You also want an ePaper? Increase the reach of your titles
YUMPU automatically turns print PDFs into web optimized ePapers that Google loves.
EL REFLEJO DE<br />
LA NOCHE<br />
Teniendo conocimiento que en<br />
el barrio La Paz, Zipaquirá<br />
se hallan varios prostíbulos<br />
decidimos ir a realizar este<br />
trabajo, un tra bajo en el cual se<br />
quiere exponer y evidenciar una<br />
parte de la prostitución, de sus<br />
trabajadoras quienes en la mayoría<br />
de los casos son discriminadas,<br />
señaladas y hasta maltratadas.<br />
Iniciando el trayecto que nos dirigiría<br />
al barrio la Paz se comienza a hacer<br />
presente el cambio de ambiente: el<br />
aire que se empieza a respirar se torna<br />
pesado, en la mayoría de las casas hay<br />
talleres de los cuales se expide un olor<br />
a combustible y aceite quemado, más<br />
adelante se encuentra una bomba<br />
de gasolina la cual sirve como punto<br />
de referencia de muchos viajeros.<br />
Estando en esta bomba de gasolina<br />
decidimos preguntar a diferentes<br />
personas en donde podíamos<br />
encontrar un prostíbulo; inicialmente<br />
una compañera fue la que preguntó<br />
pero después de ver que nadie le daba<br />
información (por pena o porque en<br />
verdad no sabían) decidí preguntarle<br />
a un señor quien no titubeó cuando<br />
me respondió que conocía dos<br />
prostíbulos, dándome las indicaciones<br />
exactas de éstos. Nos dirigimos a<br />
uno de ellos llamado “Damas de la<br />
Realeza” en este pudimos hablar con<br />
el administrador quien después de<br />
haberle comentado qué era lo que<br />
queríamos accedió a colaborarnos<br />
y nos dio una cita para el otro día.<br />
Al día siguiente cuando llegamos a<br />
Damas de la Realeza para cumplir la<br />
cita , observamos a un grupo de 6<br />
hombres quienes se encontraban en<br />
una esquina del prostíbulo fumando<br />
junto a una camioneta azul cuyos<br />
vidrios eran oscuros, enseguida<br />
pudimos<br />
reconocer al<br />
administrador<br />
quien estaba de<br />
espaldas con su<br />
pantalón camuflado y<br />
una chaqueta gruesa con<br />
la que se identificaba fácilmente,<br />
al acercarnos poco a poco a donde<br />
estaba empecé a sentir un olor a<br />
marihuana que se intensificaba con<br />
cada paso que daba; lo salude como<br />
a un amigo más refiriéndome a él<br />
con un alias que nos había dado y<br />
por el cual era conocido “minutos”<br />
él respondió el saludo, cruzamos un<br />
par de palabras y enseguida le dijo<br />
a una persona -quien a mi parecer<br />
era su mano derecha- que nos<br />
acompañara dentro del prostíbulo.<br />
Al entrar esperaban dos muchachos<br />
encargados de la seguridad del sitio,<br />
iban a requisarme pero la persona con<br />
la que íbamos a entrar les dijo que nos<br />
dejara pasar, una vez adentro pude<br />
escuchar cómo los dos muchachos de<br />
la seguridad junto con otro que estaba<br />
“Empecé<br />
a sentir<br />
un olor a<br />
marihuana<br />
que se<br />
intensificaba<br />
con cada paso<br />
que daba”<br />
<strong>REVISTA</strong>: CORAZÓN AL DESNUDO<br />
3