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EDITORIAL
Con el cambio en la dirección de
nuestra Facultad, se dieron instrucciones
para que el proyecto cultural
ABACO continúe con su labor de
difundir entre los alumnos, actividades
y talleres que permitan fomentar
la comunicación, creatividad,
liderazgo y trabajo en equipo.
El paso de cuatro años de este proyecto
ha dado resultados paulatinos,
tendientes a desarrollar entre
los alumnos que han pasado por
las aulas de ABACO, competencias
transversales que han aplicado en el
resto de las asignaturas teórico- disciplinarias.
La presentación final de talleres de
mayo del año pasado fue muestra de
la capacidad que tienen los alumnos
para mostrar frente a un público, las
habilidades adquiridas a lo largo de
dos ciclos y ofrecer un trabajo escénico
o visual de calidad.
Desde un comienzo ha quedado claro
que en ABACO no se trata de generar
artistas, sino de formar alumnos
con capacidad de desenvolverse
con seguridad y conocimientos para
reforzar sus relaciones laborales y
personales.
En voz del director de nuestra
Facultad, el Dr. Arturo Castañeda
Olalde al término de la conferencia
de prensa donde se hizo la presentación
de las actividades del proyecto
ABACO, “Esta parte que ABACO
aporta en la formación de los futuros
profesionistas es fundamental
para que tengan un desarrollo pleno
como sólo profesionales de una actividad,
sino como personas”.
Señaló que el proyecto ABACO
cumple con sus objetivos, con apertura
a mejorar, “tengo plena confianza
en ABACO por la gente que
está dentro del programa, porque
es gente preocupada y comprometida
con su trabajo, que gustan de
lo que hacen, buscando mejorar e ir
haciendo las cosas lo mejor posible”.
Actualmente el proyecto lo comprenden
tres coordinaciones y siete
docentes distribuidos en 14 talleres
de primer y segundo nivel, con
la tarea de brindar competencias a
los 650 estudiantes que actualmente
toman estos talleres (en modalidad
presencial y en línea). Además, la
coordinación de Difusión y Promoción
ya tiene programadas las actividades
para este semestre.
Este semestre ABACO crecerá al
contar ya con tres grupos representativos:
Danza y Teatro que se
suman al grupo de Música “Abaco
Rockpop”, y se busca consolidar su
presencia en el resto de los campis
donde nuestra Facultad tiene presencia.
También el proyecto se ha enfocado
en la vinculación con otras instituciones
como el Centro Académico
y Cultural (CAC- Juriqulla), con el
proyecto Cooltura, la Casa de Cultura
de Bernal, la Universidad Autónoma
de Estado de México y con
otras instituciones por la Muestra
de Cine- FCA. En agosto, alumnos
y docentes de ABACO participaron
en el Festival Internacional de Cine
de Toluca donde se presentaron ponencias
y videos producidos por estudiantes
de los talleres que se imparte
en la FCA.
Por todo lo anterior. ABACO seguirá
agregando una cuenta cultural a
la vida de esta facultad.
DIRECTORIO
Dr. Arturo Castañeda Olalde
Director FCA
M. en I. Martín Vivanco Vargas
Secretario Académico
M. en A. Patricia Gómez de la
Cortina Estrada
Secretaria Administrativa
Lic. Ivonne Hernández García
Coordinadora de Talleres
Culturales ABACO
Lic. Lily María Sigie Carrillo
Coordinadora de Difusión y
Promoción
Lic. Lily María Sigie Carrillo
Lic. Caín Mendoza Jiménez
Editores
Karina Covarrubias (Lokari)
Diseño Gráfico
Lic. Caín Mendoza Jiménez
Sandra Guerra Caballero
Corrección de estilo
Servicios Audiovisuales FCA
Talleres ABACO
Fotografía
Correo para sugerencias y comentarios:
abaco.promocion@gmail.com
abacocain@hotmail.com
Teléfono 1 92 12 00, extensión 5224
Revista impresa en los Talleres
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con nosotros. Tus trabajos no
deberán exceder los cuatro mil caracteres
y serán sometidos a revisión

Con el suelo que midas,
serás medido
Por Karla Paulina Díaz Reyes
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
Un tema poco conocido, hasta cierto
punto: las personas no conocen el trabajo
de un ingeniero civil, sobre todo
uno especializado en mecánica de suelos.
Estos profesionistas son los responsables
de revisar la calidad de las
construcciones en cuanto a terracerías,
concretos, estudios del suelo, topografía,
etcétera. Su trabajo es el que define
las resistencias, calidades y modificaciones
que se le tienen que hacer en la
construcción.
Nos enfocaremos directamente a la
construcción de una casa, puesto que
hoy en día la demanda de vivienda en
Querétaro ha aumentado gracias a que
cientos de personas buscan refugio al
emigrar de grandes ciudades plagadas
de inseguridad, tráfico, contaminación
y estrés.
Por consiguiente, debemos hablar de
las grandes constructoras que hacen
cientos de casas en pocos meses, éstas
entre muchas otras actividades, deben
contratar a un laboratorio de mecánica
de suelos que sean los encargados de
revisar todo el proceso en la elaboración
de una casa para que tengan una
durabilidad y resistencia adecuada.
Como habremos notado todos, actualmente
se hacen casas en muchos lugares
en donde hasta hace años existía nada,
incluyendo zonas alejadas de la ciudad:
cerros, zonas que antes eran de cultivo
y no necesariamente cuentan con las
propiedades ideales para la construcción
de viviendas. En estos casos antes
de comenzar con la construcción es
necesario sustituir parte del suelo por
materiales de mejor calidad.
Después del mejoramiento del suelo
comienza la construcción que hasta
el día de hoy es “artesanal”; es decir,
implica mano de obra de las personas
involucradas en el ramo, por lo que es
importante el control de calidad de los
materiales y procesos que se realizan
en este tipo de obras. Estas revisiones
se realizan desde el momento del mejoramiento
del suelo (para cimentar la
vivienda), hasta los acabados finales interiores.
Antes de usarlos, todos los materiales
se pueden revisar para su aceptación o
rechazo. Una compañía constructora
responsable exigirá a sus contratistas
que la mano de obra sea de calidad y
que los materiales a usar cumplan con
diversas características.
Sin embargo la demanda de viviendas
sobre todo de interés social que deben
ser accesibles económicamente para el
propietario final, hace que las compañías
tengan que bajar costos en calidad
de materiales y mano de obra barata.
Estos detalles posteriormente se traducen
en serios problemas para el comprador.
Incluso podremos recordar que han
existido fraccionamientos completos
que tienen defectos fuertes en las viviendas.
Grietas y hundimientos que
hacen que la vivienda ni siquiera sea
segura para ser habitada.
Estos casos sin duda se deben a la falta
de estudios previos del sitio, carencias
de calidad de materiales, poca o nula
supervisión y mano de obra defectuosa;
en una muestra de casas de una compañía
de este tipo hasta el 60 por ciento de
éstas pueden estar afectadas en alguno
de sus elementos, el laboratorio al momento
de ver estas irregularidades les
hace la observación, les pide otorgar
mejor calidad al cliente; de ellos dependerá
el cambiar la situación.
Existen también empresas constructoras
que buscan brindar calidad al cliente,
preocupados por el buen desarrollo
de su obra y entregar seguridad en sus
nuevos hogares. Esto implica contratar
un buen laboratorio, cambiar los materiales
si es necesario, ver irregularidades
y resarcirlas. De esta manera se mejora
la producción y se está al pendiente
de las posibles fallas que puedan darse
en el futuro.
Cuesta mucho trabajo hacerse de una
casa hoy en día, para la mayoría de las
personas, significa contraer una deuda
de muchos años y visto desde este punto,
podemos pensar que lo menos que
merecemos es que esté en buenas condiciones
pues podrá ser nuestro hogar
para toda la vida, tenemos el derecho de
al momento de comprar una casa exigir
una garantía, pedir a la constructora todos
estos reportes y para verificar que
cumpla con las normas establecidas; de
no ser así, buscar otra opción.
Pocas personas en la actualidad lo saben
(como comentábamos al principio),
es un tema del que poco se habla,
pero es un buen consejo para que no
nos tomen el pelo y confiar que lo que
estamos adquiriendo sea proporcional
a lo que estamos pagando, así que de
hoy en adelante recuerda que tienes el
derecho de informarte.
Procrastinación: porque
mañana, será otro día
Por Ricardo Ferrusca Serna
Estudiante de 3º semestre de Contador
Público, en línea
Los estudiantes universitarios o empleados
de cualquier empresa, adquieren
diariamente responsabilidades y
compromisos, los cuales deben realizarse
en tiempo y forma, pues de dicha
realización se juzgará su desempeño y
productividad. Entre las obligaciones
más comunes encontramos son las tareas,
trabajos, ensayos y proyectos parciales.
Este conjunto de obligaciones trae
como consecuencia que el individuo se
vea comprometido durante gran parte
del día, causándole sensaciones de aburrimiento
y tedio las cuales, darán pie a
situaciones abrumadoras, estresantes y
desafiantes.
Es aquí donde empieza la “procrastinación”,
la cual se define como “la acción
de postergar actividades o situaciones
que uno debe atender, por otras situaciones
más irrelevantes y agradables”.
Un ejemplo claro es cuando el estudiante
deja su tarea en segundo término e
inicia sesión en el “Facebook”, dando
prioridad a una actividad que no tiene
un provecho indispensable.
Entre las frases que más se relacionan
con este tipo de comportamiento son
por ejemplo: “hoy me dedico a relajarme
y descansar, ya mañana me pongo
estudiar todo el día” o “hay tiempo de
sobra ¡No es necesario ni siquiera empezar
a hacerlo!”. Las dos frases tienen
un sentido de postergación, aquí el problema
empieza cuando se vuelve un vicio
y en una cadena que se repite todos
los días.
La revista “Giro Inesperado” en su artículo
“Clases de procrastinadores”
muestra una investigación hecha por
la Dra. Linda Sapadin, de la Universidad
de New York donde se presentan
seis tipos de “procrastinadores”,
los cuales se diferencian por su
comportamiento.
El primero es el perfeccionista, el cual,
pierde tiempo elaborando un planteamiento
perfecto de sus tareas. El segundo
es el soñador, su razonamiento es
positivo pero no realiza acciones para
lograr su objetivo. El tercero es el generador
de crisis, realizan el trabajo a última
hora, ya que se desempeñan mejor
bajo presión.
El cuarto es el atormentado, tiene pensamientos
de miedo y fracaso, ocasionando
bloqueo en la elaboración de tareas.
El quinto es el desafiante, rechazan
la imposición del trabajo, muestran una
actitud de rebeldía ante las obligaciones
asignadas. El sexto es el sobrecargado,
su característica principal es comprometerse
en muchas actividades y saturarse,
trayendo como consecuencia que
no realice alguna al 100 por ciento.
Las clasificaciones anteriores tienen
un factor común: la subestimación del
tiempo necesario para terminar la tarea
requerida.
Como mencionamos el principal problema
de este comportamiento es que
se vuelva rutinario para el individuo,
trayendo como consecuencia que las
relaciones con los demás se vean afectadas
por falta de cumplimiento. Pueden
ocasionar por ejemplo, desconfianza
cuando por bajo rendimiento del empleado,
el jefe se disgusta.
Pero existen alternativas para combatir
este fenómeno al momento que se realiza
una actividad, un punto indispensable
es que la persona analice sus sensaciones
e identifique las actividades que
causan molestias y por ello, la evasión.
Es relevante que la persona no inicie
sesión en redes sociales antes o durante
la realización de la tarea, pues esto causará
distracción, se recomienda que se
deje al término de la actividad o se destine
un momento exclusivo para ello.
Nunca hay que subestimar el tiempo
ni la capacidad, esto puede ocasionar
que se cumpla con la tarea de último
momento o con retraso; para mejorar
este aspecto es importante plantear retos
personales como la de terminar las
obligaciones con días de anticipación.
Es necesario empezar siempre por las
tareas más importantes y complicadas,
ya que así los ánimos y energía se gastaran
en algo difícil, estas tareas se vuelven
más fáciles y agradables cuando se
dividen en pequeñas partes.
Es importante que la gente conozca la
definición de este fenómeno, ya que
así mediante un análisis personal, el
individuo podrá darse cuenta si su
comportamiento coincide con los síntomas
característicos de este, que si no
es tratado con las precauciones debidas,
ocasionará tarde o temprano, más consecuencias.
Recuerda que la única manera de no
solucionar un problema es evitándolo,
por eso siempre que estés frente a muchos
deberes y responsabilidades hazles
frente y no los esquives, ni mucho menos
busques justificaciones, ya que la
solución se encuentra en nosotros mismos,
así que a partir de este momento
procura eliminar de tu mente la frase
tan arraigada de “tengo que hacer tal
cosa” por “ponte a hacerlo, lo haré sin
dudar ahora mismo”.
4
Valores +
Valores
+ 5

Escolásticas durante
la guerra cristera
Por Albanie Yelikza Cabrera
Bocanegra
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
Don José Bocanegra nació el 5 de julio
de 1920 en la comunidad de Escolásticas,
perteneciente al municipio de
Pedro Escobedo. Siendo apenas la segunda
generación en poblar este lugar,
después de su padre, don Pedro Bocanegra.
Don José ahora de 92 años, recuerda
con melancolía cómo es que en su juventud
ayudaba a su padre a sembrar
sus grandes campos para tener algo en
la mesa, y no sólo por necesidad y obligación
se dedicó a esta labor, sino por la
gran satisfacción que le provocaba ver
los frutos de su esfuerzo.
¿Disfrutaba de su vida? “¡Sí!”, responde
con tono un poco efusivo, a la vez que
se dibuja lentamente una expresión de
tristeza en su rostro.
A pesar que los primeros 20 años de su
vida creció entre matas de maíz, cerros
poblados de frutos y tierra entre sus
pies, llegó un momento en el que todo
lo creyó perdido. “Si nos rehusábamos a
dar el nombre de todos los campesinos
nuestro destino, era el panteón”, dijo
con ojos llorosos.
¿Un periodo de gran desconsuelo para
usted? “Claro, los cristeros casi terminan
no sólo con nuestras tierras, sino
con nuestras familias”.
Los “cristeros” como él los llama, llegaron
a saquear sus tierras e intentaron
adueñarse de ellas, pero su padre Don
Pedro Bocanegra y muchos de los campesinos
de mayor edad se resistieron,
esto provocó años de conflictos en esta
comunidad, años que para Don José
siendo apenas un muchacho, fueron de
horror.
Con mirada fija y distante, recuerda la
angustia que al lado de su padre y seis
hermanos pasó al recibir constantes
amenazas y la disyuntiva ante la cual
se encontraban; querían luchar por sus
tierras, pero el sacerdote de la parroquia
les decía que tenían que agachar la
cabeza y dejarse dominar por ellos.
¿Pensaron en dar marcha atrás? “No lo
voy a negar, hubo un momento de cobardía
en el que pensamos rendirnos,
queríamos ser fieles a nuestra iglesia
pero mi padre nos dio el valor que necesitábamos
para enfrentar la situación”
señala.
Y no es para menos: Don José era apenas
un jovencito y sus hermanos siendo
mayores que él aún eran inexpertos en
la vida; sin embargo, a pesar que varios
siguieron los consejos de los feligreses,
Don José, su padre y hermanos fueron
de las pocas familias que con coraje lucharon
contra la corriente.
Aunque no sólo tenían que protegerse
de los cristeros, sino que también tenían
que cubrirse las espaldas de cualquier
sospechoso; nadie era confiable.
Don Nicolás Bocanegra tío de don José,
fue asesinado en su presencia, “Llegaron
dos hombres tocaron la puerta, mi
tío Nicolás quien traía una pistola en la
mano, mi primo Porfirio y yo, nos metimos
debajo de una mesa porque escuchamos
que destechaban la casa, las
tejas caían arriba de la mesa, y cuando
mi tío sacó la cabeza para disparar, un
hombre se le adelantó”.
Con voz quebrada y limpiándose las lágrimas
que silenciosamente ruedan sobre
sus mejillas, recuerda cómo es que
él y su primo de sólo 13 años de edad
salieron a refugiarse en las cuevas aledañas
a la comunidad.
¿Su prioridad era su vida? “Y no fue
la única vez que tuvimos que hacerlo,
por tres años tuvimos que soportar esa
agonía, pero también queríamos luchar
por lo que tanto nos había costado:
nuestras tierras”.
No era para menos, esa tierra se la habían
ganado a pulso, con el sudor de su
frente y el amor y dedicación que cada
hombre ponía en ellas.
¿Pero lo lograron? “Así es, durante ese
tiempo no sólo mi tío fue víctima de
la injusticia, familias enteras fueron
asesinadas, pero nunca nos rendimos
y gracias a Dios hoy tenemos nuestras
tierras que son las que heredaré a mis
hijos y nietos” concluyó.
Este hombre de cabello blanco, manos
desgastadas producto de su ferviente
labor y mirada penetrante, transmite
gracias a su experiencia no sólo valor y
lucha, sino gran alegría por la vida.
Un mundo pequeño rodeado
de cuatro torres
Por Isabella Moreno *
Por tomar una mala decisión, en un segundo
tu vida llega a cambiar, hay que
analizar y pensar que todos nuestros
actos tienen consecuencias.
Esto ha ocurrido con miles de personas
que están privados de su libertad; algunos
de por vida estarán bajo la sombra;
algunos otros, la mitad de su vida; pero
todos, alejados del mundo.
La experiencia vivida en ese lugar es
un hecho que debería ser compartidos
a todos aquellos que no tiene idea de
todo lo que se vive detrás de esos muros
y de esas cuatro torres estrictamente
vigiladas en aquel penal.
No es muy grato ingresar a ese lugar, es
un sitio que siempre se encuentra muy
frio, tal vez por la altura del lugar donde
se localiza; siendo la una de la tarde aún
el clima es frio. Pero es relevante mencionar
la infinidad de requisitosque se
piden para poder visitar a un familiar
interno.
En la primera caseta se encuentra una
custodia, una mujer de complexión robusta,
morena, ella recibe credenciales
oficiales y verifica en la computadora si
efectivamente, la persona que entrará a
visita está en la lista del interno autorizada
por los directivos del penal para
visitar al interno; cada seis meses la lista
puede ser modificada por este último.
Luego están los custodios que reciben
credenciales y toman las huellas digitales
del visitante para ingresar, éste a su
vez les entrega un ticket donde certifica
que efectivamente la persona entra en
calidad de visitante, la hora en que ingresa
y claro está, al interno que visita.
Si es que se quieren ingresar alimentos,
hay una larga lista de requisitos, ya que
por ejemplo, está estrictamente prohibido
ingresar bolillo, pan de azúcar,
carne con huesos muy grandes, cualquier
alimento que contenga cilantro,
frutas, etcétera. Y los alimentos se deja
en una ventanilla donde cuatro custodias
se encargan de su inspección. Siguiendo
la revisión los visitantes son
encerradas en un pequeño espacio de
dos por tres metros.
En los extremos hay puertas: una de entrada
y otra de salida, aquí es donde se
revisa todo muy cuidadosamente; esta
revisión es muy penosa para la mayoría
de las personas, ya que aquí se tienen
que desvestir completamente para que
los custodios escudriñen desde la ropa
y los zapatos, hasta el cabello de la persona,
para así evitar que se ingrese alguna
sustancia o droga al penal.
Después en el cuarto retén se revisa el
ticket para verificar que los datos son
correctos; para la última puerta de seguridad
hay un último retén donde
nuevamente revisan huellas digitales.
Si en todo el proceso existiera alguna
falta a sus reglas, los custodios tienen la
capacidad de regresar al visitante o restringirle
la entrada, de acuerdo a la falta,
Incluso en ocasiones, se ha remitido
jurídicamente a personas a quienes se
les encuentran sustancias prohibidas.
Estar en el patio central del área común
es una experiencia única, ya que se respira
un ambiente tenso, vas caminando
y las caras de los internos son de tristeza.
Ahí dentro es un mundo pequeño
donde el tiempo se detiene, ya que muchos
internos no tienen contacto con
nada del exterior, ni familiares.
El centro es grande: hay una cancha de
futbol, otra de básquetbol, una tienda
de abarrotes, un pequeño restaurante,
una panadería, y pequeños negocios
donde venden cosas elaboradas por los
propios internos como bolsas, lámparas,
cuadros, almohadas entre otros.
De esta manera algunos internos laboran,
su paga es mínima, pero esto es un
privilegio ya que no hay muchas plazas
para laborar, esto lo ganan de acuerdo
a su comportamiento en el interior del
penal; con el tiempo, se les dan beneficios
a los internos.
Es muy difícil adaptarse a vivir dentro
del penal, esto es lo que cuenta Juan
un interno cuya sentencia es de quince
años, apenas lleva año y medio recluido;
fue difícil la adaptación ya que al
principio los llevan a un área de procesados,
aquí es donde se localizan los internos
que tienen un caso en proceso y
a quienes aún no se les dicta sentencia.
Gerardo comenta que le ha tocado estar
en las dos áreas y fue difícil, porque
para empezar su celda, es para seis
personas, el lugar es muy pequeño, un
baño y cocina, unas literas… todo está
amontonado. Señala que cada uno de
sus compañeros han pasado por diferentes
situaciones y obviamente el carácter
de cada uno hace difícil la convivencia
entre ellos mismos.
Aseguró que hay etapas donde se desesperan
por estar recluidos y hacen difícil
el ambiente ya que por cualquier motivo
buscan discusiones o pleitos. Aunque
ello trae consecuencias ya que les
pueden abrir otro proceso, “¡Es mejor
llevársela tranquila!”, dijo.
Decenas de historias tristes se encuentran
encerradas en aquel lugar, donde
el tiempo se detiene, donde a diario los
internos luchan por su bienestar, y lo
único que piden es tener fuerza y fortaleza
en búsqueda de su bienestar.
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Valores +
Valores
+ 7

Medio siglo entre el
infierno y un cuento de hadas
Entre química, danza y
añoranzas de mi tierra
Por Héctor Daniel Romo Martínez
Estudiante de 3º semestre de Contador
Público, modalidad en línea
Muchas mujeres en nuestra actualidad,
se ven rodeadas de violencia intrafamiliar,
explotación y violación, de
abandono por parte de sus esposos y de
la total indefensión; sin embargo hay
otras que como Irma, logran romper
con ese silencio y salir adelante a pesar
de las adversidades y con hijos que dependen
de ella.
Para muchas mujeres en nuestro país
la vida no es el cuento de hadas que se
imaginaban cuando tenían seis años.
No hay castillos, ni príncipes azules y
mucho menos finales felices, porque
la historia ni siquiera acaba cuando te
casas, “sino todo lo contrario, apenas
comienza”, afirma Irma, con la mirada
cansada y los párpados ojerosos, una
mujer de baja estatura, 50 años, complexión
robusta y piel blanca.
Irma se casó a los 27 años, dijo ruborizada
y molesta. De este matrimonio
nacieron dos de sus tres hijas, pero
realmente la vida de casada no era nada
de lo que esperaba. Mujer humilde y de
profesión, trabajadora incansable, decidió
salir a trabajar y atender el hogar al
mismo tiempo para mantener a su familia,
pues el sueldo de su ex-esposo no
alcanzaba.
“Un día por la mañana te levantas siendo
joven y creyendo tener el mundo en
tus manos, y de pronto te das cuenta de
que la realidad no es como te la pintaban
y que a fin de cuentas los años pasan
y al día siguiente despiertas con 50
años y tus sueños aún no realizados, y
te preguntas, ¿es esto lo que merezco?”,
explica con unas lágrimas en los ojos.
Cuando estaba con si ex-esposo, su vida
era un infierno, “me golpeaba y me forzaba
a hacer toda clase de cosas sólo
para complacerlo, encima me amenazaba
con llevarse a mis hijas lejos si intentaba
dejarlo”, dijo limpiándose los ojos
con la manga de su suéter rosa, mientras
sujeta con la mano libre, el brazo de
un sillón grisáceo.
“Pero a lo que realmente le temía era a
quedarme sola, sin el apoyo de alguien
y que no me alcanzara para mantener
a sus hijas, temía que sus padres no la
apoyaran y que la tomaran como una
apestada, comenta con voz entrecortada.
¿Qué llevó a Irma a tomar la decisión
de divorciarse? “Un día mi ex-esposo
quemó a mi hija y no hizo algo por salvarla,
y al verla sufrir tanto me armé de
valor y lo dejé; hablé con mis papás y
mis hermanos y me brindaron su apoyo
incondicional”, ella sonrió y elevó los
ojos en señal de recordatorio.
Ella creyó haber encontrado un mejor
amor en otro hombre, “pero descubrí
que era igual de baquetón que el anterior,
no me respetaba ni me tenía alguna
consideración, e igual que el otro me
dejó, así que desde mi primer divorcio,
creo que no debes esperar nada ni esperar
recibir algo a cambio”.
Irma ama mucho a sus tres hijas y son
orgullo y la fuerza que le impulsa a seguir
adelante, “trabajo mucho, pero
todo ese esfuerzo al fin está rindiendo
frutos y con mucho gusto regreso todos
los días a mi casa donde me esperan
mis tres mujeres y mi pequeño nieto”,
sonríe mientras un bebé de un año se
acerca diciéndole “mamá” a Irma.
De toda esta experiencia, ¿te queda un
mal sabor de boca? “De todo he aprendido
y he superado muchas cosas, la
vida no es perfecta, pero tampoco debes
estancarte, y a todas las que han
sufrido cosas como las que yo he pasado,
las invito a romper ese silencio y
a pensar más allá, deben salir adelante
porque hay un mundo maravilloso y un
montón de alegrías que las esperan”, se
levantó del sillón con un aire lleno de
vida y orgullo.
Irma tiene una hija que es madre adolescente,
¿crees que lo que tú viviste le
haya afectado a ella? “No cabe duda,
aunque siempre me he esmerado por
darles lo mejor a mis hijas, lo que ella
hizo, estoy segura que fue por amor;
tiene a su esposo y ella es mi mejor
amiga, la apoyo y ella me apoya, a pesar
de lo que haga, sigue siendo mi orgullo,
actualmente estudia su carrera y no
descuida a su familia; es feliz y yo soy
feliz por ella y espero, no viva lo mismo
que yo”.
Irma, con actualmente 50 años, tres hijas
un yerno y su primer nieto, se siente
feliz, aunque aún tiene ciertos desaires;
de vez en cuando siente que no ha alcanzado
todo lo que se había propuesto.
Cansada y agotada, con más de 24 años
de carrera laboral, estrena hoy su nueva
casa en compañía de sus seres queridos,
y pone el nombre de todas las mujeres
en alto para demostrar que “estar sola,
no te debe limitar como mujer”.
Por Erika Migdalia García Aguilar
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
Sábado por la tarde, día de descanso
al lado de sus padres, después de casi
un mes sin verlos, Anahí Landa León,
originaria de Cadereyta, Qro., es una
mujer de 28 años de edad, muy delgada,
1.70 m. de altura y con una postura
erguida que no pierde en momento
alguno.
El buen humor le caracteriza, su carácter
amable y tranquilo, sin borrar por
un momento esa sonrisa, un tono alegre
en la voz y un aire relajado contrasta
con su denotada disciplina y obstinación
en conseguir lo que se propone.
Empezó su carrera dancística a los 10
años de edad en el Centro Cultural Cadereyta
por invitación de una de sus
mejores amigas. La decisión de asistir
a clases de danza, en un principio sólo
fue para estar con su amiga; sin embargo
al tomar la primera clase, hubo algo
en su instructor, que le generó una gran
ilusión por continuar bailando, y como
ella misma lo dice: “me parecía tan raro,
sentirme tan a gusto haciendo algo tan
desconocido”.
A partir de ese momento la danza formó
parte de su vida, ya que a pesar de
continuar sus estudios y terminar una
carrera como Química Farmacéutica
Bióloga –que sólo ejerció por seis meses-
nunca desistió, a pesar de hacer algunas
pausas. Formó parte de un grupo
llamado “Huastecos independientes”
de Pánuco, Veracruz y con ellos realizó
su primera gira por Argentina, Uruguay
y Brasil.
Esta experiencia le hizo recordar que
uno de sus sueños era ser bailarina profesional
y teniendo un título profesional
y con un trabajo que consiguió a pocos
días de haber terminado sus prácticas
profesionales, decidió que sería tiempo
de buscar su realización.
Y fue así que de la nada renunció a su
trabajo, habló con sus papás y aunque
no les agradó del todo la noticia, decidieron
apoyarla y dejarla partir al Distrito
Federal. Anahí tenía miedo, ya
que dudaba de su talento para ingresar
al Ballet Folklórico de Amalia Hernández,
además sabía que se enfrentaba a
un mundo totalmente diferente a la
tranquilidad de provincia.
Su primera opción era bailar en el Ballet
de Silvia Lozano, pero una amiga la
convenció que se lanzará a lo grande:
al Ballet de Amalia que era lo máximo
que una bailarina podía alcanzar. Aún
con un poco de recelo, decidió acudir,
le dijeron que regresara por la tarde y
justo ese día hubo audición con uno de
los coordinadores.
Esa misma tarde, el Maestro Carlos Antúnez,
encargado del grupo experimental
(donde llegan todos los nuevos), le
dijo que podía formar parte de su grupo.
Era increíble, algo que no imaginó,
así tan de pronto su sueño comenzaba a
hacerse realidad.
Pero fue una gran labor subir a la compañía
residente, después de 11 meses de
preparación, clases de técnica, ballet,
cansancio y largas horas de ensayo, la
señora Norma López Hernández –hija
de Amalia Hernández y directora del
Ballet- le hizo la audición esperada y
fue el Maestro Antúnez quien le informó
“que la iban a probar en función”, y
que le deseaba mucha suerte.
Fue así como logró subir al grupo de
residentes, su primera presentación fue
en el Teatro Hidalgo de la Ciudad de
México para después presentarse en los
mejores teatros del país. Pero aún le faltaba
un paso: llegar a la Primera Compañía,
quien representa a México en
giras internacionales. Y justo cuando
llegó el momento y creyó que por fin su
sueño se había realizado, algo sucedió.
Por decisión propia regresó a la Compañía
de Residentes, según sus propias
palabras, “estuve bailando con la Primera
y con la residente como 6 meses
y cuando me dijeron que ya sólo iba a
estar en la principal pasaron muchas
cosas por mi cabeza, la verdad el ambiente
es completamente diferente, me
di cuenta que en los ensayos era muy
infeliz, a pesar que no tengo problemas
con alguien, hay tantas envidias e intereses
de por medio, el ambiente se vuelve
pesado y me di cuenta de que no era
lo que yo esperaba, soy más feliz en la
Compañía de Residentes”.
Anahí no piensa continuar por mucho
tiempo, pues dice “ya estoy pensando
demasiado en regresar, extraño muchísimo
a mi familia, que yo creo que
ese es el sacrificio más grande que he
tenido que hacer por cumplir mis sueños,
de repente se convierte en una vida
solitaria, sin familia y sin frecuentar a
mis amigos”.
“Aunque déjame decirte que no todo ha
sido sacrificios, he aprendido cosas que
jamás imaginé, mi visión de la danza
ha cambiado por completo y cada vez
me sorprende más, lo que yo siempre
vi en las bailarinas de la televisión con
tanta admiración y el verme ahora en
los videos, bailando como parte de ese
mundo, me llena de satisfacción y me
hace darme cuenta de que el sacrificio,
ha valido la pena, porque ya he realizado
mi sueño”, concluyó.
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Valores +
Valores
+ 9

“Cierre de talleres ABACO 2012-1”
Del 21 al 30 de mayo, fuimos testigos
de las presentaciones finales de
los alumnos de segundo nivel de
los talleres culturales ABACO, nuevamente
en diversos escenarios de
nuestra ciudad, los jóvenes de las
diferentes licenciaturas de nuestra
facultad proyectaron comunicación,
liderazgo, trabajo en equipo y creatividad
en diferentes modos de expresión.
Sitios como la Casa Legislativa, el
Museo de la Ciudad, el Jardín del
Arte, el auditorio Esperanza Cabrera,
el edificio de Posgrado de la
Facultad de Ingeniería y el Centro
Cultural Manuel Gómez Morín fueron
los escenarios donde los jóvenes
hicieron la presentación de obras
teatrales, parodias, cortometrajes,
coreografías, exposiciones fotográficas,
performances, debates, lecturas
y un concierto.
Actualmente el proyecto ABACO ha
impartido talleres a cerca de dos mil
500 estudiantes como parte del plan
de estudios de las ocho licenciaturas
que se imparten en la Facultad. En
este momento se imparten los talleres
de Teatro, Danza, Música, Expresión
verbal, Guión radiofónico
y periodismo, Fotografía, Cine contemporáneo
y Procesos creativos.
Presentación Video Performance.
Cierre de taller de Teatro
Cierre de taller Procesos Creativos. Cierre de taller de Cine
Cierre de taller de Música
Cierre de taller de Guión y Periodismo.
Cierre de taller de Teatro
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Valores +
Valores
+ 11

El proyecto cultural ABACO tiene programadas
diversas actividades en el
segundo semestre del año; entre otras,
el concurso “La voz universitaria”, el
“Quinto Concierto Navideño”, el concurso
de “Cuentacuentos”, y por primera
vez una “Noche irlandesa”.
Por instrucciones de la actual
dirección de la Facultad que encabeza
el Dr. Arturo Castañeda Olalde, la
coordinación de Difusión y Promoción
de ABACO se ha dado a la tarea
de ofrecer actividades donde los alumnos
enriquezcan su cultura general mediante
la asistencia y participación en
eventos artísticos y concursos.
El pasado 12 de septiembre se realizó la
tercera “Noche Mexicana FCA” donde
hubo una verbena con antojitos mexicanos,
bebidas, postres y la presentación
del grupo “Luna y agua”, el Ballet
Costumbrista de la Facultad de Bellas
Artes y los grupos “ABACO Rock pop”
y “Voodoo Bambú” que participó en el
anterior concurso de Bandas universitarias.
Dentro de las actividades contempladas
en lo que resta del año, se realizará
por tercera ocasión el concurso “La
voz universitaria” que se realizará el
19 de octubre en el Auditorio de Usos
Múltiples de nuestra Facultad; para
esta ocasión se contemplan dos categorías:
amateur y canta autor original; la
convocatoria ya está abierta.
El 9 de octubre, se realizará el tercer
concurso de cuentacuentos donde los
estudiantes de diversas carreras que se
imparten en la Facultad, fomenta su
espíritu de competencia y desarrollan
las capacidades de expresión corporal
y oral. En esta ocasión los cuentos que
serán narrados tendrán como temática
el misterio y el suspenso.
Por primera vez se realizará un proyecto
en conjunto con la coordinación
de Idiomas de la facultad denominado
ABACO EN ACCIÓN
“Noche irlandesa” donde alumnos de
talleres culturales que estén en niveles
avanzados de inglés narrarán en ese
idioma, cuentos de aquella región europea;
para ello se contará con el trabajo
de los docentes de ambas áreas. El
evento se realizará en el campi Cerro
de las Campanas el 22 de octubre a las
19:00 hrs., y en el campi Cadereyta el 23
de octubre a las 13:00 hrs.
La cuarta edición de la muestra de altares
se realizará el 30 de octubre en la
explanada de la UAQ donde los alumnos
realizarán una investigación sobre
docentes ya finados que impartieron
cátedra en nuestra facultad y para
ellos estarán dedicados cada uno de
los altares que concursen.
ABACO también participará en actividades
que organizan otras instituciones.
El 4 de octubre se realizará la
inauguración de la exposición “Solar
System” en el campus Juriqulla de la
UNAM donde participará el grupo representativo
“Abaco rock pop” y donde
las imágenes que serán expuestas
son de diversos astros fotografiados
por la Administración Nacional de
Aeronáutica y del Espacio de Estados
Unidos (NASA).
En la semana del 23 al 27 de octubre
estará presente con la participación de
los talleres de Música, Danza y Teatro
en las actividades que realizará durante
esos días la Dirección de Difusión Cultural,
así como un proyecto piloto sobre
cine del cual se darán detalles más
adelante.
Del 16 al 18 de noviembre ABACO participará
en la denominada “Noche de
las estrellas”, organizada por la UNAM.
En esta edición se realizará con la participación
de los grupos representativos
de Danza y Teatro que ya se encuentran
trabajando en su integración. También
participará el grupo representativo de
Música. Se realizará en el Parque Querétaro
2000 y en el pueblo de Bernal en
el municipio de Ezequiel Montes.
El viernes 30 de noviembre, el proyecto
organiza el cuarto Concierto Navideño
a beneficio de alguna institución
de Asistencia Privada; el programa aún
está por confirmar.
La presentación de obras de teatro ya
comenzó el pasado 27 de agosto con la
obra “Barbie girls” (la cual se presenta
también el 10 de septiembre en el municipio
de San Juan del Río) y seguirá
con puestas en escena como “Anti espectáculo”
(el 24 de septiembre en Posgrado
de la Facultad y el 25 en el Campi
Amealco) y el 15 de noviembre, “Crónica
de Parias y Errantes” se presentará
en el campi Cerro de las Campanas.
La exposición “Simulacros de la fatalidad”,
realizado por alumnos del taller
de fotografía, se presentará de manera
itinerante por varios campis de nuestra
Alma Mater, en este mes se expondrá
en Jalpan; en octubre en San Juan del
Río y en Noviembre en Amealco; se
trata de una docena de fotografías que
muestran las consecuencias del excesivo
consumismo al que se enfrentan las
personas producto de la modernidad.
Actualmente el proyecto ABACO tiene
cuatro años de implementarse en
nuestra Facultad difundiendo espacios
de cultura entre los casi cuatro
mil 500 integrantes que comprenden la
comunidad de nuestra facultad.
En este semestre se imparten 15 talleres
en dos niveles, cubriendo una
población de 750 alumnos, aunque ha
egresado de los talleres cerca de 3 mil
alumnos quienes de Estados Unidos
(NASA).
En la semana del 23 al 27 de octubre
estará presente con la participación de
los talleres de Música, Danza y Teatro
en las actividades que realizará durante
esos días la Dirección de Difusión
Cultural, así como un proyecto piloto
sobre cine del cual se darán detalles
más adelante.
Del 16 al 18 de noviembre ABACO participará
en la denominada “Noche de
las estrellas”, organizada por la UNAM.
En esta edición se realizará con la participación
de los grupos representativos
de Danza y Teatro que ya se encuentran
trabajando en su integración. También
participará el grupo representativo
de Música. Se realizará en el Parque
Querétaro 2000 y en el pueblo de Bernal
en el municipio de Ezequiel Montes.
El viernes 30 de noviembre, el proyecto
organiza el cuarto Concierto Navideño
a beneficio de alguna institución
de Asistencia Privada; el programa aún
está por confirmar.
La presentación de obras de teatro ya
comenzó el pasado 27 de agosto con la
obra “Barbie girls” (la cual se presenta
también el 10 de septiembre en el municipio
de San Juan del Río) y seguirá
con puestas en escena como “Anti espectáculo”
(el 24 de septiembre en Posgrado
de la Facultad y el 25 en el Campi
Amealco) y el 15 de noviembre, “Crónica
de Parias y Errantes” se presentará
en el campi Cerro de las Campanas.
Actualmente el proyecto ABACO tiene
cuatro años de implementarse en
nuestra Facultad difundiendo espacios
de cultura entre los casi cuatro mil 500
integrantes que comprenden la comunidad
de nuestra facultad.
Cierre de Taller de Danza
Primer Feria “Identidad en tú Universidad”
La Actriz Adriana Barraza en el
Festival Internacional de Cine en Toluca
Cierre de taller de Expresión Verbal
12
Valores +
Valores
+ 13

Tres metros separan nuestro amor
Por Albanie Yelikza Cabrera
Bocanegra
Estudiante de 3º grado de
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea.
El cortejo fúnebre avanza despacio, ella
los observa y mira sus rostros de tristeza
y frustración, sus lágrimas rodando
sobre sus mejillas declaran un silencio
lleno de dolor. Al llegar al cementerio
cuatro hombres de traje negro y corbata
se encargan de bajar el féretro mientras
sus hijos y esposa a la cual José ha dejado
viuda, por fin pueden llorar.
Ella conmovida por el momento pero
reprimiendo la tristeza que siente por
ver a sus amigos sufrir se acerca y sin
decir una sola palabra los abraza tiernamente,
avanzando hacia la morada
eterna de José.
El aire parece ser más frío y fuerte que
otros días, los árboles colocados de
manera uniforme a las orillas de ese
camino que es interminable, las tumbas
pequeñas, otras grandes, algunas
recientes y otras más de los que descansan
allí desde hace mucho tiempo, son
testigos del día que nadie de los presentes
olvidará.
Ella lleva en la mano algunas flores
de alcatraz mientras sigue abrazando
a su gran amigo que ha tenido una de
sus más grandes pérdidas, voltea hacia
atrás y no ve más que miradas de dolor
entre el cortejo fúnebre de unas cien
personas. Es por eso que no puede contenerse
más y empieza a llorar mientras
su amigo la mira con un rostro de complicidad.
La viuda no para de llorar y pide que
por favor le dejen verlo por última vez.
Los cuatro hombres que llevan el féretro
lo descansan sobre el suelo, la viuda
llega, se arrodilla frente a él, lo abre y
mira por última vez a quien la acompaño
por veinte años.
Sus lágrimas se derraman en silencio y
caen sobre el cristal del ataúd, ese cristal
que ahora los separará eternamente.
Después de verlo por algunos minutos
la viuda con voz quebradiza pero con
un rostro que ahora transmite tranquilidad,
pide que lo sellen.
Ella le da un beso lleno de ternura en
la mejilla a su amigo y camina despacio
hacia la mujer que más lamenta esta
pérdida, la abraza y le da algunas palabras
de consuelo, mientras seis hombres
vestidos de overol, camisa a rayas y
sombrero lo bajan lentamente a la tumba
de unos tres metros de profundidad.
Está cayendo la noche y el féretro acaba
de descansar en esa tierra tan fría como
la noche, el llanto se vuelve más fuerte,
algunos caen en la desesperación mientras
otros, que también están destrozados
de dolor, tratan de calmarlos.
Ella con las lágrimas cayendo hasta su
pecho, es incapaz de dar otra palabras
más de consuelo, camina con pasos
cortos y débiles hacia una banca cercana,
se sienta, agacha la cabeza y sigue
llorando pero ahora casi en silencio, los
observa y no puede más que pensar en
la ironía de la vida.
Los seis hombres que bajaron el féretro
traen algunas palas y empiezan a echar
la tierra sobre José, ella se acerca para
presenciar el momento. La tierra cae
sobre él como tapando los recuerdos,
las alegrías y tristezas de su vida, aunque
sea para calmar por un momento
el dolor.
Los llantos parecen ir cesando poco a
poco y ella también está más tranquila,
después ve cómo le dan los últimos detalles
a la tumba que ha quedado como
una más en ese cementerio inmenso
donde sobresale una colina que es donde
ahora José descansa.
Ella prontamente pone sobre su tumba
los alcatraces que ha llevado para que le
acompañen por lo menos algunos días,
los demás presentes también colocan
varias flores hasta que la tumba queda
completamente cubierta.
Finalmente regresa a casa al igual que
todos los acompañantes de la familia de
José y percibe tranquilidad en sus rostros
que deja ver la resignación y la distancia
que ahora los separa tras veinte
años de complicidad y cariño.
Nunca hay que
perderte, esperanza
Por Armando García Nava
Estudiante de tercer semestre de
Contador Público, modalidad en línea
La vida transcurría feliz para la familia
López, la señora Lupita; típica mujer de
clase media, morena con 1.60 m. de estatura
y su pelo negro, siempre limpio y
bien cepillado, mismo que cae en cascada
sobre sus hombros semidesnudos
y que en armonía con su cuello y brazos
permiten apreciar la belleza de una
piel firme y cuidada, pues ni el paso de
sus 44 primaveras habían podido dejar
gran huella.
¿Cómo fue el principio de su calvario?
El fin de su felicidad estaba cerca, una
pequeña inflamación en la pierna izquierda
de Esmeralda su hija menor de
21 años, comenzó a hacerse presente; al
principio no se le dio mucha importancia,
“ella pensó que se había golpeado”,
pero tras una semana empezó a aumentar
al igual que el dolor.
Preocupados por la rapidez con que
avanzaba, decidieron llevarla a hacer
una revisión médica, “mi corazón dio
un vuelco, cuando vi salir al doctor y
vi en su cara la señal inequívoca de que
algo grave sucedía”. Les recomendó hacer
unos estudios más profundos, pues
por su experiencia consideró que algo
malo se estaba generando en esa pierna.
A partir de este día comenzó el martirio,
quisieron albergar una última esperanza,
“pero algo en mi interior de madre
me decía que mi niña, mi pequeña
estaba mal”.
Acudieron al Hospital del niño y la mujer,
donde gracias a que su hermana es
jefa de enfermeras, lograron que sus estudios
estuvieran pronto, y a la vez fueran
evaluados por el médico.
Cuatro semanas habían transcurrido
desde que el mal empezó a crecer notoriamente.
El doctor los llamó por
separado, primero a ella, y luego al esposo
de Esmeralda.
“Noté que a pesar
de la práctica que
tienen para dar noticias,
el médico no
podía evitar estar
nervioso”, comentó.
El galeno respiró
profundo y dijo: “en verdad lamento
darles esta mala noticia”; nuevamente
tomó aire mientras la ansiedad porque
continuara los mataba “y nuestros ojos
casi anegados por las lágrimas, amenazaban
con desbordar de un rato a otro”.
“Esmeralda tiene cáncer en su pierna, y
si queremos salvarla hay que amputarla”.
Demás esta preguntarle cómo se sintió
en ese momento, ¿ dolor? ¿miedo?.
“El dolor que sentí fue inmenso ¿Usted
puede imaginar lo que se siente? de un
día para otro la vida cambia y hasta el
más fuerte ante esta situación se dobla”.
Su yerno no se pudo contener, salió corriendo,
golpeaba la pared, se daba topes,
“¿por qué?, ¿por qué?”, se preguntaba,
“Dios dime ¿qué te hemos hecho
para merecer esto?”; un paciente que se
encontraba en la sala lo contuvo, le dijo
“tranquilo amigo, yo sé cómo te sientes,
yo también tengo cáncer; tiene dos
años que me lo detectaron y ¡mírame!
¡aquí estoy! Dios es grande, no pierdas
la fe en él ni la esperanza”.
Después, buscaron mas diagnósticos, la
llevaron a otras partes: médicos particulares,
curanderos, “en fin… viajamos
a muchos lugares, a Michoacán, San
Luis Potosí, Hidalgo, le dimos infinidad
de remedios que nos vendían”.
Pero dos especialistas más estuvieron
de acuerdo con el diagnóstico inicial,
debían amputar de inmediato y no
hubo de otra, la pierna cada vez crecía
más haciendo el dolor insoportable.
Era indispensable cortar antes que la
enfermedad alcanzara otras partes de
su cuerpo.
¿Que decía Esmeralda? ¿Cómo tomó
la noticia? “Mi niña es muy fuerte, demostró
tal fortaleza que no he visto en
ninguno de nosotros, jamás la vi llorar
o estar muy triste, incluso hasta bromeaba
con su enfermedad. Perdió su
pierna, no vi que le diera la mayor importancia”,
ella estaba feliz de estar viva
y sobre todo, de abrazar a su pequeña,
la nieta de Lupita.
Los amigos y familiares son parte importante
en estos casos: ellos han recibido
apoyo, del trabajo de su esposo, de
asociaciones civiles y también del gobierno,
“cuando no puede tomar aquí
sus quimioterapias la han canalizado
hasta San Luis Potosí y Morelia. Es un
gran gasto, pero lo hacemos con gusto
al saberla viva”.
De esto ya hace tres años, pero la enfermedad
aumenta a pesar de las radiaciones
y quimioterapias, le han tenido que
intervenir cuatro veces más, “ya no hay
de dónde cortar” dicen los doctores,
sorprendidos de ver como Esmeralda
sigue viva.
“Dios tiene la última palabra”, dice Lupita,
“sé que él no nos abandona, ¡ella
tiene que vivir, su hija la necesita!”.
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Valores +
Valores
+ 15

Mi reflejo no mostró quién
soy en verdad
Por Albanie Yelikza Cabrera
Bocanegra
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
flamaciones crónicas que pueden traer
otras complicaciones médicas”.
Lo peor del caso es que el paciente hace
oídos sordos a las recomendaciones
médicas y nunca se sentirá satisfecho
con su aspecto, pensando que no se cubrieron
sus expectativas.
Garduño Vera agrega: “muchas veces el
médico es el primero en admitir que el
procedimiento será peligroso y el resultado
artificial y poco atractivo, pero la
mayoría de los adictos conscientes de
esto deciden aprobar la cirugía”.
María Estrada es una mujer que ha abusado
de la cirugía estética y aunque su
cuerpo aún no da muestras evidentes
de este hecho; reconoció: “cada vez que
salía de quirófano sentía una euforia
por saber cuales serían los resultados y
me gustaban estaba contenta con ellos,
pero al cabo de algunos meses me volvía
a sentir insegura con mi aspecto y
regresaba con el cirujano”.
Y es que aunque saben que su aspecto
provoca sorpresa y curiosidad, ellos
aseguran están conformes con ello,
saben que no son naturales y mucho
menos recomendables ciertos procedimientos,
pero esto les tiene sin cuidado.
Es por esta clase de impacto psicológico
en el paciente que los cirujanos plásticos
cada vez están más familiarizados
con el tema y han llegado al punto de
rehusarse a hacer algún procedimiento
estético que ponga en riesgo su credibilidad,
y sobre todo, la vida del paciente.
“El médico debe tener cierto conocimiento
psicológico para saber discernir
cuándo realizar la cirugía y cuándo
En los últimos años se ha registrad un
incremento en las operaciones de cirugía
estética. La meta para muchas personas
es verse mejor, y mediante procedimientos
(que van desde la aplicación
de bótox hasta las más complejas como
lipoescultura e implantes), van en busca
del cuerpo perfecto.
Vivimos en una sociedad donde la cirugía
estética ya no sólo es un rasgo
femenino, sino también masculino.
Personas de ambos géneros han pasado
varias veces por el quirófano con el
objetivo de lograr el cuerpo perfecto y
dejan clara su adicción a los tratamientos
estéticos.
El “síndrome de la muñeca Barbie”
como también es conocida esta
adicción por la cirugía estética moderna,
se ha generalizado cada vez más, ya
que a diferencia de hace algunas décadas
cuando era difícil acceder a este
tipo de intervenciones quirúrgicas debido
a su alto costo, ahora los precios
son mucho más accesibles y esto ha
contribuido a la cada vez mayor insatisfacción
del paciente.
Algunas intervenciones dan lugar a
imágenes poco naturales, pero a los pacientes
adictos ya no les importa, aunque
se corra el riesgo de sufrir alguna
complicación debido al abuso de éstas.
El medico general Adrián Garduño
Vera quien actualmente cursa una especialidad
en cirugía plástica estética
dijo: “las consecuencias del abuso pueden
ser graves: desde que el rostro de
la persona pierda su textura natural,
cuerpos con medidas irreales, hasta inincluso
es momento que el paciente
acuda a un psiquiatra o psicoanalista
para saber si tiene algún tipo de trastorno”
dijo Adrián Garduño.
Por lo anterior, varios profesionales
afirman que antes que la operación sea
un hecho, deben determinar la real motivación
del paciente, y han descubierto
que la verdadera razón por la que deciden
someterse a varios tipos de procedimientos
quirúrgicos es inseguridad.
Muchos de estos dependientes del bisturí
creen que después de la intervención
quirúrgica obtendrán cosas que no
logran con su actual aspecto como un
mejor empleo, pareja o hijos.
María Estrada concluye: “Cada vez me
sentía más triste y deprimida, simplemente
mi meta era el cuerpo perfecto,
para mí para mi marido incluso para
mi jefe, no sé simplemente no me sentía
realizada pero la verdad es que no
me daba cuenta del daño que me hacía”.
Lo cierto es que el cuerpo perfecto es
algo subjetivo y se consigue con la
aceptación de uno mismo, lo importante
es que cada persona se preocupé
por fomentar su autoestima y bienestar,
sólo así se consigue ser feliz.
Dormir con tres mujeres,
una bendición
Por Lening Martínez Frías
Estudiante de 3º semestre la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
Es el penúltimo día laboral en la empresa,
la agenda parece apretada: conferencias,
planeación de estrategias para
la siguiente semana, ajuste de presupuestos,
etcétera… ¡Por fin podemos
charlar!
Pablo es un hombre de 33 años originario
del Distrito Federal, carismático,
complexión delgada, alto, cabello lacio
negro, algo encorvado al caminar, su
característica peculiar es que ya se está
quedando calvo y cuenta con entradas
muy pronunciadas en la frente, y esto
es algo que le preocupa mucho, pero
como él dice impondrá la nueva moda
de los “pelones”.
Su responsabilidad es ser Gerente Divisional
de Ventas en una empresa de
galletas, encargado de dos estados de la
República: San Luís Potosí y Zacatecas,
tiene a su cargo 5 centros de distribución,
11 supervisores y 168 rutas de
venta al detalle. Su función es lograr los
objetivos que la compañía le asigna a
través de gestión y estrategia.
Después de cumplir un año viviendo en
San Luis Potosí dijo que se siente muy
contento, ya que ha encontrado en el
estado la tranquilidad que se envidia en
el Distrito Federal; “recalca” que su calidad
de vida ha mejorado notablemente.
Padre de dos niñas: Camila y Sofhia y
con más de siete años felizmente casado
con Jésica; se considera bendecido
por la vida.
Sobre la motivación que lo empuja y le
da fuerzas para seguir adelante para no
darse por vencido, Pablo dice: “el pilar
es mi familia, sin ellas no tendría propósito
mi lucha diaria”, con una sonrisa
dibujada en su rostro y en tono de broma
dice: “un día recuerdo que le pedí
a Dios que me diera la oportunidad
de dormir con tres hermosas mujeres,
pero al parecer no me supe explicar,
pues si duermo con esas tres hermosas
mujeres: mi esposa y mis dos princesas.
“Fue feliz mi niñez”, dice, a pesar de
provenir de una familia humilde no
cuenta con algún recuerdo negativo de
su niñez, “al contrario, era un pingo, en
la medida de lo posible mis padres luchaban
por darnos lo mejor”.
Considera que tuvo la dicha de contar
con el mejor papá del mundo, “fue un
momento difícil asimilar que mi padre
no estaría más a nuestro lado, algo para
lo que no estaba preparado, mi padre
falleció cuando yo tenía 18 años, un
problema cardiaco fue la causa de su
muerte”.
Y agrega: “te puedo compartir que él
inspiro el 99 por ciento de lo que soy,
todo el tiempo el viejo se preocupaba
por enseñarme algo nuevo y darme sus
consejos, jamás olvidare un dicho que
citaba cada que notaba o se daba cuenta
que le mentía. Pablo: nunca olvides que
en la vida existen dos cosas a las que jamás
podrás engañar o te mentirán: las
matemáticas y a ti mismo”.
Su madre también fue y sigue siendo
un pilar muy importante en su vida, “a
pesar de la falta de mi padre, ella supo
afrontar los problemas y llenarse de valor
para salir y sacarnos adelante, gracias
a ella mis tres hermanos y yo contamos
con nuestra carrera”, dijo.
Fue difícil llegar a donde Pablo se encuentra
ahora, “nada es gratis en la vida
y todo tiene un grado de esfuerzo mayúsculo
al cotidiano. Jamás perder el
enfoque de nuestras metas es parte importante
del logro, el saber y entender
que la organización es un pilar fundamental
dentro del estudio me permitía
cumplir con mis obligaciones, tanto en
la escuela como en el trabajo que tenia
de medio tiempo para solventar algunos
gastos personales que mi madre no
podía apoyarme”.
Se le dificultaba a veces cumplir, existieron
momentos en donde estuvo a
punto de dejar la universidad; pero la
promesa que había hecho a sus padres,
le ayudó a no claudicar.
Ser el mejor no implica tener muchos
años de vida o experiencia, “a mí se me
presentó la oportunidad a los 28 años
de ser gerente y te comparto que ser el
mejor implica preparación, desarrollo
de estrategias”, y recalcó que el “90 por
ciento del éxito es la preparación”.
Pablo concluye: “No importa qué tan
alta es la cima si la voluntad es enorme
y la preparación su complemento, la
cima alcanzada será la siguiente”.
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Valores +
Valores
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Confirmado:
el enemigo sí
está en casa
Por Karla Paulina Díaz Reyes
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad a distancia
Octavio es un hombre de 33 años con
gran sobrepeso, alto, ojos pequeños,
nariz respingada, orejas grandes; detrás
de esos lentes que usa se refleja una mirada
triste, como si algo escondiera, es
originario de Querétaro, lugar donde se
siente feliz.
Al platicar con él en su oficina, denota
cierta timidez, pocas palabras, sonido
suave, es visible su falta de confianza,
se rodea de pocos amigos, pero son los
que lo han acompañado en las situaciones
mas difíciles de su vida; claro, al
igual que en los instantes de felicidad.
Al recordar su niñez, vino a la mente
lo enérgico que era su padre, un hombre
muy impulsivo que en ocasiones a
la menor provocación se convertía en
un ser agresivo y controlador: “si veía
que mis calificaciones andaban mal me
golpeaba fuertemente con un cinturón,
recuerdo varias veces que me dejó tirado
con sangre en mi ropa de los fuertes
golpes”, este recuerdo le pone un semblante
triste, aunque no bajó la mirada,
al contrario: el tono de su voz era fuerte
y claro.
Al paso de los años la poca presencia
de sus padres y la violencia que se vivía
en casa lo hicieron tomar decisiones de
las que no se arrepiente, pero que determinaron
su vida. A los 17 años embarazó
a su novia de preparatoria, “en
ella encontraba cariño, aceptación, seguridad,
por lo que no dudamos en casarnos”,
emocionado por su nueva vida
recibieron en este mundo a su pequeña
hija Rosita, momento en que unió a su
familia y se le dio lugar de hombre de
familia.
Octavio comentó: “en esta etapa vino
mi primer fracaso emocional”, contó
que su esposa cambió radicalmente
durante el matrimonio, no permitía ni
que tocara a su hija, hasta que después
de ocho meses de casados le sucedió la
escena más triste que recuerda, “entré
a mi casa después de llegar de trabajar
y vi que ya no estaban ella y mi pequeña
hija, closets vacíos, la cuna sin cobijas...
se habían ido, sólo pude tomar un
suetercito que se quedó en un cuarto y
mientras lo olía, lloraba por mi hija que
se había ido”.
A partir de ese momento hundido en
una gran depresión, con un gran vacío
y carente de amor empezó a beber alcohol
sin medida, “una noche, cuando
volvía del trabajo compré una botella
de brandy, en mi casa, con un vacío
muy grande en mi corazón comencé a
beber”, tomó hasta que se terminó la
botella, triste y mareado, sólo se fue a
dormir.
Este momento en su vida fue determinante,
un poco apenado dijo que desde
ese día todas las noches antes de llegar a
su casa compraba cervezas y alcohol, “y
bebía mucho antes de dormir pues de
otro modo no podía conciliar el sueño”.
En este momento su rendimiento laboral
también comenzó a bajar.
Poco a poco el consumo fue creciendo a
la par de su obsesión por comer; “cada
que me sentía triste salía a buscar qué
comer ya fueran papas, refrescos o tacos”,
la comida callejera se convirtió en
su segundo aliado, que a la par de las
bebidas embriagantes lo llevaron a un
sobrepeso tal que de pesar 70 kg., en estos
momentos subió a 120 kg., otro problema
con el que lucha todos los días.
Su alcoholismo empeoró, varias veces lo
llevaron detenido, amigos cercanos lo
buscaban en bares a la mañana siguiente
cuando nadie lo encontraba: “un día
mi mamá llegó a mi casa, mientras esperaba
sentada afuera de mi casa, llegué
en un taxi muy tomado, cuando mi
mamá me abrazó yo me hice del baño
ahí parado a un lado de mi madre”, un
momento que le duele profundamente
el que ella lo viera así.
A partir de ese momento Octavio acudió
a un grupo de alcohólicos donde ha
aprendido que el hombre que es ahora,
es producto de lo que fue en su niñez;
“después de haber ido a ese grupo estuve
sobrio un año”, lamentablemente
recayó en una fiesta donde pensaba
que si tomaba sólo una cerveza no pasaba
nada; se equivocó, después de esa
cerveza duró cuatro días seguidos tomando,
situación que lo volvió a poner
como antes: solo, triste, vacío...
Después de esa recaída le detectaron
diabetes por su sobrepeso y el exceso
de alcohol; enfermedad que más que
nunca lo hizo recapacitar por el amor a
su hija, su madre y a él mismo; nuevamente
entró a un grupo de ayuda, hasta
el momento lleva sobrio siete meses,
luchando día a día y comenzó a hacer
ejercicio para su sobrepeso.
Octavio concluye: “la vida me está dando
otra oportunidad, no quiero que mi
hija sepa de mí como un hombre alcohólico
y gordo, necesito cambiar, necesito
estar saludable por mi y la gente
que me quiere, esta vez no los voy a defraudar”.
Por Ricardo Ferrusca Serna
Estudiante de 3º semestre de
Contador Público, modalidad
en línea
De doble oficio:
conserje al volante
Él es una persona que presta sus servicios
a toda la gente para que lleguen a
tiempo a sus destinos. Julio maneja un
taxi de lunes a sábado todas las mañanas;
su aspecto es el de cualquier hombre
de 38 años: complexión robusta y
1.75 metros de altura, su piel luce quemada
por el Sol; “cuando empecé hace
15 años a manejar el taxi, yo tenía la piel
blanca, pero ni modo… el Sol; es un
gaje del oficio”.
Su expresión refleja experiencia y seguridad,
la cual está respalda por años de
trabajo. Su actitud y comportamiento
muestran a una persona solidaria, dispuesta
a ayudar a la gente con la que
convive todos los días, sin importar que
sean desconocidos.
Sus inicios en el negocio se remontan
a mediados de 1996, cuando tenía 22
años de edad, “en esa época yo trabajaba
de conserje en un hospital por las
noches, ya me había casado y tenía un
hijo recién nacido, por lo que necesitaba
más ingresos para sostener a mi
familia”, responde con tono resignado,
“entonces por casualidad mi cuñado se
hizo titular de una concesión de taxi,
necesitaba un chofer, y aquí estoy”.
Al preguntarle sobre cuáles fueron las
principales dificultades que encontró
cuando era un novato respondió: “en
primer lugar yo no conocía bien la ciudad,
conocía las zonas más transitadas,
pero me faltaba identificar los nombres
de las calles, avenidas y colonias”. Recuerda
que en esa época la ciudad era
más pequeña y tranquila a comparación
de hoy.
El otro inconveniente fue la tarifa, “no
tenía ni idea de cuánto cobrar, desconocía
la ubicación de los lugares, así es
difícil calcular un precio”. Sólo se limitaba
a preguntarles a sus clientes cuanto
era lo que le cobraban los demás taxistas.
Con un tono irónico mencionó que
sentía mucho nerviosismo al tratar a la
gente, no sabía cómo reaccionar ante los
distintos pasajeros que transportaba,
“al inicio tenía algunas precauciones,
por ejemplo, no cargaba a dos hombres
juntos, tampoco llevaba a gente que iba
rumbo a colonias como Menchaca, que
están muy lejos y solitarias”.
Julio dijo que hoy en día, ya no toma
tantas precauciones como cuando era
joven, pero sigue manteniéndose alerta
ante cualquier inconveniente, “con tantos
años aprendes a identificar a las personas
desde que te hacen la parada, si
van normales o eufóricas, si se dirigen
al trabajo, a una fiesta, etcétera”.
Sobre los principales inconvenientes
que se presentan al realizar su trabajo,
respondió de inmediato que la falta de
lugares para ir al baño, “hay veces que
tienes la necesidad y no encuentras un
sitio público cercano, entonces haces
en algún baldío de la vía publica”, suelta
una risa. Mencionó que ha tenido distintos
episodio con la Policía Municipal
por este motivo, pero nunca lo han detenido
oficialmente.
Al preguntarle si el taxi es su único trabajo
respondió que no, pues aún continua
laborando como conserje por las
noches en el mismo lugar de hace 15
años, recalcó que se siente a gusto con
estas dos actividades que ha realizado
desde mucho tiempo atrás, “no soy rico
pero me alcanza para vivir con lo justo”.
Entre las distintas experiencias que ha
vivido a lo largo de su trayectoria como
chofer, recuerda desde choques, peleas
con otros conductores a golpes y de
forma verbal, hasta generosas propinas,
regalos, rencuentros con personas, entre
muchos otros.
En una ocasión subió a dos tipos nada
sospechosos de aproximadamente 25
años, al parecer estudiantes, durante el
transcurso conversó con ellos y se dio
cuenta que eran asaltantes, “no pasó
nada extraordinario de hecho los dos
tipos se portaron muy generosos, me
pagaron con un billete de a 500 y me
dijeron que me quedará con el cambio”,
respondió con un tono muy contento y
sonriendo.
Ahora Julio sigue laborando tras el volante
en una ciudad cada vez más grande,
identificando colonias, calles y referencias
nuevas; duerme por la tarde y
en la noche es conserje, pues finalmente
se hace un sacrificio por los hijos a
quienes les brinda un futuro mejor que
su presente.
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Valores +
Valores
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Y con ustedes… la “manada”
de la novia
Por Karla Paulina Díaz Reyes
Estudiante de 3º semestre de la
Licenciatura en Administración,
modalidad en línea
Teniendo como testigo una hermosa
luna llena tan grande y brillante que sus
rayos entraban por la ventana de la sala
amplia, cálida, con paredes repletas de
adornos, todo era digno de una despedida
de soltera en la casa de Karla, hermana
de la novia, mientras realizaban
un juego con las luces apagadas, entre
muchas risas, manos por aquí por allá y
el calor de las bebidas entraban al juego;
todas estaban preparadas para recibir
la visita que sorprendería a algunas
invitadas.
De pronto tocan un timbre discreto que
apenas se alcanza a escuchar por el ruido
de la música y las risas de alrededor
20 chicas que se encontraban en el lugar,
las damas de honor de la novia y
Karla la hermana se voltearon a ver con
ojos misteriosos, de pronto Dulce voltea
con cara de “¿Qué está pasando? No
me digan que...”
Las chavas comenzaron con los gritos
“¡Wow!” “¡Órale!” “¡Pásale!” Mientras
algunas más recatadas se les notaban
cierta cara de asombro, entre nerviosas
y con movimientos discretos comenzaron
a aplaudirle a “André” nombre del
stripper que inmediatamente pregunta
a Karla dónde está el baño para cambiarse
y preparase para su show.
Pusieron la canción que solicitó, subieron
todo el volumen que hacía que los
grandes ventanales de la casa de la anfitriona
retumbaran, apagaron las luces y
encendieron unas cuantas velas que había
preparado con anticipación, se abre
la puerta del baño, en eso salió André
con un muy ajustado pantalón azul que
dejaba ver sus bien torneadas piernas.
No usaba playera y mostraba su bien
formado abdomen, unos brazos delgados
pero fuertes y sólo un sombrero de
policía que apenas dejaba ver sus hermosos
ojos verdes. Entre movimientos
lentos, suaves pero muy provocativos
preguntó quién era la futura novia, la
tomó de una mano, la sentó al centro de
la sala y comenzó a bailarle solo a ella.
Aquello era un descontrol total, todas
las demás invitadas gritaban, bailaban,
soltaban fuertes risas, algunas nerviosas
trataban de voltear la mirada pero
se mantenían atentas a lo que estaba
ocurriendo.
En ese momento Dulce que se notaba
un poco distraía, propuso que hiciera
el show para todas las demás pues ella
se sentía un poco intimidada, ya que en
pocos días estaría casada con el amor
de su vida y no estaba dispuesta a cometer
alguna locura, las chicas iban pasando
poco a poco a bailar, le tocaban a
André las piernas, los glúteos, el pecho,
estaban en un ambiente de sensualidad,
locura y de bebidas que hacían que
las chicas se desinhibieran a la menor
provocación.
Se cambió la dinámica, André propuso
un juego en el que la festejada diría a
cada invitada en que parte del cuerpo
untarle aceite a él, cada una de las chicas
cumplió con lo que se le encomendó,
unas tocaban discretamente, otras
aprovecharon la oportunidad para
tocar bien aquel cuerpo perfecto que
tenían frente a ellas. Así fueron cambiando
de actividades para que todas
participaran, unas mas subidas de tono,
otras más relajadas, el fin era mantener
ese ambiente de fiesta, sensualidad y
festejo para la futura novia.
El show estuvo mejor de lo que esperaban,
Dulce disfrutó tanto con risas,
juegos, posiciones y aprietos en los que
metió a sus amigas, aprovechó para incluir
desde la más tímida hasta la más
extrovertida para que al igual que ella,
disfrutaran ese momento que ella estaba
viviendo con mucha dicha y felicidad.
Llegaba el momento en el que el
stripper tenía que irse pues su tiempo
había terminado, las amigas comenzaron
a invitarle de beber, unas dos más
coquetas le pidieron que no se fuera,
entre abrazos, caricias por aquí y por
allá se quedaron bailando en la sala él y
unas cuantas chicas más que con bailes
muy candentes se quedaron solos en lo
que las demás entraron a la cocina a comer
un refrigerio.
Llegó el momento en que tenían que
partir a un antro en el que tenían reservación,
apuradas las que irían a ese
lugar subieron a los cuartos a retocarse
el maquillaje, peinarse, ya mucho más
arregladas bajaron, tomaron una bebida
más y juntas se fueron a seguir la
fiesta, eso si iban muy bien acompañadas
de André quien aceptó ir con
ellas pues nada perdido sabía que había
chicas muy lindas con quien pasar un
buen momento.
Al otro día amanecieron en casa de Karla
en una habitación grande y cómoda
que les acondicionó para que pudieran
quedarse juntas, haciendo recuento de
los daños se dieron cuenta que de aquel
antro se fueron dos chicas con André
“¿A dónde se fueron?” “¿Dónde se quedaron?”
Eso sigue siendo algo que sólo
ellas sabrán, pues nunca quisieron dar
detalles de su aventura.
Mister XV: en la edad
de las ilusiones
Por Paulina Guadalupe Gutiérrez
Luévano
Alumna de 3º semestre de Contador
Público, modalidad en línea
¡Qué día les espera a todos los que trabajan
en una agencia de autos! Alrededor
de medio centenar de empleados
están nerviosos en su centro de trabajo,
no pueden mantenerse concentrados,
no atienden como debe de ser a sus
clientes, entre ellos se preguntaban “¿ya
estás listo? ¿Qué más falta? ¿Vendrá el
señor?”.
A la una de la tarde llega un joven y
pregunta “¿Dónde pongo las mesas
y sillas? La recepcionista con cara de
sorpresa responde “deme un segundo,
ella rápidamente pregunta para dar una
respuesta al joven “póngalas ahí, al lado
de las escaleras” y así llega el pastel, los
manteles, los refrescos, la comida; vaya
día para Sarahí, debía tener una respuesta
para todos.
A las tres de la tarde los vigilantes comenzaron
a cerrar las puertas de cristal
de las salas de exhibición, de servicio y
refacciones ya que era un día especial,
no siempre se cumplen 60 años y menos
si los cumplen en un día como el 29
de febrero.
Después de cerradas las puertas comenzó
un extraño movimiento en la
sala de exhibición un lugar cerrado de
ventanas y puertas grandes de cristal
alumbrado con la luz del atardecer, que
en días normales siempre está ocupado
de autos nuevos, en ese día no tenía ni
uno.
Empezaban a verse grupos de empleados,
hombres y mujeres que se movían
de un lado a otro; mientras que otros
esperaban a que terminaran de colocar
las mesas y sillas; para poner manteles
y arreglos de mesas entre todos volvían
su lugar de trabajo en un hermoso salón
de fiestas.
Al término de esa
transformación
se miraron entre
sí, murmuraban,
sonreían y caminaban
muy entusiasmados
a sus
espacios de trabajo
para arreglarse
y esperar al cumpleañero.
Sí, el cumpleañero
era un señor que
cumplía 60 años,
la persona más
grande que trabaja
en esa agencia,
como nació en un
día que se refleja
en el calendario
cada cuatro años
les daba como resultado esa suma de 15
años, y por eso le festejaron.
¡Listo! El salón y los invitados se encontraban
en el lugar. Entre los invitados
existía incertidumbre ya que se encontraban
nerviosos, ansiosos ya que había
que esperar al quinceañero de quien se
decía tiene mal carácter, no con todos
se lleva; sin embargo todos estaban en
ese gran evento.
No sabemos si en algún lugar del mundo
se han festejado unos quince años de
esta manera, porque los empleados de
la agencia esperaban vivir unos quince
años diferentes y esperaban la asistencia
del gerente gruñón, pero si no asistía
no habría festejo.
Hasta las nueve de la noche llegó el
cumpleañero, un gerente que aunque
sea un gruñón, les robó el corazón
cuando al entrar por una puerta de esa
agencia vio a sus jefes y compañeros a la
espera de su llegada.
Y no se diga de sus compañeras que lo
esperaban de pie con un largo vestido
negro, muy bien peinadas, zapatos altos,
muy guapas; se encontraban en un
espacio como pista donde se bailaría el
vals, ellas serías las “chambelanas” que
se encargarían de hacer pasar un buen
rato de aquel hombre que llegó a la
edad de las ilusiones.
El festejado realmente estaba alegre que
al ver lo que hacían, por él soltó una lágrima,
que lo convirtió en un chiquillo
de 15 años que se dejaba consentir por
todo el show que estaba preparado para
él.
Una velada muy hermosa fue la que
vivieron todos los empleados de esa
agencia de autos que coronando y entregándole
su último Mustang 76 a
escala al quinceañero lo hicieron sentir
único y muy querido.
A partir de ese día al gerente le cambiaron
la vida, su corazón se volvió blando
aunque no deja de ser exigente ya es
tolerante logrando así una convivencia
sana, alegre con todos sus compañeros,
siendo ahora el adulto mayor que
dentro de él dormía.
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Valores +
Valores
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Charlatanería
o la cura a todos tus males
Por Erika Migdalia García Aguilar
Estudiante de 3º semestre de Contador
Público, modalidad en línea
Continuamente nos encontramos publicidad
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amor, mal de ojo… ¡Nosotros lo solucionamos!
Resultados garantizados”.
Así fue como Patricia López llegó en
octubre de 1994 a casa de Soraya, angustiada
por que después de 10 años de
noviazgo con Sony, él la dejó argumentando
sus diferencias religiosas. Sony de
32 años, 1.90 m. de altura, complexión
delgada, cabello rizado y de religión judía
estaba enamorado de Patricia de 36
años, tez morena, 1.65 de altura, divorciada
y de religión católica.
La pareja tenía diferencias de edad, costumbres
y sobre todo, religiosas, pero
siempre mostraron un profundo amor.
Su historia fue a escondidas de la mamá
de Sony, quien al enterarse que su hijo
quería casarse con Paty, se opuso rotundamente
a que se realizara el matrimonio.
Sony accedió a los designios de su madre
y terminó su relación con Patricia,
quien buscó ayuda en el único lugar
que prometió solucionarle su problema:
“Te prometo que el amor de tu vida
regresará”, le dijo Soraya.
Paty llegó temerosa, leyó una lona en
la entrada que anunciaba los servicios
que ahí ofrecían. Después de tocar, salió
Soraya, mujer delgada, blanca, de estatura
baja. Patricia entró, inspeccionó
el sitio, un olor a incienso inundaba el
ambiente y una serie de figuras, amuletos
y esculturas de la muerte, rodeaban
el lugar.
Luego de un interrogatorio y de leer
las cartas, Soraya dijo que Sony “estaba
embrujado” y que su madre era quien
le estaba haciendo “el trabajo”. A partir
de ahí Paty confiaba ciegamente en ella,
creía en todo lo que le decía: Que pronto
regresaría, que su mamá tenía un
brujo muy bueno, que todo lo malo que
le pasaba era consecuencia de lo que le
estaban haciendo.
Convencida del poder que Soraya tenía,
seguía sus instrucciones al pie de
la letra. “Ponle una vela, quema su ropa
y rezas esta oración, hazle un altar a la
muerte, ella nos ayudará”. Levantarse a
las cinco de la mañana y acudir al cuarto
de servicio que estaba abandonado
desde hacía algunos años y orar frente
a su templo improvisado se volvió un
ritual.
Constantemente le hablaba por teléfono
a Sony, rogándole que volviera con
ella, a lo cual él se negaba. Hasta que
un día Paty se enteró que Sony estaba a
punto de casarse con una mujer judía y
que además era del agrado de su madre.
“Por favor no llames más”, le dijo él.
Para entonces Soraya ya era su amiga,
confidente, la única persona con quien
contaba, ya que al pasar del tiempo,
Paty se volvió solitaria, agresiva y hasta
podría decirse amargada.
Dejó de confiar en su familia y de hablar
del tema, por recomendaciones de
su “amiga”.
Un día Paty faltó al trabajo, llegó llorando
a casa de su confidente a preguntar
¿Qué pasaba? ¿Por qué después de 3
años Sony además de no regresar con
ella, iba a casarse? Lo había perdido.
En ese momento dudó que Soraya dijera
la verdad; con todo, ella la convenció
que tuviera paciencia, que lo que hacía
la mamá de Sony era más fuerte “brujería
de la mala”, pero el amor de su vida
estaría con ella finalmente.
Pasaron los años y la amistad creció. El
trabajo de Paty ya no alcanzaba para
cubrir las cuotas de sus visitas cada vez
más frecuentes, tenía que pedir préstamos
y endeudarse para continuar su
cometido.
Después de diez años que Sony se casó,
Patricia aún aferrada, ingresó a una red
social en busca de su amor, sin éxito.
Pero su vida dio un giro inesperado,
conoció a Ronald, un chico holandés, y
entabló amistad con él.
De inmediato le contó a Soraya, quien
se atribuyó el mérito de este encuentro.
Dijo que él era la persona que aparecía
en sus visiones, el amor que le había
prometido hace varios años.
Tres años después Ronald visitó México
y le pidió conocerla, a lo que accedió.
Luego de unos meses de estar en comunicación,
decidieron unir sus vidas.
Así fue como Paty se casó finalmente
con Ronald, para después irse a vivir a
Holanda.
Sus consultas siguen a través de las redes
sociales y ella está convencida que
Soraya fue quien atrajo el amor a ella.
Por eso, en pago de todo lo que ha hecho,
le dio en agradecimiento un coche
que dejó en México al partir.
Patricia vive felizmente su matrimonio
y atribuye su buena suerte a Soraya. Y
así como ella, existen miles de personas
que acuden con personas que abusan
de la buena fe. Sería mejor que vivieran
el presente, sin buscar ayuda para atraer
un buen futuro.
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