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La Declaración Universal de Derechos Humanos (1948) afirma que “la familia es el elem<strong>en</strong>to natural<br />
y fundam<strong>en</strong>tal de la sociedad y ti<strong>en</strong>e derecho a la protección de la sociedad y del <strong>Es</strong>tado”. Por lo<br />
tanto la familia es un elem<strong>en</strong>to primordial <strong>en</strong> la vida de los seres humanos.<br />
En la pres<strong>en</strong>te revista se analizara temas que son importantes para cada miembro de la familia y<br />
que deb<strong>en</strong> conocerse <strong>en</strong> su pl<strong>en</strong>itud para mant<strong>en</strong>er una bu<strong>en</strong>a relación tanto familiar como con uno<br />
mismo; Si la familia está definida como el núcleo fundam<strong>en</strong>tal de la sociedad, vale <strong>en</strong>tonces<br />
preguntarnos directam<strong>en</strong>te qué es familia. Al ad<strong>en</strong>trarnos <strong>en</strong> estas definiciones, no solo nos<br />
<strong>en</strong>contramos con infinitas formas de agruparse, compartir y crear, sino también con la necesidad<br />
profunda de pert<strong>en</strong>ecer: estar con otros, id<strong>en</strong>tificarnos con ellos, y desde ahí ejercer nuestro rol<br />
social. La idea tradicional de familia disuelve sus límites para desc<strong>en</strong>trar ese núcleo social, moverlo<br />
a conformaciones diversas, organizaciones comprometidas más allá de lo netam<strong>en</strong>te biológico.<br />
La familia sigue si<strong>en</strong>do puntal <strong>en</strong> la formación de niños y jóv<strong>en</strong>es y merece la máxima at<strong>en</strong>ción de<br />
parte de qui<strong>en</strong>es al formarla se responsabilizaron de hacer de la vida <strong>en</strong> común un medio para el<br />
crecimi<strong>en</strong>to humano y, por lo tanto, también social y cívico de sus miembros.<br />
En las familias de hoy, escuchamos “eso de quedarme <strong>en</strong> casa cuidando hijos, y marido es<br />
anticuado, y del siglo antepasado”.<br />
La realidad es que los hijos no son precoces, sino dep<strong>en</strong>di<strong>en</strong>tes de los cuidados de los padres. Lo<br />
justo es brindarles cuidados, protección, abrigo, instrucción, educación, formación, pert<strong>en</strong><strong>en</strong>cia e<br />
id<strong>en</strong>tidad.<br />
La at<strong>en</strong>ción y respeto <strong>en</strong>tre los padres, permite conservar la unión de éstos, lo que<br />
consecu<strong>en</strong>tem<strong>en</strong>te ofrece un nicho donde los hijos puedan desarrollarse positivam<strong>en</strong>te.<br />
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