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La Plata, domingo 20 de julio de 2014 7
El paro de los portuarios,
que piden diálogo con el
gobierno, generó grandes
pérdidas. Bancarios y
otros sectores,
enfrascados en largas
peleas. Crece el conflicto
La intransigencia K
genera pérdidas millonarias
Los trabajadores portuarios decidieron
suspender el paro en los
puertos de la zona norte del Gran
Rosario durante el fin de semana,
para esperar una señal del gobierno y ante la
expectativa de que mañana se reúna el jefe de
la central sindical de la ciudad santafesina de
San Lorenzo, Edgardo Quiroga, con el jefe
de Gabinete, Jorge Capitanich. Eso sí, la medida,
agitada por la falta de respuestas de la
administración K, dejó en el camino 13 millones
de dólares, que se perdieron por la intransigencia
como forma de hacer política.
En Tucumán, otro conflicto muestra una
actitud similar de la Casa Rosada, que apeló
a desligar responsabilidades en la gobernación
de esa provincia. Durante las últimas semanas,
bancarios de todo el país intercalaron
marchas, paros y protestas de todo tipo en rechazo
a una represión sufrida por los trabajadores
de la sucursal de San Miguel de Tucumán,
y en reclamo de la reincorporación de
los despedidos. Finalmente, ayer se conoció
que los despidos volvieron a fojas cero tras
una resolución judicial (ver aparte), pero
queda flotando en el aire que el conflicto podría
haberse evitado con una decisión política
fuerte desde el poder central. La decisión
estuvo, pero consistió en mirar para otro lado
y dejar que el país siga encaminándose hacia
una crisis ya no sólo económica, sino también
social y política, donde los reclamos se suceden
porque no hay respuestas.
Pérdidas millonarias
Se estima que la huelga, que fue suspendida
pero no levantada (es decir, los problemas
podrían volver al puerto de Rosario y alrededores),
dejó un saldo de trece millones de
dólares y la paralización casi total en la comercialización
de granos en esa región. En
concreto, la medida de fuerza de la CGT San
Lorenzo afectó las labores en las 22 terminales
portuarias del Cordón Norte del Gran Rosario
durante los últimos tres días de esta semana
(hasta el viernes inclusive).
Además, la protesta afectó a 30 muelles cerealeros
para carga y descarga, ubicados en
Puerto General San Martín, San Lorenzo y
Timbúes, y se realizó en solidaridad con los
trabajadores de la papelera Andino, a quienes
se les adeuda tres quincenas de pagos. La medida
de fuerza afectó desde el miércoles a unos
120 buques, que se encontraban amarrados
con carga completa sin poder salir con destino
al exterior, en la zona del Río de La Plata,
a la espera de órdenes.
Finalmente, fuentes del sector naviero y
portuario indicaron que "con un promedio de
5,5 días de demora, a razón de un costo de 20
mil dólares diarios, más el lucro cesante, sólo
por el alquiler de esos buques, las pérdidas superan
los 13 millones de dólares".
La Justicia
intervino por
los bancarios
Barcos amarrados y sin
descarga. Así se vieron
en la zona de Rosario
Analizan rever las
restricciones al trigo
Por orden judicial, los trabajadores de la
Caja Popular de Ahorros de Tucumán volverán
a sus tareas desde mañana lunes, luego
de que sus cesantías generaran un duro
conflicto nacional que incluyó medidas de
fuerza y represión.
El interventor de la Caja Popular, Armando
Cortalezzi, aseguró que ya fueron notificados
los empleados cesanteados "para
que vuelvan a cumplir tareas en la institución
a partir del lunes próximo.
"Estamos cumpliendo la resolución judicial,
por la cual notificamos a cada uno de
los empleados para que se presenten, el
lunes, en sus respectivos lugares de trabajo
cumpliendo las funciones que tenían antes
de su desvinculación de la Caja Popular",
adelantó Cortalezzi.
Ante los problemas que enfrenta el
campo por las restricciones impuestas
desde la Casa Rosada a la comercialización
de diversos productos, y con la consecuente
baja de la producción que ha afectado la
rentabilidad del sector, el ministro de Agricultura,
Carlos Casamiquela, admitió ayer
que ahora el gobierno analiza habilitar un
nuevo saldo exportable de trigo, pero condicionó
la medida a que los comercializadores
liquiden el remanente del cupo actual.
"Analizamos habilitar un nuevo saldo exportable
de trigo y 50 mil toneladas más de
harina, pero para eso primero tenemos que
terminar con el cupo actual", señaló Casamiquela
a través de un comunicado, y agregó
que “todavía hay 190 mil toneladas de
trigo autorizadas para exportar que los comercializadores
no están vendiendo”. Esta
situación, cabe destacar, se produce ante la
incertidumbre por la política oficial, y ante la
inestabilidad de la cotización del dólar.