Revista Salud. Enfermedad Renal Crnica de las Comunidades Agrcolas

EDITORIAL
Enfermedad Renal Crónica de las Comunidades Agrícolas.
De la investigación a la acción.
En Centroamérica, se han venido reportando hace más de una década un
número desconcertante de casos de Enfermedad Renal Crónica, cuya demanda
de servicios ha sobrepasado la capacidad de respuesta de los sistemas de salud
pública de la región, convirtiéndose en un serio problema de salud pública
por su alta incidencia, el deterioro de la calidad de vida de los afectados, el
número de muertes prematuras y el alto costo económico que genera tanto
para pacientes y familiares, como para los sistemas de salud.
La mayor parte de esos casos nuevos corresponden a un tipo de enfermedad
cuya etiología no se asocia a los factores de riesgo tradicionales, diabetes
mellitus e hipertensión arterial. De acuerdo a estudios realizados en El Salvador
esta enfermedad predomina entre trabajadores del campo, más comúnmente
hombres, de comunidades agrícolas pobres, generalmente aledañas a la
franja del Pacífico. Se le ha asociado a una serie de factores entre los que se
destacan: factores tóxico-ambientales como la exposición a agroquímicos y
metales pesados, factores ocupacionales como condiciones de trabajo con
altas temperaturas e inadecuada ingesta de agua, y factores relacionados a
hábitos nocivos siendo el más frecuente la ingesta de medicamentos nefrotóxicos
como antiinflamatorios no esteroideos.
En ese contexto, el Ministerio de Salud de El Salvador realizó a finales del 2009 una
solicitud de cooperación técnica urgente a la Organización Panamericana de
Salud (OPS) para dar respuesta a este incremento de carga de enfermedad y
demanda de servicios. Elevó además, llamados de alerta en diferentes ámbitos
regionales: reuniones de SICA, Conferencia Sanitaria Panamericana, Asamblea
Mundial de Salud 2011, Reuniones preparatorias de la región de las Américas
y Reunión de Alto Nivel de la Asamblea General de Naciones Unidas sobre
Enfermedades Crónicas No Transmisibles; en un esfuerzo por alertar e involucrar
a los demás países de la región.
Como respuesta, la Oficina Sanitaria Panamericana conformó un grupo de
trabajo inter-programático en Centroamérica a partir del cual se han organizado
importantes alianzas y actividades sub-regionales y regionales. Este grupo ha
sido conformado por varios organismos entre los que destacan la Organización
Panamericana de Salud (OPS), La Agencia Española para Cooperación
internacional y Desarrollo (AECID), el Centro para Prevención y Control de
Enfermedades de los Estados Unidos (CDC) y la oficina regional del Consejo
de Ministros de Salud de Centroamérica y República Dominicana (COMISCA).
Como parte de las gestiones, el Ministerio de Salud de El Salvador firmó con OPS
un Convenio Técnico de Cooperación entre Países, que le permitió convocar
un equipo de expertos nacionales e internacionales y elaborar una propuesta
estratégica para el abordaje integral de esta enfermedad, delegando la
coordinación del componente de Investigación en la Unidad de Investigaciones
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