13.05.2013 Views

Salvador dic2007 - Colegio del Salvador

Salvador dic2007 - Colegio del Salvador

Salvador dic2007 - Colegio del Salvador

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

ASOCIACION DE EXALUMNOS<br />

DE LA COMPAÑIA DE JESUS<br />

AÑO 17 - NUMERO 29 - Diciembre 2008<br />

Organo Organo<br />

de difusión de la Asociación de Exalumnos <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong><br />

ASIA, (Antiqui Societatis Iesu Alumni) <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> AMDG<br />

AV. . CALLAO 542 (C1022AAS) CIUDAD DE BUENOS AIRES - ARGENTINA


El Estado en Nosotros<br />

Nota: este escrito fue hecho por Romano Guardini<br />

en la última época de la República <strong>del</strong> Weimar 1929<br />

– 1930. No obstante, sus ideas sobre los fundamentos<br />

de la verdadera democracia permanecen invariablemente<br />

válidas, cobrando quizás hoy su máxima<br />

actualidad.<br />

Si observamos en torno nuestro, veremos<br />

como la inmensa mayoría vive totalmente ajena<br />

al Estado. Para muchos es un gran edificio, con<br />

diversos compartimientos; en el que muchos tramitan<br />

sus negocios, practican sus pasatiempos,<br />

viven y mueren sin preocuparse <strong>del</strong> edificio, solo<br />

pagan la renta para permanecer en él.<br />

Para otros es un ente con empleados, autoridades,<br />

un conjunto de personas que lo mueven, el<br />

resto hacen lo que le ordenan los anteriores.<br />

Por último están aquellos otros para los que el<br />

Estado es un enemigo con poder. Están en lucha<br />

con él, urden verdaderas trampas.<br />

Pero veamos ¿El Estado es una cosa mala,<br />

ridícula? ¿El Estado es una casa independiente<br />

de nosotros?<br />

Ciertamente no, el Estado no vive solo por sí,<br />

su autoridad dimana en última instancia de Dios.<br />

Si se olvida que también descansa sobre libres<br />

decisiones y actuaciones de cada particular, se<br />

convierte en una indignante tiranía. El Estado<br />

no es una cosa ya acabada, es algo que incesantemente<br />

se hace, pero que tiene que ser hecho por<br />

alguien y ese eres tú.<br />

En el Estado tiene que haber un orden encarnado<br />

en personas que saben que no mandan<br />

1<br />

Editorial<br />

esclavos, sino que tutelan el orden estatal entre<br />

hombres libres, y que estos obedecen no como<br />

sirvientes, antes bien como personas responsables<br />

ante Dios. El Estado en su más genuino ser<br />

es una tarea impuesta al hombre por Dios.<br />

El Estado tiene que ser algo vital; el contrapeso<br />

de nuestro individualismo personal. Una<br />

construcción poderosa, de existencia activa, de<br />

prodigio, construcción donde halle expresión y<br />

eco ni el reducido círculo de amigos o de familia<br />

ni el individuo sino el pueblo.<br />

Este Estado se hace vital cuando nosotros nos<br />

relacionamos con él de una manera activa, no<br />

entregándolo en manos de soldados y empleados<br />

irresponsables, sino trabajando nosotros mismos<br />

cuando nace vitalmente de la actitud. Cuando es<br />

“Estado de ti”.<br />

Por ello hablaremos <strong>del</strong> quehacer cívico y <strong>del</strong><br />

modo de realizarlo; es decir de la formación cívica<br />

(saber que es constitución, que leyes y que autoridades<br />

hay y que tiene que hacer un ciudadano).<br />

Para encajar bien en el Estado y en el pueblo<br />

se precisan mirada clara, recto juicio y seguros<br />

asideros. Es necesario tener una orientación política,<br />

esa que se va formando lentamente.<br />

Hombre de estado es aquel que logra una actitud<br />

plenaria correspondiente a su misión, el que<br />

ve con claridad lo que en rigor es el Estado,<br />

quien intuye lo útil y lo dañoso al Estado, quien<br />

posee una potencia creadora constructora y conservadora<br />

<strong>del</strong> Estado.<br />

El más profundo sentido <strong>del</strong> Estado es su<br />

soberanía. No por sí mismo sino por Dios, debe<br />

Continúa en la página 4


Organo de Difusión<br />

de la Asociación de<br />

Exalumnos de la<br />

Compañía de Jesús<br />

COMISION DE PRENSA<br />

Comisión de Prensa:<br />

Editor Responsable<br />

Enrique Turano<br />

Redacción<br />

R. P. Ignacio García Mata S.J.<br />

Carlos Balmaceda<br />

Augusto Mahlknecht<br />

Diseño y Diagramación<br />

Pablo Messil<br />

Año 17 - No 29 - Diciembre de 2008<br />

Publicación de Distribución Gratuita<br />

CONTENIDOS<br />

Editorial . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1<br />

Oración . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3<br />

Villancicos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9<br />

Tiempo pascual . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10<br />

Leyendas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11<br />

El Yantar - Humanidades . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14<br />

Simbolismo - “La belleza” . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 17<br />

Noticias <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong> . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 20<br />

La obra de la Compañía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .22<br />

Brebajes, Baltazar de Alcázar . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 26<br />

Encuentro Anual de Camaradería 2008 . . . . . . . . . . . 28<br />

La página <strong>del</strong> Exalumno . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 31<br />

Anécdotas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 35<br />

Asociación de Exalumnos - Anuncios . . . . . . . . . . . . 42<br />

XIV Congreso Latinoamericano de antiguos<br />

alumnos de la Compañía de Jesús . . . . . . . . . . . . . . .43<br />

Juegos, el barrilete . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .44<br />

Crédidos . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .45<br />

Tornéo de Golf - Copa San Ignacio . . . . . . . . . . . . . . .46<br />

Foto de Portada:<br />

Altar de la Pasión, Concepción<br />

Misión de Chiquitos, Santa Cruz - Bolivia<br />

2<br />

Comisión Directiva<br />

2008-2010<br />

Asociación de Exalumnos de la<br />

Compañía de Jesús<br />

A.S.I.A. – <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong><br />

Presidente<br />

Carlos Gianicolo<br />

Vicepresidente<br />

Alberto Rafael Corcuera Ibañez<br />

Secretario<br />

Roberto Andrés Poggio<br />

Prosecretario<br />

Norberto Luis Di Grazia<br />

Tesorero<br />

Enrique Ernesto Aldazabal<br />

Protesorero<br />

Fernando María Klappenbach<br />

Vocales<br />

Enrique Pedro Batemarco<br />

Adolfo José Caballero<br />

Martín Jorge Ibarzabal<br />

Enrique José Turano<br />

Vocales Suplentes<br />

Alberto Antonio Malaver<br />

Gustavo Carlos Maroto<br />

Andrés Fernando Moles<br />

Roberto Mariano Romero de Haz<br />

Comisión Revisora de Cuentas<br />

Carlos Alberto Balmaceda<br />

Augusto Leo Mahlknecht<br />

César Héctor Gabastou<br />

Revisores de Cuentas Suplentes<br />

Eduardo Mariano Montes de Oca<br />

Juan José Sforza


El buen pastor<br />

Pastor, que con tus silbos amorosos<br />

me despertaste <strong>del</strong> profundo sueño;<br />

tú, que hiciste cayado de ese leño<br />

en que tiendes los brazos poderosos;<br />

vuelve los ojos a mi fe piadosos,<br />

pues te confieso por mi amor y dueño,<br />

y la palabra de seguir te empeño<br />

tus dulces silbos y tus pies hermosos.<br />

Oye, Pastor que por amores mueres,<br />

no te espante el rigor de mis pecados,<br />

pues tan amigo de rendidos eres;<br />

espera pues, y escucha mis cuidados;<br />

pero, ¿cómo te digo que me esperes,<br />

si estás, para esperar, los pies clavados?<br />

“El buen pastor”<br />

Escultura en madera. Abadía de Stanbrook, Worcester<br />

Escribanía Alvarez Fourcade<br />

Tte. Gral. Juan D. Perón 315, 5to. Piso, Of. 19<br />

Tel. 4343-8665 / 4343-9952 - Fax 4331-2220<br />

E-mail: escribania@afourcade.com.ar<br />

3<br />

Oración<br />

Lope Felix de Vega<br />

1. Ver pág. 45


epresentar y defender la Majestad de Dios en el<br />

orden natural con todas sus necesidades, energías,<br />

pasiones, intereses y acontecimientos. Esto no<br />

quiere decir que tenga él que sostener la religión<br />

y la moralidad. Eso es cosa de la conciencia y de<br />

la Iglesia. El Estado descansa en la moralidad, la<br />

protege pero no la representa.<br />

Lo que él representa es la soberanía <strong>del</strong> Señor<br />

Altísimo en las cosas terrenas. Simplemente por<br />

el hecho de ser reconocido.<br />

Y hace vigente esta soberanía en el derecho.<br />

También el derecho tiene un fin: tutela la libertad,<br />

la vida y la propiedad. Pero tiene además un<br />

sentido más profundo que ese fin: que reine la<br />

justicia en todo acto y relación humana.<br />

Sin otro objetivo ulterior, únicamente por esto,<br />

por ser justicia; orden querido por Dios en el trato<br />

de personas libres. Tan pronto como desaparece la<br />

soberanía <strong>del</strong> Estado y no se ve en él más que utilidad<br />

pública, seguridad y actividad económica,<br />

muere lo esencial <strong>del</strong> Estado. Tan pronto como en<br />

el derecho sólo se ve una gran ordenación de la<br />

actividad pública y no esa soberanía de la que<br />

hablamos, muere lo esencial <strong>del</strong> Estado. Se convierte<br />

en una gigantesca empresa de industria y<br />

4<br />

comercio, en una compañía de seguros, en una<br />

sociedad de policías y carceleros.<br />

Ser político significa querer la soberanía.<br />

Quien tiene sentido político advierte con preocupación<br />

como se hunde la soberanía <strong>del</strong> Estado.<br />

El Estado se sitúa en la misma línea que una<br />

sociedad anónima. No se lo toma en serio. Sus<br />

leyes son despreciadas, no sólo quebrantadas<br />

–esto ha sucedido siempre– sino simplemente no<br />

tenidas en cuenta. ¿Por qué no tiene ya ningún<br />

valor el Estado? Porque ya no lo tiene en el corazón<br />

<strong>del</strong> hombre.<br />

Política significa que un pueblo actúa. ¿Pero<br />

qué significa “pueblo”? Los hombres con todo lo<br />

que son, el cuerpo y el alma y su modo de ser<br />

propio. Todo ello enlazado por esa fuerza original<br />

que lo organiza en una unidad viva, algo más<br />

que un mero montón de cosas particulares. Con<br />

todo, este pueblo así constituido, todavía no<br />

puede actuar. En el Estado adquiere capacidad<br />

de obrar, se hace capaz de historia.<br />

Por eso, los distintos tiempos reclaman distintas<br />

formas de Estado. A medida que se va formando<br />

la conciencia <strong>del</strong> individuo, éste quiere<br />

tomar parte en el Estado. La peculiar manera de<br />

Estudio Martínez Cuerda<br />

Abogados<br />

Bernardo de Irigoyen 88 - 4o “N” - Capital Federal<br />

Teléfonos 4334-3405 / 5931


ser <strong>del</strong> pueblo ha de traslucirse en la forma <strong>del</strong><br />

Estado, y su voluntad, en las empresas estatales.<br />

Política significa que un pueblo actúa y vive en<br />

el Estado.<br />

¿Pero cómo se logra semejante unidad de<br />

acción? Hay realmente pueblo y Estado cuando<br />

son reconocidas la opinión y voluntad populares.<br />

Cuando no domina un particular ni una clase.<br />

Cuando los particulares toman parte en la vida<br />

de este Estado y se saben responsables de ella.<br />

Cuando el Parlamento está para manifestar y<br />

formar la opinión y voluntad públicas y la autoridad<br />

para coordinar las fuerzas dispersas.<br />

Política es hacer realidad semejante pueblo y<br />

semejante Estado.<br />

Estos son los grandes ideales; pero vemos que<br />

de un pueblo y un Estado así no hallamos apenas<br />

rastro. Porque todo queda en lo abstracto, en<br />

palabras y en entusiasmo. Porque no se aproximan<br />

al mundo de los hechos.<br />

¿Por qué no hay una convicción profunda y<br />

común en nuestro pueblo? ¿Por qué no hay una<br />

fuerte y común voluntad? Existen muchas razones.<br />

Nos interesa ésta: porque el diputado X y el<br />

Z se han enfrentado indignamente en el<br />

Parlamento. Pues estos dos señores no se conducen<br />

así sólo hoy, sino mañana, y la semana que<br />

viene y en todas las sesiones. La escena se da<br />

dentro de los mismos partidos siempre que se<br />

reúnen para tratar cualquier asunto. Y si para<br />

completar el cuadro nos internamos en el mundo<br />

<strong>del</strong> periódico, que impresión tan triste el que<br />

siempre se esté con uñas y dientes el uno contra<br />

5<br />

Editorial<br />

el otro... Por eso no hay pueblo ni hay Estado.<br />

He hablado de los diputados. Pero no olvides<br />

que ese hombre que se sienta en escaño <strong>del</strong><br />

Parlamento es el mismo que mantiene una conversación<br />

en las calles con un conocido. Y el<br />

mismo que hace unos días trataba en casa sus<br />

negocios con el socio. ¿O piensas que se reviste<br />

de otro hombre tan pronto como pasa el portal<br />

<strong>del</strong> parlamento? Otro, por el contrario se<br />

encuentra con una opinión extraña y sabe escuchar;<br />

la examina, se esfuerza por llegar con el<br />

otro a una inteligencia en la coordinación <strong>del</strong> trabajo,<br />

ensancha su visión y, dentro de la inflexibilidad<br />

en las propias convicciones, busca lo<br />

común. Este es el que tiene verdadera actitud<br />

política. En él actúan pueblo y Estado.<br />

Estado en nosotros: ante los amigos, los<br />

padres, los hermanos, los condiscípulos, en el<br />

grupo, en el negocio, en la fábrica ¡Aquí se ve! El<br />

Estado no surge en el Parlamento ni con las<br />

autoridades, sino en el patio de la escuela, en la<br />

familia, en la tertulia, en el negocio. Quien aquí<br />

no lo edifica, temo que no lo edifique en ninguna<br />

parte.<br />

Otra consideración: el Estado consta de personas.<br />

Pero la persona es algo interior. Posee en<br />

sí un mundo vedado a los demás, por lo menos<br />

en su rinconcito más íntimo. ¿Cómo es posible<br />

que constituyan un Estado, si cada uno es para<br />

sí? Estado quiere decir que uno no vive aislado<br />

en su interior, consigo, sino abierto, con otros.<br />

Estado es comunidad. Es una de las fuerzas creadoras<br />

<strong>del</strong> pueblo y <strong>del</strong> Estado.


¿Pero si el lenguaje no es seguro? ¿Si ya no<br />

revela el interior? Consideremos tres casos característicos<br />

de lo que puede significar la palabra:<br />

promesa, juicio y opinión pública.<br />

Ante todo la promesa: la persona es libre.<br />

Puede decidirse por una cosa y luego mudar su<br />

camino.<br />

Mas ocurre una cosa importante: el hombre<br />

puede ligarse a sí mismo. Cuando él, por el honor<br />

de su persona, asegura a otro que hará tal cosa y no<br />

tal otra, se ata. No por necesidad, sino autónomamente.<br />

Esto se expresa por la palabra. En ella se<br />

manifiesta al otro que se ha atado respecto a él. Es<br />

la promesa. Ella hace que el uno esté seguro <strong>del</strong><br />

otro. Si la promesa es mutua, entonces surge el<br />

convenio. Promesa y convenio crean un campo<br />

firme entre dos personas. De este modo, coopera<br />

la palabra en la edificación <strong>del</strong> Estado: con la promesa<br />

y el convenio. En resumen, esto es fundamental<br />

en un Estado: que toda promesa se válida<br />

y todo contrato cerrado, seguro, de este modo<br />

vigorizaremos la fuerza <strong>del</strong> lenguaje como elemento<br />

creador <strong>del</strong> Estado. Si desvalorizamos la<br />

palabra debilitamos los lazos de las promesas.<br />

Destruimos la base de la comunidad.<br />

Otra significación de la palabra: el juicio. Es<br />

evidente la importancia que esto encierra en relación<br />

con el Estado. Los juicios crean el fundamento<br />

de la acción. Se expone la situación, se examina<br />

la capacidad de un individuo, se miden las<br />

dificultades y conforme a eso se obra. Es la condición<br />

de toda situación política: que ese fundamento<br />

sea seguro, que se considere bien la realidad y se<br />

juzguen objetivamente las circunstancias.<br />

Por fin, la opinión pública. ¿Qué significa? El<br />

parecer sobre determinado asunto de un promedio<br />

de los habitantes de una nación, de una<br />

comarca, o de los pertenecientes a una entidad<br />

cualquiera. La opinión pública es la que lleva el<br />

gobierno, también lo vigila y rectifica.<br />

La opinión pública la creamos nosotros.<br />

6<br />

Cuando contamos de un hombre algo que no es<br />

cierto; cuando juzgamos de él sin estar bien<br />

documentados, cuando transmitimos un rumor<br />

sin comprobarlo, destruimos la opinión pública.<br />

Todavía algunas indicaciones para meditar:<br />

hemos hablado de la soberanía como de un elemento<br />

esencial <strong>del</strong> Estado. Mas para que haya<br />

Estado es preciso que haya también pueblo.<br />

Política es también servicio al pueblo. ¿En que<br />

puede constituir tal servicio?<br />

Primero aprender a conocerlo. Pero conocerlo<br />

no solo por los libros y conceptos abstrusos, sino<br />

con los ojos interiores. Tenemos que sentirlo y<br />

crecer con él. Adquirir el sentido <strong>del</strong> pueblo, vivir<br />

el tipismo y modalidades de cada región. Sentir<br />

las plantas, los árboles y los animales. Sentir con<br />

los hombres de todas las razas; vivir el costumbrismo<br />

y tradiciones populares, los cuentos y<br />

leyendas; profesiones y oficios; la industria y el<br />

comercio; la lengua. Después hay que conocer<br />

ciudades, puentes, edificios, iglesias, catedrales;<br />

poesía, artes plásticas y música... Todo esto se<br />

puede hacer por placer estético, mas también<br />

para conocer al pueblo en la multiplicidad de<br />

íntima unidad de su vida, haciendo así de la palabra<br />

“pueblo” una realidad fuerte y sangrante.<br />

Segundo: defender sus modos populares y mirar<br />

por su salud. Desarrollar lo que nos va dando el<br />

pasado en el presente. Aquí hay mucho que<br />

hacer, para no empeñarse en fabricar un mundo<br />

bello, pero aparte, sustraído a la dura realidad.<br />

Hemos hablado de la unificación <strong>del</strong> pueblo<br />

en el Estado, con el fin de lograr una visión<br />

común y una voluntad y capacidad de acción<br />

poderosas. Pero esa visión no sólo se realiza horizontalmente<br />

–en el roce indiferenciado de unos<br />

con otros– sin verticalmente –de arriba hacia<br />

abajo y de abajo hacia arriba –autoridad– súbdito,<br />

mandato-obediencia. Mandar no quiere decir<br />

ruego, sino orden clara y terminante.<br />

Ciertamente hay que saber hacerlo. Se precisa


Batemarco Batemarco<br />

Abogados<br />

L. N. Alem 639 - 7o “I”<br />

Tel. 4312-3516 / 5235-2258 / 5238-3516<br />

Fax 4315-9077<br />

E-mail: estudio@batemarcoabogados.com.ar<br />

7


seriedad y respeto.<br />

Y obedecer no significa hacer algo por parecer<br />

amable, o por puro entusiasmo, sino porque ha<br />

sido mandado por quien tiene autoridad y poder<br />

para ello.<br />

Actitud política significa saber mandar y obedecer.<br />

Mas este arte se ha hecho sumamente raro.<br />

Y, a veces, incluso se encuentra uno con cosas<br />

muy curiosas; un perverso placer en los empleados<br />

en hacer sentir su poder al “pueblo”. Y en el<br />

“pueblo” el gustazo de hacer alguna jugada a los<br />

empleados. Sabotaje a la ley, podríamos decir. De<br />

un lado la tiranía, <strong>del</strong> otro la anarquía. Opresión<br />

y revolución. Un extremo llama siempre al otro.<br />

En el mandato claro, terminante, pero respetuoso;<br />

en la obediencia natural, pero íntegra es como<br />

se consuma el Estado y surge la capacidad de<br />

acción. Aún hay otra manera de unidad: la <strong>del</strong><br />

dirigente y los dirigidos. No es verdad que todos<br />

los hombres sean iguales. Son diferentes en su<br />

manera de ser; distintos en el modo y capacidad<br />

de su talento. La igualdad no consiste en que<br />

todos sean y valgan lo mismo, sino en que cada<br />

uno sea él mismo y en que desde su puesto<br />

pueda articularse en el todo.<br />

Actitud política significa apreciar y reconocer<br />

la distinción de capacidad.<br />

Y queda, por fin, una tercera unidad de arriba<br />

hacia abajo. Hay distinción de experiencia y<br />

madurez. El saber, la penetración, la mesura proceden,<br />

en gran parte, de la vida, de la edad. Y por<br />

supuesto amplitud de miras, madurez de juicio y<br />

previsión sólo se tienen después de haber aguar-<br />

8<br />

dado, de haber visto y experimentado mucho. Y<br />

también de esto depende la unidad <strong>del</strong> pueblo y<br />

<strong>del</strong> Estado, de la existencia y reconocimiento de<br />

este magisterio. El magisterio de la madurez, de<br />

la experiencia y de la sabiduría.<br />

Reflexiona alguna vez sobre todo esto, sobre<br />

lo que significa actitud política, y como sus raíces<br />

y principios se encuentran con la vida cotidiana.<br />

Hemos hablado después de lo público y de la<br />

palabra. A lo dicho habría que añadir que hay<br />

que liberarse de los grillos de la publicidad, de la<br />

borrachera de la palabra, de la falsía de las actitudes<br />

públicas, <strong>del</strong> poderío <strong>del</strong> mercado, <strong>del</strong> vértigo,<br />

<strong>del</strong> activismo, <strong>del</strong> afán de figurar al exterior.<br />

Habría que añadir también que hay que mantenerse<br />

claramente objetivos, austeros de espíritu y<br />

discretos. También esto es actitud política.<br />

En todo se da o no se da la actitud política.<br />

Según que exista o no en las cosas menudas de<br />

cada día, existirá o no después en la prensa, en las<br />

<strong>del</strong>iberaciones presidenciales, en las presidencias<br />

y campañas electorales, en las actividades <strong>del</strong><br />

partido, en el Parlamento, en la autoridad, en las<br />

relaciones con los demás pueblos.<br />

Resumen de: Carta novena: Sobre el Estado en nosotros.<br />

Cartas sobre autoformación. Romano Guardini<br />

Colección Obras de Romano Guardini (2. ver pag. 45)<br />

Ed. Lumen. 1996


Albricias, Albricias<br />

¡Albricias, albricias,<br />

albricias se den,<br />

por un Niño hermoso<br />

nacido en Belén!<br />

Las pajas <strong>del</strong> nido<br />

volando se van,<br />

en busca <strong>del</strong> Niño,<br />

y abrigo le dan.<br />

Adhesión<br />

9<br />

Villancicos<br />

“Navidad”, grabado en madera, Abadía de Stanbrook. Worcester<br />

ESTUDIO STUDIO PETRACCHI ETRACCHI<br />

ABOGADOS


San Mateo<br />

Capítulo XXVIII 1-6<br />

Avanzada ya la noche <strong>del</strong><br />

sábado, al amanecer <strong>del</strong><br />

primer día de la semana, vino<br />

María Magdalena con la otra<br />

María a visitar el sepulcro.<br />

2. A este tiempo se sintió<br />

un gran terremoto; porque<br />

bajó <strong>del</strong> cielo un ángel <strong>del</strong><br />

Señor, y llegándose removió la<br />

piedra, y sentose encima.<br />

3. Su semblante era como de relámpago, y era<br />

su vestidura como la nieve.<br />

4. De lo cual quedaron los guardas tan aterrados,<br />

que estaban como muertos.<br />

5. Mas el ángel, dirigiéndose a las mujeres, les<br />

10<br />

Tiempo Pascual<br />

“Las santas mujeres en el sepulcro”<br />

Pintura de la Abadía de Stanbrook. Worcester<br />

dijo: Vosotras no tenéis qué temer; que bien sé<br />

que venís en busca de Jesús, que fué crucificado:<br />

6. Ya no está aquí, porque ha resucitado, según<br />

predijo. Venid y mirad el lugar donde estaba<br />

sepultado el Señor.


La Viuda<br />

Leopoldo Lugones<br />

a Enrique Prins<br />

A Secundino Farías<br />

De esta suerte le pasó:<br />

Iba para caminiaga,<br />

Ahí la viuda le salió.<br />

Iba para Caminiaga<br />

En busca de una mujer<br />

Que faltaba, según dicen,<br />

De ese modo a su deber.<br />

Pronto cundió que era ella,<br />

Mas yo callarlo prefiero,<br />

Por no echarme en la ocasión<br />

Renombre de noticiero.<br />

Ningún crédito merece<br />

Quien se alaba así de listo.<br />

Y a veces es esas cosas<br />

Es calumnia hasta lo visto.<br />

Marchaba el hombre en su<br />

mula<br />

Que había elegido por buena.<br />

Ya iba a ser la media noche,<br />

Noche estrellada y serena.<br />

En aquella soledad<br />

Y aquel silencio profundo,<br />

Reinaba la paz <strong>del</strong> cielo<br />

Sobre los sueños <strong>del</strong> mundo.<br />

Caía el frescor <strong>del</strong> sereno<br />

Como una felicidad,<br />

Y en la luz de las estrellas<br />

Miraba la eternidad.<br />

Por lo firme y lo pareja<br />

Que era la cabalgadura,<br />

Se conocía que el jinete<br />

Tramaba bien su aventura.<br />

3. ver pág. 45<br />

Pues para andanzas de noche,<br />

Y si ha de dormir afuera,<br />

Prefiere la mula el cauto<br />

Que sospecha de hombre o fiera.<br />

Más como según se sabe,<br />

No hay mula que valga un flete,<br />

Tal preferencia por ella<br />

Que les explique compete.<br />

El caballo en que uno marcha,<br />

O cuando la soga lo deja,<br />

Se espanta de cualquier trapo,<br />

Hueso, pichi o comadreja.<br />

Pero bufando la mula,<br />

debe usted ponerse atento,<br />

Pues solamente se inquieta<br />

Por cosas de fundamento.<br />

11<br />

Leyendas<br />

4. ver pág. 45<br />

Así a muchos en sus trances,<br />

Más útil que el perro ha sido,<br />

Y por eso la prefiere<br />

Quien debe andar prevenido.<br />

Bueno es también que la deje,<br />

Sin montar no bien la ensilla,<br />

Tiempo de que se desahogue<br />

Rebuznando a la tropilla.<br />

Y con esa precaución,<br />

Y maneando la escoja,<br />

Irá en silencio y tranquilo<br />

Quien la enseñanza recoja.<br />

Era corsario el Farías,<br />

Jugador hasta de uñate,<br />

Y de esos que, como dicen,<br />

No tienen cruz en el mate.


La vez pasada, no más,<br />

En un velorio hizo estrago,<br />

Raboneándole la trenza<br />

A la médica <strong>del</strong> pago.<br />

Pues la daba por culpable<br />

De la muerte de aquel deudo,<br />

Aunque no le hizo más cura<br />

Que un fomento de pan leudo.<br />

Ella sabe sus palabras<br />

Para voltear la berruga.<br />

Destapa los ojos nublados<br />

Con la hiel de la tortuga.<br />

Y el tabardillo pintado,<br />

Haciendo parches ataja,<br />

Con dos oros recortados<br />

Del nueve de una baraja.<br />

Pero si hasta se ha corrido,<br />

Por mas que ella lo reproche,<br />

Que baila en la salamanca<br />

Los sábados a la noche.<br />

La salamanca que había<br />

Cerca <strong>del</strong> Pozo de Juancho,<br />

Donde solía estar siempre<br />

De centinela un carancho.<br />

El cura la hizo tapar,<br />

Pero yo a verla alcancé.<br />

Era una cueva en un cerro,<br />

Con unas lajas al pie.<br />

Allá las brujas tenían<br />

Con Satanás su parranda.<br />

Como no ha de meter susto<br />

La que en tales pasos anda.<br />

A la vislumbre serena,<br />

El camino es una cancha<br />

Que entre un jarillal y un cerco<br />

Frente al jinete se ensancha.<br />

Cuando, de golpe, la mula,<br />

Algún peligro sintiendo,<br />

Se le planta en los garrones<br />

Con un bufido tremendo.<br />

EDUARDO DUARDO F. F.<br />

CABALLERO<br />

CABALLERO<br />

LASCALEA LASCALEA<br />

ADHESIÓN<br />

12<br />

Debía de ser desalmado<br />

Quien le faltase al respeto.<br />

Por ahí colijan ustedes<br />

La entraña de aquel sujeto.<br />

Y saliendo de un atajo<br />

Que en el carril viene a dar,<br />

Ve una enlutada bajita<br />

Que por a<strong>del</strong>ante echa a andar.<br />

Mientras domina la mula,<br />

Y aunque lo consigue presto,<br />

Como a unas cuarenta varas<br />

De distancia se le ha puesto.<br />

Por ahí no había poblaciones,<br />

Paradero ni jagüel.<br />

Acaso era alguna moza<br />

Que andaba en las mismas qu´él.<br />

¿Mas, cómo, entonces, al freno,<br />

Sola se le aparecía,<br />

Y en su misma dirección<br />

A caminar se atrevía...?


Ni adonde podía ir tirando,<br />

Si era una mujer honrada,<br />

Por esos campos desiertos<br />

Y a medianoche pasada.<br />

Pero a que líos ajenos<br />

Se metía él sin excusa.<br />

Lo preciso era alejarse<br />

Cuanto antes de aquella intrusa.<br />

Con que, arrancando al galope,<br />

Quiso pasarla, pero ella<br />

También lijera anduvo<br />

Sin salirse de la huella.<br />

Y al apurarla otra vez,<br />

Ya con rigor y arrogancia,<br />

Apretó el paso de nuevo,<br />

Conservando la distancia.<br />

Claramente echó de ver<br />

Que iba estorbándolo adrede,<br />

Quien sabe con qué intenciones<br />

Que calcularle no puede.<br />

Y ahí notó al forzar la marcha,<br />

Como quien no tiene miedo,<br />

Que corría sin hacer ruido<br />

Ni alzar polvo con el ruedo.<br />

La cosa se ponía fea<br />

Y hasta quizá peliaguda.<br />

Más, por lo mismo, el audaz<br />

Quiso salir de la duda.<br />

Así es que clavando espuelas,<br />

Le intimó al punto: - ¡Señora,<br />

Párese por vida suya,<br />

Que anda haciendo así a deshora!<br />

Adhesión<br />

Pero aunque sangró a la mula<br />

Y la quemó a rebencazos,<br />

Vió que antes de írsele encima<br />

Se dejaría hacer pedazos.<br />

Y el bulto siguió su marcha<br />

Sin polvareda ni huella,<br />

Que más parecía, señor,<br />

Que iba volando a lo gurlla.<br />

Tuvo que hacerse Farías<br />

A cortar por entre el monte,<br />

Por no dejar su aprenda<br />

Chasqueada y con el apronte.<br />

Y siendo hombre de discurso,<br />

Y en la sierra como cabra,<br />

Pronto, no más, encontró<br />

Al filo <strong>del</strong> rumbo un abra.<br />

Pero quien le dice a usted,<br />

Que el bulto, como <strong>del</strong> suelo,<br />

Volvió a salirle a<strong>del</strong>ante ... -<br />

Entonces le entró recelo.<br />

Recién le allanó a volverse,<br />

Teniendo que echarse atrás,<br />

Porque con el otro mundo<br />

La guapeza está demás.<br />

Y en la soledad, la mula,<br />

Gimió como una persona,<br />

Aquel rebuzno <strong>del</strong> miedo<br />

Que al más pintado impresiona.<br />

Pues sólo quien lo ha sentido<br />

Comprende que fue fatal<br />

Que aflojase aquel valiente<br />

Sin descrédito de tal.<br />

Flia. Fernández Díaz<br />

13<br />

Leyendas<br />

Ahora llega lo mejor<br />

Que se lo contó, por cierto,<br />

La misma que lo esperaba<br />

Y lo había dado por muerto.<br />

Porque es cosa de no creer<br />

Y que las potencias pasma,<br />

Lo que sucedió en el rancho<br />

La noche de la fantasma.<br />

Sospechando su visita<br />

El marido y un hermano,<br />

Lo aguardaban tras la puerta<br />

Con el cuchillo en la mano.<br />

Desde el toque de oración<br />

Hasta que aclaró <strong>del</strong> todo,<br />

Allí estuvieron, resueltos<br />

a ultimarlo de aquel modo.<br />

De manera que llegando,<br />

Hallaba el fin de sus días.<br />

Así lo salvó la viuda<br />

A Secundino Farías.<br />

Dicen los que de esto saben,<br />

Que a veces tal artificio<br />

Puede venir de un finado<br />

Que nos debe algún servicio.<br />

Lo cierto es que el calavera<br />

Pronto se llamó a sosiego,<br />

Y hasta decían que acabó<br />

En un convento, de lego.<br />

Al final de aquella historia,<br />

Nadie ha de saberlo ya,<br />

Pero tal vez yo lo indague<br />

Cuando vuelva por allá.


El Yantar - Puchero de Navidad<br />

Antigua receta española<br />

Ayer convidé a Torcuato,<br />

comió sopas y puchero,<br />

media pierna de carnero,<br />

dos gazapillos y un pato;<br />

doyle vino y respondió:<br />

Tomadlo por vuestra vida,<br />

que hasta mitad de comida<br />

no acostumbro beber yo.<br />

Nicolás F. de Moratín (5. ver pág. 45)<br />

Guillermo Caballero<br />

IN MEMORIAM<br />

14<br />

Receta <strong>del</strong> libro “La cocina <strong>del</strong> cielo”,<br />

Carmela Miceli. Ed. Plaza & Janes


Ingredientes (para 6 personas):<br />

6 lts. de agua<br />

1/2 gallina<br />

1/2 kg de carne de ternera<br />

1 trozo de pierna de cordero<br />

1 pie de cerdo cortado por la mitad<br />

200 gr de patatas (papas)<br />

200 gr de boniatos (batatas)<br />

200 gr de garbanzos<br />

4 troncos de acelgas<br />

Sal<br />

Ingredientes para las pelotitas:<br />

150 gr de carne de ternera picada<br />

100 gr de carne de cerdo picada<br />

1 longaniza<br />

1 cucharada de piñones<br />

2 cucharadas de pan rallado<br />

1 trocito de pan<br />

Ralladura de 1/2 limón<br />

1 huevo<br />

Sal<br />

Hno. Pedro Pezzolo S.J.<br />

En la enfermería <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong>:<br />

una vida A.M.D.G.<br />

15<br />

Humanidades


Preparación:<br />

El día anterior, poner los garbanzos en remojo<br />

en agua templada con un poco de sal. En una<br />

olla con 6 lts. de agua se hierven la gallina, la<br />

ternera, el pie de cerdo y el trozo de pierna de<br />

cordero; se retiran la espuma y la grasa con una<br />

espumadera y se añaden los garbanzos. Se deja<br />

cocer a fuego medio una hora y media. Mientras<br />

tanto, prepara pelotitas poniendo en un cuenco<br />

las carnes picadas, la longaniza deshecha, el trozo<br />

de pan remojado, el pan rallado, la ralladura de<br />

limón, el huevo y los piñones.<br />

Mezclar bien y hacer unas albóndigas <strong>del</strong> tamaño<br />

de una mandarina, que se dejan en un plato.<br />

Transcurrida una hora y media, echar en la<br />

olla los boniatos, las patatas, las acelgas limpias y<br />

cortadas en trozos grandes y las pelotitas. Dejar<br />

hervir todo media hora más.<br />

Se sirve como primer plato el caldo, y de<br />

segundo se disponen en el centro de una fuente<br />

las carnes y las pelotitas, rodeadas de los garbanzos<br />

y las verduras.<br />

ADMINISTRACION FERNANDEZ HEVIA<br />

Jorge Fernández Loyarte<br />

Ignacio R. Fernández Loyarte<br />

˙<br />

Paraná 768 - 1ero “B”<br />

(1017) Capital Federal<br />

Administración de Consorcios<br />

Ventas<br />

Alquileres<br />

Servicios Inmobiliarios<br />

˙<br />

˙<br />

˙<br />

16<br />

En muchas zonas rurales es posible encontrar<br />

variantes <strong>del</strong> puchero, pero todas parten de la<br />

misma base: se trata de guisar, sin demasiadas<br />

complicaciones, un único plato con muchos<br />

ingredientes. Para que el resultado sea bueno<br />

sólo se requiere que la materia prima sea fresca y<br />

de buena calidad, fácil de encontrar en las granjas,<br />

así como una cocción lenta, que se prolongue<br />

durante toda una mañana.<br />

En Cataluña una de sus variantes es la escu<strong>del</strong>la<br />

i carn d´olla, que también hace acto de presencia en<br />

muchas de las comidas navideñas. Las mejores<br />

piezas de animales y las más frescas hortalizas son<br />

seleccionadas para elaborar el sabroso caldo de este<br />

día tan especial, que, filtrado, será la base donde se<br />

pondrán a hervir los galets, original pasta de gran<br />

tamaño que se servirá flotando en el caldo como<br />

primer plato. Las carnes, seleccionadas y dispuestas<br />

en una bandeja rodeadas de las legumbres y hortalizas,<br />

serán el segundo plato. Por fin llegarán los turrones<br />

que, acompañados con vino dulce moscatel,<br />

harán las <strong>del</strong>icias de la sobremesa.<br />

Tel.: 4815-2223 /2799 /2793<br />

E-mail: admhevia@infovia.com.ar


La Belleza - La Iglesia<br />

(Prólogo <strong>del</strong> libro de Joseph Ratzinger)<br />

“En el principio era el verbo”. Así comienza el<br />

Evangelio según San Juan. El Verbo es la<br />

Palabra. Nosotros, los hombres y mujeres de<br />

todos los tiempos, nos enriquecimos por la<br />

Palabra. Sobre esta idea he tratado de estudiar la<br />

obra de Gaudí, en la que me he integrado con mi<br />

propio trabajo profesional como escultor en el<br />

Templo Expiatorio de la Sagrada Familia de<br />

Barcelona desde el año 1978.<br />

Antoni Gaudí ideó, para esta obra arquitectónica,<br />

la ventanal de la nave central que en su<br />

parte exterior presenta frutos, en la zona superior<br />

<strong>del</strong> edificio, y hojas, en la zona inferior. Habría<br />

que pensar qué llevó al genio a actuar de esa<br />

forma para saber qué buscaba expresar. En su<br />

profundo estudio de la naturaleza, en su observación<br />

de la Creación, una vez más, había encontrado<br />

en los frutos y en las hojas una vía de catequesis<br />

y a la vez de expresión estética para<br />

hablarnos <strong>del</strong> valor de la Palabra de Dios y de<br />

cómo ésta acompaña la Historia de los hombres.<br />

Los frutos reciben el alimento gracias a la luz <strong>del</strong><br />

sol que llega a las hojas de cada planta. Sin las<br />

hojas y su función, nunca una planta llegaría a<br />

producir sus frutos. Todas las plantas necesitan la<br />

luz para alcanzar el fruto maduro. Así ocurre con<br />

nosotros, los hombres. Necesitamos la Palabra de<br />

Dios para madurar. Para nuestro desarrollo<br />

auténtico como personas, nos es imprescindible<br />

el alimento de la Palabra.<br />

El simbolismo de Gaudí, a la hora de colocar los<br />

frutos en la parte superior de la nave, y las hojas en<br />

la parte inferior, creo que da para una reflexión más.<br />

Nuestro mundo tiene frutos y hojas. Cuando el<br />

alma humana madura, sube, asciende hacia Dios y<br />

ya no necesita las hojas. Por eso los frutos ocupan el<br />

17<br />

Simbolismo<br />

Primer bosquejo de A. Gaudí<br />

nivel superior. Las hojas, los instrumentos que le<br />

han servido en la tierra para alimentarse en lo espiritual,<br />

quedan en el suelo, en la parte inferior <strong>del</strong> edificio,<br />

porque una vez que se está en contemplación<br />

<strong>del</strong> Dios Creador, <strong>del</strong> Sol que alimenta, ya no es<br />

necesaria la mediación de la Palabra por la que se<br />

nos ha transmitido el mensaje. La variedad de plantas<br />

con que Gaudí quería adornar la Sagrada<br />

Familia es, asimismo, reflejo <strong>del</strong> trabajo de Dios en<br />

la creación. Un Dios que en su amor infinito por<br />

sus criaturas se complace en la diversidad de las formas.<br />

De ahí que también en este trabajo escultórico,<br />

cada pieza esté compuesta de frutos y hojas de<br />

especies diferentes. Me ayudó a hacer esta reflexión<br />

el hecho de que en japonés, mi lengua materna<br />

“palabra” (kotoba) se escribe con dos símbolos que<br />

son “decir” y “hoja”. Un detalle más de como actúa<br />

Dios a través de nosotros, instrumentos e hijos<br />

suyos, que escogió a un escultor japonés para que<br />

todos pudiéramos gozar con el trabajo amoroso <strong>del</strong><br />

inteligente de Gaudí.


A este propósito me gustaría añadir una<br />

reflexión final. Siempre se considera la belleza de<br />

la obra gaudiniana en tanto que perfeccionamiento<br />

de las cosas materiales a través <strong>del</strong><br />

trabajo humano, en este caso <strong>del</strong> arquitecto.<br />

Quisiera añadir a esto que no sólo se trata de un<br />

perfeccionamiento que va en una dirección. No<br />

sólo Gaudí hizo obras bellas, sino que en el acto<br />

de hacerlas fue creciendo también él en belleza<br />

de espíritu. Su trabajo, santificado y santificador,<br />

ofrecido para la gloria de Dios, se convirtió en<br />

alabanza al Creador, en oración. Al mismo tiempo,<br />

generó en el artista un crecimiento en las virtudes<br />

tanto cardinales como teologales, lo que<br />

sin duda nos hace creer hoy, en pleno siglo XXI,<br />

que nos encontramos ante un hombre santo,<br />

ejemplo para tantas personas que viven su<br />

vocación cristiana en medio <strong>del</strong> mundo. Dios<br />

hizo partícipe de su Belleza infinita a cada obra<br />

gaudiniana, pero al mismo tiempo su gracia perfeccionó<br />

a Antoni Gaudí, lo hizo bello a los ojos<br />

Adhesión<br />

El Corte Corte<br />

Inglés S. S.<br />

A.<br />

San Martín 201 - 4to. Piso<br />

Tel. 4394-1010<br />

Buenos Aires - Argentina<br />

corteingles@iplanmail.com.ar<br />

corteingles@gmail.com<br />

18<br />

<strong>del</strong> Cielo y de toda la Humanidad. Es esa belleza<br />

propia de los santos la que nos llama a seguir su<br />

camino, ya que todo hombre, en su naturaleza,<br />

contiene es llamada perfección, de la que la<br />

belleza es inherente. Encontramos hoy bella la<br />

obra de Gaudí y encontramos bella la biografía<br />

de este hombre, cuya trayectoria vital da muestras<br />

de mejoramiento a lo largo <strong>del</strong> tiempo, conforme<br />

se adentraba más en su trabajo.<br />

Se dice que Gaudí construía el templo más<br />

bello <strong>del</strong> mundo. Pero en realidad es al revés: la<br />

Iglesia le construía a él. La belleza más grande no<br />

es la <strong>del</strong> templo, es la <strong>del</strong> espíritu.<br />

Me han pedido que escriba un prologo a un<br />

libro <strong>del</strong> Papa. Pero yo sólo soy una pequeña piedra.<br />

Todo lo que puedo hacer es limpiar la entrada al<br />

gran palacio de la palabra <strong>del</strong> Papa, y que el lector<br />

entre libremente en él y disfrute. Estoy orgulloso de<br />

ser una pequeña piedra parte de este gran palacio.<br />

Etsuro Sotoo, escultor (6. ver pág. 45)<br />

7. Imagen página opuesta ver pág. 45


NOTICIAS DEL COLEGIO DEL SALVADOR 2008<br />

120 no son 140... pero sirve...<br />

Riquezas Jesuíticas<br />

¡Cómo contrastan, según algunas personas, con la<br />

pobreza de Cristo! – Cosa curiosa: este aserto tiene<br />

una vitalidad centenaria o multicentenaria. Ya era<br />

popular en tiempo de San Ignacio. Cuando en 1767<br />

y 1768 sobrevino, en los dominios españoles, la<br />

expulsión de los Jesuitas, se esperó hacer todo un<br />

negocio con sus tesoros. Fueron los Jesuitas sorprendidos<br />

y arrestados; se examinaron sus libros de cuentas<br />

y sus arcas de caudales: éstas estaban vacías y<br />

aquellos sólo acusaban deudas. Entonces se dijo que<br />

habían enterrado los millones, y todo el mundo sabe<br />

cómo en la Argentina una compañía londinense vino<br />

años atrás a desenterrar los dichos tesoros... ¡Tenía<br />

hasta las señales más ocultas <strong>del</strong> rico hallazgo!<br />

Yo he recorrido bastantes casas jesuíticas, en Europa<br />

y en América, y he vivido en ellas por algunos años, a lo<br />

menos por algunos meses o semanas, y el hecho es este:<br />

ni en las casas y colegios de Nueva York, Washington,<br />

París, Bruselas, Berlín, Madrid y demás que he visitado,<br />

he visto tales tesoros ni indicios algunos de su existencia.<br />

En ninguna casa, ni en las fiestas más grandes, he<br />

visto vajilla de lujo, o algo por el estilo. Desde el<br />

Noviciado de Córdoba hasta el <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> de<br />

Buenos Aires he usado platos desportillados y cubiertos<br />

tan sencillos como los más ordinarios en la casa más<br />

humilde y modesta.<br />

Hace justamente 50 años que no sé lo que es tener<br />

20<br />

habitualmente un peso moneda nacional en mi bolsillo.<br />

Cada vez que salgo de casa, pido cuarenta u ochenta<br />

centavos, según sean dos o cuatro tranvías u<br />

ómnibus que he de tomar para las diligencias que<br />

tengo que hacer. Más de una vez, estando fuera de<br />

casa, he pedido unos centavos donados o prestados,<br />

para poder regresar a casa.<br />

Tienen los Jesuitas, y es verdad, magníficas y<br />

hermosas iglesias, pero son para la gloria de Dios y<br />

para provecho, devoción y bienestar de los fieles que<br />

a ellas acuden. Tienen grandes colegios y hasta universidades,<br />

pero estas instituciones educacionales<br />

son para los estudiantes que quieran con provecho<br />

y comodidad cursar sus estudios. Tienen observatorios<br />

e institutos científicos, pero son para el a<strong>del</strong>antamiento<br />

y progreso de las ciencias.<br />

Nunca y en ninguna parte, han sido los observatorios<br />

o los colegios un negocio económico. Por eso<br />

los colegios de los Jesuitas, si son grandes, suelen<br />

tener grandes deudas, y si son pequeños pequeñas<br />

deudas, pero las deudas nunca faltan. Fundados sin<br />

dotación económica, se sostienen gracias a la<br />

dotación humana de la generosidad y lealtad de sus<br />

profesores y superiores. De otra suerte estarían ya<br />

todos en plena bancarrota.<br />

* Tomado de: LOS JESUITAS. Editorial Difusión.<br />

1952 Buenos Aires. Guillermo Furlong Gardif S.J.<br />

1889-2009<br />

Homenaje de la Asociación de Exalumnos a los Padres de la Compañia<br />

de Jesús en los 140 años de la Fundación <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong><br />

1868 - 2008


23<br />

La obra de la Compañía<br />

8. Imágenes ver pág. 45


Baltazar de Alcázar<br />

Baltazar de Alcázar (1540-1606). Poeta festivo, de vena andaluza, se caracteriza por su extraordinaria<br />

soltura, cualidades que sobresalen en esta composición de la cena<br />

Una cena<br />

En Jaén, donde resido,<br />

vive don Lope de Sosa,<br />

y diréte, Inés, la cosa<br />

más brava de él que has oído.<br />

Tenía este caballero<br />

un criado portugués...<br />

Pero cenemos, Inés<br />

si te parece, primero.<br />

La mesa tenemos puesta,<br />

lo que ha de cenar junto,<br />

las tazas <strong>del</strong> vino a punto,<br />

falta comenzar la fiesta.<br />

Comience el vinillo nuevo,<br />

y échole la bendición;<br />

yo tengo por devoción<br />

de santiguar lo que bebo.<br />

Franco fue, Inés, este toque;<br />

pero arrójame la bota:<br />

vale un florín cada gota<br />

de aqueste vinillo aloque.<br />

¿De que taberna se trajo?<br />

Mas ya..., de la <strong>del</strong> Castillo;<br />

Diez y seis vale el cuartillo,<br />

no tiene vino más bajo.<br />

Por nuestro Señor, que es mina<br />

la taberna de Alcocer;<br />

grande consuelo es tener<br />

la taberna por vecina.<br />

Si es o no invención moderna,<br />

vive Dios que no lo sé,<br />

pero <strong>del</strong>icada fué<br />

la invención de la taberna.<br />

Por que allí llego sediento,<br />

pido vino de lo nuevo,<br />

mídenlo, dánmelo, bebo<br />

26


págolo y voyme contento.<br />

Esto Inés, ello se alaba,<br />

no es menester alaballo;<br />

sólo una falta le hallo,<br />

que con la princesa se acaba.<br />

La ensalada y salpicón<br />

hizo fin: ¿qué viene ahora?<br />

la morcilla, ¡oh gran señora,<br />

digna de veneración!<br />

¡Qué oronda viene y que bella!<br />

¡Qué través y enjundia tiene!<br />

paréceme, Inés, que viene<br />

para que demos en ella.<br />

Pues sus, encójase y entre,<br />

que es algo estrecho el camino.<br />

No eches agua, Inés, al vino;<br />

no se escandalice el vientre.<br />

Echa de lo más añejo<br />

porque con más gusto comas;<br />

Dios te guarde, que así tomas,<br />

como sabia, mi consejo.<br />

Mas dí ¿no adoras y precias<br />

la morcilla ilustra y rica?<br />

¡Como la tradición pica!<br />

tal debe tener especias.<br />

¡Qué llena está de piñones!<br />

morcilla de cortesanos,<br />

hechas de cebar lechones.<br />

El corazón me revienta<br />

de placer; no se de tí.<br />

¿Cómo te va? Yo por mí<br />

sospecho que estás contenta.<br />

Alegre estoy, vive Dios;<br />

mas oye un punto sutil:<br />

27<br />

¿No pusiste allí un candil?<br />

¿Cómo me parecen dos?<br />

Pero son preguntas viles;<br />

ya sé lo que puede ser:<br />

con este negro beber<br />

se acrecientan los candiles.<br />

Probemos lo <strong>del</strong> pichel,<br />

alto licor celestial;<br />

no es el aloquillo tal,<br />

ni tiene que ver con él.<br />

¡Qué suavidad! ¡qué clareza!<br />

¡Qué rancio gusto y olor!<br />

¡Qué paladar! ¡que color!<br />

¡Todo con tanta fineza!<br />

Mas el queso sale a plaza,<br />

la moradilla va entrando,<br />

y ambos vienen preguntando<br />

por el pichel y la taza.<br />

Prueba el queso, que es exremo,<br />

el de Pinto no le iguala;<br />

pues la aceituna no es mala,<br />

bien puede bogar su remo.<br />

Haz pues, Inés, lo que sueles,<br />

daca de la bota llena<br />

seis tragos; hecha es la cena,<br />

levántense los manteles.<br />

Ya que, Inés, hemos cenado<br />

tan bien y con tanto gusto,<br />

parece que será justo<br />

volver al cuento pasado.<br />

Pues sabrás, Inés hermana,<br />

que el portugués calló enfermo...<br />

las once dan, yo me duermo;<br />

quédese para mañana.<br />

Brebajes


Encuentro Anual de Camaradería - Año 2008<br />

El segundo viernes <strong>del</strong> mes de noviembre, como todos<br />

los años, se realizó el Encuentro Anual de Camaradería de<br />

los exalumnos.<br />

Luego de una misa concelebrada en la Capilla de alumnos<br />

pasamos al patio <strong>del</strong> Sagrado Corazón donde tuvo<br />

lugar la recepción.<br />

La cena, broche <strong>del</strong> encuentro, se realizó en el remo<strong>del</strong>ado,<br />

con mucho acierto, Salón de Actos. Durante la cena, actuó el<br />

28<br />

coro de la Asociación de Padres, interpretando varias piezas<br />

corales. Su actuación fue realmente de muy alto nivel.<br />

Posteriormente hizo uso de la palabra el Presidente de<br />

la Asociación de Exalumnos, Ing. Carlos Gianícolo y luego<br />

se entregaron medallas a quienes esponsorearon actividades<br />

de la Asociación.<br />

El texto <strong>del</strong> discurso <strong>del</strong> Pte. se puede ver en nuestro<br />

sitio web, junto con otras fotos <strong>del</strong> encuentro.


29<br />

Encuentro anual<br />

El Presidente de la Asociación de Exalumnos Carlos Gianicolo


25 Años.<br />

50 Años. De izquierda a derecha. Primera fila: Miguel A. Basombrio. Seguda fila: Ernesto Mendizábal, Faustino Legón, Guillermo Bogo,<br />

Osvaldo Ferrero, Carlos Falchi, Gustavo Perrotta, Juan Saénz Cavia, Leopoldo Montes de Oca. Tercera fila: Manuel Escasafiy, Carlos<br />

Badino, Juan Felizzola, Amilcar Argüelles, Miguel Sussini, Pedro Balbiani, Adolfo Maggi. Cuarta fila: Juan Smart, Luis Borghi, Luis Hermida,<br />

Carlos Vermal, Marcos Pejacsevich, Miguel Machín, Luis Saint Germes.<br />

30<br />

10. Fotos ver pág. 45


Mudanza urgente, se solicita<br />

La Sacristía y sus cuadros<br />

En la manzana <strong>del</strong><br />

colegio hay un tesoro<br />

escondido que merece<br />

ser expuesto en un lugar<br />

más adecuado. Ad<br />

Mayorem Dei Gloriam.<br />

No es producto de ningún<br />

hallazgo durante las<br />

recientes excavaciones<br />

en el sector que da sobre<br />

Lavalle. Ni doblones de<br />

plata ni puntas de flecha<br />

talladas por los querandíes.<br />

Nada de eso. Se<br />

encuentra en el lado<br />

opuesto <strong>del</strong> predio y pocos saben de él. Está allí<br />

desde hace más de setenta años, sin el cuidado<br />

necesario.<br />

Gracias a su ojo avizor, condición <strong>del</strong> buen<br />

crítico de arte, sí sabe de qué se trata Rafael<br />

Squirru, ex alumno egresado con medalla de oro<br />

en los años 40, de grato recuerdo para quienes<br />

luego fuimos discípulos suyos en las viejas aulas<br />

que se levantaban en el ángulo formado por Río<br />

Bamba y Tucumán. Rafael, como el profeta,<br />

hasta ahora clamó en el desierto pidiendo mostrarlo<br />

al público. Oídos sordos recibieron sus justas<br />

demandas. ¿Hasta cuándo?<br />

Pero vayamos paso a paso, según se estila en el<br />

juego de la búsqueda <strong>del</strong> tesoro.<br />

Lugar recoleto donde se guardan bajo llave los<br />

objetos destinados al culto, la sacristía es también<br />

en nuestros templos obligado vestuario de quienes<br />

han de oficiar las celebraciones litúrgicas.<br />

Para quien allá lejos y hace tiempo fue monaguillo<br />

en la iglesia <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> (bien afilados los<br />

31<br />

La Página <strong>del</strong> Exalumno<br />

“Piedad”, obra de Raúl Guillermo Posestá<br />

latines a fin de responder de murmullo en murmullo<br />

al celebrante, desde la primera antífona<br />

hasta el Deo gratias final de la misa), visitar después<br />

de tanto tiempo aquel vasto recinto, en el<br />

cual también los monaguillos nos revestimos<br />

alguna vez con roquete de puntillas, resulta un<br />

feliz disparador de la memoria. Ya son sombras<br />

los piadosos oficiantes de antaño, pero allí adentro<br />

nada ha cambiado, todo sigue igual: la luz<br />

penumbrosa, la misma serena quietud, los dos<br />

altos ventanales enrejados que se cierran sobre el<br />

patio de alumnos, al medio la larga mesa rectangular<br />

de madera noble con patas taraceadas, contra<br />

dos de las paredes los empinados armarios al<br />

tono donde se preservan las capas pluviales reservadas<br />

para las grandes ceremonias, las dalmáticas,<br />

las ricas casullas de satenes, rasos y terciopelos<br />

recamadas con volutas vegetales, hojas y florones,<br />

bordados en hilo de oro y adornadas con<br />

otras maravillas de la mejor pasamanería.<br />

También está plegado ahí el palio de las proce-


siones con exposición <strong>del</strong> Santísimo. De la pintura<br />

<strong>del</strong> cielorraso con el emblema coronado de<br />

la Compañía de Jesús, entre grisalla y guirnaldas<br />

con flores y frutos, queda poco: la humedad es un<br />

cáncer implacable y para combatirla se requieren<br />

restauradores expertos (hoy nadie regala su trabajo;<br />

menos aun los cirujanos). Mejor conservadas<br />

se ven las dos enormes telas situadas a ambos<br />

lados de los ventanales —de temas religiosos—,<br />

tal cual suele ocurrir en el país con todos los cuadros<br />

de sacristía, a excepción de algunos de época<br />

en las iglesias <strong>del</strong> período colonial.<br />

Aquí está el tesoro. Entre aquellos dos cuadros<br />

se destaca, en la parte superior <strong>del</strong> muro,<br />

una tercera pintura, apaisada, de menores dimensiones.<br />

La misma que desvela a Squirru. Es una<br />

“Piedad” que trasunta la misma grandeza espiritual<br />

de los maestros <strong>del</strong> Renacimiento italiano.<br />

Fue donada por su autor, el ex alumno Raúl<br />

Guillermo Podestá (l899-l970), y merecería integrar<br />

el patrimonio <strong>del</strong> Museo Nacional de Bellas<br />

Estudio López Olaciregui<br />

ABOGADOS<br />

Diego López Olaciregui<br />

Marcelo Javier Ferrería<br />

Beatriz Dora Nofal<br />

Lavalle 1447 - 1ero. “C”<br />

Radio Mensaje: 4377-1243<br />

Fax.: 4371-1525 / 4373-2305 (rotativas)<br />

(1048) BUENOS AIRES - REPUBLICA ARGENTINA<br />

E-mail: dlo@lopezolaciregui.com.ar<br />

32<br />

Artes. Su tema —las santas mujeres que acompañan<br />

a la Santísima Virgen en la piadosa tarea<br />

de velar al Cristo yacente— se dijera resuelto<br />

para siempre por esos artistas <strong>del</strong> pasado, pero<br />

ésta no desmerecería, en absoluto, si entrara en<br />

cotejo con las de ellos.<br />

En la revista El <strong>Salvador</strong> de julio de l939, con<br />

la firma de un señor Mauricio Ferrari Nicolai se<br />

encomia la atmósfera de pesar que rodea la escena,<br />

la majestuosa serenidad <strong>del</strong> cuerpo de<br />

Jesucristo y la veracidad gestual de los personajes.<br />

También las pinceladas amplias, con superposición<br />

de colores, entre los que predominan las<br />

tonalidades oscuras. Al contemplar hoy la tela<br />

cabe admitir la justicia de aquel comentario, y<br />

lamentarse asimismo de que, para la mayoría de<br />

los “conocedores” actuales, el de Podestá sea un<br />

nombre desconocido en la plástica argentina, a<br />

pesar de que el más autorizado de nuestros historiadores<br />

de arte, José León Pagano, le da una<br />

generosa entrada en su monumental obra sobre


El Arte de los Argentinos.<br />

Pero, ¿quién fue Podestá? Nacido en los pagos<br />

de Quilmes, de ancestros ligures, a los l6 años de<br />

edad su vocación lo lleva a velar sus armas (es<br />

decir, los pinceles) junto al maestro Moretti;<br />

desde entonces jamás los dejará a un lado. Joven<br />

aún viaja por los países latinos de Europa visitando<br />

museos y galerías, hasta que descubre en<br />

los maestros de Toscana las normas afines a sus<br />

anhelos. Producida esta iluminación se instala<br />

cerca de París, en Neuilly-sur-Seine, donde se<br />

encierra a trabajar durante diez años en un luminoso<br />

atelier, sin exponer prematuramente y<br />

haciendo vida recoleta como cuadra a todo verdadero<br />

artista. Su primera muestra, en l933,<br />

patrocinada por la Cámara de Comercio<br />

Argentina, fue elogiosamente recibida por la crítica<br />

francesa. Artista multifacético, también lo<br />

sedujo la escultura. Un gran Cristo suyo, en<br />

caoba, lo adquirió poco después el abate Loutil<br />

(popular novelista de la época conocido por su<br />

seudónimo de Pierre L´Ermite) para su iglesia<br />

parroquial St. Francois de Sales, de la avenida<br />

Wagram. Al año siguiente expuso en los salones<br />

de la porteña galería Witcomb, sobre la calle<br />

Tucumán 1438 - P. 2 o<br />

(1050) Buenos Aires<br />

Argentina<br />

33<br />

La Página <strong>del</strong> Exalumno<br />

Administración de Consorcios<br />

Inmobiliaria Sud Americana S.A.<br />

Dr. Pedro R. Pagés<br />

Presidente<br />

E-mail: ad_insa@velocom.com.ar<br />

Florida, setenta y cuatro obras —al óleo, al pastel,<br />

dibujos, sanguinas, aguafuertes— y cincuenta<br />

y tres de ellas se inspiraban en motivos religiosos<br />

derivados <strong>del</strong> Nuevo Testamento.<br />

Indica un añejo Quién es Quién que en la<br />

iglesia de la colonia de menores de Marcos Paz<br />

hay siete cuadros suyos, amén <strong>del</strong> Vía Crucis y<br />

que, el cementerio de la Chacarita, posee un<br />

Cristo yacente y otra Piedad, de gran tamaño,<br />

ubicada en una de las capillas.<br />

En síntesis: si la sacristía no es un espacio<br />

público, si en la iglesia <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> no hay cabida<br />

para más pinturas, si la obra de Podestá merece<br />

ser disfrutada por todo el mundo y no quedar,<br />

como hasta el momento, egoístamente reservada<br />

a la incierta edificación de los religiosos que<br />

pisen la sacristía, es hora de que la o las autoridades<br />

correspondientes le lleven el apunte a las<br />

demandas de Rafael Squirru y la exhiban, por<br />

fin, en un lugar más adecuado. ¿La sala de visitas<br />

<strong>del</strong> colegio, quizás? Que Dios ilumine a quien<br />

deba tomar la decisión de mudar allí, o a algún<br />

lugar mejor, si lo hubiere, tan magnífico óleo.<br />

Tel. 4371-3010 /9449<br />

4374-5458<br />

Fax: (5411) 4372-1389 (NAC)<br />

Carlos Bègue<br />

12. ver pág. 45


Anécdotas<br />

35<br />

Anécdotas<br />

Hecho acontecido; noticia; suceso particular; sucedido y de orden particular, de algún personaje<br />

famoso. Hoy también se aplica a los relatos intencionados de: algún dicho ingenioso;<br />

rasgo interesante serio, festivo o ridículo. Así definen los diccionarios la “Anécdota”. Estos<br />

primeros “140 años” que festeja el <strong>Colegio</strong> nos llevó a iniciar esta nueva sección.<br />

Colégio <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong>, Buenos Aires 1918<br />

Cincuentenario <strong>del</strong> <strong>Colegio</strong>. Fiesta Social.<br />

Discurso <strong>del</strong> Dr. Fresco (11.ver pág. 45)<br />

1868<br />

Aunque su permanencia en el<br />

<strong>Colegio</strong> fue breve, pues al siguiente año<br />

ya no lo vimos más, recuerdo también<br />

al padre Puigdollers, ministro <strong>del</strong> colegio<br />

y por tanto el que se encontraba<br />

más vinculado con nosotros y nuestras<br />

familias. Alto, muy alto, <strong>del</strong>gado, pelirrojo<br />

y pecoso, alegre y decidor. Él<br />

mismo decía que era un jesuita a la<br />

moderna y que el colegio debía vivir la<br />

vida <strong>del</strong> siglo, no quedándome duda de<br />

que a él le debíamos un único y raro<br />

paseo, porque creo que nunca se ha<br />

repetido, que ese año de 1869 hicimos<br />

a la chacra de don Ezequiel Ramos<br />

Mejía en el paraje que lleva su nombre.<br />

No recuerdo si todo el colegio fue al paseo. Creo<br />

que no. La mayor parte fue por tren, acompañada<br />

por Rodolfo Peña, muerto hace pocos años,<br />

quien tocaba admirablemente el tambor. Los<br />

otros a caballo; yo entre ellos. Conservo en mi<br />

retina los 20 o 30 caballos alineados en la calle<br />

Callao esperándonos, y nuestra marcha por<br />

terrones y huellas de la interminable calle<br />

Rivadavia, a través de los campos envueltos aún<br />

en la neblina de la fresca mañana. Ese escuadrón<br />

Referencias - Zona edificada: A. Hasta 1779 / B. Hasta 1814 / C. hasta<br />

1866 / D. hasta 1905 / E. Hasta 1930 / F. Zona no edificada<br />

iba bajo el mando de tres prefectos. Uno el padre<br />

Mazarrasa; el otro no estoy seguro si era el padre<br />

Gasset; y el tercero, ¿se acuerda <strong>del</strong> padre<br />

Sánchez? era usted ¡Ah! Lo veo aún con la sotana<br />

remangada, joven, fuerte, clavado en su montura<br />

como un buen criollo!<br />

¡Que día glorioso! Paseos por la chacra, excursión<br />

a San Justo y al Río Matanza, gran almuerzo<br />

bajo los árboles, recepción en los salones de<br />

don Ezequiel, versos y música por algunas de las


Bajos de la Recoleta con anterioridad a 1870<br />

hijas y sobrinas de los dueños de casa, y llegada<br />

al <strong>Salvador</strong>, con la noche ya cerrada, en el preciso<br />

momento en que desembocaban por la calle<br />

Lavalle los demás muchachos que habían ido en<br />

tren y que volvían siempre precedidos por el<br />

tambor de Rodolfo Peña, que batía y batía marcha,<br />

mientras ladraban y ladraban todos los<br />

perros <strong>del</strong> lejano barrio.<br />

1870<br />

Invariablemente, los jueves y domingos, sali-<br />

Rafael Squirru<br />

Mensajero en apuros<br />

Por Carlos Bègue. Egresado 1943 (12. ver pág. 45)<br />

1950<br />

A Rafael le debo, le debemos, muchas cosas<br />

buenas quienes fuimos sus alumnos en El<br />

<strong>Salvador</strong>, desde habernos mostrado que una sonrisa<br />

o un amanecer descritos por Homero ateso-<br />

Adhesión<br />

36<br />

mos a paseo de dos en dos, por brigadas, y bajo el<br />

cuidado <strong>del</strong> Prefecto respectivo; de levita, tal como<br />

suena, y con gorra galoneada de oro, y los que las<br />

habían obtenido, con sus medallas al pecho.<br />

Todavía les conservo gratitud a los pillos de nuestra<br />

tierra, pues jamás recibimos ninguna pedrada.<br />

La calle Callao, en dirección al Norte, era<br />

generalmente nuestro destino. Cuando se llegaba<br />

a la calle Córdoba, ya terminaba, puede decirse la<br />

edificación, que, aunque mala y pobre, era hasta<br />

allí compacta. Después seguía entre quintas y<br />

terrenos abandonados, cercados con zanjas llenas<br />

de moras y tunas, hasta el sitio que ocupa hoy día<br />

el <strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> Sagrado Corazón, Callao y Juncal,<br />

donde penetrando por un portón donde sólo<br />

habían quedado los pilares coloniales, tomábamos<br />

campo abierto hasta salir por detrás de la<br />

Recoleta, costeando la quinta de D. Samuel Hale<br />

para llegar al Río, cuyas toscas y orillas conocíamos<br />

como nadie desde Palermo hasta el Retiro,<br />

donde detrás de la estación <strong>del</strong> F. C. <strong>del</strong> Norte,<br />

existía una antigua batería.<br />

ran toda su fuerza gracias a que las imágenes que<br />

se suceden en los cantos de la Iliada y la Odisea<br />

encuentran la más honda raigambre en la lengua<br />

corriente de aquellos lejanos habitantes de la<br />

Hélade (¡oh, benditas lecturas sobre la guerra de<br />

Troya por fuera <strong>del</strong> programa oficial!) hasta tener<br />

el corazón abierto a los misterios <strong>del</strong> arte para así<br />

dejarnos infundir por sus maravillosas alegrías.<br />

Oírlo a tal maestro, aun más allá de evocar la


cólera de Ulises o las enseñanzas de Aquiles, el<br />

mejor guerrero griego, conlleva el secreto deseo<br />

de ser su amigo y, de hecho, algunos de sus discípulos<br />

lo hemos sido a lo largo de la vida. Un<br />

privilegio: ¿alguien podría dudarlo?<br />

ESTUDIO CORCUERA IBAÑEZ<br />

Abogados - Consultores<br />

Uruguay 627 - Piso 2º<br />

Buenos Aires<br />

37<br />

Anécdotas<br />

Corre la cuarta década <strong>del</strong> siglo veinte.<br />

Convencido de que el espíritu que respiran las<br />

palabras de los antiguos pobladores de las costas<br />

<strong>del</strong> mar Egeo conservan para siempre su frescura<br />

y los pensamientos todo su vigor. Rafael, cuan-<br />

Tel/Fax: (54-11) 4371-4627<br />

corcuera@estudiocorcuera.com.ar


do le toca en suerte cumplimentar la parte literaria<br />

en cierto acto de proclamación de dignidades,<br />

apela a los trágicos griegos para ennoblecer la<br />

trágica ceremonia. Una auténtica revolución de<br />

los usos y costumbres, toda vez que José María<br />

Pemán, el poeta <strong>del</strong> franquismo, era número<br />

puesto con “El divino Impaciente”, un mar de<br />

versos ramplones en loor de la vocación misionera<br />

de San Francisco Javier. Adaptó, pues, y redujo<br />

a su muerte o los desastres no acontecen en<br />

este tipo de dramaturgia a los ojos de la audiencia:<br />

son referidos, precisamente, por el mensajero,<br />

todo un lechuzón.<br />

El tema de la obra es, sin andarnos por las<br />

ramas, el intento de Odiseo, a través de<br />

Neoptólomeo, hijo de Aquiles, para comprometer<br />

al héroe mañosamente y hacerlo ir a Troya<br />

luego de permanecer por diez años abandonado<br />

en una isla desierta.<br />

Una visita a la polvorienta sastrería teatral sita<br />

entonces en una de las esquinas <strong>del</strong> Bartolomé<br />

Mitre y el pasaje de la Piedad fue el paso necesario<br />

para vestir a los actores de acuerdo con la<br />

época, algo verdaderamente vidrioso dado los mil<br />

quinientos años transcurridos desde aquellas épicas<br />

jornadas. Varios ensayos ajustaron palabras,<br />

gestos y movimientos bajo la mirada alerta de<br />

Rafael. Hubo quien debió acortar el ruedo de su<br />

túnica y quien, para no trastabillar con el coturno,<br />

se rebajó a calzar sandalias. En mi caso, mensajero<br />

de pies ligeros, iba descalzo, el torso des-<br />

Campeonato Evita<br />

Por Jesús Fernández Pelayo<br />

1948<br />

Cuando Carlos Balmaceda mi pidió que<br />

escribiera alguna historia o anécdota de nuestra<br />

vida en el <strong>Colegio</strong>, de nuestra camada, inmediatamente<br />

pensé en aquella aventura deportiva que<br />

38<br />

nudo y de taparrabos prolongado en flecos pero,<br />

eso sí, superpuesto a mis calzoncillos.<br />

Por fin llegó el día <strong>del</strong> acto. Quizás fuese un<br />

viernes a la tarde, ya entrada la primavera. El<br />

salón atestado de público: padres, alumnos y<br />

parentela incluida. En primera fila el rector, otras<br />

autoridades y el cuerpo docente en pleno. Texto<br />

en mano, bajo la campana de apuntador ubicada<br />

según corresponde en el proscenio, Rafael se disponía<br />

soplar la parte al primer olvido.<br />

Retumbaban los tres golpes rituales. Silencio en<br />

la sala. Se abre el telón. El mensajero debe entrar<br />

a los saltos hasta quedar de pie frente al público<br />

para anunciar, según la versión rafaeliana: “Esta<br />

es la tragedia de Filoctetes, el hijo de Peante, a<br />

quien el dios Hércules hizo heredero de sus fuerzas”.<br />

Sin caer en preciosismos de ballet, para el<br />

mensajero aquellos movimientos eran lo más<br />

parecido a un grand jeté digno <strong>del</strong> gran Nijinsky.<br />

Ma peró... primer salto, segundo salto y... ¡pafate!<br />

El taparrabos se desliza hacia abajo. Grandes<br />

carcajadas. Si hasta al padre rector, creo, se le<br />

ladeó el bonete negro. Apenas un segundo de<br />

vacilación. La voz de Rafael truena ánimo con<br />

resonancias sanmartinanas: “¡¡¡A<strong>del</strong>ante, aunque<br />

sea en pelotas!!!” Solucionado el accidente, con<br />

una mano en la cintura y la otra enhiesta para<br />

acompañar el parlamento con la mayor dignidad<br />

posible, el Filoctetes alza vuelo. El mensajero<br />

piensa hoy que aquella voz amiga evitó la peor<br />

reculada, la <strong>del</strong> cobarde.<br />

acometimos cuando apenas teníamos 14 años.<br />

Parece mentira que ya hayan transcurrido 60<br />

años desde entonces, pero ahí va esta historia.<br />

Estábamos en los inicios de nuestro 2do año,<br />

en la Segunda Brigada y, como no podía ser<br />

menos, el fútbol era una de nuestras pasiones. –<br />

En mi caso, yo también tenía otra que era el<br />

automovilismo, el turismo de carretera; se acuer-


dan que en ese año se corrió la Buenos Aires –<br />

Caracas? –<br />

Nuestro profesor de Zoología era el Padre<br />

Williner, al que ya habíamos tenido en Botánica<br />

en 1er Año. – Un exquisito jugador de fútbol (se<br />

decía que de joven había sido profesional) y un<br />

gran estratega que conocía todos los secretos de<br />

ese deporte. –<br />

Un día que estábamos jugando en el patio de<br />

la Segunda, se acercó, nos reunió y nos dijo “me<br />

enteré que se está organizando un campeonato<br />

en la ciudad de Buenos Aires para menores de 14<br />

años. Creo que se llama Campeonato Evita y lo<br />

organiza la Fundación Eva Perón. Que les parece<br />

si presentamos un equipo?”.<br />

Sin pensar mucho en la parte política, la idea<br />

nos pareció muy buena y unos días después fuimos<br />

con “Manolo” Fernández Hevia a una dirección<br />

que Williner nos había dado. – Nos informamos<br />

de cómo era el asunto y nos trajimos los<br />

papeles para completarlos y preparar la inscripción.–<br />

Lo más difícil fue armar el equipo, pues éramos<br />

muchos los que queríamos jugar.<br />

Finalmente, el propio Williner nos dio la solución:<br />

armar dos equipos, uno llamado <strong>Salvador</strong>, y<br />

el otro <strong>Salvador</strong> Junior. Él mismo ayudó a integrar<br />

los equipos, asignando los que creyó mejores,<br />

o más integrados en un grupo, al <strong>Salvador</strong><br />

original.<br />

Tuve así el privilegio de integrar un equipo<br />

que en los papeles aparecía como falto de equilibrio,<br />

pero luego de los entrenamientos a que nos<br />

sometió nuestro DT Williner, el juego y los<br />

resultados le dieron la razón, pues sabíamos perfectamente<br />

como pararnos en la cancha, cómo<br />

hacer los relevos, en fin, practicar un juego asociado.<br />

Me acuerdo, entre otros, además de<br />

“Manolo” Fernández Hevia, <strong>del</strong> “Flaco” Perucho,<br />

<strong>del</strong> “Gordo” Erramouspe, <strong>del</strong> “Chino” Benítez,<br />

<strong>del</strong> “Pingüino” Muñoz, <strong>del</strong> “Tano” Ciordia, <strong>del</strong><br />

39<br />

Anécdotas<br />

“Negro” Arieu, de Pearson, de Franqueira, etc.<br />

Así fue como nos inscribimos y luego nos<br />

asignaron una camiseta con rayas verticales verdes<br />

y blancas, que entonces era la de Banfield. Y<br />

con un enorme escudo en el pecho, de la<br />

Fundación Eva Perón.<br />

Allí fue cuando pensé: “si mi viejo –que está<br />

en el campo, en La Pampa– me ve, me mata”. Es<br />

que hacía muy poco había ocurrido un episodio<br />

muy sensible: por haberme negado en mi escuela<br />

de La Pampa a hacer un trabajo sobre el<br />

General Perón el 17 de Octubre de 1946, me<br />

habían quitado la bandera y me negaron el certificado<br />

de terminación de la primaria. Mi padre<br />

preso unos días... – En fin, todo un drama y, gracias<br />

al padre Castillejo, pude de todas maneras<br />

ingresar al <strong>Colegio</strong>. –<br />

Política aparte, y volviendo al fútbol, el asunto<br />

es que comenzamos nuestra participació en el<br />

Campeonato Evita, jugando en días de semana<br />

en canchas profesionales, siempre acompañados<br />

por nuestro DT el Padre Williner, de rigurosa<br />

sotana (en todos lados lo miraban, entre curiosos<br />

y sorprendidos). Por supuesto, teníamos un permiso<br />

especial para faltar a clase los días de los<br />

partidos.<br />

Al principio jugábamos contra equipos de<br />

chicos que tenían cierto dominio de la pelota,<br />

pero corrían todos detrás de la misma como<br />

posesos, sin mucha idea de juego asociado. Y así<br />

ganamos por 6, 8, 10 goles de diferencia. Nos<br />

hacíamos un banquete!!! Creo que en los primeros<br />

5 partidos de la zona primaria de clasificación,<br />

tuvimos algo así como 48 goles a favor y<br />

sólo 2 en contra.<br />

A medida que subíamos en la clasificación, los<br />

partidos se fueron haciendo más complicados,<br />

pero igualmente seguimos ganando sin siquiera<br />

ir al desempate en algún partido, pues ya entonces<br />

la eliminación era directa.<br />

Y entonces, allá por el segundo semestre de


ese año 1948, se produjo un hecho que seguramente<br />

recordarán los más veteranos: huelga de<br />

los jugadores profesionales, que se fueron a jugar<br />

a otros países y el campeonato oficial se suspendió.<br />

En una palabra, no hubo más fútbol profesional<br />

hasta fin de ese año 1948.<br />

Así fue como las ruedas finales comenzaron a<br />

jugarse los días domingo, en canchas reconocidas.<br />

Para nosotros era toda una novedad jugar<br />

con público que era cada vez más numeroso. Me<br />

acuerdo que jugamos dieciséis partidos en la cancha<br />

de Atlanta y los octavos de final en la cancha<br />

de Platense. Y seguíamos ganando......<br />

Llegó el fin <strong>del</strong> mes de Noviembre y las clases<br />

que se terminaban. Nos quedaba un solo<br />

domingo antes de iniciar las vacaciones y<br />

muchos de nosotros nos iríamos hacia el interior<br />

<strong>del</strong> país. Así fuimos a jugar el partido por<br />

los cuartos de final a la cancha de Boca, con<br />

mucho calor. Y contra quien?.... Nada menos<br />

que contra <strong>Salvador</strong> Junior que también había<br />

llegado a esa instancia. Fue increíble la emoción<br />

con que llegamos a los vestuarios primero y salimos<br />

a la cancha después, por ese mismo túnel<br />

que tantas figuras de la historia de nuestro fút-<br />

Río de Janeiro 54 - Buenos Aires<br />

4902-9207<br />

E-mail: <strong>del</strong>asubasta@hotmail.com<br />

40<br />

bol habían transitado. No lo podíamos creer!!!<br />

Según los diarios había alrededor de 25.000<br />

personas en las tribunas pues los fanáticos, a<br />

falta de fútbol profesional, iban a la cancha a ver<br />

los partidos, no les importaba quienes eran los<br />

que jugaban.<br />

El árbitro: un reconocidísimo ex jugador de<br />

boca, Domingo Tarascone. Y como para que la<br />

fiesta fuera completa y pareciera la de un domingo<br />

tradicional, había transmisión radial de los<br />

periodistas deportivos de primera línea de ese<br />

entonces, como Luis Elías Sojit y Fioravanti,<br />

entre otros.<br />

Para completar el panorama deportivo de ese<br />

domingo, se estaba corriendo la última etapa de<br />

la Buenos Aires – Caracas, que fue dramática:<br />

Oscar Galves que iba primero y su hermano Juan<br />

segundo, les llevaban varias horas de ventaja a los<br />

demás. Pero el auto de Juan se rompió, Oscar<br />

paró para ayudarle, y la clasificación general<br />

quedó en manos de Domingo Marimón (la etapa<br />

la ganó el mendocino Víctor García). Motivo<br />

para que, cada vez que podía, me acercara al costado<br />

de la cancha para preguntar a los cronistas<br />

de campo sobre lo que estaba sucediendo en la


carrera.<br />

Y jugamos ese partido de cuartos de final contra<br />

<strong>Salvador</strong> Junior. Lo recuerdo como un partidazo<br />

en que los dos equipos jugamos muy bien,<br />

para felicidad de Williner, que estaba a un costado<br />

de la cancha, como nuestro DT. Ganamos 3 a<br />

1, con goles <strong>del</strong> Negro Arieu, <strong>del</strong> Tano Ciordia y<br />

de Manolo Fernández Hevia. Jugué ese partido<br />

como marcador de punta, subiendo por la derecha,<br />

lo que hoy le dicen “carrilero”.<br />

Toda una fiesta y toda un emoción. Pero,<br />

como lo comenté, empezaban las vacaciones, así<br />

que la semana siguiente ya casi todos habíamos<br />

salido de la ciudad. Y no nos presentamos a<br />

jugar la semifinal contra Botafogo, que luego<br />

perdió la final contra Sacachispas, por diferencia<br />

de corners a favor (habían empatado 1 a 1),<br />

pues ese era el sistema de desempate de ese<br />

campeonato. Cuando volvimos de las vacaciones,<br />

a principios de marzo de 1949, nos enteramos<br />

que el premio para el equipo campeón<br />

había sido un campo de deportes completo en<br />

Flores Sur (así nació el club Sacachispas).<br />

Por los comentarios que luego escuchamos,<br />

creo que bien podríamos haber llegado a la final<br />

Adhesión<br />

Concesión CUBA Palermo<br />

41<br />

Anécdotas<br />

y ganado ese partido. Así fue como el <strong>Colegio</strong><br />

<strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> se quedó sin otro campo de deportes.......<br />

Pero yo tuve otro problema: cuando llegué al<br />

campo en La Pampa, mi padre estuvo como un<br />

mes sin hablarme. ¿Qué había pasado? Parece<br />

que el día <strong>del</strong> partido algunos vecinos que lo<br />

escuchaban por radio fueron a avisarle a mi<br />

padre, alborozados y orgullosos, que su hijo estaba<br />

jugando nada menos que en la cancha de<br />

Boca... y lo transmitían por radio!! Claro, mi<br />

padre preguntó de qué se trataba, así que cuando<br />

le dijeron que estaba jugando los cuartos de final<br />

de la Copa Evita, todo se desmoronó. Como<br />

podía estar jugando un torneo con ese nombre,<br />

luego de lo que habíamos pasado apenas dos<br />

años atrás!!!.<br />

Pero todo se supera. Y así nos ha quedado ese<br />

gratificante recuerdo de haber jugado –y ganadoun<br />

día domingo, en la cancha de Boca, ante<br />

25.000 espectadores y con transmisión por radio<br />

a todo el país. Teníamos 14 años!!!!!


Premio de la Asociación de Exalumnos <strong>del</strong><br />

<strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong>:<br />

Medalla de Oro de la Promoción 2008, Sr. Pedro Atilio Vacca<br />

De la Asociación<br />

PAGINA WEB: www.exalumno<strong>del</strong>salvador.org.ar<br />

En nuestra página web pueden consultar un listado<br />

de médicos que atienden a los exalumnos<br />

con cuota al día con aranceles diferenciales.<br />

ATENCIÓN DE EXALUMNOS: Enrique<br />

Turano atiende en el local de la Asociación<br />

todos los lunes, miércoles y viernes de 16,30 a<br />

18,30 hs. El teléfono: 5237-2500 interno 109 ó<br />

15 4579 4508<br />

E-mail: enriquejturano@yahoo.com.ar<br />

Debido a las obras que se realizan en el <strong>Colegio</strong><br />

pregunar en Portería por la ubicación <strong>del</strong> local.<br />

REUNIONES DE COMISIÓN DIRECTIVA:<br />

Los terceros lunes de cada mes en el salón I.<br />

En sus 140 gloriosos años, saludamos al querido<br />

<strong>Colegio</strong> <strong>del</strong> <strong>Salvador</strong> que nos cobijó y nos formó con<br />

tanto afecto y excelencia, junto a nuestros queridos...<br />

“compañeros de la edad feliz...”<br />

Anuncios de la Asociación de Exalumnos<br />

42<br />

Quiles a las 18,30 hs.; reuniones abiertas.<br />

ENCUENTROS MENSUALES: Los primeros<br />

miércoles de mes (marzo a diciembre) a las 20,30<br />

hs. en el CUBA sede Palermo<br />

ENCUENTRO ANUAL: El segundo viernes de<br />

noviembre en el <strong>Colegio</strong><br />

TORNEO DE GOLF: oportunamente se anunciará<br />

la fecha en la página web.<br />

CORBATAS DE LA ASOCIACION; CALCO-<br />

MANIAS PARA EL AUTO y PINES: están en<br />

venta para quienes las soliciten en Atención de<br />

Exalumnos.<br />

Los Hermida


XIV Congreso Latinoamericano de Antiguos Alumnos de la Compañía de Jesús<br />

“EL COMPROMISO ES LA DIFERENCIA”<br />

Organizado por la Asociación de Antiguos<br />

Alumnos de la Compañía de Jesús México -<br />

ASIA México, entre los días 21 y 23 de noviembre<br />

de 2008 se llevó a cabo en la ciudad de<br />

Guadalajara México el XIV Congreso<br />

Latinoamericano de Antiguos Alumnos bajo el<br />

lema: “El compromiso es la diferencia” que contó<br />

con la presencia de más de 50 representantes<br />

entre laicos y jesuitas de Argentina, Burundi,<br />

Colombia, Chile, Republica Dominicana,<br />

Francia, México, Paraguay, Perú, Reino Unido,<br />

Uruguay y Venezuela.<br />

Estuvieron presentes el R.P. Pierre Salembier<br />

S.J. Delegado <strong>del</strong> Prepósito General R.P. Adolfo<br />

Nicolás S.J. ante los Antiguos Alumnos y los<br />

señores Bernard Thompson (presidente <strong>del</strong><br />

Consejo de la Unión Mundial) y François-Xavier<br />

Camenen (secretario <strong>del</strong> Consejo de la Unión<br />

Mundial). También participó el señor Grégoire<br />

Banyiyezako, presidente de la Asociación de<br />

Burundi de Antiguos Alumnos Jesuitas quien se<br />

refirió a la organización <strong>del</strong> VII Congreso de la<br />

Unión Mundial de Antiguos Alumnos a celebrarse<br />

en Burundi, Africa en Julio de 2009.<br />

La jornada de apertura tuvo lugar el viernes 21<br />

por la tarde en el campus <strong>del</strong> Instituto<br />

Tecnológico y de Estudios Superiores de<br />

Occidente (ITESO) Universidad Jesuita de<br />

Guadalajara. Allí el RP Luis Valdez S.J. de<br />

43<br />

México se refirió a "La obra <strong>del</strong> laico Ignacio de<br />

Loyola" en tanto que el RP. Francisco Migoya S.J<br />

autor de "Los cristianos laicos, Iglesia en el<br />

mundo” comentó sobre "El papel apostólico de los<br />

exalumnos laicos de las instituciones Jesuitas en la<br />

Iglesia <strong>del</strong> Siglo XXI". El sábado 22, los participantes<br />

nos trasladamos a Tequila, localidad <strong>del</strong><br />

estado de Jalisco distante a unos 60 Km. de<br />

Guadalajara. Durante la mañana se visitó la destilería<br />

mas antigua de Latinoamérica y a partir <strong>del</strong><br />

mediodía el Sr. Agustín Aishemberg de Uruguay<br />

se refirió a la Obra de la Fundación Kolping, el<br />

R.P. Jorge Cela S.J. de República Dominicana<br />

transmitió sus impresiones sobre la Fundación Fe<br />

y Alegría en tanto que el R.P. Jesús Montero<br />

Tirado S.J., Coordinador <strong>del</strong> sector Educacion de<br />

la CPAL, habló sobre la "Colaboración de la<br />

Compañia de Jesús con las Asociaciones de<br />

Exalumnos de Instituciones Jesuitas.<br />

El domingo 23 en la Ciudad de los Niños,<br />

fundada en el año 1934 por el R.P. Roberto<br />

Cuellar García S.J. (1896-1970) en Guadalajara,<br />

se realizó la jornada de cierre con una reunión<br />

referida a los acuerdos y conclusiones <strong>del</strong><br />

encuentro, a continuación de la cual se concelebró<br />

la misa dominical que contó con la presencia<br />

de antiguos niños desamparados – hoy padres de<br />

familia - y <strong>del</strong> acompañamiento musical <strong>del</strong><br />

Coro <strong>del</strong> ITESO.


El barrilete<br />

Eladia Blázquez<br />

Mi ciudad y mi gente<br />

Desde chico ya tenía en el mirar<br />

esa loca fantasía de soñar,<br />

fue mi sueño de purrete<br />

ser igual que un barrilete<br />

que elevándose entre nubes<br />

con un viento de esperanzas sube, y sube.<br />

Y crecí en ese mundo de ilusión,<br />

y escuché sólo a mi propio corazón<br />

mas la vida no es juguete<br />

y el lirismo es un barrilete sin valor.<br />

Yo quise ser un barrilete<br />

buscando la altura en mi ideal,<br />

tratando de explicarme que la vida es algo más<br />

que darlo todo por comida.<br />

Y he sido igual que un barrilete,<br />

al que un mal viento puso fin,<br />

no sé si me falló la fe, la voluntad,<br />

o acaso fue que me faltó piolín.<br />

En amores solo tuve decepción,<br />

regalé por no vender mi corazón,<br />

hice versos olvidando<br />

que la vida es sólo prosa dolorida<br />

que va ahogando lo mejor<br />

y abriendo heridas, ¡ay! La vida.<br />

Hoy me aterra este cansancio sin final,<br />

hice trizas mi sonrisa de cristal,<br />

cuando miro un barrilete<br />

me pregunto ¿aquel purrete donde está?<br />

44<br />

A Susana Rinaldi<br />

Prestale tu piolín<br />

a los pebetes,<br />

que nadie remontó mejor<br />

mi barrilete<br />

Juegos<br />

Oski - 13. ver pág. 45


1. Lope Felix de Vega (1562 – 1635) Genio fecundísimo, cultivó<br />

todos los géneros literarios. Como poeta lírico tiene unas eglogas<br />

autobiográficas; romances, letrillas, canciones, sonetos, rimas, etc.<br />

2. Romano Guardini: nació en 1885 en Verona, uno de los más pujantes<br />

centros culturales de Italia. Cuando Romano tenía un año de edad,<br />

su familia se trasladó a Maguncia (Alemania), donde transcurrieron su<br />

infancia y juventud. Luego de una honda crisis de fe, se decidió en 1905<br />

por el estudio de la Teología y en 1910 fue ordenado sacerdote. Su apasionada<br />

vocación al trabajo pastoral con jóvenes se acompañó de la<br />

docencia en las Universidades de Bonn, Berlín (en las cátedras de<br />

Filosofía de la Religión y Cosmovisión católica hasta que fue suspendido<br />

por el régimen nacionalsocialista), Tubinga y Munich. Al<br />

momento de su muerte (1968) Romano Guardini llevaba escritos más<br />

de 60 libros, entre los cuales “El Señor” es, sin lugar a dudas, el que<br />

mayor surco ha hecho en la espiritualidad de nuestro tiempo.<br />

3. Leopoldo Lugones: nació en la Provincia de Córdoba en 1874.<br />

En 1896 fué de los que en Buenos Aires rodearon a Rubén Darío.<br />

El mismo Darío habló de él en 1896 en “El Tiempo”. Es autor<br />

vigoroso y genial. Su escuela es un talento indudable en poesía.<br />

Lástima que se deje llevar a veces de extravagancias como las que<br />

encontramos a cada paso en su Lunario sentimental... A pesar de<br />

las extravagancias Lugones es verdadero poeta, orgullo de nuestra<br />

patria. Ha publicado entre otras obras: Odas seculares, El libro de<br />

los paisajes, La guerra gaucha, Piedras liminares, Cuentos fatales y<br />

muchas obras de prosa y verso. Se nota en sus últimas obras cierto<br />

acercamiento hacia el elasicismo: sus romances sabrosos publicados<br />

en “La Nación”, por ejemplo. El autor, atravesó a lomo de mula la<br />

selva misionera <strong>del</strong> siglo XX; recorrió también las soledades <strong>del</strong><br />

Neuquén por aquella misma época.<br />

4. Alberto Güiraldes: ilustración para el libro de Leopoldo Lugones<br />

“Romances <strong>del</strong> Río Seco”.<br />

5. Nicolás F. De Moratín (1737-1780) (Sección “El Yantar”):<br />

Exageró mucho en nuestra literatura la tendencia neoclásica francesa.<br />

Es autor dramático y crítico pero su fama la debe en gran parte a<br />

sus poesías líricas y a sus romances. Entre estos últimos “fiesta de<br />

toros” ocupa el primer lugar. Tiene muchos sonetos, églogas y epístolas.<br />

Son famosos sus epigramas.<br />

6. Etsuro Sotoo (Fukuoka, Japón - 1953) En 1978 visitó Barcelona<br />

y se quedó impresionado por la Sagrada Familia. Pidió trabajo como<br />

picapedrero y, tras pasar una prueba, se lo concedieron. Desde entonces<br />

trabaja en la fachada <strong>del</strong> Nacimiento, siguiendo las indicaciones<br />

Adhesión<br />

45<br />

que dejó Antoní Gaudí. Entre otras esculturas ha realizado las figuras<br />

de los ángeles músicos, así como las cestas de frutas que coronan<br />

los pináculos <strong>del</strong> templo. Asimismo, ha diseñado las puertas que se<br />

instalarán en la fachada <strong>del</strong> Nacimiento, de aluminio policromado y<br />

cristal, decoradas con vegetación, insectos y pequeños animales. Se ha<br />

encargado de restaurar las esculturas de la Puerta <strong>del</strong> Rosario, dañada<br />

en la Guerra Civil Española. También trabaja en el diseño de las<br />

campanas tubulares que Gaudí pensó instalar en las torres-campanario<br />

de las tres fachadas de la Sagrada Familia.<br />

7. Fotomontaje: Las torres <strong>del</strong> templo de la Sagrada Familia de<br />

Gaudí en Barcelona y la escultura de San Ignacio, obra de Manuel<br />

Cusachs, que se encuentra en una de las hornacinas de la Fachada de<br />

la Natividad.<br />

8. Misiones Jesuíticas <strong>del</strong> Guayrá: pág. 22 San Miguel. Pág.<br />

Imaginería tallada en madera. Del libro Manrique Zago Ediciones.<br />

9. Página central: Altares principal y laterales de San José (1698)<br />

Chiquitos, Bolivia. Del libro “Chiquitos, la utopía perdura”. Ed.<br />

Willy Kenning.<br />

10. Fotos de la cena anual: Life – Estudio de fotografía<br />

11. Norberto R. Fresco: abogado (1869-74). Presidente de la<br />

Asociación de Exalumnos y de la Congregación Mariana. Cena <strong>del</strong><br />

cincuentenario (1918).<br />

12. Carlos Bègue: Cuentista y novelista. Premio Casa de las<br />

Américas (Cuba 1967). Premio Municipal de Literatura, Buenos<br />

Aires 1984. Primer Premio Fondo Nacional de las Artes por la novela:<br />

“Buitre de personas... 1984.<br />

Camada 84 (1952).<br />

13. Oski (Oscar Esteban Conti) Buenos Aires 1914 – 1979. Se<br />

diplomó en la Escuela Nacional de Bellas Artes. Más tarde estudió<br />

escenografía en la Academia Superior de Buenos Aires. Publicó sus<br />

dibujos con el seudonimo “Oski”. Sus primeros trabajos publicados<br />

como dibujante datan de 1943, en la revista Cascabel, los siguieron<br />

otros en revistas y diarios argentinos y <strong>del</strong> exterior, como Rico Tipo,<br />

Vea y Lea, Cabalgata, El Hogar, Revista de Aeronáutica, Dr.<br />

Merengue, La Hipotenusa, Satiricón, Mengano, Humor, Media<br />

Suela, Billiken, Clarín, Ja, Ja (México) y Ultimas Noticias<br />

(Chile).?Fue director y dibujante de su propia revista Los Cuadernos<br />

de Oski, y creador de “Amarroto”, el personaje protagonista de su<br />

única tira cómica.<br />

Juan Aberg Cobo<br />

Créditos


TORNEO DE GOLF - COPA SAN IGNACIO<br />

El 9 de septiembre de 2008 se llevó a cabo en<br />

el Olivos Golf Club la XV Copa de Golf "San<br />

Ignacio". Como es tradicional San Ignacio nos<br />

regaló un día espléndido.<br />

RESULTADOS:<br />

18 H. Laguneada. 2 Mejores Pelotas<br />

2º - 134: Matías Crotto. Juan Sole. José Moyano Peña<br />

1º - 128: Marcos Crotto. José Davila. Alejandro<br />

Crotto. Carlos Caimari<br />

Fourball Americana<br />

2º - 63: José Moyano Peña. Diego Duncan<br />

1º - 61: Marcos Crotto. José Davila.<br />

ALCHOURON, BERISSO, BRADY & FERNANDEZ PELAYO<br />

Abogados<br />

Maipú 267, pisos 11 y 13<br />

Tel. 4326-2340 (líneas rotativas)<br />

Fax 4326-2294<br />

(C1084ABE) - Ciudad Autónoma de Buenos Aires<br />

e-mail: abbfp@abbfp.com.ar<br />

46<br />

Concurso de Long Drive:1º Javier Cardoso: 265 Yds.<br />

Concurso de Approach. Hoyo 13: 1º Jorge Peró:<br />

1,8 mts.<br />

Concurso de Best Drive. Hoyo 18: Matías Crotto<br />

Concurso de Short Drive. Hoyo 5<br />

Mariano Pico Terrero: 50 Yds.<br />

Peor Score: Alejandro Alvarez Noblía:80<br />

Carlos Gianicolo: 80


47<br />

Golf<br />

Agradecemos a todos su participación como<br />

también a los que lo hicieron como sponsors<br />

o con premios para las rifas efectuadas en el<br />

cocktail final.<br />

¡Nos vemos en la próxima!<br />

Enrique Aldazabal


PROFESIONALES ADHESIONES<br />

José María Pizzorno<br />

Abogado<br />

Av. Belgrano 809, 8 o "A" y "C"<br />

Tel. 4342-2231<br />

Juan Pablo Gallo<br />

Cardiólogo Pediatra<br />

Consultorio Tel. 4312-0529<br />

Av. Santa Fe 900, 3 o Piso<br />

Norberto Portilla<br />

Abogado<br />

Paraná 123, 6to. Piso, OF. 149<br />

Tel. 4372-5593 / 4374-1594<br />

E-mail: portillaares@yahoo.com.ar<br />

Miguel Alfredo María Soaje Pinto<br />

Martillero Público<br />

Paraná 426 4° "A"<br />

Capital Federal<br />

Tel/fax: 4374 - 0173/8830;<br />

4375 - 0203/5075<br />

E-mail: miguelsoaje@hotmail.com<br />

Dalmiro Iglesias<br />

Representaciones<br />

Tel. 4737-0805<br />

E-mail: diglesias@fibertel.com.ar<br />

Carlos A. Balmaceda<br />

Augusto L. Mahlknecht<br />

Arquitecto - Ingeniero<br />

Tel. 4822-7907<br />

Tel. 4666-4610<br />

Carlos María Gianícolo<br />

Ingeniero Naval<br />

Especialidad en Temas Navieros y Petroleros<br />

Tel. +15 4444 5794<br />

Email: carlos.gianicolo@fibertel.com.ar<br />

Pedro Nuñez<br />

Abogado<br />

25 de Mayo 786, Piso 13, of. 84<br />

Tel. 4312-1960<br />

E-mail: nunez@elsitio.net<br />

Carlos Horacio Beherán<br />

Ingeniero Civil<br />

Paraguay 1270, Captial Federal<br />

Tel.: 4816-3169<br />

48<br />

Horacio Bach<br />

Dr. Gianni Corrado<br />

Roberto Poggio<br />

Raúl Javier Yñarra<br />

Gonzalo Martín Yñarra

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!