reflexiones para la gestión del deporte en el futuro

REFLEXIONES PARA LA GESTIÓN DEL DEPORTE EN EL FUTURO
Javier Gómez-Navarro
La Pedrera, Barcelona, 11 de diciembre de 2002
En los últimos años, en las sociedades occidentales, y con un cierto retraso en
Cataluña en relación a países europeos –Francia, Alemania, Suecia, Noruega, etc..- ,
se ha producido un cambio significativo en la organización de los modelos deportivos:
se ha pasado de un sistema de organización lineal, basado en la estructura para la
competición deportiva: clubs –federaciones locales – federaciones nacionales –
federaciones internaciones, y que según algunos autores respondía a las necesidades
e intereses de la organización industrial capitalista 1 (“el deporte al servicio de la
producción”, “respeto a unas normas”, “disciplina”, “desarrollo del sentimiento de
grupo, y trabajo en equipo”, “entrenamiento para la superación”), a un modelo de
organización transversal en el que la práctica deportiva tiene y ocupa otros valores e
intereses en la sociedad, más propio de la postindustrialización y de la sociedad del
conocimiento.
El modelo lineal podríamos resumirlo en el siguiente esquema:
FFII
AUTORIDAD
PÚBLICA
Modelo
Lineal de
práctica
Federaciones
Españolas
Federaciones
Catalanas
AUTORIDAD
PÚBLICA
Clubes
Deportistas
1 Joseba Arregui. “El deporte en las sociedades actuales”. Conferencia pronunciada el 18 de septiembre
de 2001, en el ciclo “El deporte del futuro”, organizado por el Area d´Esports de la Diputación de
Barcelona.
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Hace 25 años, aproximadamente, el 80% de la práctica deportiva se articulaba a
través del sistema lineal tradicional de clubes y Federaciones, orientado a la
competición deportiva. En Cataluña, y durante el siglo XX, este modelo de
organización ha sido sólido, testigo de la fortaleza de su sociedad civil y responsable
del éxito deportivo del país.
El 20% restante correspondía a una práctica libre u organizada en otros ámbitos.
Sin embargo, hoy en día, el modelo deportivo ha cambiado en nuestra sociedad de
manera importante, y solo el 18% de la práctica deportiva en Cataluña se articula en
torno al deporte federado. El 82% restante lo hace a través de otras ofertas o de
actividad libre.
Algunas de las características del nuevo modelo deportivo quedan definidas a
continuación:
• Existencia de amplitud y diversidad de ofertas de práctica deportiva:
q
q
q
q
Han aparecido otras formas variadas de acercarse a la práctica de la
actividad física: fitness, aventura, salud, fines de semana y vacaciones,
masters, mantenimiento, etc...)
El niño tiene ahora muchas ofertas deportivas, antes hacer deporte era
una oportunidad que nadie dejaba pasar
La gente antes hacía “un deporte”. Hoy en día las personas buscan más
opciones de práctica (en verano, invierno, por diversión...)
Cada vez hay menos federados (o estos se han estabilizado) y sin
embargo cada vez hay más personas que hacen actividad física y
deportiva. Antes ser federado “era un honor y un prestigio”, hoy en día
esa condición ha perdido importancia.
• La Televisión ha distorsionado el modelo lineal del deporte. Se ha vaciado de
interés la competición deportiva media. Se ha encarecido, hay deportes que se
van “muriendo” –y otros que nacen- . Y dentro del deporte espectáculo también
se van produciendo diferencias entre competiciones. En general, se ha
producido una absoluta polarización entre deporte espectáculo y deporte ocio.
• La base social de la práctica deportiva ha cambiado totalmente. Antes era más
elitista, joven, con unas determinadas cualidades físicas. Hoy en día la base
social es el conjunto de los ciudadanos y ciudadanas, de toda edad y
condición.
• El objetivo fundamental de la práctica de actividad física y deportiva en la
actualidad y en un futuro próximo es LA SALUD.
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• “Competir” sigue teniendo sentido en el deporte. Pero en los niveles
intermedios y bajos del sistema la trascendencia del resultado ha disminuido
considerablemente.
• La selección de talentos para el deporte de alto nivel y espectáculo cada vez es
más precoz y más eficaz, con lo cual se rompe la cadena lógica y lineal de
participación.
• Las federaciones territoriales –en Cataluña y en resto del Estado- han perdido
espacio y cada vez tienen menos “clientes” en relación a sus competencias
tradicionales.
Un esquema básico del modelo deportivo con el que empieza el siglo XXI quedaría
reflejado en el siguiente esquema:
GESTIÓN TRANSVERSAL
P
R
O
F
E
S
I
O
N
A
L
Deporte
Espectáculo
Deporte
Alto nivel
G
L
O
B
A
L
U
N
I
V
E
R
S
A
L
NO
SOSTENIBLE
SIN APOYO
PÚBLICO
Competición deportiva Nivel medio
Federaciones Territoriales
A
U
T
O
F
I
N
A
N
C
I
A
B
L
E
“Fitness”
“Deporte
Salud”
“Deporte
en edad
escolar ”
“Deporte
para
Todos”
“Deporte
en la
naturaleza y
aventura”
“Deporte
Recreación”
“Masters”
L
O
C
A
L
I
N
D
I
V
I
D
U
A
L
En resumen, podemos concluir con una frase prestada que “EL DEPORTE NO ES
EXCLUYENTE –HAY UNA ACTIVIDAD PARA CADA EDAD Y CONDICIÓN- , PERO
LAS ESTRUCTURAS DEPORTIVAS TODAVÍA SÍ LO SON”.
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-2.- Algunos puntos débiles observados en relación al deporte en Cataluña y a la
nueva realidad del deporte.
Desde una perspectiva externa y teniendo en cuenta, por un lado, los datos e
indicadores objetivos del deporte catalán, y por otro, la percepción de la situación de
un conjunto muy importante de agentes deportivos, podríamos identificar los
principales puntos débiles de la organización del deporte en Cataluña en el siguiente
listado:
• Falta de liderazgo político, consecuencia de los numerosos cambios
producidos en los últimos años en la dirección del deporte en la Generalitat
y en la escasez de los recursos destinados al deporte.
• Escasa coordinación institucional, que contrasta con lo que siempre ha sido
un elemento diferenciador positivo del deporte catalán.
• El deporte en edad escolar, tanto en la organización en el seno de los
centros, como en el modelo de Juegos Escolares, que ha evolucionado muy
poco.
• Falta de visión de muchos clubs y federaciones antes los cambios en la
demanda de los ciudadanos –con excepciones en sentido contrario-
• La resistencia al cambio, que supone modificar medidas centenarias en
relación a la organización deportiva.
• Limitados recursos económicos, evolución tremendamente negativa del
presupuesto de la Generalitat (tres veces menos en pesetas constantes en
2002 en relación 1992).
• La debilidad de algunos puntos del tejido asociativo
• Niveles muy bajos del deporte femenino organizado, que alcanza el 17% de
las licencias federadas de Cataluña.
• Poca flexibilidad del PIEC, que se basa única y exclusivamente en un
planeamiento de reglamentos deportivos y no de necesidades y nuevos
servicios demandados por los ciudadanos.
• Algunas disfunciones en la formación de técnicos y algunas disfunciones en
la gestión deportiva de los Ayuntamientos
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-3.- Frente a esto, Cataluña cuenta con unos puntos fuertes que son los que han
producido los éxitos del deporte catalán en el siglo XX:
• La gran base del deporte catalán, su historia, la conciencia de práctica, la
tradición, la “cultura deportiva de los ciudadanos”. En Cataluña es donde
desde hace ya muchos años el deporte formaba parte de la vida de las
personas.
• Una red importante de equipamientos deportivos, que es preciso renovar
permanentemente, pero que llega a la mayor parte de la población.
• El asociacionismo deportivo: Los Clubs y federaciones, la tradición
asociativa, distinta a la existente en el resto del Estado.
• El papel de los Ayuntamientos y los Consells Esportius –estos últimos como
estructuras necesarias para el medio rural y el área metropolitana.
• Una demanda de actividad asociada al Deporte para todos, autofinanciable.
• La existencia de centros de referencia mundial en el nivel del conocimiento
deportivo (INEFC; laboratorios de dopaje, centro de medicina del CAR) y de
la industria y distribución de equipamientos y artículos deportivos.
• La referencia mundial de las más grandes competiciones deportivas (JJOO
92 y otras...).
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-4.- Puntos para articular el futuro.
En mi opinión, y visto siempre desde una perspectiva externa y un poco distante –pero
por eso, también independiente y no mediatizada- hay 4 ejes de actuación sobre los
que articular la política y la gestión deportiva del futuro, en Cataluña pero también en
otros muchos lugares del Estado :
REFORMAR PROFUNDAMENTE E IMPULSAR EL DEPORTE EN LA EDAD
ESCOLAR Y PARA LOS JÓVENES.
El diagnóstico sobre el deporte en Cataluña ha señalado, como una de las debilidades
más profundas, la situación del deporte en edad escolar: la falta de conexión entre la
educación física y la práctica deportiva, la duplicidad de actuaciones en la competición,
la falta de organización deportiva en los centros educativos -públicos,
fundamentalmente- , la insuficiencia de la formación de técnicos orientados a la
iniciación, un modelo anticuado de Juegos escolares que expulsa y margina a un gran
número de alumnos, la falta de conexión entre las diferentes ofertas que hoy tienen los
niños, la falta de coordinación entre entidades e instituciones, etc...
Un objetivo fundamental es trabajar sobre la práctica de la actividad física y el deporte
por los escolares y los jóvenes, posibilitando que el centro educativo –por donde todos
los niños y niñas pasan obligatoriamente hasta los 16 años y voluntariamente los
jóvenes hasta edades más avanzadas- se convierta en eje de desarrollo deportivo,
liderando y coordinando las redes de participación en el nivel de barrio, municipio o
comarca.
Solo si generamos un deporte no excluyente en la escuela, estaremos consolidando la
actividad física y el deporte como un elemento de salud, de cohesión social, de
ocupación activa del tiempo libre y de recreación. Este objetivo solo será posible
desde una implicación decidida de las administraciones educativas.
CONSTRUIR Y CONSOLIDAR REDES DE DESARROLLO DEPORTIVO,
SOSTENIBLES ECONÓMICAMENTE, QUE POSIBILITEN EL ACCESO A LA
PRÁCTICA DEPORTIVA VOLUNTARIA DE LA CIUDADANÍA
En otro nivel, se trata de generar redes y formas de participación deportiva como
acción voluntaria que sean sostenibles económicamente. Eso afecta al desarrollo de
las ofertas deportivas de carácter público para los ciudadanos, al sistema asociativo
del deporte catalán –a los clubes deportivos- , a las federaciones catalanas, al deporte
de alto rendimiento, a las instalaciones deportivas, al sistema comercial y de mercado
de actividades físicas.
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El objetivo está relacionado con la necesidad de racionalizar esas redes de
participación, de acuerdo a los cambios que se producen en el modelo deportivo y en
la demanda de los ciudadanos –aunque esa racionalización supongan modificar
medidas “centenarias”- para que sean viables.
El objetivo tiene que conllevar acciones en torno a reforzar la solidez de las estructuras
del deporte catalán: formación de técnicos y dirigentes, instalaciones deportivas
viables, tejido asociativo tradicional, federaciones, sector comercial –de las
actividades, servicios y del equipamiento y material deportivo- y legislación.
PENSAR EN GESTIONAR EL DEPORTE DESDE LA TRANSVERSALIDAD:
El deporte cada vez tiene que ver más con otros sectores de la actividad social y
pública: el deporte para los niños y jóvenes tiene que ver con la gestión educativa; el
“deporte para todos” y la actividad diaria de los ciudadanos tiene que ver con la
“salud”; el deporte es – puede ser- un elemento importante de integración y cohesión
social; el deporte va cada vez más asociado a uno de los sectores clave de la
economía catalana: el turismo; el sector comercial de los equipamientos, materiales y
artículos deportivos tiene en Cataluña su marco de referencia en el Estado. En
definitiva, la gestión únicamente “vertical” o lineal del deporte va perdiendo sentido, ya
que es en otros muchos sectores donde tiene razón de ser la intervención pública.
Ese objetivo de gestión transversal del deporte en el ámbito catalán puede extenderse
a los ámbitos locales, donde por su dimensión y características puede integrar
asimismo a entidades de carácter privado.
RECUPERAR EL ESPIRITU DE COORDINACIÓN, COLABORACIÓN Y TRABAJO
CONJUNTO –PROPIO DE LA SOCIEDAD CATALANA– ENTRE EL SECTOR
PÚBLICO, EL SECTOR ASOCIATIVO Y EL SECTOR COMERCIAL DEL DEPORTE.
Una de las características del deporte catalán –pensamos que inherente también a su
historia - ha sido –visto externamente- la capacidad de coordinación, de pacto, de
llegar a acuerdos, de “poner todos los recursos en la misma dirección”. Solo así han
sido posibles hechos como los pasados Juegos Olímpicos de 1992.
Esa capacidad de coordinación, colaboración y trabajo conjunto de los diferentes
agentes del deporte catalán pensamos que se ha perdido y debe recuperarse en
todos los ámbitos, tanto para el día a día en los pueblos, ciudades y comarcas –donde
esa coordinación es manifiestamente mejorable- , como en niveles más altos. Trabajar
en ese sentido es tarea de todos, pero exige asimismo un liderazgo fuerte del deporte
catalán, que tampoco ha existido en los últimos años.
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