libres de Bullying

FORMACIÓN EN NEUROSICOEDUCACIÓN: Sistema Línea de Cambio
NIÑO
ADULTO
JOVEN
ADULTO
MAYOR
Amígdala
Amígdala
Amígdala
LPF
PEQUEÑO
CONTROL EMOCIONAL
LPF
MEDIANO
LPF
MAYOR
Recordá que en la amígdala residen nuestros deseos, emociones, miedos; memorias
placenteras y dolorosas de diferente tenor. La amígdala masculina y femenina por ende es
diferente. Con respecto al tema, EL SEXO ocupa un espacio importante en el cerebro
emocional de los chicos e IR de SHOPPING en las chicas. Con respecto a la activación, es más
susceptible la amígdala masculina que la femenina; de ahí que las niñas sean buenas
moderadoras en las relaciones sociales y los niños más “combativos” en los conflictos
interpersonales, queriendo arreglar sus diferencias a los golpes.
Los comerciales televisivos y avisos en las redes sociales apuntan con excelentes estrategias
de marketing a esta estructura cerebral juvenil en crecimiento; incitando sus emociones y
movilizando sus instintos de consumo como forma de alcanzar el éxito.
Por otro lado, los LPF anidan la consciencia y las cualidades esencialmente humanas. Son los
observadores conscientes de los movimientos internos de nuestra mente; y los únicos que
nos permiten crecer y mejorar como personas.
Los LPF se encuentran divididos en módulos que con funciones especiales se clasifican en dos
grupos:
1. Los módulos externos: encargados del conocimiento del mundo exterior.
2. Los módulos internos: encomendados del conocimiento del propio mundo interior.
El hecho de que ambos módulos de los LPF de niños y teens estén poco desarrollados hace que
los mismos mantengan una vida un tanto simplificada; contando con rudimentarios
mecanismos de adaptación social y adoleciendo de limitaciones como:
Desconocer el significado de su existencia y misión en la vida.
No tener la capacidad de planificar a largo plazo
Carecer de la capacidad de dirigir la atención al mundo interior
Estar desprovistos del control emocional, pudiendo desarrollar conductas nocivas para si
mismo o hacia los demás.
No poder prever consecuencias de sus acciones
No ser capaz de cambiar de planes y ser flexibles.
No poder retardar la gratificación
Poseer un débil manejo de la adversidad y la frustración
Desconocer la empatia o el manejo de las relaciones interpersonales.
Carecer de valores fines o sociales
MONOGRAFÍA FINAL / Diciembre 2011 / ANA MARIA CERDÁ