incide-mayo

PORNOGRAFÍA Y
HOMOSEXUALIDAD
¿POR QUÉ ESTE TEMA?
Lector, este primer número pretende invitarlo a reflexionar y debatir respecto a un tema que fue
elegido por su polémica y su presencia cotidiana. Parte de un cuestionamiento que prende entender
o, al menos, tratar de disipar diferentes características de la sexualidad como un elemento
de la conducta humana que puede ser regulado en diversos aspectos por la política, la moral y el
derecho. Hasta donde llega la comprensión de este consejo editorial, no se puede negar que el
aspecto sexual del ser humano se encuentra influido, motivado, limitado y constituido por perspectivas
internas, como aspectos psicológicos, y determinaciones colectivas, como las presentes
en normas de carácter moral. De lo anterior, resulta valido preguntarse: ¿dónde se encuentra el
límite entre lo interno y lo externo al momento de regular socialmente la sexualidad? ¿Cuál es
el fundamento para regular determinadas conductas, cuando éstas son una expresión de un aspecto
intimo de la persona?
Ahora bien, no podemos negar que determinados aspectos del tema aún son puestos en discusión
y existe variedad de argumentos y perspectivas. Es ésta la razón por la cual se determinó un
tema tan amplio. No buscamos limitar la opinión de la comunidad y es de nuestro interés captar
diferentes lectores que se sientan atraídos por divergentes formas de percibir un tópico. Ha sido
muy amable la respuesta de la comunidad ante la convocatoria para este primer número y no sólo
esperamos que sea del agrado de usted, sino que también lo invite a reflexionar y acordar o desacordar
con lo expuesto. Nuestro propósito es simple: queremos invitarlo a exponer su perspectiva
en un debate abierto.
Se ha pretendido incluir la cuestión homosexual como un aspecto especifico a tratar por su
trascendencia en los últimos años. Las personas con preferencias sexuales diversas son parte de
una sociedad cuyas instituciones políticas, morales y jurídicas han sido incapaces de responder
ante los cambios de paradigmas. Dichos cambios se han producido tan rápido que siguen quedando
abiertas muchas preguntas respecto a como tratar o resolver sus necesidades. Es claro para
nosotros que se trata de un grupo social que ha tenido la capacidad de organizarse y ha decidido
movilizarse para dar a conocer sus demandas por medio de canales institucionalizados; sin embargo,
aún existe un debate fresco que pretende determinar la validez de sus demandas. Una vez
expuesto lo anterior, resta únicamente desear que disfrute de la lectura que está por realizar, de la
misma forma en que nosotros disfrutamos cada etapa de su realización.
Hiram Cervantes
Consejo Editorial de InCIDE
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