VE-36 NOVIEMBRE 2017
Create successful ePaper yourself
Turn your PDF publications into a flip-book with our unique Google optimized e-Paper software.
Peldaños<br />
Herminia se hacía vieja. Lo notaba cada mañana en la rigidez de<br />
sus rodillas, que tardaban una eternidad en ponerse en marcha. Soy<br />
como un coche que no quiere arrancar, se decía. Durante más de cuarenta<br />
años había ayudado a traer vidas al mundo, desenroscando cordones<br />
que amenazaban con estrangular al bebé antes de que este pudiese<br />
asomar su viscosa y diminuta nariz; insuflando aire en los pequeños<br />
pulmones que aún no habían aprendido el arte de respirar; frenando<br />
hemorragias y atajando fiebres postpartos con igual diligencia; pero<br />
ahora, ahora que sus huesudas manos apenas se limitaban a limpiar<br />
frejoles y a encender la estufa de leña, se daba cuenta de que no tenía<br />
ni un mísero hombro en el que apoyarse. Nunca antes Herminia<br />
había sentido ese vacío en su costado derecho; ni las sábanas, en<br />
mitad de la noche, se le antojaran nunca tan frías; ni el maldito<br />
escalón, que daba entrada a la cocina, le había parecido nunca tan<br />
alto, tan cruel con sus torpes piernas. ¡Este mal peldaño me va desarmar<br />
cualquier día! maldecía, mientras iba desandando a tientas, en<br />
completa soledad y sin guía, el camino que otrora se había esforzado<br />
en abrir para tantos.<br />
Manoli Vicente Fernández (Viana do Bolo, Ourense)<br />
http://www.lascosasqueescribo.wordpress.com<br />
17