Cualquier noche puede salir el sol
Reportaje sobre la canción "My Girl" de The Temptations.
Reportaje sobre la canción "My Girl" de The Temptations.
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CHECKiN<br />
¡Stop villancicos!<br />
Novedades para sobr<strong>el</strong>levar estas fechas: Legao, Erlend Øye; Seeds, TV on the Radio; Think nothing, We Cut Corners;<br />
Rhapsody in blue, Dani<strong>el</strong> Ligorio; La Villana canta, La Villana... Lo que sea menos otro álbum de versiones navideñas, por favor.<br />
músicos d<strong>el</strong> s<strong>el</strong>lo que trabajaban<br />
en horario de oficina. “En<br />
aqu<strong>el</strong>la época no se incluían los<br />
músicos de sesión en los créditos”,<br />
nos aclara Williams. “Años<br />
más tarde empezaron a hacerlo<br />
porque eran tan famosos que<br />
ya no podían pasar por alto su<br />
aportación”. Y es que aqu<strong>el</strong>los<br />
<strong>el</strong> mítico ‘riff’<br />
inicial fue<br />
sugerido a<br />
última hora<br />
por un músico<br />
de sesión<br />
virtuosos anónimos participaron<br />
en más números uno que<br />
los Beatles, los Rolling Stones,<br />
Elvis y los Beach Boys juntos,<br />
pero nunca salieron en las fotos<br />
ni cobraron derechos de autor.<br />
De vu<strong>el</strong>ta al estudio, Smokey<br />
Robinson en seguida interpretó<br />
<strong>el</strong> tema al piano para que los<br />
músicos se hicieran una idea.<br />
Tenían una hora para grabarla<br />
en estricto directo antes de<br />
que <strong>el</strong> siguiente productor reclamara<br />
toda su atención, pero<br />
los veteranos instrumentistas<br />
tan sólo necesitaron dos tomas.<br />
Como es obvio, en aqu<strong>el</strong> momento<br />
nadie sabía cómo sonaría<br />
la versión definitiva, pero ya<br />
se incluía <strong>el</strong> emblemático riff<br />
inicial sugerido a última hora<br />
por <strong>el</strong> guitarrista Robert White.<br />
Mientras tanto, The Temptations<br />
seguían con su extensa<br />
gira por los EE UU y disfrutaban<br />
de su estatus de estr<strong>el</strong>las. A<br />
pesar de la enorme popularidad<br />
de los artistas afroamericanos,<br />
en muchos lugares seguía imperando<br />
la segregación racial<br />
y esas canciones hacían <strong>salir</strong> a<br />
los jóvenes a las calles en busca<br />
de un futuro más esperanzador.<br />
“Nunca olvidaré un concierto<br />
que ofrecimos en Carolina d<strong>el</strong><br />
Sur en <strong>el</strong> que la pista de baile<br />
estaba dividida por la mitad con<br />
una cuerda… Los blancos a un<br />
lado y los negros al otro”, recuerda<br />
Williams con voz seria.<br />
“Al año siguiente, cuando regresamos,<br />
la cuerda había desaparecido.<br />
Blancos y negros<br />
bailaban juntos”.<br />
Una vez finalizado <strong>el</strong> tour,<br />
The Temptations regresaron<br />
a Detroit y <strong>el</strong> 10 de noviembre se<br />
encerraron en <strong>el</strong> estudio junto a<br />
Smokey Robinson para grabar<br />
las voces. “Entonces sucedió la<br />
magia”, explica Williams. El<br />
productor decidió arriesgarse<br />
y ofrecer la parte <strong>sol</strong>ista a un<br />
recién llegado que respondía<br />
al nombre de David Ruffin.<br />
Hasta entonces había permanecido<br />
en segundo plano, pero<br />
aqu<strong>el</strong>la oportunidad cambió<br />
su vida para siempre. Cuando<br />
la bobina empezó a rodar, la<br />
banda demostró su bagaje en<br />
<strong>el</strong> doo-wop haciendo unos coros<br />
c<strong>el</strong>estiales y Ruffin deslumbró<br />
con su voz de barítono, que encajaba<br />
perfectamente con esa<br />
m<strong>el</strong>odía romántica. Puede que<br />
<strong>el</strong> paso d<strong>el</strong> tiempo magnifique<br />
las cosas, pero Robinson ha comentado<br />
más de una vez que si<br />
no hubiera sido por ese cantante<br />
y aqu<strong>el</strong> grupo, nunca habría<br />
compuesto su letra más famosa.<br />
Los acontecimientos siguieron<br />
su curso habitual y <strong>el</strong> 17 de<br />
noviembre <strong>el</strong> productor se encontró<br />
con <strong>el</strong> arreglista Paul<br />
Riser para grabar la sección de<br />
cuerda que aportaría dramatismo.<br />
Cuando Robinson se<br />
sentó en la cabina de control y<br />
los violines empezaron a sonar,<br />
se emocionó al escuchar todas<br />
las piezas d<strong>el</strong> puzzle juntas.<br />
Eso sí, todavía le faltaba pasar<br />
la prueba más dura de Motown.<br />
¿Perrito o single?<br />
Cada viernes se organizaban los<br />
denominados quality control<br />
meetings, donde se evaluaban<br />
las canciones grabadas durante<br />
la semana. Era un encuentro<br />
reservado a productores,<br />
compositores y creativos que<br />
servía para decidir qué temas se<br />
editarían. “Todo lo que sucedía<br />
en Motown se planificaba en<br />
aqu<strong>el</strong>las reuniones y nosotros<br />
nunca estábamos invitados”,<br />
confiesa Otis Williams con una<br />
sonrisa. “Si un título funcionaba,<br />
los artistas y los productores<br />
volvíamos a trabajar juntos<br />
para intentar repetir <strong>el</strong> éxito”.<br />
Las malas lenguas afirman que<br />
Berry Gordy ponía a prueba a<br />
sus empleados preguntándoles<br />
qué harían si sólo tuvieran un<br />
dólar en <strong>el</strong> bolsillo: ¿comprar<br />
<strong>el</strong> single que defendían o un<br />
perrito caliente? Muchas veces<br />
optaban por lo segundo, pero<br />
dependiendo d<strong>el</strong> tiempo que<br />
tardaran en decidirse, él podía<br />
adivinar la calidad de la canción<br />
y su posible éxito.<br />
Precisamente eso fue lo<br />
que sucedió con My girl, que<br />
pasó todos los controles y se<br />
editó <strong>el</strong> 21 de diciembre de<br />
1964. Siguiendo la tradición,<br />
Gordy llamó inmediatamente<br />
a Smokey Robinson y le dio un<br />
cheque de 1.000 dólares por<br />
haber alcanzado <strong>el</strong> Nº 1 en las<br />
listas de ventas. En realidad<br />
aún no había sucedido, pero <strong>el</strong><br />
presidente d<strong>el</strong> s<strong>el</strong>lo tenía <strong>el</strong> presentimiento<br />
de que no tardaría<br />
y pocas veces se equivocaba.<br />
A principios de marzo, <strong>el</strong><br />
single se convirtió en <strong>el</strong> primer<br />
número uno de The Temptations.<br />
Pocos temas de la época<br />
tuvieron tanta repercusión<br />
como My girl, y <strong>el</strong> mejor barómetro<br />
para medir su influencia<br />
es enumerar las versiones<br />
de otros artistas: Otis Redding<br />
(1965), Stevie Wonder (1967),<br />
The Rolling Stones (1967), The<br />
Mama’s & the Papa’s (1967), Al<br />
Green (1969) e incluso Smokey<br />
Robinson y Aloe Blacc en una<br />
reciente aparición t<strong>el</strong>evisiva<br />
que batió récords de audiencia.<br />
“La gente sigue respondiendo<br />
como si fuera un éxito actual”,<br />
afirma con orgullo Williams.<br />
“Cada vez que la interpretamos,<br />
<strong>el</strong> público se levanta como si se<br />
tratara d<strong>el</strong> himno nacional… y<br />
bueno, <strong>puede</strong> que sea <strong>el</strong> himno<br />
oficial de The Temptations”.<br />
28 esquire • diciembre 2014