Descarga - Tierra de Khushi

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COOPERANDO, ¿PARA QUIÉN? VALESH, SAVIA NUEVA EN EL PROGRAMA NIÑOS
DE LA CALLE EN INDIA.
En propias palabras de Ernesto Sirolli, miembros internacionales de una ONGD trabajando
en África, preguntaron a los africanos, tras un error en los resultados de un proyecto: “¿Por
qué no nos dijisteis que “esto” sucedía aquí?” A lo cual los líderes de la aldea africana contesta-
ron: “Porque nunca nos habéis preguntado”.
Qué sencillo es hablar de cooperación al desarrollo pero qué complicado es hacer lo que
a priori parece más fácil: callarse y escuchar a las personas. Las ONGD Internacionales todavía
llegamos a países en los cuales trabajamos, con grandes ideas en la cabeza, y mucho corazón, seguimos
creyendo que todo lo que enseñamos
es mejor que los conocimientos
que ellos mismos ya tienen, y que en la
mayoría de los casos son mejores ya que
conocen la realidad y las necesidades. En
muchas ocasiones nos conformamos con
poner los proyectos en manos de profesionales
locales, como manos ejecutoras de
las ideas que llegan de una realidad distinta
y de una cultura distinta, y que condicionan
el resultado final de los proyectos,
y lo más importante, la ayuda termina por
verse realmente sesgada.
Es difícil, en ocasiones, tener la seguridad, cuando se trabaja en países en vías de desarrollo
o subdesarrollados, de que los fondos y ayudas que se destinan llegan a los destinatarios, especialmente
cuando se colabora con ONG locales, ya que los índices de corrupción son altos. Pero ésta
no puede ser la excusa que nos lleve a mantener las ayudas de cooperación al desarrollo como un
apoyo que damos los países del Norte siempre bajo nuestro control y desde nuestra superioridad.
Es necesario que las relaciones en Cooperación al Desarrollo dejen de ser verticales para que pasen
a ser horizontales, es decir, se basen en la igualdad, somos socios que estamos trabajando por
un objetivo común.
El trabajo de las ONGD debe centrarse en realizar una búsqueda exhaustiva de una
ONG local transparente, a todos los niveles, que asegure que la proporción de los fondos
enviados se destinaran realmente a los destinatarios, y ejecución de proyectos. En ese momento,
es cuando los países donantes, nos debemos sentar, callar y escuchar más a las personas.
Siempre aportando ideas, siempre creciendo juntos, en un mismo camino, pero sin imponer. No
hagamos de la cooperación al desarrollo un nuevo modelo de colonialismo.
Os presentamos a Valesh, nuevo trabajador social en el
programa niños de la calle. Tras la marcha, por asuntos personales
del antiguo trabajador social: Hitesh, Valesh toma las riendas del
proyecto con un gran sentido de la responsabilidad, además de unas
ganas de aprender y enriquecer el programa que tan solo el primer mes
de trabajo ya se ha hecho visible. Recién licenciado y con un Máster en
Trabajo Social, es una persona cercana y sensible a la situación de la
población. Nuestra más sincera bienvenida al programa.