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Reduce los gastos<br />
Ante una tormenta financiera, lo mejor es soltar cargas<br />
innecesarias. Elimina los gastos que no afecten tu calidad de<br />
vida, pero que sí son prescindibles.<br />
Este es un buen momento para practicar la moderación, es<br />
muy probable que te des cuenta de todo el dinero que estuviste<br />
desaprovechando, en esos gastos que seguramente no tenías en el radar.<br />
No canceles tus seguros<br />
Tus seguros no están en la lista de gastos innecesarios, por el contrario, ponlos en tu lista como<br />
una de las prioridades, juntos con los alimentos y las necesidades básicas, ya que, si tú o tu familia<br />
llegaran a tener una situación complicada de salud, tus seguros serán el escudo que te protejan de<br />
una quiebra de la cual difícilmente puedas recuperarte.<br />
Negocia deudas y evita deudas innecesarias<br />
Si en este momento tienes deudas, contacta a tus acreedores y solicita un plan de pagos flexible que<br />
te permita cumplir con tus responsabilidades. Este no es momento de solicitar créditos, si no tienes la<br />
seguridad de que cuentes con la solvencia en el futuro para poder cumplir con el pago de los mismos.<br />
Busca nuevas fuentes de ingresos<br />
Si tu actividad económica no se ha recuperado al 100%, es momento de utilizar tus<br />
habilidades y talentos para crear otras fuentes que te generen los ingresos que<br />
necesitas. De hecho, lo más recomendable es que éste se convierta en hábito<br />
permanente, siempre recomiendo generar ideas que, con pocas horas, poco<br />
esfuerzo y mucha creatividad te den una buena rentabilidad.<br />
Una fuente de ingresos a prueba de balas cumple con los siguientes<br />
puntos: tienes habilidades para desarrollarlo, te gusta y te apasiona, le hace<br />
bien a la sociedad y están dispuestos a pagar por ello.<br />
Toma el control de tus finanzas<br />
La responsabilidad de darle solución a tus finanzas es sólo tuya, de<br />
nada te servirá lamentarte o buscar culpables, las crisis ocurren y son<br />
reales, así como las catástrofes naturales y las pandemias como la<br />
que estamos viviendo ahora. Así ha sido a lo largo de la historia y<br />
continuarán sucediendo, porque son parte de la vida.<br />
Si entendemos esto, será más fácil tomar conciencia, estar siempre<br />
preparados y buscar soluciones de manera más activa.<br />
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