LA TRIBUNA Nº 5.indd - La Tribuna de Paracuellos

LA TRIBUNA
02
agenda
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agenda cultural
4 - 6 - 7 Otoño de cine
Concurso de fotografía
Salón Infantil Davadum
Actividades culturales del Ayuntamiento
actualidad local
8 - 13 Robos en Miramadrid
Huertos municipales
Campamento urbano de Navidad
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14 - 19 Festival de Cortos de Paracuellos
Compras navideñas
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23-24-25 Escuela municipal de baloncesto
Reapertura del frontón y el rocódromo
Fútbol de 1 regional
tablón del
ciudadano
26 Red WIFI municipal
Nuevos horarios del punto limpio
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Editorial
NAVIDAD, ESAS “FELICES” FECHAS
LA TRIBUNA
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En la antigua Roma, solían celebrarse entre el 17 y el 23 de Diciembre las
Saturnales. Una festividad que rendía culto a Saturno, dios de la agricultura,
y en la que se condensaban importantes elementos simbólicos tales como la
fertilidad de la Madre Tierra y la llegada del Sol Invictus, generadora de vida.
Coincidiendo con el solsticio de invierno. La época en la que el astro rey, la luz
en definitiva, le ganaba la batalla a la oscuridad y la tiniebla. La religión cristiana
aprovechó esta indestructible y enraizada manifestación pagana, para hacer
coincidir tal fecha con la del nacimiento del Salvador. La luz del mundo.
Motivo por el cual, disquisiciones teosóficas al margen, hoy en día
celebramos algo llamado Navidad, a finales del mes de Diciembre.
La Navidad es francamente un periodo del almanaque bastante insólito.
Nos acerca a los nuestros (a familiares, amigos y compañeros de trabajo),
pero también a los que están muy lejos, como por ejemplo los niños que
sobreviven a duras penas en un campamento de refugiados en Mali. Este año,
incluso, tan solo con enviar un SMS podemos estrecharles nuestra mano para
llevarles un trozo de comida a la boca. Y el resto del año, por supuesto, “que
se busquen la vida y que no me den más la vara”. Que encima con esto de la
crisis, la cosa esta muy malita.
Los informativos del mediodía, a la hora de comer, desploman sobre
el mantel de nuestra mesa cientos de fotogramas por segundo, que nos
enseñan la imagen truculenta de unos niños somalíes con la barriga inflada
debido a la ascitis, y las cuencas de los ojos infestados de moscas, con las
pupilas brillantes y risueñas.
Después de la Epifanía, cuando todo haya sido un sueño, y al aparcar el
coche después de volver del trabajo, escudriñemos en la penumbra de unos
contenedores de basura, la silueta de los que rebuscan en lo que nosotros
tiramos, miraremos para otro lado.
Ojalá el 2013 nos haga mirar las cosas de frente. Felices Fiestas a todos.
Y que el 2013 comience de la mejor manera para todos nosotros.