Boletín "CARMEN", noviembre 2017

10 MIÉRCOLES SANTO
CARMEN
Los claveles del Carmen
Charo Pérez
Locutora de Canal Sur Radio y miembro
de El Llamador
Quién me iba a decir,
cuando hace 15 años
puse el pie en Sevilla
para iniciar mi aventura en Canal
Sur Radio, que en la calle
Feria iba a encontrar un motivo
para seguir vinculada a mi
tierra, al mar y a mi Patrona, la
Virgen del Carmen.
Gaditana de nacimiento,
cañaílla, de la Real Isla de León,
de San Fernando, ciudad marinera,
carmelita, de arte a raudales
y tierra también donde lo
castrense está muy presente.
Precisamente ese carácter militar
es el que hizo, allá por 1982,
que un grupo de jóvenes sevillanos
que realizaban el servicio
militar decidieran rendir
culto a la Virgen del Carmen y a
partir de ahí sembrar la semilla
de lo que hoy es la Hermandad
del Carmen.
Mi acercamiento a esta
corporación se limitaba a verla
en el entorno del convento de
Santa Ángela cuando procesionaba
los Viernes de Dolores. Al
poco tiempo comencé a formar
parte del equipo de El Llamador,
y fue un Miércoles Santo
de 2013 cuando su director,
Fran López de Paz, me dio la
oportunidad de retransmitir la
salida de la cofradía. Fue una
tarde complicada porque la
lluvia había estado presente
durante el día y había que tomar
la difícil decisión de salir o
no. Durante aquellas horas de
espera pude comprobar en persona
lo que es y lo que significa
pertenecer a una Hermandad.
Desde el más pequeño al más
veterano, desde el Hermano
Mayor hasta el
prioste, todos eran
uno en aquellos
momentos. Cuando
al final se dio la
buena noticia y se
abrieron las puertas
de Omnium
Sanctorum para
realizar la estación
de penitencia, fui
testigo privilegiado
de la alegría, la
emoción y el amor
de los hermanos
por sus Titulares.
Desde ese día el
Carmen me ganó.
A partir de entonces cada
Miércoles Santo tengo una cita
con el Señor de la Paz y la Virgen
marinera, a los que espero
a su llegada al templo para contar
a través de los micrófonos
de la radio uno de los momentos
que se han convertido en
algo especial para mí. Siempre
me sorprende cómo el barrio,
sus gentes, abarrotan los alrededores
del mercado, gentío
que sólo se abre cuando se hacen
presentes los cirios blancos
de los nazarenos que anuncian
la llegada de los pasos. Y es entonces
cuando llega el momento
crucial y para mí el más emocionante,
la difícil maniobra de
los costaleros, capitaneados
por los hermanos Gallego, que
se enfrentan con maestría, fervor
y amor a sus Titulares, a la
estrechez de la puerta ojival de
un Templo tenuemente iluminado.
Es en ese momento, poco
antes de cerrarse las puertas,
cuando un hermano me regala
cada año un clavel bañado en la
misma cera que se ha ido derramando
por las calles de Sevilla
y que conservo con cariño en
un lugar destacado de mi casa.
Son esos claveles del Carmen
que me recuerdan, cada
vez que los miro, esa especial
vinculación entre una locutora
de radio y una Hermandad que
nacieron en el mismo lugar: la
Isla de San Fernando.