Evaluación y diagnóstico para la toma de decisiones en las ...

EVALUACIÓN Y
DIAGNÓSTICO PARA LA
TOMA DE DECISIONES
EN LAS
UNIVERSIDADES...
Marcela Calderón, Daniel Morán y Virginia Vilchez

CAL 052: EVALUACIÓN Y DIAGNOSTICO PARA LA TOMA DE DECISIONES EN
LAS UNIVERSIDADES. EL CASO DE LA FACULTAD DE INGENIERÍA Y CIENCIAS
ECONÓMICO – SOCIALES (UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN LUIS –
ARGENTINA.
Autores:
Calderon, Marcela 1
Moran, Daniel
Vilchez, Virginia
Palabras claves: Política educativa, equidad, oportunidades, diagnostico, evaluación.
Resumen:
El desafío de las universidades públicas es asumir su compromiso social,
implementando políticas universitarias que permitan aumentar la calidad y cantidad de
ingresantes, la permanencia y el egreso de los alumnos.
Este desafío es primordial en las sociedades afectadas negativamente por las políticas
neoliberales, que han sido implementadas a partir de la década del 90. Y, donde
Argentina no ha sido ajena a esta situación, causando un detrimento de su calidad
educativa.
Por ello, tanto el incremento de la matricula, la permanencia y el egreso se configuran
como elementos relevantes en el desafío que coadyuva hacia la movilidad social.
En tal sentido, la oficina de estadística se crea como una política de gestión, a fin de
evaluar la situación académica de los alumnos de la Facultad de Ingeniería y Ciencias
Económico Sociales (FICES), perteneciente a la Universidad Nacional de San Luís
(UNSL), y ver en que puntos se debe trabajar para mejorar y para garantizar el mayor
ingreso y permanencia.
Por ello, resulta primordial avanzar en el diagnóstico que nos prové la realidad
académica para que a partir de ello se fomenten políticas educativas equitativas.
Finalmente, intentamos con esta ponencia desarrollar un estudio de caso, en particular
de la FICES, referido a la situación académica para que a partir de allí se pueda
promover políticas educativas de igualdad de oportunidades, el objetivo de esta
ponencia es contar como la FICES desarrolla algunas políticas para cooperar en el
proceso de evaluación y diagnóstico para la toma de decisiones en materia educativa.
1 Docente Investigadora de la Universidad Nacional de San Luís – Facultad de Ingeniería y Ciencias Económico
Sociales – Argentina. Licenciada en Trabajo Social. E-mail: mcalder@fices.unsl.edu.ar

1. Una breve descripción del contexto socio-económico de la Argentina
La política neoliberal, implementada en la Argentina a partir de la década de
1970 y hasta finalizar la década de 1990, tuvo su impacto en términos de concentración
en la distribución del ingreso, aumento de los índices de pobreza y desprotección de
grandes segmentos de la sociedad (Golovanevsky, 2005). Lo que llevó a un vasto
número de personas hacia zonas de exclusión y vulnerabilidad social, dicho en otras
palabras, hacia la inseguridad social.
La inseguridad social es entendida como la conciencia de estar a merced de
acontecimientos que pueden degradar el estatus social. La inseguridad social actúa
como un proceso de desmoralización, de disociación social (como opuesto a cohesión
social), que condena a los proletariados a vivir en la precariedad permanente. Esta
situación de vulnerabilidad es también una inseguridad permanente por no tener el
menor control sobre lo que les ocurre. “Estar en la inseguridad permanente es no poder
ni dominar el presente ni anticipar positivamente el porvenir” (Castel, 2004: 35-40).
El colapso del patrón de acumulación económica del período 1991-2001 y el
fracaso del modelo de la convertibilidad -que fue mucho más que la mera paridad
cambiaria- estuvo dado, entre otros factores, por la regresiva distribución del ingreso
que fue fragmentando la sociedad, excluyendo a vastos sectores de la población, a
pesar de estar en presencia de tasas de crecimiento económico significativas. Esto
generó un patrón de acumulación que una vez agotados los factores de crecimiento
económico derivó en un proceso implosivo y recesivo hasta que estalló la crisis (Kotzer,
Perrot y Villafañe, 2005).
El problema del desempleo que tuvo un fuerte aumento para los años 1994 y
1995 2 no se pudo superar hasta hoy.
En 2003, los indicadores de pobreza y desempleo del país fueron alarmantes. En
materia de pobreza, el porcentaje tanto de hogares como de personas pobres se
triplicó; mientras en 1993 el 17,7% de las personas eran pobres, en mayo de 2003 este
indicador alcanzó el 60%. En cuanto al desempleo en el 2002 el 21,5% de la población
económicamente activa se encontraba desocupada (Kotzer, Perrot y Villafañe, 2005).
2. El problema que afronta la Educación en la Argentina.
Como es posible observar, la situación estructural de la Argentina, en términos
de las consecuencias de las políticas neoliberales implementadas, generan una base
que obviamente afectan o condicionan el desarrollo de otras áreas, como lo es la
educación.
Toda vez que entendemos que las condiciones estructurales, tales como
pobreza, desempleo, inciden negativamente en las posibilidades de ingreso y
permanencia de los alumnos en el sistema educativo.
En este sentido, concebimos a la deserción como uno de los problemas
fundamentales que afronta la educación, donde la escasa presencia de documentos de
análisis en relación al tema nos ha llevado a reflexionar sobre las causas de tal
desinterés.
2 En mayo de 1995 el desempleo alcanzó al 20% de la Población económicamente activa (Grassi, 2004)

Siguiendo a Alejandra Jewsbury y Inés Haefeli (2000), estamos de acuerdo en
que las investigaciones en torno a la universidad como objeto de estudio son de
desarrollo reciente y que llevar adelante investigaciones de este tipo implican
erogaciones y subsidios importantes que en la mayoría de las veces no se tienen. Pero
también, es de considerar que el tema queda relegado por otros de agenda imperiosa
para los cuadros directivos de las universidades (fundamentalmente las más masivas)
como son el presupuesto, los requerimientos de evaluación institucional, las reformas
curriculares y las nuevas relaciones que se deben establecer con el mercado para la
obtención de recursos propios.
Uno de los temas que preocupa y debe ocupar a la universidad pública es la
problemática de la deserción, entendiendo a esta como un factor e riesgo para la
posibilidad de movilidad social.
“En general ningún abandono se produce por un quiebre instantáneo: la
deserción supone una conflictividad externa procesada a lo largo de un tránsito de
autojustificación. El que abandona primero suele sentirse abandonado por la institución.
Se inicia con una ruptura previa espacio-temporal dentro del aula y la relación con el
resto de los compañeros se hace más distante y ajena” (Elbaum).
La posibilidad de acceso a la educación universitaria implica un mejoramiento de
las situaciones sociales, la igualdad de oportunidades y la movilidad social, es por ello
la creciente demanda.
En momentos de fracasos y deserción se instala un sentir de decepción para con
las instituciones públicas y la participación política donde el ideario democrático se
vulnera.
Bajo este entorno las universidades muchas veces se encuentran incapacitadas
para poner en ejecución recursos aptos para evitar la multiplicación de la deserción. Los
factores que inciden no siempre se apoyan en la escasez de presupuesto, sino también
en la ineficaz distribución de los mismos y en las deficiencias pedagógicas del nivel.
Según los antecedentes encontrados podemos identificar diferentes tipos de
factores que afectan a la deserción (Jewsbury y Haefeli, 2000)
La situación socioeconómica que enfrenta la sociedad en la que esta
inmersa, tanto la institución bajo análisis como sus estudiantes.
La propia institución a través de los factores que contienen al estudiante o
lo expulsan.
La cantidad de materias que debe cursar simultáneamente, las
condiciones de regularización, promoción de asignaturas, la modalidad de
cursado y examen, la cantidad de docentes y su capacitación; y la
disponibilidad de recursos tales como laboratorios, bibliotecas, etc. son
algunas de ellas.
Las demandas de trabajo, las necesidades del mercado de mano de obra
calificada, o no, alientan o desalientan a los estudiantes a acceder y
permanecer en las universidades.
3. La Facultad de Ingeniería y Ciencias Económico Sociales (FICES). La
oficina de estadística como parte de una política educativa
Tal como decíamos en el punto anterior, la problemática de la deserción interpela

a las universidades a diseñar mecanismos que tienden a la contribuir a la disminución
de la problemática, por ello, es que en el año 2007 comienza a desarrollarse en la
Facultad de Ingeniería y Ciencias Económico Sociales - Universidad Nacional de San
Luis, el Proyecto de Apoyo a las Ciencias Sociales (PROSOC).
En el marco de este proyecto se crea el subproyecto interinstitucional “Diseño e
Implementación de Mecanismos de Seguimiento de Alumnos y Graduados”.
Este Subproyecto se vincula directamente con los Propósitos Institucionales de la
Universidad Nacional de San Luis, aprobados por la Ordenanza Nº 25/94 CS que guían
el accionar de la institución en su conjunto y el proyecto de cada unidad académica en
particular.
La marcha de las Carreras hace necesario fortalecer y homogeneizar los
mecanismos de gestión y seguimiento de los alumnos, para la toma de decisiones en la
implementación de medidas efectivas para la retención y el análisis de la información
sobre rendimiento y egreso.
En el marco de este Subproyecto Interinstitucional se propone el trabajo
cooperativo entre la Facultad de Ingeniería y Ciencias Económico Sociales y Facultad
de Ciencias Humanas de la UNSL, como una estrategia común para el logro de la
mejora de los índices de desempeño de alumnos y graduados de ambas Carreras.
Se plantea como Objetivo General:
Generar información para la toma de decisiones en la organización de
planificaciones y estrategias de acompañamiento de alumno y graduados.
Como Objetivos Específicos:
Realizar el análisis de los indicadores implementados en sistemas de
tutorías, becas y seguimiento.
Determinar los indicadores de rendimiento y egreso.
Conocer los niveles de desempeño de los alumnos y graduados.
Conocer las características de los alumnos de primer año.
Generar una autoevaluación constante de las carreras. (PROSOC 2007).
Posteriormente, este subproyecto de “Diseño e Implementación de Mecanismos
de Seguimiento de Alumnos y Graduados” pasa a depender de la Secretaría de
Planeamiento de la FICES, tomando una nueva denominación: Oficina de Estadística;
cuyo objetivo es desarrollar un banco de datos e indicadores de interpretación de
diversas problemáticas y situaciones tanto personales del alumno como así también sus
expectativas, o tener en cuenta variables del contexto en el que se insertan los
graduados, que darán cuenta de la realidad social.
De esta manera, la Facultad de Ingeniería y Ciencias Económico-Sociales, a
través de las Secretarías correspondientes, puede acceder a una información pertinente
que permita colaborar para la toma de decisiones y así establecer políticas de gestión
institucional que tiendan al ingreso y permanencia del alumno. Por otro lado, permite
adecuar su oferta educativa a fin de que respondan a las demandas y/o necesidades
laborales de la comunidad en la que esta inserta.
Además este espacio de diseño y seguimiento significa articular con otros
espacios institucionales de la Facultad (Sistema Interdisciplinario de Orientación al
Estudiante -SIOE-, Programa de mejoramiento de las Ingenierías –PROMEI-,
Departamento de Alumnos de la Facultad, Departamento de Graduados, etc.)
fortaleciendo la comunicación intra-institucional desde un enfoque de trabajo
colaborativo.

4. Un cierre a modo de apertura…
Siguiendo a Mayz Ballenilla (1976), concebimos a la Universidad como una
institución histórica, y como tal se halla sujeta a constantes variaciones en sus metas y
objetivos.
Sería una pretensión absurda tratarla como una entelequia abstracta, dotada de
fines universales y de una misión intemporal desvinculada de las concretas
circunstancias que rodean su existencia. Al contrario, como institución histórica, la
universidad debe adaptarse y responder a las exigencias y demandas del medio social,
económico, político, cultural, tecnológico en el que se halla inserta, so pena de existir y
actuar sin conexión vital con este.
Sin embargo, nada fácil resulta desarrollar este designio, ya que la Universidad
deberá enfrentar la yuxtaposición -y aún la aparente colisión y enfrentamiento- de las
variadas o plurales misiones que pueden y deben adscribirse a una institución como la
universidad, si de ella se reclaman todos los deberes y exigencias que se le imputan
por su excepcional papel sociopolítico en un medio como el latinoamericano.
En tal sentido, nos surgen algunos interrogantes respecto al papel de la
universidad: ¿Es posible proponer una función social universal y predeterminada para la
educación respecto de su relación con la sociedad? ¿Existe una voluntad real de que la
educación llegue a todas las clases sociales en términos de generar equidad o
movilidad social?
Adelantando la respuesta, consideramos que no es posible, toda vez que juegan
una multiplicidad de factores y esto abre el debate hacia nuevos horizontes, pensando a
la educación como una dimensión entre tantas otras.
Se considera oportuno hacer referencia a la misión socio-política de la
universidad.
En tal sentido, tampoco la universidad puede permanecer neutral o indiferente
frente a ese modelo y a las exigencias que implica su paralelo desarrollo. Por el
contrario, ella debe asumir una determinada posición, vale decir, un compromiso-
político, social, histórico- y, en consecuencia, apoyar o rechazar aquel modelo,
dirigiendo sus metas institucionales hacia el cumplimiento de los fines y valores que
esta posición imponga.
Así, el compromiso sociopolítico de la universidad con la sociedad donde
funciona generará que se abran para ella disímiles y múltiples tareas (científicas,
sociales, económicas, etc.) cuya totalidad y coherencia derivará de la conciencia con
que la institución asuma el auténtico cumplimiento de sus metas.
Es así como una de las primeras y más fundamentales tareas de su misión
sociopolítica debe quedar centrada en esclarecer – para sí y para sus miembros- las
razones y fundamentos de aquella posición y compromiso, señalando su coherencia,
adecuación y conveniencia con los fines perseguidos por el desarrollo de la sociedad
donde funciona.
Esto debe conducirla a comprender desde un punto de vista político y social, la
existencia fáctica de dicha sociedad, así como los fines y valores por ella perseguidos e
incorporados al modelo de desarrollo que pretende realizar.

Bibliografía
Castel Robert (2004) “La inseguridad social, ¿qué es estas protegido?” Capitulo 2.
Editorial Manantial.
Elbaum, J. “La escuela desde afuera. Culturas juveniles y abandono escolar”. El
análisis que presenta el autor se refiere al nivel secundario pero se consideró
pertinente la reflexión para el nivel universitario.
Golovanevsky, Laura (2005) “Vulnerabilidad, capital social y redes sociales.
Cuestiones teóricas y una aproximación empírica para Argentina en el siglo XX” en
“Revista de Estudios Regionales y Mercado de Trabajo”. ISSN 1669-9084. Argentina.
Grassi, Estela (2004) “Cuestión social: precisiones necesarias y principales
problemas” en “Escenarios”. Revista Institucional de la Facultad de Trabajo Social N°
8. UNLP. La Plata, Argentina.
Jewsbury Alejandra y Haefeli Ines (2000) “ANALISIS DE LA DESERCION EN
UNIVERSIDADES PUBLICAS ARGENTINAS”.
Kotzer Daniel, Perrot Bárbara, Villafañe Soledad (2005) “Distribución del ingreso,
pobreza y crecimiento en Argentina”. Subsecretaria de Programación Técnica y
Estudios Laborales. Ministerio de Trabajo, Empleo y Seguridad Social. Argentina.
Mayz Ballenilla, E. (1976) “Seminario de Pedagogía Universitaria”. Misión de la
Universidad Latinoamericana. En: Revista Currículo. Año 1, Número 2, Venezuela.
PROSOC (2007). Presentación del Proyecto Institucional. FICES- UNSL.