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WILLIAMS, George H. (1979) La Reforma Radical, Harvard University, Massachusetts (1)

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Su impresión de lo que eran los anabaptistas de Estrasburgo en esta época es sumamente<br />

interesante. Nos referimos al Judicium de anabaptistis. (de hacia julio de 1530) que escribió,<br />

según parece, a solicitud de las autoridades de Estrasburgo. Declara que no es su intención<br />

juzgarlos sin conocerlos mejor, pero enseguida dice lo que de ellos siente. Valdría la pena poner<br />

ante los ojos del lector toda esa descripción. Dice Schwenckfeld que los anabaptistas no parecen<br />

poseer el verdadero conocimiento de Cristo y que no hay pruebas palpables de que sean<br />

cristianos más regenerados que los solafideístas, o de que estén más enriquecidos con los dones<br />

del Espíritu. Observa, entre otras cosas, ésta:<br />

Sería bueno que se preocuparan más de la instrucción catequética en la fe cristiana en vez<br />

de andar admitiendo en su congregación al primero que llega y nombrándolo pastor (Vorsteher).<br />

. Por lo visto, a todos aquellos que no están en su grupo los considera gente sin Dios y no quieren<br />

tener nada que ver con ellos, negándose a tratar con quienes son débiles de fe.613<br />

Deplora Schwenckfeid su desaforada insistencia en el bautismo exterior, con lo cual se<br />

aterran a la letra olvidándose del espíritu. Presenta argumentos en contra de su radical<br />

escatología; les echa en cara la extraña preocupación que muestran por las cosas que ocurrieron<br />

antes del principio de los tiempos y por las que ocurrirán después del fin del mundo, y dice que<br />

ojalá desperdiciaran menos el tiempo discutiendo sobre cómo son las cosas en la presencia de<br />

Dios. Tolerante con ellos, y siempre dispuesto a interceder por ellos ante las autoridades,"<br />

expresa el deseo de que el testimonio anabaptista sea más abierto y más irónico.<br />

Por una ironía de la historia, Schwenckfeid acabará poniéndose al lado del milenarista<br />

Melchor Hofmann en la disputa sinodal de 1533 (cap. x.4).<br />

c) Melchor Hofmann, 1529<br />

En junio de 1529, un mes después de Schwenckfeld, llegó Hofmann a Estrasburgo y fue<br />

recibido como un campeón de la doctrina simbólica de la comunión.614 Poco antes, en abril,<br />

había tomado parte en una disputa celebrada en Flensburg (Dinamarca) en presencia del rey.<br />

Acababa en esos momentos de rechazar la doctrina luterana y de adoptar la zwingliana acerca de<br />

la eucaristía, y, así, su pelea con los disputantes luteranos fue especialmente vigorosa.<br />

En vista del eminente papel que le está reservado en el movimiento anabaptista y en la<br />

difusión de este movimiento por los territorios del Bajo Rin y de los Países Bajos, hacemos aquí<br />

una pausa en nuestro relato para dar un breve resumen de su vida hasta su llegada a Estrasburgo,<br />

que fue donde se convirtió al anabaptismo.<br />

Melchor Hofmann (ca. 1495-1543 o 1544),615 natural de Suabia, se ganaba la vida con<br />

su oficio de peletero cuando, hacia 1522, abrazó la causa luterana y se convirtió en un<br />

evangelista itinerante. Sus negocios lo llevaron a los territorios de la Orden Teutónica,<br />

613 CS, III, 832-833.<br />

614 Krebs y Rott, Elsass. I (QGT, VII), núm. 188; Klaus Depperman, "Melchior Hofmann and Strasbourg Anabaptism", en: M.<br />

Lienhard (ed.), Origins, pp. 197-226.<br />

615 <strong>La</strong>s principales obras modernas que existen sobre él son: W. I. Leendertz, Melchor Hofmann, Haarlem, 1883; Friedrich Otto<br />

zur linden, Melchior Hofmann: ein Prophet der Wie-tlcriaiifer, Haarlem, 1885 (muy documentadas las dos); Peter Kawerau,<br />

Melchior Hoffman als religioser Denkel-, Haarlem, 1954,v Klaus Deppermann, Melchor Hoffman: Sozíale Unruhen und<br />

apokalyptische Vision im Zeiltaiter der <strong>Reforma</strong>tion, Gttingen, <strong>1979</strong>.

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