Manual de Diplomado en Valores

Para tener en cuenta!
MÓDULO I.A TEMA 2: CARACTEROLOGÍA: ¿CÓMO SOY?
¿Puedo cambiar mi genio? ¿Cuál es mi carácter? En nuestra personalidad
tenemos dos rasgos que marcan nuestra actuación y van determinando nuestro
vivir: el temperamento y el carácter.
CARÁCTER Y TEMPERAMENTO:
¿GENIO Y FIGURA HASTA LA SEPULTURA?
Cada persona es como es, como Dios la hizo y con la historia de su vida. Hay
personas que una inteligencia clara, viva, ágil, o una que hay que decirle las cosas
con mucha sencillez y claridad porque no capta fácilmente las ideas. Hay
personas activas y otras pasivas. El emotivo y el no emotivo. Estos rasgos
constituyen el temperamento con que todo ser humano nace, pero que moldea,
ajusta o perfecciona, de acuerdo a la educación y experiencias que tiene durante
toda su vida, formando así su carácter y personalidad, que viene siendo la
manera de ser habitual de la persona, que le diferencia de los demás. El hombre
nace y se hace con su actuación diaria.
Es tan importante la afectividad humana que los clásicos la tenían por una parte
del alma, distinta de la sensibilidad y de la razón. En la afectividad habitan los
sentimientos, los afectos, las emociones y las pasiones. Sin una atenta
consideración de nuestra capacidad de tener sentimientos nos quedaríamos en
una imagen del hombre incompleta, y por tanto falsa, pero sentir gusto al hacer las
cosas no es lo primero ni lo más importante. La medida y valor viene dada por el
amor que se pone en las cosas. El gusto o no gusto es accidental.
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