25.10.2024 Views

TRANSITAR EN EL SUR: Historias de siete hombres del Nariño andino

¡Convierta sus PDFs en revista en línea y aumente sus ingresos!

Optimice sus revistas en línea para SEO, use backlinks potentes y contenido multimedia para aumentar su visibilidad y ventas.

TRANSITAR EN EL SUR

COLECTIVO ANDINXS

JERÓNIMO: Mi nombre es Jerónimo Arévalo. Soy un

hombre trans y tengo 26 años. Nací en Pasto y he vivido aquí

toda mi vida. Estudié en el Colegio Javeriano y me gradué

como abogado en la Universidad de Nariño hace un par de

años. Luego, realicé una especialización en Derecho Penal y

actualmente estoy finalizando una especialización en Derecho

Constitucional. Soy litigante y disfruto mucho del ejercicio del

derecho; también me apasiona la investigación académica en

estas áreas.

Como dato curioso, me gusta aprender idiomas como hobby.

También disfruto de pintar y dibujar. La música siempre ha

sido una parte importante de mi vida, aunque, por cuestiones

de tiempo, ya no la practico tanto como antes. Sin embargo,

sigo disfrutando de una amplia variedad de música.

Y aquí estoy. Estoy casado; me casé con una mujer trans hace

dos meses. Ella se llama Cristina y vivimos juntos en Pasto.

Compartimos nuestra vida con un montón de hijos peludos:

tenemos dos perros y cuatro gatos.

DANIEL:Tú dijiste: “Haré todo lo que me gusta, lograré

todos mis sueños”. Siento que es una forma de reivindicarnos,

y por supuesto, Jerónimo, eres un ejemplo vivo de vivir la lucha

en carne propia y decidirte por tus sueños. Hablando de sueños

cumplidos, siento que tienes una lista de logros a tus 26 años.

Es admirable, sin duda. ¿Cuáles han sido esos retos que has

enfrentado para llegar allí, alineados, por supuesto, con tu

identidad de género?

Transitar en una sociedad binaria

que cae en las ideas binarias de género. Al menos yo, cuando

comencé a transitar —hace aproximadamente nueve años— no

tenía la capacidad de pensar el género de otra manera, ¿sabes?

Pensaba: “Quiero ser, soy un hombre trans”, y me enfocaba

en el ideal de hombre trans que quería ser. Este ideal estaba

profundamente influenciado por el machismo patriarcal que

reina en nuestras sociedades, especialmente aquí en Pasto, en

Nariño, y en el mundo del Derecho, donde esto se acentúa aún

más.

Decidí hacer mi tránsito en la universidad. Fue un proceso

difícil, ya que ingresé a la universidad como Valentina a los 17

años, como una adolescente. Cuando terminé mi primer año y

tomé la decisión de transitar, fue un golpe muy duro para todos

en la Facultad. Hasta donde sé, era el primer hombre trans en

estudiar en la Facultad de Derecho y que había realizado su

transición durante sus estudios.

Inicié mi tratamiento hormonal mientras estaba allí. A

menudo me cuestionaban si realmente era un hombre, porque

en toda la Facultad me vieron transitar; sabían que antes era

Valentina y que ahora me llamaba Jerónimo. Me vi obligado

a defender mi nombre, mis pronombres y mi identidad ante

todos, incluyendo al personal administrativo. Así que el primer

reto que encontré para ser el hombre que quería ser —o al

menos para intentar alcanzar ese ideal, que ahora reconozco

como erróneo— fue la falta de reconocimiento de mi identidad.

A pesar de haber realizado mi tránsito, haberme sometido a

una mastectomía y tener una novia, seguían cuestionándome,

¿sabes?

JERÓNIMO: Algo que conversábamos tú y yo hace un tiempo

es que, en realidad, nadie pone en duda que somos hombres. Sin

embargo, definir qué significa ser hombre es complicado, ya

126 127

Hooray! Your file is uploaded and ready to be published.

Saved successfully!

Ooh no, something went wrong!