TEC-17

L
a tecnología corre a pasos
agigantados y ello da la
oportunidad de encontrar
nuevos modelos de
negocios o modalidades
para levantar capital. Una
de ellas es el blockchain,
también conocida como
“cadena de bloques”, que
está dando lugar a un
nuevo patrón económico
que permite –como explica José Luis Várez
Benegas, en el libro Blockchain: la revolución
industrial de internet– que cualquier
persona pueda intercambiar bienes y servicios
sin necesidad de un tercero, debido
a que se basa en la descentralización de la
confianza. “Es un libro contable digital verificable
que no se puede modificar”, dice
Mauricio González Ochoa, quien es profesor
del Tecnológico de Monterrey.
Estas cadenas, que comenzaron a desarrollarse
a través de la criptomoneda bitcoin,
permiten generar información digital confiable
(porque no es posible modificar la
que ya se ha creado) y transparente (porque
cualquiera que tenga acceso la puede
consultar). Por eso, se les mira como el mecanismo
ideal para el funcionamiento de las
criptomonedas, aunque su uso no es exclusivo
de éstas. También podría significar una
verdadera revolución para la innovación
empresarial y los medios de financiamiento
de nuevos proyectos.
Por ejemplo, blockchain tiene el potencial
de innovar y reinventar la forma en que los
bancos y las industrias realizan transacciones
comerciales. El proceso de identificación de
clientes en cualquier entidad financiera es
complejo y requiere el consumo de recursos
económicos, humanos y de tiempo. Blockchain
simplifica este proceso al dar paso a
un intercambio transparente, que asegura
la protección de la información de identidad
de cada uno de los clientes. “Permite
hacer sistemas distribuidos que no tengan
necesidad de una central o alguien
que valide la identidad o una transacción”,
cuenta Patricia Chávez Cervantes, quien es
directora regional del departamento de TI
y Computación de la Ciudad de México en
el Tecnológico de Monterrey.
Una tendencia que crece
Algunas empresas ya han empezado a crear
sus propias cadenas de bloques privadas
y a incorporarlas en sus operaciones. Las
compañías de alimentos, por ejemplo, las
emplean para hacer más transparente la
información de sus cadenas de suministro
(como en inventarios, logística, tratamiento,
etcétera). “Al hacer de conocimiento público
el tratamiento y procesamiento que dan
a sus productos, no sólo generan confianza
hacia sus clientes, sino que evitan posibles
brotes de enfermedades transmitidas por
alimentos”, señala el profesor Mauricio
González Ochoa.
Cada vez más, en el mundo empiezan
a surgir empresas que fundamentan su
negocio en estas cadenas. Una de ellas se
llama Nodalblock. Se trata de una compañía
española que ofrece paquetes basados
en blockchain, los cuales permite la certificación
y la validación de documentos
e identidades, necesarios para proporcionar
seguridad y confianza en las relaciones
comerciales. Con Nodalblock es posible
certificar cualquier tipo de archivo digital
o firmar digitalmente cualquier documento
o contrato sin importar la distancia que
haya entre las partes.
Por su parte, la fabricante de autos BMW
también ha empezado a usar blockchain. Se
alió con una startup para garantizar por medio
de esta tecnología que los minerales que
compra para usar en sus baterías provengan
de orígenes éticos, no ligados a la esclavitud
o explotación infantil. Se cree que blockchain
le permitirá, a BMW, trabajar con los mineros,
quienes serían cargados en su red con
una certificación de su origen que quedará
guardada y no se puede editar.
MAYO / JUNIO 2018
TEC REVIEW
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