PRINCIPIOS METODOLÓGICOS COMPRENSIÓN LECTORA

PROYECTO EDUCATIVO IES Nicolás Copérnico Écija
PRINCIPIOS METODOLÓGICOS PARA EL TRATAMIENTO DE LA COMPRENSIÓN LECTORA
Sin entrar en el análisis de las causas, es una realidad la dificultad que el alumnado de cursos superiores (4º
ESO, ciclos y Bachillerato) presenta en actividades de comprensión lectora. Con demasiada frecuencia
encontramos que los malos resultados en las actividades de evaluación obedecen a carencias en algo tan básico
como saber leer un texto.
Podemos debatir sobre cuestiones externas a nuestro trabajo y que, sin duda, influyen en el mismo (sistema
educativo, implicación de las familias, la sociedad, etc.) pero la realidad nos obliga a actuar para cambiarla. Es
necesario que el alumnado de cursos superiores tenga capacidad de comprensión lectora para alcanzar los
objetivos en nuestras materias. Y para ello es fundamental trabajar en los niveles inferiores con la metodología
adecuada. En este sentido debe ser prioritaria la coordinación entre institutos y colegios para conseguir el
objetivo y así debe plasmarse en las reuniones de coordinación entre los centros.
Aunque la normativa dispone la obligatoriedad de trabajar estos aspectos en todas las áreas, no vemos
necesario acudir a la misma. Es una necesidad que detectamos en nuestro trabajo diario y es tarea de todas las
áreas trabajar con la metodología adecuada para superar las dificultades. Debemos actuar por convicción y no
por obligación legal. Estos principios metodológicos deben orientar y ayudar a todas las áreas en la forma de
trabajo para conseguir el objetivo planteado.
1.- PUNTO DE PARTIDA:
→ Ayudar al alumno a mejorar su fluidez y facilidad para leer.
→ Darle pistas y estrategias para que lea con eficacia y con competencia los diversos tipos de textos que se te
pongan por delante. Eso comporta que
comprenda mejor lo que lee,
aumente su vocabulario para mejorar la comprensión,
lea con más seguridad y expresividad en voz alta,
descubrir el gusto y el placer por la lectura, y que
utilice lo que va descubriendo en la lectura para aumentar sus conocimientos y lo relacione con las cosas
que ya sabe.
2.- ESTRUCTURA DE TRABAJO:
A) Antes de leer el texto (gran grupo /clase)
1.- El docente, de forma breve, podrá aportar, al alumno algunos datos convenientes que faciliten la lectura del
texto seleccionado (autor, temática, relevancia e interés del tema, actualidad del texto, etc.)
2.- De manera sucinta, y si se da el caso debido al interés o a la actualidad del texto presentado, se podrá dar
la palabra a los alumnos a fin de trabajar sus ideas previas. Éstas se podrán anotar en la pizarra para, llegado el
caso, afirmarlas o refutarlas cuando finalice la actividad lectora.
B) Lectura de texto (individual / gran grupo / clase // silenciosa / en voz alta)
1.- Debería realizarse en unos 10 minutos. La extensión de los textos se controla mediante el número de
palabras (de 800, en 1º ESO, a 1 500, como máximo, en textos literarios para 4º.).
1.1.- Primero se efectuará una lectura silenciosa que el alumnado aprovechará para subrayar las
palabras y expresiones cuyo significado desconoce o le resulta confuso).
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1.2- Lectura en voz alta (clase): ésta no la llevará a cabo un único alumno, sino que el profesor la
pautará de modo tal que TODA la clase intervenga.
Durante la lectura, el profesor vigilará especialmente los siguientes aspectos:
Los defectos de elocución: si el alumno verbaliza erróneamente una palabra o una frase, si no
entona adecuadamente (la interrogación, la enunciación, la exclamación, etc.), el profesor llamará la
atención sobre el fallo cometido y hará repetir la lectura de la forma correcta.
La utilización de dedo, bolígrafo o papel para señalar la línea por la que se va leyendo. Cuando tal
situación se produzca, el docente obligará al alumno a retirar el elemento de apoyo y a proseguir o
repetir sin él la lectura. Evidentemente, no todos los alumnos comparten un idéntico nivel de
competencia lectora. Esta circunstancia conllevará diferencias de velocidad o deficiencias tales
como, por ejemplo, el silabeo. Conviene, por lo tanto, ser paciente y dedicar más tiempo a la
intervención del alumno que presente problemas como los antedichos. LA CORRECCIÓN ES UNA
PARTE FUNDAMENTAL DE LA EVALUACIÓN. LO QUE NO ES SISTEMÁTICAMENTE
CORREGIDO NO SE TRADUCIRÁ EN MEJORAS SENSIBLES.
C) Ejercicios de comprensión lectora.
Nos referimos a ejercicios para evaluar el nivel de comprensión del texto leído.
1. Se debe comenzar por plantear en común la resolución de dudas de vocabulario. (Clase / Gran grupo/ grupo
reducido/ individual). Para ello, el día que se efectúe la actividad lectora, el alumno habrá de disponer de un
adecuado diccionario. Los problemas de vocabulario se pueden resolver de las siguientes formas:
1.1. Grupo clase:
1.1.1. El profesor utilizará los conocimientos previos de los alumnos (raíz de la palabra, semejanza con
otras que sí conoce, contexto en la que ésta aparece, campo semántico al que pertenece, etc.)
para deducir el significado del término, finalmente explicado por el discente con su propio
vocabulario y recogido en el cuaderno. Se recomienda dejar un tiempo para que construya una
frase propia en la que se utilice el nuevo vocablo. El trabajo colectivo, a través de la educada
participación alternada de los alumnos en la aclaración de significados, no sólo enriquece al
conjunto de la clase, sino que lo hace el verdadero propietario del hallazgo. De este modo, esta
iniciativa favorece la aprehensión de los conceptos.
1.2. Grupo reducido:
1.2.1. El docente dejará los minutos necesarios para que los alumnos busquen las palabras en el
diccionario. Se recomienda que para esta actividad, la clase se organice en grupos de un máximo
de cuatro miembros con el fin de agilizar una búsqueda que implicará que, durante ese proceso, el
alumno redacte oraciones en la que se empleen los términos desconocidos. Transcurrido el
prudencial tiempo (no más de 15’), se hace una puesta en común. Esta propuesta se puede llevar a
cabo de forma individual, si bien su desarrollo exigirá más tiempo.
Se finaliza esta fase con la corrección y evaluación de las dudas de vocabulario, paso indispensable para
una adecuada comprensión lectora. Aunque evaluación y calificación no son exactamente términos sinónimos,
la participación activa del alumnado en el proceso y lo adecuado de sus intervenciones puede y debe ser
valorada en el cuaderno del profesor.
2. A continuación, se procederá a llevar adelante una serie de estrategias de comprensión que guíen al alumno
en la adquisición de las habilidades necesarias para mejorar su propia lectura comprensiva. Éstas pueden
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pautarse de la siguiente forma:
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2.1. Realizar un resumen del texto.
2.2. Exponer la idea principal y la estructura del texto.
2.3. Interpretar. Realizar anticipaciones e hipótesis de significado. Deducir.
2.4. Comparar e integrar varias informaciones.
2.5. Valorar el contenido y la forma y relacionarlos.
2.6. Relacionar el contenido con los propios conocimientos y experiencias para reactivar y compartir los
conocimientos previos.
3. Estas estrategias se traducirá en el desarrollo de una serie de ejercicios (orales / escritos // gran
grupo) que nos servirán para evaluar el nivel de comprensión del texto leído. Cada texto propuesto para las
sesiones ha de tener perfectamente estructuradas estas actividades. La flexibilidad del docente para
aprovechar y/o reconducir las aportaciones del momento no debe confundirse en ningún caso con la
improvisación.
4. Al igual que en las anteriores ocasiones, esta etapa ha de ser convenientemente evaluada.
3.- MODELOS DE TEXTOS:
A) TEXTOS NARRATIVOS.
Los textos narrativos relatan hechos que les suceden a unos personajes, en un lugar y un tiempo determinados.
Estos hechos pueden ser reales o imaginarios. Narrar es contar. Se puede contar una historia desde distintos
puntos de vista: en primera persona, es decir, alguien que cuenta lo que le sucede —normalmente el protagonista—;
en tercera persona, alguien que cuenta hechos que se ha inventado o que les han sucedido a otros; y, a
veces, en segunda persona.
Muchos relatos se organizan con sencillez siguiendo el orden cronológico de los hechos, aunque a veces, por
diferentes razones, el escritor no sigue ese orden.
Cuando se trabaje un texto narrativo procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. (Gran grupo / individual). El buen resumen no debe exceder las 6 ó 7 líneas, ha de
recoger la información esencial del texto y estar expresado de una forma lo más personal posible. El
resumen se puede trabajar de forma colectiva para, finalmente, trasladar al papel el consensuado por
la clase. También se puede hacer de forma individual para, después de un tiempo necesario de trabajo
(unos 10’) realizar una puesta en común en la que intervendrían diferentes alumnos. Hemos de recordar
que no hay buen resumen sin un subrayado previo y que, normalmente, cada párrafo se articula en torno
a una idea nuclear.
En los textos narrativos al resumen lo haremos coincidir con el argumento, es decir, con la historia y
las acciones que se relatan.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. (Gran grupo // individual). La idea principal del
texto debe ser expuesta en un máximo de dos líneas. La ayuda del profesor es capital en este punto
pues requerirá de un previo “minidebate” oral que habrá de ser conducido con la habilidad suficiente
para que no haya desorden en la clase y las ideas no se dispersen. Por lo que concierne a la estructura
del texto, esto es, al modo como están en él expuestas y jerarquizadas las ideas, el profesor procederá
con igual cautela atendiendo a:
a) Las partes que se pueden establecer en función del contenido que se desarrolla
(Planteamiento o presentación: se plantea la situación inicial. » Nudo: se desarrolla el conflicto.
Desenlace: el conflicto encuentra solución) y
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b) la distinción entre lo principal y lo secundario (argumento, apoyo, ejemplificación y aclaración
de la idea central)
La presentación escrita de la estructura del texto variará del objetivo perseguido: a veces interesará
redactar una respuesta, otras veces será más pertinente realizar un mapa conceptual.
Tanto el trabajo con el resumen como la exposición del tema y la determinación de la estructura
inciden en la interpretación del texto, para lo cual, el alumno necesitará realizar deducciones e
hipótesis de significado.
3. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. A
saber:
• Los personajes que llevan a cabo las acciones: protagonistas, antagonistas, personajes
secundarios, etc.
• El espacio en el que tienen lugar los hechos.
• El tiempo que dura la acción y la época en la que sucede.
• El narrador y la perspectiva: voz que cuenta la historia (3ª, 2ª o 1ª persona) y punto de vista
desde el que se cuentan los hechos (omnisciencia, narrador testigo, etc.).
• Tipo de narración: realista, fantástica, apólogo (cuento con moraleja), de humor, etc.
4. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto. La respuesta a las mismas será
siempre mejor si viene ubicada, ejemplificada y justificada.
ESTAS CUATRO FASES HAN DE SER CUIDADOSAMENTE SUPERVISADAS POR EL PROFESOR QUE,
AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
Estrategias para trabajar con textos narrativos. (Información que el profesor puede proporcionar al
alumno)
1 Fíjate en el título y realiza las primeras hipótesis de significado, que seguramente tendrás que ir
cambiando a medida que avances en la lectura. Observa las características de los personajes: quién es el
protagonista, quién el antagonista, cómo es el carácter de cada uno, qué acciones realizan, etc.
2 Piensa en qué época de la historia suceden los hechos, si son remotos o actuales, cómo van desarrollándose
las acciones en el tiempo: lento, rápido, con avances y retrocesos, de forma lineal, etc.
3 Sitúate correctamente en los lugares, hazte una imagen mental del espacio, una especie de mapa. Si es un
texto realista, quizá hable de países y ciudades que conoces; si no los conoces, infórmate para situar bien
las acciones.
4 Descubre la estructura del relato que vas leyendo: la presentación, que será breve, el nudo, más extenso y
complejo, y el desenlace.
5 Observa igualmente quién te cuenta la historia.
6 La historia está contada con frases y palabras. Disfruta de la manera de contar y quédate con alguna
palabra o alguna frase que puedas utilizar tú cuando hables o cuando escribas.
B) TEXTOS DESCRIPTIVOS.
La descripción es un tipo de texto que sirve para representar la realidad por medio de palabras. Por eso se
suele decir que «describir es pintar con palabras, es inmovilizar el tiempo».
Existen básicamente dos clases de descripciones:
a. Las descripciones técnicas u objetivas: son propias de la literatura específica o científica, aunque también
las podemos encontrar en el género periodístico. Lo que se persigue con este tipo de textos es dar a conocer un
objeto determinado, una persona, un proceso, etc. a través de sus partes, de su finalidad o de su
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funcionamiento.
b. Las descripciones literarias: aparecen intercaladas en los textos narrativos. Sirven para darnos a conocer
a los personajes, sobre todo su aspecto físico o psíquico, los objetos, los lugares, etc. Además de lo que vemos,
podemos describir también las sensaciones o percepciones que nos llegan a través de otros sentidos (tacto,
sabores, sonidos, olores).
Cuando se trabaje un texto descriptivo procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. Idem textos narrativos.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. En cuanto a la estructura, y dado que los textos
descriptivos, suelen estar insertos en los narrativos, se pueden proponer el mismo procedimiento que
en los anteriores.
Tanto el trabajo con el resumen como la exposición del tema y la determinación de la estructura
inciden en la interpretación del texto, para lo cual, el alumno necesitará realizar deducciones e
hipótesis de significado.
3. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. A
saber:
a. Tipo de descripción utilizada: prosopografía (rasgos físicos de un personaje), etopeya (rasgos
psíquicos), retrato (suma de ambas), topografía (presentación de un ambiente), etc.
b. Elementos lingüísticos propios, tales como la abundancia de adjetivos calificativos, los
marcadores espaciales (que sitúan en el espacio lo que se describe, como por ejemplo: al fondo,
a la derecha, más arriba, dentro, alrededor, etc.) o el uso de epítetos, símiles o metáforas.
4. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto. La respuesta a las mismas será
siempre mejor si viene ubicada, ejemplificada y justificada.
ESTAS CUATRO FASES HAN DE SER CUIDADOSAMENTE SUPERVISADAS POR EL PROFESOR QUE,
AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
Estrategias para leer textos descriptivos. (Información que el profesor puede proporcionar al alumno)
1 Haz una lectura detenida fijándote en los detalles, discriminando y conservando los detalles más
funcionales y relevantes, que te permitirán comprender mejor la narración en la que se inscriben.
2 A través de los detalles que selecciona el autor en su descripción, trata de captar la actitud del autor hacia
aquello que describe y su intencionalidad.
3 Intenta visualizar los elementos que se te describen para guardarlos en tu memoria y relaciónalos con otros
que conoces.
4 Realiza inferencias de las descripciones; por ejemplo, paisajes y estaciones del año, el aspecto físico de los
personajes, su carácter, sus motivaciones, etcétera.
5 Aprovecha la riqueza de adjetivos que aparece en las descripciones para mejorar tu vocabulario.
6 La lectura de textos descriptivos te servirá para:
• Aprender a leer bien las definiciones y los artículos de las enciclopedias que describen plantas,
animales, máquinas...
• Desarrollar tu imaginación visualizando a los personajes, animales, objetos, lugares... que aparecen en
las descripciones.
• Ser observador y fijarte en los detalles que caracterizan a las personas y a las cosas.
• gar personajes que te pueden enseñar lo que debes hacer o lo que conviene que evites en tu vida.
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C) TEXTOS EXPOSITIVOS.
La exposición es un tipo de escrito mediante el cual se desarrolla un tema de forma clara y ordenada
(profundizando en él, modificándolo en parte o revisándolo totalmente) con la pretensión de que otras personas
lo entiendan. Esta variedad del discurso se emplee preferentemente en la transmisión de los avances científicos
y tecnológicos, en el ámbito académico, en la actividad jurídica y administrativa, en las disciplinas humanísticas
o en el mundo del periodismo. El lenguaje que utiliza, por tanto, pretende ser claro y preciso.
Cuando se trabaje un texto expositivo procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. Idem textos narrativos.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. En cuanto a la estructura, en los textos
completos se atiene, en líneas generales, a un esquema organizativo que adopta la siguiente forma: presentación
del tema, explicación o análisis del mismo y conclusión, que viene a coincidir con un resumen o
síntesis de los aspectos más significativos tratados en la fase anterior. Sin embargo, lo normal es que
nos enfrentemos a fragmentos extraídos de textos más amplios. En este caso es más conveniente
fijarse en el modelo de organización lógica elegido por el autor: es decir, de qué forma se articulan las
ideas. Así, la estructura del escrito puede adoptar dos modalidades: deductiva (de lo general a lo
particular) e inductiva (de lo particular a lo general).
Tanto el trabajo con el resumen como la exposición del tema y la determinación de la estructura
inciden en la interpretación del texto, para lo cual, el alumno necesitará realizar deducciones e
hipótesis de significado.
3. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. A
saber:
a. La tipología y caracterización del texto expositivo:
i. Divulgativos (destinado a personas que no son especialistas en la materia). Ello exige
un cuidado especial en la presentación de los contenidos: deben estar perfectamente
claros y ordenados. Para que la información resulte comprensible el autor suele
apoyarse en esquemas, resúmenes y ejemplos.
ii. Especializados (para un público minoritario que posee amplios conocimientos sobre la
cuestión). En este caso no es imprescindible hacer tanto hincapié en el orden y la
claridad, pero sí en el tratamiento riguroso del tema, por lo que se hace necesaria la
presencia de abundantes tecnicismos.
b. Los elementos lingüísticos propios:
i. Impersonalidad: se manifiesta en la omisión de toda referencia al sujeto. Para
acentuar esa actitud de distanciamiento con respecto al propio yo el emisor recurre al
uso de la 3. a persona gramatical y a la 1. a persona del plural (plural de
modestia), así como a la modalidad oracional enunciativa. Contribuyen también a
alcanzar esa sensación de objetividad el vocabulario estrictamente denotativo.
ii. Claridad: Requiere una presentación ordenada de las ideas, para lo cual se utilizan
conectores de naturaleza lógica (además, incluso, asimismo, no obstante, con todo, al
contrario, por lo tanto, por consiguiente, es decir, en conclusión, en definitiva, etc.).
iii. Abstracción: Son frecuentes los sustantivos abstractos y formas verbales como el
presente intemporal y los verbos que significan estado.
iv. La pretensión de rigurosidad: apreciable en la selección de vocablos con un único
significado (tecnicismos) y en la preferencia por estructuras sintácticas complejas.
4. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto. La respuesta a las mismas será
siempre mejor si viene ubicada, ejemplificada y justificada.
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ESTAS CUATRO FASES HAN DE SER CUIDADOSAMENTE SUPERVISADAS POR EL PROFESOR QUE,
AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
D) TEXTOS ARGUMENTATIVOS Y ENSAYÍSTICOS.
Desde el punto de vista de los diversos tipos de textos, un ensayo es un género literario en prosa de tipo
didáctico (sirve para enseñar, presentar ideas y apreciaciones personales) sobre algún tema: histórico,
humanístico, artístico, filosófico, etc. Más claro: un ensayo es un escrito que nos ofrece un autor en el que nos
comunica sus opiniones, sus puntos de vista, aunque sin pretender hacer algo muy formal, ni muy definitivo, ni
muy científico.
El tema del ensayo puede ser tocado por el autor de una manera más o menos técnica. Por otra parte, la dificultad
de estos textos puede venir de cómo están construidas la frases, más o menos complicadas, más o menos
agudas, irónicas, o con doble significado; también por el vocabulario que se emplee, que en general suele ser
bastante abstracto, o más o menos técnico. Finalmente, la dificultad quizá estribe en la cantidad de referencias
culturales a las que el autor acuda.
Cuando se trabaje un texto argumentativo procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. Idem textos narrativos.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. Idem que los anteriores, si bien la estructura
básica de los textos argumentativos se suele dividir en TESIS, donde se recoge la idea fundamental
defendida por el autor, y CUERPO, donde quedan expuestos los elementos que defienden la tesis. En
función de la ubicación de una y otra piezas, hallaremos estructuras deductivas (T+C), inductivas (C+T),
encuadradas (T+C+T), etc.
3. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. A
saber:
a. Tipo de argumentación utilizada: científica, subjetiva, etc.
b. Argumentos utilizados: de autoridad, ejemplos, de mayoría, proverbios y refranes, etc.
4. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto. Ej: ordenar la secuencia de ideas
del texto, completar información a partir de enunciados dados tales como: INTRODUCCIÓN,
RAZONES, TESIS, CONCLUSIÓN, buscar tecnicismos, señalar los procedimientos que el autor utiliza
para, por ejemplo, hacer una crítica humorística, etc. La respuesta a las mismas será siempre mejor si
viene ubicada, ejemplificada y justificada.
ESTAS CUATRO FASES HAN DE SER CUIDADOSAMENTE SUPERVISADAS POR EL PROFESOR QUE,
AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
Estrategias para leer textos argumentativos. (Información que el profesor puede proporcionar al alumno)
i. Lee despacio y tratando de descubrir qué postura adopta el escritor: formal, informal, irónica, crítica,
seria...
ii. Valora los argumentos que utiliza el autor para ver si te convencen o no. No necesariamente estarás de
acuerdo con todo lo que se diga en el ensayo.
iii. Al tiempo que lees, piensa qué opinas tú sobre los mensajes que recibes.
iv. Ten en cuenta las llamadas de atención y los guiños que te hace el autor, las palabras o expresiones en
negrita o en cursiva, los entrecomillados, así como los títulos de los epígrafes que te irán orientando en la
lectura.
v. Disfruta del ingenio y la agudeza del escritor.
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vi. No te agobies; no es necesario que reconozcas todas las referencias culturales que aparezcan en el texto;
todo se andará, nadie lo sabe todo.
vii. La lectura de ensayos te servirá para:
• Ir formándote tu propia opinión sobre lo que sucede a tu alrededor.
• Ampliar tus conocimientos sobre temas de actualidad.
• Conocer las posturas de distintos autores sobre materias que te interesan.
• Entrenarte en formular argumentos para defender tus puntos de vista.
E) TEXTOS DIALOGADOS.
Un texto dialogado es el que refleja el intercambio de información entre dos o más personas, es decir, una
conversación. Aunque es más propia del lenguaje oral, se utiliza bastante a menudo en los textos escritos. Se
puede encontrar un diálogo en cualquier obra literaria; pero es sobre todo en las obras teatrales donde los
personajes se sirven del diálogo para reproducir la lengua oral, imitando una conversación hablada.
Cuando se trabaje un texto dialogado procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. Idem textos narrativos.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. Idem textos narrativos.
3.
4. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. A
saber:
a. Naturalidad: se reproduce la forma del habla de cada persona; por lo tanto, nos podemos
encontrar con diálogos en los que se utiliza un lenguaje coloquial, infantil o incluso vulgar,
dependiendo de los personajes que hablen y su caracterización.
b. Agilidad: se construye un ritmo conversacional mediante expresiones cortas y dinámicas, igual
que sucedería en una conversación entre personas.
c. Expresividad: hay intervenciones que revelan las particularidades de cada hablante.
d. Es importante conocer la estructura de los textos, para entenderlos bien. Si te fijas, en un
texto dialogado se podrá observar que las intervenciones de cada personaje se escriben
precedidas de una raya (guión largo) y en líneas distintas. En un texto narrativo, las
intervenciones del narrador se ponen entre rayas, insertadas entre las palabras que dicen los
personajes. Ej.: —No me extraña —dijo entonces Antonia—. Si siempre te portas así...
En el teatro, la intervención de un personaje va precedida de su nombre, y las acotaciones del
autor de la obra van escritas entre paréntesis y, generalmente, en letra cursiva. Ej.:
ANTONIO: ¿Ha oído? La fabricación de oro... ¡Ja, ja, ja! (Se ríen como locos).
e. Uso de diferentes modalidades del enunciado (enunciativa, exclamativa, etc.), de llamadas al
interlocutor y de fórmulas lingüísticas para gestionar el diálogo (abrirlo, cerrarlo, tomar la
palabra, etc. Ej.: verbos (como creer, considerar, dudar), locuciones y adverbios (como en mi
opinión, etc.)
5. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto.
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AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
Estrategias para leer textos dialogados. (Información que el profesor puede proporcionar al alumno)
1. Reconocer y conocer a los personajes que intervienen en el diálogo.
2. Las acotaciones del autor son muy útiles para llegar a entender qué dice el personaje y, sobre todo,
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cómo lo dice e incluso por qué lo dice.
3. Comprender el contexto o situación en que se encuentran los personajes en cada momento.
4. La lectura de textos dialogados te servirá para:
a. Analizar y comprender mejor las conversaciones orales, que, por la velocidad con que se
desarrollan, no suelen darnos la oportunidad de estudiarlas con calma.
b. Divertirte con tus compañeros haciendo un teatro leído, en el que cada uno puede elegir un
personaje con el que se sienta más o menos identificado.
F) TEXTOS PERIODÍSTICOS.
Informar, crear opinión y entretener son los tres objetivos de la prensa escrita. Cada uno de estos objetivos se
vale de diferentes géneros informativos. Buen ejemplo de la información es la noticia, que sin ofrecer ningún
comentario, trata brevemente un hecho de actualidad. Pero cuando el periodista cuenta lo que ve, cómo lo ve y,
además, valora los hechos, puede utilizar, además de la crónica, el reportaje o la entrevista, géneros que están
a caballo entre información y opinión.
Todos ellos aparecen encabezados por un titular y, normalmente, a continuación, tienen una entradilla que
resume el contenido. Ambos, el titular y la entradilla, pueden ayudar a saber si interesa o no su lectura.
Cuando se trabaje un texto periodístico procuraremos realizar actividades tales como:
1. Resumir el texto. Idem textos narrativos.
2. Exponer la idea principal y la estructura del texto. Idem textos narrativos, pero además tendremos
en cuenta la particular morfología del texto periodístico: antetítulo, titulo, postítulo, entradilla, cuerpo
de la noticia, etc.
3. Determinar, por medio de cuestiones específicas, aspectos propios de esta modalidad textual. Ver
textos narrativos y argumentativos.
4. Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto como, por ejemplo, señalar qué
afirmaciones son correctas y cuáles falsas, validez del titular, resumen sinóptico de las informaciones
de la entradilla, interés y actualidad del texto, elementos iconográficos, etc.
ESTAS CUATRO FASES HAN DE SER CUIDADOSAMENTE SUPERVISADAS POR EL PROFESOR QUE,
AMÉN DE CORREGIR Y EVALUAR LOS DEFECTOS DE ELOCUCIÓN, SUPERVISARÁ LOS ERRORES
ORTOGRÁFICOS, SINTÁCTICOS Y SEMÁNTICOS.
Estrategias para leer textos periodísticos. (Información que el profesor puede proporcionar al alumno)
Cada persona tiene una forma peculiar de leer el periódico: el orden de la lectura, la búsqueda de algún dato...
Cuando leas un periódico recuerda:
i. Algo tan simple como la forma de sostenerlo (o tenerlo sobre la mesa) evitará que las hojas se desordenen.
ii. Lo primero que debes consultar antes de iniciar su lectura es el sumario (índice). De esta forma, gracias a
la estructura en secciones, encontrarás rápidamente cualquier información.
iii. La primera página contiene las noticias más destacadas. Además de estas noticias, encontrarás otras más
breves que te remiten a una noticia del interior.
iv. La importancia que el periódico da a una noticia es fácil de valorar: dependerá de la página (par o impar; la
impar es más importante), el lugar (mejor arriba que abajo) y espacio que ocupa, las fotografías...
v. La adecuada de la prensa te ayudará a:
1. Encontrar lo antes posible una información que te interese o que sea de actualidad.
2. Ampliar la información según tus gustos o necesidades.
3. Poder opinar y valorar el texto leído y la información que contiene.
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4.- TEXTOS RELACIONADOS CON MATERIAS CURRICULARES.
A.- MATEMÁTICAS.
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Se trata de textos muy conceptuales, caracterizados por un lenguaje neutro y alejado de la estética literaria,
por regla general. Las características más sobresalientes de estos textos son:
1. Precisión: los términos elegidos tienen que corresponder exactamente con lo que se quiere
nombrar. En el lenguaje matemático rara vez tienen cabida los sinónimos, ya que cada concepto,
cada fenómeno, cada operación tienen un nombre concreto y específico. Es importante, por tanto,
que se tenga un buen conocimiento del vocabulario que se va a encontrar.
2. Neutralidad: los textos matemáticos están libres de acepciones, connotaciones y matices
afectivos.
3. Universalidad: el lenguaje matemático es utilizado por la comunidad científica internacional. Por
eso, existen unas normas terminológicas establecidas y, aunque se pueden encontrar pequeñas
variaciones idiomáticas, hay unas convenciones universales sobre la composición y la derivación de
los tecnicismos propios de esta área.
4. Concisión: se supone que el lenguaje científico tiende a expresar las ideas con el menor número de
palabras posible, huyendo de la retórica y de los adornos estéticos. Las matemáticas no son una
excepción, aunque, en ocasiones, el autor pueda extenderse en sus ejemplificaciones. Esta
concisión se manifiesta también en las abreviaturas y en los símbolos (km en lugar de kilómetros;
+ en lugar de suma; a en lugar de área...).
5. Elementos gráficos: se usan esquemas e imágenes para representar e ilustrar lo expresado con
palabras y, de este modo, facilitar la comprensión.
Además de la propuesta de trabajo planteada para las modalidades anteriores, válida para este tipo de
textos, hemos de tener en cuenta una serie de
Estrategias para leer textos matemáticos:
1 Realizar una lectura integral sin olvidar los elementos gráficos y los datos numéricos.
2 Leer con tranquilidad, aunque de manera fluida.
3 Fijarse bien en los sustantivos técnicos con los que se expresa la carga conceptual del texto.
4 Fijarse también en los adjetivos que acompañan a los sustantivos y que sirven para explicarlos o
especificarlos.
5 Detenerse en los datos concretos: compáralos, analízalos y memorízalos si es necesario.
6 Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto como, por ejemplo, completar los
pasos de una deducción, esquematizar y jerarquizar los datos ofrecidos, definir conceptos, relacionar
el problema del texto con la vida cotidiana, etc.
Estrategias para leer textos matemáticos. (Información que el profesor puede proporcionar al
alumno)
Una lectura adecuada de este tipo de textos te va a ayudar a:
1. Comprende los enunciados de los problemas y hacer más fácil su resolución.
2. Aumenta tu conocimiento del lenguaje científico en general y del matemático en particular.
3. Amplia tu vocabulario matemático de forma sencilla y sin necesidad de recurrir a la
memorización.
4. Comprende cuestiones físicas y matemáticas de gran interés científico y cultural.
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B.- CIENCIAS SOCIALES.
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Llamamos ciencias sociales a un grupo de disciplinas científicas que se ocupan de diferentes aspectos del
comportamiento y las actividades del ser humano en su contexto social. Las ciencias sociales abarcan multitud
de disciplinas: psicología, sociología, política, filosofía, pedagogía, geografía, historia, antropología, religión, etc.
Por este motivo, se pueden encontrar un amplio abanico de textos que, incluidos en esta categoría, presentan
características comunes e invitan al uso de estrategias comunes para su comprensión.
Los textos de ciencias sociales suelen ser expositivos y se caracterizan por su objetividad. En menor medida,
encontrarás textos argumentativos, en los que aparece cierta subjetividad, aunque esta no debe, de ninguna
manera, alterar la realidad de los hechos.
El lenguaje de los textos de ciencias sociales presenta las siguientes características:
1 Uso de tecnicismos propios de la disciplina a la que pertenezcan.
2 Abundancia de datos: nombres propios, fechas, cantidades, distancias...
3 Ejemplos.
4 Elementos gráficos: imágenes, esquemas, mapas conceptuales...
Además de la propuesta de trabajo planteada para las modalidades anteriores, válida para este tipo de textos,
hemos de tener en cuenta una serie de
Estrategias para leer textos de ciencias sociales:
1 Realizar una lectura integral, sin olvidar los elementos gráficos, que suelen explicar algunos aspectos del
texto.
2 Leer con tranquilidad, aunque de manera fluida.
3 Fijarse bien en los sustantivos con que se expresa la carga conceptual del texto.
4 Fijarse también en los adjetivos que acompañan a los sustantivos y que sirven para explicarlos o
especificarlos.
5 Detenerse en los datos concretos: compáralos, analízalos y memorízalos cuando sea necesario.
6 Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto como, por ejemplo, completar preguntas
sobre un plano, definir vocablos históricos o geográficos, establecer deducciones, elegir, de entre las del texto,
las frases que mejor resuman lo que pretende decir, etc.
Estrategias para leer textos de ciencias sociales. (Información que el profesor puede proporcionar al
alumno)
Una lectura adecuada de este tipo de textos te va a ayudar a:
Ser autónomo en la búsqueda de lugares, informaciones, hechos y personajes históricos.
Contrastar informaciones lingüísticas y no lingüísticas sobre los hechos sociales.
Conocer la historia de la humanidad.
Comparar manifestaciones sociales de diferentes culturas en la actualidad.
Comprender la realidad política y social en el mundo actual, etcétera.
C.- CIENCIAS NATURALES.
Llamamos ciencias naturales a un grupo de disciplinas científicas que se ocupan del estudio de los seres vivos y
de su relación con el entorno físico. Las ciencias naturales abarcan multitud de disciplinas: biología, anatomía,
física, química, astronomía, geología, meteorología, etc. Por este motivo se pueden encontrar un amplio abanico
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de textos que, incluidos en esta categoría, presentan características comunes e invitan al uso de estrategias
comunes para su comprensión.
Los textos de ciencias naturales suelen ser expositivos y se caracterizan por su objetividad. En menor medida
encontraremos textos argumentativos, en los que puede mostrarse cierta subjetividad, aunque esta no debe, de
ninguna manera, alterar la realidad de los hechos.
El lenguaje de los textos de ciencias naturales presenta las siguientes características:
1 Uso de tecnicismos propios de la disciplina a la que pertenezcan.
2 Palabras griegas y latinas.
3 Abundancia de datos: nombres propios y genéricos, cantidades, distancias, etc.
4 Ejemplos.
5 Elementos gráficos: imágenes, esquemas, mapas conceptuales, etc.
Además de la propuesta de trabajo planteada para las modalidades anteriores, válida para este tipo de textos,
hemos de tener en cuenta una serie de
Estrategias para leer textos de ciencias naturales:
Realiza una lectura integral, sin olvidar los elementos gráficos, que suelen explicar algunos aspectos del
texto.
Lee con tranquilidad, aunque de manera fluida.
Fíjate bien en los sustantivos con que se expresa la carga conceptual del texto.
Fíjate también en los adjetivos que acompañan a los sustantivos y que sirven para explicarlos o
especificarlos.
Detente en los datos concretos: compáralos, analízalos y memorízalos si es necesario.
Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto como, por ejemplo, la aclaración de
tecnicismos, la elaboración de mapas conceptuales, conectar la experiencia propia con la información
del texto, etc.
Estrategias para leer textos de ciencias NATURALES. (Información que el profesor puede proporcionar al
alumno)
Una lectura adecuada de este tipo de textos te va a ayudar a:
1 Ser autónomo en la búsqueda de informaciones sobre los seres vivos y el entorno.
2 Contrastar informaciones lingüísticas y no lingüísticas sobre los hechos físicos y ambientales.
3 Conocer nuestro propio cuerpo y el de otros seres vivos.
4 Conocer las diferentes sustancias que existen en el Universo, sus componentes y las fuerzas e
interacciones que se producen en ellas mismas y en su relación con otras sustancias.
5 Comprender cuestiones medioambientales de gran interés en la actualidad, etcétera.
D.- ÁREAS ARTÍSTICAS.
Llamamos áreas artísticas a aquellas que apelan al intelecto pero mucho más a la sensibilidad y a las emociones,
y en las que el elemento gráfico suele predominar sobre el lingüístico. Las áreas artísticas abarcan multitud de
manifestaciones expresivas: dibujo y pintura, fotografía, música, diseño, cine, cómic, publicidad, etc.
Los textos de las áreas artísticas son tan diversos que resulta difícil definir sus características de forma
general. Cada uno de ellos tiene particularidades, e incluso dentro de un mismo tipo encontramos
manifestaciones muy diversas. Sin embargo, se puede afirmar que hay dos aspectos comunes en prácticamente
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todos ellos: la subjetividad del autor o grupo de autores y la enorme importancia concedida a los elementos
visuales. Los diferentes tipos de gráficos: reproducciones, dibujos, fotografías, iconos, etc. y su diseño
(colores, formas, líneas...) tienen que ser entendidos tan bien como los elementos lingüísticos para comprender
el texto en su totalidad.
El lenguaje de los textos artísticos presenta las siguientes características:
1 Gran importancia del elemento gráfico.
2 Expresión de la subjetividad a través de comentarios, gestos, colores, estructuras...
3 Utilización de metáforas literarias y/o visuales y de otros recursos estilísticos y artísticos.
Además de la propuesta de trabajo planteada para las modalidades anteriores, válida para este tipo de textos,
hemos de tener en cuenta una serie de
Estrategias para leer textos de áreas artísticas:
1 Realizar una lectura global relacionando y contrastando los elementos visuales con los lingüísticos.
2 Reparar en los detalles, tanto en los lingüísticos como en los no lingüísticos.
3 Tratar de imaginar qué quiere expresar el autor.
4 Responder a cuestiones concretas sobre el contenido del texto como, por ejemplo, reflexionar sobre el
objetivo del texto, proponer un título alternativo, diseñar un logo o un cómic a partir de lo leído, etc.
Estrategias para leer textos de áreas artísticas. (Información que el profesor puede proporcionar al
alumno)
Una lectura adecuada de este tipo de textos te va a ayudar a:
1 Expresar tus emociones a través de los sistemas tecnológicos de comunicación y comprender las
emociones de los demás.
2 Contrastar las informaciones lingüísticas y no lingüísticas de las manifestaciones artísticas
comunicativas para comprenderlas en su totalidad.
3 Comprender el lenguaje de los medios de comunicación.
4 Diferenciar los significados objetivos y subjetivos de los textos artísticos.
5.- EVALUACIÓN DE LAS ACTIVIDADES
Debe realizarse, al menos, una actividad de comprensión lectora por tema en cada una de las materias. Es
aconsejable realizarla como introducción al tema (para poner en situación al alumnado, para detectar ideas
previas, etc.).
Las Jefaturas de Departamentos deben enviar estas actividades en formato digital a la dirección de correo
electrónico del coordinador del Área Sociolingüística, que será la persona responsable de coordinar y
supervisar las actividades y evaluar el grado de cumplimiento de estos principios. Esta evaluación se realizará al
finalizar cada trimestre.
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