06-032 familia de Dios (s).pdf - David Cox
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
Por <strong>David</strong> <strong>Cox</strong> © 20<strong>06</strong><br />
Mateo 21:33-44 Oíd otra parábola: Hubo un hombre, padre <strong>de</strong> <strong>familia</strong>, el cual<br />
plantó una viña, la cercó <strong>de</strong> vallado, cavó en ella un lagar, edificó una torre, y la<br />
arrendó a unos labradores, y se fue lejos. 34 Y cuando se acercó el tiempo <strong>de</strong> los<br />
frutos, envió sus siervos a los labradores, para que recibiesen sus frutos. 35 Mas<br />
los labradores, tomando a los siervos, a uno golpearon, a otro mataron, y a otro<br />
apedrearon. 36 Envió <strong>de</strong> nuevo otros siervos, más que los primeros; e hicieron con<br />
ellos <strong>de</strong> la misma manera. 37 Finalmente les envió su hijo, diciendo: Tendrán<br />
respeto a mi hijo. 38 Mas los labradores, cuando vieron al hijo, dijeron entre sí:<br />
Éste es el here<strong>de</strong>ro; venid, matémosle, y apo<strong>de</strong>rémonos <strong>de</strong> su heredad. 39 Y<br />
tomándole, le echaron fuera <strong>de</strong> la viña, y le mataron. 40 Cuando venga, pues, el<br />
señor <strong>de</strong> la viña, ¿qué hará a aquellos labradores? 41 Le dijeron: A los malos<br />
<strong>de</strong>struirá sin misericordia, y arrendará su viña a otros labradores, que le paguen el<br />
fruto a su tiempo. 42 Jesús les dijo: ¿Nunca leísteis en las Escrituras: La piedra<br />
que <strong>de</strong>secharon los edificadores, Ha venido a ser cabeza <strong>de</strong>l ángulo. El Señor ha<br />
hecho esto, Y es cosa maravillosa a nuestros ojos? 43 Por tanto os digo, que el<br />
reino <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> será quitado <strong>de</strong> vosotros, y será dado a gente que produzca<br />
los frutos <strong>de</strong> él. 44 Y el que cayere sobre esta piedra será quebrantado; y<br />
sobre quien ella cayere, le <strong>de</strong>smenuzará.<br />
Introducción: – Padres salieron a un viaje y <strong>de</strong>jaron los hijos mayores<br />
y maduros encargados <strong>de</strong> la <strong>familia</strong>. Así es la iglesia.<br />
I. ¿Quiénes somos?<br />
A. Somos hijos <strong>de</strong>l Rey.<br />
Efesios 3:14 Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre <strong>de</strong><br />
nuestro Señor Jesucristo, 15 <strong>de</strong> quien toma nombre toda <strong>familia</strong><br />
en los cielos y en la tierra,<br />
• Llevamos el nombre <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> porque haber sujetado al Padre.<br />
B. Somos Hijos <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />
(1) ¿Quién es un hijo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>? ¿Cómo llega a ser?<br />
Mateo 12:46-50 Mientras él aún hablaba a la gente, he aquí su<br />
madre y sus hermanos estaban afuera, y le querían hablar. 47 Y le<br />
dijo uno: He aquí tu madre y tus hermanos están afuera, y te quieren<br />
hablar. 48 Respondiendo él al que le <strong>de</strong>cía esto, dijo: ¿Quién es mi<br />
madre, y quiénes son mis hermanos? 49 Y extendiendo su mano<br />
hacia sus discípulos, dijo: He aquí mi madre y mis hermanos. 50<br />
Porque todo aquel que hace la voluntad <strong>de</strong> mi Padre que está en<br />
los cielos, ése es mi hermano, y hermana, y madre.<br />
• Lo que nos hace un hijo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> es quien que hace la<br />
voluntad <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> el Padre.<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
Gálatas 3:26 pues todos sois hijos <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> por la fe en Cristo<br />
Jesús;<br />
• Este sumisión es la fe o confianza que damos a <strong>Dios</strong>, que lo<br />
que Él diga y quiera es nuestro querer y hacer.<br />
• Fe es una confianza que damos, que dice que “tú sabes mejor<br />
que yo, entonces yo te obe<strong>de</strong>zco.”<br />
(2) ¿Quién no es y por qué?<br />
Lucas 13:23-28 Y alguien le dijo: Señor, ¿son pocos los que se<br />
salvan? Y él les dijo: 24 Esforzaos a entrar por la puerta angosta;<br />
porque os digo que muchos procurarán (buscan para entrar, buscar<br />
por meditar, pensar, o razonar) entrar, y no podrán. 25 Después que<br />
el padre <strong>de</strong> <strong>familia</strong> se haya levantado y cerrado la puerta, y<br />
estando fuera empecéis a llamar a la puerta, diciendo: Señor,<br />
Señor, ábrenos, él respondiendo os dirá: No sé <strong>de</strong> dón<strong>de</strong> sois. 26<br />
Entonces comenzaréis a <strong>de</strong>cir: Delante <strong>de</strong> ti hemos comido y bebido,<br />
y en nuestras plazas enseñaste. 27 Pero os dirá: Os digo que no sé<br />
<strong>de</strong> dón<strong>de</strong> sois; apartaos <strong>de</strong> mí todos vosotros, hacedores <strong>de</strong><br />
maldad (injusticia, hechos en violación <strong>de</strong> la ley). 28 Allí será el llanto<br />
y el crujir <strong>de</strong> dientes, cuando veáis a Abraham, a Isaac, a Jacob y a<br />
todos los profetas en el reino <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, y vosotros estéis excluidos.<br />
• No es fácil <strong>de</strong> entrar en el cielo. Es una “puerta angosta” por lo<br />
cual que tenemos pasar. Habla <strong>de</strong> algo restringido, algo que uno<br />
tiene que ser muy restringido o sujetarse exactamente a don<strong>de</strong><br />
está la puerta para pasarla.<br />
• Hay un elemento <strong>de</strong> gran<strong>de</strong> esfuerzo <strong>de</strong> nuestra parte, y aun<br />
así, muchos que atentan no van a entrar.<br />
1° Juan 2:3-6 Y en esto sabemos que nosotros le conocemos, si<br />
guardamos sus mandamientos. 4 El que dice: Yo le conozco, y no<br />
guarda sus mandamientos, el tal es mentiroso, y la verdad no está<br />
en él; 5 pero el que guarda su palabra, en éste verda<strong>de</strong>ramente el<br />
amor <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> se ha perfeccionado; por esto sabemos que estamos<br />
en él. 6 El que dice que permanece en él, <strong>de</strong>be andar como él<br />
anduvo.<br />
• La persona que no guarda los mandamientos <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> no es<br />
salvo.<br />
• La persona que no anda como Jesucristo anduvo no es hijo <strong>de</strong><br />
<strong>Dios</strong>.<br />
1° Juan 2:9-10 El que dice que está en la luz, y aborrece a su<br />
hermano, está todavía en tinieblas. 10 El que ama a su hermano,<br />
permanece en la luz, y en él no hay tropiezo.<br />
• La persona que no ama a su hermano en Cristo no es hijo <strong>de</strong><br />
<strong>Dios</strong>.<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
• La persona que no busca <strong>de</strong> quedarse o concentrar su vida en<br />
la luz <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> no es hijo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />
1° Juan 2:15-17 No améis al mundo, ni las cosas que están en el<br />
mundo. Si alguno ama al mundo, el amor <strong>de</strong>l Padre no está en él.<br />
16 Porque todo lo que hay en el mundo, los <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> la carne, los<br />
<strong>de</strong>seos <strong>de</strong> los ojos, y la vanagloria <strong>de</strong> la vida, no proviene <strong>de</strong>l Padre,<br />
sino <strong>de</strong>l mundo. 17 Y el mundo pasa, y sus <strong>de</strong>seos; pero el que hace<br />
la voluntad <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> permanece para siempre.<br />
¿Por qué?<br />
• El amor <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> es exclusivo en contra <strong>de</strong> otros amores<br />
mundanos.<br />
• De ser salvo, <strong>de</strong> ser un hijo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, se base en amar<br />
verda<strong>de</strong>ramente a <strong>Dios</strong>. Si uno <strong>de</strong>ja amor, estima, apreciación,<br />
o pone prioridad sobre otra cosa antes que a <strong>Dios</strong>, no es salvo.<br />
• Otra vez: La persona salva ama a <strong>Dios</strong>, y busca con todo su<br />
corazón <strong>de</strong> obe<strong>de</strong>cer a <strong>Dios</strong>, a Su voluntad.<br />
Juan 8:41-44 Vosotros hacéis las obras <strong>de</strong> vuestro padre.<br />
Entonces le dijeron: Nosotros no somos nacidos <strong>de</strong> fornicación; un<br />
padre tenemos, que es <strong>Dios</strong>. 42 Jesús entonces les dijo: Si vuestro<br />
padre fuese <strong>Dios</strong>, ciertamente me amaríais; porque yo <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> he<br />
salido, y he venido; pues no he venido <strong>de</strong> mí mismo, sino que él me<br />
envió. 43 ¿Por qué no entendéis mi lenguaje? Porque no podéis<br />
escuchar mi palabra. 44 Vosotros sois <strong>de</strong> vuestro padre el diablo,<br />
y los <strong>de</strong>seos <strong>de</strong> vuestro padre queréis hacer. Él ha sido homicida<br />
<strong>de</strong>s<strong>de</strong> el principio, y no ha permanecido en la verdad, porque no hay<br />
verdad en él. Cuando habla mentira, <strong>de</strong> suyo habla; porque es<br />
mentiroso, y padre <strong>de</strong> mentira.<br />
• Sumisión a alguien, o sea, <strong>de</strong> hacer lo que agrada, es <strong>de</strong><br />
hacerle tu padre. ¿Quién es tu padre? ¿<strong>Dios</strong>? O ¿El diablo?<br />
C. Somos embajadores <strong>de</strong> Cristo.<br />
2° Corintios 5:20 Así que, somos embajadores en nombre <strong>de</strong><br />
Cristo, como si <strong>Dios</strong> rogase por medio <strong>de</strong> nosotros; os rogamos en<br />
nombre <strong>de</strong> Cristo: Reconciliaos con <strong>Dios</strong>.<br />
• El trabajo <strong>de</strong> un embajador <strong>de</strong> Cristo es <strong>de</strong> rogar a otros <strong>de</strong><br />
reconciliarse con <strong>Dios</strong>.<br />
• Debemos portarnos como digno a embajador <strong>de</strong> nuestro Rey.<br />
II. ¿Qué somos? Familia.<br />
Romanos 11:25 Porque no quiero, hermanos, que ignoréis este<br />
misterio, para que no seáis arrogantes en cuanto a vosotros<br />
mismos: que ha acontecido a Israel endurecimiento en parte, hasta<br />
que haya entrado la plenitud <strong>de</strong> los gentiles;<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
• Pablo explicó que el cambio <strong>de</strong> la nación <strong>de</strong> Israel a una <strong>familia</strong><br />
espiritual con hermanos es para la gloria <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. No es algo <strong>de</strong><br />
jactarse o ser arrogante sobre esto. Así se portó Israel, y por<br />
esto, <strong>Dios</strong> rechazó a ellos.<br />
A. Hermanos bajo la autoridad <strong>de</strong>l Padre.<br />
Efesios 3:12-20 en quien tenemos seguridad y acceso con confianza<br />
por medio <strong>de</strong> la fe en él (Jesucristo); 13 por lo cual pido que no<br />
<strong>de</strong>smayéis a causa <strong>de</strong> mis tribulaciones por vosotros, las cuales son<br />
vuestra gloria. 14 Por esta causa doblo mis rodillas ante el Padre<br />
<strong>de</strong> nuestro Señor Jesucristo, 15 <strong>de</strong> quien toma nombre toda<br />
<strong>familia</strong> en los cielos y en la tierra, 16 para que os dé, conforme a<br />
las riquezas <strong>de</strong> su gloria, el ser fortalecidos con po<strong>de</strong>r en el<br />
hombre interior por su Espíritu; 17 para que habite Cristo por la fe<br />
en vuestros corazones, a fin <strong>de</strong> que, arraigados y cimentados en<br />
amor, 18 seáis plenamente capaces <strong>de</strong> compren<strong>de</strong>r con todos los<br />
santos cuál sea la anchura, la longitud, la profundidad y la altura, 19<br />
y <strong>de</strong> conocer el amor <strong>de</strong> Cristo, que exce<strong>de</strong> a todo conocimiento,<br />
para que seáis llenos <strong>de</strong> toda la plenitud <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. 20 Y a Aquel que<br />
es po<strong>de</strong>roso para hacer todas las cosas mucho más<br />
abundantemente <strong>de</strong> lo que pedimos o enten<strong>de</strong>mos, según el po<strong>de</strong>r<br />
que actúa en nosotros,<br />
Efesios 2:18-19 porque por medio <strong>de</strong> él (Jesucristo) los unos y<br />
los otros tenemos entrada por un mismo Espíritu al Padre. 19<br />
Así que ya no sois extranjeros ni advenedizos, sino conciudadanos<br />
<strong>de</strong> los santos, y miembros <strong>de</strong> la <strong>familia</strong> <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>,<br />
• Nuestra fe en Jesucristo, el hombre especial (Mesías o Cristo),<br />
quien nos trajo o nos proveyó la salvación a nosotros.<br />
• Por tener fe en Jesucristo, nos hizo miembros <strong>de</strong> la <strong>familia</strong> <strong>de</strong><br />
<strong>Dios</strong>.<br />
Mateo 25:40 Y respondiendo el Rey, les dirá: De cierto os digo que<br />
en cuanto lo hicisteis a uno <strong>de</strong> estos mis hermanos más pequeños, a<br />
mí lo hicisteis.<br />
• La relación que llevamos con <strong>Dios</strong> es <strong>de</strong>mostrada por la<br />
relación que llevamos con nuestros hermanos espirituales en la<br />
iglesia.<br />
(1) Como hermanos no tomamos autoridad (como<br />
un padre) uno sobre el otro.<br />
Mateo 23:8-12 Pero vosotros no queráis que os llamen Rabí; porque<br />
uno es vuestro Maestro, el Cristo, y todos vosotros sois hermanos. 9<br />
Y no llaméis padre vuestro a nadie en la tierra; porque uno es<br />
vuestro Padre, el que está en los cielos. 10 Ni seáis llamados<br />
maestros; porque uno es vuestro Maestro, el Cristo. 11 El que es el<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
mayor <strong>de</strong> vosotros, sea vuestro siervo. 12 Porque el que se enaltece<br />
será humillado, y el que se humilla será enaltecido.<br />
• Entre la <strong>familia</strong> <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, solamente <strong>Dios</strong> es padre. Solamente<br />
<strong>Dios</strong> pue<strong>de</strong> <strong>de</strong>cir la disposición, vocación, y situación <strong>de</strong> cada<br />
miembro <strong>de</strong> la <strong>familia</strong>. No somos padres sobre nuestros<br />
hermanos.<br />
• Servicio es lo que marca miembros <strong>de</strong> la <strong>familia</strong> <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>, no<br />
enaltecerse sobre los <strong>de</strong>más.<br />
• Un padre pue<strong>de</strong> mandar y <strong>de</strong>cidir la fortuna <strong>de</strong> uno <strong>de</strong> sus hijos,<br />
pero siendo un hermano, no es posible que nos imponemos<br />
sobre nuestros hermanos.<br />
(2) Exhortación y enfrentar para evitar castigo.<br />
Romanos 15:14 Pero estoy seguro <strong>de</strong> vosotros, hermanos míos, <strong>de</strong><br />
que vosotros mismos estáis llenos <strong>de</strong> bondad, llenos <strong>de</strong> todo<br />
conocimiento, <strong>de</strong> tal manera que podéis amonestaros los unos a<br />
los otros.<br />
• Es la relación <strong>de</strong> ayudar uno al otro en sus problemas y<br />
necesida<strong>de</strong>s que nos asegura que nuestros hermanos también<br />
van a escucharnos cuando les amonestamos.<br />
B. La Relación <strong>de</strong> igualdad entre los hermanos<br />
Gálatas 3:26-29 Pues todos sois hijos <strong>de</strong> <strong>Dios</strong> por la fe en Cristo<br />
Jesús; 27 porque todos los que habéis sido bautizados en Cristo, <strong>de</strong><br />
Cristo estáis revestidos. 28 Ya no hay judío ni griego; no hay esclavo<br />
ni libre; no hay varón ni mujer; porque todos vosotros sois uno en<br />
Cristo Jesús. 29 Y si vosotros sois <strong>de</strong> Cristo, ciertamente linaje <strong>de</strong><br />
Abraham sois, y here<strong>de</strong>ros según la promesa.<br />
• Todos los hijos son hijos iguales <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />
Romanos 14:7-10 Porque ninguno <strong>de</strong> nosotros vive para sí, y<br />
ninguno muere para sí. 8 Pues si vivimos, para el Señor vivimos; y si<br />
morimos, para el Señor morimos. Así pues, sea que vivamos, o que<br />
muramos, <strong>de</strong>l Señor somos. 9 Porque Cristo para esto murió y<br />
resucitó, y volvió a vivir, para ser Señor así <strong>de</strong> los muertos como <strong>de</strong><br />
los que viven. 10 Pero tú, ¿por qué juzgas a tu hermano? O tú<br />
también, ¿por qué menosprecias a tu hermano? Porque todos<br />
compareceremos ante el tribunal <strong>de</strong> Cristo.<br />
• Somos iguales en Cristo y no <strong>de</strong>bemos jactarnos.<br />
(1) Lo que afecta uno afecta a todos.<br />
1° Corintios 12:25-27 para que no haya <strong>de</strong>savenencia en el cuerpo,<br />
sino que los miembros todos se preocupen los unos por los otros. 26<br />
De manera que si un miembro pa<strong>de</strong>ce, todos los miembros se duelen<br />
con él, y si un miembro recibe honra, todos los miembros con él se<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
gozan. 27 Vosotros, pues, sois el cuerpo <strong>de</strong> Cristo, y miembros cada<br />
uno en particular.<br />
• <strong>Dios</strong> usa el ejemplo <strong>de</strong> un solo cuerpo con varios miembros.<br />
(2) Usamos presión amigable para ayudar a<br />
nuestros hermanos.<br />
Hebreos 10:24 Y consi<strong>de</strong>rémonos unos a otros para estimularnos al<br />
amor y a las buenas obras;<br />
(3) Contacto y compañerismo regular es<br />
obligatorio.<br />
Hebreos 10:25 no <strong>de</strong>jando <strong>de</strong> congregarnos, como algunos tienen<br />
por costumbre, sino exhortándonos; y tanto más, cuanto veis que<br />
aquel día se acerca.<br />
(4) Li<strong>de</strong>razgo es obligatorio para los maduros.<br />
Gálatas 6:2 Sobrellevad los unos las cargas <strong>de</strong> los otros, y cumplid<br />
así la ley <strong>de</strong> Cristo.<br />
(5) Rescatamos a los que an<strong>de</strong>n mal.<br />
Gálatas 6:1 Hermanos, si alguno fuere sorprendido en alguna falta,<br />
vosotros que sois espirituales, restauradle con espíritu <strong>de</strong><br />
mansedumbre, consi<strong>de</strong>rándote a ti mismo, no sea que tú también<br />
seas tentado.<br />
C. Nuestra obligación con nuestros hermanos pequeños.<br />
Gálatas 6:3-10 Porque el que se cree ser algo, no siendo nada, a sí<br />
mismo se engaña. 4 Así que, cada uno someta a prueba su propia<br />
obra, y entonces tendrá motivo <strong>de</strong> gloriarse sólo respecto <strong>de</strong> sí<br />
mismo, y no en otro; 5 porque cada uno llevará su propia carga. 6 El<br />
que es enseñado en la palabra, haga partícipe <strong>de</strong> toda cosa buena al<br />
que lo instruye. 7 No os engañéis; <strong>Dios</strong> no pue<strong>de</strong> ser burlado: pues<br />
todo lo que el hombre sembrare, eso también segará. 8 Porque el<br />
que siembra para su carne, <strong>de</strong> la carne segará corrupción; mas el<br />
que siembra para el Espíritu, <strong>de</strong>l Espíritu segará vida eterna. 9 No<br />
nos cansemos, pues, <strong>de</strong> hacer bien; porque a su tiempo segaremos,<br />
si no <strong>de</strong>smayamos. 10 Así que, según tengamos oportunidad,<br />
hagamos bien a todos, y mayormente a los <strong>de</strong> la <strong>familia</strong> <strong>de</strong> la fe.<br />
• <strong>Dios</strong> va a recompensar o enojar con nosotros según que<br />
actuamos. Nadie pue<strong>de</strong> burlarse (ignorar los mandamientos) <strong>de</strong><br />
<strong>Dios</strong> y salir con lo suyo.<br />
• Hay obligación hacía a la <strong>familia</strong> <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>. Esta obligación<br />
incluye algo económico, pero no es limitado a ello.<br />
Hebreos 13:16 Y <strong>de</strong> hacer bien y <strong>de</strong> la ayuda mutua no os olvidéis;<br />
porque <strong>de</strong> tales sacrificios se agrada <strong>Dios</strong>.<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
III. ¿Cómo <strong>de</strong>bemos actuar?<br />
A. Debemos ser sumisos no rebel<strong>de</strong>s.<br />
• Somos sujetos a <strong>Dios</strong> primero.<br />
Hebreos 13:17 Obe<strong>de</strong>ced a vuestros pastores, y sujetaos a ellos;<br />
porque ellos velan por vuestras almas, como quienes han <strong>de</strong> dar<br />
cuenta; para que lo hagan con alegría, y no quejándose, porque esto<br />
no os es provechoso.<br />
• Luego estamos sujetos a los hermanos mayores que <strong>Dios</strong> <strong>de</strong>jó<br />
encargados <strong>de</strong> la <strong>familia</strong>, la obra <strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />
1° Corintios 16:15-16 Hermanos, ya sabéis que la <strong>familia</strong> <strong>de</strong><br />
Estéfanas es las primicias <strong>de</strong> Acaya, y que ellos se han <strong>de</strong>dicado al<br />
servicio <strong>de</strong> los santos. 16 Os ruego que os sujetéis a personas como<br />
ellos, y a todos los que ayudan y trabajan.<br />
• Luego somos sujetos a los que ayudan y trabajan para la obra<br />
<strong>de</strong> <strong>Dios</strong>.<br />
B. Debemos preocupar para el bien <strong>de</strong> nuestros<br />
hermanos.<br />
Lucas 22:31-32 Dijo también el Señor: Simón, Simón, he aquí<br />
Satanás os ha pedido para zaran<strong>de</strong>aros como a trigo; 32 pero yo he<br />
rogado por ti, que tu fe no falte; y tú, una vez vuelto, confirma a tus<br />
hermanos.<br />
• “confirma” – haz estable, firme, <strong>de</strong> arreglar para que sirve o<br />
está normal, maduro, que <strong>de</strong>be ser.<br />
C. Debemos corregir a nuestros hermanos en amor.<br />
Mateo 18:15-17 Por tanto, si tu hermano peca contra ti, ve y<br />
reprén<strong>de</strong>le estando tú y él solos; si te oyere, has ganado a tu<br />
hermano. 16 Mas si no te oyere, toma aún contigo a uno o dos, para<br />
que en boca <strong>de</strong> dos o tres testigos conste toda palabra. 17 Si no los<br />
oyere a ellos, dilo a la iglesia; y si no oyere a la iglesia, tenle por<br />
gentil y publicano.<br />
• Primero enfrentamos a un hermano en pecado para que salga<br />
<strong>de</strong>l pecado. Si no nos oye, hablamos con testigos. Si nadie en la<br />
iglesia está <strong>de</strong> acuerdo contigo, probablemente estás mal en tu<br />
entendimiento <strong>de</strong> las cosas. Luego en lugar <strong>de</strong> presentar el<br />
problema <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> “una <strong>familia</strong>”, lo presentas <strong>de</strong>lante <strong>de</strong> “la<br />
iglesia” que es nuestra <strong>familia</strong> espiritual.<br />
D. Debemos perdonar ofensas <strong>de</strong> nuestros hermanos.<br />
Mateo 18:21-22 Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor,<br />
¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí?<br />
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La Familia <strong>de</strong> <strong>Dios</strong><br />
¿Hasta siete? 22 Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta<br />
setenta veces siete.<br />
• Siete es un número <strong>de</strong> perfección o cumplimiento. Creación<br />
terminó al séptimo día. Pedro preguntó si con siete veces<br />
perdonamos a nuestro hermano cumplimos con lo que <strong>Dios</strong><br />
requiere <strong>de</strong> nosotros, y Jesús dijo “no”, hasta siete por setenta.<br />
Esto es técnicamente 490 veces, pero la i<strong>de</strong>a es siempre sin<br />
número y sin contar <strong>de</strong> veces, perdonamos a nuestro hermano.<br />
La parábola que relata Jesús <strong>de</strong>spués hasta versículo 34 (siervo<br />
que no perdonó su consiervo) nos enseña que <strong>Dios</strong> no perdona<br />
a la persona que no siempre perdona a sus hermanos.<br />
Lucas 17:3-4 Mirad por vosotros mismos. Si tu hermano pecare<br />
contra ti, reprén<strong>de</strong>le; y si se arrepintiere, perdónale. 4 Y si siete<br />
veces al día pecare contra ti, y siete veces al día volviere a ti,<br />
diciendo: Me arrepiento; perdónale.<br />
• Esto es el proceso normal, repren<strong>de</strong>r para corregir, y perdonar.<br />
Nuestro perdón <strong>de</strong>pen<strong>de</strong> <strong>de</strong> arrepentimiento y que el hermano<br />
nos pi<strong>de</strong> <strong>de</strong> perdonarle.<br />
E. Debemos estar motivados por el pronto regreso.<br />
Hechos 1:9-11 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue<br />
alzado, y le recibió una nube que le ocultó <strong>de</strong> sus ojos. 10 Y estando<br />
ellos con los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he<br />
aquí se pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, 11<br />
los cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis<br />
mirando al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado <strong>de</strong> vosotros<br />
al cielo, así vendrá como le habéis visto ir al cielo.<br />
• Nada afuera <strong>de</strong> su or<strong>de</strong>n.<br />
• Todo lo que <strong>de</strong>bemos hacer es al día.<br />
• Regalitos para cuando llegan.<br />
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