universalismo
DESCRIPCIÓN BREVE “Obra de tal manera que lo que hagas quieras que se convierta en ley universal” Ética y Bioética UNIVERSALISMO Elaboró: Fabiola Nataly García Mariana Martínez Martínez
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DESCRIPCIÓN BREVE<br />
“Obra de tal manera que lo que hagas quieras que se<br />
convierta en ley universal”<br />
Ética y Bioética<br />
UNIVERSALISMO<br />
Elaboró:<br />
Fabiola Nataly García<br />
Mariana Martínez Martínez
Índice<br />
Concepto ................................................................................................................................... 2<br />
Caso: Fertilización in vitro .......................................................................................................... 3<br />
Los hechos ............................................................................................................................. 3<br />
Temas éticos involucrados. Manipulación de la vida ............................................................... 4<br />
Desenlace .............................................................................................................................. 5<br />
Comentario ............................................................................................................................. 5<br />
Conclusión ............................................................................................................................. 6<br />
Análisis del caso a la luz del Universalismo ............................................................................... 6<br />
Reflexión ética ........................................................................................................................... 7
Concepto<br />
El tema de la verdad ha inquietado al ser humano desde hace miles de años. Y continúa<br />
haciéndolo. De alguna manera, todos buscamos la verdad, aunque sea parcialmente.<br />
La ciencia, la religión y la filosofía han reflexionado sobre este concepto. Lo que es evidente es<br />
que hay muchas ideas o creencias que pretenden alcanzarla. Ante esta diversidad de criterios,<br />
surge una propuesta: que hay una única verdad. Esta es la idea principal del <strong>universalismo</strong><br />
El <strong>universalismo</strong>, en sentido general, es una idea o creencia en la existencia de una verdad<br />
universal, objetiva y/o eterna, que lo determina todo, y que por lo tanto, es y debe estar<br />
presente igualmente en todos los seres humanos. Un pensamiento universalista asegura la<br />
veracidad de una forma única o específica de ver, explicar u organizar al mundo.<br />
El <strong>universalismo</strong> no es en sí una ideología común, sino una característica única en la forma de<br />
ver el mundo, o la vida humana. Es frecuente que haya distintas ideologías universalistas que<br />
resulten muy opuestas entre sí. A través de la historia, ha habido pensamientos universalistas<br />
en todos los ámbitos de la vida humana. Como ejemplos, en el ámbito de la religión y la<br />
teología, está el cristianismo y el islam, que son considerados ejemplos de <strong>universalismo</strong><br />
religioso. A nivel filosófico y/o ético existen diversos ejemplos de <strong>universalismo</strong> moral, siendo<br />
este último una oposición al relativismo moral. Otras concepciones universalistas pueden<br />
llevarse a nivel étnico, lo que se conoce como <strong>universalismo</strong> etnocéntrico. El <strong>universalismo</strong><br />
también puede ser a nivel científico, pues existen diversas teorías en la ciencia que denotan un<br />
carácter<br />
universal.<br />
Por otra parte, el <strong>universalismo</strong> político es entendido como una doctrina que aboga por la<br />
unificación de todos los poderes e instituciones mundiales bajo una sola cabeza. Ejemplos de<br />
<strong>universalismo</strong> a nivel político y/o cultural son diversos imperios medievales, califatos, y<br />
gobiernos con tendencias mundialistas.<br />
Hay propuestas filosóficas que defienden la idea de una única verdad y ésta es alcanzable<br />
mediante la razón humana. Sócrates es quien defendió por primera vez esta tesis y lo hizo para<br />
oponerse al relativismo de los sofistas, quienes mantenían que la verdad es inalcanzable,<br />
porque es algo interpretable y cada sociedad tiene su propio criterio sobre ella. Este debate<br />
filosófico marcó un rumbo en el pensamiento occidental. Para algunos, existe una verdad, es<br />
posible llegar hasta ella y el hombre tiene la obligación moral de hacerlo. Para otros. El<br />
<strong>universalismo</strong> no tiene fundamento. De hecho, los detractores del <strong>universalismo</strong> consideran<br />
que la idea de verdad como algo absoluto es irreal (sólo hay verdades parciales o<br />
convencionales). Por otra parte, los críticos del <strong>universalismo</strong> recuerdan que no se ha<br />
alcanzado un acuerdo global sobre una idea suprema que sea cierta, lo cual demuestra que el<br />
<strong>universalismo</strong> es un ideal imposible de alcanzar.<br />
Si bien el <strong>universalismo</strong> no ha tenido un éxito definitivo porque no hay consenso sobre una<br />
certeza universal, sí ha tenido algún logro parcial. Ha inspirado la creación de algunos<br />
organismos internacionales (por ejemplo, la ONU) o la Declaración Universal de los Derechos
del Hombre. Este tipo de propuestas se fundamentan en el espíritu del <strong>universalismo</strong>. Tampoco<br />
hay que olvidar que el <strong>universalismo</strong> moral tiene un significado útil como reflexión, pues<br />
mantiene la idea de que al decir que algo es justo, se pretende afirmar que es justo para<br />
cualquier persona. Este criterio se podría expresar con una idea bastante conocida: no hagas a<br />
los demás lo que no te gusta que te hagan a ti. Un claro ejemplo de lo que es el <strong>universalismo</strong>.<br />
“Si yo actúo en conciencia, actúo bien”, pero puede darse el caso de que los demás no opinen<br />
lo mismo. Por ejemplo: se ha detenido a una persona sospechosa de pertenecer a un grupo<br />
terrorista. Ante la posibilidad de que estén planeando un atentado, decido en conciencia que<br />
debo torturarle para obtener la información y salvar muchas vidas. Eso dice mi conciencia. Pero<br />
¿y qué dice la conciencia de los demás? Este es el problema que intentaron resolver Apel y<br />
Habermas, añadiendo al imperativo de Kant una condición más: que las normas se dialoguen<br />
entre todos. Por eso, para que la norma sea verdaderamente universal, lo que dicta mi<br />
conciencia debe ser compartido y dialogado con los demás, de modo que todos juntos<br />
lleguemos a estar de acuerdo.<br />
Adela Cortina en su libro Ética aplicada y democracia radical nos habla de la necesidad de la<br />
ética universal. La necesidad, cada vez más sentida con más fuerza de dar respuesta con<br />
altura humana a problemas generales como la pobreza, la corrupción, el aborto, la fertilización<br />
in vitro, ha puesto la ética contra las cuerdas.<br />
Es por ello que frente a la universalización de los problemas que afectan la humanidad, se<br />
impone la necesidad de una ética universal en el sentido de tener unos valores, patrones,<br />
principios éticos universalmente aceptados por consenso, que todos nos comprometamos a<br />
cumplir. (Ética de mínimos)<br />
Caso: Fertilización in vitro<br />
Los hechos<br />
Luis y Valentina eran una pareja de pololos que llevaban juntos 7 años, hasta que un día<br />
decidieron unir su vida en matrimonio, con la ilusión de formar una familia. La ceremonia fue<br />
hermosa y asistieron muchas personas cercanas a ambos, todos les deseaban prosperidad y<br />
felicidad. Al terminar la recepción se despidieron de sus invitados, partiendo a su luna de miel.<br />
Estuvieron dos semanas disfrutando de las hermosas playas de Bahía, mientras hacían planes<br />
para el futuro, lo que incluía por supuesto los hijos que ambos querían tener. Al establecerse<br />
nuevamente en Santiago, decidieron comprar un departamento para ellos y sus hijos que<br />
vendrían pronto. Todo les estaba resultando de maravilla. Luis seguía desempeñándose de<br />
abogado en el bufete que tenía junto con tres amigos de infancia, mientras Valentina se<br />
dedicaba a su trabajo de diseñadora de ambientes en una prestigiosa agencia.<br />
Eran una pareja muy feliz y emocionalmente muy completa, sin embargo, comenzaban a sentir<br />
que ya era tiempo de tener hijos, ya que ambos se encontraban consolidados como<br />
profesionales y ahora querían incursionar como padres. Por esto, decidieron dejar de utilizar los<br />
anticonceptivos que los habían acompañado durante sus 9 años de pololeo. Después de un<br />
largo tiempo de intentar concebir un hijo comenzaron a preocuparse, ya que no entendían por<br />
qué no lograban ser padres. En un principio creían que era producto de que Valentina había
utilizado durante muchos años anticonceptivos y por ende su organismo podría haber sufrido<br />
alguna alteración.<br />
Discutían a menudo y se culpaban mutuamente, por lo que la frustración comenzó a ejercer<br />
presión entre ellos. Era tanta la frustración que sentían como pareja, que estaban comenzando<br />
a distanciarse y a tener conflictos cada vez más seguido, los cuales no pasaban desapercibidos<br />
para quienes los rodeaban.<br />
Un día, en su desesperación, Luis decidió contarle a su hermana lo que le estaba pasando. Ella<br />
le aconsejó que se sometiera junto a su señora a un examen de fertilidad. Luis se molestó con<br />
su comentario, puesto que se sintió herido como hombre. Después de un tiempo de meditarlo y<br />
darse cuenta que su relación de pareja estaba empeorando cada vez más, se decidió a<br />
conversar con Valentina, la que accedió de inmediato a la propuesta y decidieron asistir juntos<br />
a un especialista.<br />
Una vez en la consulta, la pareja le expuso sus problemas. A lo que el médico les sugirió<br />
someterse a exámenes de fertilidad. Luego de una semana acudieron a la consulta para saber<br />
el resultado. Desafortunadamente, el resultado fue negativo para Luis. Éste quedó<br />
profundamente deprimido por su infertilidad. Fue entonces cuando el médico les propuso<br />
métodos alternativos para que lograran el objetivo de ser padres. Dentro de estos estaban la<br />
adopción y la inseminación artificial. La primera la descartaron porque ésta trae consigo<br />
muchos requisitos y problemas asociados, tanto en lo que se refiere a trámites burocráticos<br />
como a posibles deficiencias que el niño pudiera eventualmente acarrear, por lo que optaron<br />
por la segunda alternativa, puesto que consideraron que era un mecanismo menos engorroso y<br />
que les permitiría ser padres utilizando su propia información genética.<br />
Temas éticos involucrados. Manipulación de la vida<br />
Para lograr una fecundación in vitro satisfactoria se extraen varios óvulos de la madre<br />
fecundándose en su totalidad puesto que el porcentaje de fecundación es bajo y un primer<br />
intento puede llegar a fracasar.<br />
Lo que provoca que los embriones restantes se utilicen con fines estéticos y/o cosméticos, se<br />
eliminen o se reimplanten en otras mujeres. Lo otro es que el método intenta imitar en forma<br />
artificial lo que la naturaleza hace en forma natural, lo que implica la manipulación de la vida<br />
humana. Un tercer problema ético involucrado es la privación de una fecundación resultante o<br />
ligada a la unión solemne biológica y espiritual de los padres junto con privar la comunicación<br />
interpersonal que debe existir entre los esposos, empobreciéndose y degradándose el acto de<br />
la procreación. Una cuarta implicación ética se refiere a la manipulación genética desarrollada<br />
durante el periodo de maduración para lograr satisfactoriamente la fecundación ya que se<br />
pueden provocar malformaciones congénitas en el futuro embrión, debido a un alto porcentaje<br />
de error provocado por un eventual daño celular.<br />
Al manipular genéticamente células reproductoras, tanto femeninas como masculinas, con el fin<br />
de fecundarse, pueden ocurrir errores debido al pequeño tamaño que éstas tienen, pudiendo<br />
causar un daño total o parcial de la información genética que poseen, causando así una alta<br />
probabilidad de malformaciones congénitas durante el periodo embrionario.<br />
Un quinto punto está dado por el hecho que hay veces en que al realizar la fecundación in vitro,<br />
el útero de la madre biológica no es apto para la fecundación, por lo que se necesita un útero<br />
donante, en otras palabras, una madre sustituta a la cual se le implantará el óvulo fecundado
de otra mujer (madre biológica). En este caso, el seguimiento se realiza a los tres individuos<br />
involucrados durante todo el periodo del embarazo, tratando de crear un lazo afectivo entre<br />
ellos y el proceso en el que están involucrados, sin embargo, existen casos en que durante el<br />
momento del parto, la madre sustituta puede negarse completamente a entregar al ser humano<br />
que lleva en su vientre, ya que se cree con todo el derecho de una madre biológica por haber<br />
alimentado y cuidado durante 42 semanas al feto lo cual se vuelve aún más problemático<br />
cuando existe un vacío legal en los países en los que se desarrolla éste método de<br />
fecundación.<br />
Desenlace<br />
Después de someterse a la fecundación, Valentina y Luis se sintieron nuevamente<br />
esperanzados como pareja, ya que había una posibilidad real de que pudieran convertirse en<br />
padres. Luego de algunos intentos, Valentina por fin quedó embarazada, lo que trajo mucha<br />
felicidad a ambos y les sirvió para fortalecerse y sentirse como familia. Meses más tarde nació<br />
el hijo tan esperado que bautizaron con el nombre de Tomás. Él llegó a este mundo sin ningún<br />
problema físico y con un desarrollo psicomotor óptimo.<br />
Después de dos años, Valentina y Luis decidieron someterse nuevamente a una fertilización in<br />
vitro, utilizando los mismos gametos de la primera vez, ya que éstos estaban congelados y en<br />
óptimas condiciones para su utilización.<br />
Comentario<br />
Los casos de fertilización artificial involucran una gran cantidad de problemas éticos que, a<br />
menudo, se intenta evadir mediante el recurso a la identificación de la posición en contra de<br />
esta práctica como una iniciativa simplemente vinculada a grupos conservadores. Pero la<br />
verdad es que el tema es bastante más complicado, y tiene varias aristas que deben ser<br />
aclaradas previamente a cualquier discusión.<br />
En primer lugar, es verdad que son muchos los padres que, por diversas razones, no pueden<br />
engendrar a sus propios hijos, situación que suele generar un gran dolor, por cuanto choca con<br />
las expectativas de la pareja. Es cierto que esta comprensible situación de dolor no autoriza a<br />
aplicar cualquier medio para encontrar una solución.<br />
Pero más allá de lo anterior, el problema ético más importante que se genera a partir de este<br />
tipo de prácticas es el de la cantidad de abortos que se producen dado que el método de<br />
fertilización in vitro opera, como queda dicho, fecundando una gran cantidad de óvulos con el<br />
material genético paterno, y luego implanta el que, a juicio del médico, tenga mayores<br />
posibilidades de éxito. ¿Pero qué pasa con los demás óvulos fecundados, que ya poseen vida<br />
personal y que, por lo tanto, bien deberían ser reconocidos como hijos de sus padres?<br />
Habitualmente simplemente son eliminados o bien almacenados para futuras fecundaciones, lo<br />
cual de todos modos termina inapelablemente en su eliminación porque ninguna madre podría<br />
tener todos los cigotos que fueron almacenados.<br />
Con esto, volvemos a lo que planteábamos más arriba. Es verdad que tener un hijo es algo<br />
hermoso, pero el fin no justifica cualquier medio; más aún cuando es la vida humana lo que<br />
está en juego. Por ello, más que tratarse de un problema de conservadores contra liberales, se<br />
trata de la defensa del más elemental de los derechos humanos. Aún si consideráramos que
una pareja tuviera ‘derecho’ a tener un hijo –lo cual es, de hecho, altamente discutible–, de<br />
todos modos este derecho no puede estar por sobre el derecho a la vida.<br />
Conclusión<br />
La fecundación es un acto personal de la pareja en el que se engendra un ser humano, fruto<br />
del mutuo amor que se profesan. Este hecho involucra a los esposos tanto en su<br />
responsabilidad como futuros padres como en el destino del individuo que está por nacer. Por<br />
lo tanto, la utilización de métodos artificiales para superar los problemas de la fertilidad atenta,<br />
en cierto modo, contra la naturaleza.<br />
Específicamente, el caso de Luis y Valentina genera todos los problemas de los que hemos<br />
hablado. Si bien su ilusión de ser padres pudo finalmente ser satisfecha, ello fue a costa<br />
sacrificar a muchos otros hijos suyos, aunque probablemente el doctor que realizara el<br />
tratamiento no se los hubiera contado.<br />
Análisis del caso a la luz del Universalismo<br />
En el caso anterior encontramos que la decisión tomada fue el reflejo de la tendencia<br />
universalista de un grupo de mayorías, es decir refiriéndonos al grupo de los liberales. A<br />
continuación establecemos un cuadro comparativo donde relacionamos la tendencia con el<br />
caso seleccionado.<br />
Universalismo<br />
El <strong>universalismo</strong> no es una doctrina que<br />
identifica a un grupo; más bien, es un<br />
conglomerado de grupos contradictorios<br />
donde todos afirman ser universalistas<br />
Frente a la universalización de los problemas<br />
que afectan la humanidad, se impone la<br />
necesidad de una ética universal en el sentido<br />
de tener unos valores, patrones, principios<br />
éticos universalmente aceptados por<br />
consenso, que todos nos comprometamos a<br />
cumplir. (Ética de mínimos, Adela Cortina)<br />
Defender la existencia de valores morales<br />
universales que están por encima de otros<br />
conlleva un serio problema: ¿quiénes son los<br />
que deciden cuáles son esos valores? El<br />
Caso: Fertilización in vitro<br />
Se trata de un problema de conservadores<br />
contra liberales, es decir ambos grupos con<br />
diferentes ideologías contradictorias; las<br />
cuales consideran que tienen la verdad<br />
absoluta entran en conflicto.<br />
Es verdad que tener un hijo es algo hermoso,<br />
pero el fin no justifica cualquier medio; más<br />
aún cuando es la vida humana lo que está en<br />
juego. Por ello, más que tratarse de un<br />
problema de conservadores contra liberales,<br />
se trata de la defensa del más elemental de<br />
los derechos humanos. Aún si<br />
consideráramos que una pareja tuviera<br />
‘derecho’ a tener un hijo –lo cual es, de<br />
hecho, altamente discutible–, de todos modos<br />
este derecho no puede estar por sobre el<br />
derecho a la vida.<br />
Es decir el principio fundamental a defender<br />
es el de la vida y estará sobre todos los<br />
demás.<br />
La fertilización in vitro debería ser debatida y<br />
analizada a través de la ética dialógica, que<br />
pone el énfasis en el consenso que se puede<br />
llegar a generar en un diálogo en condiciones
iesgo evidente radica en que aquellos grupos<br />
con mayores cuotas de poder acaben<br />
imponiendo los suyos frente a los de otros<br />
grupos menos poderosos.<br />
Denominamos valores dominantes a los que<br />
bajo una pretendida universalidad se tratan de<br />
imponer a todas las personas.<br />
Para que la norma sea verdaderamente<br />
universal, lo que dicta mi conciencia debe ser<br />
compartido y dialogado con los demás, de<br />
modo que todos juntos lleguemos a estar de<br />
acuerdo.<br />
de igualdad.<br />
“Una norma sólo será correcta si todos los<br />
afectados por ella están dispuestos<br />
a darle su consentimiento tras un diálogo,<br />
celebrado en condiciones de simetría, porque<br />
les convencen las razones que se aportan en<br />
el seno del mismo diálogo”<br />
Las posibles alternativas ante la fertilización in<br />
vitro son opuestas entre si y generan<br />
conflictos, por lo que es necesario analizar la<br />
mejor posible, pero no solamente de manera<br />
individual si no de manera colectiva.<br />
Reflexión ética<br />
¿Hay otras opciones?<br />
Si, existían diferentes alternativas de solución; por ejemplo la adopción de un niño, el optar por<br />
no concebir hijos o la que fue acatada la fertilización in vitro que en este caso fue incrustado en<br />
la madre original y no en una madre sustituta.<br />
¿Fue ética la decisión?<br />
Si consideramos la Ética Cívica según Adela Cortina, podemos encontrar que la decisión no es<br />
ética ya que son varios embriones los que son afectados; estos pueden ser utilizados para<br />
experimentación, ser criopreservados, ser utilizados con fines lucrativos y que el hecho de<br />
cumplir el fin, en este caso la procreación trae consigo el derroche de muchos otros de<br />
embriones para conseguir el desarrollo de solo uno. Es decir se viola el principio fundamental<br />
de la vida.<br />
Las mínimas de justicia que expresa Adela Cortina son: libertad, solidaridad, diálogo, igualdad y<br />
tolerancia, siendo los más relevantes los primeros 3.La primera mínima se basa en la<br />
autonomía moral y autonomía política, la segunda es una acción para apoyar al débil para que<br />
alcance mayor autonomía junto con desarrollo y la tercera se considera como la mejor manera<br />
de resolver los problemas con los demás. Y las máximas: corresponden a las actitudes que se<br />
basan en la búsqueda de la felicidad y bienestar emocional no perjudicando a otros con este<br />
accionar, ni tampoco pasando a llevar a otros individuos; por ello no podemos hablar de una<br />
decisión ética ya que perjudica con esta acción a otros individuos.<br />
¿Cuál debe ser la solución al problema?<br />
Para establecer una solución a esta controversia primero analizaremos las ventajas y<br />
desventajas que pueden desprenderse de este dilema.<br />
Si es verdad que la FIV ha traído a la vida a muchos millones de niños, también es verdad que<br />
detrás de cada niño nacido, hay otros que han muerto en intentos fallidos de implantación y<br />
algunos otros que permanecerán congelados. De cuatro millones nacidos, al menos dieciséis<br />
están en peligro de permanecer congelados, desechados o sujetos a investigación científica,<br />
usados como conejillos de experimentación.
La FIV también hizo posible la práctica del alquiler de madres . Las mujeres que ahora quieran<br />
deshacerse de las incomodidades del embarazo, o que no pueden llevarlo, pueden alquilar el<br />
vientre de una mujer que, por una suma de dinero, lo llevaría a término.<br />
Un tercer hecho relacionado a la FIV es el asunto de los niños a la carta . Ahora los padres<br />
pueden elegir de entre los embriones producidos al que satisfaga sus gustos: se puede elegir el<br />
sexo, el color del pelo o de los ojos. La técnica es posible gracias al Diagnóstico Genético<br />
Preimplantacional (DGP) y ha sido publicitada desde el año pasado en algunas clínicas de<br />
reproducción asistida en los Estados Unidos.<br />
El problema no es sólo desear una hija más que un hijo, o en preferirla con ojos azules;<br />
también es que en esa elección los padres determinan quién nace, quién muere o quién se<br />
queda congelado.<br />
La FIV parece haber traído más problemas que soluciones. Y esto ha sucedido porque se ha<br />
perdido de vista que la investigación científica, siendo sólo una herramienta para entender<br />
mejor la naturaleza, puede ser utilizada también en perjuicio del hombre.<br />
Por todo lo mencionado anteriormente podemos determinar que la fertilización in vitro no debe<br />
llevarse a cabo aunque los padres deseen tener un hijo y no les sea posible, ya que por algo en<br />
el plan de Dios se estipuló de esa manera.<br />
El Catecismo de la Iglesia Católica (promulgado por el Papa Juan Pablo II en 1992) nos dice:<br />
“2376. Las técnicas que provocan una disociación de la paternidad por intervención de una<br />
persona extraña a los cónyuges (donación del esperma o del óvulo, préstamo de útero) son<br />
gravemente deshonestas. Estas técnicas (inseminación y fecundación artificiales heterólogas)<br />
lesionan el derecho del niño a nacer de un padre y una madre conocidos de él y ligados entre<br />
sí por el matrimonio. Quebrantan “su derecho a llegar a ser padre y madre exclusivamente el<br />
uno a través del otro” (Congregación para la Doctrina de la Fe, Instr. Donum vitae, 2, 4).