15 de octubre - Colegio Nuestra Señora de la Misericordia

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_Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… _Como era en el Principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Todos repetimos la Antífona 1... GUÍA: ANTÍFONA 2.– Donde hay caridad y amor, Dios ahí está. (Lo rezamos en forma le tánica) _Donde están caridad y sabiduría, allí no hay temor ni ignorancia. _Donde reina la Paciencia y humildad, allí no hay ira ni turbación. _Donde reinan Pobreza y Alegría, allí no hay codicia ni avaricia. _Donde radican Paz y Recogimiento, no hay inquietud ni disipación. _Donde Temor de Dios guarda la casa, allí no entra el enemigo. _Donde están Misericordia y Discreción, no habrá superfluidad ni dureza de corazón. _Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… Todos repetimos la Antífona 2… GUÍA: ANTIFONA 3 ¡Oh qué dichosos los que aman y sirven al Señor! (Rezamos a dos coros) _Oh, cuán felices y benditos aquellos que aman al Señor y practican lo que Él nos dice en el Evangelio: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda el alma, y a tu prójimo como a ti mismo”. _Amemos, pues, a Dios y adorémosle con puro corazón y con mente pura. Eso mismo lo pide Él sobre toda otra cosa al decirnos: “Los verdaderos adoradores adoran al Padre en Espíritu y en verdad” _Por tanto, cuantos le adoran deben adorarle en “el Espíritu de la Verdad”. _De día y de noche, elevemos hacia Él alabanzas y oraciones, diciendo: “Padre nuestro que estás en el cielo…” _Pues, es preciso siempre orar, y nunca desfallecer. _Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… Todos repetimos la Antífona 3… ESCUCHEMOS LA SIGUIENTE LECTURA: (Lee el guía y los demás escuchamos) _Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… _Como era en el Principio, ahora y siempre por los siglos de los siglos. Todos repetimos la Antífona 1... GUÍA: ANTÍFONA 2.– Donde hay caridad y amor, Dios ahí está. (Lo rezamos en forma le tánica) _Donde están caridad y sabiduría, allí no hay temor ni ignorancia. _Donde reina la Paciencia y humildad, allí no hay ira ni turbación. _Donde reinan Pobreza y Alegría, allí no hay codicia ni avaricia. _Donde radican Paz y Recogimiento, no hay inquietud ni disipación. _Donde Temor de Dios guarda la casa, allí no entra el enemigo. _Donde están Misericordia y Discreción, no habrá superfluidad ni dureza de corazón. _Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… Todos repetimos la Antífona 2… GUÍA: ANTIFONA 3 ¡Oh qué dichosos los que aman y sirven al Señor! (Rezamos a dos coros) _Oh, cuán felices y benditos aquellos que aman al Señor y practican lo que Él nos dice en el Evangelio: “Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón y con toda el alma, y a tu prójimo como a ti mismo”. _Amemos, pues, a Dios y adorémosle con puro corazón y con mente pura. Eso mismo lo pide Él sobre toda otra cosa al decirnos: “Los verdaderos adoradores adoran al Padre en Espíritu y en verdad” _Por tanto, cuantos le adoran deben adorarle en “el Espíritu de la Verdad”. _De día y de noche, elevemos hacia Él alabanzas y oraciones, diciendo: “Padre nuestro que estás en el cielo…” _Pues, es preciso siempre orar, y nunca desfallecer. _Gloria al Padre , al Hijo, al Espíritu Santo… Todos repetimos la Antífona 3… ESCUCHEMOS LA SIGUIENTE LECTURA: (Lee el guía y los demás escuchamos)
ENCUENTRO CON LA VIDA (Tomada de las Florecillas de S. Francisco) Se cuenta que , en tiempos de San Francisco, la ciudad de Gubbio, cercana a Asís, se sentía asolada por un lobo que diezmaba los rebaños y atacaba a los pastores. Avisado el hermano Francisco, se internó en el bosque y se puso se puso a dialogar con el lobo, invitándolo a dejar de hacer daño a las criaturas de Dios. La gente de Gubbio se comprometió a alimentar al lobo, el cual se volvió un animal manso, que paseaba tranquilamente por la ciudad. Tiempo después, Francisco volvió a recibir un mensaje: ¡El lobo ha vuelto a su crueldad! Francisco buscó de nuevo al lobo en el bosque, y le preguntó: ¿Porqué , hermano lobo, te has vuelto nuevamente fiera salvaje? El lobo contestó: Hermano Francisco, tú me pediste que dejara mis raíces salvajes para vivir mansamente con los humanos; pero he visto que muchos de ellos son peores que yo. No usan colmillos, pero igualmente matan y destroza. Y no lo hacen solamente cuando tienen hambre, sino por el afán de prepotencia y el gusto de aplastar a su contrincante. ¡ Yo no quiero ser como ellos! Una lágrima surcó el rostro del hermano Francisco, que le respondió: Vuelve, hermano lobo, a la naturaleza que el Señor te ha dado. Yo seguiré predicando la conversión a los humanos. Preguntas: -¿Qué nos ha impresionado de este relato? -Más allá de los elementos legendarios, ¿qué encuentran de verdadero y actual? Reflexionemos… (Momento de silencio) Preces… Oremos 1. Por el Santo Padre Benedicto XVI, para que el Señor le conceda sabiduría y fortaleza para seguir trabajando por la unidad del Pueblo de Dios. Roguemos al Señor... 2. Por nuestras familias para que siempre reine la paz, la unidad y el respeto mutuo. Roguemos al Señor... 3. Por nosotros, para que el Señor nos de la capacidad de ser los futuros instrumentos para construir una sociedad más justa y fraterna. Roguemos al Señor… (Podemos invitar a que realicen sus peticiones espontáneas) Oración del Padre Nuestro… GUIA: Dios nuestro Padre sabe lo que nos hace falta , por ello con confianza filial le decimos Padre Nuestro que estas en los cielos... ENCUENTRO CON LA VIDA (Tomada de las Florecillas de S. Francisco) Se cuenta que , en tiempos de San Francisco, la ciudad de Gubbio, cercana a Asís, se sentía asolada por un lobo que diezmaba los rebaños y atacaba a los pastores. Avisado el hermano Francisco, se internó en el bosque y se puso se puso a dialogar con el lobo, invitándolo a dejar de hacer daño a las criaturas de Dios. La gente de Gubbio se comprometió a alimentar al lobo, el cual se volvió un animal manso, que paseaba tranquilamente por la ciudad. Tiempo después, Francisco volvió a recibir un mensaje: ¡El lobo ha vuelto a su crueldad! Francisco buscó de nuevo al lobo en el bosque, y le preguntó: ¿Porqué , hermano lobo, te has vuelto nuevamente fiera salvaje? El lobo contestó: Hermano Francisco, tú me pediste que dejara mis raíces salvajes para vivir mansamente con los humanos; pero he visto que muchos de ellos son peores que yo. No usan colmillos, pero igualmente matan y destroza. Y no lo hacen solamente cuando tienen hambre, sino por el afán de prepotencia y el gusto de aplastar a su contrincante. ¡ Yo no quiero ser como ellos! Una lágrima surcó el rostro del hermano Francisco, que le respondió: Vuelve, hermano lobo, a la naturaleza que el Señor te ha dado. Yo seguiré predicando la conversión a los humanos. Preguntas: -¿Qué nos ha impresionado de este relato? -Más allá de los elementos legendarios, ¿qué encuentran de verdadero y actual? Reflexionemos… (Momento de silencio) Preces… Oremos 1. Por el Santo Padre Benedicto XVI, para que el Señor le conceda sabiduría y fortaleza para seguir trabajando por la unidad del Pueblo de Dios. Roguemos al Señor... 2. Por nuestras familias para que siempre reine la paz, la unidad y el respeto mutuo. Roguemos al Señor... 3. Por nosotros, para que el Señor nos de la capacidad de ser los futuros instrumentos para construir una sociedad más justa y fraterna. Roguemos al Señor… (Podemos invitar a que realicen sus peticiones espontáneas) Oración del Padre Nuestro… GUIA: Dios nuestro Padre sabe lo que nos hace falta , por ello con confianza filial le decimos Padre Nuestro que estas en los cielos...
Page 1: GUÍA: DIOS MIO VEN EN MI AUXILIO A

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