Cúrcuma Cúrcuma longa - Fitoterapia.net

Cúrcuma Longa
Dpto. Técnico Grupo Castañeda
Marco A. Peralta – Natalia Sánchez
La curcumina muestra una acción antiinflamatoria en animales sobre modelos de inflamación
tanto aguda como crónica.
El extracto hidroalcohólico presenta una acción hepatoprotectora, in vivo e in vitro, frente a la la
acción citotóxica del tetracloruro de carbono.
Aunque a grandes dosis (100 mg/kg, oral e i.p., en ratas) la curcumina es ulcerogénica, diferentes
extractos de C. longa (acuoso e hidroalcohólico) mostraron, en modelos animales, una actividad
antiulcerosa (redujo la secreción) y citoprotectora (protección de la mucosa gastroduodenal
frente al jugo gástrico por medio de un aumento de la secreción de mucina).
La Curcuma longa se usa como colorante alimentario (azafrán de las indias) y es el principal
constituyente del curry.
Es un potente antioxidante (en algunos estudios se habla de que es hasta trescientas veces más
potente que la vitamina C), con capacidad para inhibir la producción de radicales libres y para
promover la producción de antioxidantes endógenos (glutatión).
Como antiinflamatorio natural, la cúrcuma es muy recomendable para aliviar el dolor ya que
tiene un buen poder antiinflamatorio. Las personas con artritis encuentran en la Cúrcuma un
buen aliado ya que calma el dolor y favorece la eliminación de toxinas. Además es ideal en la
lucha contra la formación de coágulos en la sangre ya que limita la agregación plaquetaria
mejorando así la circulación y previniendo la arterosclerosis.
Muy conveniente en inflamaciones de la boca (enjuagues con el polvo). En caso de encías muy
sensibles podemos cepillarlas con un poquito de polvo.
Favorece el buen funcionamiento del hígado, es una planta protectora hepática ya que lo protege
de toxinas, disminuye el colesterol, asegura una mayor producción y secreción de la bilis y puede
colaborar, en algunos casos, en la lucha contra la hepatitis. Acción hepatoprotectora y colerética.
La Cúrcuma puede ser un buen aliado en la lucha contra el cáncer. Las investigaciones sobre sus
propiedades anticancerosas se basan en que la curcumina inhibe la producción de citoquinas
(moléculas que desencadenan los procesos inflamatorios a nivel celular). Estas investigaciones
demuestran que una reacción inflamatoria se halla a menudo en el origen de la formación y el
crecimiento de un tumor canceroso.
También podría ayudarnos en el control del crecimiento de los tumores ya que, ayuda a controlar
los diferentes factores que favorecen su crecimiento.
Indicada para los tipos de cáncer siguientes:
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