Vidente Pedro Regis – Anguera, Brasil – Mensajes 2005-2011
Vidente Pedro Regis – Anguera, Brasil – Mensajes 2005-2011
Vidente Pedro Regis – Anguera, Brasil – Mensajes 2005-2011
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Queridos hijos, rezad por el nuevo sucesor de <strong>Pedro</strong>. Con él la Iglesia avanzará, mas<br />
será perseguida por los enemigos. El Santo Padre experimentará el calvario, pues<br />
muchas de sus posiciones irán a contrariar a los enemigos de la Iglesia. Doblad<br />
vuestras rodillas en oración. Rezad mucho por la Iglesia. La lección aprendida no será olvidada.<br />
Jesús mira a Su Iglesia y cuida de Sus fieles. La muerte jamás vencerá la vida. La simiente<br />
plantada dará buenos frutos. La Victoria será del Señor. Éste es el Mensaje que hoy os<br />
transmito en el Nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberMe permitido reuniros aquí<br />
por una vez más. Yo os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo. Amén.<br />
Quedad en Paz.<br />
23.04.<strong>2005</strong> / 21:00:00<br />
Mensaje de Nuestra Señora, Nº 2.513<br />
Queridos hijos, doblad vuestras rodillas en oración suplicando la Misericordia de Dios para<br />
vuestra nación. El humo del demonio se esparció por <strong>Brasil</strong> causando ceguera<br />
espiritual en muchas almas. Volveos de prisa. Arrepentíos de vuestros pecados. Vuestra<br />
nación tropezará y por la calles habrá conflictos y derramamiento de sangre. <strong>Brasil</strong><br />
estará en guerra. La bandera: He aquí que en ella está la causa de la guerra. Rezad<br />
mucho. No quedéis apartados. Lo que tengáis que hacer no lo dejéis para mañana. Éste es el<br />
Mensaje que hoy os transmito en el Nombre de la Santísima Trinidad. Gracias por haberMe<br />
permitido reuniros aquí por una vez más. Yo os bendigo en el Nombre del Padre, del Hijo y del<br />
Espíritu Santo. Amén. Quedad en Paz.<br />
26.04.<strong>2005</strong> / 21:00:00<br />
Mensaje de Nuestra Señora, Nº 2.514<br />
Queridos hijos, rezad mucho delante de la cruz por la conversión de los hombres. Ahora vivís<br />
los momentos más difíciles para la humanidad. Os pido que volváis al Señor lo más rápido<br />
posible. La humanidad sufrirá y los hombres han de lamentar la vida transcurrida sin Dios. La<br />
Ciudad de Jerusalén 27 será destruida, y cuando pase la gran tribulación 28 no será<br />
27 Jerusalén: 1ª ciudad y capital de Israel, situada en los montes de Judea, entre el mar Mediterráneo y la ribera norte<br />
del mar Muerto. La parte oriental de Jerusalén o Jerusalén Este, que incluye la Ciudad Vieja, es donde la Autoridad<br />
Nacional Palestina pretende establecer la capital de su futuro Estado. El estatus de esta parte de la ciudad, conquistada<br />
en 1967 por Israel, se encuentra en disputa.<br />
28 “… Habéis entrado en Mi Tiempo. Estáis bajo el signo de los grandes acontecimientos, que os han sido predichos.<br />
Sabed leer y meditar todo lo que en la Divina Escritura se os ha descrito claramente para ayudaros a comprender los<br />
tiempos que estáis viviendo. Con Mi Voz Materna os guío a todos para que comprendáis los signos de la gran<br />
tribulación. En los Evangelios, en las cartas de los Apóstoles, en el Libro del Apocalipsis os han sido claramente<br />
descritos indicios seguros para haceros comprender cuál es el período de la gran tribulación. Todos estos signos se<br />
están realizando en vuestro tiempo. <strong>–</strong>Ante todo una gran apostasía se está difundiendo en todas partes de la Iglesia por<br />
la falta de fe, que se propaga incluso entre sus mismos Pastores. Satanás ha logrado difundir por doquier la gran<br />
apostasía, por medio de su solapada obra de seducción, que ha llevado a muchos a alejarse de la Verdad del Evangelio<br />
para seguir las fábulas de las nuevas teorías teológicas, y complacerse en el mal y en el pecado, buscado, incluso, como<br />
un bien. <strong>–</strong>Luego, en vuestro tiempo, se multiplican los trastornos de orden natural, como terremotos, sequías,<br />
inundaciones, desastres que causan la muerte imprevista a millares de personas, seguidas de epidemias y males<br />
incurables que se propagan por doquier. <strong>–</strong>Además, vuestros días están marcados por continuos rumores de guerra, que<br />
se multiplican y siegan cada día innumerables víctimas. Crecen las discordias y las disensiones en el interior de las<br />
naciones; se propagan las revoluciones y las luchas entre los diversos pueblos; continúan extendiéndose guerras<br />
sangrientas, no obstante los esfuerzos que se hacen para logar la paz. <strong>–</strong>Finalmente, en vuestro tiempo acontecen<br />
grandes signos en el sol, la luna y las estrellas. El milagro del sol, acontecido en Fátima, fue un signo, que os di para<br />
advertiros que ya han llegado los tiempos de estos extraordinarios fenómenos que se suceden en el cielo. Y cuántas<br />
veces, durante Mis actuales Apariciones, vosotros mismos habéis podido contemplar los grandes prodigios que se<br />
realizan en el sol. Como las yemas o brotes que despuntan en los árboles, os dicen que ha llegado la primavera, así<br />
también estos grandes signos que se realizan en vuestro tiempo os dicen que ya ha llegado a vosotros la gran<br />
tribulación, que os prepara para la nueva era, que os he prometido con el Triunfo de Mi Corazón Inmaculado en el<br />
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