La revista Play Tuning 13

película es limitada, pues tan sólo se
limita a la primera parte en la que se
explica el contexto familiar y social de
la Juani, ha tenido contacto estrecho
con los dos protagonistas de la cinta.
En concreto, con Dani Martín, cantante
de El Canto del Loco, se ha pegado
unos cuantos ‘mecos’ en la ficción.
De este último afirma que “sin ser un
aficionado al tuning, sí que tiene buenos
carros. Un par de Porsche’s y una
camioneta. No es aficionado al tuning
pero sí le gusta ir en buenos carros”.
Participación de Japan
Además de la participación de Ismael,
Japan Tuning como empresa ha tenido
un importante papel. Japan Tuning han
contribuido a construir el mundo del tuning
en la película con tres coches: un
Civic, un CRX y un Eclipse. Además,
también han creado el archiconocido
show-car rosa denominado “El coche
de la Juani”, un vehículo creado especialmente
para la promoción del film
“y que no sale en la película ya que la
Juani ni tan siquiera tiene coche. Se
creó para que fuera la imagen publicitaria
de la historia”
Japan Tuning
Una organización líder
Japan Tuning es una de las empresas pioneras
y con más solera en el sector del tuning.
Con tres tiendas en Catalunya, Terrassa, Rubí
y Molins de Rei, Japan Tuning ha cruzado la
frontera del Ebro y ya está también presente
en Castellón con otra tienda.
El secreto de Japan Tuning es que en sus locales
comerciales, los aficionados al tuning pueden
encontrar absolutamente de todo, desde
los detalles más pequeños hasta las reformas
integrales de vehículos.
Se declaran especialistas en la comercialización
de llantas, accesorios y kits completos
de carbono. Pero un de los puntos fuertes
de Japan Tuning es el asesoramiento, diseño
y realización de proyectos. Por todos los aficionados
al tuning es conocido el prestigio de
Japan Tuning en este campo con continuos
Top20 de sus creaciones. El último, el Toyota
MR2 Rosita, es decir, “el coche de la Juani”.
Crónica generacional
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Se ha destacado mucho el mundo del tuning en esta nueva película de Bigas
Luna. Sin duda era un buen gancho publicitario. Sin embargo, el mundo del
tuning tan sólo es un vehículo del que se sirve el director para explicar la realidad
social que los jóvenes que viven en los barrios periféricos de las grandes
ciudades y que vuelcan toda su creatividad y energía juvenil en actividades
como el tuning y manifestaciones culturales paralelas para diferenciarse del
resto del mundo y conseguir una identidad propia. Por este motivo, la película
de Bigas Luna es más
un retrato generacional
y social de un momento
concreto que una
cinta que presenta y
analiza en profundidad
el mundo del tuning.
Es más, Según manifiesta
Bigas Luna, “Yo
soy la Juani” pretende
fundamentalmente ser
el retrato de una cierto
tipo de mujer de nuestros
tiempos que quiere
progresar, que no se
conforma con lo que
tiene o lo que le ofrecen
y quiere enfrentarse
a sus propios retos,
superarse y finalmente
conseguir sus deseos.
La productora ha prometido
una segunda
parte en la que la Juani
seguirá buscando
sus sueños, parece
ser que en Hollywood.
¿Los conseguirá? Habrá
que esperar.