21.02.2019 Views

Nuestra herencia médica y las diarreas. La utopía en el barrio, capítulo 8

Los padecimientos tradicionales de la medicina herbolaria mexicana están asociados con la diarrea. Y son tratados de manera eficaz con tizanas de plantas medicinales. Se comenta una investigación al respecto entre madre pobres de la Ciudad de México

Los padecimientos tradicionales de la medicina herbolaria mexicana están asociados con la diarrea. Y son tratados de manera eficaz con tizanas de plantas medicinales. Se comenta una investigación al respecto entre madre pobres de la Ciudad de México

SHOW MORE
SHOW LESS
  • No tags were found...

You also want an ePaper? Increase the reach of your titles

YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.

VIII<br />

<strong>Nuestra</strong> <strong>her<strong>en</strong>cia</strong> <strong>médica</strong><br />

y <strong>las</strong> <strong>diarreas</strong><br />

Mortalidad <strong>en</strong> México -T<strong>en</strong>ochtitlan<br />

En <strong>las</strong> ciudades-Estado mesoaméricanas existía, según <strong>las</strong> crónicas<br />

de conquista y los códices nativos, un evid<strong>en</strong>te equilibrio <strong>en</strong>tre <strong>el</strong><br />

indio y su hábitat que se rompía a causa de <strong>las</strong> ma<strong>las</strong> cosechas y<br />

desataba hambres, pestil<strong>en</strong>cias y otras calamidades cuidadosam<strong>en</strong>te<br />

registradas <strong>en</strong> los códices.<br />

Una de estas hambres epidémicas y recidivantes ocurrió <strong>en</strong> <strong>el</strong> año<br />

de 10 Tochtli (1450) y produjo honda hu<strong>el</strong>la <strong>en</strong> los cronistas. <strong>La</strong><br />

situación fue tan grave que la tribu mexica intercambió como esclavos,<br />

<strong>en</strong> trueque por maíz, <strong>en</strong> <strong>el</strong> mercado totonaco de Cuextlan, a un<br />

cierto número de sus miembros. <strong>La</strong> necesidad no alcanzó a ser<br />

satisfecha, <strong>las</strong> pestil<strong>en</strong>cias aparecieron y provocaron gran mortandad.<br />

(Aguirre, 1986:45-64)<br />

También Wolf considera que la mayor repercusión de la conquista<br />

<strong>en</strong> América no se debió a <strong>las</strong> guerras o la destrucción<br />

cultural, sino a los efectos devastadores de <strong>las</strong> <strong>en</strong>fermedades traídas<br />

por los españoles. Entre 1519 y 1650 seis séptimas partes de la<br />

población mesoamericana fueron diezmadas.<br />

Esta gran mortandad tuvo como causa principal la introducción<br />

de <strong>en</strong>fermedades nuevas para <strong>las</strong> que los indios no se habían<br />

inmunizado. Como se sabe, cualquier población constituye un<br />

terr<strong>en</strong>o propicio para los microorganismos, cuya vocación es transformar<br />

la sustancia orgánica <strong>en</strong> una materia inerte. <strong>La</strong> mayor parte<br />

de <strong>las</strong> poblaciones <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran tarde o temprano su equilibrio <strong>en</strong><br />

esta batalla contra la desintegración biológica, aunque pagando<br />

231


232 Mario Ortega<br />

como precio la <strong>en</strong>fermedad y hasta la muerte , para lograr la inmunidad<br />

y combatir <strong>el</strong> microorganismo causa de la <strong>en</strong>fermedad, hasta<br />

anular su acción (Wolf, 1967:174-175). Como los microorganismos<br />

no eran los mismos <strong>en</strong> Europa , los indios americanos no poseían<br />

inmunidad fr<strong>en</strong>te a <strong>el</strong>los.<br />

Según Cook y Borah la irrupción de epidemias y hambrunas<br />

mermaron la población de T<strong>en</strong>ochtitlan a tal grado, que si para<br />

1519 existían <strong>en</strong> <strong>el</strong> Anáhuac 25.3 millones de habitantes , <strong>en</strong> 1523,<br />

sobrevivían 16.8 millones; 6.3 millones <strong>en</strong> 1548; 2.6 <strong>en</strong> 1569; 1.9 <strong>en</strong><br />

1580 y un millón de habitantes <strong>en</strong> 1605 . Fue hasta 1630 cuando<br />

principió un l<strong>en</strong>to increm<strong>en</strong>to de la población india.<br />

En 1650 la población india se había cuadruplicado, alcanzando<br />

la cifra de 5 millones 200 mil personas. (Wolf, 1967: 206)<br />

Revisemos ahora algunas de <strong>las</strong> epidemias que se abatieron<br />

sobre los indios:<br />

El huetzahuatl. En 1520, acompañando la expedición de Pánfilo de<br />

Narváez, desembarcó <strong>en</strong> <strong>las</strong> playas de Chalchihuacan un negro<br />

ladino llamado Francisco Eguí o Juan Guía, qui<strong>en</strong> padecía viru<strong>el</strong>a<br />

e introdujo <strong>el</strong> mal <strong>en</strong> <strong>el</strong> cacicato Totonaco de Cempoala, de donde<br />

corrió rápidam<strong>en</strong>te hasta que <strong>el</strong> virus llegó a T<strong>en</strong>ochtitlan provocando<br />

<strong>en</strong> 1521 la primera gran epidemia de viru<strong>el</strong>a, que sumada a<br />

<strong>las</strong> ocurridas <strong>en</strong> 1539, 1545 y 1576, fueron <strong>el</strong> principal factor<br />

responsable de la catástrofe demográfica <strong>en</strong> la que fallecieron<br />

aproximadam<strong>en</strong>te 23 millones de indios, incluy<strong>en</strong>do a Cuitláhuac.<br />

Esta <strong>en</strong>fermedad, que según <strong>el</strong> códice T<strong>el</strong>leriano Rem<strong>en</strong>sis arrasó<br />

a los indíg<strong>en</strong>as, fue d<strong>en</strong>ominada hueyzahuatl o gran pestil<strong>en</strong>cia y<br />

atribuida a Xipe Totec. En 1804, Francisco Javier Balmori, al mando<br />

de su histórica expedición, introdujo la vacuna <strong>en</strong> la Nueva<br />

España, y desde <strong>en</strong>tonces se g<strong>en</strong>eralizó su empleo. <strong>La</strong> maldición<br />

d<strong>el</strong> huetzahuatl, tan fatal para los mexicanos, se logró erradicar<br />

oficialm<strong>en</strong>te hasta 1951, cuando se informó sobre <strong>el</strong> que esperamos<br />

sea <strong>el</strong> último brote ocurrido <strong>en</strong> <strong>el</strong> municipio de Parangaricutiro,<br />

Michoacán, y dominado <strong>en</strong> marzo d<strong>el</strong> mismo año (Florescano y<br />

Malvido, 1982:549). Meses después, <strong>en</strong> junio, se registró <strong>el</strong> último<br />

caso de viru<strong>el</strong>a; la víctima fue Victoria Torres, muchacha de 16<br />

años habitante de Tierra Nueva, San Luis Potosí.


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 233<br />

El tepitonzahuatl. Otra epidemia que diezmó a T<strong>en</strong>ochtitlan fue la<br />

pequeña pestil<strong>en</strong>cia o tepitonzahuatl, conocida como sarampión.<br />

<strong>La</strong> <strong>en</strong>fermedad fue introducida por un español prov<strong>en</strong>i<strong>en</strong>te de <strong>las</strong><br />

Antil<strong>las</strong> <strong>en</strong> 1528 o 1531, según los cronistas franciscanos. <strong>La</strong> <strong>en</strong>fermedad<br />

viral atacaba a los niños europeos qui<strong>en</strong>es se inmunizaban<br />

y no volvían a sufrir la <strong>en</strong>fermedad, pero <strong>en</strong>tre los indios no sucedió<br />

así; atacó y mató tanto a niños como a jóv<strong>en</strong>es y ancianos. Motolinía<br />

la calificó como: "una de <strong>las</strong> diez plagas mayores que ca<strong>en</strong> sobre<br />

la ciudad de México como digno castigo por sus pecados capitales".<br />

Hasta 1990, cuando reaparece <strong>el</strong> sarampión <strong>en</strong> la ciudad de México<br />

y <strong>en</strong> <strong>el</strong> sur de la república, se creía que <strong>en</strong> 1972 la vacuna había<br />

puesto fin al terrible reinado viral.<br />

El matlazahuatl. El tifus exhantemático, llamado matlazahuatl <strong>en</strong><br />

náhuatl, era conocido por los españoles como tabardillo. Matlazahuatl<br />

quiere decir: pestil<strong>en</strong>cia con erupción cutánea <strong>en</strong> forma de<br />

red. Fue la <strong>en</strong>fermedad que más mortalidad causó <strong>en</strong>tre los indios<br />

de tierras frías.<br />

Atacó principalm<strong>en</strong>te a los d<strong>el</strong> valle de México y m<strong>en</strong>os a los de<br />

tierra cali<strong>en</strong>te. El primer brote se registró <strong>en</strong> 1545, y no pudo ser<br />

id<strong>en</strong>tificado ni por los indios, ni por los españoles; por eso al<br />

principio se le d<strong>en</strong>ominó con <strong>el</strong> nombre g<strong>en</strong>érico de cocoliztli, o<br />

<strong>en</strong>fermedad. En 1576 <strong>el</strong> padecimi<strong>en</strong>to puso a los indios <strong>en</strong> trance<br />

de desaparecer; como era tan temido, <strong>en</strong> 1736 se conmemoró <strong>el</strong> fin<br />

de una funesta epidemia de matlazahuatl <strong>el</strong>evando a la Guadalupana<br />

como escudo de armas de la ciudad.<br />

En 1985, con motivo de otra tragedia, la Coordinadora única de<br />

damnificados realizaría también una peregrinación a la Basílica de<br />

Guadalupe.<br />

Todavía <strong>en</strong> 1975, <strong>las</strong> estadísticas vitales registraron 17 defunciones<br />

a causa d<strong>el</strong> tifus y otras rickettsiosis.<br />

<strong>La</strong> medicina "tradicional " <strong>en</strong> la ciudad de México<br />

Aunque <strong>en</strong> México contamos con una ext<strong>en</strong>sa y profunda bibliografía<br />

dedicada a estudiar la medicina "tradicional" <strong>en</strong>tre indios<br />

y mestizos, <strong>las</strong> fu<strong>en</strong>tes sobre la preval<strong>en</strong>cia de esta medicina


234 Mario Ortega<br />

<strong>en</strong> la ciudad de México son escasas. Posiblem<strong>en</strong>te la autoridad d<strong>el</strong><br />

célebre etnólogo Redfi<strong>el</strong>d pesó mucho <strong>en</strong> <strong>el</strong> abandono d<strong>el</strong> estudio<br />

de la herbolaria <strong>en</strong> la ciudad, pues para <strong>el</strong> autor a medida que<br />

transitamos por <strong>el</strong> continum folk-urbano, desde <strong>el</strong> campo hasta la<br />

ciudad hay una disminución de los <strong>el</strong>em<strong>en</strong>tos r<strong>el</strong>igiosos <strong>en</strong> <strong>las</strong><br />

explicaciones sobre la <strong>en</strong>fermedad. Pero hasta <strong>el</strong> mismo Redfi<strong>el</strong>d<br />

reconoció cómo a medida que uno se mueve de los pueblos a la<br />

ciudad, la magia negra aparece cada vez más como causa de <strong>las</strong><br />

<strong>en</strong>fermedades y la muerte. (Redfi<strong>el</strong>d, 1934)<br />

Superando este obstáculo, María d<strong>el</strong> Carm<strong>en</strong> Anzures resaltó<br />

la perviv<strong>en</strong>cia de la herbolaria <strong>en</strong> la ciudad de México, redescubri<strong>en</strong>do<br />

cómo <strong>en</strong> los mercados citadinos exist<strong>en</strong> puestos de yerberos.<br />

Sobre todo <strong>en</strong> una de <strong>las</strong> secciones d<strong>el</strong> mercado de Sonora,<br />

donde<br />

puede uno <strong>en</strong>contrar desde un té de boldo para <strong>el</strong> hígado y objetos<br />

de magia erótica tradicionales, como colibríes, hasta frascos que<br />

conti<strong>en</strong><strong>en</strong> sustancias medicinales caseras, tradicionalm<strong>en</strong>te mexicanas,<br />

pero <strong>en</strong>vasadas <strong>en</strong> Japón. (Anzures, 1983)<br />

<strong>La</strong> visita a este mercado es una experi<strong>en</strong>cia excitante, sobre<br />

todo por los diversos y seductores aromas de sus plantas medicinales.<br />

En <strong>el</strong> pasaje "Catedral" de la ciudad de México, <strong>en</strong>tre <strong>las</strong> calles<br />

de Donc<strong>el</strong>es y Tacuba, se v<strong>en</strong>d<strong>en</strong> toda c<strong>las</strong>e de compuestos herbolarios,<br />

despachando tanto a particulares como pedidos por correo<br />

al interior de la república. Ahí se abastec<strong>en</strong> los pequeños exp<strong>en</strong>dios,<br />

los curanderos de la ciudad y los yerberos itinerantes que<br />

trajinan por diversas regiones d<strong>el</strong> país (Anzures 1984: 91). <strong>La</strong> v<strong>en</strong>ta<br />

de yerbas medicinales es tan importante <strong>en</strong> la ciudad de México<br />

que la guía t<strong>el</strong>efónica dedica un apartado especial a "Plantas y<br />

yerbas medicinales" con 53 anunciantes, algunos de <strong>el</strong>los son distribuidores<br />

mayoristas as<strong>en</strong>tados <strong>en</strong> la moderna C<strong>en</strong>tral de Abastos<br />

de la ciudad; otras empresas son sociedades anónimas como<br />

Plantas Medicinales "<strong>La</strong> Guadalupana", Plantas Medicinales San<br />

Ildefonso, Yerbamex, y Productos Quimo Vegetales; o bi<strong>en</strong>, c<strong>en</strong>tros<br />

tales como: la C<strong>en</strong>tral Botánica Mexicana, <strong>el</strong> C<strong>en</strong>tro Botánico<br />

Azteca, y <strong>el</strong> C<strong>en</strong>tro Botánico de México, <strong>en</strong>tre otros. (Sección<br />

Amarilla, 1988:1175)


Utopía <strong>en</strong> e l b a rrio 235<br />

Se plantea una duda: ¿cómo han surgido estas empresas para<br />

la v<strong>en</strong>ta de yerbas medicinales, cuyo conocimi<strong>en</strong>to forma parte d<strong>el</strong><br />

bagaje cultural popular? Algunas de <strong>el</strong><strong>las</strong>, como <strong>el</strong> C<strong>en</strong>tro Botánico<br />

Azteca, han logrado equiparar <strong>las</strong> plantas medicinales, con los<br />

fármacos mercantiles: preparan mezc<strong>las</strong> de varias yerbas para padecimi<strong>en</strong>tos<br />

específicos, y <strong>el</strong>aborando guías para la automedicación,<br />

donde se asocian <strong>el</strong> tratami<strong>en</strong>to de <strong>las</strong> <strong>en</strong>fermedades no con<br />

<strong>las</strong> plantas medicinales específicas, sino con <strong>las</strong> mezc<strong>las</strong> que <strong>el</strong>los<br />

preparan; esto dificulta a los consumidores la id<strong>en</strong>tificación de <strong>las</strong><br />

plantas eficaces que podrían comprar <strong>en</strong> los mercados.<br />

<strong>La</strong>s cajitas con medicam<strong>en</strong>tos "tradicionales" d<strong>el</strong> C<strong>en</strong>tro Botánico<br />

Azteca, se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tran <strong>en</strong> ti<strong>en</strong>das naturistas e incluso <strong>en</strong><br />

algunos puestos de yerbas de los mercados citadinos, incluy<strong>en</strong>do al<br />

de Sonora. Esta empresa <strong>en</strong>vasa sus mezc<strong>las</strong> <strong>en</strong> cajitas impresas<br />

con simbología azteca, indicando <strong>en</strong> la carátula su uso y <strong>las</strong> instrucciones<br />

de preparación <strong>en</strong> español e inglés. Para t<strong>en</strong>er una idea de<br />

la variedad de yerbas disponibles, Bye y Linares, visitaron periódicam<strong>en</strong>te<br />

<strong>el</strong> Mercado de Sonora <strong>en</strong>tre 1981 y 1986, e id<strong>en</strong>tificaron<br />

260 especies difer<strong>en</strong>tes de plantas medicinales a la v<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> la<br />

sección de plantas frescas. Los investigadores s<strong>el</strong>eccionaron cinco<br />

grupos de plantas para su estudio <strong>en</strong> base a su constante disponibilidad:<br />

Dos especies de epazote, de la familia Ch<strong>en</strong>opodiaceae (T<strong>el</strong>oxys ambrosoides<br />

y T. graveol<strong>en</strong>s), una especie de flor de manita de la familia<br />

Sterculiaceae (Chiranthod<strong>en</strong>dron p<strong>en</strong>tadactylon), tres especies de toloache<br />

de la familia Solanaceae (Datura stramonium, D. ceratocaula,<br />

y D. inoxia), una especie de pericón o yerbanis de la familia Compositae<br />

(Tagetes lucida) y una especie de la familia Magnoliaceae, <strong>el</strong><br />

yoloxochitl (Talauma mexicana). (Bye y Linares, 1987)<br />

Según estos investigadores, <strong>el</strong> epazote o T<strong>el</strong>oxys ambrosoides,<br />

(condim<strong>en</strong>to para los frijoles), empleado anteriorm<strong>en</strong>te para tratar<br />

<strong>en</strong>fermedades gastrointestinales, manti<strong>en</strong>e su uso tradicional;<br />

pero ha variado su forma de administración, ahora se prepara<br />

como infusión, <strong>en</strong> tanto que <strong>las</strong> fu<strong>en</strong>tes históricas reportan su<br />

maceración y decocción. D<strong>el</strong> otro epazote, <strong>el</strong> d<strong>el</strong> zorrillo o T<strong>el</strong>oxys<br />

grav<strong>en</strong>ol<strong>en</strong>s, se usa toda la planta para controlar <strong>el</strong> vómito y <strong>las</strong><br />

deposiciones, <strong>el</strong> espanto y <strong>el</strong> aire.


236 Mario Ortega<br />

En <strong>el</strong> mismo mercado de Sonora, la Tagetes lucida Cav. o<br />

Pericón, también conocida como Santa María, yerbanis y anisillo,<br />

se recomi<strong>en</strong>da para <strong>el</strong> tratami<strong>en</strong>to de la diarrea fría, por considerarla<br />

una planta muy cali<strong>en</strong>te. También se administra para curar<br />

los "sustos", los "empachos" y para ayudar a la parturi<strong>en</strong>ta a que<br />

se recoja <strong>el</strong> útero; <strong>el</strong> pericón es <strong>el</strong> que le da sabor a los <strong>el</strong>otes y a<br />

los chayotes hervidos.<br />

En <strong>el</strong> mercado se pued<strong>en</strong> comprar una serie de libros de bolsillo<br />

herbolarios sumam<strong>en</strong>te baratos, que también se ofrec<strong>en</strong> <strong>en</strong> los<br />

tiraderos de libros ambulantes <strong>en</strong> <strong>las</strong> calles de la Merced y <strong>el</strong><br />

C<strong>en</strong>tro histórico, o d<strong>en</strong>tro de los vagones d<strong>el</strong> metropolitano donde<br />

muchos de los pasajeros levantan la mano para pedir un ejemplar.<br />

Sus mejores v<strong>en</strong>dedores son los merolicos, qui<strong>en</strong>es <strong>en</strong> medio de<br />

verduras y algunas plantas medicinales, juegan con víboras mi<strong>en</strong>tras<br />

d<strong>en</strong>uncian a voz <strong>en</strong> cu<strong>el</strong>lo "ineficacias" de la medicina hegemónica,<br />

y recetan apresuradam<strong>en</strong>te a los oy<strong>en</strong>tes.<br />

Hemos id<strong>en</strong>tificado dos editoriales dedicadas a imprimir <strong>en</strong><br />

rústico estos folletines: Gómez-Gómez Hermanos, ubicada <strong>en</strong> la<br />

calle de Moneda 19-B y Editorial Justo Sierra <strong>en</strong> Guatemala 98.<br />

Estos folletitos nos recuerdan a los <strong>en</strong>contrados por Boltanski<br />

(1974) <strong>en</strong> París:<br />

Libros de v<strong>en</strong>ta ambulante, <strong>en</strong> su mayor parte anónimos, redactados<br />

por obreros de impr<strong>en</strong>ta, tipógrafos u otros, que se hac<strong>en</strong><br />

escritores, que buscan <strong>en</strong> los fondos editoriales antiguos de la<br />

impr<strong>en</strong>ta a la que pert<strong>en</strong>ec<strong>en</strong> <strong>las</strong> publicaciones realizadas a lo<br />

largo d<strong>el</strong> siglo XVII y cuyos talleres conservan gran parte de los<br />

archivos.<br />

Como dato curioso m<strong>en</strong>cionaremos cómo a la salida Merced<br />

d<strong>el</strong> metropolitano, se ofrec<strong>en</strong> por sólo 2 nuevos pesos (m<strong>en</strong>os de<br />

un dólar) dos folletitos atribuidos a Parac<strong>el</strong>so, <strong>el</strong> gran alquimista<br />

europeo: <strong>el</strong> Diccionario botánico y <strong>La</strong>s plantas mágicas, publicados<br />

por Gómez-Gómez Hermanos. De esta misma editorial hemos comprado<br />

<strong>en</strong> diversos lugares d<strong>el</strong> C<strong>en</strong>tro histórico de la ciudad de México,<br />

los sigui<strong>en</strong>tes libritos de bolsillo: Plantas medicinales, cómo curarse,<br />

Z<strong>el</strong>ayaran Ramírez Bertha,México, Gómez-Gómez Hermanos, 1980.<br />

Antiguo recetario medicinal azteca", Atzin, José, Profesor, México,<br />

Gómez-Gómez Hermanos, 1989. El libro supremo de <strong>las</strong> plantas me-


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 237<br />

dicinales, Sin autor, México, Gómez-Gómez Hermanos, 1984 . Raíces<br />

curativas, cúrese con raíces, Gali, Hero, Doctor , México , Gómez-<br />

Gómez Hermanos , 1986 . <strong>La</strong>s hierbas d<strong>el</strong> indio, Gali, Hero, Doctor,<br />

México , Gómez-Gómez Hermanos, 1990.<br />

Los dos últimos, dedicados a <strong>las</strong> plantas tradicionales disponibles<br />

<strong>en</strong> nuestro país , son los mas útiles. Los otros m<strong>en</strong>cionan<br />

plantas más difíciles de conseguir <strong>en</strong> México, como <strong>el</strong> curare, y <strong>el</strong><br />

<strong>en</strong>ebro.<br />

Dos libros de la Editorial Justo Sierra ti<strong>en</strong><strong>en</strong> bu<strong>en</strong> mercado <strong>en</strong><br />

los vagones d<strong>el</strong> metropolitano de la ciudad de México: <strong>el</strong> Antiguo<br />

formulario azteca y El tesoro de la herbolaria casera, d<strong>el</strong> profesor<br />

Tlaquecocupitzle Zintzun Tecuciztecatl. En <strong>el</strong> prólogo d<strong>el</strong> antiguo<br />

formulario , se dedica la edición:<br />

Ala g<strong>en</strong>te de la c<strong>las</strong>e humilde, al campesino , al obrero, al car<strong>en</strong>te<br />

de recursos para adquirir medicinas caras.<br />

Como se ve, su autor coincidía con <strong>las</strong> tesis de que la medicina<br />

"tradicional " es una medicina de pobres.<br />

Posteriorm<strong>en</strong>te , <strong>en</strong> su segunda obra <strong>el</strong> profesor Tlaquecocupitzle<br />

abre <strong>el</strong> abanico social e incluye:<br />

A todas <strong>las</strong> personas de la c<strong>las</strong>e baja y media y aun a <strong>las</strong> personas<br />

acaudaladas que con tanto dinero como ti<strong>en</strong><strong>en</strong> se han curado<br />

<strong>en</strong>fermedades por medio de <strong>las</strong> humildes y s<strong>en</strong>cil<strong>las</strong> plantas que<br />

les han dado <strong>el</strong> alivio a sus males.<br />

Un poco molesto por la manera como los merolicos manipulan<br />

sus libros , <strong>el</strong> autor advierte a sus:<br />

lectores <strong>en</strong> g<strong>en</strong>eral, que no se dej<strong>en</strong> sorpr<strong>en</strong>der por <strong>las</strong> personas<br />

que de mala fe aprovechan <strong>el</strong> mom<strong>en</strong>to <strong>en</strong> que le v<strong>en</strong>d<strong>en</strong> este<br />

libro para ofrecerle los servicios de (curanderos, brujos, padres<br />

o doctores ), y que les dic<strong>en</strong> que les dan consulta y yerbas; (esto<br />

<strong>en</strong>fatiza) no es cierto , no se deje sorpr<strong>en</strong>der por estas personas<br />

que se val<strong>en</strong> de esta bu<strong>en</strong>a obra para difundir propagandas<br />

erróneas de lo antes dicho o también de c<strong>en</strong>tros mágicos espiritistas,<br />

no crea <strong>en</strong> esas supercherías y brujerías , eso no existe.


238 Mario Ortega<br />

El autor olvidó m<strong>en</strong>cionar que los merolicos duplican <strong>el</strong> precio<br />

de los libros, como ocurre con la v<strong>en</strong>ta d<strong>el</strong> libro Hierbas mexicanas<br />

de Editores Mexicanos Unidos <strong>en</strong>fr<strong>en</strong>te d<strong>el</strong> Templo Mayor. Este<br />

libro pert<strong>en</strong>ece a una segunda categoría de publicaciones de medicina<br />

"tradicional", ediciones más cuidadas y de mayor costo, ofrecidas<br />

tanto <strong>en</strong> <strong>las</strong> calles como <strong>en</strong> <strong>las</strong> librerías. De autor anónimo,<br />

<strong>en</strong> este libro se recuerda que <strong>las</strong> plantas curan pero lo hac<strong>en</strong><br />

l<strong>en</strong>tam<strong>en</strong>te, reconoci<strong>en</strong>do un límite a su efecto curativo; por <strong>el</strong>lo,<br />

agregan una lista de 20 síntomas que se deb<strong>en</strong> consultar con <strong>el</strong><br />

doctor. Para facilitar la remisión de los paci<strong>en</strong>tes de la medicina<br />

"tradicional" a la hegemónica, se incluye un directorio de los c<strong>en</strong>tros<br />

de la Secretaría de Salud.<br />

Éste es un indicador interesante para nosotros por dos razones:<br />

primero, porque de una manera Crítica se reconoc<strong>en</strong> <strong>las</strong> l1IIl1tacio<br />

nes de la herbolaria y con honestidad se recomi<strong>en</strong>da a los paci<strong>en</strong>tes<br />

derivarse hacia la medicina oficial; segundo, porque implica que <strong>el</strong><br />

anónimo autor esperaba una mayoría de lectores resid<strong>en</strong>tes <strong>en</strong> la<br />

ciudad de México, sin embargo recuerda que "<strong>en</strong> provincia también<br />

hay c<strong>en</strong>tros de salud". (Autor anónimo, 1990:7)<br />

D<strong>en</strong>tro de esta segunda categoría se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra <strong>el</strong> libro Uso de<br />

plantas medicinales, de Hoogesteger, Costero y Herrerías, uno de<br />

<strong>las</strong> guías más completas. Resultado de una revisión bibliográfica,<br />

este libro instrum<strong>en</strong>ta la autoat<strong>en</strong>ción de la <strong>en</strong>fermedad, mediante<br />

<strong>el</strong> sigui<strong>en</strong>te algoritmo:<br />

a) Buscar por ord<strong>en</strong> alfabético <strong>el</strong> padecimi<strong>en</strong>to;<br />

b) ya localizado, leer <strong>en</strong> una columna cuales son <strong>las</strong> plantas<br />

que sirv<strong>en</strong> para curarlo, <strong>las</strong> primeras opciones se indican<br />

<strong>en</strong> cursivas;<br />

c) buscar la planta <strong>en</strong> la sección donde se describe;<br />

d) leer la parte correspondi<strong>en</strong>te al uso;<br />

e) buscar <strong>en</strong> la parte correspondi<strong>en</strong>te, la preparación, <strong>el</strong><br />

modo de aplicación de la planta y cómo debe administrarse;<br />

f) por último recomi<strong>en</strong>da buscar <strong>en</strong> <strong>el</strong> glosario <strong>las</strong> palabras<br />

que no se <strong>en</strong>ti<strong>en</strong>dan.<br />

De todas la publicaciones que se ofrec<strong>en</strong> a la v<strong>en</strong>ta <strong>en</strong> los<br />

puestos d<strong>el</strong> mercado de Sonora, <strong>en</strong> <strong>el</strong> Pasaje Catedral, y <strong>en</strong> <strong>el</strong><br />

C<strong>en</strong>tro histórico, <strong>el</strong> libro <strong>La</strong>s plantas medicinales de México de<br />

Máximo Martínez, es <strong>el</strong> más reconocido por los puesteros; por <strong>el</strong>lo<br />

se le coloca <strong>en</strong> <strong>el</strong> mejor lugar de <strong>las</strong> vitrinas. Los v<strong>en</strong>dedores de


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 239<br />

libros viejos, atesoradores de antiguas ediciones herbolarias, r<strong>el</strong>atan<br />

como una ley<strong>en</strong>da, que antes de que se volviera a reeditar, <strong>el</strong><br />

libro de Martínez se cotizaba <strong>en</strong> 500 nuevos pesos. Bye y Linares<br />

(1987), com<strong>en</strong>tan que <strong>el</strong> texto recopila datos de la Farmacopea<br />

mexicana, <strong>el</strong>aborada por la Academia Farmacéutica <strong>en</strong> 1847, y<br />

<strong>en</strong>riquecida, más tarde, por <strong>las</strong> investigaciones d<strong>el</strong> Instituto Médico<br />

Nacional, <strong>el</strong> cual existió de 1888 a 1915. En su artículo sobre <strong>las</strong><br />

"Cre<strong>en</strong>cias y prácticas <strong>médica</strong>s", Corn<strong>el</strong>ia Mak (1959) cita a Martínez,<br />

y considera a su libro un exc<strong>el</strong><strong>en</strong>te comp<strong>en</strong>dio de <strong>las</strong> plantas<br />

medicinales.<br />

Además de <strong>las</strong> afirmaciones de Redfi<strong>el</strong>d, otro mito que ha<br />

obstaculizado <strong>el</strong> estudio de la medicina "tradicional" <strong>en</strong> la ciudad<br />

de México, ubica la frontera límite <strong>en</strong> la difusión etno<strong>médica</strong> <strong>en</strong><br />

los <strong>barrio</strong>s periféricos y marginales de la urbe. Sin embargo, autores<br />

como Lozoya sosti<strong>en</strong><strong>en</strong> que la herbolaria forma parte de la<br />

cultura de todos los estratos sociales d<strong>el</strong> país; aun <strong>en</strong>tre la c<strong>las</strong>e<br />

media, una cierta cultura <strong>médica</strong> familiar resu<strong>el</strong>ve mediante conocimi<strong>en</strong>tos<br />

tradicionales una bu<strong>en</strong>a parte de los problemas de salud<br />

<strong>en</strong> lo cotidiano. (Lozoya, 1982, 1984)<br />

Tratando de comprobar tal supuesto, <strong>en</strong> abril de 1990, se visitó<br />

<strong>el</strong> complejo comercial de Villa Coapa, una zona pequeñoburguesa<br />

<strong>en</strong> la ciudad de México, donde se conc<strong>en</strong>tran varias ti<strong>en</strong>das de<br />

autoservicio. EnAurrerá (MR) * <strong>el</strong> almacén más importante, se <strong>en</strong>contró<br />

una góndola dedicada a la v<strong>en</strong>ta de productos naturistas. En <strong>el</strong>la<br />

se pued<strong>en</strong> adquirir <strong>las</strong> mezc<strong>las</strong> de yerbas medicinales <strong>en</strong>vasadas por<br />

la compañía Therbal (MR); estos productos se ofrec<strong>en</strong> <strong>en</strong> cajitas con<br />

36 sobrecitos de un gramo cada una, <strong>en</strong>vu<strong>el</strong>tas <strong>en</strong> brillante c<strong>el</strong>ofán,<br />

para ofrecer una impresión de higi<strong>en</strong>e. Pres<strong>en</strong>tando <strong>en</strong> su carátula<br />

<strong>el</strong> nombre que la empresa a dado a sus mezc<strong>las</strong>, <strong>el</strong> nombre de <strong>las</strong><br />

plantas medicinales empleadas, y su taxonomía <strong>en</strong> latín. Algunas<br />

veces se indica <strong>el</strong> porc<strong>en</strong>taje de cada planta empleada <strong>en</strong> su preparación.<br />

Estas cajitas, a difer<strong>en</strong>cia de <strong>las</strong> de sus competidores, no<br />

pres<strong>en</strong>tan símbolos aztecas, pero también ost<strong>en</strong>tan la lic<strong>en</strong>cia otorgada<br />

por la secretaría de Salud. En la misma ti<strong>en</strong>da, pero <strong>en</strong> <strong>el</strong> área<br />

de cafés solubles, se ofrec<strong>en</strong> tés de azahar, can<strong>el</strong>a, hierbabu<strong>en</strong>a,<br />

jamaica y manzanilla, <strong>en</strong>vasados por la misma compañía. Suponemos<br />

que esta separación refleja los criterios d<strong>el</strong> almacén, y que<br />

c<strong>las</strong>ificarían a estos últimos como alim<strong>en</strong>tos y no como productos<br />

medicinales.<br />

* (MR): Marca Registrada


240 Mario Ortega<br />

En <strong>las</strong> góndo<strong>las</strong> de la farmacia Sanborn's (MR) <strong>en</strong> Villa Coapa,<br />

también es posible <strong>en</strong>contrar los productos Therbal (MR). Como <strong>en</strong><br />

<strong>las</strong> ti<strong>en</strong>das no se <strong>en</strong>cu<strong>en</strong>tra disponible literatura refer<strong>en</strong>te a indicaciones<br />

de la propia compañía con refer<strong>en</strong>cia a <strong>las</strong> cualidades<br />

curativas de <strong>las</strong> mezc<strong>las</strong> de hierbas, ni indicaciones sobre los usos<br />

de <strong>las</strong> éstas, suponemos que <strong>las</strong> personas que los adquier<strong>en</strong> conoc<strong>en</strong><br />

su uso y forma de administración.<br />

Cuando comparamos los precios de <strong>las</strong> yerbas medicinales<br />

<strong>en</strong>tre los comercios y los mercados populares, no <strong>en</strong>contramos una<br />

difer<strong>en</strong>cia significativa. Una cajita con té de boldo de 36 gramos<br />

costaba 3.65 nuevos pesos <strong>en</strong>Aurrera(MR), mi<strong>en</strong>tras que un paquete<br />

<strong>en</strong>vu<strong>el</strong>to <strong>en</strong> una hoja de pap<strong>el</strong> periódico de la misma planta<br />

Comprada <strong>en</strong> <strong>el</strong> mercado de Coapa costaba 3.00 nuevos pesos.<br />

Ciertam<strong>en</strong>te la cantidad ofrecida <strong>en</strong> e l mercado permitirá obt<strong>en</strong>er<br />

más dosis, pero seguram<strong>en</strong>te a la madre de familia pequeñoburguesa<br />

le resulta más cómodo usar y almac<strong>en</strong>ar los sobresitos de la<br />

pres<strong>en</strong>tación comercial. <strong>La</strong> difer<strong>en</strong>cia a favor de la compra <strong>en</strong> <strong>el</strong><br />

mercado, consistiría <strong>en</strong> que la dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>te, además de informar<br />

sobre los efectos curativos de cada yerba o planta, indica la dosis y<br />

<strong>el</strong> tratami<strong>en</strong>to a seguir.<br />

A fin de ofrecer al lector un panorama de los medicam<strong>en</strong>tos<br />

tradicionales comercializados, pres<strong>en</strong>tamos los rótulos de los productos<br />

Therbal(MR) que se ofrecían <strong>en</strong>Aurrera(MR):<br />

Arv<strong>en</strong>sis<br />

40% muicle (Jacobina mohintli)<br />

30% palo de brasil (Hematoxylum brasiletto)<br />

30% árnica (Heterotheca inuloides)<br />

Aulaga<br />

40% sacasil (Anredera scound<strong>en</strong>s)<br />

30% cancerian (Cancerina officinalis)<br />

30% manzanilla (Matricaria chamomilla)<br />

Avatar<br />

tepopote (Ephedra antisyphilitica)<br />

té de cocolmeca (Similax cordofila)<br />

té de lima (Citrus limetta)<br />

té de limón (Citrus aurantifolia)


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 241<br />

Balsámico<br />

30% té de tejocote (Crataegus mexicana)<br />

30% flor de manita (Aporocactus filogiliform)<br />

30% toronjil (Cedron<strong>el</strong>la mexicana)<br />

10% magnolia (Talauna mexicana)<br />

boldo (Peumus boldus)<br />

» -Cardón<br />

salvia (Budbleia perfoliata)<br />

anís estr<strong>el</strong>la (Pimpin<strong>el</strong>la anisum)<br />

perejil (Petros<strong>el</strong>inum savitum)<br />

-Cinerea<br />

40% té de flor de azahar<br />

40% hojas de poleo (m<strong>en</strong>ta)<br />

60% té de tila<br />

» Espigol<br />

40% aceituno (Simarouba glauce)<br />

30% tila ( Tilia occid<strong>en</strong>talis)<br />

30% zapote blanco (Nom. Bu . Casimiroa edulis)<br />

» Folizar<br />

muicle (Jacobinia spicigera)<br />

palo de brasil (Hematoxylum brasiletta)<br />

sanguinaria (Hypericum prat<strong>en</strong>se)<br />

sauco (Somucus mexicanus)<br />

* Este producto queda bajo la responsabiidad d<strong>el</strong> usuario<br />

* No se deje al alcance de los niños<br />

» Jounkins<br />

hoja de s<strong>en</strong> (Fluvi<strong>en</strong>sia cernun)<br />

toronjil (Cedron<strong>el</strong>la mexicana)<br />

» T<strong>en</strong><br />

40% epazote (Chemnopodium ambrosoides)<br />

30% chaparro amargo (Cast<strong>el</strong>a tortuosa)<br />

30% caobo (Swiet<strong>en</strong>ia sativum)


242 Mario Ortega<br />

» Tepeyac<br />

40% di<strong>en</strong>te de león (Taraxacum officinale)<br />

20% cina cina (Parkinsonia akuleata)<br />

20% hoja de naranjo (Citrus aurantium)<br />

» Therbal indio<br />

boldo (Peunum boldus)<br />

cuasia (Quassi amara)<br />

tila (Tilia occid<strong>en</strong>talis)<br />

prodigiosa (Brick<strong>el</strong>lia cavaniliesi)<br />

cola de caballo (Equisetum robustu)<br />

toronjil (C<strong>en</strong>dron<strong>el</strong>la mexicana)<br />

Umbaduz<br />

té de Axocopaque (Gultheria acuminata)<br />

té de árnica (Heterotheca inoloides)<br />

cola de caballo (Equistum robustum)<br />

té de guasima (Guasuma torm<strong>en</strong>tosa)<br />

ortiga (Jetropha calcyculata)<br />

También <strong>en</strong> Aurrerá (MR) y Sanborns (MR) existe un espacio<br />

dedicado a los libros de medicina naturista, <strong>en</strong>tre los que predomina<br />

la colección Biblioteca natura de Editorial Posada. Uno de sus<br />

libros es <strong>el</strong> Diccionario de herbolaria, de Héctor Alvarez, que <strong>en</strong><br />

1986 iba <strong>en</strong> su quinta edición; <strong>el</strong> otro es El yerberito ilustrado, d<strong>el</strong><br />

caricaturista Eduardo d<strong>el</strong> Río (Rius), d<strong>el</strong> que se publicaron 4000<br />

ejemplares, <strong>en</strong> su 24a. edición. En <strong>el</strong> pasaje comercial de la Bodega<br />

de Aurrerá(MR) de Villa Coapa se pued<strong>en</strong> adquirir otros medicam<strong>en</strong>tos<br />

tradicionales; la farmacia homeopática Heraz ofrece; <strong>en</strong> su<br />

vitrina frasquitos con chaparro amargoso para <strong>las</strong> amebas y la<br />

solitaria, y Bapticia tintoria para la dis<strong>en</strong>tería y la infección intestinal;<br />

<strong>en</strong> la farmacia Patricia, que se dedica a v<strong>en</strong>der toda c<strong>las</strong>e de<br />

medicinas hegemónicas, se puede comprar un frasco de "pan puerco"<br />

para tronar <strong>el</strong> empacho, por sólo 1.60 nuevos pesos.<br />

Recordamos a los lectores que estamos hablando de los medicam<strong>en</strong>tos<br />

tradicionales ofrecidos <strong>en</strong> un complejo y moderno c<strong>en</strong>tro<br />

comercial, muy alejado d<strong>el</strong> viejo C<strong>en</strong>tro histórico de la ciudad de


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 243<br />

México. Bye y Linares también <strong>en</strong>contraron <strong>en</strong> <strong>el</strong> mercado de<br />

Sonora que los consumidores pert<strong>en</strong>ec<strong>en</strong> a varias c<strong>las</strong>es sociales.<br />

Con <strong>el</strong> desarrollo de <strong>las</strong> corri<strong>en</strong>tes alternativas <strong>en</strong> salud <strong>en</strong>tre<br />

<strong>las</strong> capas medias de la ciudad, han proliferado los c<strong>en</strong>tros de<br />

medicina naturista donde se sincretiza la herbolaria "tradicional"<br />

con la acupuntura, prácticas aryudevidas y otras.<br />

En cuanto a la perviv<strong>en</strong>cia de la medicina "tradicional" <strong>en</strong>te <strong>el</strong><br />

proletariado urbano, com<strong>en</strong>taremos que después de los sismos de<br />

septiembre de 1985, la Asociación Internacional de Terapeutas<br />

Corporales inició un programa de salud <strong>en</strong> la colonia Doctores, con<br />

tan exitosos resultados que se ha ido contagiando a otros <strong>barrio</strong>s.<br />

El programa cubre tres objetivos: la at<strong>en</strong>ción directa e inmediata;<br />

la formación de brigadistas de salud, y la capacitación de terapeutas<br />

corporales. Para alcanzarlos, la asociación imparte talleres con<br />

<strong>las</strong> sigui<strong>en</strong>tes terapias: acupuntura china; <strong>el</strong>ectroacupuntura; bio<strong>en</strong>ergética;<br />

y microdosis. Esta última es de nuestro interés por<br />

difundir <strong>el</strong> conocimi<strong>en</strong>to de yerbas medicinales, su procesami<strong>en</strong>to<br />

y aplicación <strong>en</strong> pequeñas dosis.<br />

<strong>La</strong> microdosis, para Sonia Da Costa (1989), una de <strong>las</strong> dinámicas<br />

impulsoras d<strong>el</strong> proyecto, es la mezcla de extracto de hierbas con<br />

alcohol, <strong>en</strong> proporciones determinadas; aplicada <strong>en</strong> la punta de la<br />

l<strong>en</strong>gua <strong>en</strong> pequeñas dosis, produce un efecto rápido de bi<strong>en</strong>estar<br />

<strong>en</strong> <strong>el</strong> sujeto. <strong>La</strong> microdosis ha t<strong>en</strong>ido bu<strong>en</strong>a aceptación <strong>en</strong> los<br />

<strong>barrio</strong>s, pues los paci<strong>en</strong>tes provi<strong>en</strong><strong>en</strong> de una fuerte tradición <strong>en</strong> <strong>el</strong><br />

uso de yerbas medicinales para <strong>el</strong> control de ].a salud.<br />

Por su carácter autogestivo, este proyecto se ha ido ext<strong>en</strong>di<strong>en</strong>do<br />

por la megalópolis, dando un fuerte impulso a la medicina que,<br />

aunque pervive con dinamismo, es calificada como "tradicional,<br />

pasiva y conservadora". En los Campam<strong>en</strong>tos unidos de la colonia<br />

Guerrero, se capacitó a <strong>las</strong> madres de familia <strong>en</strong> la <strong>el</strong>aboración de<br />

microdosis.<br />

Estas microdosis se pued<strong>en</strong> preparar sigui<strong>en</strong>do este algorritmo:<br />

a) Asesorarse con un experto para <strong>el</strong>egir la planta medicinal<br />

como: la yerbera d<strong>el</strong> mercado o una mujer de edad,<br />

etcétera.<br />

b) Conseguir una planta fresca, si es posible que haya sido<br />

recolectada <strong>en</strong> <strong>el</strong> mom<strong>en</strong>to apropiado.<br />

c) Limpiar la planta de tierra.<br />

d) Partir la planta <strong>en</strong> trozos pequeños.


244 Mario Ortega<br />

e) Colocar los trozos d<strong>en</strong>tro de un frasco de color ámbar<br />

oscuro.<br />

f) Retacar los trozos <strong>en</strong> <strong>el</strong> frasco con un barrote de madera.<br />

g) Agregar alcohol de caña de 96 grados, cubri<strong>en</strong>do <strong>en</strong>tre<br />

la mitad y <strong>las</strong> dos terceras parte d<strong>el</strong> frasco.<br />

h) Tapar herméticam<strong>en</strong>te.<br />

i) Etiquetar con los sigui<strong>en</strong>tes datos:<br />

-nombre vulgar de la planta<br />

-nombre ci<strong>en</strong>tífico<br />

-parte de la planta utilizada<br />

-proced<strong>en</strong>cia de la planta<br />

-nombre de quién recom<strong>en</strong>dó la planta.<br />

-fecha de recolección<br />

-fecha de preparación<br />

-nombre de quién <strong>el</strong>aboró la tintura.<br />

j) Conservar <strong>el</strong> frasco <strong>en</strong> un lugar fresco y seco.<br />

k) Después de un mes, colar la tintura con cedazo fino o<br />

con t<strong>el</strong>a de algodón.<br />

1) Pasar a otro frasco de color ámbar oscuro y rotulado.<br />

m) Preparar un vehículo para diluir la tintura con una<br />

parte de alcohol de caña de 96 grados y dos partes de agua.<br />

n) Diluir la tintura <strong>en</strong> 10 c<strong>en</strong>tímetros cúbicos d<strong>el</strong> vehículo,<br />

de acuerdo con la tabla que aparece a continuación.<br />

Microdósis<br />

Tintura o base:<br />

Número de gotas para<br />

10 cc. de vehículo<br />

Anís 1<br />

F<strong>en</strong>otiazina (largactil) 6<br />

Gings<strong>en</strong>g 6<br />

Gobernadora 5<br />

Gordolobo 10<br />

Ildam<strong>en</strong> 6<br />

Insulina 6<br />

Iridus 6<br />

Ipecacuana 4<br />

Lob<strong>el</strong>ia 4<br />

Manrrubio 15


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong><br />

245<br />

Passiflora 6<br />

Prednisona 6<br />

Quina roja 4<br />

Quinina sulfato 3<br />

Myambutol 6<br />

Ruda 4<br />

Sangre de grado 6<br />

Tegretol (carbamacepina) 6<br />

Williamsu 2<br />

Zacate limón 10<br />

FUENTE: Huerta Parra, Isab<strong>el</strong>. <strong>La</strong> práctica de la acupuntura <strong>en</strong> México, un <strong>en</strong>foque<br />

sociológico. México, 1966, III, 150p. Tesis UNAM FCPS. Lic. <strong>en</strong> sociología-<br />

En cuanto a la preval<strong>en</strong>cia de la medicina "tradicional" <strong>en</strong> la<br />

ciudad de México, hemos <strong>en</strong>contrado dos interesantes estudios:<br />

uno dedicado al uso de los recursos médicos <strong>en</strong> hogares urbanos y<br />

suburbanos de Casil<strong>las</strong> (1978); y otro de los departam<strong>en</strong>tos de<br />

Nutrición, Gastro<strong>en</strong>terología y de Trabajo Social, d<strong>el</strong> Hospital<br />

Infantil de México. (Vega-Franco, 1978)<br />

En <strong>el</strong> estudio de Vega-Franco y colaboradores, se <strong>en</strong>trevistaron<br />

familiares de niños at<strong>en</strong>didos <strong>en</strong> <strong>el</strong> Hospital Infantil, de los cuales<br />

27% fueron originarios d<strong>el</strong> Distrito Federal, 18% d<strong>el</strong> Estado de<br />

México, y <strong>el</strong> resto de otras <strong>en</strong>tidades federativas.<br />

En cada una de <strong>las</strong> sigui<strong>en</strong>tes <strong>en</strong>fermedades: alferecia, caída de<br />

la mollera, chipilez, empacho, diarrea y anginas, se realizaron 30<br />

<strong>en</strong>cuestas; <strong>en</strong> 3 más (mal de aire, mal de ojo y chincual) se<br />

llevaron a cabo respectivam<strong>en</strong>te 35, 39 y 42 <strong>en</strong>trevistas. (Vega-<br />

Franco et al., 1978)<br />

En <strong>el</strong> análisis se consideraron aqu<strong>el</strong><strong>las</strong> respuestas de mayor<br />

incid<strong>en</strong>cia. Veamos cómo concibieron los <strong>en</strong>trevistados los síntomas<br />

d<strong>el</strong> empacho:<br />

Se manifiesta con diarrea, vómitos y cal<strong>en</strong>tura, pres<strong>en</strong>tando además<br />

falta de apetito y <strong>el</strong> "estómago av<strong>en</strong>tado". Por lo común, se<br />

debe a que <strong>el</strong> padeci<strong>en</strong>te ha comido fruta verde, alim<strong>en</strong>tos con<br />

cáscara o bi<strong>en</strong> que ti<strong>en</strong><strong>en</strong> una consist<strong>en</strong>cia masosa como la<br />

tortilla o <strong>el</strong> pan, los cuales se "pegan" <strong>en</strong> <strong>el</strong> estómago. Esta


246 Mario o rtega<br />

<strong>en</strong>fermedad se pres<strong>en</strong>ta con mayor frecu<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> tiempo de<br />

aguas...<strong>La</strong> curación se lleva a cabo de acuerdo con <strong>las</strong> sigui<strong>en</strong>tes<br />

indicaciones:<br />

Primero se coloca al niño boca abajo y con pequeños p<strong>el</strong>lizcos se<br />

le jala la pi<strong>el</strong> sigui<strong>en</strong>do una línea imaginaria <strong>en</strong>tre la nuca y la<br />

"colita"; mediante este procedimi<strong>en</strong>to llega a despegarse <strong>el</strong> empacho,<br />

lo cual <strong>en</strong> ocasiones puede reconocerse debido a que al<br />

p<strong>el</strong>lizcar la pi<strong>el</strong> llega a emitir un chasquido. Después de esto, ya<br />

colocado <strong>el</strong> niño boca arriba, se le soba nuevam<strong>en</strong>te la pancita<br />

con aceite de oliva o manteca de puerco, usando a veces "pan<br />

puerco" que se compra <strong>en</strong> la botica; luego se colocan unas hojas<br />

de col china sobre <strong>el</strong> vi<strong>en</strong>tre y se cubre con pap<strong>el</strong> de estraza para<br />

luego v<strong>en</strong>darlo. Una vez hecha esta curación se le da un 1:é, ya<br />

sea de manzanilla, yerbabu<strong>en</strong>a o de hojas de guayaba.<br />

Algunas personas recomi<strong>en</strong>dan purgar después al niño con aceite<br />

de olivo o bi<strong>en</strong> con sulfato de magnesia. (Vega-Franco et al.,<br />

1978)<br />

<strong>La</strong> terapia de "tronar <strong>el</strong> empacho", tan popular <strong>en</strong>tre <strong>las</strong> madres<br />

urbanas, es conocida <strong>en</strong> <strong>el</strong> nordeste arg<strong>en</strong>tino como "tirar <strong>el</strong> cuerito".<br />

En ese país los médicos explican <strong>el</strong> éxito de esta práctica por<br />

<strong>el</strong> reflejo producido al estimularse <strong>las</strong> raíces nerviosas que a su vez<br />

activan <strong>el</strong> peristaltismo intestinal, y alivian <strong>el</strong> paso d<strong>el</strong> bolo alim<strong>en</strong>ticio.<br />

(Pérez <strong>en</strong> Kroeger y Ruíz, 1988: 181)<br />

Casil<strong>las</strong> comparó los recursos médicos utilizados por <strong>las</strong> familias<br />

de los niños de una escu<strong>el</strong>a primaria <strong>en</strong> la colonia Ajusco,<br />

contra los consultados por <strong>las</strong> familias de una guardería de la<br />

Universidad Nacional. En <strong>el</strong> cuestionario se incluyeron algunos<br />

padecimi<strong>en</strong>tos considerados por la medicina hegemónica, y otros<br />

tomados <strong>en</strong> cu<strong>en</strong>ta por la medicina subalterna, como <strong>el</strong> empacho,<br />

la caída de mollera, <strong>el</strong> susto y <strong>el</strong> espanto. Pero toparon con una<br />

dificultad al tratar de c<strong>las</strong>ificar la diarrea <strong>en</strong> unau otra categoría,<br />

por la:<br />

ubicuidad de la diarrea <strong>en</strong>tre los padecimi<strong>en</strong>tos tratados con<br />

remedios caseros y/o con medicam<strong>en</strong>tos de pat<strong>en</strong>te. Sin embargo,<br />

se <strong>en</strong>contró una difer<strong>en</strong>cia <strong>en</strong> <strong>el</strong> uso de los recursos médicos<br />

para at<strong>en</strong>der la diarrea <strong>en</strong>tre uno y otro grupo. En la Ajusco se<br />

usó más <strong>el</strong> medicam<strong>en</strong>to popular y los remedios caseros, <strong>en</strong><br />

cambio <strong>en</strong>tre los universitarios predominó la consulta al médico;<br />

y <strong>en</strong> algunos casos, se m<strong>en</strong>cionó <strong>el</strong> uso de remedios caseros.


Utopía <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> 247<br />

Anzures reconoce que <strong>en</strong> la ciudad de México existe un gran<br />

número de curadores "tradicionales", desde los yerbateros hasta<br />

hueseros, etcétera. Advierte también <strong>las</strong> dificultades para realizar<br />

un c<strong>en</strong>so de estos curadores por su carácter semiclandestino. Durante<br />

nuestra investigación <strong>en</strong> <strong>el</strong> <strong>barrio</strong> de Guerrero, buscamos a<br />

los curadores "tradicionales" de la colonia, preguntando a <strong>las</strong> madres<br />

de familia a quién recurrirían para tronar un empacho. Sorpresivam<strong>en</strong>te<br />

<strong>las</strong> <strong>en</strong>trevistadas coincidieron <strong>en</strong> recom<strong>en</strong>darnos a<br />

la responsable de la Comisión de Salud de su organización: una<br />

<strong>en</strong>fermera que trabaja <strong>en</strong> un complejo hospitalario de la seguridad<br />

social. Paradójicam<strong>en</strong>te, mi<strong>en</strong>tras rastreábamos <strong>el</strong> recurso de salud<br />

"tradicional" d<strong>el</strong> <strong>barrio</strong>, convivíamos con <strong>el</strong>la diariam<strong>en</strong>te, claro<br />

que nosotros no conocíamos esta faceta de su personalidad. Aunque<br />

la compañera sólo ati<strong>en</strong>de a sus amistades, la comunidad la<br />

reconoció como la especialista, y fue <strong>el</strong>la qui<strong>en</strong> proporcionó la<br />

información más coher<strong>en</strong>te sobre los padecimi<strong>en</strong>tos "tradicionales"<br />

asociados con <strong>las</strong> <strong>diarreas</strong> infantiles.<br />

Otro caso de interr<strong>el</strong>ación de <strong>las</strong> medicinas hegemónica y<br />

subalterna <strong>en</strong> un una sola persona, fue una migrante de avanzada<br />

edad qui<strong>en</strong> arribó a esta ciudad hace treinta años, proced<strong>en</strong>te de<br />

Mor<strong>el</strong>os. <strong>La</strong> curadora, qui<strong>en</strong> hace la limpieza <strong>en</strong> una secundaria,<br />

antes se dedicaba a "curar con yerbas". <strong>La</strong> señora, madre de un<br />

odontólogo, un ing<strong>en</strong>iero <strong>en</strong> computación y una estudiante de<br />

preparatoria, com<strong>en</strong>ta:<br />

Sé de medicina porque me gusta, t<strong>en</strong>go vocación; porque<br />

aparte de que mi madre me <strong>en</strong>señó mucho sobre yerbas y<br />

tés, tomé tres años de <strong>en</strong>fermería <strong>en</strong> una escu<strong>el</strong>a particular.<br />

Por lo que sé "cachar" niños, pero abandoné esa actividad<br />

porque estaba ya muy mal de mis nervios.<br />

Al principio, <strong>el</strong>la no nos quería dar <strong>las</strong> "fórmu<strong>las</strong>" porque<br />

ya han int<strong>en</strong>tado robárme<strong>las</strong> muchas veces, incluso unos<br />

médicos me propusieron que me llevarían a no sé dónde,<br />

para que les diera unas c<strong>las</strong>es o les pasara <strong>las</strong> fórmu<strong>las</strong>. Y<br />

eso a mí no me gustó.<br />

Otras señoras de edad avanzada también se quejaron:<br />

Mis hijos ya no me dejan curarme con yerbas, pero yo me<br />

tomo mis tesitos.<br />

Otra verti<strong>en</strong>te de la medicina "tradicional" <strong>en</strong> la ciudad es la<br />

práctica terapéutica espiritualista <strong>en</strong> los templos trinitarios maria-


248 Mario Ortega<br />

nos, estudiados por K<strong>el</strong>ly et al. El espiritualismo Trinitario Mariano,<br />

fue fundado por Roque Rojas <strong>en</strong> ciudad de México, a mediados<br />

d<strong>el</strong> siglo XiX. En los <strong>barrio</strong>s populares de la urbe, esta Iglesia<br />

"continúa acrec<strong>en</strong>tando sus fi<strong>las</strong> por medio de la curación practicada<br />

<strong>en</strong> los templos, hecho que les objetiviza la exist<strong>en</strong>cia de la Ley<br />

Divina y la posibilidad d<strong>el</strong> acceso a la salud" (Ortiz <strong>en</strong> Vargas y<br />

Viesca, 1986:93). Por su carácter sincrético, esta iglesia es un<br />

importante foco de preservación y <strong>en</strong>riquecimi<strong>en</strong>to de algunas<br />

técnicas de la medicina tradicional, como <strong>las</strong> limpias d<strong>el</strong> espanto;<br />

<strong>en</strong> tanto que como grupo r<strong>el</strong>igioso puede practicar estas terapias<br />

abiertam<strong>en</strong>te y no <strong>en</strong> la clandestinidad como los curanderos.

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!