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Los homínidos de
Atapuerca eran
capaces de cazar
grandes leones
Un grupo de investigadores halla restos
de un felino de hace 350.000 años.Le
dieron caza los homos de la Gran Dolina
R. A.
actualidad@20minutos.es / twitter: @20m
20 minutos
El homo heidelbergensis era el
rey de la selva hace 350.000
años. El león, la presa. Los enigmáticos
yacimientos de Atapuerca
han desvelado que los
leones de las cavernas formaban
parte de la dieta de la época.
Era un plato exclusivo, exótico
e inusual. El hallazgo de
marcas de corte en los huesos
del animal ha sido la clave del
descubrimiento. Estas señales
sugieren que los homínidos de
la Gran Dolina extrajeron las
vísceras contenidas en la caja
torácicadelanimalydemuestra
que éste fue cazado, ya que si
hubiese fallecido de muerte natural,
sus restos hubiesen sido
consumidos por otros carnívoros.
El ejemplar de esta especie
extinta de felino medía más de
dos metros y pesaba alrededor
de trescientos kilos. Aunque los
hombres de entonces también
alcanzaban1,80metrosytenían
una gran potencia física, según
el investigador de Atapuerca
Bermúdez de Castro.
El hallazgo demuestra que
los homínidos eran grupos organizados
con conexión entre
ellos y desmiente las teorías
científicasquelespresuponían
unas capacidades mucho menores.
«Ser capaz de adoptar
una estrategia y enfrentarse al
rey del ecosistema para cazarlo
significa que elhomo heidelbergensis
tenía una organización
y una estructura compleja»,
explicó ayer el científico
Jordi Rosell.
Un equipo de investigadores en un yacimiento de Atapuerca. ARCHIVO
Hallazgo de la Edad del Bronce
Los trabajos de verano en los yacimientos burgaleses de Atapuerca
–que comenzaron el pasado día 15 de junio– han sacado a la
luz algunos restos fósiles. En concreto, se trata del enterramiento
de un individuo en posición fetal que pertenecería probablemente
a la Edad del Bronce antiguo, y que ha sido hallado
en la Cueva del Mirador, orientado a la Sierra de la Demanda.
ACTUALIDAD 7
VIERNES 25 DE JUNIO DE 2010
CAMPEÓN DEL CANTO
LOS BLOGS DE
20minutos.es
César-Javier
Palacios
La crónica
verde
Se llama Plusma,esextremeñoyun
incansable cantante, pero sólo le
conocen tres personas en el mundo.
Plusma, el ruiseñor, llegó al jardín de la
familia Langlois el 22 de marzo. Dave, el
padre, y Sammy, el hijo, dos apasionados
de la ornitología, lo recibieron encantados
en su casa deVillanueva de laVera. El
pájaro apareció cantando y en estos tres
meses no ha parado de pregonar la
excelencia de su territorio y la no menor
fortaleza de una garganta prodigiosa,
prueba evidente de su altísima calidad
como reproductor. Igual de día que de
noche, incansable, se le oye a todas horas pero nunca se le ve,
hábilmente escondido entre los arbustos donde encuentra
cobijo y comida. Es lo normal, se dirán algunos. Quizá sí pero
¿se han detenido a pensarlo? Plusma está la cuarta parte del
año cantando.Y tanto antes como después se pega unos
increíbles viajes migratorios entre África, donde pasa los
inviernos, y la cacereña Comarca de laVera, donde pasa los
veranos. Miles de kilómetros de ida y vuelta hechos por la
noche, orientándose sólo por las estrellas, y todo para cantar
como un loco en el jardín de los Langlois. Como comenta
con sorna británica Dave: «Deberían condecorarlo, nombrar
una calle en su honor, concederle una beca para su viaje a
África». Pero en realidad no lo necesita. Tan sólo pide respeto.
Que no le arranquemos sus arbustos en aclareos forestales
tardíos, no fumiguemos la zona. A cambio se zampará
cientos de miles de molestos mosquitos.Y encima seguirá
regalándonos su canto, sabiendo que no es el único campeón.
Que como Plusma hay multitud de locos cantarines
desgañitándose estos días para impresionar a sus hembras.