EL MOSSAD - Voces del Periodista

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En el fútbol aparecen
fi guras como
Cuauhtémoc Blanco,
“Kikín” Fonseca,
Rafa Márquez,
vamos hasta la
goleadora Maribel
Domínguez, pero
todos son populares,
famosos, pero no
llegan a ídolos.
Ana Gabriela
Guevara, Lorena
Ochoa y párele
de contar, son
fi guras famosas
que la TV quiere
convertir en
“idolas”, pero no
se puede.
El Púas Olivares. Ana Gabriela Guevara.
Se acabaron
los Ídolos
en el deporte mexicano
Por José Manuel Flores M.
(Exclusivo para Voces del Periodista)
SERÁ LA IRREFRENABLE ambición de
los personajes de pantalón largo de ver
al deporte (profesional y de afi cionados) como
vehículo comercial, pero la triste realidad es
que ya no hay ídolos en el deporte nacional.
Y ese es un signo inequívoco de una
decadencia deportiva que nunca se había
vivido. Hace 15 años tuvimos la encomienda
profesional de escribir un libro con el título
de Deporte a la Mexicana. Justamente es la
historia del deporte mexicano que abarca el
nacimiento del deporte olímpico en 1948, que
es cuando se organizan nuestro deportistas
para formar esa delegación histórica, donde
justa y precisamente nace el primer gran ídolo
de la época moderna del deporte mexicano:
Joaquín Capilla.
El extraordinarios clavadista fue todo un
fenómeno de idolatría. Es, junto con Raúl
“Ratón” Macias, la muestra de esa época.
Capilla, por cierto, fue avasallado por esa
enorme ola de la fama. Cayó en esa pendiente
del alcoholismo y por un milagro de la misma
vida, pudo rehabilitarse y hasta la fecha, para
alegría de muchos que lo seguimos queriendo,
vive extraordinariamente. Pleno y con salud.
El “Ratoncito” fue otro fenómeno de
idolatría. Hasta la fecha, en pleno siglo XXI,
es idolatrado donde quiera que se pare por su
carisma especial, esa sencillez que sólo los
grandes tienen.
Bien, en el repaso de la historia, dos
décadas antes, tanto el fútbol como el
boxeo en su época
semiprofesional,
arrojan ídolos
verdaderos.
En el fútbol,
el primer gran
ídolo fue Rafael
Gutiérrez “Record”,
de aquel América
legendario. Y en el
boxeo el inolvidable
Rodolfo “Chango”
Casanova.
Por ahí se cuelan
los nombres de toreros:
Lorenzo Garza, el
hispano “Manolete”, pero ya ven, los mismos
cronistas taurinos insisten en califi car de “arte”
la fi esta de los toros y no de deporte. Bien, ese
proceso de contar con ídolos desde 1920, fue
interrumpido por el voraz comercialismo en la
década de los 90.
Aunque debemos asentar que ese mismo
sistema comercial, rabiosamente mercantil, se
comenzó a vivir en la década de los 80. Y aunque
teníamos exponentes de primerísimo nivel, con
un carisma de auténticos ídolos como lo tenían
Fernando Valenzuela, Hugo Sánchez y Julio
César Chávez, los intereses personales de las
dos empresas televisoras comerciales (Televisa
y TV Azteca), propiciaron ese desprecio a los
valores deportivos.
Como TV Azteca (léase José Ramón
Fernández) no obtuvo la concesión de las
trasmisiones de los partidos de Hugo Sánchez
con el Real Madrid en esa década de los 80
que fue la época gloriosa del Pentapichichi,
los ataques eran inmisericordes. Obvio, eso
repercutió en el ánimo popular.
Y lo mismo pasaba con Julio César Chávez,
que si bien es cierto era un producto más de la
promoción televisiva, su enorme calidad en el ring
los elevó a esa categoría especial de ídolo.
En el caso del beisbolista Fernando
Valenzuela el gran “Toro”, no hubo mucha
discusión. Pero el béisbol en México, sobre
todo en los últimos años, ya no tiene el mismo
arraigo de antaño. Pero como sea, de Fernando
podríamos decir qué fue el último verdadero y
gran ídolo mexicano del béisbol.
Muchos famosos,
nada más...
Y bueno, después de Hugo Sánchez, en las dos
últimas decadas( la 80 y la 90), ha estado vacía
en el fútbol. Ciertamente, ha habido muchos
jugadores famosos. En “los ochenta” destaca
Carlos Reinoso, que aún siendo chileno, alcanzó
niveles de fama extraordinario. Posiblemente para
los seguidores del América, fue su ídolo.
A ese nivel de enorme fama estuvo
también Evanivaldo Castro “Cabinho, goleador
sensacional de los Pumas. Y ni qué decir del
también extranjero, el argentino Miguel Marin.
De los mexicanos, ni duda cabe asentar
que Manuel Manzo estaba destinado a ser un
verdadero ídolo. Jugadorazo en la extensión
de la palabra. Y con “los atributos” del ídolo:
Borracho, mujeriego, parrandero y jugador.
Pero no le alcanzó el tiempo. Por fortuna se
rehabilitó y actualmente es un hombre de bien.
Y con Manuel, hubo más futbolistas mexicanos
famosos como Tomás Boy, Fernando Quirarte,
Manuel Negrete, Javier Agurire, Miguel España,
Enrique López Zarza. Luis Flores, “Abuelo” Cruz,
Pablo Larios, Wendy Mendizábal, Alfredo, el gran
“Capitán Furia” Tena, Cristóbal Ortega por citar a
los que más destacaron en esos años.
Actualmente, cuando el deporte ha tomado un
lugar preponderante en todos los medios, que el
fútbol ha crecido en popularidad a dimensiones
incalculables, hay muchos deportistas famosos,
pero ningún ídolo.
Hoy: famosos y más
famosos
Encabeza la lista el controvertido Cuauhtémoc
Blanco. Algunos se han atrevido a señalarlo como
ídolo, ya que su carisma y personalidad lo coloca
siempre en el ojo del huracán del escándalo.
V O C E S D E L P E R I O D I S T A No. 131 15 AL 28 DE FEBRERO DE 2006