CAL Gipuzkoa - Jesuitas de Loyola

Gure elkarteakPAMPLONA4SE NOS FUE JUAN BAUTISTAEl mismo día que se publicaban las noticias de mayo,el viernes 31, partió a la Casa del Padre nuestroquerido Juan Bautista Larralde cuando le faltaban, comoel decía, sólo 24 días para cumplir sus “primeros91 años”.El “patriarca” dela comunidad hadejado una huellaimborrable entrenosotros y, la verdad,es que se leecha mucho de menos.Sería muy largoreseñar todas lasrazones por las quele echamos de menospero, a menarade pinceladas de ungran hombre y ungran jesuita, podríamosdestacar lassiguientes:La hondura espiritualy el cuidado de las letras. San Ignacio quería quelos jesuitas fuésemos virtuosos y letrados y en Bautistase daban estas dos características. Su honda vida interiorse reflejaba en la paz que transmitía y en la formatan cariñosa como se refería a Dios con quien sabíamosle unía una profunda amistad. Era un hombre fiela las prácticas comunitarias y largas horas de silenciopara estar a solas con su Creador. Esa hondura espiritualla conjugaba, a sus casi 91 años, con una insaciablecuriosidad intelectual. Era, sin lugar a duda, uno delos asiduos visitantes de la biblioteca de la comunidady de las conversaciones sobre los temas de actualidadaunque siempre evocara con cariño sus años de Oña.Vida comunitaria activa y excelente sentido del humor.El patriarca no se perdía nada y si era saliendo dePamplona mejor. Cuando había actividades de la Provinciaera el primero en apuntarse para ir y disfrutar delencuentro con los hermanos, la última salida fue a Donostiaa los Últimos Votos de José Javier Pardo. Ya encasa, las sobremesas donde el estaban no podían sermás agradables. Buen conversador, ocurrente, simpáticoy con un elegante sentido del humor que nos pocasveces nos robaba sonoras carcajadas. Hasta elmomento final mantuvo ese buen talante, recuerdo eldía que llegó de la Clínica San Miguel, dos días antesde morir, le pregunté si le habían recetado algunasmedicinas y su respuesta, dibujando una leve sonrisa,fue: “Chico, para la añina, no dan nada…”Descansa en paz buen amigo y compañero. Teechamos de menos.UNOS QUE VIENEN OTROS QUE SE VAN…Parafraseando una de las canciones clásicas deJulio Iglesias, esta es la realidad que se nos avecinaen la comunidad de Pamplona. Ya se nos había comunicadola partida de Carlos Moraza a Tudela y, en lasprimeras semanasde junio, se nos hacomunicado la partidade Txantxiku ySantiago Arenas aJavier y Loyola respectivamente.Txantxi parte dePamplona despuésde muchos años deentrega y servicio ala comunidad, laIglesia y la ciudad.Sus últimos años,como todos lo sabemos,ha prestado suservicio como superiory a dos de susapostolados másqueridos: los Ejercicios y el acompañamiento a la VTropa de los Scout además de la animación de la Iglesiade la Inmaculada. Sin duda muchas de las personasa las que Txantxi les ha hecho bien le echarán demenos. Le auguramos lo mejor para su nuevo serviciocomo superior de Javier.Santiago compartió dos años en la comunidad. Sirviócomo capellán de las Angélicas donde tenía unnutrido club de fans que siempre preguntaban por él.En la comunidad se destacó por su buen humor(aunque algunos de sus chistes eran repetidos y otros,en palabras del patriarca, ameritaban el castigo delinfierno) y por su locuacidad. Este buen hombre conversade todo y, la verdad, es que es muy simpático. Al“aitite” le deseamos lo mejor en su nueva etapa en Loyola.Si tres se nos van, tres serán los que vienen… desdeya les damos una cálida bienvenida a Ángel Ortizde Urbina nuestro nuevo superior, a Josean Percaz y aCristóbal Jiménez. Les esperamos como agua de mayo.DÍAS DE LAS FAMILIASY DE LOS COLABORADORES DE LA IGLESIAEn los domingos de junio hemos invitado a compartiren la comunidad a nuestras familias y a los colaboradoresde la Iglesia. Como todos los años es unaocasión para agradecer a todas las personas que permitenque nuestra presencia apostólica en la Iglesia de(Continúa en la página 5)Noticias Loyola Berriak 2013-07 / 389