Boletín "CARMEN", noviembre 2017

28 ENTREVISTA
CARMEN
D. Pedro Juan Álvarez Barrera, Párroco de Omnium Sanctorum
“Omnium Sanctorum está enfermo, con achaques
propios de la edad, pero no para morirse”
Félix Díaz
Don Pedro Juan Álvarez Barrera es el párroco de Omnium Sanctorum y también nuestro
director espiritual. Tras ejercer su ministerio sacerdotal en las localidades de Casariche
y Aznalcázar, este sevillano del barrio de “La Calzá” recaló en nuestra parroquia hace
diecisiete años, pilar de la de la Iglesia sevillana en sus casi ocho siglos de historia. En unos meses
se acometerán obras de reforma y mejora en la parroquia y la instalación de iluminación artística.
¿Cómo valoraría Vd. el templo de Omnium
Sanctorum dentro del Patrimonio Histórico de
la Iglesia de Sevilla?
Es uno de los más antiguos de Sevilla tras la
Reconquista (1248). Declarado monumento nacional
en 1932 por la República y bien de interés
cultural por la Junta de Andalucía.
¿Cuáles han sido las principales reformas
que ha sufrido el templo, desde la reconstrucción
que abanderó el Rvdo. Padre D. Antonio Tineo
(q.e.p.d.) tras la destrucción del año 1936?
En el incendio provocado el 18 de julio de
1936 desaparecieron todos los elementos barrocos
y neoclásicos, quedando el interior totalmente
diáfano de retablos y otros ornamentos,
excepto la interesante capilla funeraria de la
familia Cervantes. La reconstrucción fue duradera
y costosa, gracias a las aportaciones de la
feligresía y al interés del párroco, que la culminó
en 1940. En 1990 se cierra de nuevo la parroquia
por un importante deterioro de la cubierta, que
fue completamente repuesta en 1993.
¿Cuál es el estado actual de conservación de
Omnium Sanctorum?
Está enfermo, con achaques propios de la
edad, pero no para morirse. Es un edificio del
que hay que estar diariamente pendiente, y que
requiere un mantenimiento básico al que la parroquia
no puede responder siempre, sobre todo
en el caso de operaciones de gran envergadura.
Sólo la apertura diaria cuesta alrededor de
200 euros. La economía de la parroquia cuenta
con un presupuesto anual equilibrado de unos
56.500 euros, que no permite ninguna inversión
importante.
¿En qué consistirán las obras de mejora que
se van a acometer a lo largo de 2018, y cuándo
se esperan realizar?
Se trata de la renovación de toda la iluminación
artística del templo, gracias a la colaboración
de la Fundación Endesa, que va a sufragar
dicha instalación. No obstante, la parroquia
debe afrontar la obra civil de acometidas del
cableado, albañilería y pintura del templo. Hace
más de 30 años que no se pinta la parroquia
de manera completa (sólo algunas manos a las
zonas bajas de los muros interiores) y es reco-
FÉLIX DÍAZ