199 años de la muerte de Francisco Javier Mina Larrea

Estados Unidos, ahí reclutaron soldados, buscaron apoyo de comerciantes
que querían, claro, para abrir el comercio con Nueva España, pues que
cayera el monopolio español, que se ganara la independencia. También
buscó el apoyo de eso que llamamos la opinión pública, esto es la prensa, y
después de pasar por Estados Unidos desembarcó en Soto La Marina, hoy
Tamaulipas, a mediados de abril de 1817, más o menos con 300 hombres.
Ahí inmediatamente lanzó una proclama diciendo que la causa de los
americanos era justa y pedía a los mexicanos que le permitieran luchas con
ellos.
Después de eso inició su campaña con grupos prácticamente guerrilleros
pero de ahí pasó, de Tamaulipas a San Luis Potosí, luego se internó en el
Bajío, llegó a tomar Guanajuato por breves horas o pocos días y ya tenía mil
400 hombres, lo cual nosotros pensamos que había crecido mucho, había
tenido capacidad de convocatoria, de reclutamiento, pues había iniciado su
lucha con 300 personas y luego en el Rancho del Venadito allá en
Guanajuato fue vencido a finales de octubre de ese mismo año de 1817, o
sea realmente estuvo en operación unos seis meses, la campaña de Mina no
pasó de ahí, de abril a octubre de 1817 fue juzgado, lo llevaron a Silao, el
virrey Apodaca lo sentenció a muerte y le dieron como gran mérito, como
gran premio a este virrey Apodaca el título nobiliario de Conde del Venadito
porque en ese paraje del Venadito habían vencido a Mina.
El 11 de noviembre, que es lo que se conmemoró el martes pasado, pues fue
fusilado de espaldas por considerársele traidor a su patria, por luchas contra
su patria.
Bueno, pues habrá sido considerado traidor a España pero aquí en México lo
apreciamos mucho porque vino a dar su vida por la libertad.
Todo esto que conté lo hizo en breves 28 años de tórrida y de espectacular
existencia. Esta fue la vida de Javier Mina.
El próximo jueves hablaremos de otro personaje, de otro acontecimiento
importante de nuestra historia. Hasta entonces.