Programa de mano 2 de abril - Orquesta y Coro de la Comunidad ...

EN MEMORIA DEL MAESTRO JOSÉ COLLADO
Hace aproximadamente treinta años escuché el
CONCIERTO LÍRICO de Julio Gómez en un concierto
fuera de abono de la Orquesta Nacional de España.
Tocaba como solista Joaquín Parra y dirigía la orquesta
el Maestro José Collado.
Fue un período en el que el Maestro Collado estuvo
a punto de ser nombrado Director Titular de la
ONE. Sus extraordinarias dotes habían sido refrendadas
en varias ocasiones, empezando por el reconocimiento
de su maestro, Franco Ferrara. Tiempo después,
abortada su candidatura para la titularidad de la
Orquesta Nacional, el Maestro Collado dio un cambio
de rumbo a su carrera, hasta entonces centrada en el
campo sinfónico, para dirigir su atención al mundo lírico.
Ese nuevo interés le llevó años después a ocupar
la titularidad del Baadisches Stadtstheater de Karlsruhe,
en Alemania y aún después a dirigir en los grandes
teatros de ópera europeos en producciones en las
que las primeras voces españolas, desde Juan Pons a
José Carreras y muy especialmente Montserrat Caballé
estuvieron presentes en numerosas ocasiones.
Muchos grandes éxitos han jalonado su carrera. Desde
la edición del Festival Internacional de Montepulciano
(Italia) del que fue director, hasta las numerosas ocasiones
en que bajó al foso del Teatro de la Zarzuela para
dirigir títulos del repertorio italiano –baste recordar el
Simon Boccanegra de 1982 con José Carreras– por no
hacer mención de una memorable Turandot con Ainoha
Arteta y la Orquesta Sinfónica de Euskadi. Si nos remitimos
a su vertiente sinfónica bastaría recordar sus varios
conciertos con la Orquesta Nacional de España, particularmente
exitoso aquél en que dirigió el Poema del éxtasis
de Scriabin, o una inolvidable Patética de Tschaikovsky
con la OBC en el Palau de la Música Catalana,
más sus conciertos al frente de orquestas europeas de
primera fila, como la de Bamberg en Alemania o la de
Katowice en Polonia, en programas en los que la música
española fue siempre tarjeta de presentación.
Sin embargo hay una dimensión en la vida del
Maestro Collado que, aún siendo menos conocida,
ha sido más notoria para quienes hemos estado cerca
de él.

La primera formación de José María Cervera Collado
tuvo lugar en la casa paterna. Su padre, el
Maestro José María Cervera Lloret, maestro de un
sinfín de músicos valencianos, desde Luis Antonio
García Navarro a Manuel Galduf, pasando por cuantos
directores de banda puedan imaginarse, instrumentistas
y compositores, fue un referente en Valencia
por su saber, por su capacidad para transmitir
sus conocimientos y sobre todo por su bondad y entrega
a los demás. Y fue también un referente para
su hijo absolutamente en todo. Él fue su principal
maestro en la música y en la vida y como Don José,
José María Cervera Collado, José Collado, fue un
extraordinario músico, posiblemente el director español
más dotado de los últimos tiempos, pero también
una extraordinaria persona para la que el ser
humano valía mucho más que el más brillante profesional.
Bien lo sabemos los que hemos tenido la
suerte de compartir con él muchos momentos de su
vida, quienes hemos disfrutado de su amistad.
De su actividad como compositor nos han quedado
algunos ejemplos; muchos de su carrera como director.
De su faceta más humana solo cabe decir algo
que sin duda habría satisfecho al propio José: estuvo
siempre a la altura de su padre.
Descanse en paz.
José Ramón Encinar

PROGRAMA
Joven Orquesta de la Comunidad de Madrid
Joven Coro de la Comunidad de Madrid
Mariana Gurkova, piano
Carlos Cuesta, director
I
Pedro Sanjuán (1886-1976)
Boceto sinfónico (4’)
Julio Gómez (1886-1973)
Concierto lírico para piano y orquesta (30’)
Allegro moderato
Lento
Allegro non molto
II
Gustav Holst (1874-1934)
Los planetas, Op. 32 (45’)
Marte, el portador de la guerra
Venus, el portador de la paz
Mercurio, el mensajero alado
Júpiter, el portador de la alegría
Saturno, el portador de la vejez
Urano, el mago
Neptuno, el místico

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Pedro Sanjuán: Boceto sinfónico
Pedro Sanjuán Nortes (San Sebastián, 1886 -
Washington, 1976), es uno de los músicos españoles
más ignorados de su época. Una época que se
sitúa entre medias de la generación de Falla y Turina
y la generación de la República. La razón estriba
en que su vocación por la dirección orquestal le
llevó pronto hacia América. Formado en Madrid
primero, con Pérez Casas, Falla y Turina, del que
llegó a ser gran amigo, y luego en la Schola Cantorum
de París, fue violinista en la Sinfónica de Madrid
y luego director de la Banda de Alabarderos
de la Casa Real.
En 1923 se traslada a Cuba y al año siguiente se
convierte en miembro fundador y primer director de
la Orquesta Filarmónica de La Habana. Su larga estancia
cubana será determinante, allí se convierte en un
director de talla internacional, en gran animador de
las vanguardias y en mentor de la nueva generación
cubana, siendo profesor y pronto colega de Amadeo
Roldán y García Caturla. De esos años han quedado
las crónicas de Alejo Carpentier, que vivió con pasión
el afianzamiento de esa orquesta que llevaba al corazón
de la isla los nuevos vientos musicales de Europa
y Estados Unidos.
En esos años, Sanjuán es también pionero de una
nueva mezcla estilística, al introducir ritmos y temas
antillanos junto con novedades de la vanguardia de
esos años, como Ives, Ruggles, Cowell, Gerswhin, así
como los europeos, Ravel, Stravinsky, Falla, etc. Es esa
huella la que aún se escucha en obras suyas como Liturgia
negra, La macumba, Sinfonía ritual, Babaluayé o
Canto cubano.
En 1932, Sanjuán regresa a España, no sin dejar
una honda huella en Cuba que aún hoy mantiene intacta
su reputación en la isla como impulsor de la renovación
musical cubana.

En España se compromete pronto con la causa republicana
y renueva su relación con amigos, colegas e
ideas. Aprovecha, también, para dirigir por Europa
(Alemania, Suiza, Hungría, Rusia, Austria, Portugal o
Inglaterra).
En 1934 obtiene el Premio Nacional de Música junto
con Salvador Bacarisse, Julián Bautista y Julio Gómez.
En 1935 es nombrado director del Congreso Internacional
de Música Contemporánea. El inicio de la
Guerra Civil, no obstante, frustra este regreso y ya en
1937 se encuentra de nuevo en Cuba, trasladándose
después a Estados Unidos, donde vivirá hasta su fallecimiento
en 1976.
En la música compuesta por Sanjuán se establecen
dos grandes líneas, la ya citada antillanista, trufada de
giros politonales y de gran diversidad rítmica, así como
otra castellanista, imperante antes de su primer
viaje a América y con reapariciones posteriores.
El nacimiento del Boceto sinfónico se debe a un
homenaje celebrado con motivo del 70 aniversario de
Enrique Fernández Arbós. El gran maestro había nacido
en 1863, por lo que 1933 fue cita obligada de la España
musical. En Navidades, se celebra un gran concierto
en el Teatro Monumental, con Arbós al frente
de su orquesta, en donde se interpreta la Quinta Sinfonía,
de Beethoven, la Triana, de Albéniz, con orquestación
del homenajeado y el estreno en España de la
Sinfonía de los Salmos, de Stravinsky. Asiste al concierto
el Presidente de la República.
Unos pocos meses más tarde, el 28 de marzo de
1934, un nuevo homenaje se añade al anterior. Arbós
y su orquesta se trasladan al Teatro Calderón de Madrid.
Junto con obras de Bach, Mendelssohn y Wagner,
la segunda parte está constituida por una curiosa
obra, nada menos que un largo puzzle formado por
catorce pequeñas piezas de otros tantos compositores
españoles.
La crítica madrileña parece quedar desorientada
ante el experimento y lo refleja al día siguiente. Así,
Enrique Ruiz de la Serna, en el Heraldo dice: “Bien dicen
que cada día se aprende alguna cosa. Ayer, sin ir
más lejos, aprendí yo que los compositores españoles
son “exactamente” catorce. A saber: M. de Falla, P.
Sanjuán, F. de la Viña, J. Bautista, J. Gómez, R. Halffter,
O. Esplá, J. Turina, G. Pittaluga, A. Salazar, F. Remacha,
E. Halffter, S. Bacarisse y C. del Campo. […] No voy a
discernir ahora quién merecería el premio, si lo hubiese.
Ni afirmaré que, en conjunto, esta magna obra resulta
un “tostón” […] Ni escribiré que entre los fragmentos
que más me gustan, entre los que de veras me
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gustan, están los que llevan las firmas de Julio Gómez,
Joaquín Turina y Adolfo Salazar, ya que se atribuiría esta
preferencia a mi camaradería con quienes tienen por
oficio registrar los sucesos musicales. No discierno, no
afirmo, no escribo. A callar se ha dicho”.
El periódico ABC, a través de su firma A.M.C., no
se calla tanto: “Todavía con cinco o seis compositores
de los que fueron dados a conocer por Arbós en sus
primeros años de su dirección de la Sinfónica habría
estado bien, como afirmaba uno de ellos, pero ¡catorce
y de tendencias tan diversas como los afiliados al
homenaje…! […] Y al final del concierto, después de
oír a Bach, Mendelssohn y Wagner, la ovación y los gritos
de “¡Eso sí que es música!” atronaron en el espacio
y fueron compensación de la deplorabilísima segunda
parte”.
Para añadir más desasosiego al curioso homenaje,
se opta por transcribir las letras de Arbós a notas musicales
que los autores deben reflejar en sus respectivos
fragmentos: A - la; R - re; B - si; O - do; S - sol. Digamos
de pasada que se trata de una curiosa transcripción,
A y B corresponden, en efecto a la y si en la
tradicional notación alemana e inglesa, con la salvedad
de que B es si bemol en alemán y si natural en inglés;
pero R, O y S son apenas parte de la notación
tradicional latina, re, do y sol. Pero el procedimiento
debía de ser moda en esos años, con la reputación
que tenía la transcripción de Bach (si bemol, la, do, si
natural) y otros ejemplos célebres.
Pero, si para el crítico de ABC, el experimento era
“deplorabilísimo”, Juan del Brezo, en La Voz, hablaba
de: “un verdadero caleidoscopio de procedimientos y
orientaciones, que se sucedían con vertiginosa rapidez…”.
Poco se sabe de las catorce piezas. La de Falla era
la Fanfare que, más tarde, se incluyó en su suite Homenajes
y, es por tanto, la mejor conocida. El Preludio,
de Turina, se reconvirtió en la Fantasía sobre cinco
notas, op. 83. El Boceto sinfónico, de Pedro Sanjuán,
sería, en este caso, la segunda pieza de la “caleidoscópica”
y “deplorabilísima” suite. Una obra, breve
(no debían durar más allá de los tres o cuatro minutos)
que sonaba la segunda, justo después de la Fanfare
de Falla.
Julio Gómez: Concierto lírico para
piano y orquesta
Julio Gómez (Madrid, 1886-1973) es rigurosamente
contemporáneo de Pedro Sanjuán y, por tanto, es

digno representante de esa generación intermedia,
nacida con posterioridad a Falla (1876) y poco más
tarde que Turina (1882), una generación completa anterior
a los jóvenes que marcarían el paso de la República,
nacidos, en general, con el nuevo siglo.
Algún especialista los ha definido como la generación
de los maestros y, a tenor de su exigente formación
musical, no es una mala definición.
También viene a cuento Julio Gómez de la obra anteriormente
comentada; sobre todo del homenaje a Arbós
en el que Gómez participa con otra de las breves
obras, en su caso, la denominada Canción árabe. La
anécdota del citado homenaje nos recuerda la labor que
Julio Gómez realizó como crítico en el diario El Liberal
de 1928 a 1936. Nos lo hace notar el crítico Ruiz de la
Serna al destacar, aunque solo sea en su condición de
colegas, a Adolfo Salazar, Joaquín Turina y Julio Gómez.
La larga y ancha trayectoria profesional de Julio
Gómez ha dejado una muy fecunda huella en la historia
musical del siglo XX español, y muy especialmente
en su primera mitad. Compositor, profesor, ensayista,
crítico, académico, director en varios momentos, no
hay casi espacio de la vida musical que escapara a su
infatigable actividad.
Desde ese punto de vista, su memoria muestra
injustos olvidos, pese a que los especialistas lo han
seguido considerando en todo momento como una
figura capital. También ha contribuido a ello una independencia
permanente y un apego al legado tradicional
de la música que le hizo estar a contracorriente
en los principales “ismos” del tiempo que
vivió.
Sus obras son, no obstante, poderosas y plenas de
inspiración y, sobre todo, resisten bien el paso del
tiempo. Además de que su producción cubrió prácticamente
todas las preocupaciones profesionales que
un músico de su generación podía abarcar.
Desde ese punto de vista, resulta curiosa la escasa
atención que Julio Gómez prestó al piano en su catálogo,
un instrumento que dominaba, además.
Dos son, en efecto, las únicas obras presentadas al
público por el autor madrileño: las Variaciones sobre
un tema salmantino, para piano solo, y el Concierto lírico
para piano y orquesta, que es, por tanto, su única
pieza concertante para el instrumento.
El Concierto lírico fue compuesto en el verano de
1942. Periodo difícil en la vida del músico, que había
sido depurado por las autoridades franquistas, lo que
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aprovechó para realizar una intensa producción compositiva.
La obra estaba dedicada al pianista José Cubiles,
que la estrenó con la Orquesta Nacional bajo la
dirección del propio autor, aunque con algunos años
de retraso: el 2 de febrero de 1945.
En las notas al programa de este estreno se leía:
“Solamente se quiere cantar, cantar los propios
sentimientos; cantar con emoción y sinceridad, para
llegar por estos caminos, de corazón a corazón,
a la emoción del auditorio. La forma en que se desarrollan
los tres tiempos no se aparta de la habitual
en este género de composiciones, renunciando,
como ya lo hicieron muchos compositores desde el
Romanticismo, a la exposición de los temas en largas
introducciones orquestales. El material temático,
aunque en algún momento esté impregnado de
sustancia popular, no pertenece, a sabiendas, en
ningún caso, al folclore auténtico de región determinada.
Aunque cada tiempo tiene sus temas propios,
hay alguno que aparece en los tres, procurando
una cohesión que fortalezca la unidad de la
composición”.
Beatriz Martínez del Fresno, en su trascendental
trabajo sobre el músico madrileño, añade unos muy
ilustrativos comentarios a este Concierto, escritos por
el autor pero que finalmente no vieron la luz. En este
texto, Gómez nos da claves esclarecedoras de sus intenciones:
“Creía, y sigo creyendo, que el espíritu de
la música española vive y alienta en obras de los más
distintos géneros y que hay algo de común a todos,
que está por encima de esas diferencias exteriores. Y
ese algo es lo que los compositores españoles deben
creerse obligados a seguir”.
Así pues, este Concierto lírico para piano y orquesta
reflejaba con cuidadosa atención hondas preocupaciones
de Julio Gómez respecto al linaje musical español.
No es solo un alejamiento metódico de cualquier
connivencia con rupturas estéticas que, para Gómez y
gran parte de los de su generación, eran impuestas;
es también la insistencia en una continuidad con lo
que España pudiera haber aportado y consolidado a
la gran tradición.
Puede que el año 1942 nos suene demasiado riguroso
como para admitir que Julio Gómez se hiciera
fuerte en posiciones musicales que no podrían
verse, en su momento, más que como conservadoras.
Pero Gómez precisaba de unas raíces que la historia
(y la histeria) del momento no le proporciona-

an más que en el ahondamiento en la fuente de la
tradición.
El primer movimiento del Concierto lírico, Allegro
moderato, se inicia con la sugerida introducción, Amplio,
de 18 compases que da paso al Allegro bitemático
que permite el brillo alterno de solista y grupo
orquestal.
El segundo movimiento, Lento, es probablemente
el que justifica el apelativo de “lírico” que adjetiva todo
el Concierto. La mayor parte de comentaristas (Turina,
J. Mª Franco, Rodrigo, Enrique Franco) lo han considerado
como la página más notable del Concierto.
Por último, el tercer movimiento, Allegro non
molto, realiza el esperable contraste con el Lento a
través de recursos “popularistas y realistas”, que
Martínez del Fresno no duda en asimilar a la “danza
final de la Suite en la, el segundo de los Cromos españoles,
la Danza de palillos del Cuartetino y otros
similares…”.
El Concierto lírico se interpretó algunas veces más
en los cuarenta y luego durmió hasta los ochenta
cuando Joaquín Parra y Manuel Carra lo recuperaron
en interesantes versiones con la Orquesta Nacional de
España.
Gustav Holst: Los planetas
Gustav Holst (1874-1934) tiene su nombre indisolublemente
unido al de su obra más popular, Los planetas.
En cierto modo, es uno de esos pocos compositores
cuya celebridad está tan ligada a una única obra
que eclipsa al resto de su producción. Podría ser el caso
de Carl Orff y su Carmina Burana o nuestro Joaquín
Rodrigo con el Concierto de Aranjuez; autores todos
casi víctimas de la popularidad de su obra principal, al
menos fuera de sus respectivas fronteras.
Sin embargo, Gustav Holst tiene una resonancia
muy poderosa en la liberación de la música británica
de los férreos corsés germánicos, junto con su amigo
y colega Vaughan Williams.
Tras una producción interesante, entre la que destaca
su ópera de cámara Savitri (1907-08), Holst acomete
la composición de la suite orquestal Los planetas
en el periodo de los años de la Iª Guerra Mundial.
Parece que el concepto le fue sugerido por su amigo
y colega Clifford Bax durante un viaje a Gibraltar en
1912.
Los planetas es una suite en siete partes, una por
cada uno de los planetas del Sistema Solar, con excep-
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ción de la Tierra y del pequeño Plutón, del que en
esos años no se hablaba como aspirante a planeta. La
obra fue estrenada en 1918 con dirección de Sir
Adrian Boult.
Los siete movimientos son, por tanto: I Marte, el
portador de la guerra; II Venus, el portador de la paz;
III Mercurio, el mensajero alado; IV Júpiter, el portador
de la alegría; V Saturno, el portador de la vejez; VI
Urano, el mago y VII Neptuno, el místico.
Aunque la idea general parece la del poema sinfónico,
la extraordinaria popularidad de esta obra ha hecho
que las cábalas y las especulaciones se derramen en todas
direcciones. Holst, desde luego, se apresuró a decir
que la suite no contaba ninguna historia concreta. Se
habló también de que la referencia a los planetas solares
era más bien astrológica, especialmente por el propio
horóscopo del compositor, o incluso que trataba de
las “siete influencias del destino y componentes de
nuestro espíritu”. Y, finalmente, Holst comentó que no
había ningún programa y que, a lo sumo, bastaba con
los subtítulos, así como que no había relación de ninguna
clase con las deidades de la mitología clásica.
El capítulo de influencias de obras musicales cercanas
es mucho más interesante; Debussy (con el coro
femenino sin texto que Holst usa tras el escenario),
Dukas, Richard Strauss, Stravinsky o incluso Schoenberg
han sido citados en el capítulo de influencias, especialmente
por el uso novedoso y brillante de instrumentos
poco habituales en la orquesta sinfónica de
hace cien años: flauta baja y clarinete bajo, tubas wagnerianas
y una profusión de instrumentos de metal
(Holst tocaba el trombón) y una nutrida batería de instrumentos
de percusión. En todo caso, fue la plantilla
orquestal más grande que empleó Holst en toda su
carrera.
Destaca como aspecto reseñable que una obra tan
apreciada por su despliegue y maestría orquestal fuera
completada en su orquestación por ayudantes a
partir de originales a dos pianos con la excepción del
tercer movimiento, Mercurio.
Otro aspecto curioso de esta suite es que tras ser
descubierto el planeta Plutón en 1930, en vida de
Holst, este no mostró el menor interés en ampliar su
suite. Sin embargo, en el año 2000 la Halle Orchestra
encargó al compositor Colin Matthews, especialista
en Holst, que escribiera ese octavo movimiento, Plutón,
dedicado a Imogen Holst, hija del compositor y
destacadísima musicóloga británica. La obra con su

correspondiente ampliación, fue estrenada el 11 de
mayo de 2000 en Manchester con la Halle Orchestra
dirigida por Kent Nagano. Curiosamente, poco después
(2006) le fue arrebatado a Plutón el título de planeta,
por lo que se podría decir que Holst tenía razón.
Los planetas es una obra de grandes proporciones,
la orquesta, como se ha dicho, es grande y variada;
la duración es también consistente, alrededor
de los cuarenta y cinco minutos; y, por último, la
grandiosidad de sus ideas sonoras, así como la accesibilidad
de su música la han convertido en obra favorita
de los conciertos sinfónicos. Su arranque,
Marte, con una sonoridad poderosa, tan evocadora
de la guerra, casi se ha convertido en estándar de
películas y documentales de guerra y violencia, y su
escucha en directo es siempre una experiencia inolvidable,
un auténtico festival de oleadas sonoras
que van del rugir orquestal de su comienzo hasta los
delicados matices de sus movimientos más contemplativos
y líricos.
Jorge Fernández Guerra
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FICHA INFORMATIVA
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BOCETO SINFÓNICO, de Pedro Sanjuán
(San Sebastián 1876 / Washington 1976)
Estreno: 1934
Orquesta Sinfónica de Madrid
Director: Enrique Fernández Arbós
Dedicada al Maestro Arbós en su 70 cumpleaños
CONCIERTO LÍRICO para piano y orquesta,
de Julio Gómez
(Madrid, 20 de diciembre de 1886 /
23 de diciembre de 1973)
Mención Honorífica en el Concurso Nacional
de Música de 1942
Estreno: Madrid
Palacio de la Música, 2 de febrero de 1945
Solista: José Cubiles
Orquesta Nacional de España
Director: Julio Gómez
Dedicatoria manuscrita: “A Pepe Cubiles, al gran artista,
al gran amigo”
LOS PLANETAS, de Gustav Holst
(Cheltenham, 21 de septiembre de 1874 /
Londres, 25 de mayo de 1934)
Estreno privado: 29 de septiembre de 1918
Orquesta del Queen’s Hall de Londres
Coro del St. Paul’s Girls School
Director: Sir Adrian Boult
Estreno público: 15 de noviembre de 1920
London Symphony Orchestra
Director: Albert Coates

DISCOGRAFÍA SELECCIONADA
Gustav Holst: LOS PLANETAS
London Philharmonic
Coro Geoffrey Mitchell
Director: Sir Adrian Boult
Sello: EMI
Gustav Holst: LOS PLANETAS
Philharmonic Orchestra
Director: Simon Rattle
Sello: EMI
Gustav Holst: LOS PLANETAS
Orquesta Filarmónica de Berlín
Director: Herbert von Karajan
Sello: DEUTSCHE GRAMMOPHON
BIBLIOGRAFÍA
15
JORGE DE PERSIA: Pedro Sanjuán: Ecos de la distancia
Booklet del CD de la Orquesta Sinfónica de Euskadi dedicado
a Pedro Sanjuán
IMOGEN HOLST: Gustav Holst: A Biography
Faber and Faber
BEATRIZ MARTÍNEZ DEL FRESNO: Julio Gómez: una época
de la música española
Madrid, ICCMU 1999
J.R.E.

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Mariana Gurkova, piano
Galardonada con numerosos premios internacionales y
nacionales, la trayectoria de esta pianista española de origen
búlgaro ha seguido una línea ascendente desde que a
los doce años ganara el primer premio del Concurso Internacional
de Senigalia. Muchos son desde entonces sus éxitos
cosechados en el panorama musical.
Comienza a estudiar el piano a la edad de cinco años en
Sofía (Bulgaria), su ciudad natal, realizando a los pocos meses
varias actuaciones en público con gran éxito. A los diez
años da su primer recital y a los once actúa por primera vez
con orquesta, interpretando el concierto nº 1 de Felix Mendelssohn.
Tras graduarse en el Instituto de Música de Sofía, continúa
sus estudios en el Conservatorio Superior Nacional de
Bulgaria bajo la dirección de Bogomil Starshenov y posteriormente
con Joaquín Soriano en el Real Conservatorio de
Madrid, ciudad donde reside desde 1988. Así mismo, ha realizado
cursos de perfeccionamiento con Hans Graf, Lev
Vlasenco, Leon Fleisher y Paul Badura-Skoda.
Mariana Gurkova ha sido premiada en numerosas ocasiones.
Destacan los primeros premios de los concursos internacionales
Jacinto Guerrero (Madrid), Senigalia(Italia) y
de los nacionales Sv. Obreteno” y Juventudes Musicales de
Bulgaria; otros premios internacionales como los segundos
del Ettore Pozzoli de Seregno (Italia) y Concurso de Jaén
(España); terceros premios en los concursos Paloma O’Shea
de Santander y José Iturbi de Valencia, cuarto premio en el
Concurso Mundial de Cincinnati (EE.UU.), etc. Su predilección
por la música española se ha visto recompensada en
los premios obtenidos a la mejor interpretación de la misma
en los certámenes de Santander y José Iturbi.
En su paso por las más prestigiosas salas de España
–Auditorio Nacional, Palau de la Música de Valencia, Palacio
de Festivales de Cantabria, Auditorio de Zaragoza, Auditorio
de Murcia y un largo etcétera– ha ofrecido un amplísimo
repertorio de solista al que suma unas treinta obras para
piano y orquesta. Así mismo, ha ofrecido recitales y conciertos
en Bulgaria, Francia, Italia, Alemania, Grecia, Checoslovaquia,
EE.UU., Brasil, México, India, Japón, Australia y
Sudáfrica, y grabado para distintas cadenas de radio y de
televisión tales como la RAI, RTVE, Radio Melbourne, Radio
Yokohama y RTV Búlgara. Entre las orquesta con las que ha
tocado destacan la Filarmónica de Kiev, New Japan Philarmonic,
Wienerkammerorchester, Orquesta Sinfónica de
RTVE, Orquesta de Cámara de Praga, Orquesta Rubistein
de Polonia, Orquesta Filarmónica de Sofía, Orquesta Sinfó-

nica de la Radio de Pilsen, Orquesta Sinfónica de la RAI-Milano,
Filarmónica de Moravia, Filarmónica de Timisoara, Orquesta
Sinfónica de Valencia, Orquesta de Cámara del Ermitage,
Orquesta Andrés Segovia, todas las orquestas búlgaras.
Ha actuado bajo la batuta de directores de la talla de
S. Comisiona, Ph. Entremont, R. Stankovski, G. Kostin, A.
Rahbari, E. García Asensio, M. Galduf, A. Soriano, T. Mikelsen,
A. Natanek, E. Bauer, G. Pehlivanian, etc.
Su interpretación y reciente grabación de la integral de
los estudios de Chopin ha merecido los mejores elogios del
público y la crítica.
Carlos Cuesta, director
Carlos Cuesta es uno de los directores más activos del
panorama musical español.
Desarrolla una importante labor como director de ópera
y Zarzuela dirigiendo producciones de La Bohème, Tosca,
Madama Butterfly, El barbero de Sevilla, La Traviata, Un
ballo in maschera, Il Trovatore, Don Pasquale, Lucia, Mefistófeles,
Carmen, Norma que han sido presentadas en los
más importantes teatros de España. En el campo de la zarzuela,
ha colaborado con las más importantes compañías
nacionales tanto en el repertorio clásico como en el reestreno
y recuperación de obras poco representadas; Mis
dos mujeres, Gloria y peluca, El relámpago, El dominó
azul… habiendo grabado en DVD algunas de ellas para el
sello Iberautor. Ha presentado nuestro género en China y
Vietnam.
Su gran interés por la música de nuestro tiempo le ha
llevado a realizar una importante cantidad de estrenos
mundiales y de grabaciones de obras de autores españoles
y americanos. En Santa Fe (Argentina) crea los Encuentros
de Compositores Hispanoamericanos y desde 2004 colabora
con el Núcleo Música Nueva de Montevideo y la orquesta
del SODRE en el estreno de música latinoamericana. En
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los últimos cinco años colabora asiduamente en diferentes
proyectos con la Orquesta de la Comunidad de Madrid. Así
mismo es creador y director de la Orquesta de Cuerdas
Atelier Gombau con repertorio de obras esenciales de la
música contemporánea internacional y de la composición
actual española para esta formación.
Desde 1990 hasta 1995 ha sido profesor titular de la Orquesta
Nacional de España.
Como Director invitado en Europa, América y Asia dirige
orquestas con las que mantiene un estable vínculo artístico:
Orquesta Sinfónica de la RTVE, Orquesta de la Comunidad
de Madrid, Orquesta Sinfónica Pablo Sarasate, Orquesta
Municipal de Oviedo, Orquesta Sinfónica Ciudad de
Málaga, South Carolina Symphony Orchestra, Symphony of
Americas (Florida), Orquesta Sinfónica Municipal de Caracas,
Orquesta Sinfónica de Maracaibo, Orquesta Sinfónica
de Rosario, Orquesta Sinfónica Nacional de El Salvador, Orquesta
de la Universidad de Monterrey, National Academy
Kazashstan y Shanghai Symphony Orchestra.
Desde 1995 hasta 2002 Carlos Cuesta ha sido Director
titular de la Orquesta Sinfónica de Santa Fe, alcanzando un
alto nivel artístico al que contribuyen sus grabaciones internacionales
(Cantata Martín Fierro de Juan José Castro y
América llamando, de Villa-Lobos, Chávez, Copland y Ginastera),
así como estrenos mundiales de obras hispanoamericanas.
En el 2001 recibe el Primer Premio Nacional a la
Excelencia Artística y Profesional en Argentina.
Es en la actualidad Principal Director Invitado de la Orquesta
Filarmónica de Hanoi (Vietnam) y mantiene una permanente
actividad en la escena española tanto en el repertorio
sinfónico como en el lírico.

JOVEN ORQUESTA Y CORO DE LA
COMUNIDAD DE MADRID
La Joven Orquesta y Coro de la Comunidad de Madrid
(JORCAM), pertenece a la Consejería de Empleo, Turismo y
Cultura de la Comunidad de Madrid y fue creada con el propósito
de contribuir a la formación de los jóvenes músicos madrileños
en un marco de formación profesional de alta calidad técnica
y artística. En esta agrupación conviven la Joven Orquesta,
el Joven Coro y los Pequeños Cantores de la JORCAM.
Su objetivo principal es ampliar y desarrollar los conocimientos
musicales a fin de facilitar y preparar a sus
miembros para un futuro acceso a las agrupaciones profesionales
y a la inserción laboral en el mundo de la música.
Este aprendizaje se realiza a través del conocimiento
y la práctica del repertorio coral y orquestal, de la experiencia
en agrupaciones de cámara, del acercamiento a
los escolares a través de los conciertos didácticos, de la
participación en proyectos artísticos integrales como la
danza, el teatro musical, la ópera, etc. La JORCAM, además,
busca la promoción y el apoyo a sus miembros a través
de concursos internos de solistas, clases magistrales
o líneas de becas y ayudas para la ampliación y perfeccionamiento
de estudios.
La JORCAM se crea en 2009 incorporándose a la Fundación
Orquesta y Coro de Madrid. Es heredera de la antigua
Orquesta Sinfónica de Estudiantes de la Comunidad,
formación que contribuyó durante 18 años a la formación
de los jóvenes músicos madrileños.
Su debut oficial fue en los Teatros del Canal con la gala
Una noche en el Canal, con la dirección de Albert Boadella.
Su programación ha crecido notablemente hasta alcanzar
las 136 actuaciones públicas en el año 2011, contando producciones
propias y colaboraciones con distintas orquestas,
coros y teatros.
En los cuatro años de existencia la JORCAM ha ofrecido
conciertos en el Auditorio Nacional, Teatros del Canal,
Auditorio de Zaragoza, Teatro Auditorio de Soria, Teatro
Arriaga de Bilbao, Palacio de Congresos de Santander,
Auditorio de El Escorial y demás teatros de la Red que posee
la Comunidad de Madrid. Ha participado en conciertos
e intercambios en Francia (Théâtre du Châtelet), El Salvador
(Auditorio de la FEPADE), Rusia (Sala Rachmaninov
del Conservatorio Tchaikovski de Moscú, Auditorios de
Nimzry Novgorod, Cheboksary y Kazán), México (Teatro
de la Ciudad de México, Auditorio de la Universidad de
Puebla, Teatro Principal de Guadalajara) y Vietnam (Ópera
House de Hanoi).
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Ha participado en importantes festivales en España y
México: Festival Internacional de Peralada, Festival de Arte
Sacro de la Comunidad de Madrid, Festival Internacional de
Música Contemporánea de Alicante, Festival Internacional
de Guanajuato (México), Semana de Música Religiosa de
Cuenca, Festival de Verano de San Lorenzo de El Escorial,
Festival Madrid me Suena.
Desde la temporada 2009/10 organiza un ciclo de conciertos
patrocinado por Ibercaja en los Teatros del Canal,
que comenzó con 6 conciertos anuales y que, para la temporada
2012/13, alcanza las 39 actuaciones, entre conciertos
matinales para todo tipo de público, conciertos para escolares,
para niños, para familias, etc.
Por el podio de dirección de la JORCAM han pasado importantes
directores: José Ramón Encinar, Jordi Bernàcer,
Jaime Martín, Roberto Rizzi Brignoli (exdirector de la Scala
de Milán), Xavier Puig, Miguel Romea, Miguel Roa, Manuel
Coves, Alejandro Posada, Carlos Cuesta, Jordi Francés Sanjuán,
David Ethéve, Santiago Serrate, Pablo Mielgo, Vicente
Sempere, Andrés Salado, Sergio Alapont, Anatoli Levin
(catedrático de dirección del Conservatorio Tchaikovsky de
Moscú), etc.
La dirección del Joven Coro es responsabilidad del
Mtro. Félix Redondo, con la colaboración, como profesora
de canto, de la soprano Celia Alcedo. El Joven Coro no solo
participa en las obras sinfónico corales programadas por
la JORCAM (3ª Sinfonía de G. Mahler, Los planetas de G.
Holst, 9ª Sinfonía de Beethoven, Gloria de F. Poulenc, etc.)
sino que ha reforzado al Coro Nacional de España y al Coro
de RTVE en la 8ª Sinfonía de G. Mahler en el Auditorio
Nacional con la grabación de un DVD para la Deustche
Grammophon, además de realizar obras conjuntas con el
Coro de la ORCAM. Ha actuado, también, con programación
propia, en varios conciertos en teatros y auditorios de
Madrid y España, y ha participado en producciones de zarzuela
y teatro (Candide de Bernstein, La Revoltosa, Don Gil
de Alcalá, Amadeu, de A. Boadella, etc.).
En julio de 2010 se ha creado los Pequeños Cantores de
la JORCAM, un grupo de niños que, bajo la dirección de la
profesora Ana González, ya han participado en la producción
de Tosca, de G. Puccini en El Escorial y Peralada, en La
flauta mágica en El Escorial, la zarzuela El gato montés en
el Teatro de la Zarzuela, conciertos en los Teatros del Canal,
y en diversas salas de Madrid, puesta en escena de la ópera
para niños Palabras en la barriga, etc.
Los Pequeños Cantores han actuado, y lo siguen haciendo
en este momento, como coro de niños en las temporadas
2010/2011, 2011/2012 y 2012/2013 del Teatro Real de

Madrid, participando en las producciones de Werther, El
Caballero de la Rosa, Persèphone, Tosca, Wozzeck, Boris
Godunov, Suor Angelica, Parsifal, Kröl Roger y Macbeth.
La JORCAM, además de su programación de conciertos
y su apuesta por la formación, extiende sus objetivos a proyectos
que incorporen la música como vehículo de inclusión
social y de apoyo a colectivos marginados o con necesidades
especiales. En esa línea ha iniciado dos proyectos en el
Hospital Niño Jesús de Madrid, dirigido a niños con parálisis
cerebral y en la Fundación Carmen Pardo-Valcarce, para
personas afectadas por el síndrome de Down.
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JOSÉ RAMÓN ENCINAR,
Director Titular y Artístico
JOVEN ORQUESTA
COMPONENTES
DE LA JORCAM
Violines primeros
Elsa Sánchez
Ana Campo
Raquel Ovejas
Alejandra Ureña
Celia Mateos
Natalia Hernantes
Javier Ruiz
Gema Manzanera
Nicolás Fernández
Iñigo Grimal
Luis Barbero
Lucía García
Violines segundos
Ana Mirvelashvili
Lorenzo Sánchez
Natalia Gabriel
Sergio Ramírez
Blanca Tardajos
Leonardo Rivas
Marina Castellanos
Andrea Santodomingo
Zoe Rohrer
Olga Castiblanque
Violas
Abel Nafee
Pablo Salvá
Teresa Robledo
Elena Santana
Úrsula Pérez
Milena Milyutenco
Clara García
Esther Fernández
Claudia Pérez
Violonchelos
Ana Camacho
Paula Brizuela
Natalia Lázaro
Javier González
Irene González
Paloma García
María Palazón
Contrabajos
Víctor Estrada
Arantxa Múgica
Pablo Sánchez-Laulhé
Mario Cano
Raquel García
Flautas
Ana Estefanía Rodríguez
Marta Femenía
Elisa Ferrer
Alba Mª Jiménez
Oboes
Alba Yáñez
Sara Rodríguez
Adrián Merchán
Valle González
Clarinetes
Javier Olmeda
Lorenzo Salvá
Francisco Espinosa
Marcos Llorca
Fagotes
Borja Ocaña
Miguel García
Álvaro Rodríguez
Javier Sánchez
Trompas
Eduardo Verde
Iris de la Fuente
Roberto Lerma
Paula Gómez
Alberto Fernández
Ben Vidal
Trompetas
David Vicedo
Rubén Simo
Diego Tasa
Gaspar Miguel
Trombones
Javier Saez
Rubén Toribio
Trombón bajo
Jaime Paniagua
Tuba
Diego Valls

Bombardino
Francisco Guardiola
Percusión
Antonio Martín
Pablo Seri
Joan Salvador Cerveró
Carlos Jiménez
Javier Carralero
Arpas
Helena Garreta
Pilar Gómez
Órgano
Ana Buzón
Celesta
Alba Herraiz
JOVEN CORO DE
VOCES FEMENINAS
Alicia Achaques
Álvaro De Pablo
Begoña Gómez
Blanca Isabel Romera
Candelas Pañeda
Cristina Fernández
Elena Domínguez
Inés Ballesteros
Irene Pardo Ortega
Laura Fernández
Lydia Pedro
Mª Ángeles Jiménez
María Reigosa
Marina Castejón
Melani Gallego
Natalia Labourdette
Natalia López
Noelia Cabezas
Patricia Redondo
Patricia Castro
Patricia García
Patricia Illera
Raquel Rodríguez
Rebeca Blanco
Reyes Rodríguez
Rocío Gálvez Cámara
Rocío Gordillo
Virginia Hernández
PEQUEÑOS
CANTORES
Alba Hernanz
Catalina Peláez
Leyre Basarte
Leyre García
María Cabrera
Mª Francisca Bernal
Marta García
Patricia Rodríguez
Verónica Fraile
Gabriela Gómes
Patricia Ginés
Carmen Vicente
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Ciclo Sala Sinfónica
Ciclo Sala de Cámara
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JOSÉ RAMÓN ENCINAR,
Director Titular y Artístico
TEMPORADA 2012/2013
ORQUESTA Y CORO DE LA
COMUNIDAD DE MADRID
C/ Mar Caspio, 4 - 28033 Madrid
Tel. 91 382 06 80 - Fax 91 764 32 36
info@orcam.org
Renovación de abonos en el Auditorio Nacional
de Música
Los abonados de la temporada 2011-2012 podrán
renovar los abonos de la próxima temporada desde
el día 30 de mayo hasta el 23 de junio de 2012.
Los días 25, 26 y 27 de junio estarán reservados
exclusivamente para aquellos abonados que
deseen cambiar la localidad, siempre que haya
disponibilidad.
Dicha renovación deberá realizarse en las taquillas
de la Red de Teatros del INAEM (Auditorio
Nacional de Música, Teatro de La Zarzuela, Teatro
María Guerrero y Teatro Pavón), previa presentación
de la localidad de abono del concierto del día
19 de junio de 2012.
Precio abonos
Zona A - 84 € Zona B - 72 € Zona C - 60 €
Entradas sueltas
A partir del 18 de septiembre de 2012.
Zona A - 17 € Zona C - 14 €
Zona B - 15 € Zona D - 8 €
Precio abonos
Zona A - 30 € Zona B - 20 €
Los abonados que adquieran el abono de la Sala
Sinfónica en periodo de renovación, podrán adquirir
el abono de Cámara con un 20% de descuento,
hasta completar el aforo de la Sala de Cámara.
En caso de que no se hubiese completado el aforo en el
periodo de renovación, los nuevos abonados también
podrán adquirir este abono con el 20% de descuento.
Entradas sueltas
Zona A - 15 € Zona B - 10 €
Todos los programas y artistas son susceptibles de
modificación. No se devolverá el importe de las
entradas una vez adquiridas, salvo cancelación del
concierto. En el caso de los abonos se reintegrará
la parte proporcional del precio total.
Horario de taquillas del Auditorio Nacional de Música
Lunes: 16.00 a 18.00 horas
Martes - Viernes: 10.00 a 17.00 horas
Sábados: 11.00 a 13.00 horas (excepto el mes de julio)
Teléfonos de taquillas: 91 337 03 07 - 91 337 01 34
Venta de localidades: 902 22 49 49
www.entradasinaem.es / www.entradasinaem.com

Programación en el Auditorio Nacional de Música.
Ciclo Sala Sinfónica
Lunes 8 de abril de 2013
19:30 h.
Orquesta y Coro de la Comunidad
de Madrid
Alejandro Bustamante, violín
Antoni Wit, director
Príncipe Potemkin Op. 51*,
de Karol Szymanowski
Concierto para violín y orquesta,
de Joan Guinjoan
Eternal Songs Op. 10,
de Mieczyslaw Karlowicz
Romeo y Julieta, de Piotr Ilitch Tchaikovsky
*Estreno en España
~
~
Lunes 22 de abril de 2013
19:30 h.
Orquesta y Coro de la Comunidad
de Madrid
Joven Orquesta de la Comunidad
de Madrid
Cuarteto Bretón
José Ramón Encinar, director
De otros cielos, otros mares…*,
de Esteban Benzecry
Concerto Grosso para cuarteto de cuerda
y orquesta, de Julián Orbón
Sinfonía nº 9 “Nuevo Mundo” Op. 95,
de Antonin Dvorák
v
*Estreno absoluto
Obra encargo ORCAM-Fundación BBVA
Lunes 27 de mayo de 2013
19:30 h.
Orquesta de la Comunidad de Madrid
Roberto Fabbricciani, flauta
José Ramón Encinar, director
Prometheus, Poema Sinfónico nº 5, S. 99,
de Franz Liszt
Concierto para flauta y orquesta en re
mayor, Op. 283, de Carl Reinecke
Sinfonía nº 2 en do mayor, Op. 61,
de Robert Schumann
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26
Martes 11 de junio de 2013
19:30 h.
Orquesta de la Comunidad de Madrid
Joven Orquesta de la Comunidad
de Madrid
Asier Polo, violonchelo
Juanjo Mena, director
Don Giovanni: Obertura,
de Wolfgang Amadeus Mozart
La Celestina: Suite*,
de Carmelo Bernaola
Don Quijote Op. 35,
de Richard Strauss
*Estreno absoluto
Programación en el Auditorio
Nacional de Música.
Ciclo Sala de Cámara
Jueves 11 de abril de 2012
19.30 h.
Coro de la Comunidad de Madrid
Eamonn Dougan, director
Obras de Franz Schubert,
Robert Schumann, Gabriel Fauré,
Francis Poulenc y Pierre Villette
Miércoles 19 de junio de 2013
19.30 h.
Coro de la Comunidad de Madrid
Pedro Teixeira, director
Obras de Francisco Guerrero,
Tomás Marco, Eurico Carrapatoso
y Duarte Lobo