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de abril del 2014. En este tema, debe destacarse que en los primeros tres
meses del 2015, la tasa de desempleo se ubicó en 4.2%, por debajo de
4.8% observado en el mismo periodo del año pasado.
Otros datos que hablan de un desempeño bastante aceptable es la menor
tasa de inflación para los primeros cuatro meses del año, ubicada entre 3.0
y 3.14%, casi un punto menos que el 4.08% del mismo periodo del 2014.
También están los datos alentadores como el crecimiento de las ventas de
las tiendas de autoservicio, de casi 6% en comparación con el año pasado.
Todo esto ocurre en un contexto de volatilidad en el contexto internacional.
Por un lado, la economía de Estados Unidos creció durante este primer
trimestre a una tasa de apenas 0.2%, muy alejada de las estimaciones
hechas a finales del año pasado. En Latinoamérica, por ejemplo, el PIB de
Brasil sufrió una caída de 0.8%, con lo que al cierre del 2015 se prevé un
retroceso de 1.2%, su segunda caída más importante desde 1990. En
Argentina, donde el gobierno ha perdido mucha credibilidad en torno al
manejo de la economía, el ministro de Economía batalla para convencer a
los analistas que la inflación para el 2015 en ese país se ubicará en máximo
20%, cuando las estimaciones privadas la ubican en 25 por ciento.
Es preciso que quienes critican duramente a la actual administración sean
objetivos y reconozcan que México está teniendo un mejor desempeño que
otras economías. En lo que no podemos caer es en la irreflexión de que
todo va mal y darle la razón a ese mesías que recorre el país sin rendirle
cuentas a nadie y que no hay duda que llevaría a nuestro país a un
escenario de inestabilidad como el que hoy vive Argentina, por no decir
Venezuela.