BLACKBOOK La alberca de
BLACKBOOK La alberca de agua caliente a 36 °C en la azotea del balneario Rudas El animado ambiente en Gozsdu Udvar La opulenta decoración interior del hotel Buddha-Bar Los minisándwiches del Dear Budapest András Pető, sous-chef del Onyx con lo último en tecnología, la exquisita zona de spa y el sugerente bar en la azotea garantizan una agradable experiencia que realmente da la nota por encima de la media. QUÉ HACER Evite las multitudes de Váci, la principal avenida comercial de Pest, y dirija sus pasos hacia el Séptimo Distrito. El barrio judío de la ciudad rebosante de boutiques con encanto, galerías de arte contemporáneo y antiguas barberías se ha transformado en patio de recreo para adultos. Pruebe la deliciosa comida callejera en el parque de foodtrucks Karaván, o diríjase hacia Gozsdu Udvar (gozsduudvar.hu) para disfrutar infinidad de alegres bistrós, una galería comercial e incluso una habitación de escape que no requiere reservación. Los aficionados a la cultura querrán acercarse a la Sinagoga de la Calle Dohány, la mayor sinagoga de Europa, y también al Parque en Memoria del Holocausto Raoul Wallenberg, dedicado al diplomático sueco que rescató a decenas de miles de judíos húngaros durante la Segunda Guerra Mundial. QUÉ COMER Para disfrutar de un tentempié al mediodía, acuda al Dear Budapest (dearbudapest.hu), donde cualquiera de sus sándwiches abiertos de estilo danés es una obra maestra en miniatura creada por el chef local con estrella Michelin Olivér Heiszler. El pan de centeno se emplea de sabrosa base para inverosímiles combinaciones de ingredientes –desde el hígado de pato con uvas y mostaza de mango hasta el esturión con mantequilla de cacahuate– que llegan al paladar en un intenso torrente de sabores. Pruebe las originales versiones de los clásicos de la cocina húngara como la divina y cremosa res a la paprikás en el Urban Betyár (urbanbetyar.com); y más tarde visite su museo etnográfico en el sótano. Cierta empresa francesa de neumáticos recomienda el Onyx (onyxrestaurant.hu), donde la nueva cocina magiar –representada por completo con el menú de seis platillos Hungarian Evolution– combina a la perfección con una elegante decoración de interiores con imponentes cortinas de terciopelo, paredes acolchadas y recargados candelabros. QUÉ BEBER Los llamados “bares ruina” –caóticos pubs situados en edificios abandonados– llevan cierto tiempo marcando tendencia en los itinerarios de ocio de la ciudad. A la cabeza de todos ellos está el Szimpla (szimpla.hu), un espacio de tres pisos en la calle Kazinczy lleno de curiosidades como un viejo automóvil Trabant. En el hotel Kempinski, los creativos cocteles del Blue Fox (bluefoxthebar.com), incluyen creaciones crípticas –como el Oblivion a base de mezcal, o el Immortality elaborado con ginebra, espliego y cenizas de bergamota– que se sirven en tazones de roca, vasos largos y estrechos e incluso bolsas. El St Andrea (standreaborbar.hu) es un espléndido local situado en una azotea donde se pueden degustar vinos de la región húngara de Eger, elegantes cocteles (pruebe La Mano de la Muerta aderezado con tequila) y excelentes raciones que son el acompañamiento perfecto a las bebidas y las espléndidas vistas. ♦ EN EL SENTIDO DE LAS MANECILLAS DEL RELOJ DESDE ARRIBA: © BALNEARIO RUDAS, © DEAR BUDAPEST, © ONYX, © BUDDHA-BAR HOTEL, © GOZSDU UDVAR 44 DEPARTURES-INTERNATIONAL.COM PARA RESERVACIONES CONTACTE AL SERVICIO DE LA TARJETA PLATINUM
