42 - El ignorante <strong>de</strong>l maestro: sobre ignorancia y emancipacióncatada a la turbulencia <strong>de</strong> los ríos. Y se sentará entrenosotros para adoctrinarnos. Y la escucharemoscon reverencia”. 55César es consciente <strong>de</strong> que el cumplimiento <strong>de</strong>la ley es inevitable. Ante las quejas <strong>de</strong> su mujer leespeta: “pero ¿no estás viendo cómo ha cambiadola situación? Si los indios se atreven a provocarnoses porque están dispuestos a todo. Quieren un pretextopara echársenos encima. Y no se lo voy a dar”. 56Así las cosas <strong>de</strong>termina construir y abrir una escuela,pero solo como simulacro, engaño y perversión. Y lasolución la encuentra en poner a un maestro ignoranteal frente <strong>de</strong> los alumnos que acu<strong>de</strong>n a la escuela.Ese maestro es su sobrino bastardo Ernesto que,a su vez, mantiene una relación turbia con su tío. Yhe aquí que su situación como maestro se parecebastante a la <strong>de</strong> Jacotot, dado que “ellos no sabíanhablar español. Ernesto no sabía hablar tzeltal. Noexistía la menor posibilidad <strong>de</strong> comprensión entreambos”. 57 El paralelismo <strong>de</strong> esta frase <strong>de</strong> la narradora<strong>de</strong> Balún Canán con la frase que escribe Rancière llamapo<strong>de</strong>rosamente la atención: “Entre aquellos quequisieron sacar provecho, un buen número ignorabael francés. Joseph Jacotot, por su parte, ignoraba totalmenteel holandés. No existía pues un punto <strong>de</strong>referencia lingüístico” (p. 10). Hasta la sintaxis yuxtapuestaes la misma.Pero hay una diferencia muy importante: el azarno <strong>de</strong>para a Ernesto y los niños indígenas una traducciónbilingüe que permita a esos alumnos apren<strong>de</strong>rpor sí mismos el español. Veamos: entre elloshabrá quien tenga la voluntad <strong>de</strong> apren<strong>de</strong>r español yhabrá quien no la tenga, <strong>de</strong>l mismo modo que Ernestotendrá o no tendrá voluntad <strong>de</strong> enseñarles. Peroeso no es importante, lo que verda<strong>de</strong>ramente cuentaes que “los niños lo contemplaban embobados, conla boca abierta, sin enten<strong>de</strong>r nada”. 58 El maestro hablaba,leía el Almanaque Bristol, los horóscopos, elsantoral, los chistes, pero no había nada que hacer.Esos alumnos sí que estaban realmente solos, sí queestaban <strong>de</strong>jados al albur <strong>de</strong> su suerte sin que ningunapalabra sobre las palabras viniera a servirles <strong>de</strong>puente que les permitiera cruzar el caudaloso río <strong>de</strong>llenguaje. Esa lectura que el maestro hace <strong>de</strong> los chistes,horóscopos y otro tipo <strong>de</strong> textos ocupa la mismaposición y cumple el mismo papel que el Telémaco<strong>de</strong> Fénelon, solo que sin explicación, sin traducción,sin palabras más claras sobre palabras oscuras.E insistamos: el problema no es la falta <strong>de</strong> voluntad,sino la falta <strong>de</strong> una mediación, <strong>de</strong> un Otro, <strong>de</strong>una mediación espuria que sirva como puerta parallegar a la emancipación. He aquí cómo lo expresaErnesto, hablándoles a sus alumnos con plena conciencia<strong>de</strong> que no son capaces <strong>de</strong> enten<strong>de</strong>r nada:¿De qué nos sirve juntarnos aquí todos los días? Yo noentiendo ni jota <strong>de</strong> la maldita lengua <strong>de</strong> uste<strong>de</strong>s y uste<strong>de</strong>sno saben ni papa <strong>de</strong> español. Pero aunque yo fueraun maestro <strong>de</strong> esos que enseñan a sus alumnos la tabla<strong>de</strong> multiplicar y toda la cosa, ¿<strong>de</strong> qué nos serviría? Nova a cambiar nuestra situación. Indio naciste, indio tequedás. 59Dejando <strong>de</strong> lado el nihilismo que traslucen laspalabras <strong>de</strong>l maestro, resulta <strong>de</strong>l todo evi<strong>de</strong>nte queestá dando en el clavo. La voluntad es esencial, sinduda, pero la explicación lo es más, pues sin ella,sin la traducción por ejemplo, no hay un punto <strong>de</strong>referencia lingüístico que les permita la comunicación.A<strong>de</strong>más, esas palabras están estableciendouna peculiar relación entre la emancipación y la enseñanza.Aunque él les enseñara algo, multiplicarpor ejemplo, ello no les emanciparía, pues en unasociedad clasista y sin movilidad social, la educaciónno sirve. Ernesto se equivoca, pues la educación esuna importante exclusa para la liberación, pero sincontacto, sin explicación, el maestro se ve maniatado,y los alumnos, como el muchacho <strong>de</strong>l Quijote,con<strong>de</strong>nados a seguir en una situación <strong>de</strong> esclavos.La conclusión es clara: sin explicación, el maestroacaba borracho y los alumnos “se empujaban sinningún recato, se tiraban bolitas <strong>de</strong> tierra, iniciabanluchas feroces”. 60Y es que la clave <strong>de</strong> la emancipación intelectualse encuentra en el corazón mismo <strong>de</strong> la explicación.De hecho, la genealogía etimológica <strong>de</strong> esta palabranos proporciona algunas claves sorpren<strong>de</strong>ntes.Por una parte, la explicatio tiene el sentido <strong>de</strong> un<strong>de</strong>sarrollo, <strong>de</strong> un <strong>de</strong>spliegue, <strong>de</strong>l mismo modo queuna glosa, comentario, análisis o traducción a otralengua pue<strong>de</strong>n ser consi<strong>de</strong>rados <strong>de</strong>sarrollos y <strong>de</strong>splieguesa partir <strong>de</strong> un texto. El explico remitía a laacción <strong>de</strong> <strong>de</strong>sdoblar y <strong>de</strong>senrollar un manuscrito enforma <strong>de</strong> rollo, <strong>de</strong> ahí las i<strong>de</strong>as <strong>de</strong> <strong>de</strong>sarrollo y extensión.Pero he aquí que a esos sentidos <strong>de</strong>l explico sesuman también los <strong>de</strong> liberar y salvar a alguien <strong>de</strong>algo, el <strong>de</strong> sacar a alguien <strong>de</strong> apuros. Es este sentidoel que quiero reivindicar aquí.Si Don Quijote no se hubiera marchado dandopor zanjado el problema que se le acababa <strong>de</strong>presentar, si hubiera continuado haciendo <strong>de</strong> mediador,el muchacho no habría sufrido el ulteriorcastigo <strong>de</strong>l labrador que le <strong>de</strong>jó muerto. El error<strong>de</strong>l caballero fue <strong>de</strong>jar solo al muchacho con el verdugo.Del mismo modo, si los alumnos <strong>de</strong> Jacotothubieran estado <strong>de</strong> verdad solos, jamás habríanaprendido ese francés que según Rancière aprendieroncomo cualquier otro ciudadano francés. Si alos alumnos y alumnas <strong>de</strong> las escuelas, <strong>de</strong> los institutosy <strong>de</strong> la universidad se les <strong>de</strong>ja solos, es muy
El ignorante <strong>de</strong>l maestro: sobre ignorancia y emancipación - 43probable que que<strong>de</strong>n a merced <strong>de</strong> fuerzas socialescuyo principal objetivo no es el <strong>de</strong> liberarles. Notrato <strong>de</strong> presentar al maestro o a la maestra comoun gran salvador <strong>de</strong>l género humano, luz en la oscuridad,etc., que conduce a un rebaño <strong>de</strong> alienadoshacia su liberación. Trato <strong>de</strong> llamar la atenciónsobre el hecho <strong>de</strong> que las vías <strong>de</strong> la emancipaciónson muy complicadas, y que todo no se resuelveen ese plano con un “<strong>de</strong>jémosles solos”, entre otrascosas porque nunca estamos solos (y ya está claro<strong>de</strong> qué soledad hablamos). En ese trayecto el maestrotiene una gran responsabilidad, entre otras la <strong>de</strong>explicar. A un caballo pue<strong>de</strong>s llevarlo al agua, perono pue<strong>de</strong>s obligarlo a beber.Explicar no es <strong>de</strong>mostrarle al alumno que nopue<strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r por sí mismo, no es hacer <strong>de</strong>él o <strong>de</strong> ella un atontado impenitente, sino ofrecerleun apoyo, un suplemento, una vía <strong>de</strong> entrada allídon<strong>de</strong> <strong>de</strong> otra manera no podría entrar. Es lo queen <strong>de</strong>finitiva hizo el traductor holandés <strong>de</strong> Fénelon:proporcionar una palanca mediante la que aquelloslectores <strong>de</strong>jados a la intemperie por un Jacotot ignorantepudieran mover el universo <strong>de</strong>l francés. Ysi lograron moverlo (no sabemos hasta qué punto)fue gracias a esa explicación que llamamostraducción. La explicación es un acto reflexivo envirtud <strong>de</strong>l cual se lleva acabo la anamnesis <strong>de</strong>l conocimiento,el único que pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>svelar en sentidocontrario el proceso <strong>de</strong> ocultamiento que ha conformadouna <strong>de</strong>terminada disposición <strong>de</strong> las materiasy <strong>de</strong> los contenidos escolares. Explicar no esatontar al alumno, al menos no toda explicación leatonta, sino hacerle tomar conciencia <strong>de</strong> que pue<strong>de</strong>apren<strong>de</strong>r lo que <strong>de</strong>see apren<strong>de</strong>r. La explicaciónno es en sí ni buena ni mala, todo <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> laorientación <strong>de</strong> fuerzas que se le dé. Ha <strong>de</strong> ponerseal servicio <strong>de</strong> un intento <strong>de</strong> salir <strong>de</strong> “la inmadurezeterna y santa”. 61Notas1. Miguel <strong>de</strong> Cervantes, El ingenioso hidalgo Don Quijote <strong>de</strong> laMancha, I: IV, según la edición <strong>de</strong> Luis Andrés Murillo en Castalia, Madrid,1978, pp. 94-98.2. Librairie Arthème Fayard, 1987. Trad. esp. El maestro ignorante,Laertes, Barcelona, 2002.3. Las citas correspon<strong>de</strong>n a la edición española. Entre paréntesisaparece el número <strong>de</strong> página correspondiente. El original en francésse ofrece en la nota al pie seguido <strong>de</strong>l número <strong>de</strong> página: “Enten<strong>de</strong>zbien tout ce qu’il y a dans ce syllogisme” (p. 70).4. Manuel Asensi Pérez, “Crítica como sabotaje y subalternidad”.A pesar <strong>de</strong> ello, no pue<strong>de</strong> per<strong>de</strong>rse <strong>de</strong> vista la <strong>de</strong>uda con la “andadura”<strong>de</strong>constructiva <strong>de</strong> Jacques Derrida y Paul <strong>de</strong> Man fundamentalmente.En tal ensayo se percibirán las diferencias entre las dosmodalida<strong>de</strong>s críticas.5. En la versión española este capítulo primero ocupa las pp. 9-29.En la francesa, las pp. 7-34.6. “Il n’existait donc point <strong>de</strong> langue dans laquelle il pût les instruire<strong>de</strong> ce qu’ils <strong>de</strong>mandaient” (p. 8).7. “répéter sans cesse ce qu’ils avaient appris” (p. 8).8. “Combien ne fut-il pas surpris <strong>de</strong> découvrir que ces èlèves, livrésà eux-mêmes, s’étaient tirés <strong>de</strong> ce pas difficile aussi bien quel’auraient fait beacoup <strong>de</strong> Français?” [la cursiva es mía] (p. 9).9. Sobre las oposiciones binarias jerárquicas y su posición nuclearen el pensamiento metafísico, véase Jacques Derrida, Positions,París, Minuit, 1972. Trad. esp. Posiciones, Valencia, Pre-Textos, 1977.Véase también J. Hillis Miller, Illustration, Londres, Reaktion Books,1992.10. “l’acte essentiel du maître était d’expliquer […] transmettre<strong>de</strong>s connaissances et former <strong>de</strong>s esprits, en les menant, selon uneprogression ordonnée, du plus simple au plus complexe” [La cursivaes <strong>de</strong> Rancière] (p.10).11. “Ils avaient cherché seuls les mots français correspondantaux mots qu’ils connaissaient et les raisons <strong>de</strong> leurs désinences. Ilsavaient appris seuls à les combiner pour faire à leur tour <strong>de</strong>s phrasesfrançaises: <strong>de</strong>s phrases dont l’ortographe et la grammaire <strong>de</strong>venaient<strong>de</strong> plus en plus exactes à mesure qu’ils avançaient dans le livre” (p.11).12. Ferdinand <strong>de</strong> Saussure, Cours <strong>de</strong> linguistique générale, ediciónrevisada por Tullio <strong>de</strong> Mauro, Payot, París, 1981, p. 46: “la languea donc une tradition orale indépendante <strong>de</strong> l’écriture, et bien autrementfixe”.13. Ibíd., véase las pp. 48-50.14. Se trata <strong>de</strong>l capítulo 2 <strong>de</strong> la primera parte. Véase Jacques Derrida,De la grammatologie, Minuit, París, 1967, pp. 42-108. Trad. esp. De lagramatología, Siglo XXI, Buenos Aires, 1971. En lo que se refiere a lacrítica <strong>de</strong> Rancière que hacemos aquí, vale la pena tener en cuentalas tesis <strong>de</strong> Derrida que resultan <strong>de</strong> la <strong>de</strong>construcción <strong>de</strong> la oposiciónentre la lengua y la escritura, que si bien acaba con la producción <strong>de</strong>un in<strong>de</strong>cidible como “archiescritura” no llega en ningún momento aabogar por la confusión entre la dimensión empírica <strong>de</strong> lo oral y <strong>de</strong>lo escrito. Véase a este respecto, Rodolphe Gasché, The Tain of theMirror. Derrida and the Philosophy of Reflection, Harvard UniversityPress, Cambridge, 1986.15. “le secret du maître est <strong>de</strong> savoir reconnaître la distance entrela matière enseignée et le sujet à instruire” (p. 13).16. “On leur parle et l’on parle autour d’eux. Ils enten<strong>de</strong>nt et retiennent,imitent et répètent, se trompent et se corrigent, réussissent parchance et recommencent par métho<strong>de</strong>, et, à un âge trop tendre pour queles explicateurs puissent entreprendre leur instruction” (p. 14).17. Como tendremos ocasión <strong>de</strong> comprobar un poco más a<strong>de</strong>lante,esta <strong>de</strong>sigualdad entre los ejemplos y paradojas señaladas porRancière es sintomática <strong>de</strong> los problemas que aquejan a sus tesis.18. “cette incapacité […] est la fiction structurante <strong>de</strong> la conceptionexplicatrice du mon<strong>de</strong>. C’est l’explicateur qui a besoin <strong>de</strong> l’incapableet non l’inverse, c’est lui qui constitue l’incapable comme tel” [lacursiva es <strong>de</strong> Rancière] (p. 15).19. Hay un claro vínculo entre Rancière, Schérer y Fourier en loque a estas posiciones pedagógicas se refiere. Sin embargo, hay que<strong>de</strong>cir que las preocupaciones <strong>de</strong> Schérer no van tanto en la dirección<strong>de</strong>l aprendizaje como en la <strong>de</strong> la relación afectiva entre el pedagogoy el niño. De René Schérer, Émile perverti, Robert Laffont, París,1974 (reedición en Desordres-Laurent Viallet, París, 2006). Trad. esp.La pedagogía pervertida, Laertes, Barcelona, 1983. Resulta interesante,asimismo, la antología realizada por Schérer a partir <strong>de</strong> los textossobre la educación <strong>de</strong> Charles Fourier publicada con el título <strong>de</strong> Versune enfance majeure, Éditions la fabrique, París, 2006. Por otra partesería útil contrastar estas posiciones con las mantenidas por las pedagogíasanarquistas. Véase el libro <strong>de</strong> Fco. José Cuevas Noa, Anarquismoy educación. La propuesta sociopolítica <strong>de</strong> la pedagogía libertaria,Fundación <strong>de</strong> Estudios Libertarios Anselmo Lorenzo, Madrid, 2003.20. René Schérer, La pedagogía pervertida, op. cit., p. 20.21. “l’explication est le mythe <strong>de</strong> la pédagogie, la parabole d’unmon<strong>de</strong> divisé en esprits savants et esprits ignorants” (p. 15).22. La cursiva es <strong>de</strong> Rancière.23. “le fait était que ces étudiants s’étaient appris à parler et àécrire en français sans le secours <strong>de</strong> ses explications” (p. 18).
- Page 8 and 9: Índice11182934EditorialJesús Carr
- Page 11 and 12: Editorial - 11EditorialJesús carri
- Page 13 and 14: Editorial - 13tricidad, la extravag
- Page 15 and 16: Editorial - 15cial en la España co
- Page 18 and 19: 18 - René Schérer por René Sché
- Page 20 and 21: 20 - René Schérer por René Sché
- Page 22 and 23: 22 - René Schérer por René Sché
- Page 24 and 25: 24 - René Schérer por René Sché
- Page 26 and 27: 26 - René Schérer por René Sché
- Page 28 and 29: 28 - René Schérer por René Sché
- Page 31 and 32: La emancipación pasa por una mirad
- Page 33: La emancipación pasa por una mirad
- Page 37 and 38: El ignorante del maestro: sobre ign
- Page 39 and 40: El ignorante del maestro: sobre ign
- Page 41: El ignorante del maestro: sobre ign
- Page 45 and 46: ENSAYOS
- Page 47 and 48: El reverso. Arqueología del filós
- Page 49 and 50: El reverso. Arqueología del filós
- Page 51 and 52: El reverso. Arqueología del filós
- Page 53 and 54: El reverso. Arqueología del filós
- Page 55 and 56: El reverso. Arqueología del filós
- Page 57 and 58: El reverso. Arqueología del filós
- Page 59 and 60: El reverso. Arqueología del filós
- Page 61 and 62: El reverso. Arqueología del filós
- Page 63 and 64: El reverso. Arqueología del filós
- Page 65 and 66: El reverso. Arqueología del filós
- Page 67 and 68: El reverso. Arqueología del filós
- Page 69 and 70: El reverso. Arqueología del filós
- Page 71 and 72: El reverso. Arqueología del filós
- Page 73 and 74: El reverso. Arqueología del filós
- Page 75 and 76: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 77 and 78: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 79 and 80: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 81 and 82: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 83 and 84: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 85 and 86: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 87 and 88: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 89 and 90: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 91 and 92: Escuela y arte en la experiencia li
- Page 93 and 94:
Escuela y arte en la experiencia li
- Page 95 and 96:
Escuela y arte en la experiencia li
- Page 97 and 98:
Escuela y arte en la experiencia li
- Page 99 and 100:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 101 and 102:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 103 and 104:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 105 and 106:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 107 and 108:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 109 and 110:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 111 and 112:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 113 and 114:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 115 and 116:
Documento 05Educación y arte en la
- Page 117 and 118:
Educación y arte en la reforma y l
- Page 119 and 120:
Activismo en el frente bélico: la
- Page 121 and 122:
Activismo en el frente bélico: la
- Page 123 and 124:
Activismo en el frente bélico: la
- Page 125 and 126:
Activismo en el frente bélico: la
- Page 127 and 128:
Arte y revolución: una recopilaci
- Page 129 and 130:
Caminos de ida y vuelta - 129vez de
- Page 131 and 132:
Caminos de ida y vuelta - 131-sin o
- Page 133 and 134:
Caminos de ida y vuelta - 133esta
- Page 135 and 136:
Caminos de ida y vuelta - 135ritu m
- Page 137 and 138:
Caminos de ida y vuelta - 137Docume
- Page 139 and 140:
Documento 02Caminos de ida y vuelta
- Page 141 and 142:
Caminos de ida y vuelta - 141
- Page 143 and 144:
Caminos de ida y vuelta - 143
- Page 145 and 146:
Caminos de ida y vuelta - 145Actual
- Page 147 and 148:
Caminos de ida y vuelta - 147
- Page 149 and 150:
Caminos de ida y vuelta - 149
- Page 151 and 152:
Caminos de ida y vuelta - 151
- Page 153 and 154:
Caminos de ida y vuelta - 153
- Page 155 and 156:
Documento 06Caminos de ida y vuelta
- Page 157 and 158:
Caminos de ida y vuelta - 157
- Page 159 and 160:
Caminos de ida y vuelta - 159
- Page 161 and 162:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 163 and 164:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 165 and 166:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 167 and 168:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 169 and 170:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 171 and 172:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 173 and 174:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 175 and 176:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 177 and 178:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 179 and 180:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 181 and 182:
Apropiación del futuro: revuelta e
- Page 183 and 184:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 185 and 186:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 187 and 188:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 189 and 190:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 191 and 192:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 193 and 194:
Construyendo la democracia: el pape
- Page 195 and 196:
La política educativa de la LOGSE
- Page 197 and 198:
La política educativa de la LOGSE
- Page 199 and 200:
La política educativa de la LOGSE
- Page 201 and 202:
La política educativa de la LOGSE
- Page 203 and 204:
La política educativa de la LOGSE
- Page 205 and 206:
Políticas educativas en los museos
- Page 207 and 208:
Políticas educativas en los museos
- Page 209 and 210:
Políticas educativas en los museos
- Page 211 and 212:
Políticas educativas en los museos
- Page 213 and 214:
Políticas educativas en los museos
- Page 215 and 216:
Políticas educativas en los museos
- Page 217 and 218:
Políticas educativas en los museos
- Page 219 and 220:
Políticas educativas en los museos
- Page 221 and 222:
Políticas educativas en los museos
- Page 223 and 224:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 225 and 226:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 227 and 228:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 229 and 230:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 231 and 232:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 233 and 234:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 235 and 236:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 237 and 238:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 239 and 240:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 241 and 242:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 243 and 244:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 245 and 246:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 247 and 248:
Arteleku desde la perspectiva educa
- Page 249 and 250:
Documento 07Arteleku desde la persp
- Page 251 and 252:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 253 and 254:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 255 and 256:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 257 and 258:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 259 and 260:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 261 and 262:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 263 and 264:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 265 and 266:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 267 and 268:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 269 and 270:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 271:
Pedagogías colectivas y experienci
- Page 274 and 275:
274 - El giro educativo en el Estad
- Page 276 and 277:
276 - El giro educativo en el Estad
- Page 278 and 279:
278 - El giro educativo en el Estad
- Page 280 and 281:
280 - El giro educativo en el Estad
- Page 282 and 283:
282 - El giro educativo en el Estad
- Page 284 and 285:
284 - El giro educativo en el Estad
- Page 286 and 287:
286 - El giro educativo en el Estad
- Page 288 and 289:
288 - El giro educativo en el Estad
- Page 290 and 291:
290 - El giro educativo en el Estad
- Page 292 and 293:
292 - El giro educativo en el Estad
- Page 294 and 295:
294 - El giro educativo en el Estad
- Page 296:
296 - El giro educativo en el Estad
- Page 299 and 300:
Carla PadróProfesora titular de la
- Page 301 and 302:
Museu d’ArtContemporani deBarcelo
- Page 303:
Real Patronato delMuseo Nacional Ce
- Page 307 and 308:
CONSEJO DE REDACCIÓNAna Salaverrí