MANUAL DEL ANIMADOR

"pequeños misioneros" distribuidos en parroquias, escuelas y
movimientos de los cinco continentes.
Desde un principio, la Obra tuvo el
apoyo y la aprobación del Papa. En
1922 Pío XI la elevó a la categoría
de Pontificia y en 1950 Pío XII
instituyó el Domingo Mundial de la
Infancia Misionera.
Juan Pablo II, tenía una especial
predilección por los niños de la
Infancia Misionera. En un encuentro
con comunidades de representantes
de diferentes países, les dirigió
estas significativas palabras:
"Es una alegría para el Papa saber que colaboráis con
él en esta Obra Misionera que Jesús le ha encomendado para
llevar el Evangelio a todo el mundo. Sí, sois mis
colaboradores, mis pequeños grandes colaboradores en la
difusión del Evangelio".
"Colaboráis conmigo porque os unís a las intenciones
misionales del Papa, ante todo con la oración, después con el
buen comportamiento en vuestras casas y con vuestros
compañeros y también con la ayuda económica para las
misiones, que son fruto de privaciones y sacrificios. Donde
vosotros no podéis llegar con vuestra palabra, llegad con
vuestra oración y vuestros sacrificios".
En la Encíclica "La Misión del Redentor", se reconoce
la importancia de las Obras Misionales Pontificias, para
promover el espíritu misionero dentro del pueblo de Dios y
citando el Decreto Ad Gentes, reafirma: "Estas Obras por ser
del Papa y del Colegio Episcopal, incluso en el ámbito de las
iglesias particulares, deben ocupar con todo derecho el
primer lugar, pues son medios para difundir entre los
católicos desde la infancia, el servicio verdaderamente
universal y misionero para estimular la recogida eficaz de
subsidios a favor de todas las misiones, según las
necesidades de cada una" 4 .
Manual de Infancia y Adolescencia Misionera ______7