<strong>Los</strong> <strong>cuatro</strong> <strong>modelos</strong>de iniciativas emprendedorasen las organizacionesRobert C. WolcottInvestigador y profesor de Innovación e IniciativaEmpresarial en el Center for Research in Technology andInnovation de la Kellogg School of Management ycofundador de la consultoría de estrategia Clareo Partners.Michael J. LippitzInvestigador del Center for Research in Technology andInnovation de la Kellogg School of Management.Las empresas tienen <strong>cuatro</strong> modos de crear negocios desde dentro de susorganizaciones. Cada enfoque aporta ciertos beneficios –y también implicadeterminados desafíos–.<strong>Los</strong> consejeros delegados hablan mucho del crecimientoy los mercados lo exigen. Sin embargo, elcrecimiento orgánico y rentable es difícil de conseguir.Las investigaciones indican que, cuando los negocioscentrales empiezan a flaquear, menos del 5% de las empresasvuelve a unas tasas de crecimiento de al menosun 1% por encima del producto interior bruto. Una solucióncada vez más atractiva está en la creación de nuevosnegocios, en fomentar las iniciativas empresarialescorporativas. Según un reciente estudio, las empresasque se esfuerzan en crear nuevos <strong>modelos</strong> de negocioaumentan sus márgenes operativos más rápidamenteque las de la competencia.No obstante, ¿cómo pueden las organizaciones consolidadascrear nuevos negocios de éxito de forma continuada?Lo cierto es que muchos de los que lo han intentadohan fracasado en su empeño. El iPod debería habersido un producto de Sony. La empresa japonesa contabacon el patrimonio, la marca, la tecnología y los canalesnecesarios, es decir, lo tenía todo. Sin embargo,fue Steve Jobs, de Apple, quien supo darse cuenta deque el potencial de la música digital portátil sólo se podíaaprovechar con la creación de nuevos negocios, nosólo con un nuevo modelo de MP3.Con el fin de analizar cómo las empresas consiguentriunfar con sus iniciativas, hemos llevado a cabo unestudio en casi treinta empresas globales (véase el cuadro1) que nos ha permitido definir <strong>cuatro</strong> <strong>modelos</strong> fundamentalesde iniciativas emprendedoras en las organizacionese identificar los factores que determinancuándo se debe aplicar cada modelo. Este marco deberíaayudar a las empresas a evitar costosos errores de tanteoa la hora de seleccionar y construir los programasmás adecuados a sus objetivos.MARZO 2008 57
LOS CUATRO MODELOS DE INICIATIVAS EMPRENDEDORAS EN LAS ORGANIZACIONESCUADRO 1Acerca de la investigaciónDesde finales de los años noventa, organizaciones tanvariopintas como IBM, DuPont y Cargill han estado desarrollandonuevas fórmulas para abordar las iniciativasemprendedoras en su seno. A fin de analizar dichasfórmulas, estudiamos éstas y otras empresas –casitreinta en total– para conocer los aspectos descriptivosde sus programas de creación de nuevos negocios. Estosaspectos iban desde los contextuales, como puedenser la madurez del mercado o el grado de intensidadtecnológica, hasta características estructurales y culturalesde la empresa “madre”, de acuerdo con los parámetrosque normalmente se analizan en las investigacionesacadémicas en este campo. Nuestro objetivoera diseñar un marco útil para los gestores y, despuésde poner a prueba varios enfoques, llegamos al marcoteórico que se presenta en este artículo.¿Qué son las iniciativas emprendedorasen las organizaciones?Para comenzar, hay que explicar qué entendemos poriniciativas emprendedoras dentro de las organizaciones.Las definimos como el proceso por el cual los equiposdentro de una empresa consolidada conciben, fomentan,lanzan y gestionan un nuevo negocio que esLa iniciativa emprendedora internano es lo mismo que la financiaciónde una empresa de riesgo, quenormalmente se orienta a las inversionesfinancieras en empresas externasdistinto del de la empresa madre pero que toma de ellalos bienes, la posición del mercado, las capacidades uotros recursos. No es lo mismo que la financiación deuna empresa de riesgo, que normalmente se orienta alas inversiones financieras en empresas externas. Aunquea menudo cuenta con socios externos y capacidades(incluidas las adquisiciones), utiliza recursos significativosde la empresa consolidada y son equipos internoslos que normalmente gestionan los proyectos.También es diferente de las spin-outs, que normalmentese construyen como empresas independientes que nonecesitan servirse continuamente de las actividades delnegocio existente para desarrollar su potencial.La iniciativa emprendedora es más que un simple desarrollode nuevo producto; puede abarcar innovacionesen servicios, canales, marcas, etc. Tradicionalmente, lasempresas añaden valor a través de innovaciones que seajustan a las funciones y las actividades del negocio yaexistente. Al fin y al cabo, ¿por qué habrían de desarrollaroportunidades que no se pueden llevar fácilmente almercado? Desgraciadamente, este enfoque también limitalo que una empresa está dispuesta o incluso es capazde llevar al mercado. De hecho, la incapacidad parareconocer que nuevos productos y servicios puedennecesitar <strong>modelos</strong> de negocio significativamente diferenteses lo que a menudo hace que se pierdan oportunidades.Las iniciativas emprendedoras corporativas pretendensuperar estas limitaciones.Hasta ahora, las empresas habían intentado llevar ala práctica iniciativas empresariales corporativas imitandoa un líder en innovación. Sin embargo, estos intentossolían fallar. Una cosa era reconocer que la “relajaciónen la organización” fue un factor clave del éxitode 3M –que permitió a sus ingenieros y científicos quededicaran el 15% de su tiempo a proyectos diseñadospor ellos mismos–. Otra cosa bien diferente era llevara la práctica esa relajación en organizaciones cuyos incentivosy procesos limitan esa flexibilidad. Como comentóen una ocasión el doctor Nelson Levy, antiguovicepresidente de investigación y desarrollo y presidentede varias empresas farmacéuticas internacionales,“¡para eso prefiero dar amis empleados un 15% de vacacionespagadas!”.Cuatro <strong>modelos</strong>de iniciativasEstá claro que lo que funciona para unaempresa no tiene por qué hacerlo paraotra. En nuestra investigación hemosidentificado dos dimensiones controladas directamentepor la dirección que sirven para diferenciar de formasistemática cómo abordan las empresas las iniciativasempresariales corporativas. La primera dimensión esla titularidad organizativa: dentro de la organización,¿quién tiene la titularidad primaria de la creación denuevos negocios, si es que alguien la tiene? (la responsabilidady la obligación de rendir cuentas de la creaciónde nuevos negocios pueden centrarse en uno o variosgrupos concretos, o puede repartirse por toda la orga-58 HARVARD DEUSTO BUSINESS REVIEW