tabla14. Cantidad de frentes f<strong>río</strong>s <strong>desde</strong> la temporada de 1916-1917 hasta la de<br />

1998-1999. Tomado de Cronología de los frentes f<strong>río</strong>s (Rodríguez y col., 1984).<br />

Temp. Sep. Oct. Nov. Dic. Ene. Feb. Mar. Abr. May. Jun. Total<br />

1916-1998 7 109 211 268 293 277 244 161 59 4 1633<br />

1997-1998 0 1 4 7 4 4 4 2 0 0 26


1998-1999 0 1 1 2 3 3 3 1 1 0 15<br />

Tabla 15. Frecuencia mensual de afectación de los frentes f<strong>río</strong>s 1999-2000.<br />

Tomado de Cronología de los frentes f<strong>río</strong>s (Rodríguez y col., 1984).<br />

Frecuencia<br />

mensual de FF<br />

Sept Oct Nov Dic Ene Feb Mar Abr May Jun Total<br />

% 0.19 6.55 13.09 16.56 19.18 17.87 14.87 8.79 2.71 0.19 100<br />

Tabla 16. Parámetros morfométricos de la cuenca <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>Almendares</strong> aguas abajo de<br />

la presa Ejército Reb<strong>el</strong>de, hasta los cierres de cálculo (Cortesía Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Río Cierre<br />

Coordenadas<br />

N E<br />

A<br />

(km 2 )<br />

Lr<br />

(km)<br />

Yr<br />

(‰)<br />

Yc<br />

(‰)<br />

Lc<br />

(m)<br />

Hm<br />

(m)<br />

Pte. 23 366070 355740 106<br />

<strong>Almendares</strong><br />

Pte. Hierro 366980 355460 108<br />

32,0 2,4 60<br />

33 2,2 58<br />

340 61<br />

340 60<br />

Tabla 17. Escurrimiento medio hiperanual (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Río Cierre<br />

Mo<br />

(l/s km 2 )<br />

Qo<br />

(m 3 /s)<br />

Yo<br />

(mm)<br />

Wo<br />

(hm 3 ) Cv<br />

Pte. 23 34<br />

<strong>Almendares</strong><br />

Pte. Hierro 34<br />

3,60<br />

3,67<br />

1071 113<br />

1071 115<br />

0,40<br />

0,40<br />

Tabla 18. Gastos máximos de diferentes probabilidades (sin aporte de la presa<br />

Ejército Reb<strong>el</strong>de) (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Gastos máximos Qp% (m 3 Cierre<br />

/s)<br />

1% 5% 10% 20% prom.<br />

Pte. 23 500 280 215 145 105<br />

FF


Pte. hierro. 500 280 215 145 105<br />

Tabla 19. Gastos máximos de diferentes probabilidades (con <strong>el</strong> aporte de la presa<br />

Ejército Reb<strong>el</strong>de) (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Cierre<br />

Gastos máximos Qp% (m 3 /s)<br />

1% 5% 10% 20% prom.<br />

Pte. 23 695 310 234 165 105<br />

Pte. Hierro 695 310 234 165 105<br />

Tabla 20. Escurrimiento sólido (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Río Cierre<br />

Ms<br />

T/km 2<br />

Rs<br />

Kg/s<br />

m<br />

g/m 3<br />

Vt<br />

T/año<br />

Pte. 23 197 0,66 184 20813<br />

<strong>Almendares</strong> Pte. Hierro 197 0,67 184 21129<br />

Tabla 21. Resultados de la caracterización hidroquímica en aguas <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Estación Tramo de <strong>río</strong> O.D DBO5 DQO pH<br />

mg/l<br />

mg/l<br />

mg/l<br />

1 Puente 23-Sociedad Dinamo 1,53 15,0


2 Sociedad Dinamo-Aseg. Naval


Tabla 25. Resultados de los metales pesados en las aguas superficiales <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong><br />

<strong>Almendares</strong> (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Est<br />

As Cd Co Cr Cu Fe Hg Mn Ni Pb Zn<br />

mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l mg/l<br />

1


Desv. St 0,45 24,30 - 0,22 15,65 19,0 0,30 46,48 1,99 13,63 103<br />

Tabla 28. Orden jerárquico <strong>d<strong>el</strong></strong> comportamiento de los metales pesados en<br />

sedimentos (μg/g) en las áreas de muestreo s<strong>el</strong>eccionadas (Cortesía Geocuba<br />

<strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Estación Tramo de <strong>río</strong> Metales pesados<br />

1 Puente 23-Sociedad Dinamo Mn>Zn>Cu>Ba>Cr>Pb>Ni>Co>Cd>Hg<br />

2 Sociedad Dinamo-Aseg. Naval Zn>Mn>Cu>Ba>Pb>Cr>Ni>Co>Cd>Hg<br />

3 Aseg. Naval-Puente Hierro Zn>Mn>Cu>Ba>Pb>Cr>Ni>Co>Cd>Hg<br />

4 Puente Hierro-Tun<strong>el</strong> 5ta Ave Zn>Mn>Cu>Pb>Ba>Cr>Ni>Co>Cd>Hg<br />

5 W Glorieta 1830 en la ensenada Zn>Mn>Cu>Pb>Ba>Cr>Ni>Co>Cd>Hg<br />

Orden Promedio en <strong>el</strong> <strong>río</strong> Zn>Mn>Cu>Pb>Ba>Cr>Ni>Co>Cd>Hg<br />

Tabla 29. Valores de NO (%) y CO (%) por estaciones, correspondiente a los<br />

sedimentos (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Sedimentos<br />

Estación NO (%) CO (%)<br />

1 0,21 5,42<br />

2 0,13 5,88<br />

3 0,18 8,12<br />

4 0,07 5,90<br />

5 0,18 2,88<br />

Tabla 30. Resultados de los hidrocarburos totales (mg/kg) en los sedimentos<br />

superficiales en <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Estación Tramo <strong>d<strong>el</strong></strong> <strong>río</strong> Hidrocarburos totales (mg/kg)<br />

1 Puente 23-Sociedad Dinamo 6990<br />

2 Sociedad Dinamo-Aseg. Naval 3230


3 Aseg. Naval-Puente Hierro 7610<br />

4 Puente Hierro-Tún<strong>el</strong> 5ta Ave 4500<br />

5 W Glorieta 1830 en la ensenada 7750<br />

Tabla 31. Resultados <strong>d<strong>el</strong></strong> muestreo microbiológico en cada una de las estaciones,<br />

en <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> (NMP/100ml agua (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).)<br />

Estación Coliformes fecales Coliformes totales<br />

1 4,3 x 10 5<br />

2 2,4 x 10 5<br />

3 2,4 x 10 5<br />

4 1,5 x 10 5<br />

5 4,3 x 10 5<br />

2,4 x 10 6<br />

2,4 x 10 5<br />

4,3 x 10 5<br />

1,5 x 10 5<br />

2,4 x 10 5<br />

Tabla 32. Indicadores de calidad bacteriológica <strong>d<strong>el</strong></strong> agua en los lugares de baño<br />

y/o recreación según la Norma Cubana 22: 1999. (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s<br />

Marinos).<br />

Tipo de recreación Coliformes<br />

fecales/<br />

100ml<br />

Con contacto directo >1 x10 3<br />

Con contacto<br />

indirecto<br />

5 x10 3<br />

Coliformes<br />

totales/ 100 ml<br />

2 x10 2<br />

1 x10 3<br />

Pseudomonas<br />

aeruginosa/100m<br />

l<br />

Enterococos<br />

fecales/ 100ml<br />

ausente 1x 10 2<br />

ausente ausente


Tabla 33. Valores de Índices Ponderales (Pi) y de Índices de calidad (Ci) de los<br />

parámetros estudiados en aguas (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Indicadores para <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> Ci (%) Pi<br />

Temperatura 50 1<br />

Salinidad 30 4<br />

N-NO3 30 5<br />

N-NO2 0 5<br />

N-NH4 10 5<br />

P-PO4 10 4<br />

1.P-Pt 10 4<br />

Hidrocarburos 70 2<br />

Grasas y aceites 60 3<br />

R.V.G 10 4<br />

Turbidez 10 4<br />

Color <strong>d<strong>el</strong></strong> Agua 10 3<br />

O2 Disu<strong>el</strong>to 10 5<br />

DBO5 5 4<br />

DQO 10 4<br />

PH 70 1<br />

Sólidos Susp. 60 3<br />

Coliformes fecales y totales 0 5<br />

Metales Pesados<br />

As 80 1<br />

Cd 80 1<br />

Co 80 1<br />

Cr 80 1


Cu 80 1<br />

Fe 40 3<br />

Hg 80 1<br />

Mn 40 3<br />

Ni 80 1<br />

Pb 80 1<br />

Zn 80 1<br />

Tabla 34. Valores de Índices Ponderales (Pi) y de Índices de calidad (Ci) de los<br />

parámetros estudiados en sedimentos. (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Indicadores para <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> Ci (%) Pi<br />

Carbono orgánico 5 5<br />

Nitrógeno orgánico 60 4<br />

Hidrocarburos totales 5 5<br />

Metales Pesados<br />

Al 10 5<br />

Ba 10 5<br />

Cd 80 5<br />

Co 20 5<br />

Cr 5 5<br />

Cu 5 5<br />

Fe 5 5<br />

Mn 5 5<br />

Ni 20 5<br />

Pb 5 5<br />

Zn 5 5


Tabla 35. Valores de Índices Ponderales (Pi) y de Índices de calidad (Ci) para<br />

bloques de parámetros análogos. (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Indicadores para <strong>el</strong> <strong>río</strong> <strong>Almendares</strong> Ci (%) Pi<br />

Matriz Agua<br />

Temperatura 50 1<br />

Salinidad 30 2<br />

Nutrientes 20 4<br />

Grasas, aceites e hidrocarburos 60 2<br />

RVG, Turbidez, Transparencia, Sólidos en<br />

suspensión, Color <strong>d<strong>el</strong></strong> agua<br />

10 2<br />

O.D DBO5 10 4<br />

PH 70 1<br />

Coliformes fecales y totales 0 2<br />

Metales Pesados 60 3<br />

Matriz Sedimento<br />

C. org. y N.org. 50 4<br />

Hidrocarburos totales 5 5<br />

Metales Pesados 5 5<br />

Tabla 36. Resultados <strong>d<strong>el</strong></strong> Índice de calidad <strong>d<strong>el</strong></strong> Agua (ICA, en %) según la variante<br />

empleada. (Cortesía Geocuba <strong>Estudio</strong>s Marinos).<br />

Agua Sedimento Agua + Sedimento<br />

Variante I 45.34 17.14 36.16<br />

Variante II 29.61 16.52 23.42<br />

Variante III 34.44 20.00 30.83<br />

Variante IV 29.52 17.50 24.71

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