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No tengas miedo - Como superar el temor a la muerte - Plough

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Dolor por <strong>la</strong> pérdida<strong>el</strong> dolor por <strong>la</strong> <strong>muerte</strong> de un ser querido es <strong>la</strong> respuestanatural d<strong>el</strong> alma ante <strong>la</strong> pérdida y no se debería reprimir.Anne Morrow Lindbergh, cuyo hijo fue secuestradoy asesinado cuando era un bebé, escribió:Hay que experimentar <strong>el</strong> dolor y pasar por momentos deinsensibilización que son todavía más duros de soportarque <strong>el</strong> propio dolor. Hay que negarse a seguir <strong>la</strong>s fácilesescapatorias que nos ofrecen <strong>la</strong> costumbre y <strong>la</strong> tradiciónhumanas. Los primeros y más habituales ofrecimientosde <strong>la</strong> familia y de los amigos son siempre distracciones(«Sáca<strong>la</strong> de casa, que se distraiga», «Llévat<strong>el</strong>a de aquí»,«Cambia de ambiente», «Fomenta <strong>la</strong>s visitas que <strong>la</strong>animen», «<strong>No</strong> <strong>la</strong> dejes sentarse y llorar»), cuando es precisamente<strong>el</strong> du<strong>el</strong>o y <strong>el</strong> l<strong>la</strong>nto lo que una necesita.El valor es un primer paso, pero limitarse a encajar <strong>el</strong>golpe con valentía no es suficiente. El estoicismo es valeroso,pero sólo supone haber recorrido <strong>la</strong> mitad de un<strong>la</strong>rgo camino. Es un escudo protector, permisible únicamentedurante un corto tiempo. Al final, una tiene quedescartar los escudos y permanecer abierta y vulnerable.Quizá parezca cru<strong>el</strong> aconsejar a una persona afectadapor <strong>la</strong> pérdida de un ser querido que se mantenga másabierta al dolor, como hace Lindbergh. Después de todo,<strong>la</strong> mayoría de nosotros nos protegemos instintivamente,una vez heridos, retirándonos de <strong>la</strong> refriega. Y no es nadafácil resistirse a esa tentación. Y, no obstante, he visto que207

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