|Lugares| La isla de las
|Lugares| La isla de las maravillas Isla Canguro ha vuelto a florecer tras los incendios que arrasaron este paraíso natural hace tres años. Ahora, una nueva e interesante colección de ecocabinas invita a sus huéspedes a ser testigos de este milagroso renacimiento. Por Chloe Sachdev U n pequeño escalofrío recorre mi cuerpo nada más desembarcar del ferry que nos conduce a Isla Canguro. Tres años después de los devastadores incendios que calcinaron la mitad de la isla durante el «Verano Negro» de 2020 y acabaron con la vida de miles de animales, Isla Canguro ha adquirido un significado más profundo en la psique de Australia. La isla, con una población de apenas 5,000 personas, a menudo recibe el nombre de las Galápagos australianas por su gran variedad de fauna y flora, que sobrepasa en número a sus propios habitantes. En este lugar uno puede contemplar animales que parecen sacados directamente de las páginas de un libro del Dr. Seuss: ornitorrincos, canguros, ualabíes, koalas y leones marinos en su hábitat natural. Pero además es un paraíso con una finalidad concreta, un escenario que relata una historia de regeneración y renovación. Separada del continente australiano desde la última glaciación, Isla Canguro pende como un dije bajo la costa sur del país, al suroeste de Adelaida. Un paisaje vasto y épico con 150 kilómetros de extensión de este a oeste y más de un tercio de superficie protegida por reservas naturales. Resurgida de sus cenizas, esta isla virgen de agrestes y escarpadas costas 20 CENTURION-MAGAZINE.COM
de color blanco azucarado, imponentes acantilados, recónditas calas y matorrales se encuentra en vías de recuperación. Gracias al compromiso de su población, muy concienciada con el medio ambiente, el terreno y las especies vegetales se están regenerando y los animales van reapareciendo poco a poco. El turismo ecológico es parte esencial del renovado enfoque de la isla que hace énfasis en que los visitantes aprendan sobre los esfuerzos de regeneración y, tal vez, se pongan manos a la obra y se involucren por una buena causa. Una parte de esta nueva etapa de turismo sustentable, así como el principal motivo de mi visita, son las recién construidas WanderPods, cuatro casas compactas, cómodas, elegantes y aisladas del mundo. Con una ubicación privilegiada sobre un acantilado cubierto de hierba a 150 metros de altura, los alojamientos se asoman a la famosa playa de Snelling y a la Gran Bahía Australiana. Luego de su primera apertura el año pasado en el Scenic Rim de Queensland, la empresa Wander —conocida por sus refugios de bajo impacto ecológico situados en plena En el sentido de las manecillas del reloj desde la izquierda: amanecer en Isla Canguro; una cría de ualabí; la tranquila terraza de una WanderPod FOTOGRAFÍAS REMY BRAND CENTURION-MAGAZINE.COM 21
