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<strong>El</strong> <strong>día</strong> <strong>que</strong> <strong>murió</strong> <strong>mi</strong> <strong>madre</strong><br />
Este artículo cuenta la historia de <strong>mi</strong> fa<strong>mi</strong>lia, de la <strong>que</strong> hacen parte varios servidores de<br />
la salud. Juntos vivimos el dolor de la muerte de nuestra <strong>madre</strong>, Mariela, en un hospital<br />
de Quito, Ecuador, justo en uno de los picos del covid-19, en marzo de 2021. Fueron<br />
muchas las dificultades <strong>que</strong> atravesamos, pues <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> no recibió una atención<br />
oportuna. Nuestra experiencia muestra la realidad <strong>que</strong> vivió el país durante la pande<strong>mi</strong>a.<br />
Por Sofía Meneses *<br />
Mariela era <strong>mi</strong> <strong>madre</strong>. <strong>El</strong> viernes 19 de marzo de 2021 su saturación de oxígeno en sangre<br />
estaba por debajo de lo establecido como normal para su edad. Esa noche ingresó al<br />
hospital IESS Quito Sur, ubicado al sur de Quito, la capital de Ecuador. En ese momento,<br />
la doctora <strong>que</strong> decidió internarla le dijo: “usted llega a tiempo, casi no hay camas. Se<br />
<strong>que</strong>dará unos dos <strong>día</strong>s y volverá a casa”. Esa fue la última vez <strong>que</strong> <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> tuvo contacto<br />
con su fa<strong>mi</strong>lia. <strong>El</strong>la <strong>murió</strong> la tarde del viernes 26 de marzo de 2021.<br />
Mariela era una mujer fuerte. Se había jubilado en el 2017, después de servir por más de<br />
35 años en un hospital público de Quito como auxiliar de enfermería; allí, vio nacer a<br />
<strong>mi</strong>les de niños durante toda su vida. <strong>El</strong>la los recibía y los protegía de los peligros médicos<br />
<strong>que</strong> existían en los hospitales públicos del país.<br />
En el 2021, <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> fue una de las 57.425 personas <strong>que</strong> murieron en los hospitales de<br />
Ecuador a causa del covid-19, entre marzo de 2020 y abril de 2021, según datos<br />
encontrados en la página web del Registro Civil.<br />
<strong>El</strong> 29 de febrero de 2020, se confirmó en Ecuador el primer caso positivo de covid-19. Se<br />
trataba de una mujer de 71 años <strong>que</strong> arribó al país el 14 de febrero de 2020 proveniente<br />
de Madrid. Días después y tras la presencia de síntomas evidentes, el Ministerio de Salud<br />
Pública confirmó <strong>que</strong> estaba contagiada con el covid-19. Debido a sus complicaciones de<br />
salud fue internada con pronóstico reservado en un hospital de Guayaquil, donde falleció<br />
el 13 de marzo de 2020.<br />
Ese año, cuando empezó la pande<strong>mi</strong>a, fue evidente la falta de preparación de los sistemas<br />
de salud para abordar la crisis. Por esta razón, quiero entender <strong>que</strong> fue lo <strong>que</strong> pasó, si<br />
hubo negligencias o no se hicieron los esfuerzos necesarios para atender esta emergencia.<br />
Me pregunto si las medidas <strong>que</strong> tomó el gobierno de Ecuador para atender la pande<strong>mi</strong>a<br />
fueron coherentes, si la falta de acceso a la salud influyó en el número de muertes por<br />
covid-19, como lo evidencian las cifras de defunciones publicadas por el Registro Civil.<br />
***<br />
En Ecuador, desde la Constitución Política de 1979, el derecho a la salud está<br />
contemplado por la ley. <strong>El</strong> doctor e investigador colombiano, Wilson Jiménez, en su<br />
investigación Transformaciones del sistema de salud ecuatoriano, recuerda <strong>que</strong> el 16 de<br />
junio de 1967 se creó el Ministerio de Salud Pública del Ecuador (MSP), y desde ese<br />
momento el acceso a la salud ha sido un tema de constante lucha: en repetidas ocasiones<br />
la ciudadanía ha salido a las calles para reclamar este derecho.<br />
Según la Organización Internacional del Trabajo, en el artículo <strong>El</strong> sistema de salud<br />
ecuatoriano y la covid-19, cuando inició la pande<strong>mi</strong>a, la respuesta inicial de los países<br />
frente a los primeros casos reportados se centró en adoptar medidas de aisla<strong>mi</strong>ento y<br />
control para evitar la propagación del virus, así como en el fortaleci<strong>mi</strong>ento de los servicios<br />
de salud. En el Ecuador, según la Secretaría Técnica Planifica Ecuador, entidad encargada
de transparentar el manejo econó<strong>mi</strong>co de la pande<strong>mi</strong>a, durante el 2020 “la prestación de<br />
servicios de salud asociados a las atenciones por covid-19 representó el 83 % de los costos<br />
totales en el período, con un monto de 724,69 <strong>mi</strong>llones de dólares incluyendo recursos<br />
para curación, prevención, atención prehospitalaria, diagnóstico, medicamentos y<br />
dispositivos médicos y gestión de fallecidos”.<br />
***<br />
Paola, <strong>mi</strong> hermana, es médica general y durante la pande<strong>mi</strong>a trabajó en el hospital Pablo<br />
Arturo Suárez y en el Centro de Salud de Nanegal, en el noroccidente de la ciudad. Para<br />
ella trabajar en tiempos de covid-19 fue muy difícil. En Quito, cuando comenzó la<br />
emergencia, todas las personas infectadas eran trasladadas al Pablo Arturo Suárez, pues<br />
ningún hospital de la red pública estaba en capacidad de atender a estos pacientes. Mi<br />
hermana recuerda <strong>que</strong> una de las cosas más difíciles fue la falta de insumos médicos: “no<br />
teníamos mascarillas, guantes, botas o algún recurso para protegernos. ¿Cómo se po<strong>día</strong><br />
evitar el contagio de esta manera?”.<br />
Por su parte, <strong>mi</strong> hermano Roberto y su esposa durante la pande<strong>mi</strong>a trabajaron en un<br />
hospital público de Quito. Para él también fue difícil atender a los pacientes sin tener a la<br />
mano los recursos ni los medicamentos necesarios. “Yo tuve <strong>que</strong> aislarme en <strong>mi</strong> casa para<br />
no contagiar a <strong>mi</strong>s hijas de 5 y 7 años”. Sin embargo, Paola, Roberto y su esposa no<br />
pudieron evitar contagiarse. <strong>El</strong> 11 de marzo de 2021, sin saber <strong>que</strong> ya eran portadores del<br />
virus, acudieron a celebrar el <strong>que</strong> sería el último cumpleaños de Mariela, contagiando a<br />
casi toda su fa<strong>mi</strong>lia.<br />
Mariela, <strong>mi</strong> <strong>madre</strong>, cuando ingresó al hospital. Foto: archivo fa<strong>mi</strong>liar.<br />
Roberto y su esposa hacían parte de la llamada primera línea de atención prioritaria. <strong>El</strong>los<br />
se habían vacunado <strong>día</strong>s antes, pero confundieron los síntomas de la vacuna con los del<br />
covid-19, y los resultados de la prueba no llegaron a tiempo: “acudimos a un hospital<br />
público para hacernos los exámenes, pero se demoraron mucho en decirnos <strong>que</strong> éramos<br />
positivos, y nosotros no teníamos el dinero para hacernos un examen pagado”.<br />
En el país, según Ana Delgado, directora de la Asociación Nacional de Clínicas y<br />
Hospitales Privados de Ecuador, el precio de una prueba PCR oscila entre 80 y 120
dólares en los laboratorios autorizados por la Agencia de Asegura<strong>mi</strong>ento de la Calidad de<br />
los Servicios de Salud y Medicina Prepagada (Acess). Ecuador es uno de los países con<br />
los precios más costosos; por esta razón, estos exámenes no son asequibles. De acuerdo<br />
con información publicada en el medio Pichincha Universal en Paraguay una prueba<br />
cuesta 115 dólares; en Brasil, 70; en Chile, 29; y en Argentina y Perú son gratis.<br />
<strong>El</strong> costo de las pruebas para detectar el covid-19 no fue controlado durante la pande<strong>mi</strong>a,<br />
esta responsabilidad no se le designó a ningún estamento público, a pesar de <strong>que</strong> el<br />
acuerdo <strong>mi</strong>nisterial 00126-2020, publicado el 12 de marzo de 2020 en el Registro Oficial<br />
del Ecuador, declaró el estado de emergencia sanitaria en todos los estableci<strong>mi</strong>entos del<br />
sistema nacional de salud: servicios de laboratorio, unidades de epide<strong>mi</strong>ología y control,<br />
ambulancias aéreas, servicios de médicos y paramédicos, hospitalización y consulta<br />
externa.<br />
En marzo de 2020, el presidente Lenin Moreno aseguró en cadena nacional <strong>que</strong> el<br />
gobierno aumentaría el presupuesto de salud, pero esto no se cumplió: según la<br />
Organización Internacional del Trabajo, el presupuesto destinado por el Estado para la<br />
salud no cubrió completamente las necesidades <strong>que</strong> se presentaron durante la pande<strong>mi</strong>a.<br />
En el 2020, el Ministerio de Salud Pública recibió 2.557 <strong>mi</strong>llones de dólares, con una<br />
dis<strong>mi</strong>nución anual del 8,1 %, es decir, 227 <strong>mi</strong>llones de dólares menos <strong>que</strong> en el 2019, de<br />
acuerdo con información del Ministerio de Economía y Finanzas. En el 2021, el<br />
presupuesto del Ministerio de Salud Pública fue de 2.681 <strong>mi</strong>llones de dólares, cifra <strong>que</strong><br />
refleja un incremento anual cercano al 5 %, muy por debajo de lo <strong>que</strong> exigía el estado de<br />
emergencia sanitaria <strong>que</strong> decretó la Autoridad Sanitaria Nacional del Ecuador.<br />
La falta de acceso oportuno a los resultados de la prueba no fue el único inconveniente<br />
<strong>que</strong> encontró <strong>mi</strong> fa<strong>mi</strong>lia. Roberto cuenta <strong>que</strong> después de un <strong>día</strong> de hospitalización lo<br />
llamaron del Hospital IESS Quito Sur para decirle <strong>que</strong> Mariela necesitaba un<br />
acompañante. Para <strong>mi</strong> hermano el cuadro <strong>que</strong> vio en el hospital fue espantoso: “Mi mamá<br />
estaba acostada en una cama, en la <strong>mi</strong>sma sala había muchísimas personas más <strong>que</strong> hacían<br />
un gran esfuerzo para respirar y mantenerse vivas. Mi mamá estaba con la mascarilla<br />
completa, le costaba respirar y en ese momento le estaban aplicando medicamentos para<br />
el dolor. Su estado era crítico, pues la neumonía era grande”. Los médicos le dijeron <strong>que</strong><br />
necesitaba urgente una cama en una unidad de terapia intensiva, pero <strong>que</strong> había una larga<br />
lista de espera y se priorizaban a las personas más jóvenes; sin embargo, la doctora<br />
Fernanda, 1 le dijo: “si yo estuviera en su lugar, haría lo imposible por salvar a <strong>mi</strong> mamá,<br />
pagar una cama UCI es lo único <strong>que</strong> <strong>que</strong>da”.<br />
1<br />
<strong>El</strong> nombre fue cambiado por solicitud de la fuente.
<strong>El</strong> examen médico <strong>que</strong> le hicieron a <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> antes de hospitalizarla. Foto: archivo<br />
fa<strong>mi</strong>liar.<br />
En Ecuador, según la OIT, la atención hospitalaria para pacientes con covid-19 se<br />
concentró en deter<strong>mi</strong>nados hospitales públicos y privados; luego, se incorporaron más<br />
hospitales a la red de servicios. En el primer mes de la pande<strong>mi</strong>a, se designaron 27<br />
hospitales para atender la emergencia sanitaria; un año después, en el 2021, había 176<br />
hospitales públicos y 35privados preparados para recibir a los pacientes contagiados por<br />
el covid-19 en todo el país.<br />
Durante las dos oleadas de covid-19, entre marzo y abril de 2020 y marzo y abril de 2021,<br />
la Asociación Nacional de Clínicas y Hospitales Privados del Ecuador (Achpe) registró<br />
un 100 % de ocupación de las Unidades de Cuidados Intensivos (UCI) en Guayaquil,<br />
Quito, Cuenca y Loja. En hospitalización, <strong>que</strong>daban una o dos camas <strong>que</strong> inmediatamente<br />
se llenaban. Por ejemplo, en Pichincha hay trece clínicas privadas asociadas a la Achpe;<br />
no obstante, según información entregada por esta asociación al Ministerio de Salud<br />
Pública, solamente siete de ellas reciben pacientes contagiados por covid-19: Hospital<br />
Vozandes, Hospital de los Valles, Clínica Internacional, Hospital Metropolitano, North<br />
Hospital, Novaclínica y Clínica Pasteur. En estos centros de salud, como lo aclara Ana<br />
Delgado, directora de la Achpe, una UCI cuesta aproximadamente 2.500 dólares diarios.<br />
Para el doctor Ismael Hernández, <strong>que</strong> trabaja en el Consultorio Médico Fa<strong>mi</strong>liar Dra<br />
Veronica Barahona, una clínica privada de Quito, “la situación de los hospitales y clínicas<br />
privadas <strong>que</strong> atienden pacientes con covid-19 se puede entender si se analiza el contexto<br />
<strong>que</strong> vivió el país en la primera y segunda oleada de la pande<strong>mi</strong>a. Para esto es importante<br />
comprender <strong>que</strong>, según el Instituto Nacional de Estadística y Censos, en el 2020 se<br />
registraron 907.515 egresos hospitalarios y 23.212 camas disponibles en 625<br />
estableci<strong>mi</strong>entos de salud a nivel nacional”. Además, el doctor Hernández explica <strong>que</strong> en<br />
Quito existen, aproximadamente, 50 camas UCI con los materiales necesarios para<br />
atender a pacientes críticos con covid-19. Pero este no es el único factor <strong>que</strong> encarece el<br />
precio de una cama, pues para brindar un trata<strong>mi</strong>ento óptimo se necesitan recursos<br />
humanos: médicos especialistas <strong>que</strong> no están disponibles en el país.<br />
Hay <strong>que</strong> destacar <strong>que</strong> los costos por casos de covid-19 son diferentes. Para Eduardo<br />
Izurieta, presidente de la compañía de seguros médicos Saludsa, los seguros privados<br />
tienen distintos planes y diferentes coberturas; incluso, en Ecuador los seguros cubrieron<br />
la pande<strong>mi</strong>a, algo <strong>que</strong> no sucede en otros países. Sobre este tema Ana Delgado explica<br />
<strong>que</strong> “los costos del covid-19 en Ecuador y el mundo pueden llegar a ser sumamente altos,
pues las Unidades de Cuidados Intensivos son áreas de alta complejidad <strong>que</strong> cuentan con<br />
diferentes especialistas”. Está información la presentó en el webinar Los costos de la<br />
salud y los seguros privados durante el covid-19, organizado por la Universidad San<br />
Francisco de Quito, la Universidad UTE y el portal Código Vidrio, al <strong>que</strong> fueron<br />
convocados varios periodistas.<br />
Además, Delgado dice no puede dar cifras sobre el costo <strong>que</strong> cada clínica tiene para<br />
atender esta emergencia sanitaria, pues son autónomas a la hora de definir la tarifa de una<br />
UCI; sin embargo, explica <strong>que</strong> ningún centro de salud puede negarles atención a las<br />
personas <strong>que</strong> lo necesiten, pues estarían violando un derecho constitucional.<br />
Las cifras sobrepasan los <strong>mi</strong>les de dólares, <strong>mi</strong> hermano Roberto lo pudo constatar:<br />
“cuando los médicos nos dijeron <strong>que</strong> <strong>mi</strong> mamá necesitaba urgente terapia intensiva,<br />
empezamos a llamar de inmediato a todos los hospitales del país y nos decían <strong>que</strong> nos<br />
po<strong>día</strong>n ayudar, pero si contábamos con una garantía de veinte <strong>mi</strong>l dólares”. En ese<br />
momento pensamos en vender todo, pero <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> me dijo, en lo poco <strong>que</strong> conversamos,<br />
<strong>que</strong> no nos endeudáramos, <strong>que</strong> ella no <strong>que</strong>ría causar problemas. Cristina, <strong>mi</strong> hermana<br />
mayor, fue la única de la fa<strong>mi</strong>lia <strong>que</strong> no se contagió de covid-19. <strong>El</strong>la nos cuenta <strong>que</strong> la<br />
noche <strong>que</strong> buscaron una cama UCI pasaron por más de diez clínicas en Quito y en todas<br />
le pe<strong>día</strong>n una garantía de mínimo diez <strong>mi</strong>l dólares. <strong>El</strong>la, desesperada, les entregaba las<br />
llaves de su carro. Entre lágrimas comenta <strong>que</strong> solo recibían efectivo”.<br />
<strong>El</strong> informe médico de <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> antes de ingresar a la UCI. Foto: archivo fa<strong>mi</strong>liar.<br />
Para Ana Delgado “el costo de la salud es un tema complicado por<strong>que</strong> no puede ser<br />
analizado a la ligera. Se debe tomar en cuenta el tiempo <strong>que</strong> el paciente estuvo<br />
hospitalizado. Por ejemplo, el costo de una UCI por <strong>día</strong> es de 2.500 dólares, y cuando se<br />
trata de un hospital público el paciente nunca se entera de lo <strong>que</strong> pagaron por él”. Sobre<br />
las garantías en las clínicas privadas explica <strong>que</strong> “si el paciente entra en peligro no le<br />
pueden negar la atención”. Lo <strong>que</strong> le sucedió a nuestra fa<strong>mi</strong>lia demuestra <strong>que</strong> la atención<br />
en salud urgente no se cumple en el país, pues Cristina fue de hospital en hospital y lo<br />
único <strong>que</strong> encontró fueron negativas por no tener una tarjeta de crédito <strong>que</strong> respaldara el<br />
pago.<br />
Este panorama se repitió durante todo un año y no hubo un pronuncia<strong>mi</strong>ento de parte de<br />
la Superintendencia de Compañías, Valores y Seguros, organismo técnico <strong>que</strong> vigila y<br />
controla la organización, las actividades y el funciona<strong>mi</strong>ento de las clínicas privadas. Por<br />
esta razón, la Defensoría del Pueblo, en un comunicado <strong>que</strong> publicó 16 abril de 2021,<br />
exhortó al gobierno nacional a declarar “de uso público la infraestructura de clínicas y<br />
hospitales privados para afrontar la emergencia sanitaria”. Ya esta entidad, <strong>que</strong> vela por<br />
el cumpli<strong>mi</strong>ento de los derechos humanos, había manifestado su preocupación por la falta
de camas en las UCI de los hospitales públicos en todo el país, lo <strong>que</strong> pone en riesgo la<br />
salud de los ecuatorianos, un derecho <strong>que</strong> está contemplado en los artículos 3 y 32 de la<br />
Constitución de la República.<br />
Pero las camas UCI de las clínicas privadas no son las únicas <strong>que</strong> tienen un alto costo en<br />
Quito. Lo <strong>mi</strong>smo le sucedió a Fernanda. 2 Su <strong>madre</strong> estaba internada en el Hospital<br />
Eugenio Espejo, y tuvo <strong>que</strong> pagarle diez <strong>mi</strong>l dólares a un funcionario público para <strong>que</strong> le<br />
asignara una cama UCI. <strong>El</strong> contacto con este funcionario se lo dieron otros pacientes <strong>que</strong><br />
intentaban conseguir el dinero para salvar a sus fa<strong>mi</strong>liares. “<strong>El</strong> pago lo hicimos en<br />
efectivo”, cuenta. <strong>El</strong>la dice <strong>que</strong> la lista de espera para una cama UCI era de más de sesenta<br />
personas. Fernanda y su padre hicieron un préstamo a chul<strong>que</strong>ras (personas <strong>que</strong> prestan<br />
dinero a intereses muy altos) y lograron obtener el dinero. Su <strong>madre</strong>, tras un mes<br />
hospitalización, logró superar el covid-19.<br />
Este panorama de corrupción se presenta en varios países; incluso, el Co<strong>mi</strong>té de Naciones<br />
Unidas de Derechos Econó<strong>mi</strong>cos, Sociales y Culturales (CESCR), en una declaración del<br />
17 de abril de 2020, exhortó a los Estados a “<strong>que</strong> velen por<strong>que</strong> la extraordinaria<br />
movilización de recursos para hacer frente a la pande<strong>mi</strong>a del covid-19”.<br />
<strong>El</strong> caso de Fernanda no fue el único, pues en el país se presentaron otros hechos de<br />
corrupción <strong>que</strong> fueron expuestos por la prensa, como el de Daniel Salcedo, quien fue<br />
acusado por el delito de peculado por la compra irregular de insumos médicos en el<br />
hospital Los Ceibos durante la pande<strong>mi</strong>a. Estos sobrecostos en mascarillas N95,<br />
medicamentos y otros elementos están siendo investigados por la Fiscalía de Ecuador.<br />
***<br />
Mi hermana Paola todavía se pregunta qué hubiera pasado si a <strong>mi</strong> <strong>madre</strong> le hubieran<br />
asignado a tiempo una cama UCI. Tal vez estaría con nosotros. Su muerte nos dejó una<br />
un montón de preguntas. “<strong>El</strong> Estado intenta culpar a la ciudadanía de los contagios, y no<br />
cumplió con los re<strong>que</strong>ri<strong>mi</strong>entos para una buena atención en los hospitales públicos”, dice<br />
Paola.<br />
Algo distinto opina el gobierno: según el Servicio Nacional de Gestión de Riesgos y<br />
Emergencias y el co<strong>mi</strong>té de Operaciones de Emergencia Nacional, se hicieron los<br />
esfuerzos necesarios para frenar las muertes en la pande<strong>mi</strong>a. Entre las acciones <strong>que</strong> se<br />
llevaron a cabo, destacan la identificación de hospitales para la atención de pacientes con<br />
covid-19; la ampliación y certificación de la red de laboratorios para toma de muestras;<br />
el fortaleci<strong>mi</strong>ento del Instituto Nacional de Investigación en Salud Pública para la<br />
detección de casos; la reprogramación de atenciones y cirugías para descongestionar las<br />
emergencias, las unidades de cuidado intensivo y salas de aisla<strong>mi</strong>ento; la implementación<br />
de telemedicina en el Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social (IESS) para personal<br />
asistencial con perfil de riesgo; el aumento progresivo de la capacidad resolutiva; el<br />
incremento de camas hospitalarias y de unidades de cuidado intensivo en la red de<br />
servicios; la regulación de horarios de funciona<strong>mi</strong>ento de farmacias y botiquines; el<br />
fortaleci<strong>mi</strong>ento del talento humano y la obligatoriedad de recibir las capacitación de la<br />
Organización Panamericana de la Salud.<br />
Aun<strong>que</strong> las acciones presentadas por las entidades gubernamentales parecerían ser un<br />
aporte significativo para frenar las muertes por covid-19, para la OIT “en Ecuador la<br />
emergencia sanitaria ha generado presiones al sistema de salud, con mayores necesidades<br />
2<br />
<strong>El</strong> nombre fue cambiado por solicitud de la fuente.
de recursos financieros, humanos, materiales y de infraestructura. La respuesta financiera<br />
del Gobierno no ha reflejado, al menos para el sector de la salud, esos mayores<br />
re<strong>que</strong>ri<strong>mi</strong>entos. Frente a los altos costos derivados de la atención relacionada a la covid-<br />
19, y el costo de oportunidad por el desplaza<strong>mi</strong>ento de otras atenciones y la distribución<br />
del presupuesto”. Además, esta entidad internacional explica <strong>que</strong> “las condiciones<br />
estructurales del sistema con barreras de acceso, inequidad, segmentación y<br />
fragmentación se suman a las dificultades generadas por la pande<strong>mi</strong>a, y se mantienen e,<br />
incluso, se pueden complejizar por los cambios impuestos por la covid-19”.<br />
En definitiva, el país no pudo frenar las muertes. <strong>El</strong> 19 de marzo de 2021 Ecuador reportó<br />
2.214 contagios en 24 horas. De acuerdo con información del Ministerio de Salud,<br />
Pichincha fue la provincia con el mayor número de contagios (106.633 casos) y<br />
falleci<strong>mi</strong>entos (2.343 muertes) durante este mes. Para el 26 de marzo de 2021, <strong>día</strong> en <strong>que</strong><br />
<strong>murió</strong> Mariela, <strong>mi</strong> <strong>madre</strong>, se confirmaron 2.795 nuevos casos de covid-19 y 16.632<br />
fallecidos.<br />
Esta es la tumba donde visitamos a <strong>mi</strong> <strong>madre</strong>. Foto: archivo fa<strong>mi</strong>liar.<br />
Mi hermana Cristina recuerda el momento en <strong>que</strong> recibió la noticia: “a las tres de la tarde<br />
me dijeron <strong>que</strong> <strong>mi</strong> ma<strong>mi</strong> tuvo un infarto y una falla masiva de sus órganos, y <strong>murió</strong>. En<br />
ese momento me puse en contacto con las personas de la funeraria, se acercaron a <strong>mi</strong> casa<br />
y me explicaron el protocolo <strong>que</strong> tenían con las personas <strong>que</strong> fallecían a causa del covid-<br />
19. En la noche me dijeron <strong>que</strong> no po<strong>día</strong>mos verla, <strong>que</strong> ellos la trasladaban directamente<br />
al crematorio. Al <strong>día</strong> siguiente me acer<strong>que</strong> al hospital y de la morgue sacaron el cuerpo<br />
de <strong>mi</strong> <strong>madre</strong>. Estaba cubierta con una funda negra y no me per<strong>mi</strong>tieron abrirla para<br />
verificar si la persona <strong>que</strong> estaba ahí era <strong>mi</strong> ma<strong>mi</strong>. Solamente, y bajo <strong>mi</strong> responsabilidad,<br />
me dejaron palpar la funda. Así pude despedirme de <strong>mi</strong> ma<strong>mi</strong>”.
Mi <strong>madre</strong> un año antes de la pande<strong>mi</strong>a. Foto: archivo fa<strong>mi</strong>liar.<br />
***<br />
Escribí este artículo para entender los esfuerzos y negligencias <strong>que</strong> se presentaron durante<br />
el primer año de la pande<strong>mi</strong>a. Como periodista reporté varios casos de covid-19 en las<br />
fa<strong>mi</strong>lias del personal de salud. Me <strong>que</strong>dó claro <strong>que</strong> hicieron falta medidas de protección<br />
<strong>que</strong> evitaran el contagio masivo en las fa<strong>mi</strong>lias de este sector. Nunca pensé <strong>que</strong> la historia<br />
de <strong>mi</strong> fa<strong>mi</strong>lia me per<strong>mi</strong>tiría retratar el ca<strong>mi</strong>no <strong>que</strong> vivieron los seres <strong>que</strong>ridos de las<br />
personas <strong>que</strong> fallecieron esperando una cama UCI en el Ecuador.<br />
* Esta historia fue elaborada por Sofía Meneses en el marco del Curso de periodismo científico<br />
Vientos Alisios, conoci<strong>mi</strong>ento colectivo, un proceso de formación <strong>que</strong> per<strong>mi</strong>tió un primer<br />
acerca<strong>mi</strong>ento al periodismo científico para periodistas, comunicadores y comunicadoras de<br />
medios locales en Ecuador, Colombia y Perú.<br />
Vientos alisios es un proyecto de DW Akade<strong>mi</strong>e financiado por el Ministerio Federal de<br />
Cooperación Econó<strong>mi</strong>ca y Desarrollo en el marco de la iniciativa “Transparencia y libertad de los<br />
medios de comunicación – Resiliencia ante la crisis en la pande<strong>mi</strong>a mundial”. Vientos Alisios se<br />
realiza con el apoyo de la Alianza Ríos Voladores.<br />
Esta y las demás historias resultantes del proceso, se pueden leer también en<br />
www.vientosalisios.net.