17.05.2013 Views

El método - La scuola dei genitori

El método - La scuola dei genitori

El método - La scuola dei genitori

SHOW MORE
SHOW LESS

Create successful ePaper yourself

Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.

© 2011 - Todos los derechos reservados. <strong>El</strong> presente texto es libremente reproducible para uso personal con la obligación de mencionar la fuente y<br />

la prohibición de modificarlo, también parcialmente, por cualquier motivo. Y' prohibido utilizar el texto para fines lucrativos. Por cualquiera otro<br />

empleo es necesaria la expresa autorización del autor. Publicado en el marzo de 2011, online de enero 2013. Los abusos serán perseguidos a norma<br />

de ley.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 1. <strong>La</strong> personalidad. Estructura y dinámicas.<br />

Curso completo y gratuito para padres y educadores<br />

Sobre el sitio: www.la<strong>scuola</strong><strong>dei</strong><strong>genitori</strong>.it<br />

Texto de los subtítulos del vídeo<br />

del dr.ssa Vallorani Maria Grazia Psicólogo Psicoterapeuta<br />

3° Parte: <strong>La</strong> personalidad. <strong>El</strong> <strong>método</strong> del jardinero.<br />

Educar, dijimos, quiere decir tirar fuera algo que está contenido ya dentro de la persona. Ahora entendemos como está<br />

programada la personalidad de manera natural. <strong>La</strong> personalidad según la psicología analítica, está programada por tres partos: el<br />

yo, el inconsciente y el super yo. ¿Qué es el yo? <strong>El</strong> yo es la parte consciente de nosotros, la parte de que no nos damos cuenta, la<br />

que nos permite de entender, de valorar las cosas. Hay la voluntad, la memoria, la inteligencia, la lógica, y todas las cosas de que<br />

tenemos conciencia. ¿<strong>El</strong> inconsciente qué es? Nos lo dice la palabra: in = no, consciente. Es la parte de que nosotros no tenemos<br />

conciencia, que no conocemos con la razón, que no conocemos con nuestra lógica. ¿Qué es? Se parece al mar, en que hay una<br />

vitalidad increíble, que no se ve. No se ve la vida que hay dentro, pero sólo se ve cuando sale a flote Cuando las emociones salen a<br />

flote y llegan hasta la parte del yo, entonces se ven. ¿Cómo se relacionan el yo con lo inconsciente? Hay una imagen. Una persona<br />

usa una antorcha que hace un círculo iluminado. <strong>El</strong> círculo iluminado es la parte del yo que hace luz. Luego la luz de la conciencia<br />

permite de ver de manera clara las cosas que son iluminadas por la antorcha. Alrededor se ve una penumbra, la penumbra de la<br />

conciencia. Alrededor, en la oscuridad del inconsciente, hay todas las otras cosas que nosotros no vemos por la luz de la antorcha,<br />

entonces por la luz de la conciencia, pero sabemos que hay, porque las sentimos. Sabemos que en la habitación hay otras cosas,<br />

que no vemos al momento, pero existen. <strong>La</strong>s sentimos, las advertimos, pero no las vemos de manera clara. Si desplazamos la<br />

antorcha y hacemos luz sobre estas cosas, entonces podemos verlas.<br />

¿Qué hay en lo inconsciente? Hay los que llamamos instintos, impulsos. Impulso viene del latino PELLO-IS = empujar, sale fuera de<br />

repente. ¡Hace falta el amor y estar queridos, muy importantes! <strong>La</strong> sexualidad, todos los sentimientos, la envidia, el celos, muy<br />

importantes. <strong>La</strong> rabia, la agresividad, son importantes. <strong>La</strong>s ganas de hacer locuras, el instinto de omnipotencia, entiendo todo, yo<br />

soy fuerte, soy potente. Lo inconsciente no es sólo un sitio, un cubo donde el yo hecha todas las cosas que no puede aceptar, de<br />

que se deshace, pero también es un mundo increíblemente lleno de vitalidad. Hay la capacidad de crear cosas nuevas, hay la<br />

intuición. Todos los grandes descubrimientos pasaron por una intuición repentina: ¡idea! Una idea que luego se ha vuelto<br />

comprensible a nivel racional, pero antes nació como algo de inmediato, de impulsivo. Hay la creatividad, la pintura, la música, el<br />

arte, la escultura, todo lo que es inmediato, que sale de una parte irracional, absolutamente profunda, universal. Hay nuestras<br />

angustias, nuestras ansiedades, nuestros sentidos de culpa. <strong>El</strong> miedo que las cosas vayan mal porque yo no me digno de amor<br />

porque soy pequeño y negro, como Calimero. Pero también hay este tesoro precioso que son nuestras raíces, únicas originales e<br />

irrepetibles, que está junto a un aspecto divino. Hay una parte de nosotros que tendencialmente está predispuesta de manera<br />

natural, innata, a la espiritualidad. Está predispuesta a la búsqueda de algo de eterno, de infinito, de inmutable, de universal. A<br />

algo de realmente más grande que nosotros. En busca de Dios.<br />

¿Qué hay más allá de estos dos partos? Hay la parte del Super-yo que es la parte que nos da las normas de comportamiento, se<br />

puede hacer, no se puede hacer, se tiene que hacer, no se tiene que hacer. ¿Cómo funcionan estas partes? Es el yo que tiene que<br />

organizarlas. Ésta es la parte consciente y estas otras dos son inconscientes. <strong>El</strong> yo tiene que ponerlas de acuerdo. Organizarla,<br />

conducirla, hacer un poquito de manager. Tiene que programarlas de manera que están de acuerdo, de manera que no se


estrellan. Si se estrellan, salen las chispas y la ansiedad. <strong>El</strong> yo entonces tiene que entender, para administrarlas bien, cómo un<br />

investigador lo que hay abajo, por las señales, las huellas, los indicios que hay. También hace de árbitro porque tiene que poner de<br />

acuerdo las dos partes. Se parece un poquito a un conductor de un coche, en cuyo el yo es lo que guía, que gira, que sabe donde ir,<br />

que se da cuenta. <strong>El</strong> coche es como lo inconsciente, en que él puede acelerar las emociones, porque hay momentos en que hace<br />

falta ceño, o puede parar porque la agresividad nos está destruyendo, o está destruyendo a alguien fuera.<br />

En el mismo tiempo el yo, el conductor, cambia las marchas, porque tiene que conformar el coche con las situaciones reales: si hay<br />

una curva, si hay algo que no va, cada vez cambia la situación. ¿Qué es la parte superior? Es el código de la calle. <strong>El</strong> conductor sabe<br />

que, si se para, no va a chocar. Cede el paso, sigue las señales que le permiten de no ser destruido y de no destruir a los otros. Ésto<br />

es como nuestro código interior. Hay las leyes y las normas dadas por los padres y luego nos las elegimos de manera responsable y<br />

con nuestra razón.<br />

Método. 2. <strong>El</strong> <strong>método</strong> autoritario, hiperprotectivo y mixto.<br />

Ahora analizamos dos impostaciones educativas que no hacen parte de un <strong>método</strong> específico o técnico, pero normalmente están<br />

usadas por los padres en la vida cotidiana.<br />

Uno es la impostación educativa autoritaria, que es rígida, que se usaba una vez. Como el herrero, yo te doblo y hasta que no te has<br />

convertido como digo, uso esta fuerza, de manera violenta, de manera pesada, sin considerar lo que quieres. Si no lo haces me<br />

enfado mucho. Éstas son las personas que llegan a pegar. También lo hacen porque a su vez tenían un padre rígido, un padre-<br />

dueño y entonces inconscientemente lo rehacen. Otras regañan mucho. Piensan que queda bien gritar y hacer escenas. Porque<br />

pensan: yo no pego, grito solamente. Es lo mismo una violencia psicológica para el niño, muy fuerte, se imprime, crea un dolor<br />

dentro de la psique. Este tipo de impostación tiene estos efectos. <strong>El</strong> niño tiene miedo, siempre tiene dolor a la cabeza, muchas<br />

veces se enferma porque las defensas inmunitarias bajan, y sempre se siente desafortunado negativo. Siempre tiene miedo que<br />

todo lo que pasa dipende de su ser desdichado. Lo siente así, porque le falta el amor, le falta la atención, la consideración.<br />

<strong>La</strong> sobreprotección es el <strong>método</strong> educativo que ha sido usado para contrastar el viejo <strong>método</strong>. Más rígido. Ahora le dejo hacer todo<br />

lo que quiere. Nos dicen que el niño tiene que estar libre, entonces te dejo hacer lo que quieres, no te creo el trauma. Porque el<br />

trauma es si yo intervengo. Una cosa es intervenir de manera rígida, gritando, atacando, otra cosa es intervenir de manera<br />

acreditada que quiero decir que considero tus necesidades, pero si vas fuera de las rayas, te reconduzco dentro de manera firme.<br />

<strong>La</strong> sobreprotección es cuando nos convertimos en sirves, en mayordomos del niño. Ésto es terrible. ¿Pero porqué es terrible? Es la<br />

cosa mejor, porque no tiene los traumas. ¡No! Porque el niño se siente como un sultán, se siente el rey, está reverenciada. Está<br />

vestido, lavado, limpiado. Hay padres que por la mañana lo visten, lo lavan. Pero lo hago para ir de prisa. ¿Pero en el momento en<br />

que lo haces, que pasa? Puesto que el niño es concreto, piensa: ¡entonces si tú me vistes, me lavas, yo soy pequeño! ¿Y si soy<br />

pequeño, porqué tengo que estudiar? ¿Porqué tengo que estar atento? Porque no puedo girar por la clase y salir si quiero, tal<br />

como hago contigo en casa, como escribo sobre los muros, como voy a iglesia girando donde me parece, como voy a los<br />

restaurantes para hacer lo que me parece, para jugar. ¡Porque yo soy pequeño! Luego vestir, lavar, etcétera quedan bien hasta los<br />

6 años, pero después de los 6 años, a los 8-14 es absurdo seguir vistiendolo, secarle el pelo, lavarlo, limpiarlo cuando va al baño,<br />

dejarlo en la cama de los padres. <strong>El</strong> niño tiene que sentir que el padre no tiene miedo. <strong>El</strong> padre puede ayudarlo y lo deja dormir con<br />

él si está enfermo o angustiado, pero no puede dormir en la cama de los padres de manera estable. Hay padres que intercambian<br />

el proprio sitio, la cama matrimonial con la cama del niño, y duermen sistemáticamente en el cama del niño porque el niño ha<br />

ocupado su sitio en la cama matrimonial. Después de los seis años esta cosa deja venir en la cabeza del niño la idea que él es el<br />

dueño de la situación, él es el rey, el emperador, es lo que manda. No quiere razones, ¿porqué si yo mando, tú qué quieres?<br />

¿Quieres mandar por mí? ¡No, pero tú no mandas! Pero hasta que tú me sirves, yo soy el rey. Los niños son prácticos. Luego puedo<br />

enfadarme cuando quiero, porque tú no me obedeces. Siempre te doy la culpa, porque yo soy el rey y entonces es tu problema si<br />

tú esta cosa no me la dejas hacer. Son niños que comen lo que quieren y tú tienes que ser como un criado, al restaurante, a darles<br />

todo lo que quieren.<br />

Tal vez también hay un tercer comportamiento educativo, que está mezclado entre este dos. Pues el padre antes protege, pues<br />

veste, lava y luego, cuando no lo hace más, estalla en escenas absurdas. No la hago más, te he dado todo. ¡No te de cuantas de las<br />

cosas que te he dado y sigues dejándome enfadar! No demuestras que lo aprecias. ¿Entonces que pasa? Que el resultado es tener<br />

estos síntomas, esto del mando junto a los miedos. Es más difícil arreglarlo. Pero prevalece la parte de la protección, es la más<br />

fuerte también en el <strong>método</strong> mixto.


Método. 3 . Consecuencias en la personalidad del <strong>método</strong> autoritario.<br />

Vemos ahora que pasa a la personalidad con el <strong>método</strong> autoritario. Ya que el Super-yo se forma con las reglas que los padres nos<br />

dan, si los padres tienen estas actitudes agresivas, punitivas y absolutas, ¿que pasa? Que el Super-yo se forma de manera<br />

absolutamente rígida, punitiva, como un dictador se vuelve. ¡Pero yo no fui así! Pero es el Super-yo que triplica las cosas. Porque el<br />

Super-yo ya es vengativo, punitivo y si tú programas las reglas de manera tan rígida, se vulve más dictator. Y llega a ser como un<br />

dictador terrible que, como te mueves, te dispara. En particular las emociones que tendrían que ser espontáneas, no están<br />

aceptadas y guiadas, pero están controladas de manera rígida y, si no son aptas, si no corresponden con las normas terribles, son<br />

destruidas. Son encadenadas o encarceladas, son cerradas. Pobrecitas no pueden salir porque como salen, padecen la reacción<br />

punitiva del Super-yo. Luego están todas quietas. A veces también nosotros decimos: estoy atascado, tengo un bloque interior, no<br />

puedo. Son emociones que están encarceladas. O hay este sentido de culpa terrible: si ha pasado todo este desastre, es mi culpa,<br />

he hecho algo porque es imposible que sean tan duros conmigo. Entonces hay Calimero pequeño y negro que llora. O estamos<br />

parados como sobre un cochecito, somos entumecidos, no podemos movernos mucho más, porque sabemos que nuestras<br />

emociones no son entendidas. Porque están controladas y administrádas de manera dictatorial.<br />

En el mismo tiempo hay emociones que, no pudiendo venir fuera, se esconden en partes absolutamente oscuras de nuestra psique,<br />

para salvarse. A veces también nuestras raíces más profundas se esconden con un falso si. ¿Y el yo qué hace? ¡Y el yo tiene miedo!<br />

Esta parte coge todo, casi todo y también él está entumecido, entonces tiene miedo y no puede moverse mucho. No puede<br />

moverse bien, no puede administrar mucho. Tenta, pero cuando nosotros hacemos algo que nos gusta, estamos allí a sudar frío,<br />

somos parados, nos olvidamos las cosas, porque el Super-yo está interviniendo de manera rígida y está parando las emociones y<br />

también nuestra conciencia.<br />

Método. 4. Consecuencias en la personalidad del <strong>método</strong> hiperprotectivo.<br />

Vemos ahora qué pasa si usamos en cambio el <strong>método</strong> de la sobreprotteción. Vemos que pasa a la personalidad. ¿Qué<br />

consecuencias tenemos sobre la personalidad? En el Super-yo, las reglas que tuvieron que entrar, no han entrado, porque los<br />

padres son los sirves y entonces no han programado las reglas: lo que se puede hacer y no se puede hacer, y no las dejan respetar.<br />

Entonces el Super-yo se ha puesto débil, se ha formado poco, es blando, demasiado blando. ¿Entonces que pasa? Todos los<br />

instintos toman el predominio y mandan. Mientras antes mandó la parte superior, ahora manda la parte bajo y los instintos se<br />

acaloran, porque no hay nada que los contiene. Cuando no hay gatos, los ratones bailan. Vemos esta cara de impune, porque no ha<br />

tenido nunca un castigo. Envidia, celos, crea una situación contrae l otro, rechazo, patadas, puños, porque el otro no hace lo que<br />

dice él y lo que quiere. O se siente un Supermán, tiene los poderes, los poderes mágicos y puede hacer lo que quiere. Hay los<br />

instintos: el león que ataca, muerde, gritos, los monitos que saltan de un sofá al otro, se mueven como si fueran de los monitos y<br />

el zorro, porque tienen una astucia impresionante y saben donde quieren llegar. ¿Y el Super-yo? Se parece a un niño pequeño que<br />

tiene en mano el biberón y el chupete, pues no es madurado, queda pequeño pequeño. Y no funciona. <strong>La</strong>s leyes son mias: si quiero,<br />

puedo tirar con la honda. Es un Super-yo que tiene poca fuerza. ¿Y entonces el yo qué hace? <strong>El</strong> yo no puede administrar la<br />

situación, porque hace falta una parte, y entonces con la tarjeta roja dice a los instintos: ¡paren! Pero no puede porque hacen faltan<br />

las reglas. Si algo pasa en un estado sin las leyes, no eres defendido, nadie interviene. O si hay las leyes, pero no hay la policía, lo<br />

mismo no hay la posibilidad de ser defendidos. Luego es una personalidad invadida por el instinto, y la persona hace lo que quiere.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 5. ¿Qué <strong>método</strong> elegir?<br />

¿Entre los dos <strong>método</strong>s? Los dos <strong>método</strong>s son ambos equivocados porque hemos visto tienen consecuencias en la personalidad.<br />

No es sólo una cosa que tenemos que hacer, equivocada o justa. Lo que es importante son las repercusiones en la personalidad.<br />

Por ésto es importante usar el <strong>método</strong> justo, porque si la personalidad se forma de manera inarmónica, inestable, luego queda<br />

difícil solucionarla. Todo ésto es importante que sea hecho antes de la adolescencia, porque luego las cosas ya son estructuradas.<br />

Pero es mejor el nuevo <strong>método</strong> con el respeto del <strong>método</strong> rígido, que era pesado. Entre los dos, el más peligroso es lo protector.<br />

Ésto es importante saperlo, porque puesto que los instintos han tomado la mano, es más difícil reponerlos a sitio, reajustarlos,


porque los niños sólo lo permiten a sus padres, y es difícil que pueden hacerlo las personas del exterior. Es fundamental que los<br />

padres sepan estas cosas porque puesto que los instintos han tomado la mano, después de la adolescencia tampoco la persona<br />

misma no puede administrarlos. No hay desgracia peor para una persona que ser decada en manos de los mismos instintos. Vemos<br />

el porque y las consecuencias.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong> rígido nos deja convertir en un coche demasiado frenado, hacemos pocos metros, pero no hay peligro de vida. En<br />

cambio vemos que en el <strong>método</strong> hiperprotectivo nos convertimos en un coche sin frenos. <strong>El</strong> coche sin frenos parece que va, pero<br />

cuando llega la curva, no tiene la calle y hay peligro de vida porque podemos ir debajo. Con el <strong>método</strong> rígido nos convertimos en un<br />

conjunto de coches en fila, son muchas, son ordenadas, pero no se mueve nada. Pero llegamos. En cambio en el <strong>método</strong><br />

hiperprotectivo, no hay las reglas del código de la calle y los coches son todos amontonados, van a chocar una con otra, no se<br />

comprende más cúal es la calle, quién ha venido antes, quién ha venido después, como sale y hay una confusión terrible. En el<br />

<strong>método</strong> rígido nos volvemos como robots, como el otro me quiere, a uso y consumo del otro. En el <strong>método</strong> hiperprotectivo nos<br />

volvemos como Peter Pan. Hay la síndroma de Peter Pan que es la síndroma del eterno niño o el PUER ETERNUS, como dicen los<br />

analistas. Peter Pan es lo que vuela, no tiene los pies en la tierra. No se casa nunca, siempre es niño, para siempre, y vive en la isla<br />

que no hay. Imagináis a nivel mental qué nos pasa. En el <strong>método</strong> rígido nos convertimos en un caballo de madera a ruedas, que no<br />

va adelante, pero en el <strong>método</strong> hiperprotectivo nos convertimos en un caballo salvaje que puede desarzonarnos, puede dejarnos<br />

caer y, si se asusta, puede tirarnos por un barranco.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 6. el <strong>método</strong> del jardinero.<br />

¿Ok, ésto no, aquello no, y entonces qué hacemos? Podemos programar el <strong>método</strong> del jardinero. <strong>El</strong> <strong>método</strong> del jardinero porque<br />

dijimos que educar se parece a la profesión del jardinero. Porque él tiene respeto para la semilla, sabe que ya todas las<br />

características están en la semilla y crea las condiciones para que ésto salga. Sale todo lo que está predispuesto de manera natural.<br />

Podemos tomar tres aspectos principales de la profesión del jardinero: el nutrir, el podar, el cultivar. Nutrir. Es decir dar la luz, el<br />

aire, el agua, se parece al nutrir lo inconsciente, a como dejar que el incosciente se active, como formar lo inconsciente y la parte<br />

de las emociones. Como dejar que esta parte salga de manera natural y de manera equilibrada. Podar. <strong>El</strong> jardinero sabe que tiene<br />

que entrecarse, porque si no la planta se vuelve salvaje y no pueden salir los botones maravillosos y las gemas nuevas y no puede<br />

volverse en una planta bonita, y entonces la poda. No la poda siempre, pero sólo cuando sirve. Ésta se parece al formar el Super-yo,<br />

pues la parte de las reglas, porque también aquél es un podar. Luego el cultivar. He dado la luz, el aire, el agua y ahora basta. No<br />

tienes que cuidar todos los días de la planta. Ésto es el cultivar y podría parecerse a la formación del yo, de la conciencia, de la<br />

parte que entiende. Veremos cómo concretamente.<br />

Método. 7. Nutrir las emociones para activar el inconsciente.<br />

Nutrir dijimos es dar el agua, la luz, el aire, y es nutrir como lo inconsciente. ¿Cómo? Dando principalmente el cariño. <strong>El</strong> cariño<br />

viene del latino: A-FERO y significa: ir hacia. Es lo que nos lleva hacia los otros. <strong>El</strong> niño tiene que sentir el cariño. Lo importante es<br />

que antes de todo sea el padre a vivirlo dentro de manera fuerte y luego salir de su corazón, lo deje salir por el tono de la voz y lo<br />

deje salir particularmente por sus ojos. Pues el niño tiene que verlo. ¡Pero no lo sabe que lo quiero! No, el niño dice: ¿cómo se ve<br />

que me quieres? Quiere verlo, sentirlo. Si tú piensas que él lo sabe, es como un plato de pasta que él sabe que está allí, pero no<br />

puede comerlo, él quiere ponerlo dentro. Si nosotros quereremos el niño, él de adulto quiere si mismo. Ésto es muy importante.<br />

Contención significa tener dentro, con-tener, tener dentro los miedos. <strong>El</strong> miedo del niño para él es enorme, es terrible. Nosotros<br />

tenemos que ponerlo dentro de nuestro corazón, tenerlo dentro, calentarlo, contenerlo y administrarlo y dejarle sentir por nuestro<br />

corazón y por nuestros ojos que este miedo no es destructivo. No ha hecho derrumbarse el mundo, es una cosa que se puede<br />

administrar. ¡No ha pasado nada! ¡Queda bien todo! Si nosotros lo sentimos dentro de nosotros y no nos asustamos, también el<br />

niño no se asusta y se calma. En psicoanálisis se llama: REVERIE. Ésto se hace con las ansiedades, con las angustias, con el miedo de<br />

afrontar el mundo, de caminar, pero también con la gana de no estudiar que tiene que estar contenida, finca dentro, para que<br />

entienda que esta cosa es fundamental para su vida. Si nosotros podemos contenerlo, él de grande podrá contener los mismos<br />

miedos, las mismas angustias, emociones y podrá administrarlos.


Estima. Estimarlo. Tenemos que sentir que el niño es capaz, estimar sus capacidades. ¿Cómo? Siempre de manera práctica,<br />

dejándolo hacer cosas. Pero él lo sabe. No, si no tú no se las pidas, si tú haces todo, quiere decir que no lo estimas, que él no es<br />

capaz, que lo reputas un niño demasiado pequeño, un incapaz que necesita de alguien que le hace todo. Así das un mensaje<br />

negativo, la confianza en si no se activa, y no lo has ayudado. En cambio lo ayudas si: lo dejas cocinar junto a ti, le preguntas que<br />

piensa de un cuadro, si miras el motor del coche. Cosas que yo sé que tú entender y hacer. Vemos como nutrir otras cosas. <strong>El</strong><br />

respeto. Respeto quiere decir considerar y aceptar las necesidades del niño, en una relación verdadera. Respetamos su necesidad<br />

de ver el mundo, respetamos su necesidad de alguien que lo escuchas, respetamos su yo, lo consideramos, nos hablamos. Si<br />

nosotros lo respetamos, él podrá respetar si mismo. Valorización. Dejamos sentir al niño que tiene un valor grande. <strong>El</strong> valor no<br />

depende de lo que hace, es un valor en si. Él es un valor, sin pruebas, sin votos, sin exámenes. Si hace una conquista ésta valoriza su<br />

personalidad. Si es capaz de cocinar, de hacer un deporte, pone en marcha su personalida, su capacidad y su valor. Si nosotros<br />

podemos valorizarlo, él de adulto podrá valorizar si mismo. <strong>La</strong> protección. <strong>La</strong> protección es fundamental y es típica de los padres.<br />

Los padres protegen el niño, como un invernadero protegen la planta. Cuidamos de él cuando se queda mal, le ponemos el<br />

cinturón porque no padezca daños y en particolar le estamos cercano delante la televisión. Hoy muchas películas de horror,<br />

zombie, vampiros, pueden activar en los niños partes negativas y angustias graves y entonces hace falta que alguien le explica, lo<br />

proteja, lo ayuda.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 8. Podar para formar el Super-yo.<br />

Ahora vemos el podar. Podar dijimos es el cortar cuando es necesario, para que la planta no crezca como salvaje. Para que los<br />

instintos no dejan convertir el niño como un salvaje, hace falta podar. Podar es indispensable porque es la manera de solucionar<br />

todo y enseguida. Aquella idea de omnipotencia, quiero todo y enseguida. “Todo y enseguida” se soluciona con el límite, cortando<br />

y diferenciando. En particular con el límite: se puede hacer hasta este punto y un poquito a la vez y despacio. <strong>El</strong> límite entonces<br />

está en naturaleza. Hace parte de nuestro ser humano. <strong>La</strong> omnipotencia, el “todo y enseguida”, es divino. Luego si nosotros<br />

ponemos el límite, ayudamos el niño a tener su dimensión real, pues la humana. Luego es fundamental el límite. Sin límite hay<br />

problemas graves, porque nosotros no estamos en nuestra esfera humana. Vemos que en la naturaleza todo tiene un límite. <strong>La</strong><br />

mayonesa, cuando la giras, a un punto, tienes que pararte, porque si no se vulve loca. Así se vulve loca la personalidad. Cuando<br />

haces la masay la tiras, a un punto tienes que pararte, porque si no se desarma y lo mismo se desarma la personalidad. En el mismo<br />

tiempo el límite también es el confín. Para saber cúal es mi casa yo tengo que tener el perímetro, el confín. Sólo ahora sé cuál es<br />

mi casa y cuál es tu casa . Si hace falta el confín, también hace falta la identidad y yo no sé lo que es mío y lo que es tuyo. Es en el<br />

mismo tiempo todo tuyo y todo mío. Es terrible. Sólo con el límite hay la identidad psíquica. Veis como también la formación de la<br />

identidad dipende de estas cosas. Es imposible que la identidad se forma cuando hace falta el límite. ¿Cómo se hace<br />

concretamente? Por ejemplo si vamos al bar, no te digo: ¿qué quieres? Te digo en cambio: yo soy el padre y sé que en esta edad<br />

eres pequeño y tienes cinco años, no puedes beber la cerveza y entonces pongo un confín en el que hay muchas cosas y te las dejo<br />

elegir, así te dejo sentir capaz de elegir. Hay el chocolate, la leche, la bebida. ¡Pero yo quiero otro! No, sólo puedes elegir lo que hay<br />

dentro. O tiene que vestirse y yo he estirado y lavado estas tres cosas, tú puedes elegir entre éstas. ¡Quiero otra cosa! No, sólo<br />

puedes elegir entre éstas. Soy yo que decido el confín. Si hay el confín, funciona el aspecto educativo. Si en cambio no hay el confín,<br />

la personalidad no tiene confines. Es indefinida. No hay.<br />

Método. 9. Podar, segunda parte. Reglas y consecuencias.<br />

Aquí hay un <strong>método</strong> para solucionar el problema del podar, del límite. Los padres pueden juntos a los niños contratar, pues hacer<br />

una especie de contrato un acuerdo con patos claros y amistad larga. Pues los padres tienen que encontrar juntos al niño las cinco<br />

reglas fundamentales que absolutamente hacen falta para vivir. Yo no las llamo reglas pero límites necesarios, porque la regla da la<br />

impresión de algo decidido por el exterior, impuesto. En cambio yo lo llamo límite necesario a la vida. Hace falta decir al niño:<br />

decidimos juntos, pero tenemos que decidir cuatro o cinco cosas juntos y tienen que respectarlas, porque hacen falta para tu<br />

crecimiento, para tu vida. Programar las reglas y dejar respetarlas es típico de la función paternal. <strong>El</strong> padre tiene que hacerlo. No<br />

puede delegarlo a la madre. Mejor tacerlo juntos, pero nunca sin el padre.


<strong>La</strong>s reglas pueden ser: no puños y patadas, porque no tienen que pegar, porque si lo hacen entre hermanos, pegan también fuera.<br />

Son cosas que crean problemas de personalidad y tienen que estar administradas. <strong>La</strong>varse sólo, vestirse sólo, porque no es posible<br />

después de los 6 años que todavía lo ayudan los padres. Dormir en su cama. Luego yo estoy en tu cama, te doy la mano, dejo que<br />

no tengas miedo, te doy ánimo, espero que te duermas, nos hablamos, nos intercambiamos un poco de cariño y cuando duermes<br />

yo voy en la cama grande y voy fuera. ¿Y si por la noche vuelve? Te levantas y lo reconduces y le das la mano. Así despacio siente<br />

que, si ves que estás seguro tú, puedes estar seguro también él. No se miente. Ésto es importante porque el instinto va a tomar lo<br />

que quiere, también fuera de casa. Hacer las tareas por dos horas. Hace falta darte este límite por las tareas. Tú decides dónde,<br />

como, cuando, pero hacen falta dos horas. No delante de la televisión encendida, porque no funciona y no puedes concentrarte.<br />

Pero tienes que hacer dos horas, así haces tareas con calma y no corres para ir a jugar con la PlayStation. Hacer las tareas en cinco<br />

minutos no funziona. Hay un espacio protegido para tu comprensión, para el pensamiento, para aprender. En la mesa tiene que<br />

estar sentano y se come lo que hay. Es imposible que tú le corres detrás con el plato y le des de comer delante de la televisión. Es<br />

terrible esta cosa porque tú eres como un padre, pero como un sirvo, como un mayordomo y él se convence que es el rey, el<br />

dueño, y puede hacer lo que quiere. Despacio no comerá nada y la cosa peor es que en su mente él pensará que puede quitar todo<br />

lo que quiere de su vida. Luego puede quitar el trabajo, puede quitar el colega que no quiere, también puede decidir por otros. En<br />

cambio tienen que estar sentados a comer lo que hay. Ciertamente no tengo que jejarte comer todo, todas las hortalizas. No,<br />

podemos quitar dos de ellas o tres, pero sobre la necesidad de las hortalizas tenemos que insistir desde pequeños. No tenemos que<br />

decir: ¡no las come! ¿Pero cuándo tiene una pulmonía y no quiere hacer la picadura o no quiere tomar el antibiótico, tú que haces,<br />

lo dejas morir? Pero ¿qué hace?, también yo no las comí. ¡Pero bromeamos! Si no como las hortalizas, hay también problemas<br />

serios a nivel orgánico y además a nivel mental, porque él sigue pensando que puede quitar todo. Una cosa es que no aceptas una<br />

cosa, otra es que quitas todo de aquella categoría. Todavía, un juego al mes. No es posible que tú mamá, cada vez que sales, tienes<br />

que comprar un juego, porque está en casa con la abuela. ¡Pero bromeamos! ¿Los niños no tienen la capacidad de sobrevivir? Dios<br />

ha dado a los niños esta capacidad de sujetar las situaciones. ¡Tened que activarla! ¡No vos sintáis en culpa! Un juego al mes. Podéis<br />

decidir el coste: € 20 o un juego de cinco euro por la semana. Lo importante es que no se supera € 20 al mes o cuatro juegos de<br />

cinco euros o uno de 20. Según la edad, según el niño, según la situación familiar. ¡Pero no es posible que hay estos juegos o estos<br />

regalos todos los días!<br />

He puesto: consecuencias y no castigos, porque el niño tiene que darse cuenta que su vida está hecha por elecciones. <strong>La</strong>s<br />

elecciones tienen consecuencias. Si hago una elección positiva, tendré la consecuencia positiva, si hago un selecto rechazo, será<br />

negativa. Si yo acepto el límite que me he dado, en la vida todo queda bien, si no robo no tengo problemas de ir en prisión. Pero si<br />

yo hago algo que no va, si robo, tengo que saber que la consecuencia natural es acabar de ser tomado por la policía, de tener<br />

problemas con la justicia. Tengo que saber que hay una consecuencia. A un selcio rechazo hay una consecuencia negativa. Luego si<br />

él no se viste, da las patadas etcétera, ¿los padres qué hacen? Por la tarde se reúnen juntos y deciden las consecuencias del día. A<br />

cada cosa negativa corresponde un castigo, una consecuencia negativa. Hago 3, 3 consecuencias. ¿Cúales? No amigos por un día.<br />

¿Porqué no de más? Porque si no, no funciona, pero todo el día él está en casa. No tv por un día, no la ve por todo el día y por la<br />

tarde. Por la tarde va en cambio a su habitación y el hermano la ve. No ordenador por dos días porque por dos días funciona mucho<br />

más. No pelota y entrenamiento por un día, si ha dado patadas o mordidos o puños. No al cine con la familia. <strong>El</strong> domingo él queda<br />

en cambio con los abuelos y el hermano se ve la película preferida. No patatas y helados por toda la semana y el hermano las come.<br />

¡Pero, pobrecito, está mal! Tiene que estar mal, tiene que comerse los codos y tiene que entender y tiene que sentir que no le<br />

conviene. Más está mal, más después estará atento. Sólo un instinto está vencido con otro instinto. No dos euros de la propina. Es<br />

mejor dar una pequeña propina por ejemplo siete euros por la semana a los niños de siete años. Yo te quito dos euros de la propina<br />

de la semana siguiente. No juego mensual. ¡Todas estas reglas, no puedo! Nosotros no tenemos que mirar todas la pequeñeces,<br />

como está, etcétera, apostamos a ests cinco. Tienen que respetar estas 5 reglas por 15 días. Por 15 días eres fuerte y trata de<br />

resistir. Tienes que dejarle respetar las reglas por 15 días todos días y llevar a la práctica las consecuencias. No sólo a voz sino<br />

concretamente. Después de 15 días pasa que, como el vaquero sube sobre el caballo salvaje para domarlo y si puede quedar sobre<br />

la silla hasta el final, el caballo estará domado y tendrá las riendas, ésto es el instinto. Domamos el instinto del niño. ¿Pero si un día<br />

yo no lo hago, o sólo lo hago con dos reglas y no con cuatro? No se soluciona, no funciona. Tienes que empezar de nuevo. Funciona<br />

como con los antibióticos. Tienen que tomarlos todos los días a la misma hora, si un día ellos no los toman, tienen que empezar de<br />

nuevo si no no funciona y la curación no ocurre. Si el niño no vive el límite no tiene tampoco el sentido de su identidad. Luego al<br />

final cuando tendrá las riendas, este caballo podrá lanzarse, o parar cuando hay un barranco. Si nosotros nos convertimos en los<br />

caballeros de su instinto, él de adulto podrá convertirse en el caballero de si mismo, entonces de su emociones, de sus instintos y<br />

se quedará bien.


<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 10. Cultivar para formar el yo.<br />

¿Entonces qué quiere decir cultivar? Cultivar quiere decir dar el agua todos los días, el aire, la luz, a la planta. En el educar de los<br />

padres, quiere decir todos los días cuidar del niño. Sí, pero ésto ya lo hacemos. Pero aquí quiere decir cuidar de manera estable,<br />

constante, concreta, de la parte central de su personalidad: de su yo. Como con el nutrir formamos lo inconsciente y con el podar<br />

formamos el Super-yo, así con el cultivar formamos el yo, la parte de la conciencia. Es decir que hacemos de manera que venga<br />

fuera y se active el yo. ¿Cómo hacemos? Propongo dos modos.<br />

Uno es ésto: un espacio dedicado. Nosotros tenemos que buscar una media hora al día, o 20 minutos, un espacio de tiempo, si no<br />

podemos todos los días, un día sí y uno no, un poquito como hacemos con el agua de la planta. Hay un espacio protegido,<br />

protegido por nuestro trabajo, protegido por nuestros empeños. Todo para él. También protegido por nuestros miedos, por<br />

nuestras angustias, por nuestros problemas. ¿Qué hago en este espacio? Si es pequeño: aprendemos a conocer el mundo. Pero lo<br />

importante es que en este espacio no sea el adulto a decidir lo que se hace, pero se decide juntos. Juntos es la palabra que<br />

funciona. Juntos, así respeto tu necesidad, tu capacidad y te dejo sentir protagonista de ti mismo. Luego te pregunto: ¿qué<br />

decidimos, qué aprendemos hoy? A hacer la ducha, a poner en orden la habitación, porque también los niños tienen que limpiar<br />

una vez a la semana. En la adolescencia en cambio una vez al mes porque son más confusos y la habitación se parece a ellos. Luego<br />

como limpiar la habitación, como aprender a cocinar, como puedes ayudarme a deshacer. Te enseño. Antes lo hago yo y luego<br />

pongo detrás las manos y con la voz te conduzco y luego sin voz tienes que hacer sólo. Si has aprendido, puedo pedirtelo. Pero es<br />

fundamental que estas cosas las hacemos con calma y las hacemos tranquilos, porque podemos. Te enseño las cosas que de la<br />

casa, pero también te enseño las cosas del mundo. Nadar, ir en bicicletta, sentirse capaz. Pero no sólo esto, te enseño como<br />

encontrar amistades, te enseño aún más como funciona el mundo. Vamos al ayuntamiento, vamos a entender cómo funciona el<br />

ayuntamiento, cuantos despachos hay, que hacen, como está organizado, cuales son las cosas importantes que se hacen en el<br />

ayuntamiento. Vamos al correo y aprendemos como está organizado, a que sirve, como funciona. Hacemos lo mismo con el cuartel<br />

de los guardias civiles y lo hacemos con el hospital. Vamos a ver como las personas son curadas, como funciona y como es<br />

programado. También vemos como la parroquia y la Iglesia está organizada. Pues tenemos que empezar a explicarle como es el<br />

mundo. ¡Pero lo entiende! No, hace falta que tú lo programas y lo explicas. <strong>La</strong> matemáticas no se aprende sólos, hace falta que<br />

alguien la impone. Son cosas demasiado importantes para dejar que vengan sólas. Esta media hora se puede dedicar al cariño y a la<br />

relación. Estamos juntos. ¡Pero no me habla! Pero estás tranquilo, estás cerca de él, no te preocupes si no habla. Pero mientras<br />

tanto lavo los platos. No, estás allí, vives su emoción, vive su silencio. ¡No me quiere! Al principio se sentirá un poco mal, pero luego<br />

empieza a entender que no es un caso y que tienes realmente a él. Esta cosa le cambia el mundo, porque se siente cuidado, siente<br />

que alguien realmente lo está ayudándo y comparte a su preocupación, a su miedo, a su ansiedad. O utilizamos este tiempo para<br />

enseñaral niño a entender si mismo. Le digámos: eliges un problema que tienes, lo describes y lo cuentas. Y yo como padre, te<br />

ayudo, como una guía un catalizador, te enseño como investigar esta cosa. Ponla a fuego y trata de entender las causas. ¿Por qué<br />

ha pasado? Y entiendes no sólo una causa, pero localizas más causas. Pero no lo hago yo padre, es tú que tienes que hacerlo.<br />

Después de que has buscado las causas, buscas una solución y también más soluciones. Pero no tiene darlas el padre. ¿Pero si me<br />

dice una cosa estúpida? Deja que diga la cosa estúpida. En aquel entonces es su respuesta. Pensará un día y llegará a decir: aquella<br />

no fue la respuesta justa. Pero nos ha llegado sólo. Si lo haces tú, nunca aprenderás. Él tiene que aprender a utilizar las fuerzas que<br />

tiene. Si lo haces tú, nunca saldrá su personalidad, su auténtico si. Protegerlo quiere decir darle el instrumento, enseñarle a pescar,<br />

no le des el pez. Sólo así será realmente autónomo, libre y responsable.<br />

Ahora vemos la segunda manera para cultivar, para dejar que el yo salga. Hace falta hacer estas tres preguntas importantes. <strong>La</strong><br />

primera: ¿qué piensas? ¿Sobre esta cosa, que piensas tú? Empieza a formarte un pensamiento y lo dejas salir. No uno pero muchos.<br />

Luego enfócalos. ¿Si hay muchos pensamientos en tu cabeza, qué eliges? ¿Qué puerta abres? ¿Qué tomas como tuyo, cuál sientes<br />

más en sintonía contigo mismo? Ésto quiere decir aprender a entender lo que somos y nuestra unicidad y originalidad. Luego no<br />

tenemos que pensar como los otros como un rebaño. Nosotros somos nosotros mismos cuando tenemos nuestra idea sobre algo.<br />

También aquí el padre no tiene que decir: esta cosa es mejor. No, espera, deja que piensa y que vuelva. Hace falta aprender en la<br />

vida a tener la duda, a repensar, a entender que se pueden hacer errores. Nadie es perfecto, nadie tiene las respuestas por todo,<br />

hace falta buscarlas en su momento. Sólo Dios es perfecto. <strong>La</strong> segunda pregunta: ¿qué sientes en tu corazón? ¿Qué emoción hay?<br />

Empieza a pensar que las cosas no se pueden entender sólos, no se sienten sólos con la mente, pero también sienten con su<br />

corazón. Y el corazón puede coger cosas muy importantes, aún más importantes de la razón. ¿Qué emoción hay, que sensación?<br />

¿Qué sientes? Tristeza, dolor, alegría, melancolía. A veces el corazón indica la calle justa para el pensamiento. Otra pregunta: ¿qué<br />

hau en la barriga? ¿Pues a nivel intuitivo, qué sensación tienes? ¿Qué imaginas? ¿Qué imaginación hay? ¿Qué preves en el futuro?<br />

¿Cómo acabará esta cosa? Empieza entonces a ver en perspectiva, empieza a imaginar. De esta manera se educa la imaginación. <strong>La</strong>


imaginación es muy importante porque activa los recursos interiores carácteres, connaturales a nuestro ser humano, profundas.<br />

Son predisposiciones hereditarias a imaginar a intuir y están orientadas a prever lo que puede pasar. <strong>La</strong> previsión permite de<br />

entender lo que hacer, si yo puedo verlo en perspectiva, puedo entender lo que tengo que hacer en este momento. ¡Luego educar<br />

a ver en perspectiva permite de saber, de estar seguros de lo que se hace, de lo que es posible o no es posible! Todo esto siempre<br />

pasa en la famosa media hora protegida. Es mejor una hora, si posible.<br />

<strong>El</strong> <strong>método</strong>. 11. Educar a los valores.<br />

Si queremos educar el niño, tenemos también que hacer esta cosa. Tenemos que educarlo a los valores. Si no la educación no es<br />

completa. ¿Por qué a los valores? Porque son las características típicas, las predisposiciones naturales innatas de la persona<br />

humana que los animales no tienen. Son las virtudes fundamentales que hacen la persona verdadera, que la dejan realmente ser si<br />

mismo, que la dejan realmente ser positiva, que la dejan realmente resplandecer. Y convertirse en un tesoro precioso. Estas<br />

predisposiciones innatas son tan importantes que, si no las activamos, nos quedamos mal. Y nos quedamos mal aunque activamos<br />

las opuestas. Vemos ahora cuales son.<br />

<strong>La</strong> honestidad. <strong>La</strong> honestidad viene de HONOR que significa: honor. <strong>La</strong> persona honesta es una persona de honor. Es la que es leal,<br />

cuando dice una cosa, es aquella y la mantiene, porque es una calidad de base. Lo contrario es la deshonestidad y entonces la<br />

traición y cuando lo hacemos, activa partes negativas de nosotros que nos dejan quedar mal. <strong>La</strong> justicia viene del latino: IUS que<br />

significa: recto. Respetar el derecho de los otros quiere decir que también mi derecho pueda ser respetado por los otros y entonces<br />

yo puedo defenderme y también tutelarme por los otros. Luego el respeto de la justicia también es fundamental para proteger si<br />

mismos. Verdad. <strong>La</strong> verdad es fundamental porque nosotroscuando estamos en la verdad, nos quedamos bien. Cuando estamos en<br />

la falsedad, las mentiras, los testimonios falsos, hay situaciones de sufrimiento. Tú dices: ¡pero yo no me quedo mal! Si, pero<br />

endurecen tu corazón hasta que tú al final no apeteces más tampoco de estar mal. Pero tienes el corazón duro y está secando<br />

como una planta a que no das el agua. <strong>La</strong> verdad está cercana a la realidad. ¡Pero cada uno tiene su verdad! No, la verdad está<br />

correlacionada a las situaciones de realidad. Si esta cosa ha pasado, tú puedes interpretarla como quieres, pero hay un punto firme:<br />

esta cosa ha pasado, está en la realidad. Dignidad. <strong>La</strong> dignidad es el derecho de existir, nadie puede quitarlo. Es el derecho de<br />

pensar por nuestra cabeza y de expresarnos. Cuando alguien lo quita, volvemos esclavos. <strong>La</strong> negación de la dignidad es la<br />

esclavitud, el abuso, y ésta es realmente grave porque nos quita la dignidad de seres humanos, el derecho de seres humanos. Vida.<br />

<strong>La</strong> vida es una cosa absolutamente innata y hace parte de nosotros y todo lo que ha muerto nos destruye. Respeto. Respeto viene<br />

de la palabra: RESPICIO que significa mirar de nuevo. Es como si una cosa tuviera que estar mirada dos veces y entonces<br />

doblemente. Hay cosas que tienen que tener respeto, ser miradas dos veces y son los niños y los ancianos de una sociedad. Cuando<br />

una sociedad no respeta los niños y los ancianos, es una sociedad que se está arruinando y también la persona se está arruinando.<br />

Está secando y dentro de él la parte negativa empieza a tener el predominio. Es un problema para su psique que no se ve, pero hay.<br />

Además de los ancianos, también las personas enfermas, todas las personas débiles. Todavía vemos otros valores. Son: el ánimo.<br />

Falcone y Borsellino son símbolos del ánimo. Porque el ánimo no es la falta de miedo, pero el saber, la conciencia, que es algo de<br />

más importante que el miedo, que nos permite que superar el miedo y que hacer algo de adulto. Cuando el niño encuentra<br />

dificultad a crecer, tiene que saber que algo lo espera de más importante: su vida, su futuro, lo que él es, sus conquistas. Pues, si en<br />

perspectiva hay algo bonito, puede moverse. <strong>El</strong> amor y la amistad. Dijimos amor y amistad son las cosas que nos atan. <strong>La</strong> amistad<br />

es el ensuciarse las manos, pues tener juntos el mismo dolor. Solidaridad. Es este rellenó hombro, este tomarnos junto por la<br />

mano. Viene del latino: SOLIDUS que quiere decir volverse fuertes. Juntos volvemos fuertes. Ésto es particularmente para las<br />

personas débiles que tienen que alguien las ayudan. Juntos se puede. <strong>La</strong> paz es connaturalizada, porque nosotros con la guerra y<br />

con la destrucción nos quedamos mal. Es una parte, una necesidad, una necesidad de la psique. <strong>La</strong> sinceridad viene del latino: SINE<br />

CERA y quiere decir sin cera. Fue un modo para devolver una cosa pura o íntegra. ¡<strong>La</strong> persona sincera es una persona íntegra, hace<br />

ternura, pero tiene colores maravillosos y que delicadeza! Es una persona pura, verdadera. <strong>La</strong> humanidad. <strong>El</strong> género humano es<br />

como la luz. <strong>La</strong> luz está formada por muchos colores y lo mismo nosotros. Nosotros pertenecemos al género humano como las<br />

pintas a la luz y todos pertenecemos a la misma cosa. No podemos creer que somos diferentes entre nosotros, porque<br />

pertenecemos a algo que nos supera, que es más importante que nosotros.<br />

Por último la espiritualidad que es el valor, el tesoro más importante. <strong>La</strong> espiritualidad es una tendencia innata, es una<br />

predisposición natural a la eternidad, al infinito, a lo universal, a lo divino, es algo más grande que nosotros. <strong>La</strong> psicología analítica


ha descubierto que esta parte es fundamental. Cuando las ciencias como el materialismo, el racionalismo, el scientismo, niegan<br />

todo lo que no es ciencia o no es materia o no es racional y quitan de la persona la espiritualidad, la niegan, la anulan, cuando en<br />

una persona está anulado ésto, la espiritualidad cazada por la puerta regresa por la ventana, pero de forma negativa. En efecto<br />

cuando una sociedad sin espiritualidades está dominada por el materialismo, por el dinero y por el provecho, empieva a ser atraída<br />

y atraída de manera obsesiva del horror, brujos, brujas, zombie, vampiros, o de elementos negativos como muertos, sadismo,<br />

destrucción, maldad. Es como si no pudiera prescindir de la espiritualidad. Entonces o la vives en positivo o la vives en negativo.<br />

¡Ved cuanto es fundamental! Es la parte más profunda de la persona. Para que no tomamos la vida de manera negativa es<br />

fundamental que la vivimos de manera positiva. Si la vivimos en positivo no no somos tomados y también fagocitados por la<br />

negativa, que puede llegar a dominar sobre nuestra psique y a destruirla.<br />

<strong>El</strong> aspecto positivo de la espiritualidad es que nos relaciona con Dios. Con Dios que es nuestro Padre, es el origen de nuestra vida.<br />

Es Lo que ha venido antes de nuestros padres. Es Lo que nos ha querido, selecto, antes de la creación del mundo. Nos ha pensado<br />

antes de la creación del mundo. ¡Ya quién pensó! Y luego como un jardinero nos ha creado todas las condiciones para vivir, para<br />

dejarnos crecer. También nos ha dado la libertad para que pudiéramos elegirlo y reconocerlo y relacionarnos con Él. Reconocer Él,<br />

su amor y poder relacionarnos con Él con amor. Nos quiere mucho para mandar su Hijo que ha dado su vida para nosotros, para<br />

reconducirnos a Él, al Padre, y para dejarnos convertir en sus hijos. ¡Hijos adoptivos de Dios! ¡Nos ha preparado cosas guapas! Para<br />

quedar con él para siempre, para darnos su amor para siempre, para darnos su vida para siempre. Pensar que es Dios, y quedar con<br />

él para siempre es realmente el bien absoluto, el valor, el tesoro más grande que ninguna otra cosa en el mundo puede darnos.<br />

Autore: dr.ssa Vallorani Maria Grazia Psicólogo Psicoterapeuta<br />

© 2011 - Todos los derechos reservados. <strong>El</strong> presente texto es libremente reproducible para uso personal con la obligación de mencionar la fuente y<br />

la prohibición de modificarlo, también parcialmente, por cualquier motivo. Y' prohibido utilizar el texto para fines lucrativos. Por cualquiera otro<br />

empleo es necesaria la expresa autorización del autor. Publicado en el marzo de 2011, online de enero 2013. Los abusos serán perseguidos a norma<br />

de ley.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!